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Ramón y Yolanda conviven como pareja de hecho desde enero de 2001 en Madrid, en un chalé
comprado por Yolanda con el dinero que heredó a la muerte de sus padres. Tienen dos hijos
en común, de 15 y 13 años. Ramón es funcionario del Ayuntamiento y Yolanda es abogada.
Tenían una cuenta bancaria común, en la que cada uno ingresaba todos los meses 1.000 euros
para cubrir los gastos ordinarios (servicios de la vivienda, colegios, etc.). Todos los gastos
extras- ocio, vacaciones…-los pagaba Yolanda (incluso gastos médicos de Ramón, como el
coste de un implante dental y de un audífono, ambos financiados y pendientes a día de hoy),
pues sus ingresos eran bastante superiores a los de Ramón.
Luis llevaba conviviendo con Julieta 30 años, también como pareja de hecho. En esos 30 años
Julieta ayudó a Luis como cocinera en el restaurante del que era propietario, sin estar dada de
alta en la seguridad social, ni recibir contraprestación alguna. Julieta dejó de trabajar como
enfermera cuando se fue a vivir con Luis; se ha ocupado de la casa y de los tres hijos tenidos
con él. Julieta y Luis siempre comentaban en las reuniones familiares o con amigos que el
restaurante era propiedad de los dos.
CUESTIONES:
Los hijos podrán seguir viviendo con cualquiera de los dos progenitores, habrá que
atender al pacto que lleguen los padres o, de no existir tal pacto, a lo que disponga el
juez que decidirá en virtud de los intereses de los menores como se establece en el art.
92.2 CC. Se sigue el mismo procedimiento que si hubiera sido un matrimonio ya que hay
menores de por medio.
Art 92. 2 CC: 2. El Juez, cuando deba adoptar cualquier medida sobre la custodia, el
cuidado y la educación de los hijos menores, velará por el cumplimiento de su derecho a
ser oídos y emitirá una resolución motivada en el interés superior del menor sobre esta
cuestión.
- ¿Podrá él seguir usando la vivienda familiar?
Ramón podría seguir usando la casa siempre que prevalezca el interés de los menores.
Si se le atribuye la custodia a Ramón, sí que podría seguir usando la vivienda familiar ya
que se permite la interpretación analógica del artículo 96.1 CC ya que no se podría dar
un trato distinto a los menores por proceder de una pareja de hecho en vez de un
matrimonio.
art. 96.1 CC: el uso de la vivienda familiar y de los objetos de uso ordinario de ella
corresponderá a los hijos comunes menores de edad y al cónyuge en cuya compañía
queden, hasta que todos aquellos alcancen la mayoría de edad.
Por lo tanto, se permite la interpretación analógica de este artículo ya que no se podría
dar un trato distinto a los menores por proceder de una pareja de hecho en vez de un
matrimonio.
- ¿Tiene derecho a parte del premio conseguido por Yolanda?
El art. 1351 CC dispone: Las ganancias obtenidas por cualquiera de los cónyuges en el
juego o las procedentes de otras causas que eximan de la restitución pertenecerán a la
sociedad de gananciales.
La jurisprudencia ha afirmado muchas veces que dado que las uniones de hecho y el
matrimonio no son realidades equivalentes, no se puede aplicar por analogía las
normas de sociedad de gananciales entre las que se encuentra este art. 1351 CC.
Por lo tanto, no pudiéndose aplicar la analogía con este artículo, Ramón no podrá
reclamar parte del premio a Yolanda. Debería haber un pacto expreso o tácito que diera
lugar a una comunidad sobre el premio obtenido.
1371 CC: las deudas o pérdidas por el juego no son comunes
- ¿Tiene derecho a reclamarle alguna cantidad a Yolanda por la ruptura de su relación?
No, no podrá reclamarle nada Ramón a Yolanda ya que se estaría atentando contra la
libertad de Yolanda, libertad que tiene todo conviviente para poner fin a la unión de
hecho.
Además, la jurisprudencia del TS establece que no se podrá aplicar análogamente el art
97 CC que establece: El cónyuge al que la separación o el divorcio produzca un
desequilibrio económico en relación con la posición del otro, que implique un
empeoramiento en su situación anterior en el matrimonio, tendrá derecho a una
compensación que podrá consistir en una pensión temporal o por tiempo indefinido, o
en una prestación única, según se determine en el convenio regulador o en la sentencia.
Los gastos corrientes se harán en solidaridad entre los cónyuges si hay un régimen de
gananciales.
ART 1319 CC: “Cualquiera de los cónyuges podrá realizar los actos encaminados a
atender las necesidades ordinarias de la familia, encomendadas a su cuidado,
conforme al uso del lugar y a las circunstancias de la misma. De las deudas contraídas
en el ejercicio de esta potestad responderán solidariamente los bienes comunes y los
del cónyuge que contraiga la deuda y, subsidiariamente, los del otro cónyuge. El que
hubiere aportado caudales propios para satisfacción de tales necesidades tendrá
derecho a ser reintegrado de conformidad con su régimen matrimonial.”
Sin embargo, lo cierto es que el TS, desde hace unos años, viene
realizado una relectura del art. 97 CC, que lo aleja de la originaria idea
de solidaridad post conyugal, para aproximarlo a la idea de reparación
de la pérdida de oportunidades. De acuerdo con la doctrina
jurisprudencial actual, a través de la pensión se compensa,
exclusivamente, el desequilibrio que tiene su origen en el
empobrecimiento que sufre uno de los cónyuges por haberse dedicado
durante el matrimonio al cuidado de la familia, de manera exclusiva o
prioritaria, o por haber colaborado desinteresadamente en la actividad
profesional o económica del otro, con la consiguiente pérdida de
oportunidades y dificultad para poder volver a acceder a un empleo.
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