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El SERNAC Financiero es un nuevo marco legal que fortalece los derechos de los
consumidores y productos de servicios financieros, el cual impone nuevas
obligaciones a las empresas y entrega facultades al Servicio Nacional del
Consumidor (SERNAC).
La ley original del SERNAC es la N°19.496, la que a fines del año 2011 es
promulgada, con una modificación más reciente en que se le brinda protección al
consumidor en servicios Financieros transformándose en la Ley N° 20.555.
Costo Total de Crédito (CTC): es el valor que el cliente pagará en total por el
crédito solicitado (suma de todas las cuotas).
Para ser árbitro o mediador respecto de conflictos por infracción a la Ley del
SERNAC Financiero, debe cumplirse con los siguientes requisitos:
Los postulantes que quieran ser árbitros financieros deben poseer título de
abogado, con cinco años de experiencia profesional. Además no puede tener
relaciones de dependencia o subordinación o de asesoría con los proveedores que
soliciten el Sello SERNAC. Tampoco puede haber sido condenado por delito que
merezca pena aflictiva.
Para integrar la nómina de mediadores financieros los postulantes deben acreditar
poseer título profesional de una carrera de a lo menos ocho semestres de duración,
otorgado por un establecimiento de educación superior reconocido por el Estado, y
una experiencia superior a dos años en materias financieras, contables o jurídicas.
Al igual que los árbitros, no pueden tener relaciones de dependencia o
subordinación o de asesoría con los proveedores que soliciten el Sello SERNAC, ni
haber sido condenado por delito que merezca pena aflictiva.
Otras facultades del SERNAC por infracción a la ley del SERNAC Financiero
El SERNAC podrá designar como ministros de fe a ciertos funcionarios del Servicio
que podrán certificar los hechos que infrinjan la ley del SERNAC Financiero. Esto
significa que serán una especie de fiscalizadores que podrán constatar en terreno
si se produce una infracción y levantar un acta que servirá de prueba en tribunales.
Además, el SERNAC tendrá la facultad de solicitar información a los proveedores,
los que estarán obligados a proporcionarla siempre que se trate de antecedentes y
documentación que sea solicitada por escrito y que diga relación con la información
básica comercial de los bienes y productos ofrecidos al público (definida en el
artículo 1 de la Ley de Protección al Consumidor) dentro del plazo que señale el
SERNAC, el que no puede ser inferior a 10 días hábiles.
Además, los proveedores también están obligados a entregar al SERNAC toda otra
documentación que se les solicite por escrito y que sea estrictamente indispensable
para ejercer las atribuciones del Servicio, la que solo podrá referirse a información
relevante para el consumidor o que éste consideraría para sus decisiones de
consumo. La solicitud no puede incluir la entrega de antecedentes que tengan más
de un año de antigüedad a la fecha del respectivo requerimiento, o que la ley
califique como secretos (como el caso del secreto bancario), o que pueda
considerarse información privilegiada.
Las empresas que obtengan el certificado SERNAC financiero, deberán cumplir con
las siguientes obligaciones adicionales:
Someter los contratos a revisión del SERNAC, así como cualquier
modificación que se haga a los contratos que ya cuenten con el Sello
SERNAC, de manera que cumplan con la normativa exigida.
Contar con un Servicio de Atención al Cliente, el que debe contestar los
reclamos de los consumidores dentro de los 10 días hábiles siguientes. En
caso que la respuesta sea satisfactoria para el consumidor, el proveedor
debe cumplir con lo resuelto en un plazo no superior a 5 días hábiles.
Someterse a un sistema de mediación y arbitraje para los casos en que la
respuesta del Servicio de Atención al Cliente no sea satisfactoria para el
consumidor.
¿Por qué debo preferir una empresa con Sello SERNAC a una empresa sin
Sello SERNAC financiero?
El Sello SERNAC es una garantía para los consumidores de que las condiciones
generales y particulares de los contratos de tarjeta de crédito y débito, cuentas
corrientes, cuentas vistas y líneas de crédito, cuentas de ahorro, créditos
hipotecarios, créditos de consumo, así como los seguros que incorporan, no tienen
cláusulas abusivas y cumple con todos los requisitos que establece la ley, por lo
que puede firmar tranquilamente ese contrato sin correr mayores riesgos.
¿Todos los contratos de una empresa con Sello SERNAC han sido revisados
por el Servicio Nacional del Consumidor?
El SERNAC financiero revisará todos los contratos que ofrezca el proveedor de
productos o servicios financieros y que se encuentren dentro de los que señala la
Ley 20.555, estos son:
IV.- Conclusión
BONUS TRACK
¿Qué circunstancias deben concurrir para demandar a un Banco ante
tribunales?
Las diferencias o controversias, con la entidad financiera, se pueden producir por
diferencias de interpretación y cumplimiento de las estipulaciones, o condiciones de
los contratos, o de la determinación y cuantificación económica de eventuales daños
o perjuicios.
Como se inicia la acción judicial
Se inicia por una demanda, contestación, querella, denuncia o de oficio.
Dependiendo de la acción a interponer o materia a discutir es el tribunal competente
para ver la causa.
Hay que hacer presente que en algunos casos dicha acción se lleva a cabo
indistintamente de haber procedido reclamo, ya sea directamente con la institución
financiera, o en su defecto con aquellas instituciones establecidas como
intermediarias, en la resolución de los problemas, como lo son la CMF o el SERNAC
Financiero.
Para tal efecto se señala a que tribunal se puede acceder:
1.- Corte de Apelaciones: se puede recurrir a dicha tribunal mediante un
recurso de protección, esto da a lugar cuando el cliente vea vulnerado algunos de
sus derechos constitucionales por parte del banco o institución financiera, en todos
los casos las acciones se generan basados en el artículo 19 de la constitución
política referidos a los derechos fundamentales.
De dicho artículo se aplican habitualmente los siguientes:
N°1 el derecho a la vida y la integridad física y psíquica de a persona.
N° 24° el derecho a la propiedad en sus diversas especies sobre toda clase de
bienes corporales o incorporales.
Nadie puede, en caso alguno, ser privado de su propiedad, del bien sobre que recae
o de alguno de los atributos o facultades esenciales del dominio, sino en virtud de
ley general o especial que autorice la expropiación por causa de utilidad pública o
de interés nacional, calificada por el legislador. El expropiado podrá reclamar de la
legalidad del acto expropiatorio ante los tribunales ordinarios, y tendrá siempre
derecho a indemnización por el daño patrimonial efectivamente causado, la que se
fijará de común acuerdo, o en sentencia dictada conforme a derecho, por dichos
tribunales.
Caso Real:
Corte Suprema confirmó sentencia que acogió protección contra Banco, esto es por
negativa a pagar el seguro de fondos que fueron sustraídos a través de fraude
informático (28 de febrero de 2020). La Corte de Valparaíso señaló que, el Banco
es quien, en principio, debe soportar la pérdida que se produjo como consecuencia
de un fraude.
Cliente recurre de acción por protección en contra del Banco del Estado por la
negativa del pago del seguro, por los fondos que fueron sustraídos mediante un
fraude informático, consistente en veinte transferencias realizadas desde la cuenta
bancaria del recurrente a distintas cuentas.
La sentencia de la Corte de Valparaíso señaló que, los dineros sustraídos desde la
cuenta corriente, de que se trata, se encontraban en depósito en poder del Banco,
que es quien, en principio, debe soportar la pérdida que se produjo como
consecuencia de un fraude. Pero lo anterior cede solamente si apareció claro que
la Cuenta Correntista fue quien facilitó el fraude, al caer en algún engaño,
entregando a terceros sus claves, pero eso en este caso no pudo aseverarse, si el
Banco no explicó cómo pudo efectuarse la pluralidad de transferencias, ni se refirió
a si las cuentas de destino eran o no de aquellas registradas por el cliente, como
operación habitual; máxime si dichas transferencias, según consta de la cartola
histórica acompañada por el recurrente y la carta de 4 de noviembre de 2019,
emitida por el banco recurrido, ocurrieron todas seguidamente de forma continua,
entre los días 3, 5 y 7 de octubre del año pasado, más un avance que el Banco del
Estado le informó al recurrente, posterior a su reclamo de fecha 4 de octubre 2019,
pese a que la cuenta del recurrente, según lo informado por la recurrida, se
encontraba bloqueada.
El fallo agregó inmediatamente que - el Banco -, al desestimar el reclamo del
recurrente y negar la restitución de los dineros girados desde su cuenta corriente y
avance en efectivo, realizado, trasladó el riesgo del fraude al actor, cometiendo con
ello un acto de auto tutela que perturbó la garantía constitucional del derecho de
propiedad, por lo que se acogió el recurso de protección, descontando de la suma
cuya restitución se solicitó, que no fue controvertida por la recurrida, el monto
pagado al actor por concepto de seguro bancario por la suma de $4.241.282. El
máximo Tribunal, por su parte, confirmó la sentencia apelada.
2.- Juzgados Civiles: en este caso se puede recurrir a dicho tribunal cuando hay
un incumplimiento de los deberes y obligaciones que impone el contrato o los
contratos generados entre el Banco y el cliente con ocasión del o los servicios.
Caso real:
Juzgado Civil de Santiago acogió la demanda deducida en contra de Banco por el
pago de cuatro cheques sustraídos de talonario que cliente nunca abrió (15 abril de
2021). El Tribunal estableció la responsabilidad contractual de la entidad bancaria
al no fiscalizar la entrega correcta y completa del documento.
El Décimo Quinto Juzgado Civil de Santiago acogió la demanda deducida, en contra
del Banco de Chile, por el pago de cuatro cheques sustraídos de talonario que
cliente nunca abrió.
La sentencia sostiene que, resulta necesario destacar que, dado el giro de la
demandada y su nivel de órgano experto, precisamente mandatado por ley para la
confección y entrega de los cheques, es esperable por su parte el despliegue de
una conducta celosa respecto del trato de dichos documentos. En aquel sentido, no
existe constancia –más allá del acta de entrega– de los protocolos dispuestos sobre
la forma en que deben ser retirados los talonarios por parte de los clientes, y luego,
si el actor tuvo la oportunidad de constatar su integridad en el acto de retiro o si fue
compelido por los funcionarios a hacer una revisión de los cheques entregados.
La resolución agrega que, atendida la posición privilegiada del Banco respecto de
los cheques que emite, no se puede desconocer la confianza legítima que nace en
sus clientes al recibir por parte de la entidad un talonario sellado como garantía
suficiente en cuanto a la integridad.
Para el tribunal quedó acreditado que el Banco de Chile entregó un talonario de
cheques sellado en la ciudad de Rengo, y dos días después se cobraron cuatro
cheques de dicho talonario en la ciudad de Santiago. Sin embargo, siete días
después de la entrega del mencionado talonario un ministro de fe, en presencia de
los ejecutivos de la demandada, certificó que el mismo se encontraba sellado, lo
cual ya es un indicio suficiente para presumir que estaba en igual estado que al
momento de su entrega, abonando a lo anterior lo declarado por los dos testigos
ofrecidos por la demandante. Lo anterior deja en evidencia la falta de resguardo,
prudencia y diligencia de parte del demandado en el ejercicio de su función y oficio;
resultando preocupante la falta de control interno evidenciado, que se refiere con el
tratamiento de los cheques, en desmedro directo de la confianza depositada por sus
clientes.
Caso real:
Corte de Santiago condena a Banco a pagar multa e indemnización por infracción
a ley del consumidor. La resolución agrega que en el proceso no se ha acreditado
por quien debía hacerlo - esto es, el denunciado y demandado- que en este caso
se envió a la denunciante y actora una tercera clave.
13 de mayo de 2019
En fallo unánime, la Corte de Apelaciones de Santiago condenó al Banco de Chile
a pagar una multa de 50 UTM y una indemnización de $6.010.552 por giros no
autorizados de la cuenta corriente dela demandante. La sentencia sostiene que es
un hecho comprobado con las copias del sitio de internet del Banco Chile, que
aparte de las claves de acceso que éste señala para efectuar las trasferencias
electrónicas (clave personal de la cliente y una clave ‘digipass'), existe una tercera
clave (‘dinámica') que se envía al teléfono celular del cliente, cuando existen dudas
sobre quién es el autor de las transferencias.
La resolución agrega que en el proceso no se ha acreditado por quien debía hacerlo
-esto es, el denunciado y demandado- que en este caso se envió a la denunciante
y actora dicha clave, por lo que es necesario concluir que tal hecho (envío de la
tercera clave) no aconteció.
A continuación, el fallo señala que si bien es cierto que el envío de dicha tercera
clave es eventual, si el Banco hubiese actuado con un mínimo de diligencia
necesariamente debió haber empleado ese procedimiento, tanto por lo cuantioso
del monto transferido (muy superior a los que habitualmente efectuaba por internet
la mencionada Cuenta Correntista, cuanto porque el Banco, en otras ocasiones, le
envió a su teléfono celular la Clave Dinámica para transferencias electrónicas por
montos muy inferiores al que ahora nos ocupa.
Añade que en la forma como se viene razonando, y apreciando los elementos
probatorios del juicio conforme a la sana crítica, no cabe sino concluir que el Banco
Chile no cumplió con su deber de prestar el servicio con seguridad, y al que se
obligó con la denunciante y actora en virtud del contrato de cuenta corriente;
incurriendo en infracción a lo establecido en el Arts. 3° letra d); y adicionalmente,
infringió el Art. 23, ambas disposiciones de la Ley N° 19.946, sobre Protección a los
Derechos del Consumidor, en cuanto a que, actuando con negligencia, causó
menoscabo al consumidor por fallas de seguridad del servicio prestado", añade.
Por tanto, concluye que se revoca la sentencia apelada de trece de diciembre de
dos mil diecisiete, escrita de fs. 150 a fs. 165, y se decide en su reemplazo:
I.- Que se condena al denunciado Banco Chile, como autor de infracción al Art. 23
de la Ley N°19.946, sobre Protección a los Derechos del Consumidor, a una multa
de cincuenta unidades tributarias mensuales.
II. – Que HA LUGAR a la demanda de fs. 1 Y siguientes, interpuesta por doña Liliana
Ruth Seelmann Grumpeter en contra del Banco Chile, solo en cuanto se condena
al demandado a pagar a la actora, por concepto de daño emergente, la suma de
$ 6.010.552, con reajustes en la forma que previene el Art. 27 de la Ley N° 19.946,
e intereses corrientes desde que la presente sentencia quede ejecutoriada.
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