Está en la página 1de 2

1.

John Locke

En la idea de propiedad desarrollada en su segundo tratado sobre el gobierno civil,


locke establece una doctrina según la cual la política es subordinada cronológica y
ontológicamente a la economía. La propiedad y la actividad económica son
anteriores temporalmente a la existencia de vida política; pertenecen al estado
natural, mientras que la sociedad política es artificial y corresponde a una etapa
posterior al estado natural. Por otra parte, la sociedad civil es formada por los
individuos, con el exclusivo motivo de una mejor salvaguardia de la propiedad, de tal
forma, la política tiene su causa y origen en la economía, de la que se deriva y a
cuyas necesidades se halla constitutivamente subordinada. lo político queda, así,
supeditado al individuo naturalmente propietario de sus derechos; invirtiendo el
orden clásico que ordenaba la economía a la política.

2. Montesquieu

En su teoría de la separación de los poderes del Estado, Montesquieu sostiene que


la distribución jurídica de las funciones ejecutiva, legislativa y judicial sólo podrá
limitar el uso arbitrario del poder y salvaguardar la libertad y los derechos de los
ciudadanos, si se combina con otro principio basado en su distribución social. Por
esta razón describe un modelo institucional en el que la diversidad propia de una
sociedad estamental -la sociedad inglesa- se integra formalmente a los poderes del
Estado.

Los debates posteriores que dieron vida a las constituciones modernas -debates
reconocidamente deudores de la teoría de Montesquieu- se centraron
exclusivamente en el principio de distribución jurídica, transformándolo en un pilar
fundamental en la organización de los Estados. Por más de dos siglos los expertos
del derecho polemizaron sobre los alcances de este principio, en un debate en el
que se enfrentaron los defensores de la autonomía absoluta de cada poder con
aquellos que abogaban por su separación relativa.

3. Juan Jacobo Rousseau

Rousseau trasciende gracias a su magia y creatividad literaria. Su alto desempeño


en el mundo de las letras tiene alto impacto en lo político y educativo. Sus
planteamientos dieron origen a profundos cambios en lo político, el contrato social
trajo como consecuencia la inspiración de líderes para hacer la revolución francesa
en 1789. Después de ese hecho histórico comienza una nueva etapa en la vida de
Europa. En otras palabras, comienza el final de la monarquía como sistema político.
Los planteamientos de Rousseau se inspiran en la justicia, la lealtad, el trabajo y
demás valores que el ser humano pueda adquirir en la vida. Caracterizado también
por ser un gran lector, escribiente y músico desde temprana edad fue amante de los
clásicos griegos como la República de Platón y la política de Aristóteles entre otros.
Además, seguidor de las ideas políticas de Voltaire, Locke, Descartes y Leibniz.

Resumiendo lo tratado, Rousseau con sus obras promueve la democracia y funda el


pensamiento crítico.

4. Nicolas Maquiavelo

Vencer mediante la gloria o la fama el cerco que con nuestra vida el tiempo pone a
nuestra memoria fue el ideal del héroe antiguo; mantener en vida las gestas, y a sus
autores, que merecían sobrevivir a su tiempo fue el ideal que se marcaron, junto a
ciertos poetas, los historiadores antiguos, y por eso escribieron historia: para
enseñar a la política modelos a adoptar y al futuro verdades eternas que aprender
en aras de instituir un mejor orden social.

Maquiavelo alcanzó el ideal del héroe antiguo mediante su tarea de historiador y de


politólogo, y hoy forma parte de los dioses elegidos, de esa restringida constelación
de clásicos olímpicos cuya presencia se percibe constantemente entre nosotros.

También podría gustarte