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DOCUMENTO DE APOYO

LAS GALLINAS
CRIOLLAS
Herramientas para la Defensa y el Cuidado del Territorio
LAS GALLINAS CRIOLLAS
Charla ofrecida por Luz Perla Cardozo

Se define a las gallinas criollas (Gallus domesticus), como aquellas gallinas


autóctonas de una región determinada, caracterizadas por su alta diversidad
genética, capacidad de adaptación a condiciones agroecológicas y climáticas
locales y versatilidad productiva dada su capacidad de producir carne, huevos
y pie de cría, bajo un sistema de manejo tradicional.

Ventajas para los productores

Su ciclo productivo y reproductivo es


relativo, pero prolongado en el tiempo, por
lo que se puede disponer de carne, huevos y
crías de manera constante.

Gran rusticidad y capacidad para adaptarse a diferentes condiciones


climáticas y mantener sus ciclos productivos y reproductivos estables; alta
capacidad adaptativa.
Gran habilidad para obtener su
alimento y aprovecharlo de
manera eficiente, pues están
provistas de un sistema digestivo
que les permite almacenar y
triturar una gran variedad de
productos.

Pueden ser manejadas bajo


esquemas sencillos que no implican
procesos tecnológicos complejos y costosos, con los cuales se obtienen resultados
significativos en cuanto a producción, reproducción y manejo sanitario.

Existe una gran variedad de razas que ofrecen diferentes oportunidades a los
campesinos según el interés que ellos tengan respecto al ejercicio productivo. Por
ejemplo, hay razas más eficaces para la producción de huevos, otras para carne, otras
tienen más capacidad materna; también existen otras razas con mayor adaptabilidad,
es decir tienen mayor resistencia a las plagas y enfermedades.
Grupos de razas
Vastas o Rumbas
Son gallinas de gran tamaño y por lo tanto las
preferidas para la producción de carne. Sus
huevos son grandes, con cáscaras que pueden
ser de diferentes colores, como rojizo, blanco,
verdoso, azuloso, rosado; pueden presentar
pecas generalmente de colores oscuros. Las
plumas pueden variar de color entre blanco,
negro, amarillo, rojo, café y gris. Estas gallinas
pueden poner dos huevos en el mismo día
ohuevos de dos yemas.

Finas o Pájaras
Son de tamaño pequeño. Suelen ser muy
nerviosas y estar a la defensiva. Las hembras se
reconocen porque poseen las mejores
características maternales para realizar el
proceso de incubación y cría de pollitos, a pesar
de que su reducido tamaño limita también la
cantidad de huevos que pueden incubar, pues
de manera exitosa logran hasta un máximo de
12 huevos. Es frecuente que a los machos se les
emplee para la pelea (riñas).

Kikas o Cubanitas
Aquí se encuentran las más pequeñas que
existen. Generalmente cumplen funciones
ornamentales y pueden ser de pluma cerrada o
pluma en forma de pelo.

Cruzadas o Mestizas
A este grupo pertenecen las de tamaño
mediano, que son el resultado de múltiples
cruces de diferentes razas. Son muy buenas
productoras y excelentes madres; pueden
calentar e incubar de manera exitosa entre 12 y
16 huevos.
Alimentación Balanceada
Es posible alimentar las gallinas sin depender de los costosos concentrados, es muy
beneficioso, pues al poco tiempo de implementar esta nueva alimentación ya se empiezan a
ver los resultados.

Beneficios del concentrado criollo


Es más rentable económicamente, no requiere
infraestructuras costosas ni complejas.
Es Fácil de preparar pues se utilizan materias primas de
la zona, hay control sobre estas y además son de fuentes
sanas y de calidad.
Las gallinas aumentan de peso y mejoran la postura.
Los huevos y la carne son más seguros y de mejor
calidad.
Los animales son más resistentes a las enfermedades.

Materiales
Pilón artesanal, molino, pesa (balanza), Media libra de hueso tostado y molido.
cuchara. Un puñado (125 gramos) de ají.
6 libras de maíz amarillo criollo 4 cucharadas de azufre.
2 kilos de plátano, preferiblemente Tres cucharadas de sal mineralizada.
cocinado 2 kilos de fruta de cosecha (guayaba,
1 kilo de forraje vegetal (leucaena, mango, noni)
matarratón y guásimo) 250 gramos de ceniza de fogón.
1 kilo de yuca 4 cucharadas de carbón de leña.
Media libra de cáscaras de huevo secas y 1 o 2 ramas de orégano.
pulverizadas.

Preparación
Tener todos los productos recogidos con anticipación para evitar pérdidas y daños por
humedad. Se pican y disponen todos los ingredientes: se separan para luego mezclarlos
solo en la cantidad que se necesita para alimentar a los animales, es decir la cantidad
para el día. Se recomienda tener los productos de origen vegetal parcialmente
deshidratados. Todos los materiales deben pasarse separadamente por el molino.

El forraje se mezcla con el maíz, la ceniza, el carbón de leña, las cáscaras de huevo y
el hueso y luego se humedece con el agua, se le añade la sal y ají, la fruta y se mezcla bien.

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