Las diferencias individuales y las leyes.

La ley de las diferencias individuales hace que las

organizaciones eviten ver a su personal como un todo,
aplicando políticas estandarizadas. Por el contrario, esta ley
nos plantea el reto de conocer a cada uno de los colaboradores
con sus motivaciones, preocupaciones, intereses, percepciones
y valores. De esta forma se le estará dando un trato individual y
personalizado a cada uno, y como se dice coloquialmente “la
empresa se los mete al bolsillo”.

Imaginemos querer aplicar esta ley de las diferencias

individuales en una planta procesadora de frescos con más de
100 operarios. Parece tarea difícil, ¿verdad? Por eso, es muy
importante contar con líderes capaces de escuchar, analizar,
entender y motivar equipos de trabajo cuyas percepciones son
totalmente diferentes, más aún si nos encontramos en una
nueva forma de convivencia.

Entendiendo la ley de las diferencias se podrán aplicar

estrategias claras y oportunas enfocadas en cada individuo, así
las organizaciones tendrán equipos de trabajo altamente
comprometidos al 100%, capaces de resolver cualquier
problema o incluso mejorar el desempeño de producción, como
en el caso de una planta procesadora de frescos.