CONFLICTO SU DEFINICIÓN Y ELEMENTOS

ENSAYO

Liliana Tapia M.

NEGOCIACIÓN

Ing. Daniela Bustos.

INSTITUTO TECNOLÓGICO ISMAC

4 de junio de 2022
Introducción

El conflicto no es más que una pelea entre dos individuos o entre miembros de un grupo. No hay

dos personas que puedan pensar igual y, definitivamente hay una diferencia en su proceso de entendimiento,

así como en su comprensión. El conflicto surge cuando las personas tienen diferentes valores, opiniones,

necesidades, intereses y no pueden encontrar un punto medio. En cualquier nivel, todos en algún momento

se han encontrado muy familiarizados con el conflicto.

El conflicto generalmente se ve como una fuerza negativa indeseable en la sociedad, que debe

erradicarse a medida que se presenta. Y, sin embargo, el conflicto también puede ser una etapa dolorosa o

incómoda de un sistema que atraviesa un proceso de cambio y ofrece el potencial de transformarse y generar

un crecimiento positivo, si se maneja adecuadamente.

A lo largo de la vida, todos adquieren experiencia en el manejo de conflictos, incluso si eso significa

evitarlos a toda costa. Los seres humanos experimentan el conflicto como una gran parte de la existencia

humana, involucrando a personas con una falta de armonía, que surge cuando las partes compiten por

objetivos, valores o intereses percibidos o reales. Ocurre también cuando las partes se enfrentan con

acciones opuestas y contra acciones. Es un indicador de que algo está cambiando, ha cambiado o necesita

cambiar.
Desarrollo

Conflicto, como se usa en el habla cotidiana, es un término vago y asociado con muchos conceptos

indecisos. Si bien en principio el tema de la definición es una cuestión de decisión sobre cómo usar las

palabras, en la práctica las definiciones ya están ubicadas en un contexto lingüístico y tienen asociaciones

previas. Algunos autores precisan al concepto como un estado de interacción humana en el que existe falta

de armonía o se percibe una divergencia de intereses, necesidades u objetivos. Es una forma de

comportamiento competitivo entre personas o grupos. Ocurre cuando dos o más personas compiten por

objetivos incompatibles percibidos como reales o recursos limitados (Boulding, 1962: 2). Es decir, conflicto

se determina como un choque entre individuos que surge de una diferencia en el proceso de pensamiento,

actitudes, comprensión, intereses, requisitos e incluso, a veces, percepciones. Un Conflicto no solo puede

surgir entre individuos sino también entre países, partidos políticos, estados, etc.

El conflicto es una consecuencia de la diversidad que caracteriza nuestros pensamientos, nuestras

actitudes, nuestras creencias, nuestras percepciones y nuestros sistemas y estructuras sociales. Es una parte

tan importante de nuestra existencia como lo es la evolución (Weeks, 1994: 7). Entonces se refiere a una

actividad que tiene lugar entre seres conscientes, aunque no necesariamente racionales. Si dos cuerpos

astronómicos chocan, no decimos que están en conflicto. Un conflicto se define en términos de los deseos,

necesidades u obligaciones de las partes involucradas. Estos deseos pueden ser relativamente prácticos,

donde se esperaría que la negociación terminara en un acuerdo.

Entendamos el conflicto de una mejor manera. Los desacuerdos y los conflictos son sucesos

cotidianos inevitables, y su resolución puede resultar en un cambio constructivo. Los conflictos a menudo

se analizan en diferentes niveles, interpersonal, grupal o comunitario y nacional, y en términos de cómo los

niveles interactúan entre sí. Durante el diario vivir, todas las personas están involucradas en una serie de

conflictos. A veces, estos pueden ser pequeños, por ejemplo, una persona puede ignorar a otra mientras está

hablando. En otras circunstancias, el conflicto puede ser más serio, así, dos personas que se comportan

violentamente uno hacia el otro. Ya sea grande o pequeño, el conflicto no se limita sólo a una persona y a
las que se encuentra a su alrededor. Puede ser entre personas con las que uno ni siquiera está asociado. Un

conflicto puede ser, por ejemplo, entre las personas y las leyes vigentes.

Aparte de conflictos externos entre individuos o grupos, también puede haber conflictos internos

dentro de una persona, por lo tanto, este es endémico a toda la vida social, una parte inevitable de la vida

porque está relacionada a situaciones de escasez de recursos, división de funciones, relaciones de poder y

diferenciación de roles. Debido a su ubicuidad y naturaleza omnipresente, el concepto ha adquirido una

multitud de significados y connotaciones

Usando el término en un sentido amplio, puede sugerirse que el conflicto se refiere a todo tipo de

interacciones antagónicas. Más específicamente, se puede denominar como una situación en la que dos o

más partes tienen objetivos incompatibles y en el que sus percepciones y comportamientos son

proporcionales con esa incompatibilidad.

Sin embargo, el conflicto a menudo puede ser visto como algo negativo, cuando también puede ser

positivo, ya que crea oportunidades para equilibrar el poder dentro de una relación o de la sociedad en

general, por lo que permite la reconciliación de los intereses legítimos de las personas, procura a una mayor

autoconciencia y comprensión de la diversidad y las diferencias entre todos, organizaciones y sociedades;

permitiendo al crecimiento y desarrollo personal, organizacional e incluso sistémico, actuar como un medio

útil para ventilar y resolver problemas, lo cual genera la conciliación de diferentes intereses fomentando la

unidad dentro de los grupos.

El conflicto no es bueno o malo, simplemente existe. Es una faceta de la experiencia humana

cotidiana. Los sistemas de la naturaleza también implican conflictos en muchos niveles diferentes, ya sea

que un animal se coma a otro para sobrevivir o que compita por el liderazgo de la manada, lo que conduce

a la selección de los genes más fuertes para las generaciones futuras.

A medida que observamos la vida y el papel del conflicto en el crecimiento y el cambio, es

perceptible que el conflicto suele ser necesario. No debe suprimirse, sino trabajarse y canalizarse. Sin
embargo, hay pruebas alrededor, en cualquier parte del mundo, del impacto devastador de los conflictos

desenfrenados o no gestionados.

Todo conflicto debe contar con ciertos elementos y las personas son fundamentales cuando se

piensa en su análisis. El paquete de recursos utiliza el término actores para referirse a todos aquellos

involucrados o afectados por un conflicto. Esto incluye individuos, grupos e instituciones que contribuyen

al conflicto o se ven afectados por él de manera positiva o de manera negativa, así como los que se ocupan

de los conflictos. Los actores difieren en cuanto a su metas e intereses, sus posiciones, capacidades para

realizar sus intereses y relaciones con otros.

Para comprender en un contexto determinado es fundamental identificar los conflictos potenciales

y existentes. Las causas del conflicto se pueden definir como aquellos factores que contribuyen a conocer

el origen del mismo, como paso previo y necesario para su resolución. Además, puede describirse como

factores generalizados que se han integrado en las políticas estructuradas de una sociedad y pueden crear

las condiciones previas para un conflicto.

Existen cinco tipos de conflictos. El de relación, cuando las personas tienen percepciones negativas

sobre otras, o cuando no existe entre ellas una buena comunicación. Los conflictos de información suelen

pasar cuando las personas, que cuentan con diferentes fuentes de información, discrepan sobre la

interpretación de los hechos. En cuanto a los conflictos de valores o culturales se da cuando personas con

diferentes valores o creencias, con el que manejan sus vidas tratan de imponérselos a los otros.

Los conflictos de interés aparecen cuando una persona posee una cosa, cualquiera que sea esta y

que la otra también la quiere tener. Así los conflictos estructurales son aquellos que florecen como

consecuencia de la existencia de una estructura superior a las personas en conflicto o de una normativa

reguladora que va más allá de nuestra voluntad.

Otro elemento a tomar en consideración es la dinámica del conflicto que se puede describir como

el resultado de la interacción entre el perfil del conflicto, los actores y sus causas. Comprender esta dinámica
ayudará a identificar ventanas de oportunidad, en particular a través del uso de escenarios, que tienen como

objetivo evaluar diferentes posibles desarrollos y pensar en las respuestas apropiadas. Los escenarios

básicamente proporcionan una evaluación de lo que puede suceder a continuación, en un contexto dado de

acuerdo con un cronograma, basándose en el análisis del perfil del conflicto, causas y actores
 Conclusión

El conflicto puede abarcar un gran ámbito de las circunstancias que suceden en la vida cotidiana,

desde molestias menores hasta situaciones altamente dificultosas. Al mismo tiempo, puede aumentar la

creatividad y la innovación, o puede hacer que las personas, las organizaciones, etc., se detengan por

completo. Hay muchos tipos diferentes de conflicto, incluidos los interpersonales, intrapersonales e

intergrupales. Por supuesto, los simples choques de personalidad pueden crear conflictos intrapersonales

en cualquier situación. Los problemas de comunicación también son una fuente muy común de conflicto,

incluso cuando de otro modo no existiría ningún problema real. Cuando surge un conflicto, puede ser

manejado por varios métodos, cada uno con diferentes grados de cooperación y competitividad

El conflicto al ser parte de una etapa transcendental en la vida de los seres humanos y de la sociedad

en general, es una oportunidad para el aprendizaje de habilidades personales y sociales, que a lo largo del

camino permiten desarrollarnos como sujetos éticos y con altos valores fundamentales para el diario del

buen vivir.
Referencia Bibliográfica

GIZATECA, (2010) Los conflictos claves para su comprensión

https://www.fundaciongizagune.net/wp-content/uploads/Conflictos.pdf

EL MEDIADOR, (S/F) Elementos fundamentales del conflicto

https://www.elmediador.org/elementos-del-conflicto/

Fernández M. (1999) Aspectos positivos y negativos del conflicto. In J. F. Morales, & S. Yubero

(Eds.), El grupo y sus conflictos (pp. 25C46).

Gestión de conflictos, mediación y promoción de la convivencia (S/F)

https://www.fundaciongizagune.net/8-pasos-gestion-conflictos/