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EpidemioIogía de Ia ametropía

para corregir su propia hipermetropía. Esta exposición


fue seguida por una descripción de Ia hipermetropía
Aunque en Ia antigüedad se conocían Ia miopía y Ia realizada por James Ware (1756-1815) quien, según cita
:Jresbicia, no ocurría así con Ia hipermetropía, que no Levene, empezaba refiriéndose aI trabajo de Wells para
~ 'e reconocida como una condición independiente de Ia después decir 10 siguiente:
. resbicia hasta el final deI siglo XIX. La reciente historia
::ie Ia detección y medición de Ios defectos refractivos T ambién existen casos de personas jóvenes en que Ia
: a sido revisada por Levene (1977), cuya cita de Ia Pro- córnea, el cristalino o ambos tienen una convexidad tan
aematica de Aristóteles ilustra eI hecho de que éste desproporcionada con su distancia de Ia retina, que se re-
84-321 a.c.) diferenció correctamente entre miopía y quiere un vidrio de considerab1e convexidad para ver con
nitidez no solamente Ias objetos de cerca sino también
:Jresbicia:
aquellos que están a una distancia lejana, y es extra ordi-
nario que el mismo vidrio capacite a muchas de estas per-
lPor qué motivo, aunque tanto una persona corta de
sanas para ver objetos lejanos y próximos (pág. 39).
vista como otra de edad avanzada se ven afectadas por
debilidad de Ias ajas, Ia primera tiene que acercarse a Ias
ajas e1 objeto que desea ver, mientras que Ia segunda tie- Cuando Donders escribió On the Anomalies of Accom-
ne que a1ejárse10? lEs debido a que tienen una debi1idad
modation and Refraction of the Eye (1864, reimpreso en
diferente? El hombre de edad avanzada no puede ver e1
1972), se mostraba sorprendido de que muchos ocu-
objeto, por 10 que tiene que a1ejarlo hasta una distancia
listas de la época todavía no fueran conscientes de Ia
en que Ia visión de Ias dos ajas se encuentran ... Por otro
lado, e1 hombre corto de vista puede ver el objeto pero no
existencia de Ia hipermetropía y pensaran que Ia presbi-
puede distinguir qué partes del mismo son cóncavas y cia, en lugar de Ia hipermetropía, era 10 «opuesto)) de Ia
cuá1es son convexas ... pero de cerca Ia incidencia de Ia luz miopía.
puede percibirse más fácilmente (págs. 35-36). ia comprensión del astigmatismo se produjo igual-
mente tarde en cuanto aI curso de Ios acontecimientos.
Sin embargo, no existe indicación aIguna de que Aris- Aun cuando Ias gafas para Ia corrección de Ia presbicia
cóteles comprendiera Ia naturaleza de Ia refracción ocu- se utilizaban ya en 1285, eI astigmatismo todavía no ha-
lar y sus anomalías. bía sido reconocido como entidad clínica cuando, en
Hasta casi 20 siglos más tarde no se evidenció una 1764, Benjamin Franklin inventó Ia lente bifocaL Tal
mayor comprensión de Ia naturaleza de Ia miopía y de como indicaron Bannon y WaIsh (1945), eI astigmatis-
- Ia prescibia. Tal como indicaron Levene (1977) y Hofs- mo fue mencionado por primera vez en 1727 por Sir
" -etter (1948), Francesco Maurolyco (1495-1575) teorizó Isaac Newton, aunque fue Thomas Young quien publi-
- que Ios defectos refractivos son causados por el cristali- có, en 1800, Ia primera descripción de esta condición,
no. Johannes Kepler (1571-1630) describió el sistema que éI mismo presentaba. Unos 25 afios después, Ia pri-
- óptico del ojo y la acción de Ias lentes tanto convexas mera lente tallada para Ia corrección deI astigmatismo
= como côncavas. Christopher Scheiner (1575-1650) des- fue disefiada por el astrónomo británico Sir George Airy
- cribió Ia óptica deI ojo con más detalle, tratando acerca para su propio ojo izquierdo, que era astigmático. Don-
de Ias medidas deI índice de refracción deI medio ocu- ders describió Ios procedimientos clínicos para Ia medi-
< lar y de Ia curvatura de Ia córnea. da de Ia hipermetropía, Ia presbicia, Ia miopía, Ia hete-
t. La primera indicación deI conocimiento de Ia hiper- roforia y eI estrabismo, considerando eI astigmatismo
<: metropía fue una declaración de William Wells (1757- como una anomalía relativamente rara, que en un gra-
::;;
'" 1817), en Ia que describía eI uso de las lentes convexas do de 1 D o más aparecía soIamente en 1 de cada 40 o
50 pacientes. Pasó otro medio siglo antes de que se de- 100
,. -----.
sarrollaran Ia queratometría, Ia retinoscopia y los proce- - Hombres •., .•••.•••
90
dimientos subjetivos para Ia medición del astigmatismo ---- Mujeres "
I
hasta eI punto de poder incorporarse aI examen habi- 80 I
I
tual deI refraccionista. 70
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Q.l 60 I
I
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50 , II
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o I

ia frecuencia y Ia distribución de Ia ametropía varían


o-
40 .'
/
mucho con Ia edad. Se ha constatado que Ia refracción 30
,
I

presenta una distribución normal en eI nacimiento, pero I


/
20 I
durante Ios primeros anos de Ia infancia Ia mayoría de
los ninos presentan un cierto grado de hipermetropía. 10
Durante Ia escolarización, cada vez más ninos comien-
o
zan a padecer miopía, de tal modo que aI llegar aIos
20 anos Ia proporción de miopes es deI 20 % o más. Edad (afias)
Durante los primeros anos de Ia edad adulta apenas se
Fig. 2-1. Porcentaje de Ia población norteamericana que utiliza
producen cambios, pero aI alcanzar Ios 45 anos se pre- lentes correctoras, 1971-1972. (Reproducida de Charac-
sentan casos de presbicia, y muchas personas empiezan teristics of Persons with Corrective Lenses. V.S. Department
a manifestar una hipermetropía hasta entonces latente. of Health, Education and Welfare, 1974.)
Pasados los 55 o 60 anos, se observa un ensanchamien-
to de Ia curva de distribución de errores refractivos: aI-
gunas personas se vuelven más hipermétropes, otras
permanecen estables y otras se vuelven miopes como das durante 1971 y 1972 como parte deI Cuestionario
resultado de cambios en eI núcleo del cristalino. sobre Salud y Nutrición (Health and Nutrition Exami-
Se ha constatado que eI astigmatismo cambia relati- nation Survey) llevado a cabo por eI Departamento Nor-
vamente poco con Ia edad. ia mayor parte de Ios ninos teamericano de Salud, Educación y Bienestar (1974). EI
y jóvenes presentan un cierto grado de astigmatismo se- rápido aumento deI porcentaje de personas que utilizan
gún Ia regIa pero, en Ios últimos anos de Ia edad adulta, lentes correctoras entre Ios 10 y Ios 20 anos de edad sin
el astigmatismo según Ia regIa tiende a disminuir y el duda se debe principalmente aI cada vez mayor núme-
astigmatismo contra Ia regIa tiende a aumentar. ro de ninos que desarrollan miopía durante su adoles-
cencia. Por otro lado, existen pruebas de Ia relativa es-
tabilidad de Ia refracción durante los primeros anos de
Ia edad adulta, 10 cuaI puede observarse en el aplana-
miento de Ia curva entre Ios 20 y los 40 anos. Finalmen-
Son difíciles de conseguir datos fácilmente compa- te Ia fuerte verticalidad de Ia curva entre los 40 y Ios
rables que indiquen Ia frecuencia de Ia miopía, Ia hi- 50 anos representa el inicio universal de Ia presbicia du-
permetropía y el astigmatismo para poblaciones no rante este período de vida.
seleccionadas y teniendo en cuenta Ia edad. De Ia in- ia figura 2-2 se ha confeccionado con los datos pre-
formación disponible en Ia literatura, Ia mayoría de es- sentados en otra publicación deI Departamento Norte-
tudios se refieren a poblaciones clínicas en lugar de no americano de Salud, Educación y Bienestar (1978). ia fi-
seleccionadas, y además los criterios para Ia miopía, Ia gura indica Ia proporción entre Ias personas que utilizan
hipermetropía y eI astigmatismo varían de un informe gafas o lentes de contacto negativas frente a Ias que em-
a otro. Sin embargo, eI Departamento Norteamericano plean gafas o lentes de contacto positivas. EI gráfico se
de Salud, Educación y Bienestar (V.S. Department of basa en Ia neutralización de Ias lentes llevadas aI cen-
Health, Education and Welfare) ha publicado datos que tro de examen y utilizadas, según sus usuarios, para Ia
indican Ia frecuencia deI uso de lentes correctoras. visión de Iejos, de forma que aparentemente no se in-
ia figura 2-1 presenta eI porcentaje de Ia población cluían aquellas personas que utilizaban Ias lentes sola-
norteamericana, dividida en varios grupos de edad, que mente para Ia presbicia. Es interesante observar que
utiliza gafas o lentes de contacto, según una «muestra aproximadamente el mismo número de personas esta-
de probabilidad nacional» de 10.126 personas examina- ban utilizando lentes positivas y negativas entre Ios 6 y
60
~ Potencia esférica negativa
55
~ Potencia esférica positiva 50
45
~ 40
35
30
25
20
15
10
40
5
~ O
+5,25 +4,25+3,25 +2,25 +1,25 -0.25-0,75 -1,75 -2,75 73,75
+30 +20 +10 o -10 -20 -30
20 ""
Vl

~ Refracción (D)
~
QJ Fig. 2-3. Curva de distribución deI defecto refractivo de Scheerer
U
QJ O y Betsch. (Reproducida con autarización de S. Duke-EI-
.§'
der. TextbDok Df Ophthalmology, Vo. 4. St. Louis: Mosby,
ijiu
1949, según Franchetti, en Kurzes Hb d Oph.)
o
Q.

20

inc1uían más de 12.000 pacientes c1ínicos de a partir de


25 anos de edad a Ios que se había practicado refrac-
ción ocular sin cic1opejía. ia curva de distribución deI
defecto refractivo de estos pacientes, en comparación
con Ia curva de distribución binomiaI determinada teó-
ricamente, fue publicada por Duke-Elder (1949) y se
muestra en Ia figura 2-3. Es obvio que Ia curva de dis-
tribución de Scheerer y Betsch sea mucho más «pun-
tiaguda», o leptocúrtica, que Ia curva de distribución nor-
mal, 10 que indica que existen muchas más personas
con bajos defectos refractivos que en eI caso de una
6-11 12-17 18-24 25-34 35-44 45-54 55-64 65-74
distribución normal. EI pico de Ia curva está en 0,25 D,
Edad (anos)
situándose casi eI 60 % de Ias personas entre 0,75 y
figo 2-2. Porcentajes de individuas que utilizan lentes negativas -0,25 D.
en relación con Ias que emplean lentes positivas. (Re- Stenstrom (1948) analizó Ios datos de distribución deI
producida de Refractive Status and Motility Defeets of Per-
defecto refractivo de Scheerer, Betsch et al., llegando a
sons 4-74 Years. U.S. Department af Health, Education
and Welfare, 1978.) Ia conc1usión de que Ia distribución de Ios defectos re-
fractivos en una población adulta no soIamente es Iepto-
cúrtica sino también sesgada hacia Ia miopía. Este ses-
_ ~os 11 anos, 10 que ocurría nuevamente entre Ios 45 y Ios go no es particularmente aparente en Ia figura 2-3, pero
5~ anos. Por otra parte, se observa que aproximadamen- puede verse con facilidad en Ia figura 2-4, Ia cuaI mues-
:e eI 90 % de Ios usuarios de lentes entre 12 y 17 anos tra una parte inferior de Ia curva de distribución consi-
- :.:tilizaban lentes negativas, mientras que eI 90 % de Ios derablemente aumentada. Duke-Elder (1949) senaló que
:Jsuarios de lentes de edades comprendidas entre Ios 65 . si se e1iminaban Ios casos de miopía con eI fondo de ojo
= y 74 anos utilizaban lentes positivas. degenerado (área sombreada en Ia figura 2-4), Ia curva
se aproximaría mucho más a Ia de distribución normal.

- Distribución de Ia ametropía
<

II estudio de Ia distribución deI defecto refractivo


< :nás a menudo citado es e1 de Scheerer y Betsch, publi- Se han publicado pocas curvas de distribución deI as-
::;
- do en 1928 y 1929. Según Stenstron (1948), sus datos tigmatismo en Ia literatura optométrica u oftalmológi-
ca. LyIe (1971) publicó una curva de distribución deI tribución de Ia ametropía esférica, teniendo su pico en
astigmatismo corneal de 1.208 ojos de pacientes de va- 0,75 D de astigmatismo según Ia regIa. Aunque LyIe no
rias edades examinados en su consulta clínica. Esta cur- representó Ia frecuencia de córneas que no tenían astig-
va de distribución se muestra en Ia figura 2-5. Su forma matismo, Ia tabla 2 de Ia publicación de Lyle indica que
general es notablemente similar a Ia de Ia curva de dis- 36 ojos tenían córneas esféricas. Si se anotara sobre Ia
curva un punto que representara estas córneas, encaja-
ría perfectamente en el espacio entre Ias dos líneas de
1,9 trazos.

1,5
~ VARIABILlDAD DE LOS COMPONENTES
'c"
'u REFRACTIVOS DEL OJO
1,0
'"
::l
U

'"
Li:: En su intento de comprender Ia variabilidad de los
0,5
componentes refractivos deI ojo, los investigadores se
han visto limitados por Ia tecnología disponible para su
o medición. Se tuvo que esperar a Ia invención deI quera-
+12 10 8 6 4 +2 E -2 4 6 8 10 12 14 16 18 20 -22
tómetro por Helmholtz para comprender Ia variabiIidad
Refracción (D)
de Ia potencia refractante de Ia córnea. Más adelante, Ia
Fig. 2-4. Porción inferior aumentada de ia curva de distribución invención deI oftalmofacómetro por Tscherning hizo posi-
dei defecto refractivo de Scheere y Betsch. (Reproduci-
ble determinar Ia variabilidad de Ia potencia refractante
da con autorización de S. Duke-Elder. Textbook ofOpht-
halmology, Vo. 4. St. Louis: Mosby, 1949.) deI cristalino, y el desarrollo por parte de Rushton deI
método de rayos X para Ia medición de Ia longitud axial
deI ojo hizo posible determinar el papel de este impor-
tante componente ocular en Ia variación de Ia refracción
350
ocular. Con el desarrollo de Ia tecnología de ultrasonidos,
hoy es posible medir con exactitud todos los compo-
300
nentes de Ia refracción ocular del ojo.
Estos avances tecnológicos y el crecimiento posterior
de nuestro conocimiento de Ia refracción ocular han
250 sido bien documentados por Duke-Elder (1949) y otros
autores. Arlt, en 1856, llamó Ia atención sobre el hecho
de que los ojos muy miopes eran muy largos y en for-
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o
'0 200 ma de pera, mostrando un adelgazamiento de Ia por-
(j)
TI II ción posterior de Ia esclerótica. En 1913, Steiger utilizó
2 el queratómetro de Javal-Shiotz para medir Ia potencia
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150 "
I,
I
refractante de Ia córnea de los ojos de 5.000 ninos y
observó que variaba desde 39 hasta 47 D. Steiger con-
••• 0,25 1,37 2,50
cluyó que Ia refracción corneal y Ia longitud axial eran
100
I independientes y libremente asociadas, y que Ias com-
,,
Oblicuo
I binaciones de curvaturas corneales y longitudes axiales
podrían causar ametropía.
50
,, Tron empleó el oftalmofacómetro entre 1934 y 1935
para establecer que no solamente Ia potencia refractante
• de Ia córnea y Ia longitud axial sino todos los compo-
nentes de Ia refracción ocular varían considerablemente
1)5 1,000.25 O 0,25 1,001)5 2,503,254,00 4)56,506,25 7,00
Contra Ia regia Según Ia regia de un ojo a otro. Disenó curvas de distribución para el
Dioptrías (±0,12) radio corneal, Ia profundidad de Ia cámara anterior, el es-
pesor y los radios deI cristalino, los índices de refracción
Fig. 2-5. Distribución de! astigmatismo corneal. (Reproducida
con autorización de W.M. ly!e. Changes in Corneai y Ia longitud axial, observando que todos los compo-
Astigmatism with Age. Amer. ]. Optom., Vol. 48, pp. nentes estaban normalmente distribuidos con Ia excep-
467-478, 1971.) ción de Ia longitud axial, Ia cual resultó ser leptocúrtica.
::::enstrom (1948) utilizó Ia técnica de rayos X de Rush- dependientes. Por ejemplo, Ia altura está normalmente dis-
:~. para estudiar los componentes refractivos de 1.000 tribuida, mientras que el peso (que depende principal-
::e:sonas seleccionadas entre los 20 y 35 anos de edad. mente de Ia altura) no 10 está. El hecho de que el defec-
;:TOS datos recogidos por Stenstrom incluyeron Ia re- to refraetivo no esté normalmente distribuido, existiendo
::-2 ción estática a 10 m, Ia medición deI radio come aI más ojos emétropes de 10 que podría encontrarse en
:::m el queratómetro de Haag-Streit, Ia medición de Ia una distribución normal, puede justificarse por el hecho
:::ofundidad de Ia cámara anterior y Ia oftalmoscopia de que Ias variables responsables deI estado refractivo
::2Ia determinar Ia presencia del cono posterior (alarga- deI ojo (potencia refractante de Ia cómea, profundidad
::::':ento y adelgazamiento de Ia esclerótica). Calculó los de Ia cámara anterior, potencia refractante del cristalino
: eficientes de correlación entre los defectos refractivos y longitud axial), más que variables dependientes, son
=. cada uno de los componentes de Ia refracción, encon- interdependientes.
:=-cndo los coeficientes siguientes: profundidad de Ia cá- Al estudiar los componentes de Ia Tefracción deI ojo,
::lara anterior, -0,34; longitud axial, -0,76; radio comeal, muchos investigadores han conclui do que existe un
= .18; Y potencia refractante deI cristalino, O. proceso que opera para producir una mayor frecuencia
EI signo negativo delante de Ia correlación entre Ia re- de emetropía de Ia que podría esperarse si se tratara de
::-2cción y Ia longitud axial indica que mientras mayor un proceso aI azar. Se piensa que este proceso, conoci-
sea Ia longitud axial, mayor será Ia miopía. Basándose do como emetropización/ implica uno o más mecanis-
=. estos coeficientes de correlación, Stenstrom conclu- mos, que fueron propuestos por Hirsch y Weymouth
='ó que Ia longitud axial es el factor más importante en (1947), Sorsby et aI. (1957) y otros.
.2 determinación de Ia refracción y que Ia mayoría de Hirsch y Weymouth (1947) reanalizaron los datos de
.2 miopías son axiales por naturaleza. Stenstrom, calculando los coeficientes de correlación
Sorsby, Benjamin, Davey, Sheridan y Tanner (1957) parcial entre los componentes refractivos y el estado re-
:-:.Jblicaron una investigación deI ojo emétrope, deter- fractivo. Manteniendo constante el radio comeal y Ia
::linando Ia longitud axial mediante cálculos basados en profundidad de Ia cámara anterior, observaron que Ia co-
= 5 datos de otros componentes. Constataron que el ojo rrelación entre Ia longitud axial y el estado refractivo era
=.étrope muestra un amplio rango de longitudes axia- de -0,87, en lugar deI -0,76 obtenido por Stenstrom.
=e5. así como de potencias de Ia cómea y deI cristalino, Concluyeron que no puede existir duda de que Ia longi-
::. e son de 21-26 mm, 38-48 D y 17-26 D respectiva- tud axial es Ia variable más importante y que Ia varia-
_ ente. Para Ia ametropía menor de ±4 D, Sorsby et aI. ción en el estado de Ia refracción es atribuible a este ele-
. servaron que los valores de longitud axial, potencia mento más que a ningún otro.
:omeal y potencia deI cristalino estaban dentro de los Manteniendo constante Ia longitud axial y Ia profun-
2ngos encontrados para el ojo emétrope, por 10 que didad de Ia cámara anterior, Hirsch y Weymouth (1947)
:oncluyeron que Ia ametropía se debía a un fallo en Ia observaron que Ia correlación existente entreel radio
:orrelación de los componentes individuales de Ia re- comeal y el estado refractivo era de 0,70, y no de 0,18
. acción ocular. Sin embargo, para Ia ametropía mayor como obtuvo Stenstrom. Manteniendo constantes to-
::e ±4 D, Ia longitud axial estaba casi siempre fuera de das Ias demás variables, constataron que Ia correlación
=os rangos encontrados en Ia emetropía. entre Ia profundidad de Ia cámara anterior y el estado
Como resultado de estos hallazgos, Sorsby et aI. dis- refractivo era de 0,25, y no de -0,34 como calculara
:-reparon de Ias suposiciones de Steiger de que existe Stenstrom. Como resultado de su análisis, Hirsch y
::. a libre asociación entre los componentes de Ia refrac- Weymouth propusieron dos mecanismos que partici-
- -ión ocular. Propusieron un mecanismo de correlación pan en el proceso de emetropización. En uno de ellos
-
,,:ue correspondería a una proporción más elevada de interviene Ia longitud axial y Ia profundidad de Ia cá-
_ e:nétropes en Ia población general en relación con Ia mara anterior y, en el otro, intervienen Ia longitud axial
.ue se esperaría con libre asociación. Argumentaron que y Ia curvatura comeaI. Más recientemente, se ha sugeri-
= el ojo emétrope no es una combinación azarosa de com- do un mecanismo que implica Ia longitud axial y el po-
onentes sino un órgano bien coordinado.
o der refractante del cristalino.
Estos autores propusieron que, cuando aumenta Ia
longitud axial deI ojo, tendiendo a causar miopía, Ia pro-
fundidad de Ia cámara anterior se incrementa, con 10
- que Ia miopía disminuye. Por 10 que respecta a Ia cór-
~
<'
::;;
Para que un rasgo resulte normalmente distribuido, nea, cuando Ia longitud axial aumenta, Ia córnea tiende
deben estar implicadas un gran número de variables in- a aplanarse, y este aplanamiento probablemente tien-
de a producir una disminución de Ia miopía. Hirsch y
Weymouth concluyeron que aproximadamente Ia mi-
tad de Ia varianza en los defectos refractivos se debe a
Ia longitud axial, una cuarta parte se debe a Ia curvatu-
ra corneal, una vigésima parte a Ia profundidad de Ia cá-
mara anterior, y Ia quinta parte restante se divide entre
los errores de medición y Ias variaciones en el cristalino
e índices de refracción. Fig. 2-6. Ojo esquemático universal de Hofstetter. (Reproducida
En su estudio deI ojo emétrope, Sorsby et aI. (1957) con autorización de H.W. Hofstetter. Emmetropiza-
senalaron que, desde el nacimiento hasta Ia edad adul- tion: Biological Process ar Mathematical Artifact? Amer.
ta, el ojo crece aproximadamente 8 mm en longitud ]. Optam., Vol. 46, pp. 447-450, 1969.)
axial (de una media de 16 a 24 mm)] 10 que implica una
reducción de Ia potencia refractante de 20 a 30 D. Pro-
pusieron que los cambios en Ia curvatura corneal y en Ia
potencia del cristalino pueden actuar como mecanis- el ojo es esencialmente un mecanismo de autofoco,
mos de correlación para mantener el ojo en o cerca de que Ia emetropía es producida por el control subcor-
Ia emetropía. tical deI tono deI músculo ciliar, y que Ia ametropía
Sorsby et aI. (1957) sugirieron que el mecanismo en el es producida por factores que interfieren con el meca-
que interviene a Ia curvatura corneal es simplemente nismo.
mecánico, implicando Ia tendencia de Ia córnea a apla- Hofstetter (1969) sugirió que Ia emetropización pue-
narse cuando crece el ojo. Sin embargo, para el meca- de no ser un proceso biológico en absolut9, sino que
nismo en el que interviene el cristalino] propusieron Ia puede explicarse de forma matemática. Destacó el he-
existencia de un mecanismo biológico en el que Ia ve- cho de que Ias dimensiones radiales se utilizan tanto
sícula óptica actúa como «organiza dor» del ectodermo para Ia valoración dióptrica como estructural deI ojo
subyacente. Esto es, primero forma un cristalino y, des- y argumentó que] utilizando un ojo esquemático «uni-
pués, una continuación deI mismo proceso «organiza- versal» (fig. 2-6), sería posible construir toda una serie
dor» llevada a cabo por Ia retina (derivada de Ia vesícu- de ojos emétropes. Una distribución de frecuencia de
Ia óptica) puede determinar Ia forma y curvatura deI tales ojos produciría una línea vertical infinitesimal-
cristalino después deI nacimiento. mente delgada, el límite absoluto de Ia leptocurtosis.
Un mecanismo de emetropización más detallado ha Sin embargo] es de suponer que Ias pequenas variacio-
sido propuesto por Van Alphen(1961), que sometió los nes en los valores de los componentes de Ia refracción
datos de Stenstrom a un análisis factorial y concluyó ocular podrían dar lugar a una ligera dispersión de los
que existen tres factores. El primero se refería a Ia cur- defectos refractivos deI ojo con respecto de una perfec-
vatura corneal y a Ia longitud axial, siendo clasificado ta leptocurtosis.
como faetor de tamano. En el segundo intervenían Ia lon-
gitud axial, Ia profundidad de Ia cámara anterior y Ia po-
tencia del cristalino] y se denominó faetor de expansión.
Finalmente] el tercer factor, denominado factor de desca-
rrilamiento, implicaba todas Ias variables, y se explicaba Cualesquiera que sean los mecanismos capaces de
por una expansión insuficiente, suficiente o excesiva. explicar Ia emetropización (si es que existe alguno)]
Van Alphen sugirió que es el factor de expansión (y no parece ser que este proceso funciona razonablemente
el deI tamano) el que determina en última instancia Ia bien a tenor de los resultados obtenidos por Sorsby et
refracción (10 que equivale a decir que, para ser emétro- aI. (1957). Estos autores observaron que los defectos
pe, el ta mano en sí no es importante, pudiendo serIo de refracción ocular hasta -4 D, en los que los valo-
tanto un ratón como un elefante). res de Ia longitud axial deI ojo y de Ia potencia de Ia
Van Alphen (1961) propus o que el cuerpo ciliar y córnea y deI cristalino estaban dentro de los rangos
Ia coroides forman una envoltura elástica que limita Ia deI ojo emétrope] se correspondían con un 98 % de
expansión de Ia esclerótica por Ia parte opuesta de Ia pre- todas Ias refracciones. Solamente el 2 % con ametro-
sión intraocular, y que Ia mácula proporciona informa- pías mayores de -4 D fallaban totalmente en el pro-
ción sobre el enfoque aI cerebro, que a su vez retroali- ceso] puesto que dichos ojos tenían longitudes axiales
menta información concerniente aI grado necesario de fuera deI rango de Ia emetropía o Ia ametropía de bajo
expansión. Van Alphen resumió su teoría diciendo que grado.
CAMBIOS EN LA REFRACCIÓN OCULAR heiser fueron más tarde publicados por Steiger (1913)
CON LA EDAD conjuntamente con algunos de los suyos propios, sien-
do después también publicados por Wibaut (1926), con
el resultado de que fueron incorrectamente atribuidos
a este último. Tal como apunta Hirsch, ningún otro in-
Una miopía elevada en bebés prematuros se asoció vestigador ha obtenido una distribución como Ia de
orimero a Ia fibrosis retrolental/ una condición que suele Herrnheiser.
;>roducirse en estos bebés debido a Ia administración de Uno de los primeros grandes estudios sobre Ia refrac-
oxígeno. Sin embargo, en un estudio de 462 bebés pre- ción de los bebés recién nacidos realizados después de
__aturos, Fletcher y Brandon (1955) observaron que en Herrnheiser fue el publicado por Cook y Glasscock
estos pacientes existía miopía con o sin fibrosis retro- (1951). Éstos utilizaron Ia retinoscopia con cicloplejía
:ental. übservaron que en los bebés prematuros que pe- mediante atropina para determinar Ia refracción ocular
saban más de 1.700 g (3,74 libras) aI nacer, el fondo de de 1.000 ojos de bebés recién nacidos. ia distribución
ajo estaba maduro y el valor de Ia miopía variaba des- de sus estados refractivos difería considerablemente de
'e cero hasta 6 D, fluctuando poco y estacionándose a Ia de Herrnheiser, abarcando desde 11-12 D de miopía
:ma edad de 4 a 10 semanas. En aquellos bebés que pe- hasta 11-12 D de hipermetropía. ios resultados que ob-
saban aI nacer menos de 1.250 g (2,75 libras), el fondo tuvieron a partir de 370 ojos de bebés blancos fueron re-
àe ojo era inmaduro y los ojos mostraban una miopía presentados gráficamente por Hirsch (1963b) y se re-
'e 10 hasta 20 D, valor que fluctuaba hasta en 20 D du- producen en Ia figura 2-7 (línea de trazo continuo). En
~ante Ias semanas siguientes y llegaba a estabilizarse esta distribución, el grupo modal que incluye el 20 %
.:erca del cero aI final deI primer ano de vida aproxima- de los ninos se encuentra en el intervalo de 1 a 2 D.
·amente. Más recientemente, Goldschmidt (1968) publicó que
Fledelius (1981) observó cambios en Ia refracción y había utilizado atropina para realizar Ia refracción ocu-
:ama no del globo ocular en 137 jóvenes daneses de lar de 356 bebés daneses (todos con un peso aI nacer de
~8 anos de edad, de los cuales aproximadamente Ia mi- más de 2,5 kg) aIos 2-10 días de edad, encontrando una
:ad habían nacido con bajo peso (inferior a 2 kg) y Ia
o ra mitad había nacido a término. En los emétropes y
:niopes se observó que los ojos de los individuos que 35
~abían tenido bajo peso aI nacer presentaban córneas
-on curvaturas más cerradas y longitudes axiales más 30
-artas que aquellos que habían nacido a término. Varias
?ublicaciones relacionadas con ninos nacidos con bajo 25
?eso fueron revisadas por Goss (1985), que llegó a Ia ~
ro 20
;:onclusión de que, debido a que tales ojos presentaban 'u
c
-órneas con curvaturas más cerradas y longitudes axia- (j)
::J
u 15
:es más cortas que Ias de los ninos nacidos a término, el ~
LL

ajo miope de un bebé prematuro es un ojo subdesarro- 10


Jtldo. Además, Goss sugiere que tales casos de miopía
?ueden producirse por una turbidez de los medias oculares, 5 ,,
~
:ma consecuencia de Ia retinopatía deI bebé prematuro. •••
o ••
7 6 5 4 3 2 1 o 1 2 3 4 5 6 7 8 9 1011
Miopía Hipermetropía
Estado de Ia refracción (D)

Fig. 2-7. Distribución deI defecto refractivo de bebês reciên na-


En Ia primera mitad del siglo xx se creía que todos los cidos (R.C. Cook and R.E. Glasscock. Refractive and
oebés nacían con varias dioptrías de hipermetropía que Ocular Findings in the Newborn. Amer.). Optom., Vol.
esaparecían a Ia edad de 5 o 6 anos. Tal como expuso 34, 1951) Y de ninos de edades entre 6 y 8 anos (G.A.
- :1irsch (1963b), esta creencia fue el resultado de un es- Kemph, S.D. Collins and B.L. Jarman. Refractive Error in
the Eyes of Children as Determined by Retinoscopic Exami-
< ~dio publicado en 1892 por Herrnheiser, quien utilizó
nation with a Cycloplegic, Public Bulletin N.o 182, Wa-
- til oftalmoscopio para medir el estado refractivo de shington, D.C., V.S. Government Printing OHice, 1928).
~ _.930 bebés y observó que todos excepto dos tenían (Calculada y redibujada por M-J. Hirsch. Vision of Chil-
e 1 a 6 D de hipermetropía. ios resultados de Herrn- dreno Filadelfia: Chilton, 1963.)
distribución normal de Ia refracción ocular con un ran- Más recientemente, Mohindra y Held (1981) realiza-
go aproximado de 8 D de hipermetropía hasta 7 D de ron exámenes de refracción ocular en 400 bebés nacidos
miopía. Es interesante observar que, en ambos estudios, a término entre e! nacimiento y los 5 anos de edad, uti-
el de Cook y Glasscock (1951) y el de Godschmidt lizando Ia técnica de «retinoscopia de cerca» (proce-
(1968), aproximadamente el 25 % de los bebés recién dimiento que consiste en realizar Ia retinoscopia no ci-
nacidos eran miopes. clopléjica a una distancia de 50 cm en una sala oscura
Goldschmidt observa que gran parte deI desarrollo mientras e! nino mira Ia luz deI retinoscopio; aI compo-
de los ojos se produce durante los últimos meses deI nente esférico encontrado en Ia neutralización de! refle-
embarazo y los primeros meses de vida, de modo que jo retinoscópico se le sumó -1,25 D). En ninos en eda-
Ia edad de desarrollo de un bebé puede tener un efec- des comprendidas entre e! nacimiento y Ias 4 semanas
to sobre Ia refracción ocular en el nacimiento. Este au- de vida, se observó una distribución de Ia refracción
tor se refiere a un documento de Gleiss y Pau (1952), ocular en forma de campana, con un rango desde -14 D
quienes siguieron Ia refracción de bebés prematuros y hasta 12 D, estrechándose gradualmente hasta un ran-
concluyeron que, durante los primeros meses de em- go entre -3 y hasta 4 Da edades entre 129 y 256 sema-
barazo, el grado de hipermetropía disminuye y el de nas (fig. 2-8). Estos resultados demuestran que el proce-
miopía aumenta (suponiendo que Ias condiciones deI so de emetropización es evidente durante el primer ano
crecimiento eran Ias mismas tanto si los bebés habían de vida.
ya nacido como si todavía se encontraban in utero). _. -;
Goldschmidt (1968) considera Ia cuestión de si es posi- ..,.:io IJ?·
ble predecir el estado refractivo deI adulto a partir de Ia ~Cambios durante Ia edad escolar
refracción en e! nacimiento. Sugiere que, en Ia mayoría
de los casos, el grado de miopía congénita disminuye ia mayoría de los estudios de los defectos refractivos
y, 10 que es más, puede desaparecer. Este resultado es realizados en ninos son deI tipo sección transversal, 10que
coherente con los datos de Fletcher y Brandon (1955); implica un conjunto de datos sobre un gran número de
esto es, en algunos casos, Ia miopía deI prematuro se personas de diferentes edades. Estos estudios tienen Ia
estabiliza cerca deI valor cero aI final deI prime r ano desventaja de no proporcionar información relacionada
de vida. r con los cambios de refracción ocular en cada nino. Aun-
•..
/- - r
/
""ç. f};l que a menudo los autores de estudios transversales ar-
L ,'~ gumentan que los defectos refractivos medios disminu-
P( Cambios durante Ia edad preescolar yen desde 1 D aIos 6 anos hasta 0,50 D aIos 12 anos,
tales afirmaciones deberán interpretarse deI modo que
Sorsby, Benjamin y Sheridan (1961) concluyeron que sigue: "A partir de estos datos podemos inferir que e!
el crecimiento deI ojo durante Ia infancia es extremada- valor medio de los defectos refractivos deI ojo disminu-
mente rápido, alcanzando Ias dimensiones deI adulto a ye desde 1 D aIos 6 anos hasta 0,50 D aIos 12 anos».
Ia edad de 3 anos. Senalaron que Ia longitud deI globo Solamente a partir de un estudio longitudinal/ en el que
ocular aumenta una media de 5 mm entre el nacimien- cada persona es examinada repetidamente a 10largo de
to y los 3 anos de edad, mientras que entre los 3 y muchos anos, es posible establecer con certeza cómo el
13 anos dicho aumento sólo es de 1 mm aproximada- defecto refractivo o 10s componentes de Ia refracción
mente, es decir, una media de 0,1 mm por ano. ocular varían con el transcurso de! tiempo.
Desafortunadamente, se disponen de pocos datos
acerca de ninos entre los primeros meses de vida (cuan-
do pueden ser examinados en clínicas privadas) y los
5 o 6 anos de edad (cuando pueden ser examinados en
guarderías o escuelas). Kemph, Collins y Jarman (cita- ia creencia de que todos los ninos son hipermétropes
dos por Hirsch en 1963b) obtuvieron datos de Ia refrac- fue reforzada por un estudio publicado por Slataper
ción ocular de un grupo de 333 ninos en edades entre (1950), basado en los datos de varios miles de pacientes.
los 6 y 8 anos. Estos datos aparecen en Ia figura 2-7 (lí- Empleando el equivalente esférico de Ia refracción, Sla-
nea discontinua). ia distribución de los defectos refrac- taper observó que el valor medio de Ia refracción era de
tivos indica que Ia emetropización tuvo lugar entre los 2,32 D en el momento deI nacimiento, aumentando
6 y 8 anos de edad; Ia gran mayoría de los ninos esta- hasta 3,93 D a Ia edad de 7 anos, y disminuyendo des-
ban en e! grupo de los emétropes, con un pico corres- pués a razón de 0,25 D por ano. Slataper aparentemen-
pondiente a 1 D de hipermetropía. te ignoraba que una población clínica difiere enorme-
Epidemiologíade Ia ametropía 39

43
~O

81 1.000
35 39

27
30

25 78
t. 70
- 48
20 A
- 1\
- II
5 1
I
10
\
,
I
\
5 \
\

O
( ( m I
-10 -5 O 5 10 5 10 -10 -5 O -5 O 5 -5 O 5 -5 O 5 -5 O 5 -15-10 -5 O 5
0-4 9-16 17-32 33-64 65-128 129-256 Adultos
Edad (semanas)
. 2-8. Estrechamiento de Ia distribución de Ia refracción durante los 5 primeros anos de vida, 10 que demuestra que el proceso de eme-
tropización es evidente a muy temprana edad. (EI grupo de 0-4 semanas incluye los datos [líneas discontinuas] de Cook y Glass-
cock, en Refractive and Ocular Findings in the Newborn. Amer.]. Optom., VoI. 34, 1951j los datos deI adulto se han adaptado de
A. Sorsby, B. Benjamin, and M. Sheridan. Refraetion and Grol)(lth of the Eye from the Age ofThree. Londres: Her Majesty's Stationery
OfEice, 1961; eI diagrama se ha reimpreso con permiso de I. Mohindra y R.Held. Refraction in Humans from Birth to 5 Years.
Documenta Ophthalmologica Proceedings, Series 28, La Haya: Dr. W. Junk Publishers, 1981.)

=õ:_ te de una población no seleccionada, ya que Ia ma- Otros investigadores han publicado datas de estudios
--:::-:a de Ias bebés y ninas pequenos acudían aI oftaI- transversales realizados con ninas en edad escolar. T 0-
= 'logo por eI estrabismo que acompana a una elevada dos estas estudios muestran, como 10 hicieran Sorsby et
.:::?ermetropía. aI. (1961), que el valor media de Ias defectos refractivos
=_ un estudio de 1.432 ninas no seleccionados, Sorsby, disminuye persistentemente hacia Ia emetropía durante
'::e. jamin y Sheridan (1961) observaron que eI valor me-
::~o de Ia reEracción ocular, empleando cicloplejía para eI
õ:xamen de ésta, disminuía en Ias ninas desde 2,33 D a +4,00
-""edad de 3 anos hasta 0,93 D a Ia edad de 14 anos, +3,50
=::entras que, en Ias ninas, 10 hacía desde 2,96 D a Ia
+3,00
õ:::ad de 3 anos hasta 0,64 D a Ia edad de 15 anos. c
'0
'0 +2,50
a figura 2-9, que muestra Ias datas de SIataper com- u

_ 72.rados con Ias valores medias de Sorsby para ninas y


~
Q.l +2,00
~
-;:'1as, indica claramente Ia excesiva cantidad de hiper- +1.50

::::etropía detectada en Ia población clínica de Slataper. +1,00


-::
- ebe tenerse en cuenta que Ias datas de Sorsby para ni- +0,50
-:: ::os entre 6 y 8 anos de edad muestran un valor media
: ::e reEracción ocular de aproximadamente 2 D de hiper- 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14

- ::::tetropía si se compara con el valor menor de 1 D ob- Edad


- :t:nido en el estudio de Kemph, Collins y JarmanJ que se Fig. 2-9. Datos deI defecto refractivo en ninos: datos de Slataper
_ uestra en Ia figura 2-7. Entre Ias factores que pueden comparados con los de Sorsby et aI. (Modificada de F.J.
Slataper. Anh. Ophthal., Voi. 43, pp. 466-481, © 1950,
explicar parcialmente esta diferencia se encuentra Ia
Age Norms in Refraction and Vision, American Medi-
- :::stinta concentración de Ias ciclopléjicos que fueron cal Associationj y A. Sorsby et aI. Refraetion and GrOl)(l(h
-..:ilizados en Ias dos estudios, así como Ia diferencia en ofThe Eye from the Age of 3, 1961, con autorización, Her
= :as poblaciones (ninas ingleses y norteamericanos). Majesty's Stationery OHice, Londres.)
Ia edad escolar. Sin embargo, Ias valores medias deI de- 6. EI valor media de Ia Iongitud axiaI deI ajo aumenta
fecto refractivo no pueden demostrar que Ia frecuencia aproximadamente desde 22 mm a Ias 6 anos hasta
de Ia miopía aumenta constantemente durante Ias anos 23 mrn a Ias 12.
escolares, mientras que Ia frecuencia de Ia hipermetro-
pía y deI astigmatismo cambia muy poco. Por ejemplo, ias frecuencias de Ia miopía, Ia hipermetropía y eI as-
Blum, Peters y Bettman (1959) publicaron un estudio tigmatismo no se proporcionan en esta publicación.
realizado en Orinda, California, en eI que observaban
que Ia frecuencia de Ia miopía (-0,5 D o más) aumenta-
ba desde aproximadamente eI 2 % a Ias 6 anos hasta eI
15 % a Ias 15 anos, mientras que Ia frecuencia de Ia hi-
permetropía (1,5 D o más) era aproximadamente deI Hirsch (1961) empleó Ia retinoscopia para determinar Ia
6 % a todas Ias edades y Ia frecuencia deI astigmatismo refracción ocular de un grupo de nifíos en Ojai, California,
(1 D o más) aumentaba soIamente desde el 4 % a Ias dos veces cada ano durante sus primeros acho anos esco-
5 anos hasta eI 6 % a Ias 15 anos. lares. Aunque a su inicio eI estudio incluía 1.200 ninas, en
Recientemente, Zadnik, Mutti, Friedman y Adams el momento en que éstos alcanzaron el octavo curso, se
(1993) han publicado Ias datas de Ias componentes de Ia disponía sólo de datas de unos 500 ninas.
refracción ocular y deI defecto refractivo obtenidos en un En uno de Ias primeros informes deI estudio, Hirsch
estudio transversal con ninas en edad escolar de Orinda, (1961) concluyó que durante Ias primeros seis anos de
California, para el primer ano de 10 que será un estudio escolarización, entre eI 84 y eI 90 % de Ias ninas mos-
longitudinal. EI defecto refractivo fue determinado con eI traban un cambio refractivo de forma lineal; para eI
examen de refracción ciclopléjica, utilizando dos gotas de 10-16 % restante, Ia refracción cambiaba de manera
tropicamida al1 %. ia técnica de Ia refracción ocular tan- curvilínea. ia mayoría de Ias que variaban de forma li-
to ciclopléjica como sin cicloplejía se llevó a cabo con un neaI su refracción ocular 10 hacían en eI sentido de ha-
autonefractómetro Canon R-1; Ia potencia de Ia cómea cerse más miopes o menos hipermétropes a medida que
en el meridiano vertical se midió con un CorneaScope iban creciendo (Ia dirección mostrada en Ias estudios de
Kera de 9 anillos; Ias radios de curvatura del cristalino se SIataper y Sorsby). SoIamente en una pequena minoría
midieron con un oftalmofacómetro de vídeo; Ia potencia Ia refracción cambiaba en eI sentido de un aumento de Ia
deI cristalino se calculó empleando Ias índices de refrac- hipermetropía o no cambiaba en absoluto.
ción deI ajo esquemático de Gullstrand-Emsley, y Ias dis- ia figura 2-10 muestra dos curvas típicas. ia curva
tancias axiales se rnidieron con Ia unidad ultrasónica de superior es Ia de Ia refracción de un nino que disminu-
banido A de Ia marca Allergan-Humphrey. yó, a razón de aproximadamente 0,06 D de hiperrne-
En eI momento de esta publicación, se habían inclui- tropía por ano, desde 1 D de hipermetropía a Ias 6 anos
do 530 ninas en eI estudio. A partir de Ia tabla y Ias grá- hasta 0,5 D a Ias 12 anos. ia curva inferior muestra eI
ficos incluidos en eI informe de Zadnik et aI. (tabla 4 y cambio de Ia refracción ocular en un nino que había
figs. 1 a 3 de dicha publicación), podemos inferir que, sido emétrope a Ias 7 anos pero cuya miopía aumentó
en estas ninas: a razón de aproximadamente 0,5 D por ano durante Ias
5 anos siguientes.
1. EI valor media deI defecto refractivo disminuye
desde aproximadamente 0,75 D a Ias 6 anos hasta
aproximadamente 0,25D a Ias 12 anos.
2. EI valor media de Ia potencia carne aI disminuye
desde aproximadamente 44,5 D a Ias 6 anos hasta Según eI defecto refractivo aI comenzar Ia esco-
aproximadamente 43,75 D a Ias 12 anos. Iarización. En un informe posterior, Hirsch (1964)
3. EI valor media de Ia potencia dei cristalino dismi- analizó Ias cambias de Ia refracción ocular por separa-
nuye desde aproximadamente 21,75 D a Ias 6 anos do en ninas que eran miopes, emétropes e hipermétro-
hasta 20 D a Ias 12 anos. pes aI comenzar su escolarización. Obtuvo Ias datas
4. EI valor media de Ia profundidad de Ia câmara an- siguientes: a) de 4 ninas que eran miopes a Ias 5-6 anos,
terior aumenta desde aproximadamente 3,5 mm a todos seguían siendo miopes a Ias 13-14 anos; b) de
Ias 6 anos hasta 3,8 mrn a Ias 12 anos. 185 ninas que eran emétropes a Ias 5-6 anos, 86 desa-
5. El valor media de Ia profundidad de Ia cámara ví- nollaron miopía, 84 siguieron siendo emétropes y 15
trea aumenta desde aproximadamente 15 mrn a Ias se volvieron hipermétropes, entre Ias 13 y 14 anos de
6 anos hasta 16 mm a Ias 12 afias. edad, y c) de 72 ninas que habían sido hipermétro-
Re&acción a edades entre Predicción para edades entre
5 y 6 afios 13 y 14 afios

La miopía permanecerá y probable-


mente aumentará
Hipermetropía mayor EI nino probablemente permanece-
c de 1,5 D rá hipermétrope
'0
'u Entre 0,5 y 1,25 D Alta probabilidad de ser emétrope
u -1,00
~ Entre Oy 0,5 D Alta probabilidad de ser miope
Q>
Entre Oy 0,50 D Mayor probabilidad de !legar a ser
""
y astigmatismo miope a esta edad
contra Ia regIa

Adaptada de M.). Hirsch. Predictability of Refraction at Age 14 on the Basis


of Testing at Age 6: Interim Report on the Ojai Longitudinal Study of Refrac-
tion. Amer. j. Optom., Voi. 41,1964.

8 9 10 11 predecir qué nino llegará a ser miope durante Ia época


Edad escolar tiene que ver con Ia relación entre Ia longitud
Fig.2-10. Curvas que muestran eI cambio de refracción con Ia axial y el radio de curvatura carne aI (relación LNRC).
edad en ninos individuales. (Modificada de Ml Hirsch. La relación LNRC es deI orden de 3 para ajas emétro-
A Longitudinal Study of Refractive State of Chíldren peSj casi siempre es mayor de 3 en miopes e inferior a
during the First Six Years of SchooI. Amer.]. Optom., 3 en hipermétropes. Por ejemplo, si Ia longitud axial de
VoI. 38, pp. 564-571,1961.)
un ajo es de 24 mm y el radio de curvatura de Ia córnea
es de 8 mm, Ia relación LNRC es de 24/3, es decir, de
3, y el ajo es emétrope o prácticamente emétrope. Los
_es entre Ias 5 y 6 anos, solamente 2 desarrollaron tres ajas mostrados en Ia figura 2-11 tienen diferentes
::1iopía entre Ias 13 y 14 anos, mientras que 16 se hi- longitudes axiales y radios de curvatura corneales, pero
-:eron emétropes y 54 continuaron siendo hipermé- todos presentan relaciones LNRC de 3 y, por 10 tanto,
:rapes. cabe esperar que sean emétropes.
- A partir de estas datas, Hirsch (1964) llegó a Ias con- Cuando Grosvenor (1988) tabuló Ias datas de Ias
dusiones siguientes: componentes de Ia refracción ocular de 788 ninas mela-
nesios en Vanuatu, entre Ias que existe una frecuencia
1. Si un nino tiene cualquier grado de miopía a Ia edad de miopía considerablemente baja, observó que estas
de 5-6 anos, Ia miopía permanecerá y probable- ninas tenían córneas relativamente planas y longitudes
mente aumente. axiales relativamente cortas en comparación con Ias ni-
2. Si un nino tiene hipermetropía mayor de 1,50 D en- nas que había examinado en Estados Unidos. Con esos
tre Ias 5 y 6 anos, 10 más probable es que perma- datas cabía esperar que sus ajas tuvieran moderados
nezca hipermétrope hasta Ias 13 o 14 anos. grados de hipermetropíaj aun así, el 98,6 % de estas ni-
Si un nino tiene una refracción esférica entre 0,5 y nas mostraba un equivalente esférico de refracción en-
1,25 D a Ia edad de 5 o 6 anos, existe una gran pro- tre -0,25 y 1 D. Comparando Ias relaciones LNRC de
babilidad de que, entre Ias 13 y 14 anos, llegue a ser estas ninas melanesios con Ias de Ias ninas ingleses
emétrope. emétropes de Ia misma edad que fueron examinados
4. Vn nino que tenga una refracción esférica entre O y por Sorsby et aI. (1961, 1970), Grosvenor observó que el
0,50 D entre Ias 5 y 6 anos tiene una gran probabi- valor media de Ia relación LNRC de Ias ninas ingleses
lidad de convertirse enmiope entre Ias 13 y 14 anosj es considerablemente mayor que el de Ias ninas mela-
Ia probabilidad es aún mayor si además existe as- nesios para Ias grupos de todas Ias edades (v. figo 2-12).
tigmatismo inverso. Estas conclusiones se resumen De acuerdo con estas resultados, Grosvenor sugirió
en Ia tabla 2-1. que, puesto que Ia frecuencia de miopía era mucho ma-
/' yor entre Ias ninas ingleses que entre Ias melanesios,
; ~ntre Ia Iongitud axiaI y eI radio una elevada LNRC debe considerarse como faetor de
::.
de curvatura de Ia córnea. Otro método posible de riesgo para el desarrollo de Ia miopía. Podría imaginarse
Fig. 2-11. T res ajas esquemáticos, todos con una LNRC de 3; 10 esperable es que Ias tres se vuelvan emétropes. (Reproducida con auto-
rización de T. Grosvenor and R. Scott. Role of the Axial LenghtlCorneal Radius Ratio in Determining the Refractive State of
The Eye. Optam. Vis. Science, VaI. 71, 1994.)

que los ojos de los ninos ingleses han empezado ya a de un grupo de ninos de edades entre los 8 y 12 anos,
elongarse pero que Ia elongación es compensada por todos los cuales eran emétropes cuando empezó el es-
una disminución de Ia potencia deI cristalino, mante- tudio, se observó que los ojos que posteriormente se
niéndose así Ia emetropía. Podría esperarse que algunos habían vuelto miopes en un período de 3 anos habían
de estos ojos emétropes experimentaran ocasionalmen- mostrado relaciones LNRC de 3 o más en Ia evalua-
te una mayor elongación con o sin disminución deI ra- ción inicial, mientras que muy pocos de los ninos con
dio de curvatura de Ia córnea, desarrollando de esa for- LNRC inicialmente menores de 3 llegaron a ser mio-
ma Ia miopía. peso Goss y Jackson constataron que Ia relación LNRC
Goss y Jackson (1992) ofrecieron más pruebas de que era el único factor que difería de forma significativa en-
una relación LNRC elevada puede llegar a ser un factor tre el grupo que "desarrollaba miopía» y el grupo que
de riesgo para el desarrollo de Ia miopía. En un estudio "permanecía emétrope».
longitudinal de los componentes de Ia refracción ocular
Según Ia refracción ai nacer.. A tenor deI hecho
de que aproximadamente el 25 % de los bebés recién
nacidos son miopes aI nacer (Cook y Glasscock, 1951;
Goldschmidt, 1969) (si bien Ia mayoría son ya emétro-
pes en el momento de comenzar Ia escuela) y de que
aproximadamente el 25 % de adultos jóvenes son tam-
bién miopes, es apropiado plantearse Ia siguiente pre-
gunta: lLas personas que desarrollan miopía en edad
escolar o durante su juventud son Ias mismas que na-
u 3,0 cieron miopes?
c::
5c Gwiazda, Thorn, Bauer y Held (1993a) han sugerido
·0
que puede predecirse el defecto refractivo que un nino
N
eu
c:: 2,9
tendrá en edad escolar a partir del defecto refractivo
que presenta aI nacer. Realizaron gráficas que mostra-
ban el equivalente esférico medio de los defectos re-
fractivos de dos grupos de ninos entre los 6 meses y los
13 anos: aIos 6 meses de edad, los ninos de un grupo
tenían un equivalente esférico medio del defecto refrac-
6-7 8-9 10-11 12-13 14-15 16-17 18-19 tivo de 1,75 D, mientras que los deI otro grupo tenían
Edad (anos) un equivalente esférico medio deI defecto refractivo de
Comparación de valores de LNRC para ninas británi- -2 D. Como se muestra en Ia figura 2-13, el defecto re-
cos y melanesios entre 6 y 19 anos, en función de Ia fractivo medio de los ninos de ambos grupos tiende a
edad. Para cada grupo, el punto representa el valor me- converger en un pequeno grado de hipermetropía apro-
dia de Ia LNRC, y Ias barras 1 desviación estándar por
ximadamente aIos 2 anos; no obstante, aIos 13 anos el
encima o por debajo deI valor media. (Reproducida con
autorización de T. Grosvenor. High Axial LenghtlCor- equivalente esférico medio deI defecto refractivo era de
neal Radius Ratio as a Risk Factor for the Development 0,50 D para los ninos que eran hipermétropes aI nacer y
of Myopia. Optam. Vis. Science, VaI. 65, 1988.) de -1 D para los que habían nacido miopes. Los autores
20 Y 21 anos de edad. ia mayoría de los hipermétropes los datos de los 191 cuestionarios cumplimentados,
cambian poco durante este período; cada vez menos de los cuales 111 contenían datos completos para eda-
emétropes se convierten en miopes, y aquellos que ya des comprendidas entre los 20 y 40 anos. De estas 111
eran miopes tienden a nivelar su miopía. El cambio deI personas, 109 eran hombres, una era mujer y en un caso
astigmatismo que se produce en este período es relati- no se indicó el sexo.
vamente pequeno. Se tabu1ó Ia refracción para el meridiano más positi-
vo deI ojo derecho de cada una de Ias 111 personas a Ias
edades de 20, 25, 30, 35 Y 40 anos (Grosvenor, 1977b).
En Ia figura 2-16 se muestra Ia refracción media y Ia des-
viación estándar a cada edad. Durante estos 20 anos, e1
ia bibliografía sobre refracción ocular cuenta con po- valor medio de Ia refracción disminuyó desde -0,08
cos estudios sobre e1 cambio refractivo entre los 20 y hasta -0,18 D, y Ia desviación estándar aumentó desde
40 anos de edad. Morgan (1958) publicó un estudio so- 1,47 D aIos 20 anos hasta 1,92 D aIos 40 anos.
bre este grupo de edad. Se examinó un conjunto de per- ias curvas de distribución deI defecto refractivo para
sonas seleccionadas no visualmente aIos 13 anos y nue- Ias edades de 20 y 40 anos se muestran en Ia figura 2-17.
vamente aIos 33 anos. Entre estas personas se incluían ia comparación de estas dos curvas de distribución indi-
51 mujeres y 44 hombres, publicándose los datos de ca que, aunque durante este período de 20 anos tuvo lu-
cada grupo por separado. En Ia tab1a 2-2 se muestran 10s gar un cierto grado de "desemetropización», e1 porcenta-
datos de Ia media deI astigmatismo queratométrico, deI je de personas en el grupo de emétropes (O a 0,87 D)
astigmatismo refractivo y deI equivalente esférico de Ia disminuyó solamente desde el 53 % aIos 20 anos has-
refracción. ta e140 % aIos 40 anos.
Analizando Ia tabla, observamos que fueron muy po- Para analizar 10s datas en términos de cambios indivi-
cos los cambios en Ia refracción ocular media durante dua1es para cada persona, se representaron Ias datos en
este período de 20 anos. E1 equivalente esférico de Ia re- forma de un gráfico disperso, tal como se muestra en Ia
fracción de Ias mujeres cambió 0,22 D en el sentido de figura 2-18. ia refracción de cada persona aIos 20 anos
una menor hipermetropía o mayor miopía durante este de edad se representó a 10 largo deI eje de Ias abscisas y
período, en comparación con un cambio de solamente Ia refracción a Ias 40 anos de edad se representó en e1
0,04 D en Ia misma dirección para los hombres. ios eje de ordenadas (Grosvenor, 1977c). Si Ias estados re-
cambios en el astigmatismo medio fueron significativa- fractivos de todas Ias personas hubieran permanecido
mente pequenos. invariables durante todo este período de 20 anos, todos
En un esfuerzo por obtener un cuadro más complejo 10s puntos representados en Ia figura 2-18 tendrían que
de los cambios de refracción durante Ia edad adulta, se aparecer sobre Ia 1ínea de trazo discontinuo, 10 que re-
publicó un cuestionario en Ia revista Optometric Week!y presentaría una perfecta corre1ación entre Ia refracción
(Grosvenor, 1977 a), pidiéndose aIos lectores que in- a Ias edades de 20 y de 40 anos. Se determinó que e1 co-
dicaran su propia corrección refractiva a intervalos de
5 anos entre Ias edades de 15 y 45 anos. Se analizaron
+2 -
<:
'0
'u
u +1 -
~
!ó!
Mujeres QJ o -
'O

Astigmatismo queratométrico 0,69 SR" 0,91 SR o



QJ
Astigmatismo refractivo 0,14 SR 0,26 SR E -1 -
Esfera equivalente 0,09 D -0,13 D o
(ij
>
-2 -
Hombres
Astigmatismo queratométrico 0,41 SR 0,58 SR 20 25 30 35 40
Astigmatismo refractivo 0,08 SR 0,03 SR Edad
Esfera equivalente 0,39 D 0,35 D
Fig.2-16. Valor medio de Ia refracción y desviación estándar en
'SR, según Ia regia. edades comprendidas entre 20 y 40 anos. (Reproduci-
Adaptada de M.W. Morgan. Changes in Refraction over a Period ofTwenty da con autorización de T. Grosvenor. A longitudinal
Years in a Nonvisually Selected Sample. Amer. j. Optam., Vol. 35, 1958. Study, Part 1. Optam. Week/y, VoI. 68, 1977.)
~':'=:ente de correlación para los datos de Ias personas nua) y Ia línea de regresión real (línea de trazo continuo)
_"- e 0,955, y Ia línea de regresión (línea de trazo con- puede describirse como sigue:
=.-..: ) tenía una pendiente de 1,22 y un intercepto y de
- __)3. ia relación entre Ia línea de regresión necesaria 1. En Ia región emetrópica deI gráfico, Ia pequena can-
-;:-a. una perfecta correlación (línea de trazo disconti- tidad de dispersión, conjuntamente con el hecho de
que el origen de Ia línea de regresión se encuentra
en -0,03, indica que una persona que era emétro-
pe aIos 20 anos de edad podría mantenerse emé-
trope o próxima a este estado refractivo a Ia edad
de 40 anos.
2. En Ia región miópica deI gráfico, el hecho de que Ia
línea de regresión se aleje de Ia línea de trazo dis-
continuo en dirección hacia el aumento de Ia mio-
pía indica que, cuanto más miope sea una persona
aIos 20 anos de edad, mayor será el aumento de Ia
miopía que podría producirse aIos 40 anos.
-8 -7 -6 -5 -4 -3 -2 -1 o +1 +2 +3 +4 +5 3. En Ia región hipermetrópica deI gráfico, el hecho de
Refracción
que Ia línea de regresión se aleje de Ia línea de tra-
.:;_2-17. Curvas de distribución deI defecto refractivo para eda- zo discontinuo en Ia dirección deI aumento de Ia hi-
des comprendidas entre 20 y 40 anos. (Reproducida permetropía indica que, cuanto más hipermétrope
con autorización de T. Grosvenor. A Longitudinal
sea una persona aIos 20 anos, mayor será el au-
Study, Part 1. Optam. Weekly, Vol. 68, 1977.)
mento de Ia hipermetropía aIos 40 anos.

lCómo se pueden explicar Ias observaciones de que


los miopes tienden a sedo más y de que los hipermé-
tropes tienden a hacerse aún más hipermétropes? Una
posible explicación puede ser que el aumento de Ia mio-
pía se debe a una elongación continua del segmento
posterior deI ojo miope ya elongado, y que el aumento
-5
de Ia hipermetropía probablemente se deba a una ma-
-4
yor relajación de Ia acomodación en un ojo ya hiper-
-3 métrope, lei que permitiría que Ia hipermetropía latente
-2 llegue a manifestarse. También es posible que, debido a
~ que Ias personas incluidas en el estudio no son repre-
-1
sentativas de Ia población total, Ias tendencias mostra-
- o das en los datos no sean necesariamente típicas de Ias
- -1 que podrían encontrarse en una población no seleccio-
- -2 nada o incluso en una población típicamente clínica.
- -3
-
-4

-5

-6

-7 De ordinario se considera que el inicio de Ia presbicia


tiene lugar cuando Ia amplitud de Ia acomodación ha
disminuido a 5 D o menos. De acuerdo con Ia tabla de
-7 -6 -5 -4 -3 -2 -1 O +1 +2 +3 +4
Refraccióna Ias 20 anos amplitud de Ia acomodación según Ia edad determinada
por Donders (tabla 2-3), este nivel se alcanza a Ia edad
~. 2-18. Representación dispersa de los datos refractivos a eda-
des comprendidas entre 20 y 40 anos. (Reproducida de 40 anos, momento a partir deI cualla amplitud con-
con autorización de T. Grosvenor. A Longitudinal tinúa disminuyendo hasta los 75 anos, en que llega a
Study, Part 4. Optam. Weekly, Vol. 68, 1977.) cero. Sin embargo, Ong, Hamaski y Marg (1956) de-
Tabla 2-3. Tabla de Donders que muestra la amplitud
de la acomodaci6n segtin la edad

mostraron que la amplitud de la acomodacion Hega a rarse sujetos no seleccionados, Hirsch sefialo que eran
cero a la edad de 54 afios y que 10 que parece ser aco- mas 0 menos representativos de la poblacion general,
modacion despues de esta edad se debe a la profundi- ya que a la edad de 45 afios muchas personas tienen ne-
dad de foco del ojo. Los datos que comparan las adicio- cesidad de alguna ayuda para la vision de lejos 0 de cer-
nes para la vision de cerca de maories y europeos en ca. De las 820 personas, 460 eran mujeres y 320 hom-
Nueva Zelanda (Grosvenor, 1970) muestran que la adi- bres.
cion media es de 0,75 D hacia los 40-43 afios, aumen- Hirsch encontro que el estado refractivo medio au-
tando hasta 2 D entre los 56 y 59 afios, y hasta 2,5 D a mentaba desde 0,18 D a edades comprendidas entre los
edades comprendidas entre 68 y 71 afios (figura 2-19). 45 y 49 afios hasta 1,02 D a partir de los 75 afios; la dis-
persion en el estado refractivo aumentaba marcada-
mente con la edad. Como se muestra en la tabla 2-4, la
hipermetropia de 1,13 Domas aumento del 16 % a
edades entre 45 y 49 afios al 48 % a edades entre 70 y
Los datos de la refraccion de 820 pacientes mayores 74 afios; la miopia de -1,13 Domas se mantuvo rela-
de 45 afios de edad fueron publicados por Hirsch tivamente constante en un 7 % entre los 45 y 64 afios,
(1958). Aunque estos pacientes fueron examinados en pero aumento hasta el 15 % a partir de los 75 afios. El
una clinica optometrica privada y no pueden conside- aumento de la frecuencia de la miopia en las personas
de mayor de edad era debido a los cambios en el nu-
cleo del cristalino que afectaban aproximadamente al
10 % de este grupo. Hirsch advirtio que, en vista del
2,50 aumento de la frecuencia tanto de la hipermetropia
VI
como de la miopia mas aHa de la edad en la que se pre-
Q)
c 2,00 cis a una adicion de 2 0 2,25 D, los profesionales no de-
0
'u berian decir a estas personas que «este es el ultimo
~~ 1,50
'"Q)+-'
:::J
Da3
- Maories cambio de lentes que tendremos que hacer para su
.Q ~
D ~ 1,00
- Europeos presbicia» .
EO.
Q) '"

:s
m 0,50
>
LExisten mecanismos para la emetropizacion
en el ojo del adulto?
40- 44- 48- 52- 56- 60- 64- 68- 72- 76- 800
43 47 51 55 59 63 67 71 75 79 mas
Refracci6n
Aunque para el ojo en desarrollo se han descrito di-
versos mecanismos de emetropizacion, se ha prestado
Fig. 2-19. Valor medio de la adicion para vision de cerca en rela-
escasa atencion a la posibilidad de que puedan existir
cion con la edad. (Reproducida con autorizacion de T.
Grosvenor. Refraction Error Distribution in New Zea- mecanismos de emetropizacion en el ojo del adulto. Si
land's Polynesian and European Children. Amer.}. Op- ignoramos los ojos que desarrollan miopia (bien duran-
tom. Vol. 47, pp. 355-361, 1970.) te la nifiez bien durante los ultimos afios de la vida), po-
::emos concluir que una gran proporcion de ojos cam- Tabla 2-5. Valores medias de la refracci6n ocular y componentes
:::'an relativamente poco en refraccion esferica a 10 largo refractivos de personas con una refracci6n ocular entre
::::etoda la edad adulta. Como ya se ha indica do, Hirsch o y2D
~958) observo que, a partir de los 55 afios, muchos ojos Grupa Sujetas
::enden a permanecer con el mismo estado refractivo 0 de Edad ~ P P" Po La
edad media
::::esarrollar un aumento de la hipermetropia. Por 10 tan- H M (D) P, (mm) (D) (D) (mm)

es razonable proponer la existencia de uno 0 mas


0·9 7 24 25 1,1 43,3 3,4 21,4 60,7 23,4
:::lecanismos de emetropizacion en el ojo del adulto. 10-19 13 24 24 0,6 42,8 3,6 19,8 58,8 24,1
Se sabe ya desde la epoca de Donders (1864) que el 20-29 23 27 9 0,6 _ 42,8 3,5 19,9 58,9 24,1
=istalino se hace mas grueso a medida que se envejece, 30·39 36 15 20 0,7 43,6 3,2 20,2 59,8 23,8
:::ebido a la constante adicion de nuevas fibras cristali- 40-49 44 32 33 0,9 43,4 3,3 21,0 59,9 23,6
::3S, 10 que da lugar a una reduccion gradual de la pro- 2: 50 55 13 15 0,9 43,3 3,2 20,9 60,8 23,5
:::ndidad de la camara anterior. Esto, en ausencia de
Adaptada de Sarsby et a1. Emmetropia and Its Aberrations; y de Sorsby et a1.
:)W'os cambios, tiene el efecto de acercar entre si dos Refraction: Its Components in Twins. Londres: Her Majesty's Stationery Office, 1957
~entes convergentes y, por 10 tanto, tiende a variar la re- y 1962, respectivamente.
=acdon del ojo en el sentido de aumentar la miopfa. In-
::orrectamente, Donders supuso que el cristalino se ha-
::a mas plano con la edad de forma gradual. Si esto fractiva de la comea y del cristalino). Debido a que
::--.:eracierto, el aplanamiento del cristalino modificaria Sorsby et al. (1957; 1962) ca!cularon la longitud axial a
~ refraccion del ojo aumentando la hipermetropia y partir de ecuaciones que suponen invariables los indices
-ompensando de esta forma la disminucion de la pro- de refraccion del medio ocular, es posible que la apa-
::-..:ndidad de la camara anterior. Sin embargo, Brown rente disminucion de la longitud axial puede ser debida
_974) sefialo que la curvatura del cristalino realmente a los cambios en los indices de refraccion que los me-
~ cierra durante el proceso de engrosamiento que se dios oculares experimentan con la edad. Sin embargo,
. mduce con la edad. Debido a que tanto la disminucion los estudios transversales de la poblacion que hacen uso
_e la pmfundidad de la camara anterior como el hecho de mediciones con ultrasonidos (Francois y Goes, 1971;
2e que las curvaturas del cristalino se cierren son ambos leighton y Tomlinson, 1972) tambien han demostrado
:actores que conducen ala miopia, debemos pensar que una disminucion aparente de la longitud axial del oio
existe un mecanismo compensatorio que tiende a esta- con la edad. Por 10 que respecta a posibles cambios de
- ilizar la refraccion del ojo cuando aumenta la edad de los indices de refraccion, leighton y Tomlinson apunta-
::.a persona. Un po sible y obvio mecanismo de este tipo ron que aunque las mediciones mediante ultrasonidos
es el acortamiento del ojo. estaban basadas en supuestos indices de refraccion, el
Grosvenor (1985; 1987b) analiza de forma transversal metodo tiene la ventaja de que los errores debidos a po-
.os datos de los componentes refractivos publicados en sibles cambios de indices tienden a anularse entre S1.
'os monograficos distintos por Sorsby et al. (1957; Esto es, un aumento en la densidad del cristalino au-
962), utilizando solamente aquellas personas cuya re- menta la velocidad del ultrasonido e infravalora por tan-
:raccion esferica se encontraba entre cero y 2 D. Obser- to el espesor del cristalino y la longitud axial; una dis-
- a que la longitud axial del ojo parece disminuir a me- minucion del indice de refraccion del vitreo debido a la
ida que aumenta la edad. Como se muestra en la ta- licuefaccion disminuye la velocidad del ultrasonido y
bla 2-5 y enla figura 2-20, la longitud axial media de las sobrestima asi la profundidad del vitreo y la longitud
- personas incluidas en el estudio de Sorsby et al. au- axial del oio.
:nenta desde los 23,4 mm a edades comprendidas entre Mas recientemente, Ooi y Grosvenor (1995) han pu-
.os 4 y 9 afios hasta los 24,1 mm a edades de entre 20 y blicado un estudio en e1 que se comparan los compo-
29 afios, disminuyendo despues gradualmente hasta los nentes refractivos de 48 jovenes, de edades comprendi-
- 23,5 mm a partir de los 50 afios. Ademas, la potencia das entre los 19 y los 31 afios, con los de 48 personas
refractiva media del ojo disminuye desde 60,7 D a los entre los 49 y 61 afios de edad, configurados para el de-
4-9 afios hasta 58,9 D a los 20-29 afios, aumentando des- fecto refractivo. El defecto refractivo fue me dido me-
- pues hasta 60,8 D a partir de los 50 afios. Estos datos su- diante un autorrefractometro de Humphrey, modelo
- gieren la presencia de un mecanismo de emetropizacion 530; la potencia refractiva de la cornea se midio con un
- en el ojo del adulto (la longitud del oio disminuye para autoqueratometro de Humphrey, modelo 410, y las dis-
~ compensar el aumento de la potencia refractiva del oio, tancias axiales fueron medidas con un biometro A-Scan
= debiendose este ultimo a un aumento de la potencia re- de T eknar Ophthasconic. Utilizando una tecnica de gra-
24,0
23,5
l -------- ----
-------------------

Profundidad de la camara anterior (mm)


3,5 ~
3,0
l _

~~===----_
:::t__ ~__-__::.._::.._:..._:...~._~
43,5 r............... ---
42,S L ....~_ -_- -_-=-- _

220~
21,0
20,0

10,0 f "':=--' --------


0,0
o 10 20 30 40
Edad (aAos)
Fig. 2-20. Valores medios de la refracci6n ocular y componentes refractivos, por grupos de 10 anos de edad, para sujetos cuya refracci6n
esferica equivalente era de entre 0 y 2 D. (Basada en calculos de los datos proporcionados por A. Sorsby et al. Emmetropia and
Its Aberrations. Londres: Her Majesty's Stationery Office, 1957; y por A. Sorsby e't al. Refractions: Its Components in Twins. Lon-
dres: Her Majesty's Stationery Office, 1962.)

bacion mediante video, se fotografiaron y archivaron matematico. La razon es 10 que ha dado en llamarse la
las imagenes de Purkinje primera, tercera y cuarta, y los paradoja del cristalino: puesto que se sabe que los radios
radios de curvatura y la potencia refractiva del cristali- de curvatura del cristalino van cerrandose con la edad,
no se calcularon a partir de un supuesto indice de re- 2por que el estado refractivo del ojo no cambia en di-
fraccion de 1,442 para ambos grupos de personas. reccion miopica en los ultimos arros de vida? Pierscio-
Ooi y Grosvenor observaron que el radio corneal me- nek (1990; 1993) ha demostrado que el perfil del indice
dio y la longitud axial media no eran significativamen- de refraccion del cristalino tiene un valor casi constante
te diferentes para los adultos jovenes y mayores, pero en la region nuclear, con un rapido descenso en la cor-
en estos ultimos la profundidad media de la camara an- teza. La disminuciondel indice de refraccion de la corte-
terior era significativamente menor, el espesor medio za del cristalino del presbita comparada con la del cris-
del cristalino y la potencia media de la cornea eran sig- talino joven, como propuso Pierscionek, se muestra en
nificativamente mayores, y la profundidad media del la figura 2-22. Como establece Pierscionek: "Como la
vitreo era significativamente menor que en los adultos parte mas cerrada se halla en la corteza, esta es la region
jovenes. Un resultado interesante, mostrado en la figu- sobre la cual tiene lugar la mayor cantidad de refrac-
ra 2-21, fue que el espesor medio aumentado del crista- cion. Se propuso que, con la edad, existe un cambio en
lino para losadultos de mas edad se produjo a expensas la porcion cortical del indice gradiente refractivo, que
de ambas profundidades medias de la camara anterior compensa el aumento de curvatura y, de esta forma,
y del vitreo. A partir de estos resultados, estos autores mantiene el estado refractivo de lejos del ojo» (1993,
sugirieron que un cambio en el indice gradiente del cris- pag. 87). Como resultado de un analisis matematico,
talino produce un aumento efectivo en el indice de re- Smith, Atchison y Pierscionek (1992) concluyeron que,
fraccion del cristalino y actua como un mecanismo de con un ligero cambio en el perfil del indice refractivo del
emetropizacion en el ojo adulto. cristalino, es posible que el ojo de las personas mayores
En los ultimos arros, el indice-gradiente del cristalino mantenga un estado refractivo constante a pesar del au-
ha sido objeto de mucha experimentacion y analisis mento de la curvatura del cristalino.
':-0.2-21. Dibujos esquematicos en que se comparan las dimensiones medias de los ojos de adultos j6venes y adultos maduros. Todas las
dimensiones y curvas estan dibujadas a escala. (Reproducida con autorizaci6n de C.S. Ooi y T. Grosvenor. Mechanisms of Em-
metropization in the Aging Eye. OptOI11. Vis. Science, Vol. 72, 1995.)

Otra posible causa de la falta de una disminucion


aparente de la longitud axial con la edad en el estudio
de Ooi y Grosvenor (1995) puede haber sido un error en
el muestreo, puesto que muchos de los adultos jovenes
de su muestra eran miopes de «OiO corto», con corneas
relativamente cerradas y longitudes axiales relativa-
mente cortas. Concluyeron que la pregunta sobre los
mecanismos de emetropizacion en el ojo adulto puede
contestarse solamente mediante los resultados de un es-
tudio longitudinal.

1,360
o
CAMBIOS EN EL ASTIGMATISMO
CON LA EDAD
Representaci6n esquematica de los cambios con la
edad en el gradiente del fndice refractivo segun Piers-
Desde hace mucho tiempo, los profesionales de la vi-
cionek. La regi6n sombreada identifica el nuc!eo, y el
gradiente del fndice de refracci6n es una funci6n de la
sion saben que el astigmatismo cambia relativamente
distancia desde el centro del cristalino. (Reproducida poco durante la mayor parte de la vida, tendiendo a
con autorizaci6n de B.K. Pierscionek. What We Know evolucionar hacia astigmatismo contra la regIa en los ul-
and Understand about Presbyopia. C1i. Experil11. OptOI11., timos anos. Hasta hace poco se disponia de informa-
Vol. 76, 1983.) cion ill<isbien superficial en relacion con los cambios
del astigmatismo durante los primeros arros de vida. Sin cias similares alas encontradas por Mohindra y Held
embargo, a raiz de varios estudios publicados durante la (1981). Gwiazda et al. (1984) utilizaron el procedi-
pasada decada, en la actualidad tenemos una idea mas miento de la retinoscopia de cerca para determinar la
clara sobre el tema. refraccion ocular de 1.000 nirros cuyas edades varia-
ban desde la primera infancia hasta los 6 arros, obser-
vando que la frecuencia del astigmatismo de 1 D 0
mas es aproximadamente del 50 % durante el primer
arro de vida, disminuyendo hasta aproximadamente el
Resulta desafortunado que muchos de los estudios 20 % a los 5 arros. Antes de los 4 arros y medio de
acerca de la refraccion ocular realizados en el momen- edad, la mayorfa del astigmatismo era contra la regIa,
to del nacimiento y en la primera infancia no hayan volviendose segun la regIa en los nirros mayores de esa
aportado informacion en relacion con el astigmatismo. edad. Dobson et al. (1984) publicaron los datos obteni-
Sin embargo, la informacion de que disponemos ac- dos con la retinoscopia cicloplejica en 281 nirros cuyas
tualmente en relacion con el astigmatismo durante los edades oscilaban desde el nacimiento hasta los 9 arros
primeros arros de vida indica que tanto la frecuencia y medio, mostrando todos ellos 1 Domas de astig-
como el grado de astigmatismo son relativamente ele- matismo. Observaron asimismo que la gran mayoria
vados en el momenta del nacimiento, disminuyendo de los nirros examinados durante el primer arro de vida
de forma considerable durante la edad preescolar. Esto tenian astigmatismo contra la regIa, mientras que la
era esperable en vista de que la ametropia esferica tie- mayoria de nirros entre los 6 y 9 arros presentaban as-
ne una amplia distribucion en el nacimiento, que se tigmatismo segun la regIa. Dobson et al. concluyeron
estrecha considerablemente durante los primeros arros que el astigmatismo contra la regIa pre domina antes
de vida, cuando se estabiliza el proceso de emetropi- de los 3 arros y medio de edad, mientras que el astig-
zacion. matismo segun la regIa predomina despues de dicha
edad. Howlan y Sayles (1984) realizaron examenes de
refraccion ocular a 312 nirros, des de bebes hasta pre-
Edad preescolar escolares, empleando el metodo de fotorrefraccion,
</ con el que se fotograffa la imagen sobre la retina de un

I Uno de los primeros estudios acerca de la frecuencia manantialluminoso de fibra optica. Con dichas foto-
del astigmatismo en nirros preescolares que se ha publi- graffas se realizaron las mediciones para determinar la
cado en los ultimos arros es el de Woodruff (1971). Este refraccion del ojo. Obtuvieron una frecuencia del as-
autor serralo que, en 631 nirros de edades entre 1 y tigmatismo de 1 Domas aproximadamente del 60 %
6 arros, la frecuencia del astigmatismo (0,75 Domas) durante el primer arro de vida, reduciendose casi a cero
fue solamente de13 % a los 2 arros, aumentando al10 % a los 5-6 arros.
a los 6 arros. La mayoria de este astigmatismo era segun Los cambios del astigmatismo en edad preescolar
la regIa. Curiosamente, ningun estudio posterior ha pueden resumirse citando una afirmacion de Howland
mostrado tendencias similares alas publicadas por W00- y Sayles, que comparan sus resultados con los de los es-
druff. Mohindra y Held (1981)}en el estudio al que nos tudios de Gwiazda et al. (1984), y de Dobson et al.
hemos referido anteriormente, en el que se utilizo la re- (1984):
tinoscopia de cerca para determinar el estado refractivo
de 400 bebes nacidos a termino y nirros entre el naci- Las principales similitudes de Ios tres estudios son:
miento y los 5 arros de edad} observaron que la fre- a) todos ellos informan de una preponderancia del astig-
cuencia del astigmatismo (1 Domas) era del 30 % en matismo contra Ia regIa sobre el astigmatismo segun Ia re-
nirros de edades comprendidas entre el nacimiento y las gIa en Ios primeros 4 arros y medio de vida, y b) Ios tres
estudios ... muestran una disminuci6n uniforme del grado
4 primeras semanas de vida, alcanzando un pico de apro-
de astigmatismo con Ia edad durante Ios 3-5 arros de vida
ximadamente e160 % entre las 17 y 32 semanas de vida,
(1984, pag. 98).
y reduciendose hasta aproximadamente el 40 % entre
las 129 y 256 semanas (de 2 arros y 6 meses a 5 arros
de edad). Finalmente, los resultados de los tres estudios concuer-
Estudios realizados por Gwiazda et al. (1984), Dob- dan con la aseveracion de Gwiazda et al., que concluian:
son et al. (1984), y Howland y Sayles (1984), todos pu- «Si un nirro no tiene astigmatismo durante la infancia es
blicados en el mismo numero de la revista Investigative improbable que 10 adquiera despues, al menos hasta los
Ophthalmology and Visual Science, mostraron tenden- 4-6 arros» (1984, pag. 91).
llegar a un ,intento de correccion cilfndrica, ya que el as- ocasionalmente, llega a convertirse en astigmatismo
tigmatismo que mas cambia con la edad es el corneal, contra la regIa.
no el interno. Los cambios del astigmatismo con la edad son con-
Baldwin y Mills (1981) publicaron un estudio longi- sistentes con las hipotesis siguientes:
tudinal retrospectivo de pacientes entre 30 y 70 anos de
edad que fueron examinados en la c1fnica optometri- 1. El astigmatismo contra la regIa que tiende a presen-
ca de Ryer y Hotaling de Nueva York. Seleccionaron fi- tarse en el nacimiento puede deberse a que la curva-
chas de pacientes que habfan sido examinados durante tura corneal se cierra en el ojo todavfa en desarrollo.
40 anos, que tenfan edades entre 30 y 70 anos, y cuyos 2. El pequeno grado de astigmatismo segun la regIa
oios mostraban meridianos principales a ejes vertical y que se desarrolla durante los anos preescolares es
horizontal con una tolerancia menor de 100. Para los resultado de la placa tarsal superior, mas bien rfgi-
34 ojos que cumplfan con dichos criterios, Baldwin y da, que ejerce constantemente presion sobre el me-
Mills tabularon los datos del primer examen a partir de ridiano horizontal de la cornea, especialmente en
los 40 anos de edad (edad promedio de 51 anos y 2 me- caso de baja rigidez ocular. Con el tiempo, esto da
ses) y los del ultimo examen (a una edad promedio de lugar a astigmatismo segun la regIa.
65 anos y 3 meses) . Tanto el valor medio del astigma- 3. Cuando la placa tarsal del parpado superior co-
tismo corneal como el refractivo cambiaron en la direc- mienza a perder su rigidez hacia la mitad de la vida
cion del astigmatismo contra la regIa durante el perfodo yen anos posteriores, se hace posible que el meri-
de 15 anos estudiado: el valor medio del astigmatismo diano horizontal se cierre, de forma que la cornea
corneal fue de 0,38 D segun la regIa en el primer exa- adopta de nuevo una forma aproximadamente es-
men y de 0,07 D segun la regIa en el ultimo; el valor me- ferica (como se muestra en los datos de Baldwin y
dio del astigmatismo refractivo fue de 0,24 D contra la Mills [1981]), dando lugar a un pequeno grado de
regIa en el primer examen y de 0,76 D contra la regIa en astigmatismo refractivo contra la regIa.
el ultimo. Estos resultados difieren de los obtenidos por
Anstice, en los que el cambio del astigmatismo corneal
no tenfa totalmente en cuenta el cambio en el astigmatis- FACTORES HEREDITARIOS
mo refractivo. Baldwin y Mills observan que, dado que Y AMBIENTALES
aparece un cambio de 0,52 D en el astigmatismo refrac-
tivo pero solo de 0,31 D en el astigmatismo corneal, Si un nino va a tener una hipermetropfa 0 astigmatis-

debe existir un cambio en el astigmatismo no corneal me- mo c1fnicamente significativos, esta condicion estara
dio de 0,21 D. Sin embargo, conc1uye con la siguiente presente en el nacimiento 0 a una edad muy temprana.
afirmacion: Por 10 tanto, normalmente se sup one que estas condi-
ciones refractivas son hereditarias. Por otro lado, de-
Este estudio sostiene la hip6tesis de que el cierre de la bido a que la miopfa raras veces se observa durante el
curvatura del meridiano horizontal de la c6mea, que em- nacimiento y en muchos casos se detecta solamente
pieza hacia la mitad de la vida y continua a 10 largo del despues de varios anos de escolaridad, muchos investi-
resto, es la causa de la mayor parte, sino de la totalidad, gadores conc1uyen que la miopfa se produce como re-
de los cambios en el astigmatismo refractivo tipicos de
sultado de influencias ambientales mas que heredita-
este periodo de edad. (Baldwin y Mills, 1981, pag. 210).
rias. No obstante, aquellos que creen que la miopfa se
produce por factores hereditarios senalan que, para que
sea hereditaria, no necesariamente tiene que aparecer
Causas que modifican el astigmatismo en el nacimiento. De esta forma, la refraccion ocular no
con la edad ha escapado a la controversia de «naturaleza frente a
educacion».
De acuerdo con los datos relacionados con el astig-
matismo en varias Eases de la vida, podemos conc1uir
que un nino nace con astigmatismo contra la regIa; este
disminuye marcadamente durante los anos preescola-
res, produciendose luego un pequeno astigmatismo se- La evaluacion del papel de la herencia en la determi-
gun la regIa en la edad escolar. Este astigmatismo cam- nacion del estado refractivo ocular es complicada, debi-
bia poco durante la juventud, comienza a disminuir do a que el estado refractivo es el resultado de un nu-
gradualmente entre los 30 y 40 anos, se reduce a cero y, mero de componentes que se interrelacionan entre sf. La
herencia de los componentes refractivos fue discutida
por Francois (1961), quien senalo que 10 ffi<3.S probable es
que varios factores geneticos contribuyan a la refraccion Wixson (1958), Francois (1961) y otros autores pro-
del ojo, siendo probablemente cada uno de ellos heredi- baron que el astigmatismo esta determinado genetica-
tario con independencia de los otros y posiblemente mente. En el estudio de gemelos antes indicado, Wix-
transmitido segun diferentes patrones de herencia. son establecio que los coeficientes de correIa cion para el
La herencia de las anoma11as de la refraccion ocular se astigmatismo refractivo eran de 0,93 para los gemelos
aborda con cierta extension e~ dos importantes libros monocigoticos, 0,07 para los gemelos dicigoticos y 0,47
de texto: Ophtahlmic Genetics (Sorsby, 1970) y Heredity in para el grupo de control de no gemelos del mismo sexo.
Ophthalmology (Francois, 1961). Sorsby concluye que to- Francois establece que «los unicos datos seguros acerca
dos los estados refractivos del ojo, incluyendo la mio- de la herencia de la refraccion conciernen a la refraccion
pia, estan determinados geneticamente, y que la miopia corneal y al astigmatismo» (1961, pag. 191). Cita varios
y la hipermetropia pueden presentarse en forma domi- estudios y concluye que el astigmatismo es generalmen-
nante 0 recesiva. Francois cita el trabajo de Steiger, que te transmitido como un rasgo autosomico dominante;
indica que los grados reducidos de miopia e hiperme- se sabe que se transmite a traves de varias generaciones.
tropia pueden considerarse variaciones dentro de los 11- Senala ademas que el astigmatismo hipermetropico con-
mites normales de la distribucion binomial; este autor cordante en gemelos monocigoticos ha sido observado
se refiere asimismo a otros estudios que senalan que es- por muchos autores, pero que se han encontrado dis-
tas condiciones son hereditarias con caracteristicas do- crepancias en los gemelos dicigoticos.
minantes, mientras que la miopia y la hipermetropia
igual 0 mayor de 6 D son hereditarias con caracteristi-
cas dominantes 0 recesivas.
Wixson (1958) comparo los datos refractivos obteni-
dos de 10 pares de gemelos monocigoticos, 6 pares de Aunque el papel de los factores ambientales en la
gemelos dicigoticos y 10 pares de hermanos no geme- miopia ha sido objeto de viva discusion durante mu-
los del mismo sexo. Observo que los coeficientes de chos anos, apenas ningun autor ha sugerido que los fac-
correIa cion para el equivalente esferico de la refraccion tores ambientales sean importantes en la hipermetro-
eran de 0,99 para los gemelos monocigoticos, 0,67 para pia. La gran mayoria de los ninos son hipermetropes al
los gemelos dicigoticos y 0,54 para los hermanos no ge- entrar en la escuela y en pocos de ellos la hipermetropia
melos. Concluyo que, cuanto mayores sean los lazos progresa de forma significativa durante los anos esco-
geneticos entre individuos, mayor sera la similitud en- lares.
tre el tipo y el rango del defecto refractivo. Sorsby, She- Uno de los primeros en proponer la teoria de que
ridan y Leary (1962) tam bien estudiaron el estado re- la miopia puede ser causada por el uso excesivo de la
fractivo de gemelos, empleando como muestra 78 pares vista durante tareas de cerca fue Ware (Young, 1977).
de gemelos monocigoticos, 40 pares de gemelos dicigo- Ware observo en 1813 que existia un numero conside-
ticos del mismo sexo, y un grupo de control formado rable de casos de miopia entre los oficiales de la Guar-
por 48 pares de sujetos del mismo sexo y sin parentes- dia Real en Inglaterra, la mayoria de los cuales sabian
co. Observaron que, para la refraccion ocular en el me- leer, pero que, en cambio, este proceso era poco fre-
ridiano vertical, el 70,5 % de los gemelos monocigoti- cuente entre los hombres enrolados, la mayoria de los
g cos concordaban estrechamente en refraccion (con cuales eran analfabetos. Donders (1864, reimpreso en
Gi
~ diferencias que no excedian de 0,5 D), mientras que el 1972) propuso que la miopia se produce como resulta-
:J
iil 30 % de los gemelos dicigoticos y el 29 % de los pares do de la tension prolongada de los ojos durante el tra-
c
.~ de sujetos pertenecientes al grupo de control concorda- bajo de cerca y que se debe a una elongacion de los ejes
j ban de forma muy similar. visuales.
~ Hirsch y Ditmars (1969) analizaron los datos relacio- En 1866, Cohn publico un estudio llevado a cabo con
.~ nados con los estados refractivos oculares del padre y la 10.000 ninos que asistian a distintas escuelas de Breslau,
§ madre de los 258 ninos miopes. Observaron que, cuan- Alemania (Weymouth y Hirsch, 1991). Observo que la
~ to mayor era la miopia que padecfan los ninos, mayor miopia aumentaba tanto en frecuencia como en grado a
~ era el porcentaje de padres que tambien eran miopes; medida que los ninos cursaban grados superiores de la
gCJJ establecieron un coeficiente de correlacion, por orden escuela. Observando que las condiciones de higiene vi-
~ de jerarquia para el grado de miopia y porcentaje de pa- sual eran pobres en las escuelas europeas de esa epoca,
:;;:
@ dres miopes, de 0,89 (p = 0,01). Cohn formula la teoria de la miopia por «uso-abuso» y
empezQ una cruzada para mejorar la higiene visual en minos de factores hereditarios y ambientales se aborda
las escuelas, 10 que incluia mejor iluminacion, textos im- con mayor detalle en el capftulo 3.)
pres os de mejor calidad y pupitres bien diseiiados.
Muchos investigadores han estudiado la relacion en-
tre el defecto refractivo y la ocupacion. T scherning
(1882; citado por Rosenfield, 1994) comparo frecuencias
de miopia entre los reclutas daneses teniendo en cuen- Sin duda, los archivos de muchas consultas de opto-
ta sus ocupaciones y encontro frecuencias del 32,4 % metristas contienen datos que, si fueran tabulados y
en estudiantes universitarios, del 11,7 % en artesanos y analizados, demostrarfan la naturaleza hereditaria del
del 2,45 % para trabajadores del campo, obreros no es- astigmatismo. Las publicaciones de Wixson (1958) y
pecializados y marineros. Casi un siglo mas tarde, Francois (1961), a los que nos hemos referido anterior-
Goldschmidt (1968) repitio el estudio de T scherning y mente, proporcionan pruebas convincentes del papel de
encontro frecuencias de miopia impresionantemente si- la herencia en el astigmatismo. Sin embargo, gradual-
milares para los distintos grupos: 30,1 % para estudian- mente se van recopilando pruebas de la influencia am-
tes universitarios, 9,1 % para artesanos y 2,9 % para biental sobre el astigmatismo. Para comprender total-
obreros y marineros. mente la etiologfa del astigmatismo, debe considerarse
Young y sus colaboradores han publicado un cierto que este cambia de manera predecible con la edad, que
numero de investigaciones diseiiadas para demostrar la tanto las lentes de contacto rfgidas como las blandas
relacion entre el trabajo de cerca y la miopia. En uno de pueden originar cambios en el astigmatismo, y que
estos estudios, Young, Beattie, Newby y Swindal (1954) existen variaciones en el astigmatismo entre los distin-
constataron una frecuencia mucho mas alta de miopia tos grupos raciales.
entre los residentes de Pullman, Washington, donde La tendencia de las lentes de contacto, tanto rfgidas
una gran proporcion de residentes realizaban tareas como blandas, a producir cambios en el astigmatismo
academicas y de oficina, que entre los residentes del corneal esta bien documentada. Un caso tfpico en que
area circundante, la mayorfa de los cuales trabajaban en el astigmatismo es causado por el uso de lentes de con-
la agricultura. tacto rfgidas fue publicado por Janoff (1976), quien ob-
Young, Leary, Baldwin et al. (1969) investigaron el servo que durante un perfodo de 12 aiios de uso de len-
papel de la herencia y del medio ambiente en la refrac- tes de contacto el astigmatismo corneal de un paciente
cion ocular de 41 unidades familiares de esquimales en aumento en la direccion segun la regIa un valor de 2,5 D
Point Barrow, Alaska. Observaron que la refraccion me- en un ojo y de 3,25 D en el otro. Numerosos informes
dia era de 1,69 D para los 82 padres y de 0,33 D para los verbales proporcionados por profesionales que adaptan
115 niiios. T ambien observaron que las correlaciones lentes de contacto indican que pueden producirse 2 D 0
entre padres e hijos no eran significativamente diferen- mas de astigmatismo segun la regIa por el uso de estos
tes de cero, pero que las correlaciones entre los hijos de sistemas opticos en solo unos pocos aiios y que este as-
una misma pareja eran altas y significativas. Interpreta- tigmatismo suele ser irreversible.
ron estos resultados indicando que no existe un com- Hartstein y Becker (1970) informaron no solamente
ponente hereditario principal en el desarrollo de las re- sobre el desarrollo de astigmatismo segun la regIa sino
fracciones miopicas entre la descendencia, mientras que tambien sobre el desarrollo de queratocono cuando se
existe un fuerte componente ambiental que determina utilizan lentes de contacto. Estas investigaciones deter-
la existencia de correlaciones entre los hijos de una mis- minaron la rigidez ocular comparando las lecturas del
ma pareja. El componente ambiental propuesto era la tonometro de Schi6tz obtenidas con pesas de 5,5 y 10 g
escolaridad obligatoria, que da lugar a que la lectura sea para un grupo de usuarios de lentes de contacto rfgidas.
una actividad habitual entre los nllos. Observaron que los pacientes que desarrollaron astigma-
Los estudios acerca del desarrollo de la miopia en tismo corneal segun la regIa tenian una rigidez ocular
monos publicados por Young (1967 a) indican que el de- mas baja que aquellos que no desarrollaron astigmatis-
sarrollo de la miopia esta relacionado con las condicio- mo alguno; los pacientes que desarrollaron queratocono
nes bajo las cuales se crian los monos. Young observo mientras utilizaban las lentes de contacto tenian una ri-
que los monos de laboratorio eran considerablemente gidez ocular todavfa mas baja. En un estudio (Grosve-
mas miopes que los que vivfan al aire libre, y que los nor, 1975a) en el que 24 pacientes fueron adaptados con
monos mantenidos en cautiverio en jaulas desarrolla- lentes blandas torneadas, se detectaron tambien cam-
ban mas miopfa que los monos que vivfan en zonas va- bios en el grado de astigmatismo. Se observo que, en
lladas en el exterior. (El desarrollo de la miopfa en ter- dos de los pacientes, el astigmatismo corneal aumento
do superior, aumentando asf enormemente el aplana- esta forma, can la edad el nueleo se vuelve cada vez me-
miento del meridiano horizontal de la cornea. Las len- nos elastico, de modo que disminuye gradualmente la
tes de contacto blandas, especialmente las grandes, respuesta del cristalino a la tension liberada de la zonu-
gruesas y torneadas tambien podrian aumentar el efecto la al intentar ejercer la acomodacion. Par 10 tanto, es po-
de la presion de la placa tarsal del parpado superior so- sible que la disminucion de la acomodacion que tiene lu-
bre la cornea. gar can la edad sea totalmente debida a la disminucion
Por 10 que respecta a los grados elevados de astigma- de la elasticidad del cristalino (esto es, ala eselerosis).
tismo corneal observados en los indios de Saskatche- Sin embargo, se ha propuesto tambien que la presbi-
wan, es posible que pueda encontrarse ocasionalmente cia puede deberse a una perdida de potencia del muscu-
una conexion entre la mala nutricion y la baja rigidez 10 ciliar. Fincham (1937) considero esta posibilidad pero
ocular. Obviamente, es necesaria mucha mas informa- la rechazo basandose en que parece poco probable que
cion adicional para confirmar la propuesta de que el as- el musculo ciliar empiece a perder potencia a la edad,
tigmatismo segCmla regIa se produce como resultado de relativamente temprana, en que el punta proximo de la
la presion de la placa tarsal del parpado superior sabre acomodacion empieza a alejarse del ojo, Ademas, cito
el meridiana horizontal de la cornea. el caso de una persona de 40 aiios de edad cuya sus-
tancia del cristalino habfa sid a absorbida, dejando una
capsula cristalina vada. Cuando la persona intentaba
acomodar, Fincham observaba un gran cambia en la
forma de la capsula del cristalino, 10 que Ie convencio
Se sabe que los siguientes cambios tienen lugar en el de que el musculo ciliar era bastante activo en ausen-
cristalino durante la acomodacion: el polo anterior del cris- cia de la sustancia del cristalino que pudiera ofrecerle
talino se des plaza hacia delante y la superficie anterior resistencia.
se vuelve marcadamente mas convexaj el polo poste- Muchas investigaciones, especialmente las de Van
rior permanece fijo en posicion pero la superficie pos- Hoven (1959) y Morgan (1954), han aportado argumen-
terior del cristalino se hace ligeramente mas convexa, y tos a favor y en contra de la teoria de que la presbicia
el cristalino tiende a descender debido a la gravedad. puede deberse, al menos en parte, a una perdida de po-
Aunque los primeros investigadores tuvieron dificulta- tencia del musculo ciliar. Sin embargo, existen pocas
des para determinar si el musculo ciliar actua como un dudas de que la causa principal de la presbicia es la per-
dilatador a un musculo esffnter, Helmholtz (1924) con- dida gradual de la elasticidad del cristalino. La perdida
eluyo correctamente que el musculo ciliar actua como de potencia del musculo ciliar, si es que se produce en
un esffnter y que, en el estado desacomodado, las fibras alguna medida, ocurre probablemente como resultado
zonulares se hallan «estiradas», manteniendo el cristali- del endurecimiento del cristalino.
no en su forma mas plana, mientras que en el estado
acomodado la contraccion del musculo ciliar libera la
tension de las fibras zonulares y permite que el cristali- CONSIDERACIONES EPIDEMIOLOGICAS
no adopte una forma mas esferica. Como hem os des- ADICIONALES
crito antes, Fincham (1937) coneluyo que la capsula del
cristalino es relativamente delgada en los palos anterior Se ha constatado que el estado refractivo del ojo va-
y posterior y en el ecuador, pero alga mas gruesa en las ria can consideraciones epidemiologicas tales como la
zonas perifericas de las superficies anterior y posterior capacidad de lectura, las puntuaciones en pruebas de in-
(v. fig. 1-13), Propuso que, cuando el musculo ciliar se teligencia, el rendimiento escolar y los rasgos de la per-
contrae, «la zonula cede alga de su tension y la capsula sonalidad.
elastica, gracias a la libertad que se Ie da en ese momen-
ta, presiona sabre la sustancia blanda del cristalino y
la moldea en la forma acomodada, comprimiendola en
el ecuador y en aquellas regiones donde la capsula es
mas gruesa, y permitiendo que se abombe en las par- Se han realizado muchos estudios para determinar
tes mas delgadas» (pag. 70). que relacion puede existir entre el estado refractivo y la
Las fibras del cristalino continuan formandose a 10 lar- habilidad para la lectura. Muchos de los estudios han
go de toda la vida y, a 10 largo de este proceso (justa de- sida inadecuadamente diseiiados, mal controlados y no
bajo de la capsula de la lente), las fibras'mas antiguas se especifican los criterios para la miopfa, la hipermetropfa
comprimen, constituyendo el nueleo del cristalino. De y el astigmatismo. La interpretacion de los resultados
binocular simple, el miope no corregido no tiene difi- la prueba de inteligencia esta asociada con una varia-
cultad para aprender a usar la convergencia proximal a fin cion en la refraccion.
de mantener la vision binocular simple. En resumen, la Young (1963) informo sobre un grupo de 251 ninos
hipermetropia no corregida es una desventaja indiscuti- que fuer-on examinados con la prueba de Stanford-Binet
ble para mantener la vision binocular simple y nitida a y la Prueba California de Madurez Mental. Estuvo de
la distancia de lectura, mientras que la miopia sin co- acuerdo con Hirsch en que existia una correIacion mas
rregir es una ventaja indiscutible. elevada entre el defecto refractivo y las pruebas de in-
teligencia realizadas con papel y lapiz que entre el de-
fecto refractivo y una prueba que requiera un minimo
Estado refractivo y puntuaciones en pruebas de capacidad de lectura. Young rechazo la idea de que
de inteligencia existe una relacion entre el estado refractivo y la inteli-
gencia, pero estuvo a favor de la idea de una relacion
La relacion entre el estado refractivo y las puntua- entre el estado refractivo y la capacidad para la lectura.
ciones en pruebas de inteligencia ha sido estudiada por Un estudio realizado con 707 ninos de grado escolar in-
diversos investigadores. Sin excepcion, los resultados termedio en Nueva Zelanda (Grosvenor, 1970a) comparo
indican una tendencia de los rniopes a conseguir pun- los datos refractivos con los resultados obtenidos con la
tuaciones mas altas que los hipermetropes. Los resulta- Prueba Otis de Autodeterrninacion (Otis Self-Administe-
dos no deberfan sorprender si se tiene en cuenta que red Test), una prueba «verbal» que habia sido administra-
muchas pruebas de inteligencia son, en gran medida, da por un oficial de la escuela. Se observoque los rniopes
pruebas de capacidad de lectura. de -1 Domas obtenian puntuaciones significativamente
Hirsch (1959a) publico un estudio en que se midio la mas altas que los hipermetropes de 1 Domas. La.prueba
refraccion de 554 escolares de edades entre los 6 y Raven Matrix, un test no verbal de inteligencia, fue pos-
14 anos con retinoscopia, y los defectos refractivos se teriormente adrninistrada a 290 de estos rnismos ninos, y
compararon con las puntuaciones de las pruebas de in- se observo que la relacion entre esta prueba y el defecto
teligencia. Se observo que los coeficientes de correla- refractivo no era significativa. Debido a que la prueba Ra-
cion entre el estado refractivo y las puntuaciones de las ven Matrix requiere la percepcion de finos detalles pero
pruebas de inteligencia eran de -0,04 para ninos de eda- no una buena capacidad de lectura, se concluyo que la
des entre 6 y 9 anos, de -0,21 para ninos de edades en- tendencia de los rniopes a obtener puntuaciones mas altas
tre 10 y 13 anos, y de -0,24 para ninos en edades entre que los hipermetropes en la prueba Otis no era el resulta-
14 y 17 anos. El signo negativo en el coeficiente de do de una vision superior para los detalles MOS, sino de
correlacion indica que las puntuaciones mas altas de las una capacidad superior para la lectura.
pruebas de inteligencia estan asociadas con la miopia. Por 10 tanto, parece ser que un nino miope tiene una
Los coeficientes de los dos grupos de ninos mayores doble ventaja sobre un nino hipermetrope en las prue-
fueron significativos (a nivel de 0,01 y 0,001, respecti- bas de inteligencia autoadministradas que requieren ca-
vamente), mientras que el coeficiente de los ninos mas pacidad de lectura. Por un lado, el nino miope tiene
jovenes no resulto significativo. A los ninos de menor ventaja al enfrentarse a la prueba, ya que su lectura pro-
edad se les administro la prueba de Stanford-Binet de bablemente Ie resulte mas facil que al nino hipermetro-
forma individual, mientras que los ninos mayores reali- pe, y, en segundo lugar, tiene tambien la ventaja de ha-
zaron el Test California de Madurez Mental (California ber adquirido previamente mas informacion, a traves
Test of Mental Maturity), una prueba de grupo que im- de la lectura, que el hipermetrope. No obstante, debe
plica la percepcion visual de detalles finos. Hirsch pro- tenerse en cuenta, como apunta Hirsch, que esta rela-
puso que las correlaciones significativas encontradas en cion no es estrecha y que no puede utilizarse para pre-
los ninos mayores podian deberse al hecho de que la decir las puntuaciones de las pruebas de inteligencia a
prueba California, que requiere una percepcion visual partir del estado refractivo del ojo.
rapida y eficaz, concedia a los miopes una ventaja,
mientras que suponia una desventaja para los hiperme- I

tropes. Hirsch recalco que la relacion entre el estado re- Estado refractivo frente a destrezas
fractivo y las puntuaciones de la prueba de inteligencia perceptivas y dificultades en el aprendizaje
no fue importante y tenia poco valor predictivo: la
correlacion mas alta obtenida (-0,24), cuando se eleva al La relacion entre el estado refractivo y las destrezas
cuadrado, es de 0,06, 10 que indica que aproxirnada- perceptivas fue investigada por Rosner y Gruber (1985),
mente el 6 % de la variabilidad en las puntuaciones de quienes compararon los resultados de las pruebas de
Hirsch (1952), quienes administraronla Prueba de Tem- tica: la incapacidad para tener exito en beisbol y otros
peramento Guilford-Martin (Guilford-Martin T empera- juegos 0 para reconocer a uno de sus companeros de
ment Test) a 119 estudiantes de optometria y compa- clase en el patio de recreo pueden ser las causas de un
raron los resultados con el equivalente esferico del comportamiento timido e introvertido.
defecto refractivo. Estos investigadores concluyeron Los primeros ninos que aparezcan en clase con gafas
que los miopes tendian a ser de disposicion inhibida y (estos son los que llegaran a ser mas miopes) seran reci-
a sobrecontrolar las emociones, siendo pasivos y poco bidos con gritos de «cuatro ojos», 10 que reforzara aCm
inclinados a realizar actividades fisicas, aunque puntua- mas los patrones de introversion previamente adquiri-
ban alto en liderazgo social. Los hipermetropes tendian dos. En contraste, los ninos que desarrollen la miopia
a ser despreocupados y a participar en actividades fisi- mas tarde, en sus ultimos anos de escuela 0 incluso en
cas, pero puntuaban alto en pasividad social. Schapero el instituto (miopes de grado moderado y bajo), se aho-
y Hirsch advirtieron que el grado de asociacion fue tan rraran de ese tipo de situaciones, ya que las gafas son
ligero que no deberia considerarse como valor predicti- mas corrientes en los grados superiores de escuela e ins-
yo. Estudios adicionales que muestran tambien relacio- tituto.
nes entre la miopia y la personalidad han sido publi- Incluso los miopes de grado mas alto, una vez hayan
cados por Van Alphen (1961), Young, Singer y Foster «sobrevivido» a la escuela elemental, tienen razones
(1975) y Shultz (1960). para enfrentarse al mundo con mas confianza que sus
En un estudio publicado por Grosvenor (1980a), se padres miopes. Mientras que las generaciones previas
adrninistro a 70 estudiantes de tercer ano de Optome- de estudiantes miopes en el instituto y la universidad se
tria la prueba denominada Inventario de Personalidad veian forzados a escoger entre utilizar gafas «feas» 0 ver
Multifasica de Minnesota (Minnesota Multiphasic Per- el mundo de forma borrosa (alternativa preferida por al-
sonality Inventory) (MMPI). De los 64 estudiantes de gunos miopes), actualmente la disponibilidad de mon-
los que se disporna de todos los datos, 46 (72 %) eran turas de diseno y lentes de contacto puede eliminar la
miopes y solamente 3 (5 %) ternan 1 Domas de hiper- principal causa de timidez e introversion. Las observa-
metropia. De las 10 escalas de la prueba MMPI, se en- ciones anteriores son consistentes con el punto de vista
contra una relacion significativa solamente en una. de que la miopia es la causa y no el resultado de los ras-
Al comentar sus resultados, Grosvenor (1980a) sugie- gos de personalidad.
re que tal vez deberia ponerse en duda la «creencia con- En la medida en que los rasgos de la personalidad
vencionah de que los miopes son timidos e introverti- pueden causar miopia 0 en que la miopia y los rasgos de
dos. Puede que las observaciones de que los miopes son personalidad pueden proceder de un factor comun sub-
tfmidos e introvertidos deban aplicarse a los miopes yacente, la creencia convencional acerca de la miopia
«corregidos» pero no a los que no tienen correccion op- puede conservar cierto grado de validez.

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