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La calidad del café de Guatemala es conocida a nivel internacional, muchas veces con un prestigio
y premios ganados por cada uno de sus productores. Sin embargo, el café de Guatemala es un
producto de contrastes históricos. Se ha convertido por siglos en la dinámica económica y política
desde la independencia de España hasta nuestros días. Pero, para muchos críticos no ha respondido
a las expectativas y necesidades mercadológicas, sociales y laborales, considerando el apoyo que
ha recibido del Estado. Para sobrevivir como industria debe atender los desafíos empresariales y
sociales que la desglobalización geopolítica plantea para promover la productividad y
competitividad socialmente responsable. Qué opciones estratégicas de administración de
mercadotecnia hay que formular para agregarle valor territorial al café y no depender únicamente
de los “commodities”. Cómo diversificar la cartera de otros productos con plantaciones nativas
nuevas de Guatemala. Para emprender en mercados a nivel local como internacional con su propia
marca de denominación de origen.
CONCURSO INTERNACIONAL
Por octava ocasión se celebró el concurso de catación que busca los mejores cafés entre más de
70 cooperativas pertenecientes a Fedecocagua. Estos en colaboración con Tully’s premian a los
diez mejores granos en una catación a ciegas a donde llega una selección final de 26. El podio de
honor de la competencia lo completaron dos cooperativas de Huehuetenango, Hoja Blanca, que
ocupó el segundo lugar y Agua Dulce en el tercero. Ambos acompañaron a Unión Duraznito. Los
premios ascienden de US$5 mil para el primer clasificado, US$3 mil para el segundo y el tercero,
US$2 mil para los clasificados del cuarto al sexto y US$1 mil del séptimo al décimo.
Carolina Escobar Sarti, Prensa Libre, 7 de noviembre de 2013, en su artículo ALEPH. Indica que
“El café por ley”. Queda la pregunta si la ley está al servicio del ser humano o el ser humano a
merced de la ley. Guatemala es un país de tradición cafetalera, y si no, que se levante de la tumba
Justo Rufino Barrios para confirmarlo. Tengo en casa unas fotografías que datan de
aproximadamente un siglo atrás y que ponen, literalmente en blanco y negro, las condiciones en
que se producía esta actividad agrícola. Colas interminables en los días de pago; patios de café
vigilados por capataces de cara apretada; rostros inexpresivos de niños y mujeres cortando el
grano; y hasta una del ferrocarril de las Verapaces donde se transportaba el café en sacos de brin.
Alrededor del café se tejió una arquitectura jurídico-agraria muy perversa que sostuvo, por
décadas, la opresión, la esclavitud y el despojo de muchos en beneficio de pocos. El café es un
producto protegido por siglos, principalmente para los finqueros o grandes productores. Es uno de
los principales productos de exportación tradicional. El sistema bancario de Guatemala apareció
amparado por la actividad económica del café. BANCAFE en el siglo anterior fue el último banco
nacional respaldado por cafetaleros que fracasó por diversas situaciones. Actualmente algunos de
sus directivos son juzgados por la justicia guatemalteca. Lamentablemente, los pequeños
productores de café siempre han sido excluidos, quienes han manifestado su inconformidad con
ANACAFE, según lo publicado en algunos medios escritos de mayor circulación. Para no
depender solo del café que emprendimientos de valor territorial de categoría mundial hay que
emprender. Considerando el enfoque holístico y sistémico de la mercadotecnia para la
transformación.
PATRIA DE CRIOLLOS
Marielos Monzón, Prensa Libre, 20 de agosto de 2013, en su artículo indica que: “No es necesario
que haya feudos con castillos feudales para que haya feudalismo”. “El Comité de Desarrollo
Campesino (Codeca) publicó recientemente un informe sobre la situación laboral de las y los
trabajadores agrícolas en Guatemala, una investigación que recogió información de campo en 6098
fincas agrícolas –en 14 de los 22 departamentos del país-, mediante encuestas, testimonios de vida
y grupos de estudio. Se entrevistó a jornaleros y jornaleras, dirigentes de organizaciones sindicales,
autoridades del Ministerio de Trabajo y Previsión Social y representantes de organizaciones
indígenas y campesinas, Los resultados se confrontaron y analizaron a la luz de la legislación
interna y de los convenios internacionales ratificados por Guatemala, relativos a los derechos
laborales.