Traducido del inglés al español - www.onlinedoctranslator.

com

Artículos

Tendencias en las prácticas al final de la vida antes y después de la

promulgación de la ley de eutanasia en los Países Bajos de 1990 a 2010:
una encuesta transversal repetida
Bregje D Onwuteaka-Philipsen, Arianne Brinkman-Stoppelenburg, Corine Penning, Gwen JF de Jong-Krul, Johannes JM van Delden, Agnes
van der Heide

Resumen
Lanceta2012; 380: 908–15 FondoEn 2002 entró en vigor la ley de eutanasia en los Países Bajos, seguida de una ligera disminución en la frecuencia de las
PublicadoEn línea eutanasias. Evaluamos la frecuencia y las características de la eutanasia, el suicidio asistido por un médico y otras prácticas al
11 de julio de 2012 final de la vida en 2010, y evaluamos las tendencias desde 1990.
http://dx.doi.org/10.1016/
S0140-6736(12)61034-4
MétodosEn 1990, 1995, 2001, 2005 y 2010 realizamos estudios a nivel nacional de una muestra estratificada del registro de defunciones de Statistics
VerComentariopágina 869
Netherlands, al que se informaron todas las muertes y causas. Enviamos cuestionarios a los médicos que atendieron estas muertes (2010: n=8496
centro medico universitario vu,
muertes). Todos los casos fueron ponderados para ajustar por el procedimiento de estratificación y por las diferencias en las tasas de respuesta en
Departamento de Salud
Pública y Ocupacional y EMGO relación con la edad, sexo, estado civil, región de residencia y causa y lugar de muerte.
Instituto de Salud y Atención
Investigación, VUmc Expertise
RecomendacionesEn 2010, de todas las muertes en los Países Bajos, el 2,8 % (95 % IC 2,5–3,2; 475 de 6861) fueron el resultado de la
Center for Palliative Care,
eutanasia. Esta tasa es superior al 1,7% (1,5–1,8; 294 de 9965) de 2005, pero comparable con las de 2001 y 1995. La distribución por sexo,
Ámsterdam, Países Bajos

(Profesor BD Onwuteaka-Philipsen edad y diagnóstico se mantuvo estable entre 1990 y 2010. En 2010, el 77 % (3136 de 4050) de todos los casos de eutanasia o suicidio
PhD); Erasmus MC, Universidad asistido por un médico se informaron a un comité de revisión (80 % [1933 de 2425] en 2005). El final de la vida sin una solicitud explícita
Centro Médico de Róterdam,
del paciente en 2010 ocurrió con menos frecuencia (0,2 %; IC 95 % 0,1–0,3; 13 de 6861) que en 2005, 2001, 1995 y 1990 (0,8 %; 0·6–1·1; 45 de
Departamento de Salud Pública,
Róterdam, Países Bajos
5197). La sedación profunda continua hasta la muerte ocurrió con más frecuencia en 2010 (12,3 % [11,6–13,1; 789 de 6861]) que en 2005
(Maestría en Ciencias de Brinkman-Stoppelenburg, (8,2 % [7,8–8,6; 521 de 9965] ). De todas las muertes en 2010, 0,4% (0,3–0,6; 18 de 6861) fueron el resultado de la decisión del paciente de
Un doctorado de van der Heide); Estadísticas dejar de comer y beber para terminar con la vida; en la mitad de estos casos el paciente había solicitado la eutanasia que no fue
Países Bajos, La Haya,
concedida.
Países Bajos(C Penning PhD,
GJF de Jong-Krul MSc); y Centro
Médico Universitario de InterpretaciónNuestro estudio proporciona información sobre las consecuencias de regular la eutanasia y el suicidio asistido por un
Utrecht, Centro Julius, Utrecht, médico dentro del contexto más amplio de las prácticas al final de la vida. En los Países Bajos, la ley de eutanasia resultó en una
Países Bajos
práctica relativamente transparente. Aunque traducir estos resultados a otros países no es sencillo, pueden informar el debate sobre la
(Profesor JJM van Delden PhD)
legalización de la muerte asistida en otros países.
Correspondencia a:
Prof. Bregje D Onwuteaka-

Philipsen, Medicina de la Universidad VU
Centro, Departamento de Público
y Salud Ocupacional, Van
der Boechorststraat 7,
1081 BT Ámsterdam,
Países Bajos
b.philipsen@vumc.nl
FondosLa Organización Holandesa para la Investigación y el Desarrollo (ZonMw).
Introducción
Al final de la vida, muchos pacientes necesitan atención orientada a la
comodidad. Tal atención podría incluir la toma de decisiones al final
de la vida (p. ej., renunciar a un tratamiento oneroso o intensificar el
alivio del dolor u otros síntomas). Durante este período, las personas
pueden incluso desarrollar un deseo de muerte, cuando sufren
se vuelve abrumador.1,2Los pacientes pueden entonces pedir a sus médicos, abogados, especialistas en ética, médicos que pongan fin
a sus vidas. En la mayoría de los países los médicos
no están autorizados a conceder tal solicitud, pero hay mucho debate
sobre este tema.3–6Las preocupaciones expresadas incluyen el temor
de una práctica en expansión de la eutanasia (p. ej., entre grupos
vulnerables como personas mayores o pacientes incompetentes). No
se sabe hasta qué punto las solicitudes de eutanasia rechazadas
tienen como resultado que los pacientes terminen con su propia vida.
Desde 2002, los Países Bajos han sido uno de los pocos
países donde la eutanasia y el suicidio asistido por un
médico están, bajo estrictas condiciones, regulados por ley.
Existen leyes similares en Bélgica y Luxemburgo; Oregón,
Montana, Washington (EE. UU.) y Suiza han regulado
legalmente la asistencia al suicidio.7,8En los Países Bajos, la
eutanasia se define como la administración
de drogas letales por un médico con la intención explícita de
terminar con la vida de un paciente a pedido explícito del
paciente. En el suicidio asistido por un médico, el paciente se
autoadministra un medicamento que un médico le recetó
intencionalmente. En los Países Bajos, la promulgación de la ley
de eutanasia estuvo precedida por varias décadas de debate
políticos y público en general en el que se desarrolló un
procedimiento de denuncia.7Este debate ha sido informado por
estudios a nivel nacional sobre la toma de decisiones al final de la
vida que se realizaron en 1990, antes del primer procedimiento
de informe, 1995, 2001 y 2005.9–13Estos estudios han permitido
monitorear la práctica de toma de decisiones al final de la vida en
relación con el desarrollo del sistema regulatorio. En 2005, 3 años
después de la promulgación de la ley de eutanasia, la tasa de
eutanasia había disminuido significativamente, del 2,6 % de
todas las muertes en 2001 al 1,7 % en 2005, lo que supuso una
inversión de la tendencia de 1990 a 2001. El final de la vida sin
una petición explícita del paciente había disminuido, aunque no
significativamente (0,7% en 2001 y 0,4% en 2005).9En 2010, 8
años después de la promulgación de la

908 www.thelancet.comVol. 380 8 de septiembre de 2012

 Artículos

1990 1995 2001 2005 2010

Número de muertes en los Países Bajos 128 824 135 675 140 377 136 402 136 056

Número de casos estudiados 5197 5146 5617 9965 6861

Decisión más importante al final de la vida

Eutanasia 141 (1·7% [1·4–2·1]) 257 (2·4% [2·1–2·6]) 310 (2·6% [2·3–2·8]) 294 (1·7% [1·5–1·8]) 475 (2·8% [2·5–3·2])

suicidio asistido 18 (0·2% [0·1–0·3]) 25 (0·2% [0·1–0·3]) 25 (0·2% [0·1–0·3]) 17 (0·1% [<0·1–0·1]) 21 (0·1% [0·1–0·2])

Terminación de la vida sin petición 45 (0·8% [0·6–1·1]) 64 (0·7% [0·5–0·9]) 42 (0·7% [0·5–0·9]) 24 (0·4% [0·2–0·6]) 13 (0·2% [0·1–0·3])
explícita del paciente

Alivio intensificado de los síntomas. 1166 (18·8% [17·9–19·9]) 1161 (19·1% [18·1–20·1]) 1312 (20·1% [19·1–21·1]) 1478 (24·7% [23·5–26·0]) 2202 (36·4% [35·2–37·6])

Abandono del tratamiento para 991 (17·9% [17·0–18·9]) 1097 (20·2% [19·1-21·3]) 1210 (20·2% [19·1–21·3]) 767 (15·6% [15·0–16·2]) 974 (18·2% [17·3–19·1])
prolongar la vida

Total 2361 (39·4% [38·1–40·7]) 2604 (42·6% [41·3–43·9]) 2899 (43·8% [42·6–45·0]) 2570 (42·5% [41·1-43·9]) 3685 (57·8% [56·7–59·0])

Sedación profunda continua*† N/A N/A ·· 521 (8·2% [7·8–8·6]) 789 (12·3% [11·6–13·1])

Paciente que decide acabar con N/A N/A N/A N/A 18 (0·4% [0·3–0·6])
su vida dejando de comer y beber

Los datos son número absoluto o número de pacientes (% ponderado [IC 95%]). Todos los porcentajes se ponderan para fracciones de muestreo, falta de respuesta y desviaciones de muestreo aleatorio, para que sean representativos de todas las
muertes en el año estudiado. Por lo tanto, los porcentajes presentados no pueden derivarse de los números absolutos no ponderados presentados. NA=no disponible. *Se podría haber proporcionado una sedación profunda continua junto con
prácticas que posiblemente aceleraron la muerte. †En 2001, la sedación profunda continua solo se estudió cuando ocurrió junto con una decisión de final de vida; la frecuencia fue de 5,6%; los números correspondientes son 7,1% en 2005 y 11%
en 2010.

Tabla 1:Frecuencia de la eutanasia, el suicidio asistido y otras prácticas al final de la vida en los Países Bajos en 1990, 1995, 2001, 2005 y 2010

ley de eutanasia, investigamos cómo se han desarrollado más las 10 No garantizado

prácticas de toma de decisiones al final de la vida. Otorgada

8
Métodos
Diseño del estudio
Porcentaje de muertes

6
En 2010, llevamos a cabo un estudio de certificados de defunción a nivel nacional que fue muy similar a estudios

anteriores realizados en 1990, 1995, 2001 y 2005.9–13Extrajimos una muestra aleatoria del registro central de
3·7%
(3·3–4·2)
defunciones de Statistics Netherlands, al que se informaron todas las muertes y causas. El período estudiado fue 4
3·0%
del 1 de agosto al 1 de noviembre, en todos los años estudiados. Todas las muertes que ocurrieron en ese período (2·7–3·3)

fueron asignadas a uno de cinco estratos. Cuando la causa de la muerte impedía claramente la toma de 2 2·9%
decisiones al final de la vida (p. ej., muerte instantánea en un accidente de tráfico), los casos se asignaban al 1·8% (2·6–3·4)
(1·5–2·1)
estrato uno. Estos casos se mantuvieron en la muestra, pero no se enviaron cuestionarios al médico. Sobre la base
0
de la causa de la muerte, los casos se asignaron a uno de los otros estratos considerando la probabilidad de que 2005 2010
Año
una decisión sobre el final de la vida hubiera precedido a la muerte: cuando esta decisión era poco probable (p.

ej., infarto agudo de miocardio o aneurisma) la causa de la muerte fue asignado al estrato dos, cuando esta
Figura:Porcentaje ponderado (95% CI) de todas las muertes precedidas por una solicitud
decisión era posible (por ejemplo, insuficiencia cardíaca o enfermedad de Parkinson) al estrato tres, y cuando esta otorgada o no otorgada de eutanasia o suicidio asistido por un médico

decisión era más probable (p. ej., cáncer) al estrato cuatro. Los casos fueron asignados al estrato cinco cuando el
médico había anotado en el certificado de defunción que habían terminado activamente con la vida del paciente.
El muestreo final contenía el 50% de los casos del estrato cinco, el 25% de los casos del estrato cuatro, el 13% de
los del estrato tres, el 8% de los del estrato uno y dos. Para garantizar que los niños menores de 17 años y los
Una solicitud puede ser desestimada por diferentes razones, entre las que se encuentran la negativa
del médico o la muerte del paciente antes de que el médico pueda decidir sobre la concesión de la
solicitud. Hubo 9965 muertes en 2005 y 6861 muertes en 2010. Cifras absolutas no ponderadas: 252
solicitudes concedidas y 251 no concedidas para eutanasia en 2005; y 496 solicitudes concedidas y
270 solicitudes no concedidas en 2010.

inmigrantes no occidentales, dos pequeños grupos en las estadísticas de muerte, estuvieran bien representados

en la muestra, se incluyeron en la muestra todas las muertes en las que no se podía excluir una decisión de final Todos los médicos tratantes de los casos muestreados en
de vida en estos grupos. Los casos fueron asignados al estrato cinco cuando el médico había anotado en el los estratos dos a cinco recibieron un cuestionario. El
certificado de defunción que habían terminado activamente con la vida del paciente. El muestreo final contenía el procedimiento de recogida de datos impidió la identificación
50% de los casos del estrato cinco, el 25% de los casos del estrato cuatro, el 13% de los del estrato tres, el 8% de del médico y el paciente. El Ministerio de Justicia garantizó
los del estrato uno y dos. Para garantizar que los niños menores de 17 años y los inmigrantes no occidentales, dos que ningún médico podría ser enjuiciado sobre la base de la
pequeños grupos en las estadísticas de muerte, estuvieran bien representados en la muestra, se incluyeron en la información proporcionada a los investigadores. De acuerdo
muestra todas las muertes en las que no se podía excluir una decisión de final de vida en estos grupos. Los casos con la política holandesa, el estudio no requirió la revisión de
fueron asignados al estrato cinco cuando el médico había anotado en el certificado de defunción que habían un comité de ética.
terminado activamente con la vida del paciente. El muestreo final contenía el 50% de los casos del estrato cinco, el

25% de los casos del estrato cuatro, el 13% de los del estrato tres, el 8% de los del estrato uno y dos. Para Cuestionario
garantizar que los niños menores de 17 años y los inmigrantes no occidentales, dos pequeños grupos en las El cuestionario se centró en la toma de decisiones al final de la
estadísticas de muerte, estuvieran bien representados en la muestra, se incluyeron en la muestra todas las vida que podría haber precedido a la muerte del paciente
muertes en las que no se podía excluir una decisión de final de vida en estos grupos. involucrado. Las cuatro preguntas clave abordaron los siguientes
factores: (1) si el encuestado había retenido o retirado

www.thelancet.comVol. 380 8 de septiembre de 2012 909

 Artículos

VerEn líneapara el apéndice
tratamiento médico teniendo en cuenta la posible
aceleración de la muerte; (2) si el demandado había
intensificado las medidas para aliviar el dolor u otros
síntomas teniendo en cuenta o con la intención parcial de
acelerar la muerte; (3) si el demandado había retenido o
retirado el tratamiento médico con la intención explícita de
acelerar la muerte; o (4) si el demandado administró,
suministró o prescribió medicamentos con la intención
explícita de acelerar la muerte, lo que resultó en la muerte
del paciente (anexo). Estas preguntas fueron validadas en el
estudio de 1990 y 1995, y se mantuvieron idénticas en todos
años estudiados. Si más de una de las preguntas clave fue “abandono de tratamiento”, “alivio de síntomas”,
respondida afirmativamente, el acto que más involucró “sedación paliativa o terminal”, “terminación de la vida”,
se utilizó la intención explícita para clasificar el caso. Si la
intención era similar, la administración de medicamentos
prevalecía sobre la suspensión o suspensión del tratamiento.
Si la pregunta cuatro fue respondida afirmativamente y si el
acto se realizó en respuesta a una solicitud explícita del
paciente, el acto se calificó como eutanasia o asistida.
suicidio (dependiendo de si los pacientes habían tomado o
no los medicamentos). Si la pregunta cuatro fue respondida
afirmativamente y el acto no se realizó en respuesta a un
pedido explícito del paciente, el acto se clasificó como
terminación de la vida sin pedido explícito.
Se pidieron detalles sobre el proceso de toma de decisiones, el
tipo de fármacos que se habían utilizado y el grado en que se
había acelerado la muerte según la estimación del médico, para
la decisión más importante sobre el final de la vida, si la había.
Además, se pidió a los médicos que eligieran el término que, en
su opinión, describía mejor su decisión sobre el final de la vida:
“suicidio asistido” o “eutanasia”. Finalmente, preguntamos si
el paciente había sido “sedado profunda y continuamente
hasta la muerte”, si el paciente había solicitado la eutanasia o
el suicidio asistido por un médico que no fue concedido, y si
los pacientes habían terminado deliberadamente con su vida
al dejar de comer y beber. .

Todos Eutanasia y suicidio asistido por un Finalización de la vida sin petición Alivio intensificado de los síntomas.
fallecidos médico expresa
en 2010
(%)
2001 2005 2010 2001 2005 2010 2001 2005 2010
Años de edad)

0–64 (n=2079) 19% 139 (5·0% 131 (3·5% 191 (5·6% 11 (1·0% 13 (1·0% 4 (0·2% 303 (18·9% 384 (21·4% 533 (30·5%
[4·1–6·0]) [2·7–4·4]) [4·6–6·7]) [0·7–1·5]) [0·7–1·5]) [0·1–0·5]) [17·3–20·7]) [19·7–23·2]) [28·5–32·5])
65–79 (n=2156) 31% 134 (3·3% 126 (2·1% 191 (4·0% 11 (0·4% 5 (0·3 % 4 (0·3% 456 (20·8% 536 (25·4% 721 (35·3%
[2·6–4·1]) [1·5–2·8]) [3·2–4·9]) [0·2–0·8]) [0·1–0·6]) [0·1–0·6]) [19·1–23·5]) [23·4–26·7]) [33·3–37·3])

≥80 (n=2626) 51% 58 (1·4 % 54 (0·8% 114 (1·4% 20 (0·7% 6 (0·2% 5 (0·2% 553 (20·2% 558 (25·6% 948 (39·2%
[1·0–1·9]) [0·5–1·2]) [1·0–1·9]) [0·4–1·1]) [0·1–0·4]) [0·1–0·4]) [18·6–21·7]) [24·2–27·6]) [37·1–40·8])
Sexo
Hombre (n=3538) 49% 175 (3·1% 181 (2·0% 281 (3·5% 19 (0·7% 11 (0·4 % 7 (0·2% 591 (19·1% 731 (23·7% 1101 (34·5%
[2·6–3·7]) [1·6–2·5]) [2·9–4·2]) [0·5–1·0]) [0·2–0·7]) [0·1–0·4]) [17·7–20·3]) [22·4–25·2]) [33·4–36·5])
Mujer (n=3278) 52% 156 (2·5% 130 (1·5% 215 (2·5% 23 (0·7% 13 (0·4% 6 (0·2% 721 (21·1% 747 (25·7% 1101 (38·2%
[2·0–3·1]) [1·1–2·0]) [1·9–3·0]) [0·4–1·0]) [0·2–0·7]) [0·1–0·4]) [19·6–22·4]) [24·5–27·5]) [36·4–39·6])
Causa de la muerte

Cáncer (n=3055) 31% 280 (7·4% 269 (5·1% 415 (7·6% 24 (1· 0% 9 (0·3% 6 (0·2% 709 (33·4% 989 (37·1% 1369 (47·7%
[6·5–8·4]) [4·4–6·0]) [6·7–8·6]) [0·7–1·4]) [0·1–0·6]) [0·1–0·4]) [31·2–34·6]) [35·1–38·7]) [46·2–49·8])
Cardiovascular 22% 6 (0·4% 7 (0·3% 15 (0·5% 4 (0·6% 2 (0·2% 0 128 (11·1% 175 (14·3% 193 (21·5%
enfermedad (n=931) [0·1–1·0]) [0·1–0·9]) [0·2–1·3]) [0·2–1·4]) [0·1–0·8]) [9·0–13·0]) [11·8–16·3]) [18·7–24·5])
Otro o desconocido 47% 45 (1·2% 35 (0·4% 66 (1·1% 14 (0·5% 13 (0·6% 7 (0·3% 475 (17·1% 314 (24·1% 640 (36·0%
(n=2875) [0·8–1·7]) [0·2–0·7]) [0·8–1·6]) [0·3–0·8]) [0·3–0·9]) [0·1–0·6]) [15·6–18·4]) [22·4–25·6]) [34·2–37·8])
Tipo de médico*
medico general 45% 274 (5·8% 272 (3·7% 456 (5·8% 20 (0·6% 6 (0·2% 5 (0·2% 609 (20·9% 686 (23·9% 1152 (34·3%
(n=3424) [5·1–6·7]) [3·1–4·4]) [5·1–6·7]) [0·4–0·9]) [0·1–0·4]) [0·1–0·4]) [19·6–22·4]) [22·5–25·3]) [32·4–35·6])
especialista clinico 26% 48 (1·8% 22 (0·5% 16 (0·9% 18 (1·2% 7 (0·7% 2 (0·4% 300 (18·2% 352 (22·7% 546 (32·1%
(n=1248) [1·1–2·7]) [0·2–1·0]) [0·4–1·6]) [0·7–2·0]) [0·3–1·4]) [0·1–0·9]) [15·9–20·2]) [20·5–25·1]) [29·4–34·6])
Cuidado de los ancianos 29% 9 (0·4% 12 (0·2% 29 (0·4% 4 (0·4% 4 (0·3% 6 (0·2% 403 (31·7% 410 (35·7% 504 (45·8%
médico (n=1588) [0·1–0·8]) [0·1–0·6]) [0·1–0·8]) [0·1–0·8]) [0·1–0·7]) [0·1–0·6]) [29·7–34·3]) [33·6–38·3]) [43·5–48·4])
Total (n=6861) 100% 331 (2·8% 311 (1·8% 496 (3·0% 42 (0·7% 24 (0·4% 13 (0·2% 1312 (20·1% 1478(24·7% 2202 (36·4%
[2·4–3·2]) [1·5–2·1]) [2·5–3·3]) [0·5–0·9]) [0·2–0·6]) [0·1–0·3]) [19·1-21·1]) [23·5–26·0) [35·2–37·6])

Los datos son porcentaje o número absoluto de pacientes (% ponderado [IC 95%]). Los porcentajes se ponderan para fracciones de muestreo, falta de respuesta y desviaciones de muestreo aleatorio,
para que sean representativos de todas las muertes en el año estudiado. Por lo tanto, los porcentajes presentados no pueden derivarse de los números absolutos no ponderados presentados.
* Observaciones faltantes para 2005: cinco para eutanasia y suicidio asistido por un médico, seis para poner fin a la vida sin una solicitud explícita y 30 para el alivio intensificado de los síntomas.

Tabla 2:Frecuencias de eutanasia o suicidio médico asistido, terminación de la vida sin petición expresa y alivio intensificado de síntomas en 2001, 2005 y
2010, según características de los pacientes

910 www.thelancet.comVol. 380 8 de septiembre de 2012

 Artículos

Análisis estadístico redacción del informe. El autor correspondiente tuvo pleno

Todos los casos fueron ponderados para ajustar el procedimiento de
estratificación y las diferencias en las tasas de respuesta en relación
con la edad, el sexo, el estado civil, la región de residencia y la causa y
el lugar de la muerte. Luego, los resultados se extrapolaron a 2010,
para reflejar todas las muertes en 2010 en los Países Bajos
(n=136058). Este procedimiento de ponderación se realizó en todos los
años estudiados (1990, 1995, 2001, 2005 y 2010). Como resultado de
este procedimiento de ponderación, los porcentajes presentados no
pueden derivarse de los números absolutos no ponderados
presentados. Se calcularon los IC del 95%. Este procedimiento tuvo en
cuenta la ponderación al estandarizar los factores de ponderación al
número real de casos.
Papel de la fuente de financiación
El patrocinador del estudio no participó en el diseño del estudio, la
recopilación de datos, el análisis de datos, la interpretación de datos o
acceso a todos los datos del estudio y tuvo la responsabilidad
final de la decisión de enviar para publicación.
Resultados
De los 8496 cuestionarios que se enviaron por correo, 6263
fueron devueltos y elegibles para el análisis (tasa de respuesta
del 74%). Las tasas de respuesta en los diferentes estratos
oscilaron entre el 64% y el 84%, siendo mayor la respuesta en los
estratos en los que la probabilidad de decisión de final de vida
era mayor. Las tasas de respuesta en 1990, 1995, 2001 y 2005
fueron comparables (rango 74% a 78%). La frecuencia de la
eutanasia aumentó entre 2005 y 2010 (tabla 1). La frecuencia del
suicidio asistido por un médico se mantuvo baja a lo largo de los
años. La figura muestra que el aumento en el número de
instancias de eutanasia está relacionado tanto con un aumento
en el número de solicitudes explícitas de

Eutanasia y suicidio asistido por un médico Finalización de la vida sin petición expresa Alivio intensificado de los síntomas.

2005 (n=262) 2010 (n=496) 2005 (n=24) 2010 (n=13) 2005 (n=1478) 2010 (n=2202)

Discusión
Discusión con o deseo 262 (100·0%) 496 (100·0%) 10 (60·0% [36·6–77·9]) 6 (59·1% [31·6–86·1]) 554 (35·3% [32·5–37·4]) 760 (32·9% [31·1–35·0])
previo del paciente

Discusión con familiar(es)
Discusión con otros
médico(s)
No hay discusión con ninguno de los
anteriores.
200 (75·5% [70·0–80·4]) 346 (70·5% [67·0–75·0]) 13 (80·9% [57·8–92·9]) 7 (72·2% [38·6–90·9]) 724 (54·0% [51·5–56·5]) 962 (48·6% [46·9–51·1])
230 (87·7% [84·3–92·1]) 459 (93·8% [91·5–95·9]) 15 65·3% [44·7–84·4]) 5 (53·4% [25·1–80·8]) 411 (29·5% [27·6–32·3]) 596 (27·9% [26·1–29·9])
0 0 4 (19·1% [7·1–42·2]) 5 (24·9% [5·0–53·8]) 613 (38·2% [35·5–40·5]) 994 (41·2% [39·0–43·1])

Drogas*

Relajantes neuromusculares† 197 (67·0% [61·5–72·9]) 392 (72·2% [68·0–75·9]) 5 (23·4% [9·7–46·7]) 1 (1·6% [0·1–36·0]) ·· ··
Barbitúricos† 10 (8·5% [6·0–13·3]) 37 (7·9% [5·8–10·8]) 2 (6·0% [0·2–21·5]) 0 ·· ··
Benzodiazepinas 9 (6·7% [4·1–10·6]) 28 (13·3% [10·0–15·9]) 5 (22·4% [7·1–42·2]) 4 (26·1% [5·2–54·1]) 384 (23·7% [21·8–26·6]) 853 (37·1% [35·0–39·0])
y opioides
Benzodiazepinas 7 (7·0% [4·1–10·6]) 7 (3·0% [10·0–15·9]) 1 (3·3% [0·1–21·1]) 1 (9·0% [0·1–36·3]) 71 (3·5% [3·1–5·1]) 119 (4·8% [4·1–6·0])
opioides 13 (10·5% [7·3–14·9]) 5 (3·1% [1·7–4·9]) 7 (40·2% [22·1–63·4]) 7 (63·3% [32·2–86·4]) 947 (69·4% [66·7–71·4]) 1134 (56·4% [53·9–58·1])

Otro 1 (0·3%) 2 (0·5% [0·3–2·3]) 3 (4·7% [0·2–21·3]) 0 58 (3·4% [2·2–4·0]) 37 (1·7% [1·2–2·3])

Acortamiento de la vida

Probablemente sin vida 2 (0·7% [0·2–3·3]) 1 (0·4%) 3 (17·2% [4·7–37·4]) 1 (9·4% [0·1–36·3]) 778 (54·2% [51·5–56·5]) 1275 (58·6% [56·9–61·0])
acortamiento

Menos de una semana 101 (44·1% [37·9–49·9]) 166 (40·3% [35·6–44·2]) 14 (68·3% [44·7–84·4]) 10 (76·1% [46·2–95·0]) 397 (26·8% [24·7–29·3]) 587 (26·9% [25·2–28·9])
Una semana o más 153 (53·9% [47·8–59·9]) 322 (58·0% [53·7–62·4]) 6 (11·6% [2·7–32·3]) 1 (9·1% [0·1–36·3]) 47 (3·4% [2·2–4·0]) 61 (3·1% [2·3–3·8])

Desconocido 6 (1·3% [0·2–0·3]) 7 (1·3% [0·3–2·3]) 1 (2·9 % [0·1–21]) 1 (5·4% [0·1–36·3]) 256 (15·6% [14·1–17·8]) 279 (11·4% [9·7–12·3])

Término más apropiado para la decisión según el médico

Eutanasia o 225 (82·8% [78·3–87·4]) 412 (76·7% [73·3–80·7]) 0 0 0 1 (<0·1%)

suicidio asistido

final de la vida 5 (0·5% [0·2–3·3]) 9 (2·0% [1·0–3·7]) 4 (17·2% [4·7–37·4]) 0 0 1 (<0·1%)

Alivio de los síntomas 7 (3·6% [1·9–6·9]) 2 (1·5% [1·0–3·7]) 8 (33·3% [15·6–55·3]) 4 (40·6% [13·9–68·4]) 849 (57·5% [54·4–59·5]) 1201 (57·5% [55·9–60·1])

Decisión de no tratamiento 1 (0·2%) 0 1 (3·9% [0·1–21]) 1 (1·7% [0·0–36]) 79 (5·5% [4·0–6·2]) 625 (8·3% [6·9–9·2])
paliativo o 22 (12·2% [7·9–15·7]) 44 (18·1% [14·6–21·3]) 10 (41·8% [22·1–63·4]) 7 (52·2% [25·1–80·8]) 281 (19·2% [17·0–21·0]) 486 (20·3% [18·3–21·7])
sedación terminal

Desconocido 2 (0·7% [0·1–2·7]) 8 (1·7% [1·0–3·7]) 1 (3·8% [0·1–21·1]) 1 (5·5% [0·1–36·3]) 269 (17·8% [16·0–20·0]) 355 (13·9% [12·5–15·4])

Los datos son el número absoluto de pacientes (% ponderado [IC del 95%]). Los porcentajes se ponderan por fracciones de muestreo, falta de respuesta y desviaciones de muestreo aleatorio, para que sean representativos de todas las muertes
en el año estudiado. Por lo tanto, los porcentajes presentados no pueden derivarse de los números absolutos no ponderados presentados. *Las drogas podrían haber sido relajantes neuromusculares, en cualquier combinación; barbitúricos,
solos o en combinación con otras drogas excepto relajantes neuromusculares; la combinación de benzodiazepinas y opioides posiblemente en combinación con otras drogas excepto relajantes neuromusculares o barbitúricos; benzodiazepinas
solas o en combinación con otras drogas excepto relajantes neuromusculares, barbitúricos y opioides; u otras drogas además de las mencionadas anteriormente. †No se preguntó por separado para el alivio insensibilizado de los síntomas.

Tabla 3:Características de la eutanasia o suicidio médico asistido, terminación de la vida sin petición expresa y alivio intensificado de los síntomas, en 2005 y 2010

www.thelancet.comVol. 380 8 de septiembre de 2012 911

 Artículos

eutanasia (del 4·8% [95% IC 4·4–5·2; 503 de 9965] de todas las
muertes encuestadas en 2005 al 6·7% [6·1–7.3; 766 de 6861] en
2010) y el proporción de solicitudes que fueron concedidas (del
37% [252 de 503] al 45% [496 de 766] de solicitudes). La
frecuencia de finalización de la vida sin una solicitud explícita del
paciente disminuyó a lo largo de los años (del 0,8 % [95 % IC 0,6–
1,1; 45 de 5197] de todas las muertes en 1990 al 0,2 % [0· 1–0·3%;
13 de 6861] en 2010). Si bien la frecuencia de abandono del
tratamiento para prolongar la vida se mantuvo relativamente
estable a lo largo de los años, la frecuencia de intensificación del
alivio de los síntomas aumentó, especialmente entre 2005 y 2010.
El porcentaje de todos los casos en los que los médicos
intensificaron el alivio de los síntomas, en lugar de
No informado (n=45) Reportado (n=443) Total (n=496)*
que solo los casos en los que esa acción fue más importante, fue
del 30 % (29–31; 1832 de 5617) en 2005 y del 45 % (44–46; 2777
de 6861) en 2010. Para la renuncia al tratamiento, el porcentaje
de todos los casos en qué tratamiento se omitió, por lo tanto,
también cuando este factor no era el más importante, fue del 28
% (IC 95 % 27–29; 1434 de 5617) en 2005 y del 37 % (36–39; 2103
de 6861) en 2010 (datos no incluidos). mostrado).
También vimos un aumento de la sedación profunda continua
hasta la muerte. Una pequeña proporción de pacientes en 2010
había acelerado intencionalmente la muerte al dejar de comer y
beber (tabla 1). Un análisis posterior mostró que en el 0,2% (siete
de 6861) de todas las muertes, los pacientes habían dejado de
comer y beber intencionalmente después de una solicitud de
eutanasia no concedida. Otro 0,04% (13 de 6861) se había
suicidado con drogas u otro método después de una solicitud de

Años de edad)
eutanasia no concedida. Por lo tanto, en el 7% (20 de 270) de las
muertes en las que el paciente había solicitado la eutanasia sin
0–64 14 (20·5% [9·5–34·6]) 174 (38·1% [33·4–42·4]) 191 (34·8% [30·9–39·3])
ser concedida, el paciente aceleró la muerte por sí mismo (datos
65–79 18 (47·3% [31·7–62·1]) 170 (39·4% [34·5–43·6]) 191 (40·7% [36·6–45·3])
no mostrados).
≥80 13 (32·2% [18·2–46·6]) 99 (22·5% [18·0–25·7]) 114 (24·5% [21·2–28·8])
La eutanasia y el suicidio asistido por un médico afectan
Sexo
con mayor frecuencia a personas jóvenes, pacientes con
Masculino 24 (53·7% [37·9–68·3]) 254 (58·1% [53·4–62·6]) 281 (57·2% [52·7–61·4])
cáncer y pacientes atendidos por médicos generales (tabla
Femenino 21 (46·3% [31·7–62·1]) 189 (41·9% [37·4–46·6]) 215 (42·8% [38·6–47·3])
2). La disminución de la frecuencia de finalización de la vida
Causa de la muerte
sin petición expresa del paciente es más pronunciada en
Cáncer 36 (63·4% [46·5–76·2]) 371 (83·1% [79·6–86·6]) 415 (79·1% [75·4–82·6]
personas menores de 65 años, donde disminuyó entre 2001
Enfermedad cardiovascular 2 (9·8% [3·7–24·1]) 13 (2·5% [1·6–5·0]) 15 (4·0% [2·5–6·2])
y 2010, y entre especialistas clínicos (tabla 2). Para el alivio
Otro/desconocido 7 (26·8% [14·6–41·9]) 59 (14·4% [10·8–17·2]) 66 (16·9% [13·6–20·2])
intensificado de los síntomas, el aumento se observó
tipo de medico
consistentemente en todos los grupos de pacientes.
medico general 36 (71·4% [55·7–83·6]) 408 (92·5% [90·2–95·2]) 269 (88·1% [85·0–90·8])
Las razones más importantes para que el médico acceda a las solicitudes de eutanasia que se mencionaron con mayor

especialista clinico 2 (23·8% [12·9–39·5]) 14 (4·4% [2·4–6·3]) 7 (8·4% [5·8–10·8])

frecuencia en 2010 fueron el deseo del paciente (85% [420 de 496]; 82% [219 de 262] en 2005), ninguna perspectiva de mejora

medicos de ancianos 7 (4·8% [0·5–15·2]) 21 (3·1% [1·6–5·0]) 35 (3·5% [2·5–6·2])

( 82% [405 de 496]; 85% [223 de 262] en 2005), no más opciones de tratamiento (73% [370 de 496]; no preguntado en 2005) y

drogas
pérdida de dignidad (61% [311 de 496] ]; 60% [164 de 262] en 2005). Entre 2005 y 2010 no se observaron diferencias claras en el

relajantes neuromusculares 1 (<0·1%) 386 (90·2% [86·9–92·7]) 392 (72·2% [68·0–75·9])

porcentaje de casos en los que el médico discutió las decisiones del final de la vida con el paciente, familiares y otros médicos.

barbitúricos 1 (<0·1%) 36 (9·8% [7·3–13·1]) 37 (7·9% [5·8–10·8])

Tanto en 2005 como en 2010, la mayoría de los casos de eutanasia y suicidio asistido por médicos se realizaron con relajantes

Benzodiazepinas 28 (66·7% [51·0–80·0]) 0 28 (13·3% [10·0–15·9]) neuromusculares y barbitúricos. Ocurrió una disminución no significativa en el uso de estos medicamentos para terminar la vida
y opioides
sin solicitud explícita (de 29,4% [IC 95% 14,9–49,4; siete de 24] a 1·6% [0·1–31·0; uno de 13]). El alivio intensificado de los síntomas
Benzodiazepinas 7 (15·4% [6·5–29·4]) 0 7 (3·0% [1·7–4·9])
se hizo más comúnmente con una combinación de benzodiazepinas y opioides en 2010 que en 2005 (tabla 3). No se observaron
opioides 5 (15·4% [6·5–29·4]) 0 5 (3·1% [1·7–4·9])
diferencias claras entre los años en el grado estimado en que las decisiones sobre el final de la vida habían acortado la vida. En
Otro 1 (2·5% [0·1–11·8]) 1 (<0·1%) 2 (0·5% [0·3–2·3])
2010, se estimó que la eutanasia y el suicidio asistido por un médico acortaron la vida del paciente en una semana o más en el 58

Acortamiento de la vida
% (322 de 496) de los casos, en comparación con el 9 % (uno de 13) para terminar con la vida sin una solicitud explícita y 3% (61 de

Probablemente sin vida 1 (2·6% [0·1–11·8]) 0 1 (0·4%)

2202) para el alivio intensificado de los síntomas. En más de la mitad de todos los casos de alivio intensificado de los síntomas, el
acortamiento
médico estimó que la vida no se había acortado; El alivio intensificado de los síntomas se hizo más comúnmente con una
Menos de una semana 39 (87·0% [73·2–94·9]) 126 (28·2% [23·8–32·2]) 166 (40·3% [35·6–44·2])
combinación de benzodiazepinas y opioides en 2010 que en 2005 (tabla 3). No se observaron diferencias claras entre los años en el
Una semana o más 5 (10·4% [3·7–24·1]) 315 (71·3% [66·9–75·3]) 322 (58·0% [53·7–62·4])
grado estimado en que las decisiones sobre el final de la vida habían acortado la vida. En 2010, se estimó que la eutanasia y el
Desconocido 0 2 (0·6% [0·3–2·3]) 7 (1·3% [0·3–2·3])
suicidio asistido por un médico acortaron la vida del paciente en una semana o más en el 58 % (322 de 496) de los casos, en
Término más apropiado para el acto según médico
comparación con el 9 % (uno de 13) para terminar con la vida sin una solicitud explícita y 3% (61 de 2202) para el alivio
Eutanasia o 0 432 (97·4% [95·0–98·4]) 412 (76·7% [73·3–80·7])
intensificado de los síntomas. En más de la mitad de todos los casos de alivio intensificado de los síntomas, el médico estimó que
suicidio asistido
la vida no se había acortado; El alivio intensificado de los síntomas se hizo más comúnmente con una combinación de
final de la vida 1 (2·5% [0·1–11·8]) 8 (1·6% [0·9–3·8]) 9 (2·0% [1·0–3·7])
benzodiazepinas y opioides en 2010 que en 2005 (tabla 3). No se observaron diferencias claras entre los años en el grado estimado
Alivio de los síntomas 2 (7·5% [2·5–21]) 0 2 (1·5% [1·0–3·7])
en que las decisiones sobre el final de la vida habían acortado la vida. En 2010, se estimó que la eutanasia y el suicidio asistido por
paliativo o 4 (90·0% [2·5–21·2]) 2 (0·7% [0·3–2·3]) 44 (18·1% [14·6–21·3])
un médico acortaron la vida del paciente en una semana o más en el 58 % (322 de 496) de los casos, en comparación con el 9 %
sedación terminal
(uno de 13) para terminar con la vida sin una solicitud explícita y 3% (61 de 2202) para el alivio intensificado de los síntomas. En

Los datos son el número absoluto de pacientes (% ponderado [IC del 95%]). Todos los porcentajes están ponderados para fracciones de
más de la mitad de todos los casos de alivio intensificado de los síntomas, el médico estimó que la vida no se había acortado; Se
muestreo, falta de respuesta y desviaciones de muestreo aleatorio, para que sean representativos de todas las muertes en los Países Bajos
estimó que la eutanasia y el suicidio asistido por un médico acortaron la vida del paciente en una semana o más en el 58% (322 de
en 2010. Por lo tanto, los porcentajes presentados no pueden derivarse de los números absolutos no ponderados presentados. *Para ocho
casos, no se sabía si el médico había informado el caso a un comité de revisión de eutanasia. 496) de los casos, en comparación con el 9% (uno de 13) para terminar con la vida sin una solicitud explícita y el 3% ( 61 de 2202)

para el alivio intensificado de los síntomas. En más de la mitad de todos los casos de alivio intensificado de los síntomas, el médico
Tabla 4:Características de los casos notificados y no notificados de eutanasia y suicidio asistido por un médico
estimó que la vida no se había acortado; Se estimó que la eutanasia y el suicidio asistido por un médico acortaron la vida del paciente en una semana o más en el 5

912 www.thelancet.comVol. 380 8 de septiembre de 2012


se trata de un pequeño aumento en comparación con 2005 (tabla 3).
Finalmente, en 2010, de todos los médicos que habían indicado en el
cuestionario haber tomado una decisión al final de la vida que se
clasificó como eutanasia o suicidio asistido por un médico, la mayoría
clasificó como “eutanasia”, “suicidio asistido” o “final de la vida”. vida”
el término más apropiado para su acto, seguido de “sedación paliativa
o terminal”; estas clasificaciones son comparables con 2005. En 2010,
el final de la vida sin una solicitud explícita del paciente nunca se
etiquetó como “final de la vida” (en 2005, alrededor de una quinta
parte de los casos se clasificaron como “final de la vida”); se etiquetó
mayoritariamente como “sedación paliativa o terminal” o “alivio de los
síntomas” (tabla 3).
El número absoluto de casos de eutanasia o suicidio
asistido por un médico en 2010 fue de aproximadamente
4050. En 2010, 3136 (77%) casos de eutanasia o suicidio
asistido por un médico fueron informados a los comités
de revisión de eutanasia en los Países Bajos.14En nuestro
cuestionario también preguntamos si los médicos habían
informado su acto a un comité de revisión de eutanasia.
Con estos datos se calculó una tasa de notificación
similar (tabla 4). La tasa de notificación en 2010 es
comparable con la tasa de notificación de 2005 (80 %;
1933 de 2425) y superior a la tasa de notificación antes
de la promulgación de la ley (18 % [486 de 2700] en 1990;
41 % [1466 de 3600 ] en 1995, y 54% [2054 de 3800] en
2001). En los casos no informados los fármacos utilizados
casi nunca fueron relajantes neuromusculares o
barbitúricos y el término más adecuado según el médico
nunca fue “eutanasia” o “suicidio asistido” (tabla 4).
Además, en los casos en los que el médico había
informado a un comité de revisión de eutanasia, el
acortamiento estimado de la vida fue más a menudo de
una semana o más que en los casos no informados (tabla
4).
Discusión
Después de la modesta disminución en la frecuencia de la eutanasia 3
años después de la promulgación de la ley de eutanasia, vimos un
aumento 8 años después de la promulgación. Un aumento en el
número de pacientes que solicitan la eutanasia explica en parte este
aumento. Si bien más de la mitad de estas solicitudes no fueron
concedidas, los médicos las concedieron con más frecuencia en 2010
que en 2005. Dado que no se produjeron diferencias en las
características de los pacientes en los casos de eutanasia y suicidio
asistido por médicos, el aumento parece no deberse a la expansión a
otros grupos de pacientes. .
La eutanasia todavía se realiza principalmente en personas
más jóvenes, pacientes con cáncer y en la práctica general en
lugar de hospitales u hogares de ancianos. Dado que la tasa de
eutanasia y suicidio asistido por médicos en 2010 era comparable
con la tasa antes de la promulgación de la ley en 2001, es posible
que algunos médicos no estuvieran seguros de cómo funcionaría
la ley en la práctica, en 2005, poco después de la promulgación
de la ley. , haciéndolos más reacios a realizar la eutanasia. En
Bélgica, la tasa de eutanasia disminuyó del 1,1% en 1998 al 0,3%
en 2001, poco antes de la promulgación de una ley de eutanasia
en 2002, aumentando
www.thelancet.comVol. 380 8 de septiembre de 2012
Artículos
de nuevo al 1,9% en 2007. 15Aunque en Bélgica la
aumento se produjo justo antes de la promulgación de la ley,
esta tendencia podría representar un fenómeno similar al de
los Países Bajos porque en Bélgica la ley de eutanasia fue
muy debatida antes de su promulgación. dieciséis
Después de la publicación del estudio holandés de 1990, 13 el tema
que suscitó más debate internacional fue el número de casos de
terminación de la vida sin petición expresa del paciente (panel).
18,19 La frecuencia de esta práctica ha ido disminuyendo desde
entonces. Una de las razones de esta disminución podría ser la
mayor atención a los cuidados paliativos durante la última
década,20,21Además, esta disminución podría estar relacionada
con la regulación de la eutanasia y el suicidio asistido por un
médico, al permitir que los pacientes y los médicos discutan
abiertamente las preferencias al final de la vida. En Bélgica,
donde se promulgó una ley de eutanasia en 2002, la tasa de
finalización de la vida sin solicitud fue mayor en 1998 (3,2 %) que
en 2001 (1,5 %) y 2007 (1,8 %). En el Reino Unido, la tasa de 15 En
finalización de la vida sin solicitud se mantuvo estable entre 2004
y 2008 (0,3 %).22Si bien existe un debate en el Reino Unido sobre
la regulación de la muerte asistida, no existe ninguna ley sobre la
eutanasia o el suicidio asistido por un médico en el Reino Unido.
No obstante la disminución de la terminación de la vida sin
solicitud expresa, la información sobre las características de
estos casos es importante para evaluar esta práctica. Aunque los
números absolutos son pequeños, en la mitad de estos casos la
decisión se discutió con el paciente y en una cuarta parte de los
casos el médico no discutió la decisión con el paciente, familiar u
otros médicos.
La frecuencia del alivio intensificado de los síntomas ha
aumentado, especialmente entre 2005 y 2010. Este hallazgo es
inesperado porque la evidencia muestra que los efectos de los
opioides que acortan la vida a menudo se sobreestiman. Sin 23–25
embargo, en más de la mitad de los casos en los que se aliviaron
los síntomas teniendo en cuenta un posible efecto de
acortamiento de la vida, el médico pensó que la vida en realidad
no se había acortado. Por lo tanto, el conocimiento sobre el
potencial limitado de los opioides para acortar la vida podría
haber eliminado la renuencia de los médicos y los pacientes a
usar opioides. Este efecto probablemente esté relacionado con
una mayor atención a los cuidados paliativos en los Países Bajos,
lo que también podría explicar el aumento del uso de la sedación
profunda continua hasta la muerte.20,21Este hallazgo está en línea
con los resultados de un estudio en hogares de ancianos
holandeses que muestran un aumento en el uso de analgésicos y
ningún cambio en el tratamiento con antibióticos de pacientes
con demencia y neumonía durante una década.26En Bélgica, un
aumento en el alivio intensificado del dolor y los síntomas y en la
sedación profunda continua también coincidió con una mayor
atención a los cuidados paliativos.15En el Reino Unido, se observó
una disminución en el uso del alivio intensificado de los síntomas,
del 30 % en 2004 al 22 % en 2008. Sin embargo, es discutible si
estas tasas son comparables porque en 2004 la redacción de los
cuestionarios era similar a la redacción de nuestros estudios
(teniendo en cuenta el posible efecto de acortamiento de la vida),
mientras que en 2008 la redacción era diferente (conocimiento
de probable o cierta aceleración de la vida).20
913
 Artículos
Panel:Investigación en contexto
Revisión sistemática
Los Países Bajos, Bélgica y Luxemburgo son los únicos países del mundo donde se permite legalmente
que un médico ponga fin a la vida de un paciente a pedido explícito del paciente, si se cumplen
criterios estrictos. La asistencia médica en el suicidio de un paciente está legalmente permitida,
también bajo condiciones estrictas, en Suiza y en algunos estados de los EE. UU. Se realizaron
búsquedas en las bases de datos de PubMed y Medline para obtener informes sobre la frecuencia del
uso de la eutanasia y el suicidio asistido por un médico y las principales características de fondo de
estas prácticas. Utilizamos los términos de búsqueda “eutanasia”, “suicidio asistido”, “epidemiología”,
“incidencia” y “frecuencia”. Nuestra búsqueda se limitó a artículos publicados en inglés durante los
últimos 10 años, que presentaran estudios sobre la asistencia médica en la muerte en adultos.
Interpretación
Los estudios de países donde la eutanasia y el suicidio asistido por un médico no son legales se
centran principalmente en las actitudes de los profesionales de la salud hacia la toma de decisiones al
final de la vida y la asistencia médica para morir. En estos estudios, el término eutanasia no siempre
se refiere a la práctica de un médico que termina con la vida de un paciente a pedido explícito de este.
Las frecuencias y las principales características de fondo de la participación de los médicos en acabar
con la vida de sus pacientes a pedido explícito durante los últimos 10 años se han estudiado en los
Países Bajos, EE. UU., Reino Unido, Bélgica, Alemania y en un estudio internacional que incluyó Suecia,
Dinamarca , Países Bajos, Bélgica, Suiza, Italia y Australia (estudio Eureld).17La frecuencia de esta
práctica varía entre países, con las tasas más altas en países donde es legal. En todos los países, esta
práctica involucra principalmente a pacientes con cáncer incurable que se encuentran en la etapa final
de su enfermedad. Mientras que en los Países Bajos la eutanasia y el suicidio asistido por un médico
son realizados principalmente por médicos generales en pacientes que se están muriendo en el
hogar, la asistencia médica en la muerte es una práctica más basada en el hospital en otros países. La
frecuencia de que los médicos pongan fin a la vida de un paciente en ausencia de una solicitud
explícita no parece aumentar en los países donde la eutanasia está legalizada.
Notamos que en 2010, según su médico, en el 0,4% (18 de
6861) de todas las muertes, el paciente había dejado de comer y
beber intencionalmente. Esto es sustancialmente más bajo que la
tasa registrada en un informe indirecto en una encuesta basada
en la población holandesa en 2009.27Los médicos no siempre son
conscientes de que los pacientes dejan de comer y beber de
forma intencionada. La encuesta mostró que en el 72% de los
casos la persona que dejaba de comer y beber tenía un
diagnóstico de enfermedad. Sin embargo, una muestra de
personas fallecidas podría arrojar estimaciones más precisas de
las prácticas al final de la vida que una muestra de
representantes basada en la población. Notamos que en casi la
mitad de los pacientes que dejaron de comer y beber
intencionalmente, habían solicitado la eutanasia que no fue
concedida, que es un porcentaje similar al informado en la
encuesta de proxy. Si bien esta proporción es sustancial, es una
minoría de todos los pacientes fallecidos cuya solicitud no resultó
en la eutanasia. Un grupo aún más pequeño se suicidó después
de que no se concediera su solicitud de eutanasia. No tenemos
conocimiento de estudios de pacientes que terminen
intencionalmente con su vida en el curso de una enfermedad
grave en otros países. Sería interesante saber si la opción legal
de la eutanasia o el suicidio asistido por un médico influye en
estas tasas.
8 años después de la promulgación de la ley de eutanasia
el porcentaje de casos que fueron reportados a la revisión
914
comités, que es una obligación legal, se estabilizó. En los casos
no informados, prácticamente todos los médicos calificaron su
decisión como “sedación paliativa o terminal” o como “alivio de
los síntomas”, y ninguno de ellos usó relajantes neuromusculares
o barbitúricos. Por el contrario, en los casos informados,
prácticamente todos los médicos etiquetaron su acto como
"eutanasia" o "suicidio asistido", y todos usaron relajantes
neuromusculares o barbitúricos, los medicamentos
recomendados para llevar a cabo la eutanasia o el suicidio
asistido por la Real Asociación Holandesa de Farmacia y por los
comités de revisión de eutanasia. Estas características de los
casos no informados han llevado a algunos a argumentar que los
casos de eutanasia en los que se usaron opioides no deberían
incluirse en la tasa de eutanasia.28Si se excluyen los casos no
informados, la tasa de notificación sería de alrededor del 100 %,
tanto en 2005 como en 2010. Sin embargo, el uso de opioides
solo se clasificó como eutanasia cuando los médicos afirmaron
que la muerte se debió a la administración de este fármaco con
la intención de acabar con la vida. No se puede descartar la
aceleración de la muerte por la administración de opioides en
estos casos. Obviamente, es más probable que el esquema de
clasificación utilizado en nuestros estudios resulte en una
sobreestimación que en una subestimación de la frecuencia de
eutanasia. En cualquier caso, nuestro hallazgo de que
aproximadamente el 100% de los casos en los que se usaron los
medicamentos recomendados fueron informados sugiere que la
falta de notificación por parte de los médicos no está relacionada
con la falta de voluntad para informar los casos de eutanasia.
Este hallazgo parece más relacionado con la falta de claridad o la
discrepancia entre los efectos de las drogas y la intención con
respecto a acelerar la muerte.
Junto con las altas tasas de respuesta y la
disponibilidad de datos durante más de dos décadas,
una fortaleza importante del estudio es la muestra
sustancial de muertes que es representativa de todas
las muertes en todos los entornos a nivel nacional.
Una limitación es que la información se deriva de los
médicos, lo que nos hace confiar en la evaluación de
la situación por parte de los médicos. Si bien este
enfoque es la mejor fuente de información sobre las
experiencias de los médicos, como la intención de los
médicos o el término más apropiado para la decisión
según el médico, puede ser más difícil para los
médicos evaluar el efecto de acortamiento de la vida
de los medicamentos. Además, los médicos pueden
dar respuestas socialmente deseables. Sin embargo,14
Finalmente, nuestro estudio no permite evaluar la
calidad de la atención ni la toma de decisiones a nivel
del paciente. Por ejemplo, no es posible evaluar si el
control de los síntomas fue suficiente. La fortaleza de
nuestro estudio radica en proporcionar información a
nivel de población relevante para la política de salud.
En conclusión, 8 años después de la promulgación de la ley
de eutanasia holandesa, la incidencia de la eutanasia y el
suicidio asistido por un médico es comparable con la del
período anterior a la ley. La tasa de notificación parece haber
www.thelancet.comVol. 380 8 de septiembre de 2012

se estabilizó en alrededor de ocho de cada diez casos. La
eutanasia y el suicidio asistido por un médico no cambiaron a
diferentes grupos de pacientes y la frecuencia de poner fin a la
vida sin una solicitud explícita siguió disminuyendo. Aunque
traducir estos resultados a otros países no es sencillo, pueden
informar el debate sobre la legalización de la eutanasia o el
suicidio asistido por un médico en otros países.
Colaboradores
BDO-P, JJMvD y AvdH diseñaron el estudio. BDO-P escribió el informe. CP y
GJFdJ-K recogieron los datos. BDO-P, AB-S, CP y GJFdJ-K analizaron los
datos. Todos los autores interpretaron los datos. CP, GJFdJ-K, JJMvD y AvdH
revisaron críticamente el informe.
Conflictos de interés
Declaramos que no tenemos conflictos de interes.
Referencias
1 Rodin G, Zimmermann C, Rydall A, et al. El deseo de muerte acelerada en
pacientes con cáncer metastásico.J Control de síntomas de dolor 2007;33:
661–75.
2 Breitbart W, Rosenfeld B, Pessin H, et al. Depresión, desesperanza y
deseo de muerte acelerada en pacientes terminales con cáncer. JAMA
2000;284:2907–11.
3 Finlay I, Wheatley V, Izdebski C. El proyecto de ley de muerte asistida propuesto en el
Reino Unido: una respuesta a Lord Joffe.Palliat Med2006;20:115–16.
4 Pereira J. Legalizar la eutanasia o el suicidio asistido: la ilusión de
salvaguardas y controles.curr oncol2011;18:e38-45.
5 Ferrand E, Rondeau E, Lemaire F, Fischler M. Solicitudes de
eutanasia y cuidados paliativos en Francia.Lanceta2011;377:467–68.
6 Levene IR. ¿La legislación protege a los vulnerables?CMAJ2010;182:1330.
7 Bosshard G, Broeckaert B, Clark D, Materstvedt LJ, Gordijn B, Müller-Busch
HC. ¿Un papel para los médicos en la muerte asistida? Un análisis de las
regulaciones legales y las posiciones profesionales médicas en seis países
europeos.J Med Ética2008;34:28–32.
8 Delbeke E. La forma en que se legaliza el suicidio asistido: equilibrar
un marco médico frente a un modelo desmedicalizado.
Eur J Ley de Salud2011;18:149–62.
9 van der Heide A, Onwuteaka-Philipsen BD, Rurup ML, et al. Prácticas
al final de la vida en los Países Bajos bajo la Ley de Eutanasia. N
Inglés J Med2007;356:1957–65.
10 Onwuteaka-Philipsen BD, van der Heide A, Koper D, et al.
Eutanasia y otras decisiones al final de la vida en los Países Bajos
en 1990, 1995 y 2001.Lanceta2003;362:395–99.
11 van der Wal G, van der Maas PJ, Bosma JM, et al. Evaluación del
procedimiento de notificación de muerte asistida por un médico en los
Países Bajos.N Inglés J Med1996;335:1706–11.
www.thelancet.comVol. 380 8 de septiembre de 2012
Artículos
12 van der Maas PJ, van der Wal G, Haverkate I, et al. Eutanasia y otras
decisiones al final de la vida en los Países Bajos 1990–1995.
N Inglés J Med1996;335:1699–705.
13 Van Der Maas PJ, Van Delden JJM, Pijnenborg L, Looman CWN.
Eutanasia y otras decisiones médicas relativas al final de la vida.
Lanceta1991;338:669–74.
14 Comités Regionales de Revisión Eutanasia. Informe anual 2010. La Haya:
Comités regionales de revisión de eutanasia, 2011 [en holandés].
15 Bilsen J, Cohen J, Chambbaere K, et al. Prácticas médicas al final de la vida
bajo la ley de eutanasia en Bélgica.N Inglés J Med2009; 361:1119–21.
dieciséis Deliens L, van der Wal G. La ley de eutanasia en Bélgica y los Países
Bajos.Lanceta2003;362:1239-1240.
17 van der Heide A, Deliens L, Faisst K, et al, en representación del consorcio
EURELD. Toma de decisiones al final de la vida en seis países europeos:
estudio descriptivo.Lanceta2003;362:345–50.
18 Diez tienen HA, Welie JVM. Eutanasia: ¿práctica médica normal? Representante
de Hastings Cent1992;22:34–38.
19 Fleming JI. Eutanasia, Holanda y pendientes resbaladizas. Notas
de Bioeth Res1992;4:1–4.
20 Gordijn B, Janssens R. Eutanasia y cuidados paliativos en los
Países Bajos: un análisis de los últimos avances.
cuidado de la salud anal2004;12:195–207.
21 Dyer C. La legalización de la muerte asistida no daña los cuidados paliativos,
concluye un estudio.BMJ2011;343:d6779.
22 Seale C. Decisiones al final de la vida en el Reino Unido que
involucran a médicos.Palliat Med2009;23:198–204.
23 Morita T, Tsunoda J, Inoue S, Chihara S. Efectos de dosis altas de opioides
y sedantes en la supervivencia de pacientes con cáncer terminal. J Control
de síntomas de dolor2001;21:282–89.
24 Sykes N, Thorns A. El uso de opioides y sedantes al final de la vida.
Oncol lanceta2003;4:312–18.
25 Good PD, Ravenscroft PJ, Cavenagh J. Efectos de los opioides y los sedantes sobre la
supervivencia en una población australiana de cuidados paliativos para pacientes
hospitalizados.Pasante Med J2005;35:512–17.
26 van der Steen JT, Meuleman-Peperkamp I, Ribbe MW. Tendencias en el
tratamiento de la neumonía entre pacientes holandeses de hogares de
ancianos con demencia.J Palliat Med2009;12:789–95.
27 Chabot BE, Goedhart A. Una encuesta sobre la muerte autodirigida a la que asistieron
representantes en la población holandesa.Ciencias Sociales Med2009;68:1745–51.
28 den Hartogh G. Datos misteriosos: la tasa de informes no puede aumentar
más.Contacto médico (Bussum)2003;58:1063–66.
915