En cuanto al calidad de servicio, se citó como autor principal a
Matsumoto (2014), define como el resultado de un proceso de
evaluación donde el consumidor compara sus expectativas frente a sus percepciones. Es decir, la medición de la calidad se realiza mediante la diferencia del servicio que espera el cliente, y el que recibe de la empresa.
Para Mejías et al. (2018), menciona que el servicio es un conjunto de
actividades diseñadas para construir procesos que conduzcan a incrementar la satisfacción de las necesidades, deseos y expectativas de quien lo requiera; realizados por personas y para personas, con disposición de entrega generosa a los demás, y de esta forma promover y crear valor nuevo en un marco axiológico, tal que derive del desarrollo mutuo y cambios duraderos; y la calidad es la búsqueda continua de la perfección, es el proceso que tiene como centro al hombre y a partir de él construye productos y servicios que te llevarán a satisfacer deseos, expectativas y necesidades dentro de un marco razonable.
De acuerdo a Cadena et al. (2016), menciona que el servicio es un
conjunto de actividades diseñadas para construir procesos que conduzcan a incrementar la satisfacción de las necesidades, deseos y expectativas de quien lo requiera; realizados por personas y para personas, con disposición de entrega generosa a los demás, y de esta forma promover y crear valor nuevo en un marco axiológico, tal que derive del desarrollo mutuo y cambios duraderos; y la calidad es la búsqueda continua de la perfección, es el proceso que tiene como centro al hombre y a partir de él construye productos y servicios que te llevarán a satisfacer deseos, expectativas y necesidades dentro de un marco razonable.
Para Arciniegas y Mejías (2017), indica que, la diferencia entre el
producto o servicio recibido por el cliente y la percepción del mismo sobre lo que esperaba recibir puede dar a la organización una visión de las estrategias que las organizaciones deben realizar para que la calidad de servicio recibida permite que la marca perdure en el tiempo, es ahí donde juegan un papel importante la empatía, seguridad, capacidad de respuesta, así como la tangibilidad. Según Salazar y Cabrera (2016), la calidad de servicio se percibe de forma diferente según el cliente conocen va cambiando, al inicio se contentó si satisfacían solo sus necesidades y de costo exequible, luego fueron cambiando en la búsqueda de algo mejor que vaya más allá de sus expectativas iniciales.
Para Morillo y Morillo (2016), indica que, la calidad de servicio tiene un
grado mayor de asociación con la lealtad del cliente como intención de comportamiento futuro, frente al comportamiento actual, los consumidores de los supermercados limeños muestran una percepción positiva hacia la calidad de servicio recibida, en los niveles de lealtad, se debe evaluar la amplia oferta existente y la intención de volver a repetir la compra.
Según Torres y Vásquez (2015), presentaron su definición de un servicio
de calidad mediante un modelo formado por tres componentes. El resultado de la compra de un producto o del servicio es la calidad técnica, la entrega del servicio es equivalencia a la calidad funcional que se centra en cómo el servicio es entregado y por último el entorno del servicio que recoge la influencia que rodea al servicio por ello es importante que la comunicación del marketing lo maneje la misma empresa. Asimismo, Gonzáles (2015), el servicio es un término capaz de acoger significados diversos. Entiende por servicio al “conjunto de prestaciones accesorios de naturaleza cuantitativa o cualitativa que acompaña a la prestación principal, ya sea ésta en producto o en un servicio.
Para Silvia et al. (2021), afirmó que la calidad de servicio es la medida
de la dimensión en que una cosa o experiencia satisface una necesidad, soluciona un problema o agregar un valor para alguien. Las cosas tangibles pueden ser comparadas entre sí para observar su proximidad al ideal o Standard, pero tratándose de servicio y de las diferentes percepciones de los clientes, la mayor calidad no la dará el apego a un Standard, sino la superación de las expectativas que cada cliente tenga de lo recibido.
De acuerdo Vega et al. (2015), en su artículo sobre la calidad del
servicio sostuvo que: Servicio es un bien intangible que proporciona bienestar a los clientes. En toda organización, los servicios son aquellas que, dentro de los resultados con la interacción de sus clientes, se caracterizan por “desarrollar transacciones en beneficio de éstos que proporcionan conocimientos o información a sus clientes”. Muchas organizaciones, aunque suministran un bien tangible, se distinguen en el mercado porque ofrecen un servicio adicional que las caracteriza (servicio intangible).
Para Gonzáles et al. (2016), describió cinco grados de compromiso que
muestran las organizaciones respecto a la calidad del servicio: Las que están saliendo al mercado: Esas organizaciones están tan lejos de tener un verdadero contacto con sus clientes que estén llegando al “final de la tubería”; algunas lo saben otros no. Las que están presentes: Esas organizaciones reconocen que están en el “negocio” del servicio y poseen un respeto innato por hacer, al menos lo básico. Las que realizan esfuerzo serio: Esas se encuentran en movimiento y están trabajando seriamente para convertir el servicio en un arma competitiva. Las que perciben como una forma de arte: Esas son las organizaciones que son una leyenda en la promoción.
De acuerdo Dos Santos (2016), observó que calidad no es lo que usted
pone dentro de un servicio; es lo que el cliente obtiene de él y por lo que está dispuesto a pagar. “Su servicio no es de calidad porque es difícil de elaborar o porque cuesta un montón de dinero. Los clientes pagan sólo por las cosas que les son útiles y que les aportan algún valor”. De igual forma, Coromoto y del Valle (2015), especifican a los servicios como “Actividades tangibles e identificables que son el objeto principal el trabajo que se hace para otra personas o clientes para obtener satisfacción mediante los deseos o necesidades que puedan tener.
Para Silvia et al. (2019), menciona que “Calidad de Servicio es el grado
de satisfacción de necesidades que llegan a tener los clientes, a través de un ofrecimiento de servicio oportuno, amable, rápido y seguro, de tal manera que el cliente se sienta satisfecho por lo dado. Asimismo, Alcantar et al. (2015), la calidad en los servicios públicos es un proceso continuo que mejorara el desempeño administrativo que permita una adaptación constante a las necesidades del usuario – ciudadano detectando problemas y gestión y buscar así las soluciones para prevenir errores a futuro en todas las áreas funcionales de la organización a través de la participación del personal.
De acuerdo a Suárez (2016), sostiene que la calidad de servicios
públicos es determinante para los ciudadanos, que la calidad en la gestión de los servicios por los organismos públicos depende de una serie de factores como el determinar que necesidades tienen los ciudadanos y de la calidad de los mismos así también como la gestión eficiente de los recursos públicos. Por otro lado, Reyes y Veliz (2021), menciona que, la calidad en los servicios es una exigencia constitucional y es una obligación irrestricta de la Administración Pública. Que además es el recurso con que cuenta un Estado para compensar las desigualdades de la población a la que sirve, porque es la posibilidad real de que el conjunto de ciudadanos reciba los mismos servicios.
Para Rojas et al. (2020), la Calidad De Servicio. Sostiene que la calidad
de los servicios públicos se basa en la visión organizacional y la mejora continua en el tiempo que tiene una relación estrecha entre lo que percibimos, lo que planteamos y lo ejecutado según los plazos del tiempo de la organización en este caso del objeto de la investigación seria las municipalidades. Lo que me permite reafirmar que, si la visión y mejora continua debe estar en el conocimiento claro de los funcionarios y servidores públicos del municipio en cuestión, de tal manera que promover la competitividad para mejora la calidad de los servicios públicos es fundamental.
De acuerdo a Juárez et al. (2021), la perspectiva de los ciudadanos,
clientes y usuarios. Menciona que la mejora de la calidad depende mucho de la eficiencia en sus administrativos y funcionarios (calidad interna) pues ellos son los que dirigen y aplica las políticas públicas se reafirma en dejar de lado la burocracia y centrar el trabajo administrativo en la satisfacción de los usuarios- ciudadanos (calidad externa). En relación a las expectativas hacia la política local tenemos un bajo porcentaje de aprobación por que lo que se programa no se logra ejecutar, lo que hace a un municipio con bajo nivel de competitividad y en consecuencia a los ciudadanos se les brinda servicios que nos están acorde a la calidad que demandan tanto en lo operativo como lo administrativo.
De acuerdo a Gerónimo et al. (2017), la calidad de servicio es como un
controvertido concepto en la literatura de marketing de servicios, y se identifica con un juicio personal y subjetivo que el consumidor emite sobre la excelencia o superioridad de un servicio o compañía. Es una forma de actitud formada a partir de evaluaciones cognitivas y afectivas del individuo en su relación con la organización. Para Aliga y Alcas (2021), la estimación de la calidad de servicio ha sido un punto ya comentado en la escritura exploratoria en los diferentes ámbitos de las organizaciones o asociaciones de Latinoamérica. A pesar de que el entorno típico en el que se utiliza, alude a la valoración de la administración en las organizaciones de ayuda y en los elementos que incluyen algún tipo de atención al cliente, también es utilizable con respecto a las administraciones que el Estado y el poder público brindan a todos.
Las dimensiones de la variable Calidad del servicio son propuestas por
Matsumoto (2014), siendo estas: Dimensión 1: Tangible. “Apariencia de las instalaciones físicas, equipos, personal y materiales de comunicación”. Dimensión 2: Fiabilidad. Es la capacidad que debe tener la empresa que presta el servicio para ofrecerlo de manera confiable, segura y cuidadosa. Dentro del concepto de fiabilidad se encuentran incluidos todos los elementos que permiten al cliente detectar la capacidad y conocimientos profesionales de la organización, es decir, fiabilidad significa brindar el servicio de forma correcta desde el primer momento. Dimensión 3: Capacidad de respuesta. Se refiere a la actitud que se muestra para ayudar a los clientes y para suministrar el servicio rápido; también hacen parte de este punto el cumplimiento a tiempo de los compromisos contraídos, así como lo accesible que resulte la organización para el cliente, es decir, las posibilidades de entrar en contacto con ella y la factibilidad de lograrlo. Dimensión 4: Confianza o empatía: Muestra de interés y nivel de atención individualizada que ofrecen las empresas a sus clientes (agrupa los anteriores criterios de accesibilidad, comunicación y compresión del usuario). Y finalmente dimensión: Seguridad, conocimiento y atención de los empleados y su habilidad para inspirar credibilidad y confianza (agrupa las anteriores dimensiones de profesionalidad, cortesía, credibilidad y seguridad).
Desarrollando la Identidad de Marca (Brand Identity Breakthrough): Como Crear una Historia Unica Sobre tu Negocio para Volver Irresistibles tus Productos (Spanish Edition)