Está en la página 1de 10

Éxito De La Doctrina De Pablo De Tarso - Antonio Piñero

Está unánimemente aceptado que no se debe llamar conversión al cambio de actitud y


accionar de Pablo de Tarso, hablar de conversión presupone que ya existía el
cristianismo y entonces Pablo estaría dejando el judaísmo para convertirse, sin
embargo ante la llamada que Dios le hace él no se encuentra con nada, el cristianismo
no existe todavía, si acaso existe un judeo-cristianismo primitivo. Lo que Pablo dice es
“Yo he sentido la llamada”, siempre la llamada y solo la llamada. La compara con la
del profeta Isaías, una llamada desde el seno de su madre, aunque se haya realizado
en la práctica cuando era mayor. Esta llamada le lleva a comprender el Verdadero
Israel y comprender cómo es Jesús en verdad. Dios padre le revela cómo es su Hijo.
Pablo mismo dice que él es perseguidor, y como tal ya conocía perfectamente las
ideas de sus perseguidos y en ese momento estaba por construir todo el cristianismo,
por lo tanto Pablo no tiene que pedir demasiado consejo a nadie. En Gálatas 1,2 dice,
“En el momento de mi llamada, no me dejé llevar por la carne y por la sangre”, es decir
no fue a Jerusalén a ver a los apóstoles (a los que llama columnas o pilares) “sino que
lo que hice fue irme a Arabia” y no dice a qué, nos quedamos sin saberlo. Se
sospecha que se apartó para pensar, para reflexionar y comenzar a predicar a Jesús.
Dice en Gálatas “Pasados 13 años fui por primera vez a Jerusalén”. Gálatas
contradice lo que se cuenta de Pablo en los Hechos de los Apóstoles. Ya formado su
pensamiento, se le ocurre ir a Jerusalén quizá para confirmar su idea de Cristo, sólo
se reúne con Santiago, el hermano del Señor, con Pedro y con Juan, y se va a Tarso
de Cilicia y empieza una suerte de predicación por esa zona y luego es captado por
Bernabé y se asienta primero en Antioquía, relativamente cerca de Palestina. Pablo
construyó su propia visión de Jesús, reflexionando sobre su primera revelación cerca
de Damasco y por otras revelaciones que en segunda a Corintios sobre todo a partir
del capítulo 10 dice que él tuvo: “Hasta llegar al tercer cielo y se me mostró lo que ni
ojo vio ni oído oyó”. Por lo tanto el cristianismo en la interpretación de Pablo es
fundamentalmente original y en algunos aspectos antijudío: niega la circuncisión, niega
la ley de Moisés, niega el valor salvífico de la promesa al modo judío, abre a los
paganos el judaísmo. Los evangelistas que son paulinos aceptan el punto de vista del
maestro Pablo, escriben para complementar su teología y en parte para corregirla, la
ponen al día. Marcos se escribe en el 70-71 d. C., Mateo en el 85-90 d.C., Lucas se
escribe inmediatamente después y entorno del 95-100 d.C. Juan; cada uno de ellos
corrige al anterior, pero civilizadamente, sobre todo el que corrige a Pablo y a los
demás evangelistas es Juan, pero no corrige exponiendo argumentos, sino que
escribe una nueva historia de Jesús, lo presenta como lo ve y con eso refuta a los
anteriores.

El cristianismo es un fenómeno religioso que solo nace después de la muerte de


Jesús. Es decir, antes de la muerte de Jesús no hay cristianismo. Jesús propiamente
es el Cristo, el ungido, pero no es un cristiano, porque el cristianismo es nada más y
nada menos que la reflexión, la repensación, la reinterpretación de Jesús de Nazaret
una vez que está muerto, que se cree firmemente que ha resucitado, que él vive entre
nosotros y que va a venir enseguida a instaurar el Reino de Dios. Por lo tanto es
natural que si el cristianismo se mira desde esta óptica, repensando a Jesús a través
de las escrituras „tal como yo lo siento por dentro‟ es totalmente lógico que haya
múltiples cristianismos. Y es totalmente lógico que desde el principio el cristianismo
fuera plural. El cristianismo nace como una secta judía herética, si ahora pudiéramos
estar en Asia menor a mediados del siglo segundo encontraríamos por lo menos diez
tipos de cristianismo, y además absolutamente dispares. Desde el cristianismo de
quien niega que Jesús sea Dios (eso es la base para muchos), o de quien niega que
Pablo sea el apóstol, sino que es un traidor o un falso y un canalla, así tal cual, o
desde quien niega la inerrancia de las escrituras o del individuo que afirma que las
escrituras hay qué aprenderlas al pie de la letra, el cristianismo que promociona a las
mujeres y el que niega su papel; el cristianismo que es eminentemente profético, es
decir que no se gobierna por una jerarquía, sino por el espíritu a otro cristianismo que
se gobierna por un obispo monárquico, unos presbíteros, es decir unos ancianos, y
unos diáconos, y por último hay aparte unos cristianos que se creen los
superexcelentes, los mejores cristianos de todos, que están dentro de las gran Iglesia
pero que al mismo tiempo piensan que ellos son los únicos que se van a salvar
plenamente. Se creen los únicos que han tenido una revelación especial y que los
demás se salvarán en todo caso secundariamente. En el 325 d.C. en el Concilio de
Nicea se da la primera definición de cómo es Jesús, que es Dios y hombre y todo
contra Arrio que decía que en algún momento, Jesús como Cristo y Dios secundario
había sido creado por el padre. En el 451 d.C. en el concilio de Calcedonia-
Constantinopla se habla de la Santísima Trinidad, de cómo Jesús es Dios desde
siempre, si vemos esto en forma general, caeremos en la cuenta de que quienes están
mandando ahí son de todo ese grupo de cristianos, que eran diez o más y que podían
reunirse en solo tres grupos, esos que se creían supercristianos, los gnósticos o
reveladores, los que seguían a Pablo y los judeo-cristianos que eran seguidores
inmediatos de los apóstoles en Jerusalén. De esos diez cristianismos no queda más
que uno, solo queda el cristianismo paulino. A la griega puede decirse que es el
cristianismo que ha vencido a todos los demás cristianismos.

Este grupo compacto tiene una regla de Fe que es absolutamente clara y se distingue
porque interpreta la muerte de Jesús de una manera especial y simple, el
judeocristiano piensa que Jesús es el mesías de Israel y no del mundo, sino de pocos,
quienes del mundo se hagan judíos. Pero el Jesús de Pablo es el mesías de Israel y
es el mesías del mundo y además su muerte es un sacrificio vicario es decir en pro de
otros que hace que la situación de enemistad que había entre la humanidad y Dios se
arregle, se remitan, se perdonen todos los pecados del mundo y se instaure la era
final. Pues bien, ese autor es Pablo. Así que podemos decir en grosso modo que ese
cristianismo que en el 451 domina sobre todos los demás, tiene como padre
fundamental a Pablo. Este cristianismo, en 400 y pico de años ha acabado con todos
sus adversarios hasta hoy, porque todas las Iglesias, protestantes, ortodoxas, y
católicas que son las tres grandes ramas todas son Paulinas al cien por ciento.
Hablamos del nuevo testamento en líneas generales como el primer cuerpo de
escritos del cristianismo. Lo correcto es decir que es el primer cuerpo de escritos de un
cristianismo, el paulino, porque del apóstol Pablo fue el único que sus discípulos se
preocuparon de editar sus cartas y de repartirlas entre todas las comunidades, de
todas las demás cartas del nuevo testamento que tenemos, tres de Juan, dos de
Pedro, una de Santiago y otra de Judas, ninguna de esas son cartas auténticas de
esos apóstoles, son pseudónimas, es decir, están escritas en nombre de esos
apóstoles, pero han sido introducidas en el canon porque de alguna manera se ajustan
a esquemas paulinos del pensamiento sobre Jesús . Con otras palabras, solo entran
en el canon de escrituras en el nuevo testamento aquél que es paulino de algún modo
o es acomodable al paulinismo. El nuevo testamento tiene 27 libros, en todo caso
podríamos dudar que son poco paulinos porque tratan de cosas éticas más que de
dogma la carta de Santiago y la carta de Judas, pero incluso el evangelio de Mateo e
incluso el apocalipsis que son puramente judeocristianos tienen esa concepción de la
muerte de Jesús que es típicamente paulina. Están en el canon porque son paulinos.
Solo cuatro de ochenta evangelios son admitidos en la lista de 27 libros del canon,
todos de orientación Paulina incluidos el de Juan y el de Mateo. Hay siete cartas de
Pablo que son el producto probablemente de editar unas trece o catorce cartas
auténticas que han sido editadas por alguien y reducidas al número maravilloso y
mágico de siete. Hay siete cartas de discípulos de Pablo pero puestas a nombre del
maestro. Hay siete cartas de otros apóstoles que aunque no son de Pablo son
paulinas. Tenemos entonces en relación a los cuatro puntos cardinales, los cuatro
evangelios y en relación al número de siete Iglesias juánicas (de Juan) es decir
paulinas, tenemos siete cartas de Pablo, siete cartas de discípulos de Pablo puestas a
nombre de él, siete cartas de otros apóstoles y siete cartas en el apocalipsis, eso no
se hace por casualidad, ¿Quién hizo eso? la Iglesia paulina, y solo la Iglesia paulina.
No intervino, ni la Iglesia judeocristiana ni intervino la Iglesia gnóstica ni ninguna otra
de las subiglesias enumeradas al principio, por tanto el éxito de Pablo consiste en que
todo el nuevo testamento es prácticamente paulino en su substancia, lo cual no quiere
decir que no tenga mil ideas dispares, eso es otra cosa. De las quinientas
denominaciones cristianas 99,5% son Paulinas hoy no hay gnósticos, no hay
judeocristianos, no hay ninguna de esas religiones que había en el siglo segundo. El
crecimiento de la gran Iglesia se puede constatar a partir de que en el 312 d.C. que el
emperador Constantino declara al cristianismo religión permitida, todavía no religión
oficial del imperio, de los 60 millones de habitantes del imperio romano, 8 millones son
creyentes. Partiendo según los Hechos de los Apóstoles de 120 personas servidores
de Jesús, un mes después de la muerte del nazareno ha crecido hasta 8 millones en el
312 d.C., en términos estadísticos corresponde a un crecimiento del 40% cada
década. ¿A qué se debe este éxito de expansión del cristianismo? a las características
especiales del mensaje que Pablo ofrece a quienes quiere salvar, tanto a judíos al
principio como sobre todo a los paganos después: el mensaje paulino conectó con las
necesidades religiosas del siglo primero, el ansia absoluta por salvarse de una gran
minoría. Eliminó todas las barreras que podían entorpecer la expansión del mensaje,
de su cristianismo, de su interpretación de Jesús, y aprovechó todas las conexiones
sociales de su momento para conseguir adeptos. Pablo jamás quiso fundar ninguna
religión, antes lo matarían. Él lo único que dijo fue "yo voy a interpretar al Jesús de
verdad y a decir cuál es el Verdadero Israel que cree en Jesús , y el Verdadero Israel
lo estoy explicando yo". Él no fundaba el cristianismo, ni sabía qué era nada de eso. Él
lo puso todo de una manera intuitiva. A la Iglesia como institución que él tampoco
fundó, porque él estaba convencido de que el fin del mundo vendría dentro de diez
minutos, por decirlo de una manera tremenda, y no lo digo yo, en primera de
tesalonisenses dice que Pablo esperaba que el fin del mundo fuera dentro de diez
minutos. Pues bien, este hombre que solo esperaba un fin del mundo inmediato tiene
unos discípulos que cuando caen en la cuenta que ese fin del mundo no llega, ponen
todo aquello que es necesario para que la institución de las comunidades Paulinas
siga como una institución hasta que venga Jesús , es decir hasta hoy, y no sabemos
hasta cuándo. Y ¿cómo lo consigue? primero con un control intelectual o ideológico de
la grey, del pueblo, con el control de las escrituras por un lado y con el control de la
tradición, que ya se iba formando, por otro. Segundo control del mando, del poder, por
medio de la institución de una jerarquía conectada con Jesús y tercero control de la
economía con la instauración de una verdadera seguridad social que no había en el
imperio romano.

Pablo conecta con las necesidades religiosas cuando predica el Verdadero Israel cuyo
mesías es Jesús cuya vida había sido totalmente judía y había muerto como un judío,
no predica un mesías puramente judío -en el imperio romano no hubiera tenido
adeptos-. Predica un mesías universal, un redentor universal de todos. Pablo recibe la
llamada, Dios le ha revelado una nueva vía de salvación, Pablo conecta con esas
ansias de salvación que hay en el Imperio Romano. Entre los romanos la religión
interesaba relativamente poco o nada, era una religión oficial que nada los llenaba o
en todo caso la religión era de yo te doy oh dios este sacrificio y tú me das, es decir
como yo te adoro tú me das beneficios, son más o menos seis las religiones oficiales,
no hay ética, no hay vida de ultratumba no hay nada de eso. Pero hay una amplia
minoría que está absolutamente convencida de que lo único que importa es salvarse,
se sabe que existe esta amplia minoría pues muchos peregrinos consultan los
oráculos de los dioses buscando recetas para asegurarse la salvación, hay muchos
adeptos a religiones de misterio, solo se salva aquél que hace o cumple un misterio
que quiere decir oculto, un acto de iniciación con una divinidad específica, hablando de
paganos, que haya sufrido un proceso de padecimiento aunque sea un dios que haya
superado ese padecimiento, que aunque haya muerto, también haya resucitado y
luego suba al Olimpo y esté ahí feliz ya por toda la eternidad. Aquél individuo que se
inicie en un rito de misterio y cumpla simbólicamente los mismos pasos que dio el dios
o la divinidad de muerte y resurrección se asegura la salvación. Hay muchos libros de
la época que son libros de conjuros, de magia y de fórmulas que venden sistemas
para que cuando el alma, que es inmortal, abandone el cuerpo y tenga que subir por
las esferas de los planetas hasta donde sea el Empidio, los Campos Elíseos etcétera y
los jefes de esos planetas le pidan una contraseña o tenga qué descender al Hades y
le pidan contraseñas porque ha de pasar por distintos estratos, esos libros con
conjuros en salmos y fórmulas le enseñan esas contraseñas para salvarse, y los libros
se venden. Pablo contacta y conecta con esa minoría. ¿Qué es lo que impulsó a Pablo
a predicarle a los paganos? Pablo se lanza en una loca carrera a predicarle a los
paganos, ¿cómo se explica eso?, pues eso se explica porque tanto Pablo como Jesús
pertenecen a una raza de teólogos que hay en el judaísmo del siglo primero, que se
llaman Teólogos de la Restauración de Israel, que dicen que en el momento que el
Verdadero Israel reciba en su seno el Reino de Dios en ese momento el Verdadero
Israel será restaurado, las nueve tribus y media que se perdieron en el 721 a.C. por
obra de Salmanasar el emperador asirio que machacó el Reino del Norte de Israel, e
hizo la primera deportación. Esas nueve tribus y media que están perdidas, “vendrán a
lomos de águilas y a lomos de caballos maravillosos y se reunirán con las dos tribus y
media que quedan y todos juntos asistirán a la apertura del reino de Dios”. Pablo dice
que la teología de la restauración indica que no solamente han de restaurarse las doce
tribus de Israel sino que los grandes profetas sobre todo Isaías ha dicho que el
Verdadero Israel no se salvará hasta que no lleve en su seno algunos paganos es
decir hasta que no se conviertan algunos paganos. Al leer los Profetas de después del
exilio exponen en la teología de la restauración que el judaísmo se abrirá a todos los
pueblos, sí pero para que acepten que Israel es la primera nación del mundo y la que
manda a todas, con este mensaje solo algunos se convierten. Pablo está convencido
de que el nuevo Israel nunca jamás llegará al fin si antes no se han convertido un
cierto número de paganos, al Verdadero Israel que él predica, cuál es el número, él no
lo sabe, pero deben de ser muy pocos.

Examinando la vida de Pablo encontramos que es un hombre que corre, que va y


predica en un sitio, va a una ciudad, monta a treinta cristianos, deja ahí a unos cuantos
predicadores y va a otra, a otra y a otra ciudad corriendo, excepto en Éfeso y Corinto
no está nada más que semanas y de repente se encuentra con que debe ir a Roma y
de Roma a Hispania porque allí es el extremo porque hasta ahí debe de conseguir que
se oiga la palabra de Dios. A Pablo no le interesaba convertir a todos los paganos, lo
que le interesaba era llenar el número decidido por Dios de paganos que debían
incorporarse al Verdadero Israel para que llegara el fin del mundo e Israel se salvara.
¿Cuántos? los que Dios hubiera determinado. Pablo hace saber a los paganos que
Dios le ha revelado un nuevo sistema de salvación, para aquellos que lleguen a formar
parte de la eclesía (asamblea). Antes en el judaísmo, para salvarse en el siglo primero,
solo había dos sistemas, el pagano se convertía al judaísmo, ó permaneciendo
pagano cumple con las leyes de Noé como se comenta en Génesis 9, el primer pacto
de Dios con la humanidad es con Noé no con Abraham y de ahí viene que los judíos
pensaran que había muchos paganos que no querían hacerse judíos, y aunque no
pertenecían al pacto con Abraham podían salvarse. Las leyes de Noé es el decálogo,
menos algunas leyes precisas que solo pueden afectar al que es judío como adorar
precisamente a ese Dios, eso se excluye, adoran al dios de su corazón y una cosa
añadida, no comer carne con su sangre, nada más, porque la sangre es la vida y la
vida solo es de Dios, por lo tanto Pablo lo que quiere es quitar impedimentos. El otro
sistema de salvación que Pablo hace llegar a los paganos consiste en que Dios ha
revelado a Pablo que la Ley de Moisés: ley de los alimentos, ley de la pureza ya no
tienen validez ninguna, esa ley carnal de Moisés ha sido sustituida por la ley espiritual
que ha traído Cristo, que es la ley del amor. En cuanto a los varones, si no se
circuncidan se van al infierno, pues la circuncisión espiritual dice Pablo, me ha sido
revelado por Dios que en estos momentos finales, esa circuncisión carnal ha sido
sustituida por una circuncisión espiritual. Y en vez de una teología del pacto, pacto de
un pueblo elegido, es una teología de la promesa, aquél individuo que crea
verdaderamente en Jesús, que acepte por un acto de fe, que Jesús ha muerto en la
cruz para borrar los pecados de todo el mundo, ese que acepta ayudado por la gracia
divina por supuesto, ese individuo es el verdaderamente circunciso, el que entra
dentro de la ley del amor y el que ya no necesita de un pacto especial. Ya está dentro
de la promesa del Dios de Abraham y está más que dentro del pacto, está dentro de la
gran promesa de salvación. Si un pagano se quiere convertir tiene que cumplir la Ley
de Moisés, y Pablo dice la Ley de Moisés está obsoleta, cuando ha venido Cristo la ley
se acabó, la ley carnal es sustituida por la ley espiritual del amor en Cristo, lo dice
Pablo, como luego lo dirá Agustín, su máximo intérprete en la edad antigua, “ama a
Cristo y haz lo que quieras”. La circuncisión carnal ya no es necesaria, es sustituida
por la circuncisión espiritual, es decir el acto de fe. La teología del pacto estricto, que
de como te salgas del pacto te vas al infierno, dice Pablo que no la niega, pero insiste
en la teología de la promesa. Para un individuo que conociera el judaísmo aquella era
un ofrecimiento imbatible, ya no es necesario cumplir la Ley de Moisés, ya no es
necesario circuncidarse. Pablo conecta con paganos que de alguna manera tienen ese
ansia especial de la salvación, son aquellos a los que Lucas en los hechos de los
apóstoles llama los temerosos de Dios, aquellos que son filojudíos, adeptos a los
judíos, que van todos los sábados a la sinagoga, les gusta del judaísmo que hay un
Dios único que hay preceptos morales esplendidos, que hay un sentido de la familia y
un sentido de ayuda del grupo que hay una seguridad social. La inmensa mayoría de
los varones jefes de familia no se convertían al judaísmo porque tenían que
circuncidarse, aquellos que se circuncidaban pasaban por la mofa en los baños
públicos por la deformidad de su pene después de una circuncisión con cuchillo de
sílex. Las mujeres se pasaban fácilmente al judaísmo, no había que circuncidarlas, por
ejemplo Papea, la mujer de Nerón que era filojudía. El que se hacía judío, además
debía de cumplir 613 preceptos. Sin embargo, hacerse adepto del Verdadero Israel
que proclama Pablo, con las facilidades descritas, se logra la salvación. Así que los
temerosos de Dios pasan en masa al cristianismo. Pablo va primero a las sinagogas
donde se encuentra con estos filojudíos y les habla de Jesús, cuando capta que en
una ciudad escasean los filojudíos, va a esos adeptos de las religiones de misterio que
son capaces de pagar el oro y el modo por conseguir una fórmula segura de salvación.
Los adeptos adinerados a religiones de misterio deben viajar a ciudades donde hay
ritos de iniciación de salvación de Cibeles, Isis, Osiris, Atis, Adonis, por ejemplo a los
misterios de Eleusis en Grecia. Para hacer esto deben dejar su trabajo trasladarse a
Eleusis, pagar la primera iniciación que incluye a los sacerdotes, el templo y los
sacrificios, esperar seis meses para completar la purificación, pagar la segunda
iniciación que son otra vez el templo los sacerdotes, los sacrificios, y luego ya
entonces se consigue la salvación. Pues bien, a estos señores que están dispuestos a
hacer cualquier cosa por salvarse, les dice Pablo tal cual -este es el núcleo del
pensamiento de Pablo- esa peripecia de un dios que muere y resucita, que ustedes
hacen con Isis o con Osiris o con Demeter, pero si lo tienen con Cristo, ese es el
bautismo; epístola a los Romanos capítulo 5, mueres con Cristo al sumergirte en el
agua y al salir del agua, estás resucitando con Cristo. ¿Cuánto costaba el bautismo?
Nada. Y esa comunión que queréis las vacantes de Dioniso, las adoradoras de Baco
(en el mundo latino), esa comunión con la divinidad que queréis tener con Perséfone,
hija de Demeter o con Isis, haceros adeptos de Isis, ¿Cuánto os cuesta esa
comunión? Y comparado, ¿Cuánto cuesta la eucaristía cristiana, hecha de pan y vino
e interpretada como lo hace Pablo? Una manera de comulgar, comunión -unirse con el
cuerpo y la sangre del Redentor- ¿Cuánto cuesta? Nada. Es una oferta absolutamente
imbatible. Pablo comenzó con los paganos que son filojudíos, después con los
adeptos al misterio y después utilizando las redes sociales.

La moderna sociología ha dicho dos cosas respecto a la conversión: que la conversión


a una religión nueva no se logra gracias a convincentes predicaciones o reuniones
sociales en las que se expone una predicación. No, quienes se convierten son los
conocidos y los amigos, y estos a su vez convencerán a otros conocidos y amigos, no
valen las reuniones sociales. ¿Quiénes son los primeros discípulos de Jesús? Pues
son discípulos del grupo del bautista a quienes Jesús, también discípulo del Bautista,
formando su grupo nuevo se lleva consigo, Jesús empieza o con sus amigos de
Galilea, lo intenta con sus hermanos pero sin éxito, o con los amigos que conocía en el
grupo de Juan el Bautista. Un segundo grupo de los que se convierten son aquellos
que no tienen qué cambiar demasiado, y esta es la carta en la manga de Pablo, para
los adeptos a las religiones de misterio les presenta que el cristianismo tiene los
mismos ritos de salvación pero sin costo. Con grandísima intuición Pablo va a aquellos
que están más cerca del judaísmo -aunque Pablo no quiere fundar ninguna religión-,
que están más cerca del Israel y a aquellos que están más cerca de un redentor
universal que necesitan hacer un rito de iniciación que es un rito de muerte y
resurrección simbólica y un rito de comunión con la divinidad. Este es un sistema
increíblemente favorable, Pablo ha conectado con las necesidades religiosas de las
personas, ha eliminado las dificultades que se oponen a la conversión, presenta la vía
de salvación espléndidamente y se ha servido de las redes sociales, estos recursos
mediaron el éxito de la doctrina de Pablo.

Esa parusía o segunda venida de Jesús no ocurre, la Iglesia sufre una crisis en los
años 60 y 70 cuando mueren Pedro y Pablo por la persecución de Nerón en Roma, y
cuando realmente Jesús no viene. ¿Qué es lo que pasa? Hay que consolidarse en
este mundo, hay que empezar a controlarlo todo. Los seguidores de pablo logran un
control intelectual señalando que nadie puede interpretar las Escrituras sin una ayuda
del Espíritu Santo, y ¿Quién tiene el monopolio del Espíritu Santo? El Jefe de la
Iglesia, es decir el obispo o los presbíteros. La segunda epístola de Pedro escrita
aproximadamente en el 120 d.C. dice claramente ninguna profecía de la Escritura está
a merced de interpretaciones personales. Ninguna profecía de la Escritura la puede
interpretar cualquiera que se crea ahora portador del Espíritu y que diga que ha
recibido revelaciones privadas. Por eso hasta ahora la Iglesia no acepta fácilmente las
revelaciones privadas, salvo que las controle como Lourdes y Fátima. Las que no
controla, no las acepta. Por lo tanto, una Iglesia constituida por mujeres profetisas o
por independencia de las mujeres está absolutamente condenada al fracaso. Y ¿Por
qué el paulinismo no hace caso a las mujeres? Cuando Pablo, como vemos por las
cartas suyas, había utilizado a las mujeres como apóstolas, predicadoras, presidentas,
como patronas, es decir las que pagaban la comunidad, las que ponían la casa. Pues
muy sencillo, porque cuando la Iglesia era pequeñita y eran 30 personas no pasaba
del ámbito doméstico, y ¿quién manda en el ámbito doméstico? La dama, la mujer.
Pero cuando la Iglesia se hace una institución más grande y pasa del ámbito
doméstico al ámbito del Imperio Romano, pasa del ámbito doméstico al ámbito
público y entonces mandan los varones. Y no es porque los varones persigan a las
mujeres en ese momento de una manera especial, sino porque toda la sociedad está
constituida así, del mismo modo que toda la sociedad. Incluso Jesús que está
hablando de esclavos todo el rato la palabra siervo -dulos en griego significa esclavo-
Jesús admite perfectamente la esclavitud. Al igual que la sociedad del imperio romano
admite perfectamente la esclavitud, admite que las mujeres son secundarias, entonces
evidentemente en la iglesia paulina los cargos son masculinos y el control pasa a los
varones porque la Iglesia se hace pública, pero no por machacar a las mujeres
propiamente, sino porque no se hace ninguna acomodación siempre esperando que
venga el fin del mundo de un momento a otro.

El segundo control intelectual, pero no ya de las escrituras sino de la tradición. La


Iglesia Paulina es la primera que copia, hace tradición, copia las cartas de Pablo ,
ninguna Iglesia judeo-cristiana copio ni las cartas de Juan ni las de Pedro aunque son
pseudónimas, no por ello inválidas porque el concepto de pseudonimia en la
antigüedad se fundaba en el supuesto de que el espíritu pasaba de un profeta a otro y
uno podía escribir en nombre de Juan sin ser Juan o en nombre de Pablo sin ser
Pablo y en nombre de Jesús hablar sin ser Jesús , pero desde el punto de vista
técnico literario son falsas. Pero son ellos los paulinos, los que han compilado todas
las cartas falsas o auténticas de Pablo y han formado un corpus y han formado una
tradición. Y ya desde Lucas y los hechos de los apóstoles se aclara que la tradición
recta es lo único que importa en la Iglesia. En primera a Timoteo, dice el presunto
Pablo a Timoteo: Custodia la tradición recta, custodia el depósito, es decir la Iglesia
Paulina rápidamente forma la idea de que Jesús predicó unas verdades eternas de
que la Iglesia recoge las verdades tal cual, de que se ha formado un depósito
absolutamente intocable y que aquél solo que es malo, malvado por amor al dinero, al
sexo a lo que sea es el que conscientemente ataca ese depósito. Por lo tanto el que
quiera ser buen cristiano aténgase al depósito o reglas de la fe.

Por otro lado el control del mando físico es llevado a cabo por varones, al principio los
obispos se elegían por votación, poco a poco se va haciendo por designación del
obispo metropolita o los obispos principales. Aún elegido por votación ese obispo tiene
el mando supremo porque se ha creado ya conscientemente la teoría dogmática
eclesiástica de que existe una cadena ininterrumpida desde Jesús a los apóstoles a
los sucesores de los apóstoles, a los sucesores de los sucesores, hasta este obispo
en cuestión, nadie entonces se atreve a cuestionar la jerarquía del sucesor supremo.
Luego si se escribe como Clemente, el primer papa después de Pedro según dice la
tradición como escribe a los Corintios, con un lenguaje exactamente igual que el del
ejercito del imperio, les dice: estos jóvenes que se han levantado contra el obispo han
producido una “stasis”, una revolución exactamente igual que la que merecería la
muerte si un soldado se revoluciona contra su centurión y contra su general. Esto solo
puede explicarse porque hay una cadena de la jerarquía, y el que rompa la cadena de
la jerarquía es un malvado. Queda por último el control económico, este control es
ejercido por quien tiene el control del espíritu, de la mente, y quien tiene el control de
los cargos eclesiásticos. Pero el cristianismo primitivo es tan maravilloso que hace un
excelente uso del dinero de la Iglesia. Tertuliano en el 210 escribe: “Los fondos de las
donaciones no se sacan de las Iglesias, no se gastan en banquetes borracheras y
comilonas”; alude a otras asociaciones religiosas del imperio romano como La
asociación de la buena muerte, que se reunían cada mes en un banquete para que
Hades, Plutón, les recibiera al morir; gastaban todo el dinero en la preparación del
entierro y en los grandes banquetes. Decía Tertuliano: “No, sino que van destinados a
apoyar y enterrar a la gente pobre a proveer las necesidades”.

[Corte de la secuencia de la conferencia]

Los paganos adeptos al misterio que se convertían al cristianismo a través del


bautismo y la eucaristía, debían de pagar un precio social, aparentemente inmenso,
debían apartarse de su núcleo social, dejaban de ir a las fiestas de dioses paganos,
tampoco iban a los cultos al emperador, dejaban de ir a las comilonas, pero lo hacían
convencidos por las promesas del cristianismo.
Las mujeres paganas libres se casaban a los 12 años y comenzaban a tener hijos
continuamente de los que se morían la mayoría, la mortandad infantil era del 40 a
50%. Por otro lado la sobrevida de los varones de clase media era de 35 años. Si la
mujer enviudaba, a fin de sobrevivir, vendía a sus hijos como esclavos. Esto
contrastaba con el beneficio de la Iglesia cristiana, donde las mujeres podían mantener
a su lado a sus hijos pues la comunidad las protegía. Esta seguridad social de las
Iglesias Paulinas es un invento judío. Otros beneficios a las mujeres de pertenecer a
estas comunidades incluían la opción de elegir a sus maridos, no se les imponían. Y
en vez de casarse a los 12 años podían casarse entre los 16 y 18 años. Y se
aceptaban los matrimonios con paganos a fin de que las mujeres atrajeran a la fe a
sus maridos. En el caso de que poseyeran esclavos estos también quedaban
convertidos automáticamente. En el caso de las niñas, hijas de paganas pobres,
debían ser expuestas, las abandonaban en la calle y morían asesinadas por un perro o
por gente o simplemente eran tiradas a la basura. Pues esto, la exposición de niñas
estaba radicalmente prohibida en el cristianismo. Por otro lado, el aborto era
infinitamente más común en Roma y en Grecia que ahora, 10 a 20 veces más y como
los medios eran rudimentarios, la gran mayoría de las mujeres que abortaban
padecían graves trastornos y muchas morían. Sin embargo, el aborto estaba
totalmente prohibido entre los cristianos, las mujeres de estas Iglesias no tenían
mortandad por esa causa. Durante una peste con una mortalidad de 35% la relación
1:10 de cristianos y paganos se redujo a 1:5, la muerte de paganos era mucho mayor
puesto que la actitud de autoprotección de los cristianos les defendía de las
enfermedades, se ayudaban, se daban de comer, se lavaban, protegían a sus
enfermos. El cristianismo se expandía.

Para desgracia de este cristianismo, el edicto de Milán de Constantino la declara


primero religión lícita y en el 380 Teodocio el grande de origen hispano la declara la
única religión lícita, es decir religión oficial del imperio, en ese momento las
conversiones son forzadas, en masa y en ese momento se pudre el cristianismo y la
jerarquía fundamentalmente hasta hoy con todos los movimientos de renovación que
son los cátaros, los valdences, los dominicos, Francisco de Asís, los monjes, los
eremitas, los antonios, los pacomios, etcétera desde el principio, porque la Iglesia en
cuanto deja de ser esta institución tremenda hasta el 312 y se le facilita la estancia en
este mundo pierde parte de su esencia.

El éxito de Pablo y las Iglesias Paulinas se enumera así: El nuevo testamento es todo
paulino. La expansión del cristianismo hasta el 312 es del 40% cada década. La
propuesta de Pablo se acomoda a las necesidades de los pobres, conecta con las
ansias de salvación. Transforma al mesías judío en un salvador universal. Elimina
todas las barreras que se oponen a la fácil conversión, aunque no funda una religión
sino al verdadero Israel, sustituye la circuncisión carnal por la circuncisión espiritual,
ese acto de fe por el que se apropia el converso del valor salvífico de la cruz de cristo.
La ley carnal de Moisés pasa a una ley espiritual, la ley del amor en Jesús. Los ritos de
salvación de los misterios están en el cristianismo, más fácil y gratuitos con el
bautismo y la eucaristía. No hay parusía, la Iglesia se estabiliza y hasta el 312 monta
una estructura que en lo fundamental, sigue hasta hoy, con el control ideológico:
Escrituras, tradición recta. Control de mando por varones con sucesión apostólica en
cadena desde Jesús, control económico con seguridad social.

El cristianismo paulino es estrictamente original y genuino, lo cual no quiere decir que


no tenga elementos compartidos, tiene muchísimos elementos de la tradición judía
anterior, y tiene pocos, algunos elementos de la atmósfera de ese grupo de gente
extraordinaria conocidos como los gnósticos que se creen posesores de una
revelación especial, Pablo también tiene algunos elementos, no que copia como dicen
algunos, de esas religiones de misterio griegas y romanas, no que copia sino que
opone es decir que utiliza los conceptos pero dice que aquél que salva no es Isis, ni
Osiris, ni Demeter sino Jesús, pero usando el vocabulario y los conceptos de ellos.
Pablo es sumamente original, aunque el cristianismo, no es solo Pablo, el cristianismo
son los evangelistas que corrigen a Pablo; otra parte del judaísmo que está dentro del
nuevo testamento y que se cuela más o menos en ese pacto de las Iglesias paulinas.
El cristianismo en realidad se está refundando continuamente, porque si algo tiene el
cristianismo es que aunque se diga que es una religión “del libro” es ante todo una
religión para los creyentes de una presencia viviente: “Él vive entre nosotros”, esa es
la regla fundamental, y el núcleo para el cristiano es seguir a ese Jesús viviente, ni
siquiera a las interpretaciones de los evangelistas, ni siquiera de la Iglesia, sino seguir
al Jesús viviente que de alguna manera produce cierto problema para la jerarquía,
porque ¿cómo van a controlar los jerarcas de la Iglesia un cristianismo que sigue al
Jesús viviente por la guía del Espíritu Santo? Es absolutamente incontrolable.

Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=zMX9crt22Q8

También podría gustarte