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Definiciones Tema 14

Nacionalcatolicismo: Se trata de una doctrina religioso políltica que se instauró en la España


franquista fruto de la alianza, u apoyo, de parte de la jerarquía eclesiástica al bando nacional.
La Iglesia durante el régimen tuvo una enorme influencia que inundó todos los ámbitos de la
ciudadana, públicos y privados, lo que hizo que llegara a denominar nacionalcatolicismo.
Prácticamente, el bautismo y la comunión eran elementos básicos para ser ciudadano. Y no se
greconocían los matrimonios civiles. Toda la vida oficial era católica. Los clérigos,
especialmente, los párrocos tenían asignación del Estado. Ello tendrá a la larga determinadas
consecuencias negativas para la Iglesia porque se creará una parte de los feligreses que sólo
creerán como estatus social, no como creyentes

Nacionalsindicalismo: fue la doctrina ideológica política y social de la Falange española,


fundada por José Antonio Primo de Rivera, basada en el totalitarismo fascista, la tradición
nacional española, el sindicalismo vertical y el partido único, que integraba a empresarios y
trabajadores, limitaba aspectos protesta social (derecho huelga y negociación colectiva), pero
también algunas actuaciones de los empresarios (no se podía despedir y regulaba los salarios,
horas de trabajo,....). Era una forma controlar los ámbitos económicos de la sociedad.

Movimiento Nacional: Se llama movimiento nacional al conjunto de fuerzas que formaron


parte de la sublevación arrancada con el golpe de estado del 18 de julio de 1936. Se identificó
con el partido único: FET y de las Jons, creado para mantener la cohesión y unidad durante el
régimen franquista y fue la única vía de participación en política durante la dictadura. Durante
la misma ostentó la jefatura del partido Franco, y artículo un sistema de promoción social a
través del mismo. Durante la guerra civil se entendió como movimiento nacional al bando
sublevado que recuperar los valores de la España tradicional. Contó con el respaldo de la
jerarquía eclesiástica, clases burguesas de la sociedad,...,

Radio Pirenaica o Radio España Independiente: fue una emisora clandestina fundada por el
PCE que transmitió durante la dictadura propaganda contra el régimen desde la URSS y desde
Rumania. Durante todo el régimen, la oposición al mismo, que se encontraba en el exilio trató
de deslegitimarlo desde el exterior en los organismos internacionales buscando el amparo de
las potencias occidentales. Se encontró con dos problemas principalmente: su desarticulación
cada uno iba por su cuenta. Don Juan de Borbón y algunos monárquicos trataron de articular
una cierta coordinación, y durante los primeros años consiguió un cierto aislamiento, pero la
guerra fría lo cambió todo con la necesidad de EEUU de sumar España para el dique de
contención de los países soviéticos, lo que permitió la legitimación del régimen. La oposición a
partir de ese momento trató de denunciar algunas de las atrocidades del régimen, y articular
una lucha en interior. La primera fase de la lucha interior fueron los maquis guerrilleros
republicanos que se fueron al monte tras la guerra civil y preparaban asaltos a la guardia civil y
fuerzas de seguridad.

Autarquía: la autarquía económica de un estado es la idea de que un país debería producir


dentro de sus fronteras todo lo necesario para el desarrollo interno, y de este modo no
precisaría intercambio comercial con otros países y dejaría de depender de las importaciones.
En España, el periodo de autarquía se extiende entre 1939 a 1951 bajo la iniciativa de una
economía dirigida. Dado el actual grado de desarrollo de la civilización, actualmente es
imposible la completa autarquía económica en un Estado evolucionado. La política autárquica
se inició en 1939 con un plan de saneamiento y reconstrucción y continuó con las leyes de
protección y fomento de la industria nacional y de ordenación y defensa de la misma. El Estado
intervino y controló todas las actividades económicas, de manera especial el comercio
exterior. La escasez de divisas redujo las importaciones y se impuso una política de
autoabastecimiento nacional. Las medidas provocaron la escasez de productos básicos y su
encarecimiento. El intervencionismo propició, además, el amiguismo y el tráfico de influencias.
En 1941 se creaba el Instituto Nacional de Industria (INI), inspirado en el IRI italiano, con el fin
de articular, fomentar y nacionalizar la industria. Se prestó especial atención a la industria
militar y a los sectores considerados estratégicos: naval, siderúrgico, ferroviario, aeronáutico y
automoción. Surgieron empresas como Iberia, ENSIDESA, ENASA o SEAT, y se nacionalizaron la
Compañía Telefónica (CTNE) y la Red Nacional de Ferrocarriles (RENFE). El plan era poco
consistente y se subordinó a las necesidades políticas del régimen y a intereses particulares. La
agricultura fue el sector con menos ayudas y menor innovación. La autarquía retrasó la
recuperación de la renta per cápita de preguerra hasta los inicios de los años cincuenta. Su
desarrollo tuvo muchos fallos y su ejecución se vio obstaculizada por una burocracia ineficaz y
corrupta y por la falta de los recursos más esenciales para afrontar su propia vía económica:
alimentos, productos energéticos, abonos, maquinaria, tecnología moderna y materias primas.
Disminuyó la producción agrícola, aumentó la escasez de alimentos y encareció los de primera
necesidad. Las capas sociales más pobres sufrieron la inflación y los bajos salarios. En muchos
lugares se recurrió a una economía de subsistencia y trueque

Estraperlo: mercado negro, o estraperlo, paralelo al oficial, en el que se podían encontrar


abundantes productos a precios muy altos para una población empobrecida y con salarios muy
bajos. Esta práctica favoreció la usura, el amiguismo y el enriquecimiento del entorno del
régimen. Generó una serie de comerciantes o personajes que consiguieron fortunas a su costa.
Quien pudo recurrió a segundo mercado para hacerse con productos tanto primera necesidad
como no que no se podía acceder en el mercado ordinario.

Democracia orgánica, se oponía a la democracia inorgánica o parlamentaria. Es el entramado


político que articuló el régimen, elaborando una serie de Leyes Fundamentales, para darse
legalidad jurídica, pero que en nada se parecían a una constitución democrática. Las leyes de
Fuero del Trabajo, la Constitutiva de las Cortes y el Fuero de los Españoles. Pusieron las bases
del Estado Corporativo y crearon los cauces de participación de los españoles a través de sus
organizaciones naturales: la familia, el municipio y el sindicato. Las Cortes era un órgano
superior de participación del pueblo español en las tareas del Estado, controladas por el jefe
del Estado. Los procuradores en Cortes eran elegidos por la condición de su cargo: procurados
del sindicalismo (tercio sindical); los de entidades municipales (tercio municipal) y, a partir de
1966, con ley Orgánica, se incorporaban los representantes elegidos por los cabezas de familia
(tercio familiar)

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