CLASIFICACIÓN DE LA ULTRAFILTRACIÓN:

Se sabe que las membranas juegan un papel fundamental en cualquier proceso de

filtrado, por ende para dar una clasificación para la ultrafiltración se hace referencia
es a la configuración de sus membranas, bien sea entorno a su tamaño, orden o
disposición que tenga en el equipo. Con esto en mente, a continuación se realiza
una clasificación de los distintos tipos de configuración de membranas en función
del tipo de aplicación que pueda tener:

1) Membranas laminares o planas: es un tipo de membranas planas, que se colocan

en capas horizontales, en placas similares a un filtro prensa, separadas por
espaciadores permeables que dirigen el flujo de la solución.

Para este caso las membranas presentan una baja relación superficie/volumen de
filtrado, aunque va a depender en gran parte de la eficacia del material que actúa
como espaciador.

La ventaja que presentan es que el conjunto de placas y marcos que constituye a

ésta tecnología puede disponerse en serie o en paralelo, lo cual permite diseños con
superficies de filtrado elevadas, además de que son muy compactos y muy fáciles de
limpiar, lo que ha llevado a que se empleen con frecuencia en la industria
alimenticia y farmacéutica.

2) Membranas enrolladas en espiral: consiste en enrollar un conjunto de

membranas planas separadas entre sí por capas de tejidos de distinta naturaleza
que funcionan como transportadores y generadores de turbulencia de las
disoluciones de alimentación y permeado. Tanto las membranas como los
separadores se enrollan sobre un tubo central perforado.

Básicamente son cuatro los tejidos que se disponen, una es la hoja superior que es
una rejilla separadora abierta para el canal de alimentación, una membrana, un
refuerzo de fieltro poroso para el canal de la sustancia permeada y otra membrana.

En éste proceso la solución de alimentación entra en paralelo al tubo y únicamente

atraviesa las capas permeables que están en contacto con la parte activa de la
membrana. Una vez atraviesa la membrana (en sentido perpendicular al flujo del
alimento) continua circulando en espiral en el sentido del arrollamiento hasta
alcanzar el tubo central que recoge todo el permeado.
Esta configuración conserva la sencillez de fabricación de las membranas planas
pero aumenta marcadamente el área de membrana por volumen de separador
unitario, así como permite una menor caída de presión y se reduce el coste
energético. Aunque tienen el inconveniente de que se ensucian con facilidad y son
difíciles de limpiar.

Actualmente ésta configuración es usada principalmente en plantas desaladoras,

aunque es más común su uso para ósmosis inversa.

3) Membranas de fibras huecas: Esta configuración de las membranas consiste en

una unidad integrada en la que fibras, muy delgadas, se insertan por ambos
extremos de un soporte. La solución penetra por un extremo y se reparte mediante
un tubo de distribución. Parte de ésta solución se penetra a través de las fibras y
emerge al exterior por capilares, quedando recogida en un colector.

Debido a que las fibras huecas se disponen en módulos compactos poseen mayor
superficie filtrante que los módulos de láminas planas y de membranas tubulares,
permitiendo separaciones más eficientes. Pero también presenta inconvenientes
como que las membranas son muy sensibles al ensuciamiento y que la manipulación
de los haces de fibras resulta muy delicada. Ésta configuración es usada con
frecuencia para el tratamiento de aguas residuales.

4) Membrana de fibra hueca de múltiples conductos: Ésta configuración posee

similitudes con la membrana de fibra hueca, pero se diferencia por tener fibras más
grandes y cada una de estas, contienen múltiples ductos, siendo normalmente entre
4 a 7 ductos.

5) Membranas tubulares: Las membranas tubulares se colocan en el interior de

carcasas cilíndricas que actúan como soporte y que contienen un número variable
de membranas tubulares.

La alimentación normalmente se bombea por el interior de las membranas,

produciéndose un flujo lateral de permeado a través de las paredes, es decir el
permeado fluye desde el interior hasta el exterior. La carcasa tiene los dispositivos
adecuados para recoger los flujos de permeado y concentrado.

Las membranas tubulares están constituidas por un soporte poroso de papel o fibra
de vidrio sobre el que se deposita la superficie filtrante, también se construyen en
materiales cerámicos. Una de las desventajas de este sistema es que no es muy
compacto y además posee un elevado costo por unidad de área instalada.

En la actualidad se utilizan sobretodo en ultrafiltración en la industria alimentaria y

en la del automóvil, ya que este tipo de configuración resulta eficaz para la recogida
de líquidos altamente concentrados como pinturas, zumos, etc. También es aplicado
en el tratamiento de aguas residuales o para la filtración de líquidos viscosos.

6) Membrana vibratoria VR: éste es un tipo de tecnología que surge para subsanar
el problema común de las tecnologías de membranas que es la obturación
provocada por las capas de residuos que se acumulan en su superficie.

La gran diferencia respecto a las membranas tradicionales es que el diseño básico es

vertical en vez de horizontal, por lo que el espacio necesario por unidad es menor
que en otros sistemas de separación. Además el líquido a tratar está prácticamente
inmóvil, circulando lentamente entre los elementos de membranas paralelas.

La membrana vibra originando ondas de esquileo, lo que hace que se levanten los
sólidos de la superficie de la membrana y que se vuelvan a mezclar con el material o
efluente que se mueve por el interior de la membrana. Lo que logra que los poros de
la membrana estén más limpios, logrando un rendimiento más alto que las
membranas convencionales.

Estas membranas son capaces de filtrar cualquier tipo de aguas residuales y

permiten tratar efluentes con una alta carga de sólidos, no requiere de químicos
para operar, a excepción de los necesarios para a limpieza periódica de la
membrana. Se suele usar para separaciones aceitosas y de concentraciones.

Estas membranas se utilizan para varias separaciones aceitosas, concentración de

proteínas, recuperación de sólidos en agua de bombeo y de cola en la industria
pesquera.