25/08/2022 La interpretación judicial muestra, el derecho en movimiento, y nos enseña si un orden jurídico en su totalidad regula convenientemente o no las relaciones sociales y económicas de una sociedad. Además, toda ley está destinada a ser aplicada a los casos concretos.
Las leyes son normas abstractas y necesitan adaptarse a las condiciones
particulares de los casos. La confusión aparece porque en el artículo 27 del Código Civil se establece que si el "contenido es claro" se debe aplicar sin más valoraciones y porque el legislador no ha preceptuado como se llega a esa conclusión. Ese equívoco desaparece si se comprende, de una parte, que el legislador no dice. Y no tiene por qué decirlo ya que se subentiende, que los jueces deben hacer un proceso de interpretación, y, de otra, si se considera que la norma le dice al intérprete que una vez concluya sobre la suficiente claridad de la norma.
No le es permitido hacer modificaciones o correctivos a ese tenor literal, por
cuanto si ha cumplido su función, toda otra actividad es innecesaria, excedería sus competencias y vulneraría las del legislador, quien puede imponer límites a ese proceso. En síntesis, razones lógicas y jurídicas enseñan que, si la interpretación gramatical es suficiente para determinar la ratio legis, ya se conoce su sentido, fin y alcance, y por eso el proceso de interpretación termina. Interpretación legislativa. X si admitimos que la interpretación representa el tránsito de lo general a lo singular, debemos concluir que en ningún caso el legislador puede interpretar las leyes.
Pero si una ley es oscura o de ella se hacen aplicaciones incorrectas, bien
puede el legislador aclarar su sentido por vía de disposición general. Pero en estos casos no se trata de una auténtica interpretación, sino de la elaboración de una nueva ley. El legislador puede derogar las leyes inconvenientes y reemplazar las oscuras. Ejemplo de estas leyes es la 97 de 1993 que interpretó la ley 20 de 1969, en materia de yacimientos descubiertos.
También debe diferenciarse de la interpretación que está a cargo de la
Corte
En el segundo, en sede de revisión determina si en su decisión los jueces que
han conocido de una acción de tutela han proferido una adecuada y justa protección de los derechos fundamentales de quien la ejerció. La parte resolutiva de las sentencias proferidas por vía de control abstracto y la ratio decidendi son de obligatorio cumplimiento y tienen efectos erga omnes y de cosa juzgada constitucional. Las decisiones en los fallos de tutela surten efectos intérpretes y pueden tener carácter de precedente judicial, puesto que no sólo la Corte Suprema de Justicia como tribunal de casación, crea hoy, con sus fallos, pautas plausibles de orientación a los tribunales y jueces de niveles subalternos.
La Corte Constitucional. " Además, no resulta justificado ni razonable, en la
actualidad, circunscribir la jurisprudencia al campo del derecho común ni atribuir solo al recurso de casación la virtud de generarla". Para obviar este grave peligro de la dispersión de la ley, que acarrearía la inseguridad en los negocios jurídicos, existen unos principios y un poder central y jerárquico encargado de dirigir y controlar la interpretación uniforme de las leyes. Esa función en materia de las decisiones de los jueces de la jurisdicción ordinaria, procesos en los que se debaten controversias de derecho civil, comercial, laboral y penal, está a cargo de la Corte Suprema de Justicia.
El precedente judicial en materia civil,-Las interpretaciones sucesivas y
uniformes de la Sala de Casación Civil suelen adquirir fuerza obligatoria, semejante a la de la ley, y se imponen a los jueces y tribunales, pues aun-que la ley les da libertad para apartarse de ellas, no obstante la Sala garantiza su imperio mediante posteriores interpretaciones. De ahí que al lado del derecho que contienen las leyes exista el derecho jurisprudencial, que indica el derecho que efectivamente se practica y el cual es necesario conocer de manera preferente.
"La Corte Constitucional en sentencia C-836 de 2001, declaró exequible la
norma citada, pero condicionada a que "se entienda que la Corte Suprema de Justicia, como juez de casación y los demás jueces que conforman la jurisdicción ordinaria al apartarse de la doctrina probable dictada por aquella. "Están obligados a exponer clara y razonadamente los fundamentos jurídicos que justifican su decisión, en los términos" de la ratio decidendi de ese fallo.
" su decisión". También debe hacerlo si cambia su propia interpretación. La
obligatoriedad de los precedentes judiciales según la Corte Constitucional. Para proteger la igualdad, la confianza legítima y la misma seguridad jurídica, el precedente judicial ha venido tomando carácter de vinculante sin diferenciar la materia o asunto de que se trate. En los términos de la sentencia citada para, de manera excepcional y justificada, apartarse de dicho precedente.
En conclusión, no se puede identificar todo el derecho con la ley. La interpretación judicial nos muestra, pues, el derecho en movimiento, y nos enseña si un orden jurídico en su totalidad regula convenientemente o no las relaciones sociales y económicas de un pueblo. Además, toda ley está destinada a ser aplicada a los casos concretos. es determinar su alcance y contenido para ir de lo general a lo particular" Las leyes son normas abstractas y necesitan adaptarse a las condiciones particulares de los casos. grave error que confunde el conocimiento de la ley con su aplicación. no le es permitido hacer modificaciones o correctivos a ese tenor literal, por cuanto si ha cumplido su función, toda otra actividad es innecesaria, excedería sus competencias y vulneraría las del legislador, quien puede imponer límites a ese proceso. En efecto, la oscuridad es una imperfección de la ley, y para buscar el remedio es preciso estudiarla en su estado normal Sin embargo, al lado de esta clase de interpretación están otras que realiza el intérprete por las funciones a su cargo o por su actividad profesional o por su propia iniciativa; Por consiguiente, existen tres clases de interpretación: la legislativa, la judicial y la doctrinal. Planteamiento del problema de la interpretación:
Primero es saber cuáles son las normas existentes. Para dilucidar este primer nivel nos sirve la teoría de las fuentes del derecho
Una vez hemos definido las normas aplicables
Tenemos un segundo nivel de problemas que consiste en saber que dicen
esas normas jurídicas. A este efecto nos sirve la teoría de la norma jurídica
Superado los dos niveles anteriores, nos encontramos con
Un tercero que consiste en averiguar exactamente que quiere decir la
norma. Este nivel debe de ser abordado mediante la teoría de interpretación
La teoría de la interpretación jurídica, de esta manera, es parte de la teoría
general del derecho destinada a desentrañar el significado último del contenido de las normas jurídicas cuando su sentido normativo no queda claro a partir del análisis lógico-jurídico interno de la norma.
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