Universidad Privada Franz Tamayo – UNIFRANZ

Facultad de Ciencias de la Salud

Carrera de Medicina

Nutrición Clínica

Resumen: desnutrición en la tercera edad.

Docente: Dra. Magaly Bishop

Estudiante: Carina Mesquita Pereira – MED 802248

Santa Cruz de la Sierra, 27 de mayo de 2022.

La desnutrición en los individuos de la tercera edad, contribuye a un decline
progresivo en la salud, afectando el estado funcional y cognitivo,
incrementando así la mortalidad. El riesgo nutricional es mayor en ancianos
enfermos, pobres y los que tienen acceso limitado a cuidados médicos.

Las condiciones asociadas a desnutrición en ancianos que viven en asilos o

que se encuentren hospitalizados son: caídas, ulceras por presión, infecciones
recurrentes, anemia y déficit cognitivo. Entre las alteraciones funcionales que
favorecen la desnutrición durante el envejecimiento podemos citar la
disminución en la masa ósea, el daño en la función muscular, la disfunción
inmune y la pobre cicatrización de heridas.

La etiología es multifactorial. Las causas pueden ser:

 Sociales (pobreza, soledad, falta de conocimiento sobre alimentación y

nutrición).

 Psicológicas (depresión, demencia).

 Médicas (padecimientos diversos asociados a anorexia, medicamentos

que poseen interacción en la absorción de nutrientes y la polifarmacia).

 Alteraciones de la salud oral (prótesis dentarias mal ajustadas).

 Deterioro funcional (dificultad para compra y preparación de alimentos,

dificultad para la ingesta y deglución, dependencia para la
alimentación).

Para evaluar el estado de nutrición primero se debe investigar si existe el

antecedente de pérdida de peso involuntaria o no intencional. La evaluación
debe estar enfocada a la obtención de la información a través de la historia
clínica y se deben considerar parámetros de evaluación nutricional,
antropométrica, de composición corporal y de la cavidad oral.

Los principales indicadores de desnutrición en los ancianos son:

  Antropométricos (IMC < 22, bajo peso para la talla, perdida de peso
involuntaria en los últimos meses, circunferencia de pantorrilla menor a
31cm y de brazo inferior al 10° percentil).

 Clínicos (palidez, resequedad en la piel, edema, disminución del apetito).

 Bioquímicos (albumina serica < 3.5mg/dL, colesterol < 160mg/dL,

prealbúmina <15mg/dL, transferina <180mg/dL).

 Funcionales (cambio de situación de “independente a dependente”).

Herramientas de evaluación nutricional:

 Tamizaje Universal de desnutrición (considera los componentes como

índice de masa corporal, historia inexplicable de pérdida de peso y
efecto del antecedente de un padecimiento agudo).

 Evaluación mínima del estado de nutrición (evalúa rápido el estado

nutricional y el riesgo de desnutrición a través de la evaluación
antropométrica, general, dietética y de auto percepción en relación a
salud y nutrición).

 Evaluación mínima del estado de nutrición-formato corto (considera

las variables IMC, pérdida de peso y presencia de enfermedad aguda en
los últimos 3 meses, grado de movilidad, depresión o demencia,
disminución de ingesta en los 3 últimos meses).

La desnutrición se ha asociado con un estado de decline funcional que afecta

el estado de salud por lo que es importante su detección temprana. La
evaluación nutricional en los pacientes geriátricos permite identificar personas
en riesgo de desnutrición para brindarles apoyo nutricio inmediato, también se
puede hacer seguimientos y diseños de programas de intervención nutricional
para optimizar el manejo médico integral.

El uso de la terapéutica nutricional a través de suplementos por la vía oral o

enteral debe ser considerada en pacientes con riesgo de desnutrición, quienes
no pueden cubrir sus requerimientos nutricionales. La alimentación parenteral
solo se indicará cuando el paciente no pueda cubrir sus requerimientos y ante
una oportunidad realista de mejoría.

¿Porque elije este articulo?

Elige este articulo por ser un tema poco divulgado, parece no tener muchas
informaciones sobre desnutrición para las personas mayores, se escucha más
referente al cuidado con los niños. Los profesionales de salud deben tener
conocimiento del estado de nutrición de los ancianos pues el riego de
desnutrición es aumentado en esta etapa de la vida. La población mundial está
envejeciendo como consecuencia de una mayor longevidad, por eso pienso
que la tercera edad necesita de una buena alimentación para que mejore su
calidad de vida para disfrutar esta última etapa de la vida.

Referencia Bibliográfica

María del Consuelo Velásquez Alva. DESNUTRICION EN LOS ADULTOS

MAYORES: LA IMPORTANCIA DE SU EVALUACIÓN Y APOYO
NUTRICIONAL. Disponible en:
https://respyn.uanl.mx/index.php/respyn/article/download/287/268/534