Está en la página 1de 4

Mi hoja de vida

Muy bien, intentaré hacerlo lo más conciso y ordenado posible. Mi infancia, en general
fue una infancia tranquila. En realidad carecía de bastantes problemas (tenía que comer,
vestir, con que jugar y pues no tenía problemas en la escuela). Quizá el único problema
es que era demasiado hiperactivo, con lo cual era fácil que me desesperase a veces o
que comenzara a jugar. Me gustaban mucho las luchas y solía jugar mucho con mis
primos, tíos, etc.

A pesar de esto, mi mamá en ese entonces todavía trabajaba (mis papás me tuvieron
cuando era muy joven, mamá tenía 23 y mi papá 21 más o menos), papá también
trabajaba durante el día/tarde, entonces me encargaban con mi abuela paterna, la cual
vive a unas calles. En general, me la pasaba bien porque todavía mi tía vivía allí y mi tío
visitaba más frecuente la casa, con lo cual tenía con quien jugar. Sin embargo, mi
abuela siempre ha sido estricta y era la encargada de mantenerme en orden. El
acontecimiento que me causo miedo a la oscuridad ocurrió durante esta época, donde
comento que una vez, que no estaban mis tíos y sólo abuela, como debía ir al mercado
y yo era muy inquieto debía dejarme encerrado, así que me cerró la puerta y me apago
la luz, con lo cual, yo genere un miedo a la oscuridad.

Posteriormente, avanzaron las semanas, sin muchas novedades salvo que yo convivía
cada vez un poco más con mis abuelos maternos y ellos, al ser católicos, me platicaban
un poco sobre su religión. Cerca de casa hay una iglesia y, una vez que los acompañé
me hablaron del niño doctor. La casa de mis abuelos paternos y la casa de mis abuelos
maternos están a una calle de distancia y, en medio del camino, esta una iglesia
católica. Entonces, hubo un problema debido a que yo le agarre cariño a la imagen del
niño doctor y, una vez que me llevaban de regreso a casa de mis abuelos maternos
quise pasar a ver al niño doctor (cosa que desagrado a mis abuelos paternos debido a
que son cristianos) y con ello, aunado a otros problemas de tiempo que se suscitaron
dentro de la familia (la muerte de mi tía, hermana de mi mamá) hicieron que mamá
estuviese más en casa para cuidarnos a mi primo y a mí por las tardes, con lo cual se
prescindió de la necesidad de que mis abuelos paternos me cuidasen.

Sin embargo, fue allí cuando se hizo evidente mi miedo a la oscuridad. No quería entrar
a cuartos oscuros y me daba un poco de miedo estar solo. Con el tiempo esto se
empezó a ir, sin embargo, aquí es cuando diría que comencé con los pensamientos
intrusivos que comentaba en la sesión. Posteriormente, no había nada significativo o
que hubiese marcado mi vida, hasta que una vez un niño me golpeo. Yo, a pesar de
que luchaba con mis tíos jugando o cosas por el estilo, no tenía ninguna clase de
acercamiento con la violencia. A pesar de que se habló con la directora y la profesora,
pues muchas veces tristemente los niños y padres no entienden, así que mis padres me
dijeron que si volvía a suceder me defendiera. Volvió a suceder, me defendí y creo que
a partir de eso desarrolle cierto sentido de justicia. Posteriormente, en el último año,
tuve un amigo (no recuerdo su nombre) del cual sólo recuerdo que se burlaban por su
aspecto desalineado y porque no tenía cabello. Esto causaba que los chicos se burlaran
y lo quisieran atacar, pero yo siempre lo defendía y preferí pasar ese ciclo escolar con
él. Quizá otro acontecimiento importante fue que fue la primera vez que una niña se
interesó en mí y que me caía bien, con lo cual generamos una breve amistad/noviazgo.

Llego la primaria y fue una época tranquila dentro de lo cabe o lo que pudiéramos
llamar normal. Tenía muchos amigos y, aunque de vez en cuando me molestaban por
ser listo, siempre terminábamos contentándonos y continuando con la amistad. En esta
etapa, fui demasiado independiente de las relaciones personales, me eran importantes,
pero lo tenía todo seccionado y no me costaba trabajo dejar ir a las personas o dejar
de verlas. Cumplía con mis deberes sin ningún problema y en general creo que
solamente me interesaba jugar. No fue sino hasta 3ero de primaria donde tuve un
pequeño problema con un niño que me molestaba y nos fuimos a los golpes. Sin
embargo, el niño amenazo con traer una navaja la siguiente ocasión y me asusté
mucho, con lo cual informe a la directora del asunto y tomaron cartas al respecto. Al
final nunca llevo nada a la escuela o recibí alguna amenaza y, con el tiempo, incluso
hasta se hizo mi amigo. Ahora que lo pienso, lo miro con gracia dentro de mis
recuerdos, pero en ese momento si estuvo algo impactante.

Después de eso no ocurrió mucho. En cuarto año, llego el que sería mi amigo de toda
la vida (hoy en día lo sigo frecuentando y hablando con él) el buen Carlos. Viene de
Oaxaca y en ese entonces no sabía que trabaría amistad con él. De hecho, fue la
primera persona con la que pude jugar después de la escuela y generar una amistad
fuera del aula. De allí creo que no pasó nada más, bueno, en quinto año conocí al
profesor Raúl, la verdad uno de los más grandes profesores que tuve, muy capaz.
Luego ya llego sexto y justo, llego el tema del despertar sexual que hablamos (entre
sexto y primero de secundaria) con el cual, pues llegaron muchas dudas y también un
poco de culpa (pienso principalmente por el núcleo cristiano en el que vivía, que,
aunque no era muy rígido, si plasmaba la ideología un poco). Luego paso lo que
comentamos que me obligué a elegir una chica porque sentía que mis amigos ya
tenían novia y quería aún sentirme dentro del grupo. Sin embargo, pues ya platicamos
como salió jaja, fracaso total, sin embargo, más que el sentimiento de sentirme
desilusionado del amor, tuve problemas al verlo como eso, como un fallo mío, de
modo que fue la primera vez el acercamiento con no poder conseguir aquello que
quería, lo cual cambió mi panorama por completo. Comencé a hacer más ejercicio, a
esforzarme más en mí y pues bueno, luego pase a la secundaria.

En la secundaria, debo decir que, como mencionaba, fue un cambio 360 a toda mi vida.
Fui bastante extrovertido, un poco bully y, a pesar de tener buenas calificaciones, tuve
una actitud rebelde lo cual, como comentaba, me llevo algunos problemas con mis
profesores (probablemente mi orientadora y luego mi prefecto fueron con los que tuve
un mayor conflicto). A pesar de eso, creo que fue una etapa divertida y bastante
estimulante, porque fue cuando descubrí mi gusto por saber sobre misterios, ocultismo
y otras cosas, que, aunque realmente no es algo en lo que crea en la actualidad
siempre me ha entretenido ¿A quién no le entretiene el misterio no? Posteriormente me
relajé, comencé a salir con amigos y tuve novia (la cual tenía muchos problemas
emocionales, pero no por ello la abandoné en su proceso), terminamos y bueno,
después ya vino la etapa de la prepa, que no sé si cuente como infancia/adolescencia.

¿Cómo creo que me perciben las personas?

 Amable
 Dedicado
 Responsable
 Atento
 Un poco egocéntrico tal vez
 Una persona de carácter fuerte (a la cual si la haces enojar puede explotar)
 Carismático y con buen sentido del humor
 Algo desinhibido, crudo y liberal
 Realista (rayando en el pesimismo)
 Analítico
 Con poco tacto para muchas situaciones de la vida
 Algo listo

¿Cómo me percibo yo?

 Persona con sentido del humor (aunque en su núcleo supongo que algo
nostálgico)
 Demasiado racional
 Gran capacidad analítica
 Obstinado
 Con capacidad para enfrentar adversidad (aunque no sé cuánto, porque hoy en
día noto que el nivel de adversidad puede ser muy variable)
 Obsesionado con tener paz y tranquilidad y todos lados
 Con mucho gusto por la defensa personal, las artes marciales y el deporte
(aunque lo había abandonado hace unos años)
 Gusto por la adrenalina y nuevas experiencias
 Bastante metódico y de rutina para muchas cosas (me gusta un núcleo de
actividad estable y que lo exterior pueda variar)
 Antes demasiado extrovertido y alegre, aunque con los años pienso que me he
reservado más y me he amargado jajaja

También podría gustarte