CUTI, FUIMOS DESPLAZADOS

Reflexión

Nombre: Carlos Arturo Fuelagan Ortega

Código: 221160010
Grupo: Estudios políticos – Grupo 2

Como sus habitantes lo retratan, el resguardo de Cuti fue antes de la violencia un lugar donde
la vida era placentera, la tierra era suficiente para producir sus alimentos, la madre tierra les
proveía de todo aquello que necesitaban. Entre los recuerdos de sus actuales habitantes se
encuentran aquellos momentos que ellos describen con frases como “vivíamos bien” “eramos
felices”.

Pero la historia de el resguardo Cuti, no termina con sus tierras expropiadas por los grupos
armados ilegales para ser destinadas al cultivo de coca, con sus habitantes asesinados y
desplazados y con una comunidad destruida, echos que lamentablemente se han presentado a
lo largo y ancho del territorio nacional y son más comunes de lo que quisiéramos aceptar. La
historia de Cuti es diferente, gracias a que la resistencia de las mujeres a la violencia fue
ejemplar, enfrentaron la violencia y no dejaron el resguardo solo.

El golpe de la violencia fue devastador, las tierras del resguardo se redujeron, las familias
fueron desplazadas y la comunidad casi pereció. Esto ultimo no sucedió gracias a la lucha de
cinco mujeres quienes se quedaron en su resguardo con sus familias. Por las amenazas de
muerte tuvieron que resguardarse en la selva, cazar, pescar y recolectar para alimentarse ellas
y a sus hijos. En el conocimiento colectivo de la comunidad esta presente que ninguno de los
hombres acompaño a estas cinco mujeres valientes durante su campaña de lucha, desde
entonces se ha instaurado en Cuti un gobierno de mujeres.

Su lucha no fue vana, pues mantuvieron viva a su comunidad y resistieron y lucharon por
mantener su territorio, para que aquellos desplazados por la violencia tengan un lugar al cual
volver. De a poco las familias desplazadas han ido retornando a Cuti, aunque no ha sido fácil
para esta comunidad recuperarse del duro golpe de la violencia, no cuentan con la suficiente
tierra para cultivar, pues su territorio fue reducido a unas escasas 45 hectáreas, ademas de
que su situación al parecer les es indiferente tanto a los gobernantes locales como al gobierno
nacional.

La lucha de las mujeres de Cuti ahora es diferente, ahora se enfrentan a ese Estado que
poco o nada hace por ellos. El gobierno de mujeres que se estableció en Cuti piden y quieren
que se les restituyan todas las tierras que antes les pertenecían para que los demás miembros
de su comunidad puedan retornar. La lucha será difícil mientras sigan gobernando los
enemigos de las paz, quienes se lucran con la guerra, la violencia y el sufrimiento, no obstante
las mujeres de Cuti han demostrado su valentía, resistencia y determinación, no permitieron
que las amenazas y la violencia acaben con su comunidad, y seguramente la defenderán de la
mima manera de cualquier amenaza futura.