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Diariamente producimos e interpretamos una gran diversidad de textos y somos perfectamente
capaces de distinguir una conversación de una entrevista o de una conferencia y sabemos que no es igual el
prospecto de una medicina que una carta. Y esto lo sabemos por tres factores:
1. 1. La intencionalidad: informar, contar, persuadir, rogar, disculpar, etc.
2. 2. El ámbito de uso: Los actos comunicativos se realizan en distintos ámbitos sociales: en el
ambiente familiar, en el colegio, en el trabajo… En ellos actuamos como hablantes adoptando
diferentes papeles (alumno, familiar, trabajador, etc.) y asignamos igualmente distintos papeles
a nuestros interlocutores (profesor, padre, amigo, hermano, jefe, compañero…)
3. 3. Los rasgos caracterizadores: son la forma externa, la estructura del contenido, el empleo
del lenguaje, etc.
Cuando nos comunicamos recurrimos a las distintas formas o géneros textuales disponibles en
nuestro contexto cultural. Observa el siguiente cuadro:
ÁMBITO DE USO FINALIDAD PRÁCTICA FINALIDAD ESTÉTICA
-Carta profesional, personal.
RELACIONES CON -Avisos.
ENTIDADES E -Instrucciones.
INTERPERSONALES -Normas.
-Género informativo: -Géneros de opinión:
MEDIOS DE
noticia, crónica, editorial, artículo,
COMUNICACIÓN
reportaje, etc. crítica…
SOCIAL
-Exposición oral y
escrita.
INSTITUCIÓN
-Trabajos.
ACDÉMICA O DOCENTE
-Instrucciones
-Diversos géneros
EL MUNDO DE LA literarios: narrativa, lírica,
LITERATURA teatro…
DEFINICIÓN DE TEXTO
Ya sabes que podemos definir el texto de varias maneras:
Texto es cualquier manifestación verbal que se produzca en un intercambio comunicativo.
El texto es una unidad total de comunicación, oral o escrita, con una determinada intención y que
está bien estructurada sintáctica y semánticamente.
Una de las definiciones más conocidas dice que "texto es aquella unidad lingüística comunicativa
cuya interpretación y producción depende del contexto sociocultural y situacional."
Un texto no es una unidad indivisible, ya que puede ser descompuesto en las distintas partes que lo
constituyen: capítulos, párrafos, oraciones, etc. Para producir y analizar textos, es fundamental conocer las
distintas tipologías textuales, o formas de elocución o del discurso:
1. 1. Exposición.
2. 2. Narración
3. 3. Descripción.
4. 4. Argumentación.
5. 5. Diálogo [en preparación].
6. 6. Prescripción [en preparación].
EL TEXTO EXPOSITIVO. ESTRUCTURAS Y CARACTERÍSTICAS.
INTRODUCCIÓN.
Un examen, un trabajo escolar, un libro de texto, una conferencia, un anuncio, el prospecto de un
medicamento, son textos expositivos perfectamente conocidos por nosotros. La exposición es un tipo de
texto cuyo objetivo es el de ofrecer un tema cualquiera al receptor de forma clara y ordenada.
La finalidad de los textos expositivos es la pura transmisión de información, con el fin de informar al
receptor; por eso, porque nos transmiten información, también se les denomina textos informativos. Aunque
este tipo de texto puede aparecer de forma independiente, es normal que se combine con otros tipos; por
ejemplo, frecuentemente se insertan textos o fragmentos expositivos en textos argumentativos.
La percepción es un proceso mental mediante el cual se obtienen datos del exterior que son organizados
de un modo significativo en el interior del individuo, para tomar conciencia del mundo que le rodea. La
forma que tiene un ser humano de conectarse con el exterior, con el entorno, es, a través de los órganos
de los sentidos. La luz, las imágenes visuales, los sonidos, los olores, los sabores y los contactos
corporales, no son más que estímulos, que son recogidos por los órganos correspondientes,
especializados para ese fin.
Obsérvese que el texto anterior está completamente impersonalizado, por eso se corresponde con el
tipo de texto elocutivo, propio del discurso científico o del técnico. En este texto predomina la
transparencia, la falta de tensión y, sobre todo, la objetividad.
La percepción es un proceso mental mediante el cual obtenemos datos del exterior y los organizamos
de un modo significativo en nuestro interior, para tomar conciencia del mundo que nos rodea. La forma
de conectarnos con nuestro propio entorno es a través de los órganos de los sentidos. La luz, las
imágenes visuales, los sonidos, los olores, los sabores y los contactos de nuestro cuerpo, no son más
que estímulos que recogemos gracias a nuestros órganos especializados para este fin.
Sin embargo, al margen de textos científicos o técnicos, la exposición pura no es muy corriente ni muy
factible, pues siempre se presenta la necesidad de establecer algunas relaciones de causa-
consecuencia y de persuadir mediante determinados argumentos. Ni siquiera los discursos informativos
de los medios de comunicación como prensa, radio, televisión, internet, etc., intentan transmitir las
noticias de manera imparcial escapan a las tendencias ideologías que, en ocasiones de una manera
inconsciente, impregnan la información. Por ello la exposición suele estar relacionada con la
argumentación. No es de olvidar que la intención fundamental del discurso de fondo ideológico es la de
persuadir, la de convencer.
Ejercicio
1. Analice en los textos anteriores cuáles son las ideas centrales y principales en cada uno, y en el caso
del texto sobre las fiestas taurinas, determine los argumentos en contra y a favor de la existencia de las
mismas.
Orden: consiste en presentar la información, y por tanto, los argumentos (si se trata de argumentar), en
forma ordenada, independientemente del criterio seleccionado; esto facilitará la comprensión del
argumento al lector o al auditorio. Es importante ganar en claridad desde el principio en cuanto a cuál es
el orden más adecuado que se debe seguir, y desarrollar así las ideas según esa disposición. Se puede
optar, por ejemplos, por presentar en primer lugar la idea principal y completarla con ideas secundarias
relacionadas con el tema; por seguir un orden cronológico para explicar los cambios de perspectiva
histórica; por presentar primero los argumentos a favor y luego los argumentos en contra
(contraargumentos ), etc.
Haciendo al texto coherente, tanto global, local como temáticamente, para lo que es
imprescindible en la mayoría de los casos, el bosquejo de un plan global, de un esquema
tentativo provisional (o racimo de ideas) de las ideas que va a desarrollar. El esquema
provisional podría ser: a) documentos acerca del tema general, b) listado de las ideas
principales que le tema nos sugiere, c) eliminación de las ideas repetidas, d) ordenación con
números progresivos de las ideas principales por desarrollar según una Jerarquización
adecuada y conveniente.
Respetando los procedimientos cohesivos.
Intercalando ejemplos aclaratorios.
Adjuntando material gráfico: videos, fotos, grabados, cuadros sinópticos, mapas, tablas, etc.
Utilizando paráfrasis, es decir, presentando la misma idea con diferentes palabras, etc.
Unidad de estilo. El estilo debe caracterizar al escritor, y para ello él debe respetar sus cualidades
fundamentales:
_ Tono, adaptado al tema (humorístico, grave o serio, íntimo, satírico, coloquial, etc.)
_ precisión,
_ claridad,
_ concisión,
_ sencillez,
_ originalidad,
_ sinceridad, sin caer en lo superficial.
Es muy importante una buena fundamentación de las ideas, porque si el autor del discurso no selecciona
debidamente sus referentes; si no analiza bien el tema y los subtemas y las bases que determinan sus
conceptos; si sus fuentes de información son dudosas, superficiales o en parte falsas, corre el riesgo de
que el texto, resultado de su esfuerzo, sea rechazad por sus destinatarios (receptores), aun cuando haya
cumplido con todos los requisitos formales de presentación.
Según el público al que va dirigido un texto expositivo –más o menos culto– y de la intención del autor –
didáctica o no– hay dos modalidades de textos expositivos: la modalidad divulgativa y la modalidad
especializada.
Miriam Álvarez opina que no se puede hablar de una separación tajante y rígida entre los textos
expositivos y argumentativos.
La ordenación del material informativo depende de qué sabemos, pero también de lo que
creemos que saben nuestros receptores.
La exposición tiene como objetivo "presentar una cuestión con el deseo de hacerla conocer y
comprender a otras personas". Requiere un conocimiento global de la cuestión y exige un
desarrollo progresivo y articulado de las ideas que contribuyen a su manifestación. La exposición
se puede considerar como opuesta a la síntesis. La exposición es la forma que se exige en la
gran mayoría de los exámenes y por ello se ha de prestar especial atención.
1. Modalidad divulgativa. El autor informa lo más clara y objetivamente posible sobre un tema de
interés general. Va dirigido a un amplio sector del público.
B. La ordenación lógica de los contenidos está perfectamente cuidada: se parte de una idea central
y, a continuación, se demuestra mediante pruebas y ejemplos.
C. El orden seguido suele ser el deductivo y además se utiliza una terminología propia y específica.
D. Puede presentarse un orden inductivo que parta de lo particular para llegar a lo general.
E. Con frecuencia en la exposición aparece una relación de causalidad, que alude a un proceso
donde ciertos hechos provocan unos determinados resultados.
2.- ESTRUCTURAS.
Para comprender un texto expositivo tenemos que entender las ideas centrales y la relación que se
establece entre ellas. Dicha relación se manifiesta en diferentes estructuras adecuadas en cada caso al
contenido del texto.
1. Estructura descriptivo-enumerativa. Se utiliza para presentar una serie de hechos o de datos de la
misma importancia sobre un tema. En esta estructura aparecen enlaces ordenadores del discurso como: en
primer lugar, además, por último. Ejemplo de estructura descriptivo-enumerativa:
La capa de ozono se encuentra en la estratosfera, entre 15 y 35 kilómetros por encima de la superficie
terrestre. Los rayos ultravioletas del sol transforman las moléculas del oxígeno: en lugar de dos átomos de
oxígeno (simbolizados por O2 ), contendrían tres, y ese "isótopo" del oxígeno se llama ozono (O3).
2. Estructura comparativa. Es la apropiada para señalar semejanzas y diferencias entre objetos o
ideas. Son propios de esta estructura enlaces como por el contrario, frente a, de manera parecida así como
las estructuras comparativas del tipo es como, es igual que.
Las zonas templadas parecen favorecer la calidad de vida. En ellas el desarrollo de formas grupales
públicas es más fácil que en las zonas de frío extremo, y la actividad individual, más sencilla que en las de
calor.
3. Estructura de secuencia y de causa-efecto. Para exponer en orden los hechos se recurre a la
secuencia; pero si interesa mostrar que unas ideas (o hechos) derivan de otras, se emplea la estructura de
causa-efecto. Elementos ordenadores del discurso propios de la secuencia son palabras como primero,
después, a continuación.
Quitamos la piel a la pescadilla y la cortamos en rodajas. Después la salpimentamos y enharinamos. La
doramos en aceite caliente. Y, finalmente, la servimos acompañada de una salsa de puerros y manzana.
4. Estructura deductiva o analizante. La idea principal se expone al comienzo del texto y, a
continuación, se demuestra con datos particulares.
5. Estructura inductiva o sintetizante. Parte de la exposición de datos o ejemplos particulares para
llegar a la idea general.
Estos textos, en los que prevalece el carácter objetivo de la información sobre cualquier intención
estética, suelen responder a estructuras simples. María S. Salazar habla de los siguientes tipos
de esquemas:
C. Esquema paralelo. Las ideas expuestas no están subordinadas unas a otras por su contenido, y
tienen además igual importancia.
3.- CARACTERÍSTICAS.
Su finalidad es la transmisión de información. El texto expositivo se centra en el contenido, que el receptor
debe percibir claramente. La forma de expresión debe garantizar, por tanto, la recepción de ese contenido.
Con la información que se transmite se quiere facilitar el conocimiento del texto o materia.
Características lingüísticas
Sintaxis: estructuras oracionales que no dificulten la comprensión, por eso es frecuente la presencia de
oraciones de carácter explicativo. También es frecuente la aparición de aclaraciones que se presentan
como aposiciones o como incisos (informaciones que se intercalan entre comas, rayas o paréntesis).
Aparecen con frecuencia proposiciones subordinadas de relativo, tanto explicativas como especificativas.
Léxico. Se utiliza un léxico específico; los términos no tienen ambigüedad y están usados según su valor
denotativo, por lo tanto, la función lingüística predominantes es la referencial.
El verbo: el tiempo verbal propio de este tipo de texto es el presente de indicativo (presente atemporal),
aunque pueden aparecer tiempos del pasado. Si el contenido son instrucciones, pueden aparecer el
imperativo o el presente de subjuntivo. Es frecuente la aparición de estructuras pasivas, puras o reflejas.
Se utilizan sustantivos con un criterio de precisión (Terminología específica del ámbito al que se refiere el
texto: tecnicismos).
Se utilizan adjetivos y adverbios para precisar. Los adjetivos suelen ser pocos y especificativos, y aparecen
poco o no aparecen los valorativos, que son superfluos o llevan una carga afectiva que no es propia de la
neutralidad de este tipo de textos.
Coherencia y cohesión textuales. El contenido aparece estructurado de una determinada manera, y las
diferentes secuencias se relacionan entre sí mediante elementos ordenadores del discurso.
Lenguaje no verbal: a veces aparecen elementos icónicos (gráficos, diagramas, esquemas, etc.) para
facilitar la comprensión de la información.
Empleo de la descripción: en textos donde se enumera la naturaleza, partes y finalidad de un objeto, de un
fenómeno o de determinados aparatos aparecen fragmentos descriptivos.
LA DESCRIPCIÓN, COMO ELEMENTO DE LA EXPOSICIÓN.
C. Deben evitarse los juicios de valor, por tanto los adjetivos serán generalmente especificativos.
D. Función específicamente explicativa, lo que redundará en una organización de los datos que
pretende comunicarse. En ningún momento se persigue la intención estética. No obstante, es
posible encontrar diversos recursos, como la comparación, que facilitan la comprensión.
2. Los ejemplos. Es otra de las características de la exposición. Sirven para apoyar lo que se trata
de explicar o analizar, a la vez que facilitan la comprensión del fenómeno por parte del receptor.
3. El guión y el resumen. Tan importante es elaborar un guión antes de empezar a escribir como
aprender a resumir y a sintetizar un texto. El resumen exige una perfecta comprensión del texto,
después de una lectura atenta del mismo. Desde la perspectiva del alumno, éste intentará
ordenar los contenidos más significativos del texto, dejando al margen los detalles irrelevantes.
De aquí podría pasarse a la idea matriz que ha originado el texto, y que sería el punto de partida
del guión, si lo contemplamos ahora desde la perspectiva del autor. Se observará a continuación
de qué forma aparecen cohesionadas las distintas partes del texto.
CARACTERÍSTICAS LINGÜÍSTICAS.
La finalidad eminentemente práctica de la exposición determina los rasgos lingüísticos que intervienen
en su expresión:
M. Álvarez destaca que, aunque es posible señalar tendencias más o menos generalizadas, no
puede hablarse de normas estables. Predomina una expresión neutral en la mayoría de los
textos, pero no una excesiva simplicidad sintáctica:
El léxico.
Se utiliza un léxico específico, según la temática de que se trate y del nivel en que nos
encontremos. Los términos empleados no deben ser ambiguos en ningún caso, se toman, por
tanto en su valor denotativo, pues la exposición de las ideas tiene que ser precisa.
Los textos científicos y técnicos pertenecen normalmente a los tipos de expresión denominados
exposición y argumentación, caracterizándose fundamentalmente por poseer terminologías
propias. Hoy en día esta terminología es muy abundante y se amplía constantemente.
Según Lázaro la terminología científica no escapa a una circunstancia común a todas las
lenguas: en ninguna de ellas, salvo algunas excepciones, se conocen vocablos radicalmente
inventados. Existen diversas formas de creación de tecnicismos:
1. Empleando elementos del griego y del latín. Hoy sigue siendo muy empleada.
2. Mediante acronimia.
B. Adaptándolo fónicamente.
C. Haciendo un calco (rascacielos < skycraper), traducción (Corriente del golfo < Gulf-
Stream) o sustitución (cinta < tape)
Queda definido el ensayo como vehículo de la comunicación del pensamiento en sus diversas
facetas. El propósito estético queda subordinado a fines ideológicos, a pesar de que hoy, por
ejemplo en el ensayo periodístico, se cultiva con un alto grado de intención artística.
B. La temática es variada.
C. El estilo es "prosa literaria sin estructura prefijada, que admite la exposición y la argumentación
lógica, junto a las digresiones, en un escrito breve sin intención de exhaustividad".
Montaigne se considera el introductor del término, en 1580, sin embargo consideraba ensayo
como un desarrollo del proceso intelectual, no como género.
Para Lázaro la invención del género debe ser atribuida al franciscano fran Antonio de Guevara,
en 1545, con "Menosprecio de corte y alabanza de aldea". Parece que el prosista galo se inspiró
en Guevara para hacer sus Essais.
En la configuración del ensayo es fundamental la figura del lector, pues constituye el punto de
destino. Esto explica las reiteradas alusiones a los lectores que se hacen, como si se intentara
abrir un diálogo.
En cuanto a los recursos lingüísticos falta una tendencia definida. Conserva la precisión y
claridad y con frecuencia utiliza recursos estéticos propios del lenguaje coloquial.
Posee una rica y compleja naturaleza, de ahí la dificultad que entraña elaborar una tipología.
Pueden clasificarse también según la actitud del autor, y entonces se hablaría de ensayos
informativos, irónicos, cómicos... Un grupo bien definido sería el constituido por los ensayos de
crítica.
A. Su estructura es libre. La línea de pensamiento no sigue un camino prefijado, sino que discurre
libremente. Esta característica está en consonancia con el propósito último del ensayo, ya que
éste pretende sobre todo sugerir, y no tanto proporcionar una información exhaustiva sobre un
tema. A pesar de que la estructura es libre, es frecuente, sin embargo, la utilización de la
estructura deductiva.
B. Se utilizan con frecuencia citas. Encuentra sus raíces en la tradición oral, constituida por el
acervo de proverbios, máximas y aforismos. Las citas aparecen con una finalidad diferente a la
que se ha señalado para la argumentación, es decir, no se pretende recargar al texto de
erudición; al contrario ponen de relieve la conexión con una tradición legitimada.
C. La brevedad. Puesto que su fin no es transmitir todo lo que se sabe sobre un tema el ensayo se
supedita a la brevedad, pero la unidad interna temática será la que dicte en última instancia la
extensión adecuada.
E. Carácter subjetivo. El enfoque personal condiciona el tono con que se interpreta el mundo, la
vida, la naturaleza, los seres humanos. En resumen el ensayo proyecta la personalidad del
ensayista, lo que ocasiona la entrada de datos autobiográficos con bastante frecuencia.
7.- EL ENSAYO Y LA NOVELA.
Aunque son términos tradicionalmente separados, el ensayo parece transgredir esta frontera y formar
parte de la novela. La incrustación del discurso ensayo en la novela corre paralela, por ejemplo, a la
desaparición del personaje. Se trata de una transgresión genérica que posiblemente está marcando un
nuevo rumbo a ambos géneros.
El ensayo fue creado por Miguel de Montaigne, en el siglo XVII. Puede ser de argumentación y de
discusión. Su objetivo es defender una tesis, persuadir. Supone un especial rigor del pensamiento lógico
y de construcción.
El ensayo argumentativo comienza asumiendo una postura fundamental, que sirve como tesis del
mismo. El paso más importante, pues, en el proceso de redactar un ensayo de este tipo es el
planteamiento preciso de esa postura fundamental. Esto lleva a indagar con profundidad sobre las
posturas contrarias a la propia, y de ese modo estar en condiciones de reconocer (y contradecir o
contraargumentar) las objeciones que existan. Es importante e imprescindible convencer al lector de que
se han considerado todas las opiniones sobre el tema y que se ha llegado a la conclusión racional de
que la tesis que se defiende es la más acertada.
Para apoyar la tesis, es válido ofrecer al lector una idea de la trayectoria o evolución del problema, del
origen del debate, etc. Las técnicas descriptivas o narrativas estimulan las emociones del lector, sobre
todo, si se narran hechos reales.
El ensayo puede comenzar por los argumentos menos importantes para después ir desarrollando los
que son imprescindibles y del todo importantes. Es necesario para el autor del ensayo el conocimiento
del destinatario, del tipo de lector que leerá su ensayo.
El planteamiento del problema o de la postura fundamental por lo general contiene dos partes: en la
primera se admite que existen posiciones contrarias, y en la segunda se presenta la posición o tesis que
planteará el ensayo.
Comprender el tema y delimitarlo como tal (no confundirlo con otros temas próximos).
Estudiar ese tema en su problemática de detalles, e inventariarlos.
Seleccionar las ideas o materiales y documentos relacionados con el tema ( fichas de
contenido ):
_ haciendo relaciones, correspondencias entre las ideas propias y las ajenas que
tratan el problema;
_ apreciando y juzgando ideas ajenas;
_ extrayendo de esa comparación, qué podrá estar estructurado así:
.
1. Introducción (se define el problema y se enuncia brevemente el tema)
_ La interrogación retórica.
3. Conclusiones (se vuelve al tema y se demuestra su validez, en la mayoría de los casos, por
generalización).
Como generalmente la argumentación se encadena partiendo no sólo de una posición o una tesis, sino
de dos posiciones o dos maneras diferentes de expresar la tesis, en estos casos, contradictorias, hay
dos tipos de ensayos argumentativos fundamentales:
1ero. Se presenta una postura o tesis con sus objeciones y se argumenta a favor.
Tema: Los prejuicios acerca de la posibilidad de las mujeres de ocupar cargos de dirección
Párrafo 5: Conclusiones
2do. Se presentan varias posturas o tesis, que pueden asumirse con respecto a un tema. Como mínimo
se presenta una postura contraria y la que se defiende.
1ero. Se presenta una postura o tesis con sus objeciones y se argumenta a favor.
Ejemplo esquemático:
Tema: Los prejuicios acerca de la posibilidad de las mujeres de ocupar cargos de dirección
Tesis: La mujer tiene amplias y excelentes condiciones para ocupar cargo de dirección
empresarial
2do. Se presentan varias posturas o tesis, que pueden asumirse con respecto a un tema. Como mínimo
se presenta una postura contraria y la que se defiende.
Ejemplo esquemático:
Introducción:
Tesis fundamental: Aunque mucho creen que el aborto es inmoral, hay razones por las cuales debe
defenderse
Ejercicio
¿Qué importancia
tiene
el tema?
Objeciones posibles
¿Cómo las respondo?
Esbozar personalmente
una relación jerárquica
de los contenidos
principales
Proponer algunas técnicas de desarrollo:
Ejemplos, símiles, definiciones,
reiteraciones, comparaciones,
pormenorizaciones, etc.
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
Conocimiento de los
¿Qué información sirve para Términos de la lectura
contestar las preguntas anteriores? exploratoria, de la encuesta,
apuntes, fichas;
1.
Saber qué tipo de discurso
de texto
Elaboración del esquema
2. fundamental del discurso (preguntas
y respuestas)
3.
4.
5.
1. De la lectura de los siguientes fragmentos de textos ensayísticos (argumentativos), analice: tono; las
técnicas o estrategias que se emplean para influir sobre el lector; la actitud del autor hacia el tema;
identificación del destinatario (tipo de lector) si es posible.
(Buscar el profesor los fragmentos de ensayo o ensayos cortos)
a) decidir cuál es la tesis que se va a tomar y a qué tipo de lector va dirigido el ensayo;
b) hacer un esquema que incluya la tesis, las oraciones temáticas y / o principales para
cada párrafo y las técnicas o estrategias, y procedimientos de desarrollo de párrafo que
empleará;
c) compartir su esquema con la clase entera, y discutirlo para así convencer al lector hipotético.
1. Escoja un tema apropiado. Por ejemplo, hable de algo que Ud. Conozca que sea motivo de
controversia. Adopte una postura que tenga varias posibles interpretaciones o haga la crítica
de un aspecto común y colectivamente aceptado.
2. Considere y estúdielas tesis contrarias, luego aclare y defina la que Ud. Asumirá.
3. Elabore la tesis fundamental ( tesis de ensayo ), que debe incluir la tesis contraria
(o problema) y la tesis que se defiende. Se puede incluir alguna recomendación
para ejecutar alguna acción o se puede sugerir una solución.
5. Busque los argumentos que fundamenten la tesis fundamental o haga una lista de
aquellos por los que ha asumido esa tesis que defiende.
8. Escriba el ensayo.
10. Solicite a un compañero de aula que lea su ensayo, y estudie Ud. su reacción.
Ejercicio
1. Escoja un tema que haya sido motivo de controversia o que resulte polémico para la
mayoría de las personas en su entorno en este último año. Escriba su ensayo con la
intención de persuadir a sus lectores de lo acertado de la tesis que Ud. defiende.
Incluya en su ensayo:
El propósito del ensayo: ¿Qué cambio(s) desea Ud. que se produzcan en los lectores?
La identificación de los lectores.
El ensayo con:
a) la tesis,
b) la opinión del escritor identificada,
c) los hechos o ejemplos que respaldan la opinión del escritor identificados
(argumentos), y
d) la observación por escrito acerca del tono adoptado hacia el tema y hacia el lector.
Para revisar un ensayo Ud. se debe aplicar a sí mismo o a otro compañero el siguiente cuestionario:
¿Expresó Ud. una idea o aspecto diferente en cada uno de los párrafos?
¿Expresó la idea principal de cada párrafo de manera explícita o implícita? ¿En qué posición del
párrafo está la idea u oración temática?
¿Empleó Ud., por ejemplo, catáforas?
¿Eliminó todas las oraciones superfluas?
INTRODUCCIÓN.
La argumentación consiste en aportar razones que apoyen y defiendan una idea, tesis o planteamiento.
Su propósito es convencer al lector u oyente de que tal planteamiento es acertado, y, en la medida en
que incide sobre el receptor, tiene un fuerte componente apelativo o de llamada de atención.
Todo tipo de escritos utiliza los recursos de la argumentación.
Argumentación: cadena de razonamientos. En ella se concentra y resume la materia de que trata el
discurso, la cual consta de una o más pruebas que se basan en los datos de la causa y que sirven para
demostrarla. Se ha discutido la forma que adopta la argumentación: de diálogo o de monólogo. Algunos
piensan que la argumentación dialógica puede ser reducida a monólogo. Puede emplearse como método
de conocimiento o como arma para la polémica o la controversia (contratextualidad).
La argumentación se conoce también como ensayo argumentativo; es un tipo de forma expositiva que
tiene como propósito el convencer o persuadir al lector o al auditorio para que comparta la interpretación
u opinión del escritor sobre una idea, hecho, asunto, etc.
Klein: “Argumentar es hacer colectivamente válido lo que es colectivamente cuestionado, por medio de
lo que es válido colectivamente (lo que hace creíbles los argumentos)”.
Argumento: razonamiento utilizado para demostrar algo durante la argumentación (es una de las
partes del discurso oratorio). Es un razonamiento que se emplea para probar o demostrar una
proposición, o bien para persuadir o convencer a otros de aquello que se afirma o se niega.
En semiótica es una de las clases de signos pertenecientes a la tercera tricotomía de los mismos (según
la teoría de Pierce).
Los argumentos y las ideas son seleccionados para después implantar sobre ellos un orden. Las fases
de la retórica que corresponden a la presencia de las ideas y a la selección de los argumentos son: la
“inventio” y la “dispositio”. (Ver material sobre las 5 fases de la retórica en el discurso oratorio). Durante
la invención, se localizan los compartimientos de la M.L.T. (memoria de largo tiempo): temas, asuntos,
pensamientos, nociones generales, conceptos, frases (marcos de conocimiento), esquemas, planos,
scripts (guiones) y diversos significados.
Los loci (lugares) de la lógica: género, espacio, diferencias, definición, accidente, división,
contrario, circunstancias.
En un texto argumentativo pueden emplearse todas esas estrategias discursivas y todos los
procedimientos de desarrollo. Así para lograr el objetivo de persuadir al lector se puede emplear la
ejemplificación luego de llegar a conclusiones parciales mediante la generalización; es posible emplear la
reiteración para inducir al lector a interiorizar determinados conceptos o ideas; se puede emplear una
anécdota o un breve relato para abundar mejor en ciertos aspectos del tema, luego pueden aparecer
algunas definiciones; por último se puede hacer uso del análisis y la clasificación del hecho mismo, y,
finalmente hacer una comparación por contraste con otras ideas, hechos o fenómenos.
Es importante tener en cuenta las diferencias entre la definición y la descripción, como estrategias
discursivas que se emplean en el discurso expositivo:
Definición inexacta, caracteriza un objeto por sus atributos generales esenciales, comunes
con otros objetos.
Ambos textos y sus sistemas de organización de las ideas, pueden perfectamente complementarse, de
ahí que normalmente se hable del texto expositivo-informativo:
Sé que el intento de persuadir a un fanático es una tarea que raya en lo inútil, y que, en realidad, no
hay debate más infructuoso y estéril, ni diálogo de sordos más ensordecedor que los que sostienen de
vez en cuando los partidarios y detractores de las corridas de toros. Lo mejor en casos como estos, es
guardar silencio y seguir las propias y pacíficas aficiones, pero como de cualquier manera los enemigos
de las fiestas taurinas ( la Fiesta ) no se contentan con abstenerse de participar, sino que se han
propuesto aguárnosla a los demás y redimirnos de nuestro supuesto salvajismo, en la mayoría de los
casos invocando razones de carácter humanitario en su defensa encendida de los derechos de la Bestia,
creo llegado el momento de hacer una excepción y ofrecer a los supuestos humanistas algunos
elementos de juicio para ver si se dignan tomarlos en cuenta, no fuera a suceder que hablaran de
hombres y animales con conocimiento de causa(...) En las plazas de toros españolas y francesas, se
mata a la luz del sol respetando la singularidad de cada toro, no de una forma seriada y semiclandestina,
como ocurre en los mataderos. Esto es algo que deberían tener muy pero muy presente los detractores
de la Fiesta. Esto, y el hecho incuestionable de que casi todos los seres humanos son carnívoros.
La suerte de algunos centenares de toros bravos –animal extraordinario que, de no ser por las
corridas, se habría extinguido hace ya tiempo-, sirve de cortina de humo para encubrir las sevicias a las
que son sometidos diariamente 10, 000 millones de cabezas de ganado, y 6, 000 millones de aves de
corral en todo el mundo.
Quizá, como señala Lovelock en Las edades de Gaia (libro del que he sacado estos datos), llegue
pronto el día en que, por cuestión de supervivencia (...) el hombre se vuelva vegetariano y firme un
pacto de no agresión con el animal, el cual les permita vivir juntos sin molestarse demasiado (...)
Entonces, y sólo entonces, podremos pensar seriamente en suprimir la Fiesta de toros y otras
celebraciones semejantes...
Cuando hay que argumentar e influir por medio del discurso no hay que ignorar las condiciones
psíquicas y sociales en las que se apoya la argumentación, pues toda argumentación pretende la
adhesión de los individuos y, por tanto, supone la existencia de un contacto intelectual. (En esto se
diferencia de la demostración).
Cuando se trata de demostrar una proposición, basta con indicar qué procedimientos permiten que esa
proposición sea la última expresión de una serie deductiva cuyos primero elementos los proporciona
quien ha construido el sistema axiomático en el interior del cual se efectúa la demostración.
Para que haya argumentación es necesario que se produzca una comunidad afectiva efectiva de
personas.
La formación de una comunidad efectiva de personas exige la existencia de un lenguaje común, de una
técnica que permita la comunicación.
Formar parte de un mismo medio, tratarse, mantener relaciones sociales, todo esto facilita la realización
de las condiciones previas al contacto intelectual.
El auditorio, desde el punto de vista retórico, es "el conjunto de aquellos en quienes el orador quiere
influir con su argumentación". Toda argumentación que sólo esté orientada hacia un auditorio
determinado ofrece un inconveniente: el orador, precisamente en la medida en que se adapta a las
opiniones de los oyentes, se expone a basarse en tesis que son extrañas o incluso totalmente opuestas
a las que admiten otras personas distintas de aquellas a las que se dirige en ese momento. Este peligro
es aparente cuando se trata de un auditorio heterogéneo.
El auditorio universal lo constituye cada uno a partir de lo que sabe de sus semejantes, de manera que
trasciendan las pocas oposiciones de las que tiene conciencia. Una argumentación dirigida a un auditorio
universal debe convencer al lector de la validez intemporal y absoluta de las razones aducidas.
Una argumentación eficaz es la que consigue aumentar la adhesión a su tesis de manera que
desencadene en los oyentes la acción prevista o, al menos, una predisposición que se manifestará en el
momento oportuno.
2.-EL PUNTO DE PARTIDA DE LA ARGUMENTACIÓN.
La argumentación comienza a partir de lo que se acepta como punto de partida de los razonamientos y
su desarrollo a través de un conjunto de procedimientos de enlace y disociación.
Los acuerdos que sirven de premisas en el proceso argumentativo se agrupan en dos categorías: una
relativa a lo real, que comprende los hechos, las verdades y las presunciones; otra relativa a lo
preferible que comprende los valores, las jerarquías y los lugares de lo preferible.
Aunque la concepción de lo real varía según la corriente filosófica estimamos que lo real busca validez
con miras al auditorio universal, lo preferible se vincula al auditorio particular.
Las verdades son sistemas más complejos que los hechos, relativas a los enlaces entre
estos, ya se trate de teorías científicas, filosóficas o religiosas que trascienden la
experiencia. Las verdades, por tanto, se componen de hechos.
La mayoría de las veces se utilizan hechos y verdades de tal manera que la existencia
de unos y otros nos lleva a una hipotética existencia de otro hecho.
Al tratar los comportamientos proponemos un aspecto normal, que puede servir de base
a los razonamientos.
La existencia de los valores como objetos de acuerdo que posibilitan una comunión entre
formas particulares de actuar, está vinculada a la idea de multiplicidad de grupos.
En los campos jurídico, político y filosófico, los valores intervienen como base de la
argumentación a lo largo de los desarrollos, no así en el campo científico.
Las jerarquías son justificables con ayuda de los valores; con frecuencia permanecen
implícitas y no es necesario argumentar sobre ellas.
Son premisas de carácter muy general; conocidas también como topoi o tópicos.
Toda argumentación implica, pues, una elección que consiste en la selección de los elementos y su
técnica de presentación. De ello dependerá en gran medida el éxito de la argumentación.
En la forma del discurso, lo que llama nuestra atención son los medios gracias a los cuales cierta
presentación de los datos sitúa el acuerdo en un determinado nivel.
Para que exista la figura, es indispensable: una estructura discernible, es decir una
forma, y un empleo que se aleja de la forma normal de expresarse y que atrae la
atención.
Procedimientos de enlace son los esquemas que unen los distintos elementos para valorarlos o
estructurarlos.
Procedimientos de disociación son los que incluyen técnicas de ruptura con objeto de disociar, separar
los elementos componentes de un todo. Se utilizan generalmente para variar nociones esenciales de un
sistema de pensamiento.
Los argumentos más complejos son los llamados de doble jerarquía, así como los relativos a las
diferencias de grado o de orden.
La ilustración tiene como función reforzar la adhesión a una regla conocida y admitida,
proporcionando casos particulares que esclarecen el enunciado general. Mientras que el
ejemplo se encarga de fundamentar la regla, la ilustración tiene como función el reforzar
la adhesión a una regla conocida y admitida, proporcionando casos particulares que
esclarecen el enunciado general.
Entre tema y foro, hay una relación aritmética que nace del lugar que ocupan en el
razonamiento. Además, para que exista la analogía, el tema y el foro deben pertenecer a
campos diferentes; cuando las dos relaciones que se cotejan corresponden a un mismo
campo, y se las puede asumir en una estructura común, la analogía deja sitio a un
razonamiento por el ejemplo o la ilustración, al proporcionar el tema y el foro dos casos
particulares de una misma regla.
Presentación de una opinión general al principio de la exposición y defensa con argumentos que
conducen a una conclusión.
Desde la constatación de hechos particulares y muy concretos inferir una conclusión general de razón al
conjunto.
Si se comprueba que otros nuevos hechos no contradicen lo que afirma la hipótesis, ésta se convierte en
tesis o teoría.
La tesis fundamental no se formula nunca de modo directo, sino que se diluye en una reiteración de
ideas de las que se desprende la postura defendida.
La producción del discurso constituye el proceso en que éste se va insertando dentro de una tipología.
El tipo de discurso depende de la selección (limitada por redes de restricciones) de las formas
susceptibles de ser enunciadas, de las formas que convienen a la construcción de ese tipo de discurso, y
(dentro de las posibilidades de combinación de las unidades discursivas) de los mecanismos de
enunciación en que intervienen el manejo de los embragues o conmutadores (shifters).
Función discursiva. Se funda en la posibilidad de elección temática a que dan lugar las regularidades
y las dispersiones dadas entre los objetos de discurso, los tipos de enunciación, los repertorios de
conceptos.
Una secuenciación de actos asertivos o representativos, y por una lógica de causa-efecto, que
responde al encadenamiento entimemático (de silogismos imperfectos).
La revelación de las propiedades específicas de las cosas, sus concatenaciones y dependencias
esenciales.
Tiene por razón constituir el objeto natural de la cognición.
La tendencia a un análisis que resulta de una abstracción de lo accidental y causal, que conduce
necesariamente a la generalización.
La asociación de temas y subtemas mediante las relaciones lógico-causales.
El entimema es una construcción causal en que se omite la expresión pero no el contenido de una o
dos premisas con el objeto de hacer más vivo y más rápido el ritmo del discurso. Y también para halagar
la vanidad del receptor apelando en alguna medida a su inteligencia para que él deduzca lo suprimido.
Generalmente consta de dos proposiciones; causa y consecuencia, pues se suprime la premisa mayor:
Ejemplo:
“Todo hombre es mortal luego Pedro es mortal”; se sobreentiende “Pedro es hombre”.
Puede ocurrir que la premisa omitida sea falsa; en todo caso, suele producir rapidez y / o dificultar la
impresión debido a que está incompleta la forma e implícita del contenido.
Todos los hombres son mortales. Juan es hombre. Juan es mortal.
Premisa mayor P. Menor Conclusión
Existen ciertas variantes de silogismos menos perfectas, porque contienen mayor o menor número de
premisas, pero más impactantes, a mayor efecto que el silogismo que es más científico y más escolar.
Primer silogismo
Premisa mayor: Es raro que un sueco sea católico.
Segundo silogismo
Premisa mayor: En base a los siguientes estatutos y otras provisiones legales
a no ser que sus padres sean extranjeros o Harris haya obtenido la ciudadanía norteamericana
(Tomado de The uses of Arguments, Cambridge University Press, Cambridge, 1958.
de Stephen Toulmin, ligado a la tradición lógico-filosófica de Oxford, más que a la
tradición retórica)
Las premisas de una argumentación deben ser compartidas por el auditorio porque en la
argumentación no se trata de “probar la verdad de una conclusión a partir de la verdad de las premisas,
sino de transferir a las conclusiones la adhesión acordada a alas premisas.”
cuasi-lógicos
por asociación
basados en la estructura de lo real
ejemplos
que fundan la estructura de lo real modelo
metáfora
Argumentos analogía
Hay una lógica de la práctica: se caracteriza esencialmente por su referencia a determinados campos o
foros de argumentos, como son los de las ciencias, las artes, la administración, la ética, la política, etc.
cuadro sinóptico
apunte simple
Composición esquemática resumen
que nos da el proceso apunte desplegado
complejo de análisis-síntesis diagrama
esquema
tablas, etc.
Síntesis: completa el análisis y forma con él una unidad indivisible, al unir lo general y lo singular, la
unidad y lo múltiple, lo abstracto y lo concreto.
Inducción: nos permite este procedimiento elevar el entendimiento desde el conocimiento de los
fenómenos hasta la ley que los rige.
Deducción: por este procedimiento se procede de lo general o universal a lo particular. Nos permite
sacar consecuencias de un principio, proposición o supuesto.
Comparación: procedimiento que nos permite fijar la atención en dos o más objetos y descubrir las
relaciones que hay entre ellos o estimar sus semejanzas o diferencias.
Generalización: procedimiento que nos permite abstraer lo que es común a muchas cosas para
comprenderlas todas en un mismo concepto más amplio y abarcador.
Discurso lógico: relacionado fundamentalmente con las ciencias, sobre todo con las
Matemáticas. Estos tipos de discursos contienen razonamientos lógicos
(concepto lógico-matemático que remite a operaciones tales como la deducción,
entendida como la inferencia de una serie de proposiciones a partir de otras
proposiciones iniciales mediante la aplicación de reglas de derivación), y la
demostración (deducción analítica a partir de premisas que son axiomas de una
teoría).
Lógica formal Matemáticas
Discursos retóricos: no presentan marcas de razonamiento, pero poseen también una fuerza
persuasiva que depende íntegramente de la convivencia cultural. La “tesis” y los “argumentos”
no se explicitan. Aunque en principio podrían ser etiquetados por el análisis, pero casi siempre a
costa de la pérdida de la fuerza persuasiva del discurso. Recurren al sentido figurado, la
connotación, la metáfora, la narración ejemplificadora, la descripción orientadora, la ironía, las
preguntas retóricas, los enunciados axiológicos o evaluativos, la invocación de una autoridad.
Platón abogaba por una cultura de la argumentación, que es lo que hoy reclaman nuestras sociedades,
en oposición a una cultura de la evidencia, impuesta por el racionalismo europeo desde Descartes y a
una cultura del consumo, de las sociedades tradicionales de tipo “fundamentalista”. Hoy día hay un
renovado interés en el análisis de la argumentación, pues múltiples factores contribuyen a renovar este
interés. Y no sólo en los discursos institucionales, sino también en el lenguaje cotidiano.
La mayoría de los países europeos, latinoamericanos, y una parte de África, Asia, etc., tienen
sociedades pluralistas (secularizadas, como es el caso de Europa y Norteamérica y parte de América
Latina). Pero estas sociedades ya no reconocen verdades y valores absolutos, y se han convertido en
gigantescos “mercados simbólicos” donde las más diversas y encontradas propuestas ideológicas
compiten entre sí por mantener o conquistar adherentes o prosélitos. Esta situación conduce
naturalmente, a una especie de debate social permanente y generalizado, en que las armas de la
argumentación desempeñan un papel de primer plano.
Las sociedades actuales (secularizadas y pluralistas) tienen una prensa que lo invade todo, unos
medios de comunicación que desarrollan una peculiar retórica publicitaria que combina en diferentes
proporciones la argumentación (entimemática) con los términos de la manipulación. Frente a esta
violencia simbólica generalizada, que tiende a imponer (por vía de la argumentación persuasiva)
productos de consumo, visión del mundo y modelos de comportamiento, se plantea la necesidad de
desarrollar un pensamiento crítico que permita decodificar en operaciones retóricas publicitarias y sirva
de antídoto contra la manipulación de la opinión.
El lenguaje en este mundo de hoy, tiene un poder configurador en la vida social, pues es un sistema de
signos destinado a representar el mundo, y no sólo debe transmitir informaciones, sino que es un
dispositivo que permite construir y modificar las relaciones entre los interlocutores, sean estos individuos
o grupos sociales bien definidos. Se le ve como forma de acción, arma de combate, e intervención e
influencia sobre el mundo.
Esta eficacia del lenguaje pasa en buena parte por la función argumentativa del discurso que, en las
condiciones apropiadas, permite intervenir sobre los más diversos auditorios, incidir sobre las
coyunturas, y modificar las relaciones sociales en conformidad con determinados intereses naturales o
simbólicos. El poder del discurso, su poder inherente, se confunde muchas veces con su “poder
argumentativo”, es decir, con su potencial de convicción o persuasión. Dice Bourdieau: “Las palabras
contribuyen a construir el mundo social. El trabajo político se reduce, en lo esencial, a un trabajo sobre
las palabras, porque las palabras contribuyen a construir el mundo social”.
Herman Lube: “La política es una intervención discursiva orientada a crear una disponibilidad de
consenso a costa de una actuar cooperativo para la realización de determinados intereses”.
Aunque la identificación total entre el texto expositivo y el argumentativo no es del todo correcta, sí es
cierto que ambos sistemas de redacción están estrechamente relacionados. La exposición es la
presentación o explicación objetiva de un tema cualquiera con el fin de darlo a conocer a otras personas.
La objetividad del autor es, por consiguiente, imprescindible en este tipo de textos cuya única finalidad es
la de dar una información que puede ser útil o interesante. El texto expositivo es el que se utiliza
principalmente en obras de carácter didáctico o divulgativo.
La exposición puede ser oral (una lección) o escrita (un texto de enciclopedia), pero siempre requiere
la utilización de un léxico culto, que, sin embargo, no tiene por qué identificarse con un lenguaje difícil o
excesivamente técnico.
El texto científico
Los textos de este tipo responden a un estilo funcional llamado igualmente científico, o demostrativo, y
aparece tanto en textos de carácter científico, científico-técnico o práctico. Sus rasgos fundamentales
son:
El autor procura convencer, ganarse al lector. Lo que no se consigue sólo con el razonamiento,
sino con hechos, con demostraciones, con evidencias.
Plantea una exigencia primordial: hacer ver lo que él ve, hacer sentir lo que él siente; pensar lo
que él piensa.
No hace afirmaciones gratuitas y / o categóricas y lo serán todas aquellas que no convenzan al
lector o al auditorio demostrativamente.
Sabe dar su información modalizada como probable o posible. No habla de memoria. El autor
escribe sobre aquello que conoce por su propia experiencia interna o externa, porque ya se ha
probado a sí mismo lo que quiere demostrar.
Piensa despacio y no toma la pluma hasta que no ve el tema con claridad.
Escribe según restricciones:
_ Conocimiento compartido (coherencia global).
_ Creencias contextuales que comparte con sus destinatarios. No significa que esas creencias
sean verdades absolutas o realmente verdades, pero él y su auditorio las comparten.
_ Estimula el contrato de cooperación. Respeta las máximas conversacionales y, de
violar alguna(s), evita violar la máxima de la calidad o de la sinceridad.
_ Respeta la coherencia global (que responde a un principio de realidad).
_ Respeta la coherencia local (que responde a un principio de consistencia).
_ Respeta la coherencia temática, y el (los) antecedente(s), y así se mantienen las
redes isotópicas.
_ Tiene en cuenta los recursos disponibles (de estilo, retóricos, de registro, etc.).
Sabe que para desarrollar bien una idea don precisas dos condiciones: imaginación y cultura; no
confunde cultura con erudición, ni imaginación con fantasía.
Le dice no a las disertaciones eruditas y a los comentarios librescos.
Es natural en la exposición; sincero consigo mismo y dice lo que realmente considere preciso
para desarrollar bien las ideas.
Huye de la divagación intrascendente.
Procura la densidad, la concisión y la claridad en su exposición.
Evita todo lo que es innecesario exponer, porque sabe que extender un discurso no significa que
se expone mejor, y que cada asunto exige una extensión determinada y que éste depende de
dos condiciones: la importancia del tema y la cultura que él, como autor, posee.
Sabe suscitar las ideas relacionadas con el asunto o tesis propuestos para desarrollar su tema.
Todo texto científico deber ser, para que sea leído o escuchado con interés así:
coherente y cohesivo,
claro,
con vocablos precisos,
interesante y sugerente,
monosémico preferiblemente,
objetivo en lo fundamental.
Subjetivo en la medida que sea necesario, mediante el empleo acertado y racional de:
adjetivaciones, valoraciones, connotaciones, figuras retóricas, etc.
En el caso de que el autor requiera del uso de citas textuales o no textuales (intertextualidad) puedo
emplear los siguientes verbos (de lengua) que son introductores del discurso referido o citado.
Ejemplos: DECIR (hiperónimo) expresar manifestar exponer señalar plantear subrayar
repetir recalcar explicar insistir en revelar sugerir insinuar difundir proferir
pronunciar refutar argumentar contraargumentar etc.
a lo general
Artículo: Expone ideas suscitadas por hechos, acontecimientos, problemáticas que tiene actualidad,
que son noticias más o menos recientes. Entre sus características están:
Es ocasional.
Su estilo literario es breve y creador.
Debe tener capacidad para asimilar la realidad, los datos, los hechos, los conflictos, y
sintetizarlos para su mejor recepción.
Debe respetar un sistema de razonamientos que se argumentan en ejemplos reales, y también
en la lógica y en la filosofía.
Supone una gran capacidad de síntesis.
Tiene un modo peculiar de exponer el tema, la elaboración del problema, el análisis y la
argumentación multilateral de las situaciones reveladas.
Puede exponer resultados de investigaciones, sintetizar fenómenos de la realidad y presuponer
el desarrollo sereno de un pensamiento rigurosamente determinado.
No debe ser excesivamente largo.
Debe tener la cantidad y calidad de la información que el tema requiere.
Puede tratar temas variados con cierto grado de análisis y profundidad, en los que deben estar
ausentes les elementos de ficción.
El autor puede expresar sus presupuestos o plasmar los de otros, pero respetando la máxima
de la sinceridad, y no predicar en falso.
Puede tratar un tema actual, o en el caso de remontarse al pasado o imaginar el futuro, respetar
un principio de verosimilitud.
Es ilimitado en sus posibilidades.
Puede combinarse con el ensayo, y entonces es llamado artículo ensayístico.
Resumen: tiene como propósito hacer una exposición en términos breves, sintetizados, de un texto
propio o ajeno. En ese texto breve resultado de la operación de resumir, se expondrá tan sólo lo esencial
o se repetirá abreviadamente el asunto tratado en el texto. Pueden resumirse diferentes tipos de textos:
cuentos, filmes, conferencias, ensayos, artículos, crónicas, programas de radio o de televisión, clases, y
hasta un libro completo.
El resumen interpretativo, que intenta ofrecer también, una condensación de lo esencial del
texto, pero parte de la idea central o de un juicio o evaluación sobre lo que se presenta. Esta
idea central o juicio sirve como tesis de exposición. Los detalles que se incluyen son
seleccionados con el solo objetivo de fundamentar la interpretación del texto, es decir, la tesis
del resumen. No se trata de ofrecer únicamente una versión comprimida de las ideas del texto,
sino de hacer un juicio, una crítica, una evaluación del mismo.
Tanto uno como otro tipo de resumen serán escritos en los tiempos discursivos, es decir: presente,
antepresente y futuro, de indicativo, básicamente.
Lectura del texto original varias veces antes de extraer las ideas más importantes.
Extracción de las ideas principales y secundarias ( terciarias en algunos casos en que sea
imprescindible.
Redactar el resumen en forma de bloque, en un solo párrafo si el texto no es muy extenso.
Reseña: consiste en describir y valorar su objeto de análisis, que por una parte, puede ser algún evento,
hecho, acontecimiento; alguna problemática de la realidad circundante, que interese y afecte a muchos.
Trata de orientar al receptor, informándolo de lo más importante y, a la vez, fija sus puntos de vista,
ofrece sus opiniones y valoraciones sobre el hecho o el problema en cuestión. Resume y analiza
brevemente. Puede interesarse en obras narrativas, poéticas, dramáticas; en obras de la plástica
( exposiciones );en ensayos, filmes, espectáculos artísticos de toda clase; publicaciones de libros,
revistas, etc.
En la reseña, junto a la síntesis del objeto reseñado, debe aparecer un enjuiciamiento, una valoración,
un comentario. Pues esa es la finalidad de la reseña: valorar. Aunque también es un objetivo importante,
como ya se dijo, familiarizar al lector con lo esencial, y por otra, ayudar al propio artista o autor a ver su
obra con una mayor objetividad, de la que pudiera estar privado, para ofrecerle nuevas perspectivas. Sin
embargo, el criterio personal del reseñador no debe opacar las ideas expuestas por el autor o al propio
hecho observado. Incluso, si se discrepa de la obra o se enjuicia negativamente, se debe tener buen
cuidado de que los lectores recojan cabalmente lo expuesto por el autor.
La reseña debe contener:
Lo más importante en la reseña es cómo el autor valora y hace juicios, que a veces pueden ser muy
críticos; estas valoraciones o juicios pueden aparecer desde el principio del trabajo. Esta tarea del
reseñador sirve de orientación al lector y lo actualiza sobre muchos acontecimientos en el mundo del
arte, de la política, o de otro aspecto interesante de la vida cotidiana. Aparece, generalmente, en la
prensa escrita, pero puede presentarse a modo de breve reseña en catálogos, programas, etc.