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Marco teórico
La odontología biomimetica tiene su origen en el termino “biomimetico” que procede del
griego “bios” que signitica “vida” y “mimetikos” “imitativo”. Detrás de esta etimologia, se
stablecen los principios y conceptos relacionados con la preservación de la estructura
dental natural, como son los protocolos de reducción de tensiones y maximización de la
adhesión, utilizando entre ellos, modernos sistemas adhesivos que mantiene la
característica y la completitud de los tejidos dentales. Su objetivo es devolver al deinte su
estética, fuerza y función.
El término biomimetismo fue popularizado por el científico y autor Janine Benyus en su
libro de 1997 biomimetismo:. Innovación Inspirada por la naturaleza. Biomimetismo se
define en su libro como una "nueva ciencia que estudia los modelos de la naturaleza y
luego imita o toma inspiración de estos diseños y procesos para resolver los problemas
humanos". Benyus sugiere mirar a la Naturaleza como un "modelo, la medida, y Mentor" y
hace hincapié en la sostenibilidad como un objetivo de la biomimética.
En el ramo de la odontología, el termino biomimético fue desarrollado por investigadores
de prestigiosas universidades de Tokio, Ginebra, Roma, Amsterdam, Houston, Portland, y
Hong Kong. Gary Unterbrink, Didier Dietschi, Magne Pascal, Belser Urs, y JF Roulet en
Europa, y Ray Bertolotti y Juan Kanca III en los Estados Unidos, así como el Dr. David
Alleman y cols han mejorado continuamente las técnicas utilizadas para la odontología
biomimético incluyendo metodologías propias para la adaptación de los conceptos
biomiméticos para todos los dientes del paciente.
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Tirlet G, Crescenzo H, Crescenzo D, Bazos P Ceramic adhesive restorations and biomimetic dentistry: tissue
preservation and adhesion. Int J Esthet Dent. 2014 ;9(3):354-69
Como señala Pascal Magne, el concepto de biomimética moderna puede resumirse en
tres categorías distintas, pero estrechamente relacionadas:
Resumen
Para determinar la relación morfológica entre la superficie exterior de la capa de esmalte y
la DEJ, se sumergieron los dientes en ácido clorhídrico al 10% bajo vibración ultrasónica
durante 20 minutos, lo que provocó una desmineralización selectiva del esmalte.
Posteriormente, los dientes se sumergieron en agua destilada durante 1 hora para
neutralizar el ácido y facilitar su manipulación.
El DEJ como epicentro estructural
Durante la odontogénesis, esta interfaz de unión sirve como plano histológico,
representando una compleja zona de interdigitación entre dos tejidos calcificados
anisotrópicos distintos con diferentes composiciones bioquímicas:
i) el esmalte que sirve como capa protectora estructural
ii) ii) la dentina que sirve como núcleo amortiguador estructural.
La demarcación del esmalte y la dentina se debe a la diferencia de birrefringencia entre
los tejidos. La DEJ está menos mineralizada que el esmalte o la dentina en masa, siendo,
por el contrario, más rica que ambos en matriz orgánica. Microscópicamente, se presenta
una topografía superficial biescalonada, estableciendo una zona compleja capaz de
deformarse (por su reforzamiento con fibrillas de colágeno). Se ha demostrado un
considerable interés en la interconectividad del esmalte aprismático interno, la DEJ y la
capa externa de dentina, conocida como "manto dentinario" de aproximadamente 150
micras de espesor, que se sintetiza al inicio de la dentinogénesis. Este complejo dentino-
esmalte extendido (DEC) es una interfase funcionalmente graduada entre dos tejidos muy
diferentes que proporciona un blindaje mediante una reducción de la densidad y la
mineralización en el esmalte como en la dentina a medida que se aproximan a su unión.
Microestructura: esmalte frente a dentina
La microestructura del esmalte está dominada por varillas de esmalte ricas en cristales de
hidroxiapatita, cementadas por un polímero proteico de matriz orgánica. El esmalte sólo
sufre una mínima deformación mientras transfiere las cargas a la dentina subyacente. Las
propiedades del esmalte se deben a la disposición estructural tridimensional, que consiste
en barras muy largas de apatita carbonatada dispuestas en haces direccionales. Estos
haces se entrelazan progresivamente en niveles jerárquicos superiores. El aumento de la
resistencia al crecimiento de las grietas se atribuye en gran medida a una combinación de
mecanismos, entre los que se encuentran la formación de puentes de grietas, la
bifurcación de grietas y la curvatura de grietas, inducida por la decusación del prisma del
esmalte interior. La microestructura de la dentina coronal parece ser la de un
biocompuesto de fibras de colágeno mineralizadas. La dentina posee propiedades tanto
elásticas como plásticas, que varían significativamente de una región a otra. La formación
de puentes de ligamentos no agrietados se presenta como el mecanismo de protección de
grietas más frecuente observado en el núcleo de dentina hidratada.
Macroestructura: esmalte convexo frente a dentina cóncava
Los contornos robustos, redondeados y convexos de la superficie del esmalte
proporcionan resistencia a un tejido sometido a tensiones masticatorias directas y a
cargas oclusales. Mientras que el relieve afilado y cóncavo de la superficie de la dentina
proporciona un soporte estable a la envoltura del esmalte.
El DEC se considera como el mecanismo de blindaje funcional, resultado de la armonía
de los tejidos ecto y mesodérmicos el cual debe preservarse siempre que sea posible
durante los procedimientos clínicos de restauración. Esto permite que las fuerzas
biomecánicas se transmitan libremente a través de las superficies, disipándose en este
medio estructuralmente fluido. Como consecuencia, se espera que se formen extensiones
de grietas controladas y que progresen de forma constante durante toda la vida.
La falta de conocimiento de esta distribución no uniforme del esmalte/dentina, que es
estructuralmente ventajosa, da lugar a matices de integración óptica. Esto a menudo
desconcierta al equipo restaurador debido al hecho de que los currículos tradicionales de
morfología dental se centran principalmente en las características de la superficie del
esmalte externo, simplificando en exceso la unión subsuperficial con la dentina,
asumiendo así una distribución uniforme. De ahí que las correlaciones visuales entre los
elementos del esmalte y la dentina se consideren de gran valor.
Una vez que se domina y comprende el ordenamiento espacial de los elementos
estructurales del esmalte y la dentina la reconstrucción de la dentición se vuelve eficaz y
predecible.
Con el modelo de Bio-Emulación las restauraciones dentales adhesivas directas o
indirectas se realizan de una manera mas refinada e intuitiva (debido al conocimiento
profundo de la complejidad estructural innata del diente intacto).
Con la llegada de la tecnología dental adhesiva, el equipo restaurador puede proporcionar
un tratamiento mínimamente invasivo, sin estar obligado a sacrificar estructura dental
adicional en un esfuerzo por establecer los requisitos fundamentales tradicionales de
resistencia y retención.
Este conocimiento puede aplicarse universalmente como base para desarrollar nuevas
técnicas de estratificación al fabricar restauraciones en resinas compuestas o cerámicas
grabables, ya sea con metodologías convencionales (troquel refractario o termoprensado)
o contemporáneas (CAD/CAM o impresión 3D).
Opinion personal
A través de la biomimética tenemos la posibilidad de encontrar materiales que emulen la
estructura del tejido que se ha decidido reproducir, en forma y función, con exactitud. Estos
materiales utilizamos dentro de la Odontología como las cerámicas y los composites pretenden
emular el esmalte y la dentina para restaurar el diente afectado con una fuerza de adhesión,
módulo elástico y apariencia estética similar a las estructuras naturales.
Lo anterior nos da la facilidad de entregar a los pacientes restauraciones con una naturalidad
ventajosa sin comprometer el tejido remanente ni desgastar más para obtener una buena
retención y estabilidad, dando la oportunidad de seguir la línea de una odontología mínimamente
invasiva. Conocer la composición histopatológica permite adherir composites y cerámicas
orgánicas a la superficie del diente, aprovechando los componentes inorgánicos y orgánicos como
la hidroxiapatita y las fibras de colágeno presentes en los tejidos dentales, dándonos la ventaja de
imitar no sólo la forma sino también las propiedades mecánicas de los dientes naturales.
Bibliografía
Calatrava L, Biomimética: una vía para romper paradigmas, Acta Odont. Venez,2016,54(1)