Fecha: 12/11/2021

Nombre: Nicole Doménica Vivero Bajaña

Materia/curso: Derecho civil obligaciones y contratos II paralelo “c”

La Fuerza (vicio del consentimiento).

Estimados Licenciados/as:

Deben leer el caso práctico que se expone a continuación y responder las preguntas formuladas
al final. 

El trabajo deberá ser cargado en el sistema hasta el término de la clase del día de hoy viernes 12
de diciembre hasta las 21h00.

El trabajo deberá ser cargado al sistema en formato Pdf. 

CASO PRÁCTICO:

José David inicia el proceso judicial en contra de José Miguel por una deuda de $10.000, se dio
el proceso ejecutivo de conformidad con el Código Orgánico General de Procesos y finalmente
hay sentencia ejecutoriada a favor de José David, donde se ha mandado a pagar la totalidad de
la deuda, más los intereses del caso. Producto de ello José David ha solicitado la ejecución de la
obligación y se debe ir contra los bienes del José Miguel.

El deudor, José Miguel, tiene un carro que asciende al monto de la deuda vencida, por lo que los
funcionarios judiciales y policiales correspondientes han aplicado fuerza y coerción para
arrebatarle el vehículo a José Miguel, en contra de su voluntad, quien evidentemente se resiste y
refuta que se está abusando del poder que la ley les ha conferido a dichos funcionarios.

Desarrolle:

1.- ¿Nos encontramos frente a un caso de fuerza como vicio del consentimiento? Si, no y
por qué.

Si, nos encontramos frente a un caso de fuerza como vicio de consentimiento por motivo de
que, al actuar funcionarios judiciales y policías, están causándole una fuerte impresión al usar la
fuerza y la coerción, además de que la persona sufre un justo temor de verse expuesta sus bienes
a un mal irreparable y grave, ya que al adjudicarse por la fuerza el vehículo, durante la
transición, este puede sufrir algún tipo de daño que baje el valor del bien.

2.- En virtud de su respuesta anterior y el caso propuesto, desarrolle los requisitos

esenciales de la fuerza como vicio del consentimiento.
Para que la fuerza sea considerada como vivió del consentimiento debe contener los siguientes
requisitos:

 Debe ser grave, es decir, capaz de producir una impresión fuerte en una persona de sano
juicio, tomando en cuenta su edad, sexo y condición. (Artículo 1472 del Código
Civil).
 Debe hacer nacer en el ánimo de la persona que la sufre, un justo temor de verse
expuesta ella (o sus bienes), su cónyuge o algunos de sus descendientes o ascendientes a
un mal
irreparable y grave (Artículo 1472, inciso primero, del Código Civil).
 Debe ser actual, es decir que se ejercita al momento de darse el consentimiento, aun
cuando el mal sea futuro.
 Debe ser ilícita e injusta, es decir, contraria al derecho. Por ejemplo:
No hay acto de fuerza si una de las partes amenaza a otra con seguirle
una acción judicial.
 El temor reverencial, es decir, el solo temor de desagradar a las personas a quienes se
debe sumisión y respeto, no basta para viciar el consentimiento. (Artículo 1472, inciso
segundo, del Código Civil). Sin embargo, en ciertos casos, el temor reverencial
agravado puede constituir fuerza, cuando, por ejemplo en el caso de una madre que
amenaza abandonar a su hija encinta al momento del parto, o en las amenazas hechas a
un sacerdote por sus superiores eclesiásticos.
Para que la fuerza sea considerada un vicio del consentimiento debe tener tal impacto que lleva
a una persona a dar el consentimiento de manera coaccionada, es decir, que este no está
expresando su verdadero querer sino algo que la fuerza que se está ejerciendo genera que
exprese.
Por otro lado, no es necesario que la fuerza se ejerza sobre la persona que va a declarar el
consentimiento, pues la fuerza puede infundir temor de que ocurra un mal irreparable a los
descendientes o ascendientes de la persona encargada de dar el consentimiento.
Además de los requisitos mencionados para que la fuerza adquiera el carácter de vicio del
consentimiento el artículo 1473 del código civil establece lo siguiente:
«Para que la fuerza vicie el consentimiento no es necesario que la ejerza aquél que es
beneficiado por ella; basta que se haya empleado la fuerza por cualquiera persona con el
objeto de obtener el consentimiento.»