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Alumno: Lara Almaguer Carlos Yael

Número de cuenta: 417097721


Asignatura: Desarrollos actuales en cognición y comportamiento II
Profesora: Kirareset Barrera García
Control de lectura 7

Tenemos en general dos tipos de recuerdos; el recuerdo implícito (memoria implícita) implica todo
lo aprendido de manera no consciente, procesos como aprender a caminar, hablar nuestra lengua
materna son unos de ellos, por otro lado, tenemos los recuerdos explícitos (memoria explicita)
que implican todo lo aprendido de manera consciente, como recordar una historia que nos dijeron
o el curso de estadística de semestre pasado.

Se le llama memoria procedimental al tipo de memoria que guarda información acerca de los
movimientos físicos que realizamos, esta depende de los ganglios basales se llama memoria
episódica al tipo de memoria que nos permite suscitar sucesos o episodios (hechos que suceden
en nuestras vidas). Las personas con problemas amnésicos tienen dificultades para recordar
episodios, por ejemplo, recordar lo que hicieron ayer, el día que fueron al super etc. Las personas
con enfermedad de Parkinson parecen incapaces de aprender habilidades nuevas. Es estudio del
paciente amnésico conocido como Clive quien sufrió una lesión grave en el hipocampo a causa de
una encefalitis es evidencia de que el hipocampo es una zona implicada para generar recuerdos
episódicos, por otro lado, Clive aún conservaba las habilidades motoras aprendidas (dirigía un coro
y tocar el piano). Otros estudios muestran que en personas con la enfermedad de Parkinson que
no tienen problemas para recordar hechos, episodios de la vida la actividad de su hipocampo es
normal, pero, estos tienen problemas con los ganglios basales. En resumen, los ganglios basales se
encargan de producir un aprendizaje de habilidades motoras mientras que el hipocampo se
encarga de los procesos de generación de memorias episódicas.

A grandes rasgos parte del lóbulo frontal esta implicado en el procesamiento de información que
retenemos para realizar actividades en el momento presente, lo que se conoce como memoria de
trabajo; que es, por ejemplo, recordar un número de turno cuando uno espera en el banco,
recordar los resultados de una operación aritmética para resolver una ecuación etc. Se sabe esto
porque personas con daño en el lóbulo frontal tienen dificultades para desempeñar tareas que
requieren la retención de información simultánea.

La memoria prospectiva se refiere a la capacidad que tenemos de recordar algo que teníamos
planeado hacer en el futuro mientras estamos haciendo otra actividad; algo así como la capacidad
de programar una alarma que nos avisa que tenemos otras cosas pendientes por hacer, la
capacidad de recordar las actividades agendadas distribuidas en el tiempo. Se le ha denominado
corteza frontopolar al área del lóbulo frontal que ha mostrado evidencia de ser responsable de la
memoria prospectiva.

Preguntas

1.- ¿es posible estimar la capacidad de almacenamiento de información en la memoria episódica?


Actualmente no se conocen parámetros para medir la capacidad de memoria episódica del ser
humano, a diferencia de la memoria a corto plazo que como se menciona en el libro puede retener
unos 7 ítems en promedio.

2.- ¿Cómo podemos saber si la memoria prospectiva es una capacidad única de los humanos?

Zoólogos, primatólogos, biólogos entre otros se dedican a estudiar a otras especies y se estudian
sus conductas para saber que hace diferente a los humanos de, por ejemplo, otros primates.

3.- En el capitulo 11 se menciona que los bebes imitan las expresiones faciales de otros, ¿Cómo
sabemos que realmente son imitaciones y no son comportamientos natos?

Muchos de las expresiones faciales podrían ser natas; biológicamente predispuestas, otras tal vez
sean imitadas, como tal no sabemos si son naturales o imitadas. En el mismo capitulo se menciona
que el cerebro refleja lo que ve, no obstante, eso no es prueba de que los bebes en vez de imitar
los rostros estén teniendo una reacción natural. Además, su cerebro todavía esta en desarrollo por
lo que puede que el cerebro no este procesando de la forma mencionada en el libro.

Referencias

Sarah-Jayne Blakemore, Uta Frith, (2007), Cómo Aprende El Cerebro, caps. 10 y 11

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