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1.

 Elon Musk.
219 mil millones de dólares
El empresario cree que la mayor parte de su dinero se gastará en la construcción
de una base en Marte, y lo que le despertaba por las mañanas es el deseo de
resolver problemas técnicos. A Musk no oculta el hecho de que se inspiró en los
libros y las películas que consumía de niño en Sudáfrica. En un momento estuvo
tan endeudado que tuvo que pedir dinero prestado a amigos solo para pagar sus
gastos de subsistencia, y juzgo el éxito en función de los problemas importantes
que ha resuelto, no de cuánto dinero ha ganado. Y actualmente es un
programador con nacionalidad canadiense creador de la empresa
automovilística Tesla, fundador de la compañía aeroespaclal Space X, co-
fundador de PayPal, Hyperloop, SolarCity, The Boring Company, Neuralink y
OpenAI y ahora accionista de Twitter. Tiene una fortuna de 219 mil millones de
dólares (199,66 mil millones de euros).

2. Jeff Bezos.
171 mil millones de dólares
Tuvo que aprovechar su propia imaginación interior sobre lo que es posible Siguió
inventando y no se desesperó cuando al principio su idea parecía loca. Recuerdo
deambular. Dejo que la curiosidad sea su brújula. Gran parte de lo que crea el se
basa en escuchar a los clientes. Actualmente es un empresario y magnate
estadounidense fundador de Amazon y accionista mayoritario de Amazon.com, el
periódico The Washington Post y la compañía aeroespacial Blue Origin. Su fortuna
es de 171 mil millones de dólares (155,90 mil millones de euros).

3. Bernard Arnault.
158 mil millones de dólares
En los negocios aprendió a ser paciente, para él, el dinero es solo una
consecuencia porque si hacia bien su trabajo, la rentabilidad vendrá, a él No le
gustaba los fracasos, porque sólo el 15% de su negocio provenía de lo nuevo. El
crecimiento para él, no es sólo una función del precio alto sino que los clientes
deben querer el producto y Debe proyectar la imagen de la marca en sí.
Actualmente Es un hombre de negocios francés y el dueño de LVMH, una
empresa que opera con marcas de lujo como Louis Vuitton, Moët, Christian Dior,
Givenchy, Marc Jacobs, Kenzo, Sephora, Fendi y Céline. Su fortuna es de 158 mil
millones de dólares (144,05 mil millones de euros).

4. Bill Gates.
129 mil millones de dólares
Era un chaval sin un rumbo claro, fundaría una de las empresas tecnológicas más
importantes de la historia. Gates tenía un poco privilegiado, un gran amigo y
matemático a su lado, su mayor obsesión en los primeros años de Microsoft era
tener suficientes millones en el banco no para fundar una empresa aeroespacial.
La presión era enorme porque si no estaba todo bien, si había un único fallo, no
funcionaría y perderían su gran oportunidad. Pero funcionó todo a la primera. Y
ahí nació Microsoft. Fue la primera vez que alguien había instalado un programa
comercial en un ordenador personal. Apenas dormían, comían comida basura y
trabajaban horas y horas. No creía en los fines de semana, no creía en las
vacaciones. Gates reconoce que su madre fue la figura clave en su vida, porque
su madre quería que triunfaran. Quería que su familia fuera una fuerza a tener en
cuenta”. Esto no significa que la relación con ella fuera fácil. Pese a ello, sus
padres fueron una influencia clave para que Gates empezara a implicarse con
otras personas y fuera menos individualista. Actualmente es un empresario
informático y filántropo que fundó la empresa Microsoft. Tiene una fortuna de 129
mil millones de dólares (117,61 mil millones de euros).
5. Warren Buffet.
118 mil millones de dólares
Desde una edad temprana mostró un gran interés por la economía y las
inversiones. Tales han sido los éxitos alcanzados por Warren Buffett en el mundo
de las inversiones que es considerado el mejor inversionista de todos los tiempos.
Debido a sus acertados consejos y orientaciones sobre inversiones, se ganó el
sobrenombre de El oráculo de Omaha. El leía libros de inversión con tan solo 10
años al tiempo que seguía con interés la bolsa. No mucho después, con tan solo
11 años llevó a cabo su primera inversión, todo comenzó cuando Warren Buffett
compró acciones de la empresa Cities Service Company valoradas en 38 dólares
la acción. Inicialmente, la cotización se desplomó hasta los 27 dólares y Warren
terminó vendiendo las acciones por 40 dólares. Sin embargo, si hubiera esperado
un poco más, podría haberlas vendido a 200 dólares la acción. Gracias a esta
experiencia aprendió a invertir de forma racional, tratando de mantener al margen
las emociones y siendo lo suficientemente paciente como para encontrar el
momento apropiado para vender. Actualmente es un inversor estadounidense,
considerado uno de los grandes inversores del mundo. Además es el mayor
accionista, director ejecutivo y presidente de Berkshire Hathaway. Su fortuna es de
118 mil millones de dólares (107,58 mil millones de euros).

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