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Tarea grupal 2 

Unidad 4: Percepción “El elefante encadenado”  

Integrantes: 

Javiera Aguilar Vargas, Catalina León González, Damarise Martínez Martínez,

 Carla Ramírez Barría, Taís Rojas Almazán, Katia Zavala Araya

Universidad Finis Terrae

“Diplomado de Neurociencias aplicadas a la Educación

Fundamento de las neurociencias para el aprendizaje”

Prof. María Macarena Gumucio

Fecha: 08-10-2021

Preguntas:
 
1.- ¿Qué percibe de sí mismo el elefante cuando chico? ¿Está alterada
esa percepción? ¿Dónde se guarda esa percepción? (1 pt)
R- El elefante cuando es pequeño se encuentra en un ambiente de prisión y
percibe que no puede liberarse, no sólo por el hecho de estar encadenado,
sino porque quienes hacen la función de “cuidadores” proveen un ambiente
de reclusión, por lo cual también tiene factores exógenos que influyen en la
percepción sobre su libertad, su cultura ha armado su cerebro como que el
es un dependiente de esa cadena a lo largo de los años, que no hay nada
que pueda hacer para dejar de tenerla. Esta percepción no está alterada,
pues efectivamente la resistencia que opone la estaca es mayor a la fuerza
que el elefante puede ejercer sobre ella. De hecho, la percepción está
sustentada en evidencia, pues, según narra el cuento, el elefante llega a la
conclusión de que no puede liberarse, después de mucho luchar contra su
atadura.
Al ser tan pequeño, esta percepción quedará registrada en su sistema
límbico, en su hipocampo, determinando su identidad posterior y los
intentos por liberarse. 
 

 
 
       2.- ¿Qué percibe cuando es grande? ¿Está alterada esa percepción? (1
pt)
R- Él reconoce esto como su realidad, él percibe que esto es lo que es y no
ha cuestionado la posibilidad de un cambio.  El elefante sigue percibiendo
que es incapaz de liberarse o moverse de aquella estaca, de tal manera
que presenta un autoconcepto distorsionado, pues no es consciente de que
con el paso del tiempo ha ganado tamaño y fuerza; lo que le permitiría
fácilmente soltarse de la estaca que lo retenía en su infancia. 
Dado que su percepción está alterada rígidamente, este presenta síntomas
conversivos (el síntoma conversivo se refiere a la somatización de la
emoción, es decir, un dolor o sensación física a partir de una sensación
emocional, el elefante no presenta conversión) el que no se mueva para
liberarse no tiene que ver con una alteración en lo motor, sino con una falta
de motivación por su alteración en la percepción, si se le motiva se moverá
sin dificultad tal como lo hace en la función; se siente incompetente e
imposibilitado de realizar otra actividad, solo la que realiza en sus funciones
en el circo en el momento de su show; es un animal totalmente dependiente
de otro participante, puede ser que esta conducta del elefante.
 

3.- ¿En qué momento de su vida se produce la alteración de la


percepción? (1pt)
R- La alteración se va forjando lentamente con la experiencia, al intentar
zafarse y fracasar constantemente. Sin embargo, encuentra su punto
cúlmine en el momento en el que el elefante se resigna y acepta su
incapacidad para lograr liberarse. El momento en que el elefante piensa
sobre sí mismo “no puedo, soy débil” levanta un pilar de identidad, que lo
definirá como elefante amaestrado. Aquí se cumple el “somos lo que
vemos” no lo que podríamos llegar a ser.
4.- ¿Qué ocurre a nivel de la corteza prefrontal y áreas motoras? (1 pt)
R- Aunque el cerebro del elefante se encuentre en perfecto estado, sufrirá
alteraciones funcionales producto de las experiencias previas y las
conexiones ya hechas. De manera similar al TNF la alta carga emocional
llevará a que el sistema límbico inhiba las áreas sensoriomotoras, así como
la capacidad consciente de moverse y actuar alojadas en la corteza
prefrontal. Existe una inhibición en las áreas sensoriomotoras desde el
sistema límbico. En su corteza pre- frontal; presenta dificultades para la
toma de decisiones, de organización y la planificación motora.
 
 
5.- ¿Qué otras áreas o circuitos cerebrales piensa usted que están
alteradas? (1 pt)
R- Probablemente se vea alterado el lóbulo parietal en el que se aloja la
conciencia corporal y la integración somatosensorial, pues el elefante tiene
una visión desproporcionada de su corporalidad ante el estímulo estresor. 
Es interesante notar que el elefante de la historia conoce su fortaleza y
habilidad para realizar proezas circenses, pero desconoce su poder frente a
la estaca que lo mantiene cautivo. Por lo mismo, es muy posible que se
encuentre alterado su sistema límbico que genera una respuesta
desmedida hacia la estaca. 
Seguramente el lóbulo pre-frontal también se ve alterado ya que este está
encargado del comportamiento, resolución de problemas, concertación,
personalidad, planificación motora entre otras.
 
6.- Qué neurotransmisores están en déficit o exceso y ante qué
situación momento? Nombre 4. (0,25 c/u, 1 pt)
R- En primer lugar, frente a la presencia de la estaca, hay un exceso de dos
neurotransmisores cortisol y adrenalina, lo que genera una respuesta en la
amígdala que se manifiesta mediante miedo o parálisis. El elefante se
siente constantemente sometido por la cadena que lo mantiene cautivo y
pone en riesgo su sobrevivencia. No obstante, las glándulas suprarrenales
secretan un exceso de estas hormonas, lo que podría poner en riesgo la
salud del animal.
Se detecta un déficit de dopamina, generado por los fracasos sucesivos en
los intentos de escapar. Si desde pequeño el elefante hubiese tenido éxito
en liberarse de la estaca, la secreción de dopamina como recompensa
habría forjado en él una sensación de autoeficacia y realización. Sin
embargo, dado que fracasó en todos sus intentos, lentamente la falta de
motivación fue ganando espacio, hasta que simplemente dejó de intentarlo.
También es probable que se encuentren decrecidos los neurotransmisores
asociados al buen humor, como la serotonina. Esto se refleja cuando el
elefante no logra escapar nunca de la estaca, ya que está amarrada a ella
desde muy pequeño, vive prisionero de por vida en el circo, sin poder tener
la libertad en la vida salvaje como le corresponde, sumándole que él mismo
no escapa porque cree que no puede, lo que produce la baja de serotonina
sucumbido a un estado de ánimo, angustiante y triste. A lo anterior se
suman las precarias condiciones de vida (mala alimentación, poca
exposición al sol, falta de ejercicio por espacio reducido) puesto que como
bien sabemos desde siempre ha existido maltratos en los circos, todas
estas causas suelen acompañar a los animales en cautiverio, que les
impiden sintetizar de manera adecuada este neurotransmisor.
 
7.- ¿Qué podría hacer el niño para liberar al elefante? (1 pt).
R- Es sumamente importante que tanto el niño como el elefante desarrollen,
primero que todo, un vínculo, lo que permitirá generar confianza por parte
de ambos y en función de generar un espacio seguro de trabajo, donde
exista la posibilidad de tiempo, paciencia y apoyo para el ensayo y error.
Esto con el fin de cambiar la percepción que el elefante ha desarrollado
hasta ahora, este deberá ser constante para enseñar al elefante, a través
de la imitación de conductas y/o movimientos para lograr un cambio en su
estado actual. Esto generará en él, emociones positivas como, alegría,
entusiasmo, motivación y validación ante el resultado obtenido en su
entrenamiento o adiestramiento, logrando llegar al objetivo final. El niño
requiere enseñar a reeducar el cerebro del elefante para que pueda
percibirse como capaz del cambio, y lo deberá hacer a través de la
observación, planificación, entendimiento y comprensión, motivando y
entregando seguridad, confianza  al elefante mediante el apoyo guiado, de 
manera que cada vez que logre realizar un movimiento, sin importar qué tan
pequeño sea se entreguen constantes refuerzos positivos, para ir
generando una percepción positiva de sí mismo y que posteriormente
pueda lograr escapar de ahí y liberarse.

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