Un nuevo día para producir
comida limpia sin pesticidas
Textos y fotogra a:
Álvaro Calonje Daly. Paisajista
Hemos crecido y vivido por
muchos años con la idea de que
es normal y está bien consumir
alimentos con pes cidas. Nos
han contado la historia de
que hay niveles seguros de
venenos en nuestra sangre.
La verdad es que nuestros
cuerpos no están diseñados
para tener una carga de
tóxicos en su interior.
Para lograr el mejor desarrollo
de las plantas en nuestro jardín o
huerta, siempre debemos tener en
cuenta las necesidades de las plantas,
como lo son la luz solar, el agua, la
nutrición y el suelo donde cul vamos.
En el suelo entramos en un punto muy importante como es
el de garan zar las condiciones óp mas para el crecimiento
y desarrollo adecuado de las plantas, esto se logra
aportándole al suelo los elementos necesarios para su buen
funcionamiento, tanto sico, químico y biológico.
El suelo es lo más importante y debe ser tratado como un
conjunto de factores que influencian directamente la
sostenibilidad de ese medio ambiente que estamos
creando. Cuando se habla de producción limpia y orgánica,
nos referimos a minimizar y hasta reducir a cero el uso de
agentes químicos, ya sean fer lizantes de síntesis química o
plaguicidas, estos compuestos actúan en el suelo como un
agente externo donde que influye directamente sobre la
vida del suelo, disminuyendo la diversidad biológica en el
mismo y especializando nuestras plantas a un modo de vida
no natural.
En un suelo sano, se produce alimentos sanos. Este suelo
está libre de compuestos químicos tóxicos y es diverso
biológicamente. Esto siempre debe tenerse en cuenta, a la
hora de aplicar cualquier sustancia en el suelo.
Los bioinsumos surgen en esta historia, como agentes de
mejoramiento de la diversidad biológica en el suelo, así
como control de los patógenos que pueden afectar nuestra
producción, uno de los productos estrella usados, es el de
los caldos microbiológicos (MM) microrganismos de monte,
que representa traer a nuestras plantas la diversidad
biológica de los suelos del bosque, con una mezcla de
bacterias benéficas, hongos y microorganismos , que nos
Producción orgánica de brócoli.
Km-29 vía al Mar,
Cali – Buenaventura.
ayudan a mejorar el acceso de las
p l a nta s a l o s n u t r i e nte s ,
también mejoran la ac vidad
metabólica de las plantas en
casos de estrés y además
nos ayudan a ejercer control
en los posibles patógenos
que halla en el suelo. Todo
esto adicional a un buen
contenido de materia
orgánica en el suelo, para
que estos microorganismos
benéficos puedan sobrevivir.
El suelo debe de ser considerado
como un organismo inteligente y para
enriquecerlo tenemos una receta de
probio cos vegetales. Microorganismos de
Monte (MM), Receta: 1 bulto man llo de bosque
(hojarasca descompuesta), 1 bulto de salvado de trigo o
afrecho, 2 litros de melaza diluida en agua. Se hace la
prueba de humedad del puño. Se deja sellado y apisonado
por 30 días en una caneca de 40 litros, Luego usar como Té
para inocular los cul vos, tanto foliar como aplicado al
suelo.
En el caso del control biológico de insectos y hongos, existen
en el mercado variedad de productos a base de extractos
naturales de plantas, como Neem, Aji y Ajo o el uso de
microorganismos entomopatogenos como el Beauveria
bassiana (un hongo común en los suelos que parasita y
controla diversos insectos) o Bacilus thuringensis (una
bacteria igualmente usada como plaguicida natural), que
nos ayudan a controlar estos patógenos que se puedan
presentar en el jardín. Sin antes recordar que, con un suelo
sano y plantas bien nutridas, no entran enfermedades que
puedan aniquilar el cul vo. Una planta bien nutrida es
aquella donde se ha completado toda la cadena metabólica
de la misma y se han procesado todos sus productos. Para
esto es necesaria una buena aireación del suelo (Textura del
suelo), adecuado contenido de humedad (Riego adecuado),
contenido y disponibilidad de elementos necesarios para la
nutrición de la planta y la existencia de los microorganismos
que nos van a ayudar que exista esta disponibilidad de
nutrientes. Muy importante para finalizar es el uso de
harinas de rocas, harinas de huesos y compostas orgánicas,
en el enriquecimiento tanto mineral como biológico del
suelo, para poder tener plantas felices, que respondan a
nuestras expecta vas y que en el caso de estar
alimentándonos de ellas, nos nutran efec vamente.