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UNIVERSIDAD NACIONAL DE

TRUJILLO

UNT
FACULTAD DE CIENCIAS AGROPECUARIAS ESCUELA
PROFESIONAL DE AGRONOMÍA
TECNOLOGÍA DE SEMILLAS

PROCESAMIENTO, ALMACENAMIENTO Y NUEVAS TECNOLOGÍAS EN EL


TRATAMIENTO DE SEMILLAS

AUTORES
Escalante Mijahuanca, Andreé
Rodríguez Mauricio, Fernando

ASESOR
Dr. Juan Guillermo Tirado Sarmiento

TRUJILLO-PERÚ
2022
I. INTRODUCCIÓN

Se calcula que entre el 25% y el 33% de los cultivos mundiales de cereales,


incluidas las semillas, se pierden cada año durante el período de
almacenamiento, lo que repercute significativamente en la seguridad
alimentaria mundial. El impacto es aún mayor en los países en desarrollo con
déficit de alimentos, donde todos los años los agricultores luchan por
conservar sus semillas como insumo básico necesario para la producción de
cultivos alimentarios. El almacenamiento es la conservación de semillas en
condiciones ambientales controladas para mantener la viabilidad de las
mismas (la germinación y el vigor) durante largos períodos, desde la cosecha
hasta la siembra de las semillas elaboradas por el agricultor. Sin embargo,
muchas veces se piensa que el almacenamiento significa simplemente
mantener las semillas en una estructura física de "almacenamiento". Este
error de concepto puede llevar a la innecesaria construcción de edificios
complejos y costosos.

Es importante tener en cuenta otros factores que contribuyen al


mantenimiento de la viabilidad de las semillas. El principio rector es
entender la forma en que la semilla y sus procesos internos biológicos,
fisiológicos y bioquímicos funcionan e interactúan con su entorno, y
entonces determinar cuándo comienza realmente el almacenamiento de
semillas y cuándo termina. El almacenamiento de las semillas se inicia
realmente en el campo, cuando éstas alcanzan la madurez fisiológica, es
decir, cuando dejan de recibir la protección plena de la planta madre y están
expuestas al ambiente externo en condiciones de humedad, temperatura,
presiones bióticas, etc. Por esta razón, las condiciones ambientales durante la
maduración de las semillas hasta su madurez fisiológica y la siembra
producen un alto impacto en la viabilidad de las semillas y el potencial de
almacenamiento.

II. PROCESAMIENTO
El procesamiento partiría desde la cosecha, la forma más común de cosechar
es manualmente y se realiza utilizando una hoz, para cortar las espigas y
formar gavillas, las mismas que son agrupadas para formar parvas, con el fin
de conservar la cebada en el campo, para luego proceder a la trilla. Para
realizar esta labor se debe tener muy en cuenta las épocas secas, para que el
grano no absorba humedad y pueda mantenerse en buenas condiciones
cuando sea almacenado.
III. ALMACENAMIENTO
Una de las mayores preocupaciones de los agricultores que se dedican a la
producción de trigo y cebada tras recoger la cosecha es la de cómo conservar
y almacenar estos populares granos hasta que se produzca su venta. En el
siguiente artículo vamos a comentar los principales factores que deben ser
tenidos en cuenta de cara a minimizar las pérdidas en las fases previas a la de
procesamiento de estos cereales por la industria que interviene.
No realizar una buena conservación y almacenamiento del trigo y cebada
puede dar lugar a una pérdida de rentabilidad en la explotación, así como
que estos cereales den lugar a productos finales, tipo harinas y aceites, e
incluso cerveza, de menor calidad.
A. Factores principales que afectan al almacenamiento y conservación
del trigo y cebada
Normalmente el almacenamiento de grano se realiza indistintamente en
bolsas de plástico o tela, silos y celdas. Esto va a depender del tamaño de la
cosecha y explotación. Has de saber que independientemente del soporte en
el que se realice los cereales de los que hablamos en este artículo (bien
podrían ser otros como centeno, avena, maíz, etc) hemos de conocer los
factores que más van a influir en un buen almacenaje y conservación.
Cuidar la humedad, temperatura y limpieza es fundamental para que se
mantenga una buena rentabilidad y calidad en el cereal de nuestra
explotación.
- La humedad
Es un factor muy a tener en cuenta. Un exceso de humedad podría
hacer germinar el grano o la aparición de hongos y la falta de
humedad provocaría un secado prematuro que le haría perder sus
propiedades.
- La temperatura
Para cuidar bien lo cosechado se debe almacenar con una temperatura
igual o inferior a la humedad, que es del 14% para trigo y 12% en el
caso de cebada. En relación a la temperatura recomendamos que se
mantenga a ser posible por debajo de los 17º en cualquier de los
casos. Permitirá retrasar su deterioro. En trigo y cebada, las altas
temperaturas estivales incrementan el riesgo de deterioro, acelerando
los procesos biológicos de descomposición y atraen insectos y
posibles plagas que los puedan atacar.
- Tiempo de almacenamiento del trigo y cebada
Otra cuestión que se plantea entre los productores de trigo y cebada
es el tiempo de almacenamiento. Un mayor tiempo de
almacenamiento y conservación implica un mayor riesgo de deterioro
y pérdida de calidad.
- Insectos y plagas
Los insectos, son los grandes enemigos de los cereales junto con los
hongos. Este riesgo se acelera cuando se cumplen algunas
condiciones ambientales concretas de altas temperaturas y humedad
alta. Emplear tierra de diatomeas durante su conservación nos será de
gran ayuda tanto para contener la humedad, debido a su cualidad
absorbente y a paliar posibles plagas debido a su poder fertilizante.
B. Cómo realizar correctamente el almacenaje y conservación de
cereales
Ahora que ya conocemos donde se realiza el almacenaje de los cereales y
qué factores son los que debemos tener en cuenta vamos a explicar cómo
conservar y almacenar de forma correcta, así como alguna técnica muy
utilizada.
Si lo hacemos en bolsa, ya sea de plástico o tela, un aspecto fundamental es
almacenar el grano seco, porque al igual que las estructuras tradicionales, a
más humedad existe un mayor riesgo de deterioro.
Si se realiza en silos y celdas deberíamos realizar una técnica denominada
descorazonado. Consiste en extraer el centro de la masa de granos,
eliminando la mayoría del material fino como nos sea posible que
normalmente se concentra en el centro del embalse. Cuanto más fino el
material más posibilidad de acumular humedad tiene, y como te hemos
explicado con anterioridad, no es nada aconsejable para la salud de tu grano.
Como conclusión te diremos que independientemente del contenedor
empleado te aconsejamos que controles la ventilación. Esto ayuda a
mantener la temperatura adecuada. Emplear absorbentes naturales, como la
tierra de diatomeas, para controlar la humedad y posible proliferación de
plagas es también más que recomendable. Trata de reducir la dependencia
que tenemos en el uso de insecticidas químicos que dejan residuos. Y por
último realiza un monitoreo o control visual del grano para detectar
prematuramente alteraciones y la existencia de insectos o bichos que puedan
afectar a nuestra cosecha.
IV. NUEVAS TECNOLOGÍAS EN EL TRATAMIENTO DE SEMILLAS
La sanidad del cultivo de trigo y cebada es determinante del rendimiento y
sobre todo afecta la estabilidad del mismo. El uso de fungicidas, por su
parte, ha demostrado ser una herramienta eficaz para controlar las
enfermedades foliares. Sin embargo, un manejo integrado de enfermedades
teniendo como pilares el tratamiento de semillas contribuiría a reducir el
inóculo inicial y proteger la semilla de patógenos habitantes del suelo.
El tratamiento de semillas con fungicidas actúa sobre el agente inoculante
presente sobre o dentro de la semilla impidiendo que se constituya en una
fuente inicial o primaria de contaminación y también protege a la semilla de
patógenos habitantes del suelo que atacan las raíces.
Las pruebas más utilizados actualmente son: tetrazolio, envejecimiento
acelerado, deterioración controlada, conductividad eléctrica, largura de
plántulas y raíces, índice de velocidad de germinación, clasificación de
vigor de plántulas, prueba de frío, prueba a baja temperatura y, análisis de
imágenes con el uso de computadora. Acompañando el dinamismo del
mercado, muchos laboratorios de vanguardia, mantienen el ritmo en el
compaso de mudanzas, operacionalizan pruebas de rutina y de vigor a través
de sistema informatizado, hecho que corrobora para la maximización de
tiempo y el desarrollo de un banco de datos de mayor confiabilidad y la
interface con los productores que pueden acceder sus resultados en cualquier
lugar en tiempo real.
En los últimos años se ha incorporado más tecnología de protección del
cultivo desde la semilla con nuevos productos curasemillas. La introducción
de las carboxamidas (SDHI) como un nuevo modo de acción en los
tratamientos de semilla ha incrementado la eficacia de control de algunas
enfermedades que se escapan al control de los fungicidas curasemillas
tradicionales, como así también favorecer un mayor desarrollo radicular y
control de hongos de suelo. También está eficacia de control está asociada a
la aparición en el mercado de diferentes combinaciones de fungicidas que
aumentan el espectro de acción, disminuyen el riesgo de generación de
resistencia, generando así un sinergismo. Por lo que disponer de nuevos
productos fungicidas para el tratamiento de semillas generaría un menor
costo de producción e impacto ambiental.

V. BIBLIOGRAFÍA
Couretot, L., Parisi, L., Fernández, M., Magnone, G., Russian, H., & Samoiloff, A.
(2017). Sanidad de semillas en trigo y cebada. Importancia del tratamiento de semillas.
Fitopatología, 10, 30-33.
https://www.researchgate.net/publication/256455595_Nuevas_tecnologias_en_la_produ
ccion_de_granos_y_semillas
Cajamarca, B., & Montenegro, S. (2015). Selección de una línea promisoria de cebada
(Hordeum vulgare l.) Bio-fortificada de grano descubierto y bajo contenido en fitatos,
en áreas vulnerables de la sierra sur ecuatoriana.

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