Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Las emociones son reacciones psicofisiológicas que todos experimentamos a diario, aunque
no siempre seamos conscientes de ello. Son de carácter universal, bastante independientes
de la cultura y generan cambios en la experiencia afectiva, en la activación fisiológica y en
la conducta expresiva. Surgen ante situaciones relevantes que implican peligro, amenaza,
daño, pérdida, éxito, novedad y nos preparan para poder dar una respuesta adaptativa a esa
situación. A lo largo de nuestra evolución como especie, gracias a las emociones hemos
podido responder rápidamente ante aquellos estímulos que amenazaban nuestro bienestar
físico o psicológico, garantizando nuestra supervivencia. Además de esta función
primordial adaptativa, las emociones cumplen una función social y otra motivacional. A
través de la primera, facilitan la interacción social, permitiendo la comunicación de los
estados afectivos y promoviendo la conducta prosocial. Y, por otra parte, la emoción es la
encargada de energizar una conducta motivada, aquella caracterizada por poseer dirección e
intensidad.
Objetivos
Valorar los efectos negativos y positivos que aportan estos en nuestra personalidad.
Identificar la manera de controlar nuestras emociones para facilitar la comunicación
social.
Desarrollo
Reconocimiento de
emociones ajenas
Riesgo de enfermar
Baja autoestima Producen pesimismo
Conclusión
Las emociones, es decir, todo aquello que sentimos y que experimentamos, no sólo forman
parte de nuestro día a día, sino que juegan un papel principal en todo proceso de
crecimiento personal y en psicoterapia. Aquí lo importante es conocer bien qué sentimos,
sostener la emoción y saber gestionarla. Este es un aprendizaje capital, ya que nuestra
esfera de realidad viene de la mano de todo nuestro mundo emocional.
Algunas emociones estarían dentro del espectro positivo como el amor, el orgullo y la
alegría, y otras dentro del negativo, como la rabia, el miedo y la tristeza. Las emociones
positivas reciben tal etiqueta porque nos hacen sentir bien y las negativas porque nos hacen
sentir mal, pero ambos tipos de emociones son necesarios y tienen su papel. Si hemos
tenido una pérdida personal, es normal que nos sentamos tristes, es más, es saludable que
por momentos nos sintamos así.
La clave sería el permitirnos sentir todo el rango del espectro emocional. El experimentar
todo el espectro de emociones sin cortapisas, sin trabas, superando bloqueos emocionales.
Por supuesto ello incluye a las negativas, así estas habrán cumplido su función y pasarán
antes.
Tener una salud emocional óptima significa que puedes comprender, superar y controlar
estos problemas. Una persona con buena salud emocional es consciente de sus
pensamientos, sentimientos, emociones, rutinas y comportamientos, capaz de hacer frente
al estrés y a otros problemas que forman parte de una vida habitual. Además, poseen
relaciones saludables con quienes los rodean.
Bibliografía: