Con la elaboración de este ensayo se busca generar alternativas con las cuales se
pueda fomentar la equidad de género dentro del núcleo familiar, fundamentaremos la
necesidad de la promoción de la equidad de género, en los entornos familiares y
educativos como herramienta para reducir la desigualdad entre géneros que afecta
principalmente a niñas y mujeres en las sociedades con una cultura machista.
Históricamente los roles dentro del núcleo familiar han sido diferenciados por el sexo
que posea cada individuo y por los modelos entregados por la cultura en la cual están
insertos. Este modelo de estructura familiar está determinado por el rol que ejerce cada
persona dentro de su núcleo familiar, El rol femenino ha estado basado en las
actividades direccionadas al hogar, crianza y cuidado de los hijos, focalizando toda su
atención a la mantención de éste y la preocupación por cada integrante de su familia.
Por lo contrario, el rol masculino, ha sido direccionado al mantenimiento económico de
la familia, enfatizando su rol de proveedor. Sin embargo, esta visión cultural respecto a
los roles de los hombres y las mujeres, se ha ido transformando en la medida en que
los hombres y particularmente las mujeres han asumido roles en el espacio público,
generando cambios radicales en las dinámicas familiares y en el sector económico y
laboral, Las relaciones entre las mujeres y los hombres desempeñan un papel
importante tanto en la plasmación como en la evolución y transformación de los
valores, las normas y las prácticas culturales de una sociedad, los cuales, a su vez,
determinan dichas relaciones ( Secretario General de las Naciones Unidas, 2012).
La igualdad de género es un objetivo que ha sido aceptado por los gobiernos y las
organizaciones internacionales. Está consagrado en acuerdos y compromisos
internacionales.
Según (Jervis, 2016) todas las acciones que se ejecutan se dirigen a ejes temáticos
que apuntan a la equidad de género: Transformación de patrones socio-culturales:
Dentro de este ámbito se busca generar concientización: campañas donde se vea
reflejada información real referente al machismo y la violencia para que diferentes
culturas y clases sociales puedan obtener información y diferenciar aquellos patrones
que han sido normalizados con las conductas violentas dentro del hogar al mismo
tiempo se plantean opciones y alternativas para lograr una convivencia de respeto e
igualdad.
Educación dentro del núcleo familiar: Podemos destacar que el apoyo del núcleo
familiar es una de las bases esenciales para fomentar la equidad de género dentro del
contexto psicosocial y educativo debido a que desde casa empiezan las primeras
enseñanzas direccionadas a los pequeños del hogar estableciendo normas, buena
comunicación generando motivación y enseñando con el ejemplo, si hay niñas y niños
en el hogar, al momento de otorgar roles direccionados en ayudar a la limpieza de su
habitación o lavar un utensilio, deben aclararles que la actividad no tiene relación con
su género, que los roles no están definidos para hombre o mujer, cualquiera puede
realizarlos.
Dentro del hogar no se debe limitar a los niños/as al momento de elegir algún juego
o juguete pues se encuentran en la libertad de elegir los juguetes que más les gusten
porque estarán generando nuevas experiencias y formando su personalidad, es
importante recordar que los juguetes no tienen género establecido, los colores son para
todos no hay algunos para niños y otros para niñas al igual que los deportes no tienen
género, se debe inculcar en el ambiente familiar que las profesiones no están hechas o
direccionadas para hombres y mujeres, es importante dar a conocer que ambos tienen
el derecho de ejercer y desempeñarse de forma igualitaria en el ámbito profesional y
laboral de su preferencia.
Para lograr fomentar la equidad de género no se puede trabajar únicamente con los
integrantes de la familia, debido a que el entorno o sistema en el cual se desenvuelve
el núcleo familiar debe ser influenciado por una sociedad que opte por eliminar la
desigualdad de géneros y in estado que promueva políticas públicas de equidad de
género, de acceso a derechos y de protección a niñas y mujeres.
A nivel mundial los finales del 2019 e inicios del 2020 han sido marcados por la
participación política y social de grupos feministas pro equidad de género, que han
elevado una voz de lucha para exigir justicia por tantos años de desigualdad social,
declaran estar cansadas de la violencia, discriminación, y desigualdad y su camino de
lucha avanza con pasos firmas a ladrar la equidad ansiada.
Para lograr el cometido de estos grupos sociales necesita más que un movimiento
social se necesita una integración de ámbitos públicos y privados como de la
comunidad en general en un esquema basado en igualdad y libertad de derechos para
mujeres y niñas.
La creación de un fondo pro equidad, los activos asignados a este fondo fue
considerablemente superior a años anteriores, mediante este fondo se busca financiar
proyectos que buscan como objetivo la promoción de educación sexual con un enfoque
de género y prevención del embarazo infantil y adolescente.
Promoción de la educación dentro del núcleo familiar con enfoque de género como
una de las bases esenciales para fomentar la equidad de género dentro del contexto
psicosocial y educativo tomando en consideración que en casa empiezan las primeras
enseñanzas direccionadas a los pequeños del hogar estableciendo normas, buena
comunicación generando motivación y enseñando con el ejemplo, si hay niñas y niños
en el hogar, al momento de otorgar roles direccionados en ayudar a la limpieza de su
habitación o lavar un utensilio, deben aclararles que la actividad no tiene relación con
su género, que los roles no están definidos para hombre o mujer, fomentar una
educación inclusiva basada en valores de respeto e igualdad.
RECOMENDACIONES
Secretario General de las Naciones Unidas. (2012). “Cualquier cambio serio hacia el
desarrollo sostenible requiere la equidad de género. La inteligencia y la
capacidad colectivas de la mitad de. Gente resiliente en un planeta resiliente, 6.