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LA CONQUISTA

BASES JURÍDICAS DE LA CONQUISTA


Conceptos preliminares: El repartimiento y la encomienda

Repartimiento: mediante esta figura cada español tenía derecho a recibir un número
determinado de indios para realizar trabajos personales, pero no como esclavos ni
encomendados, sino mediante el pago de un salario. El trabajo que podan prestar era el
de sirvientes, en las labores agrícolas, pastoreo, manejo de trapiches, minas, etc.

Encomienda: a través de ella el rey autorizaba al encomendero a aprovechar el trabajo de


un grupo de indios, a cambio de evangelizarlos y educarlos. Además, los indios debían
pagarle tributo al encomendero. Las familias indígenas enteras quedaron sometidas al
poder del encomendero, quien en muchas ocasiones les dio un trato más cruel que el de
la esclavitud.

Los justos títulos en las Bulas Alejandrinas

El Tratado de Alcacovas Se firmó en 1487 a raíz de la derrota de Portugal que dejo a este
reino en el disfrute de sus descubrimientos en las costas de África por lo que pudo
continuar explorando este territorio o ruta que conduce a la India. El tratado de Tordesillas
Después de Alcacovas se expidieron las cuatro bulas alejandrinas que beneficiaban todas
a Castilla, Portugal quedo inconforme con el contenido de estas bulas y negocio por la vía
diplomática una modificación a su favor en lo referente a la línea alejandrina, que lo
privaba de participar en la ruta occidental, ante el temor de una intervención armada
portuguesa, que complicara notablemente el avance haca las tierras recién descubiertas
el 7 de junio de 1494. Se firmó el Tratado de Tordesillas entre ambos pases que modifica
la línea alejandrina para fijarla a 370 leguas de las islas Azores y Cabo Verde. Portugal
ganó una extensión de 270 leguas lo que luego le permite tomar posesión de Brasil como
colonia portuguesa. E tratado de Tordesillas modificaba el de Alcacovas y requirió de una
confirmación papal. Los justos títulos son documentos legales que justifican el
apoderamiento de los territorios descubiertos y ya habitados por pueblos de distintas
culturas. En otras palabras, dar a entender que la conquista sobre los indígenas no era un
acto de barbarie, sino por el contrario, el ejercicio de un derecho a favor de la civilización y
la fe.

Como consecuencia de una serie de discusiones acerca del contenido de los justos
títulos, surgen una serie de disposiciones legales;

Fueron cuatro documentos que se conocen como bulas o letras alejandrinas, todas ellas
firmadas en 1493 son las siguientes:
1. inter Caetera, del 3 de mayo. Es la bula de donación por que se concede a España la
ruta exclusiva de Occidente y las tierras descubiertas y por descubrir, a cambio de su
cristianización. Pues se otorga a la Corona de Castilla, concretamente, la propiedad
original de estas tierras.
2. Eximia Devotiones, del 3 de mayo (la fecha es discutible; hoy se sabe que fue expedida
en julio, pero fechada con anterioridad). Otorga a Castilla los mismos derechos que a los
reyes de Portugal, en su caso e igual que la bula anterior, manifiesta excomunión mayor a
quien llegue a las tierras descubiertas sin permiso expreso de la Corona castellana.
3. inter Caetera, del 4 de mayo. Se denomina de partición, pues divide entre Portugal y
Castilla los territorios marítimos a partir de una línea imaginara (alejandrina), trazada de
norte a sur a 100 leguas al Occidente de las Islas Azores y Cabo Verde.
4. Dudum Siquidem, del 25 de septiembre. De ampliación, porque concede a Castilla las
tierras que se alcanzaran al este, sur y oeste de las Indias, si no estaban ya en posesión
de un gobierno cristiano. Portugal quedó inconforme con el contenido de estas bulas,
todas en beneficio de Castilla, por lo que negocio por la va diplomática una modificación a
su favor en lo referente a la línea alejandrina, que lo privaba de participar en la ruta
occidental.

- Descubrimiento - Donación por las bulas Alejandrinas

Leyes de Burgos
Ordenanza sobre el buen tratamiento de los indios
Leyes Nuevas
Ordenanzas de nuevos

Las Leyes de Burgos, también llamadas «Las Reales Ordenanzas dadas para el buen
Regimiento y Tratamiento de los Indios», se conocen así porque el Rey las sancionó en
esa ciudad, son de un valor extraordinario por ser el primer cuerpo legislativo para «las
Indias»
las Leyes de Burgos son «el primer Código General para el Gobierno e Instrucción de los
aborígenes americanos», es importante porque, al margen de pequeños dictámenes
dados desde 1492, estas leyes eran el primer Código exclusivo para «las Indias» y de ahí
la gran importancia para el derecho de esta gran ordenación jurídica.
Así pues, las Leyes de Burgos no se desarrollaron sin antecedentes normativos, tales
como, por ejemplo, una carta del 22 de febrero de 1512 al gobernador Colón, en la cual le
permitía la extensión del Régimen de Encomienda contemplado en las Ordenanzas
hechas por Bobadilla o Nicolás de Ovando o la propia reglamentación que este último
efectuó sobre el trabajo de los indígenas. La importancia de las Leyes de Burgos era tal
que los monarcas dieron orden de difundirla por orden de publicación, algo que sólo se
hacía para normas de interés general, y se han considerado históricamente como un
ejemplo de moderación hacia pueblos conquistados con respecto a otros colonizadores
europeos.
En cuanto al ámbito espacial, estas normas se aplicaban sólo a las tierras descubiertas
por el momento y gobernadas por Colón. Pero su generalidad hizo que valieran para todo
el territorio americano hasta que disposiciones posteriores las derogaran, como sucedió
con la Instrucción de 1523 enviada a Hernán Cortés.

Las Leyes de Burgos, estaban formadas por declaraciones, leyes, pragmáticas,


instrucciones, cartas reales, ordenanzas, cédulas y provisiones.

Las leyes y pragmáticas las dictaba el monarca con validez para todo el reino, además
dictaba otras con fuerza de ley, como las Leyes Nuevas u Ordenanzas de 1542, éstas
suponían la realización de una reglamentación más o menos amplia dividida en
parágrafos o capítulos y una exposición de motivos; así pues, las Leyes de Burgos
contenían, entre otras cosas, «normas para el buen regimiento y trato de los indios», en la
exposición de motivos el monarca declara que el fin es la «salvación de los indios» y
trasladar sus viviendas a lugares cercanos a los españoles de América, las cuestiones
son diversas, como la religión, el trabajo, etc.
No se sabe con exactitud quién firmó las Leyes de Burgos, aunque se cree que fue don
Fernando, ya que la hija de ambos (Isabel y Fernando) se encontraban en el Palacio de
Tordesillas.
Las Leyes de Burgos entraron en vigor y atendieron a la convivencia con los indígenas, a
los que se determinó no exterminar, a diferencia de los estadounidenses, por ejemplo, en
Norteamérica 300 años más tarde, en vez de eso se optó por la «salvación de sus almas
y la convivencia».
Más tarde surgieron controversias sobre la legítima gobernación y conquista de las
Américas por parte de España. Frailes como Antonio de Montesinos creían que la
conquista era injusta y surge así el tratar de legitimar esa conquista, cosa que ninguna
otra nación hizo ni el futuro, ahora pasado, hizo. Para tratar de legitimar este gobierno, la
Junta de Burgos dio legitimidad a las bulas papales otorgadas a España, otros, por su
parte, como los dominicos de Valladolid, trataron de justificarla, por tanto, esta Junta de
1512 reconoce como válidas esas bulas papales.
Planteada ya la capacidad jurídica de los indios y sus libertades, aun así, se les reconoció
a los indios determinados trabajos y servicios y encomiendas. Con toda esta controversia
vista es cuando finalmente se plantea la evangelización como fundamento de la
conquista, extender a estos nativos la religión cristiana y las Leyes de Burgos, así lo
reconocerían con el Dictamen de las Siete Proposiciones, que reconocía el deber de
extender la fe y construir iglesias y demás lugares de culto, confesión obligatoria y
sepultura en lugares religiosos.

Las Leyes de Burgos también organizan a los indígenas y les reparten trabajos mediante
ordenanzas y tratando de pagar lo mismo por el trabajo que se pagaría a los españoles,
se les reconocería propietarios de las granjas y demás animales y tierras que se
repartirían, así como la labor de construirles casas y granjas, el traslado, eso sí, de sus
antiguas viviendas sería forzoso, tratando de atraer a los indígenas pacíficamente a sus
nuevas viviendas con literalmente «halagos y demás menesteres», dichos repartos se
establecieron con orden a un rango determinado, pero, como siempre ha ocurrido, hubo
abusos de los encomenderos españoles denunciados por los frailes dominicos obligando
al Rey a dictar las labores que los indios deberían hacer como norma trasladando su
parecer a la Junta de Burgos: Dichas normas eran para los indígenas:
• Que trabajasen.
• Que este trabajo sea tal que ellos lo puedan sufrir.
• Que tengan casas y hacienda propia y se les dé tiempo para labrar.
• Que tengan comunicación con los pobladores para que sean mejor instruidos en la fe.
• Que por su trabajo se les dé el salario conveniente.

También se dispuso que el trabajo de los indígenas no estorbase la labor de


evangelización y se regulaba el trabajo en minas, etc. Por último, en cuanto a esta
cuestión, en la Ordenanza XXI se prohibía a los españoles servirse de los indios ajenos
en casa o en las minas. En cualquier caso, se trató de proteger los derechos de los
indígenas prohibiendo los trabajos forzados y malos tratos, muy reiterada esta demanda a
los Colón, tanto padre como hijo, y al menos en teoría las Leyes de Burgos son un
manifiesto para regular «las Indias» y tratar de ofrecer un trato igualitario y buscar una
equiparación a las Leyes de Castilla

instituciones jurídicas de la conquista
https://www.academia.edu/25587374/Instituciones_jur
%C3%ADdicas_de_la_conquista

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