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UNIVERSIDAD DE GUAYAQUIL

FACULTAD PILOTP DE ODONTOLOGIA

MATERIA:

ENDODONCIA I

NOMBRE:

MARIA JOSE ALVAREZ CRIOLLO

CURSO:

7/7

DOCENTE:

DR. MARÍA JACQUELINE CEDEÑO DELGADO

CICLO I

2022-2023
INTRODUCCIÓN

Es importante en una preparación biomecánica del conducto radicular el correcto


empleo de los instrumentos manuales, como las limas que pueden ser tipo K, o tipo
Hedstrom y los ensanchadores.

Los ensanchadores se emplean para agrandar los conductos radiculares mediante


movimientos de corte circular. Ejercen su acción cuando se les inserta dentro del
conducto, se les hace describir un cuarto de vuelta en sentido horario para trabar sus
hojas cortantes en la dentina, y se les retira. El corte se hace durante la retracción y el
proceso se repite, penetrando cada vez más profundamente en el conducto. Al llegar a la
longitud de trabajo se utiliza el instrumento del tamaño que sigue y así sucesivamente.
Las limas pueden usarse como ensanchador, pero estos no funcionan bien como limas;
sus hojas están demasiado separadas para raspar.

Las limas tipo k se accionan en forma manual, con espirales apretadas, dispuestas de tal
manera que el corte ocurre tanto al tirar de ellas como al empujarlas. Se usan para
agrandar los conductos radiculares por acción cortante o por acción abrasiva. Las limas
tipo k de diámetro pequeño precurvadas también se utilizan para explorar los conductos,
para colocar cemento sellador (girando el instrumento en sentido contrario a las agujas
del reloj) y en algunas técnicas de obturación. La sensación táctil de un instrumento
endodóntico trabado en las paredes del conducto puede obtenerse pellizcando un dedo
índice entre el pulgar el dedo medio de la mano opuesta y haciendo girar entonces el
dedo extendido. Su sección transversal es típicamente cuadrada. Las limas y
ensanchadores no se fracturan a menos que tengan un defecto de fabricación o si el
instrumento se deforme o se fuerce más allá de su límite, esto es, que se rote sobre su
eje una vez enganchados sus filos en la dentina.

Las limas tipo Hedstrom se fabrican por desgaste mecánico de las estrías de la lima en
el vástago metálico del extremo cortante del instrumento para formar una serie de conos
superpuestos de tamaño sucesivamente mayor desde la punta hacia el mango. Las limas
tipo Hedstrom son instrumentos metálicos cónico y con punta, accionados a mano o
mecánicamente con bordes cortantes en forma de espiral dispuestos de manera tal que el
corte ocurre principalmente al tirar del instrumento. Se utilizan para agrandar los
conductos radiculares. Sea por corte o por abrasión.
TECNICA CONVENCIONAL
Utilizada desde hace muchos años, esta técnica (conocida también como clásica) debe
quedar reservada tan sólo para conductos rectos y se la ejecuta con el uso secuencial de
escariadores y de limas Hedströem, y como opción limas K. (Ilson Soares-Fernando
Goldberg)
Los escariadores son instrumentos confeccionados a partir de un vástago triangular lo
que les confiere exelente capacidad de corte cuando son girados en el interior del
conducto, Permiten conservar la forma circular del conducto, en especial en el tercio
apical, lo que facilita y mejora la calidad de la obturación. Esa dinámica, que las obliga
a girar yuxtapuestas a las paredes dentinarias, favorece su empleo en conductos rectos.
En conductos con curvas leves, lo adecuado es hacer el movimiento oscilatorio.
Las limas Hedströem se caracterizan por presentar la lámina de corte en la base de los
conos que forman su parte activa y por ello sólo son eficaces en los movimientos de
limado.
Cuando estos dos instrumentos se usan de manera alternada, es prudente que la lima
Hedströem utilizada sea siempre un número menor que el escariador que la preceda. De
esa manera, trabaja con relativa holgura dentro del conducto y con pocas posibilidades
de fracturarse o compactar detritos.
La gran capacidad de corte de estos dos instrumentos favorece la obtención de
resultados óptimos en esta etapa de la terapéutica endodóntica. Debemos recordar que
entre instrumento e instrumento se debe irrigar ya sea con suero fisiológico o
Hipoclorito de Sodio.
En la conformación de conductos estrechos y curvos los instrumentos preferidos son las
limas K
Para mejor comprensión y para facilitar la descripción de los procedimientos,
tomaremos como ejemplo el tratamiento de un incisivo central superior de 24 mm de
longitud. Los instrumentos se usan en el orden sugerido en el Cuadro 7.2 y en la Figura
9.16.
• Primer instrumento
Con la cámara pulpar inundada de solución irrigadora y con el mango del escariador #
25 entre los dedos pulgar e índice, lleve el instrumento al diente de modo que su
extremo quede colocado a la entrada del conducto radicular. Lentamente, con
movimientos giratorios en sentido horario, se introduce el escariador en el conducto.

Una vez en el interior del


conducto, el escariador se gira
entre media y una vuelta. Cuando el
tope alcanza el borde de referencia,
el instrumento se tracciona y se retira,
girándolo en sentido horario. Ese
movimiento reducirá la cantidad
de detritos dejada por el escariador en
el interior del conducto.
El giro del instrumento sobre
su eje longitudinal y ajustado a las
paredes del conducto caracteriza el movimiento de ensanche o rotación y es idéntico
para todos los instrumentos que puedan utilizarse en esta forma.
Una vez retirado y antes de reintroducirlo en el conducto el escariador, se limpia el
instrumento con una compresa de gasa estéril, humedecida con la solución irrigadora en
uso..
El escariador # 25 se usará en forma repetida hasta que se constate que gira con
facilidad en el interior del conducto, lo que indica que el instrumento ya no ejerce su
acción.
Conclusión del uso del primer instrumento
Una vez concluido el uso del escariador # 25, (primer instrumento utilizado ), efectúe la
irrigación/aspiración del conducto. Este procedimiento, además de mojar las paredes
dentinarias y de favorecer la acción de los instrumentos, evitará que las virutas de
dentina desprendidas vayan a compactarse sobre el muñón apical o impulsarse hacia la
región periapical a medida que la conformación avanza y el calibre de los instrumentos
aumenta.
Después de la irrigación y una vez aspirada la solución con los residuos, la cavidad
pulpar debe llenarse de nuevo con el líquido irrigador. Eso permitirá que los
instrumentos trabajen –como es aconsejable– en un conducto inundado y que la acción
antibacteriana del irrigante se mantenga durante todo el acto operatorio.

Bibliografía
Ilson Soares-Fernando Goldberg. (s.f.). Endodoncia Tecnicas y Fundamentos. EDITORIAL
MEDICA PANAMERICANA. Obtenido de
https://www.academia.edu/8226348/Soares_and_Goldberg_ENDODONCIA_TECNICA_
Y_FUNDAMENTOS

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