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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA 

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN SUPERIOR 

UNIVERSIDAD BOLIVARIANA DE VENEZUELA 

MISIÓN SUCRE 

PROGRAMA DE FORMACIÓN DE GRADO EN ESTUDIOS JURÍDICOS DEL


ESTADO MIRANDA MISIÓN SUCRE. 

 SEDE TACARIGUA 15040301 

ESTRATEGIAS PARA LOGRAR LA OBTENCIÓN DE LOS TÍTULOS


SUPLETORIOS SUFICIENTES DE PROPIEDAD DE LOS HABITANTES DEL
SECTOR BARRIO AJURO II, HIGUEROTE MUNICIPIO BRIÒN DEL ESTADO
MIRANDA. 

TUTOR:                                                       AUTORES: 

Abgda. Nancy Sojo                                           Estudios Jurídicos 

SECCIÓN ÚNICA Nº
12099                                                                                                            
DEBIDO PROCESO EN EL MARCO DE UN ESTADO SOCIAL Y DE
JUSTICIA
Garantías Orgánicas:
Independencia:
Mientras la garantía de independencia, en términos generales, protege al juez
frente a influencias externas, el principio de independencia funcional se vincula a
determinadas exigencias dentro del proceso, definidas como la independencia del
juez frente a las partes y al objeto del proceso mismo, pudiendo entenderse desde
dos acepciones:
a) Independencia subjetiva, que atañe a algún tipo de compromiso que el juez
pueda tener con el caso.
b) Independencia objetiva, referida a la influencia negativa que puede tener en el
juez la estructura del sistema, restándole imparcialidad, es decir, si el sistema no
ofrece suficientes garantías para desterrar cualquier duda razonable.
La independencia del juez reconoce cuatro órdenes distintos y hace a la noción
del debido proceso legal. Ellas son la independencia frente a las partes, al objeto
litigioso, a los órganos del Poder Judicial y a los órganos políticos.

Imparcialidad:
El derecho de todo ciudadano -a todos los que sean parte en el proceso penal- a
un proceso sin dilaciones indebidas o a que su causa sea oída dentro de un plazo
razonable o sin retraso, es un derecho fundamental de naturaleza reaccional que
se dirige a los órganos judiciales, creando en ellos la obligación de actuar en un
plazo razonable el ius puniendi o de reconocer y, en su caso, restablecer
inmediatamente el derecho a la libertad. La lenta reacción judicial, sin justificación,
origina y propicia una causa o motivo en cierto sentido de despenalización porque
el reproche judicial viene ya viciado por extemporáneo.
Este derecho no se identifica con el mero incumplimiento de los plazos procesales
y comporta la utilización de un concepto jurídico indeterminado que necesidad ser
dotado de contenido concreto en cada caso, atendiendo a criterios objetivos
congruentes con su enunciado genérico. Su vulneración se produce siempre como
consecuencia de una omisión que realiza un órgano jurisdiccional sobre aquella
obligación constitucional de resolver dentro de los plazos previstos las
pretensiones que se formulen.
La primera condición para ejercer este derecho de este derecho es que se
incumplan los plazos previstos en la ley; corresponde a la autoridad judicial, por
imperio del principio de impulso de oficio, vigilar y subsanar, en su caso, el
cumplimiento de los plazos procesales. La segunda condición -y decisiva- es que
esta dilación o retraso sea indebido; se trata de un concepto jurídico
indeterminado, cuya apreciación debe realizarse caso por caso y según las
circunstancias, siendo de analizar tres elementos puntuales: a) la complejidad del
asunto o causa; b) el comportamiento del agente -de la actuación de buena o mala
fe dependerá la calificación de indebido- en el curso del procedimiento; y, c) la
actitud del órgano judicial (determinar si medió inactividad de su parte, si fue el
causante de las dilaciones).
Este derecho vulnerado exige de parte de la autoridad judicial su inmediato
restablecimiento, vale decir, la emisión de la resolución cuya tardanza se ha
puesto de manifiesto, sin perjuicio -en su caso- de declarar el derecho
indemnizatorio que asiste al perjudicado; por el Estado, si la dilación se debe a un
funcionamiento anormal de la administración de justicia, o por el particular
culpable, si a él se debe la dilación indebida. Sin embargo, la opción que va
teniendo cada vez mayor consistencia, es aquella que postula declarar, junto a la
vulneración del derecho al plazo razonable, la reducción de la pena que -como
mínimo- requeriría su reparación.

Responsabilidad.
Los órganos jurisdiccionales están expuestos a un amplio orden de
responsabilidades ya que en el desempeño de la función judicial el magistrado
puede infringir reglas de conducta que afecten bienes jurídicamente tutelados y
que originen un deber genérico de responsabilidad. En este orden de ideas
pueden distinguirse:
La responsabilidad del Juez frente al Estado, que tiene por finalidad única y
exclusiva la de destituir al juez e inhabilitarle para el ejercicio de la potestad
jurisdiccional, según los casos por medio del juicio político o juri de enjuiciamiento.
La responsabilidad del Juez frente a la Administración de Justicia, la cual somete
al juez a normas éticas administrativas de comportamiento cuya infracción es
prevista y sancionada según la distinta gravedad de las faltas que el juez cometa
en el ejercicio de la función (responsabilidad disciplinaria, ver Ley Orgánica del
Poder Judicial).
La responsabilidad del Juez frente a la Sociedad cuando la función judicial ha sido
utilizada dolosamente para la comisión de hechos delictivos (responsabilidad
penal).
La responsabilidad del Juez frente a terceros cuando dolosa o culposamente ha
realizado actos en ejercicio de sus funciones que producen perjuicios a los
justiciables o terceros. En ciertos regímenes, las demandas de responsabilidad
civil contra los jueces en los términos del artículo 1112 del Código Civil exigen el
desafuero del magistrado, lo que no ocurre en nuestra provincia en donde sólo se
determina una competencia específica (la de la Corte Suprema) al efecto.
Separación entre Juez y Acusación:
La separación entre juez y acusación, característica del modelo acusatorio,
significa no sólo la diferenciación ente los sujetos que desarrollan funciones de
enjuiciamiento y los que tienen atribuidas las de postulación, sino también el papel
de parte asignado al órgano de la acusación. Este principio representa la
condición esencial de la imparcialidad del juez respecto a las partes de la causa y
también el presupuesto de la carga de la imputación y de la prueba de la
imputación sobre la acusación.
Es claro que en un proceso en el que la acusación está atribuida a la parte
ofendida o a sujetos privados solidarios con ella, la acción penal es
necesariamente facultativa y negociable. Pero en el momento en que la acusación,
se hace pública, tanto el carácter facultativo como la posibilidad de negociación
sobre la acción penal resultan absolutamente injustificados. Y si han permanecido
es sólo porque propician una perversión policial e inquisitiva del proceso, que
permite al acusador público extorsionar al acusado y constreñirlo a colaborar con
confesiones o declaraciones.

Juez Natural
El derecho a ser juzgado por un juez natural o regular y pre-constituido está
expresamente consagrado en el Artículo 8.1 de la Convención Americana de
Derechos Humanos y el 14.1 del Pacto Internacional de los Derechos Civiles y
Políticos.
Tal garantía implica que, el órgano judicial ha de preexistir al acto punible, ha de
tener un carácter permanente, dependiente del Poder Judicial, y creado mediante
ley, con competencia exclusiva, indelegable y universal para juzgar el hecho en
cuestión.
Supone también, una implícita prohibición de crear organismos ad-hoc o post-
facto; tribunales o comisiones especiales para juzgar los actos punibles, sin
atender a la naturaleza del acto ni al tipo de persona que lo cometa. El juez natural
ha de tener un carácter previo y permanente.
Este principio funciona como un instrumento necesario de la imparcialidad y como
una garantía frente a la posible arbitrariedad de la actuación de los poderes del
Estado en perjuicio de los ciudadanos.

Obligatoriedad de la Acción Penal


El modelo acusatorio supone necesariamente la obligatoriedad y la irrevocabilidad
de la acción penal por parte de los acusadores públicos, independientemente
representante.
Existe un nexo indisoluble entre obligatoriedad de la acción penal e independencia
y, a la inversa, entre discrecionalidad y dependencia (o responsabilidad) política
del ministerio público. Ya que también la independencia de la acusación pública se
justifica con la sujeción solamente a la ley y con el principio de igualdad del que la
obligatoriedad de la acción penal es un corolario.

GARANTIAS PROCESALES
Las Garantías Procesales: Es la seguridad que se otorga para impedir que el goce
efectivo de los derechos fundamentales sea conculcado por el ejercicio del poder
estatal ya sea limitando ese poder o repeliendo el abuso; hablar de garantías es
hablar de mecanismos jurídicos que impiden un uso arbitrario o desmedido de la
coerción penal.
Estas Garantías Procesales, representan el modo de cumplir con los principios de
Seguridad Jurídica, de Igualdad ante la Ley y de Equidad, para asegurar la
Garantía General del Debido Proceso, de una manera tal que se pueda evitar que
el estado en ejercicio de su poder punitivo, avasalle ò menoscabe los derechos
fundamentales de sus habitantes. Estas Garantías están Constitucionalmente
protegidas en todos los países democráticos.
La Constitución de un país constituye la columna vertebral de los postulados
políticos e ideológicos relacionados con la estructuración del estado y del
funcionamiento macro de sus diversas ramas, así como el señalamiento de los
objetivos, expectativas, esperanzas y medios con que se ha de contar para
cumplir la finalidad última cual es la realización individual y colectiva de los
miembros que integran la comunidad nacional.
Como consecuencia de tales perspectivas, la Constitución cumple una función
fundamentalmente normativa y reguladora, y los códigos, leyes y normas que con
posterioridad se dicten tienen como objetivo básico, la reglamentación detallada
de toda aquella subestructura, su funcionamiento, objetivos, medios, limitaciones y
obviamente los derechos y deberes inherentes a los miembros de la sociedad. En
tales circunstancias, los códigos y leyes de una nación deben estar perfectamente
armonizados con la Ley, los jueces al aplicarlos, y los ciudadanos al interpretarlos,
deben hacerla cumplir, teniendo en cuenta esos parámetros políticos e ideológicos
que nutren constitucionalmente toda la normatividad de una nación.
Es así como la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, consagra
el acceso a la justicia como derecho inherente al ser humano, es decir, que
constituye un derecho fundamental el acceso a los órganos de la administración
de justicia para hacer valer sus derechos e intereses, incluso va mas allá cuando
contempla a los colectivos o difusos, a la tutela efectiva de los mismos y a obtener
con prontitud la decisión correspondiente. ART.26
El artículo 26 constitucional señala que: "… el Estado garantizará una justicia
gratuita, accesible, imparcial, idónea, transparente, autónoma, independiente,
responsable, equitativa y expedita, sin dilaciones indebidas, sin formalismos o
reposiciones inútiles". Esta norma destaca no solo el derecho de acceso a la
justicia para la protección de sus derechos e intereses, incluso los de carácter
colectivo y difuso, sino el derecho a la tutela efectiva de los mismos y el derecho a
obtener con prontitud la decisión correspondiente. La norma señalada incorpora al
constitucionalismo patrio el principio del derecho a la tutela efectiva.
Al mismo tiempo, el artículo 27 de nuestra Carta Magna, siguiendo la orientación
del artículo 49 de la Constitución de 1961, reguló la institución del amparo,
definitivamente como un derecho de rango constitucional que se manifiesta
mediante el ejercicio de múltiples medios o recursos judiciales de protección
incluyendo por supuesto la acción de amparo.

La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, estatuye en su artículo


2, los valores supremos del Estado, erigiéndose en un:
"… Estado Democrático y Social de Derecho y de Justicia, que propugna como
valores superiores de su ordenamiento jurídico y de su actuación, la vida, la
libertad, la justicia, la igualdad, la solidaridad, la democracia, la responsabilidad
social y general, la preeminencia de los derechos humanos, la ética y el pluralismo
político".
Denominación que se incorporó siguiendo la tradición del constitucionalismo
contemporáneo. Por otra parte, la idea de Estado Social es la de un Estado con
obligaciones sociales que procura de la justicia social, lo que lo lleva a intervenir
en la actividad económica y social como Estado Prestacional, tal carácter social
deriva principalmente del valor fundamental de la igualdad y no discriminación que
deriva del preámbulo y del artículo 1 del texto referido que además de derecho
fundamental es el pilar de actuación del Estado, y de la declaración del principio
de la justicia social como base del sistema.
Asimismo, entre los fines del Estado se encuentra el de las Garantías
Constitucionales, tal como lo determina el artículo 3 de la actual Carta Magna, que
precisa como la garantía más importante, la del cumplimiento de los principios,
derechos y deberes consagrados, lo cual a la vez es un valor fundamental del
Estado. Lo que implica que el acceso a la justicia es un derecho de estricto
cumplimiento considerado como valor fundamental en un Estado Democrático y
Social de Derecho. A través de los cuales se encuentra enmarcado dentro de los
fundamentos y alcances de los derechos de la persona humana y el tratamiento
constitucional del derecho del acceso a la justicia, imponiendo además, su
operatividad como derecho material y esto se da cuando se establece que: "toda
persona tiene derecho de acceso a los órganos de la administración de justicia…".
Pero al mismo tiempo todas las personas tienen derecho a ser amparadas por los
tribunales en el goce y ejercicio de los derechos y garantías constitucionales, aún
aquellos inherentes a la persona que no figuren expresamente en nuestra
Constitución y en los instrumentos internacionales sobre derechos humanos,
considerando que la defensa es un derecho inviolable en todo estado y grado del
proceso.
El acceso a la justicia lleva consigo otros derechos entre los que se destacan, el
derecho a ser oído, el principio de la tutela judicial efectiva, que según la Comisión
Interamericana de los Derechos Humanos, puede traducirse en la garantía de la
libre entrada a los tribunales para la defensa de los derechos e intereses frente al
poder público, aun cuando la legalidad ordinaria no haya reconocido un recurso o
acción concretos. También dijo la Comisión que la incertidumbre o falta de claridad
en la consagración de los requisitos de admisibilidad de una acción puede
constituir una violación a ese derecho fundamental. El recurso sencillo y rápido
amparado por la Convención Americana impide que el acceso a la justicia se
convierta en un desagradable juego de confusiones en detrimento de los
particulares.

El Derecho a la tutela judicial efectiva, regulado en el artículo 26 de la Constitución


de la República Bolivariana de Venezuela, es la suma de todos los derechos
constitucionales procesales plasmados en el artículo 49, por lo que se entiende
derecho al acceso a los órganos de administración de justicia, derecho a una
justicia gratuita, accesible, imparcial, idónea, transparente, autónoma,
independiente, responsable, equitativa, expedita, sin dilaciones indebidas, sin
formalismos, sin reposiciones inútiles, derecho al debido proceso.
a. Derecho a la defensa y seguridad jurídica.
b. Derecho a ser notificado de los cargos que se le imputan.
c. Derecho a la presunción de inocencia.
d. Derecho de acceso a las pruebas.
e. Derecho a la no valoración de pruebas ilícitas.
f. Derecho a ser oída en toda clase de procesos.
g. Derecho a un tribunal competente, independiente e imparcial.
h. Derecho a intérprete.
i. Derecho a ser juzgado por jueces naturales.
j. Derecho a no confesarse culpable.
k. Derecho a no ser juzgado por actos u omisiones no previstos en la ley como
delitos, faltas o infracciones.
l. Derecho a no ser juzgado por los mismos hechos que hubiese sido juzgado
anteriormente.
m. Derecho a exigir responsabilidad al estado y a los jueces por errores
judiciales, retardos, omisiones injustificadas, funcionamiento normal o anormal de
la justicia.
JURISDICCIONALIDAD Y PRESUNCION DE INOCENCIA
JURISDICCIONALIDAD
Sólo podrá imponerse una pena si un juez previamente determina la culpabilidad
(responsabilidad) del reo a través de un proceso jurisdiccional indeclinable e
insustituible; proceso que no debe entenderse como un silogismo perfecto, sino en
un razonamiento formado por una serie de deducciones en que el juez dispone de
las facultades de denotación, verificación, connotación y disposición.

Este principio está claramente delimitado en nuestra Constitución. De acuerdo a


ella, toda persona tiene derecho a que se le administre justicia por tribunales que
estarán expeditos para impartirla en los plazos y términos que fijen las leyes, de
manera pronta, completa, imparcial y gratuita, por lo que nadie puede hacerse
justicia por sí misma, esta se realiza mediante un juicio seguido ante los tribunales
previamente establecidos, en el que se cumplan las formalidades esenciales del
procedimiento y conforme a las leyes expedidas con anterioridad al hecho.

GARANTIA PRESUNCION DE INOCENCIA


Esta garantía está consagrada en el Art.49 Ord.2 y Articulo 8 del Código Orgánico
Procesal Penal, es una posición de ventaja que la Constitución atribuye al
ciudadano que se encuentra en posición de parte demandada. Consiste en
atribuirle de entrada la calidad de persona inocente y en no obligarle a hacer nada
para demostrarlo, por lo cual no tiene que preocuparse de probar su inocencia, le
basta y le sobre la pasividad más absoluta.

El terreno abonado de la presunción de inocencia es ciertamente la prueba.


De hecho la Doctrina consolidada tras reiteradas resoluciones puede resumirse
como sigue:
* Desvirtuar la presunción de inocencia exige ante todo una mínima actividad
probatoria.
* Solo se considera actividad probatoria la que según la ley tiene carácter de tal.
Ante todo no pueden considerarse como actividad probatoria las meras diligencias
de instrucción, que solo tienen naturaleza de tales y no de actos de prueba. Sirven
para fundar la acusación pero no para sentenciar.

Solo las partes demandantes tienen la carga de probar la acusación, de


suministrar en el momento procesal adecuado suficientes pruebas de cargo que
puedan desvirtuar la presunción de inocencia. Si dichas pruebas de cargo no se
llegan a producir, la presunción de inocencia se mantiene y procede la absolución
del demandado. Si de haberse aportado dichas pruebas el Tribunal no resultase
convencido también ha de fallar con el principio in dubio pro reo.
Resulta por lo tanto, que la garantía cubre todos y cada uno de los momentos de
la actividad probatoria y pugna por sobrevivir a los embates de la demanda. Solo
las pruebas de cargo concluyentes hacen perder al ciudadano dicha posición de
ventaja, tras el sometimiento a la disciplina del juicio civil.

* Esta garantía es reconocida desde la Declaración de los Derechos del Hombre


y del Ciudadano de la Revolución Francesa.
* Declaración Universal de los Derechos Humanos de la Organización de las
Naciones Unidas, Art. 11, en la Convención Americana sobre Derechos Humanos
(Pacto de San José) de 1978.
* Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos,
* Ley de Libertad Provisional Bajo Fianza 9-12-1992

LA FORMULACION DE UNA ACUSACION EXACTAMENTE DETERMINADA.


“Los ciudadanos pueden formular sus denuncias sobre delitos tales como estafa,
robo, lesiones, homicidio, violación, secuestro, posesión y tráfico de drogas, ilícitos
ambientales, violencia de género y casos de corrupción, entre otros”.

La denuncia podrá formularse verbalmente o por escrito y en ambos casos,


deberá contener la identificación del denunciante, cédula de identidad, domicilio o
residencia, además de una narración del hecho que se denuncia, quiénes lo
cometieron y las personas que lo hayan presenciado o que tengan noticia de él.

En el caso de la denuncia en forma VERBAL: El denunciante debe dirigirse al


Ministerio Público o ante los Órganos Policiales de Investigaciones Penales
competentes, donde se le tomará entrevista y se levantará un ACTA en presencia
del denunciante quien la firmará junto con el funcionario que la reciba.

Mientras, que a través de la forma ESCRITA, ésta debe ser consignada en un


documento firmado por el denunciante o por un apoderado con facultades para
hacerlo. Si el denunciante no puede firmar, estampará sus huellas dactilares.

Existe otra formalidad denominada “Querella”. La querella, es el acto procesal


que consistente en una declaración de voluntad dirigida al órgano jurisdiccional
competente, por la que el sujeto de la misma, además de poner en conocimiento
de aquél, la "noticia criminis" como noticia criminal, ejercita la acción penal,
regulándose actualmente en el Código Procesal Penal.

Órgano ante quien se formula: La denuncia puede formularse ante cualquier


autoridad judicial, funcionario del Ministerio Fiscal o de la Policía. En cambio, la
querella ha de interponerse ante el órgano jurisdiccional competente.

Sujetos de la denuncia y la querella: La denuncia, por lo general, es un deber,


mientras que la querella es un derecho, generalmente.

a) La denuncia, es una obligación que, por regla general, impone el Estado para
obtener la cooperación ciudadana en la lucha contra el delito.
b) La querella, en cambio, constituye, por regla general, un derecho: todos los
ciudadanos, hayan sido o no ofendidos por el delito, pueden querellarse cuando se
trate de un delito público, utilizando la acción popular; y también pueden
querellarse los extranjeros por los delitos cometidos contra sus personas o bienes,
o las personas o bienes de sus representados.

Formalidades de la querella:
Los requisitos formales de la misma son:
* Se presentará siempre por medio de Procurador con poder bastante y suscrita
por Letrado.

Debe contener:
* El Juez o Tribunal ante quien se presente;
* El nombre, apellidos y vecindad del querellante;
* El nombre, apellidos y vecindad del querellado. En caso de ignorarse estas
circunstancias, se deberá hacer la designación del querellado por las señas que
mejor puedan darle a conocer;
* La relación circunstanciada del hecho, con expresión del lugar, año, mes, día y
hora en que se ejecutó, si se supieren;
* Las diligencias que deban practicarse para la comprobación del hecho;
* La petición de que se admita la querella, se practiquen las diligencias referidas,
se proceda a la detención y prisión del presunto culpable o a exigirle la fianza de
libertad provisional, y se acuerde el embargo de sus bienes en la cantidad
necesaria, en los casos en que así proceda;
* La firma del querellante (o la de otra persona a su ruego, si no supiere o no
pudiere firmar, cuando el Procurador no tuviere poder especial para formular la
querella) del abogado y del procurador.

Requisitos de la admisibilidad: El querellante prestará fianza de la clase y cuantía


que fije el órgano jurisdiccional, para responder de las resultas del proceso.

Están exentos de la obligación de prestar fianza:


* El ofendido y sus herederos o representantes legales.
* En los delitos de homicidio el viudo o viuda, los ascendientes y descendientes
consanguíneos o afines, los colaterales consanguíneos o uterinos y afines hasta el
segundo grado, los herederos de la víctima y los padres, madres e hijos no
matrimoniales respecto de la madre en todo caso, y respecto del padre, cuando
estuvieren reconocidos.

La exención de fianza no es aplicable a los extranjeros si no les correspondiese en


virtud de tratados internacionales o por el principio de reciprocidad.

Por otra parte, cuando se trata de determinados delitos privados (perseguibles a


instancia de parte), la admisibilidad de la querella viene determinada por ciertos
requisitos previos o presupuestos, a saber:

* Si la querella tuviere por objeto un hecho que revista los caracteres de delito
perseguible solamente a instancia de parte, habrá de acompañarse a la misma la
certificación que acredite haberse celebrado o intentado el acto de conciliación
entre querellante y querellado.
* En las querellas relativas a delitos de calumnia o injuria causadas en juicio,
habrá de presentarse, además de la certificación referida, la licencia del Juez o
Tribunal que hubiese conocido de aquél. Constitución en parte del sujeto de la
querella: La querella es una declaración de voluntad, mediante la cual quien la
fórmula no sólo pone en conocimiento del Juez unos hechos posiblemente
delictivos, sino que expresa la voluntad de ejercitar la acción penal,
constituyéndose en parte en el correspondiente proceso.

Efectos de la denuncia y de la querella:


En la querella, el órgano jurisdiccional competente, después de admitirla si fuera
procedente, mandará practicar las diligencias que en ella se propusieren, salvo las
que considere contrarias a las leyes, innecesarias o perjudiciales para el objeto de
la querella, las cuales denegará en resolución motivada, así como también
desestimará en la misma forma la querella, cuando los hechos en que se funda no
constituyan delito o cuando no se considere competente para instruir el sumario
objeto de la misma.

Por otra parte, no puede hablarse de desistimiento en la denuncia (puesto que,


una vez presentada, el denunciante ni está obligado ni tiene facultades para
realizar actividad procesal alguna, ya que no es parte); En cambio, el querellante
puede verse obligado a realizar actividades posteriores, cuya no realización
equivale al desistimiento, el cual puede ser expreso o tácito, entendiéndose que es
tácito para las querellas por delitos privados; en efecto:

Si la querella fuese delito que no pueda ser perseguido sino a instancia de parte,
se entenderá abandonada por el que la hubiese interpuesto cuando dejase de
instar el procedimiento dentro de los 10 días siguientes a la notificación del auto
en que el Juez o el Tribunal así lo hubiese acordado.

Se tendrá también por abandonada la querella cuando, por muerte o por haberse
incapacitado el querellante para continuar la acción, no compareciere ninguno de
sus herederos o representantes legales a sostenerla dentro de los 30 días
siguientes a la citación que al efecto se les hará, dándoles conocimiento de la
querella.

LA CARGA Y APRECIACION DE LA PRUEBA.


Cuando se habla de la nomenclatura o terminología de la prueba jurisdiccional, es
necesario, en primer lugar, establecer que es prueba para el proceso jurisdiccional
y cuál es su finalidad o función en el mismo.
La prueba es un estado de cosas, susceptible de comprobación y contradicción,
que tiene lugar en el proceso de conformidad con la ley, para producir
convencimiento, no solo en el juez, sino en las partes y en el público, sobre la
veracidad o falsedad de los hechos del proceso y, consiguientemente, para
sustentar las decisiones. Ese estado de cosas, que puede consistir en un objeto
que confiesas, otro que rinde testimonio, el juez que inspecciona, un experto que
analiza y dictamina, un documento que dice algo o un objeto que indica o sugiere
algo, claro entonces que ese estado de cosas en el proceso al que llamamos
prueba es introducido a este a través de los llamados medios de prueba o medios
probatorios.
PRINCIPIOS
El principio de apreciación de las pruebas: el artículo 22 COPP dispone que "las
pruebas se apreciarán por el tribunal según las sana crítica, observando las reglas
de la lógica, los conocimientos científicos y las máximas de experiencia". Hay
libertad de prueba.
La carga de la prueba corresponde al Estado y que por tanto es a los funcionarios
que ejercen la represión quienes deben demostrar la existencia del hecho, la
infracción de la norma penal, la autoría y la responsabilidad penal, porque si el
Estado no es capaz de realizar tales demostraciones la presunción de inocencia
persistirá y la sentencia absolutoria se impondrá.

Además de la libertad probatoria, rigen en esta materia los principios.


A- Licitud. La sentencia solo puede fundarse en los elementos de pruebas
incorporados legalmente al proceso , en consecuencia , no puede utilizarse
información obtenida mediante tortura, maltrato , coacción , engaño indebida
intromisión en la intimidad del domicilio , en la correspondencia , las
comunicaciones , los papeles y los archivos privados , ni la obtenida por los
medios que menoscabe la voluntad o viole los derechos fundamentales de las
personas ( art 19 al 31 de CRBV) .
B- Contradicción. Expresamente recogido por el art 18 del Copp con base en
tal principio la parte contra quien obra la prueba debe tener la posibilidad de la
controlarla.
C- Comunidad pues una vez incorporada al proceso, la prueba pertenece a las
partes.
D- Pertinencia. Está relacionado con la adecuación entre los hechos que se
pretenden llevar al proceso y que son objetos de prueba.
E- E-in dubio pro reo. Con base en la presunción de inocencia que favorece
al imputado hasta tanto no se dicte sentencia que la desvirtué, en caso de duda
sobre su culpabilidad debe absolverse. Cabe recordar aquí el principio de que
debe preferir la absolución de un culpable a la condena de un inocente.
CLASIFICACION
En un sistema procesal penal tradicional las pruebas suelen clasificarse en:
1- ) Pruebas Directas. (Según su Objeto) En las directas el juez recibe o practica
por sí mismo la prueba, en tanto que en las indirectas el juez recibe el informe o
declaración que le permite inducir lo que se trata de demostrar.
2- ) Prueba Sumaria y Prueba Controvertida (en atención a la posibilidad de
contradicción)
3-) Pruebas Formales y Sustanciales son las que cumplen una función
eminentemente ´procesal , cual es , llevar al juez el convencimiento sobre
determinados hechos y las sustanciales porque además, son requisitos de
existencia y validez.
4- ) Pruebas completas o Incompletas, según la ley reconozca un medio
probatorio como suficiente para declarar la existencia de un hecho o sea
suficiente para establecer por si solo la verdad.
5- ) Judicial y Extrajudicial según se realice en el proceso y por tanto ante
cualquier persona.

SISTEMA DE APRECIACION DE LA PRUEBA


A- Íntima Convicción. Este es el sistema propio de los tribunales de
jurados. Presenta como mayor desventaja la falta de motivación de la decisión.
B- Prueba Legal o Tasada. En este caso la ley fija la manera previa el valor
de cada medio probatorio, con independencia del l convencimiento del juzgador..
Este que es el sistema que acogía el CEC , tiene como desventaja que desvirtúa
la función del proceso y propicia la pasividad del juez , al requerir de parte de
este solo la subsunción de los hechos acreditados en esas reglas que de
antemano establecen su valor . Propicia negligencia del juez, por ello afirma
capelletti que en este sistema el ves en de valorar las pruebas se limita a
contarlas.
C- Libre Convicción, sana crítica o Critica Racional. Este sistema de
apreciación que el copp en el Art. 22 no supone una apreciación arbitraria,
pues obliga al juez a fundar una decisión en las máximas experiencia s, reglas
de la lógica y conocimiento científico

LOS PRINCIPIOS DE CONTRADICCIÓN, PUBLICIDAD, ORALIDAD,


CONCENTRACIÓN E INMEDIACIÓN
Los principios vinculados con la naturaleza acusatoria del proceso: oralidad,
inmediación, concentración y publicidad, como indica el Profesor Fairén Guillén,
integran un sistema político: el de la pronta eficacia del proceso, el de su
accesibilidad a las personas económicamente más débiles, en fin, a los principios
de "adecuación" y "practicabilidad" en que resumía Klein "la utilidad social del
proceso". En tal virtud, el Proyecto que se presenta se fundamenta en ellos:

El principio de oralidad: este principio está pautado en el artículo 14, que se


refiere a que "el juicio será oral y sólo se apreciarán las pruebas incorporadas en
la audiencia". La oralidad es sumamente importante porque contribuye a la
transparencia y celeridad del proceso, y porque aporta una carga de percepción
por parte del Juez, abogados, fiscales y público en general, de la aptitud y la forma
de expresión de aquellos que intervienen durante el proceso.
El principio de la oralidad supone que la decisión judicial se funda en las
evidencias aportadas en forma oral. La oralidad, más que un principio, es una
forma de hacer el proceso que lleva consigo otros principios: inmediación,
concentración y publicidad.
En lo que respecta a la exigencia de oralidad, el Proyecto prevé la realización de
la audiencia preliminar y del juicio en forma verbal, y la práctica en éste de las
pruebas de testigos y experticias. El juzgador dicta su fallo con base en los actos
verbales y no en las actas contentivas del resultado de la investigación, de ello se
deduce que el procedimiento probatorio en el debate depende del principio de
oralidad.

El principio de publicidad: sin duda, algo que es característico de este nuevo


proceso penal es su publicidad, establecida en el artículo 15. El hecho de ser
público garantiza su transparencia, al mismo tiempo que elimina la clandestinidad
que predominaba anteriormente. Debemos distinguir, como señala Eric Pérez,
entre publicidad inter partes y publicidad erga omnes. La primera se refiere al
conocimiento que del proceso pueden tener las partes, publicidad ésta que
hayamos presente en todo momento. La publicidad erga omnes o universal,
entretanto, viene a concretarse plenamente en la fase de juicio, que como
sabemos, corresponde al llamado juicio oral y público. Además, la publicidad
controla indirectamente la probidad de los jueces y hasta de las propias partes.
Por ejemplo, a un testigo falso le costará mucho más dar declaraciones contrarias
a la verdad, al verse presionado psicológicamente por el público asistente al juicio.
Hay, sin embargo, ciertas excepciones al principio de publicidad, establecidas en
el artículo 336 del Código en comento.
El artículo 333, se refiere a la publicidad del juicio oral, exceptuándose los casos
en que se vea afectado el pudor o la vida privada de alguna de las partes, cuando
se perturbe gravemente la seguridad del Estado o las buenas costumbres, peligre
un secreto oficial, particular, comercial o industrial, cuya revelación indebida sea
punible o declare un menor de edad y el tribunal considere inconveniente la
publicidad.
El principio de inmediación: otro principio fundamental es el de la inmediación. El
artículo 16 señala que "los jueces que han de pronunciar la sentencia deben
presenciar, ininterrumpidamente, el debate y la incorporación de las pruebas de
las cuales obtienen su convencimiento"..

Principio de inmediación, es una de las características importantes del sistema


acusatorio, se requiere que las pruebas sean practicadas en presencia del juez
que va a tomar la decisión final, para que mediante su percepción pueda tener
mayores elementos de juicio que le posibiliten llegar a la verdad histórica de los
hechos y con ello a la justicia.
Este principio postula que el juez llamado a sentenciar haya asistido a la práctica
de las pruebas y base en ellas su convicción, esto supone que haya estado en
relación directa con las partes, expertos, testigos y con los objetos del juicio, ello
exige identidad entre el juez que procede a la asunción de las pruebas y el juez
que decide la res iudicanda.
La impresión directa que obtienen quienes participan del proceso facilita la
obtención de la verdad y la posibilidad de defensa.

El principio de concentración: de conformidad con este postulado, enunciado en el


artículo 17, una vez que se inicia el debate, éste debe concluir en el mismo día. Si
ello no fuera posible, continuará durante los días que fueran necesarios hasta su
conclusión. Se podrá suspender por un plazo máximo de 10 días, en determinados
casos. Como vemos, esto, obviamente, coadyuva a la celeridad procesal, es decir,
a una más expedita administración de justicia.
Se incluye el principio de concentración que es otra de las características del
sistema acusatorio y que significa que la audiencia debe desarrollarse idealmente
en un mismo día y si es necesario interrumpir esta diligencia, que la misma
continúe a la mayor brevedad. El objetivo de la concentración es evitar que el
transcurso del tiempo lleve a olvidar al Juez el contenido de las pruebas o el
alegato de las partes. Este principio se reglamenta en el artículo 335 del mismo
código.
Conforme al principio de concentración, que es la principal característica exterior
del proceso oral, los actos procesales de adquisición de pruebas deben
desarrollarse bien sea en una sola audiencia o en audiencias sucesivas, de modo
que los jueces al momento de sentenciar conserven en su memoria lo ocurrido en
el acto adquisitivo. En efecto, "a la ley le interesa obtener una impresión fresca,
directa y libre del polvo de las actas, la posibilidad de intervenir en forma
permanente y la colaboración sin trabas de quienes participan en el proceso. Todo
esto puede producir el resultado deseado si no existen entre las distintas partes
del debate períodos de tiempo excesivamente prolongados." (Baumann).
Es de tal importancia la consecutividad de la audiencia que se sanciona la
suspensión que se extienda por más de diez días, disponiéndose la nueva
celebración del debate (Arts.337 y 339).
El principio de contradicción: el artículo 18 establece que el proceso tendrá
carácter contradictorio. Este principio es garante de la seguridad jurídica y del
derecho a la defensa, ya que, desde el primer instante, ambas partes podrán
exponer sus argumentos y alegatos, lo cual permitirá conservar al Juez una visión
verdaderamente objetiva e imparcial de los hechos controvertidos.
El proceso tiene carácter contradictorio, que no es más que el derecho de las
partes de probar y de contradecir las pruebas que se esgrimen durante la fase de
juicio oral y público.
Por cuanto los asuntos penales son demasiado importantes no se los puede tratar
secretamente, por ello los actos del proceso, salvo las excepciones legales, han
de efectuarse en público, esto que constituye una garantía de la legalidad y la
justicia del fallo, permite el acercamiento del ciudadano común al sistema de
administración de justicia y fortalece su confianza en ella, lo cual a su vez
representa un control democrático de la actuación judicial. Así, al proteger a las
partes de una justicia sustraída al control público, se garantiza uno de los aspectos
del debido proceso.

EL DERECHO A LA DEFENSA
Consagrada igualmente en nuestra carta magna, el cual acompaña al hombre
durante toda su vida. Este derecho, a diferencia de otros, no requiere
reconocimiento o consagración en una carta política para su existencia, sino que
tutela al hombre, por el sólo hecho de serlo. Cuando se habla del derecho a la
defensa en la jurisprudencia, siempre viene a la memoria la sentencia del juez
inglés en la cual se relata el pasaje bíblico de la expulsión de Adán y Eva del
Paraíso, oportunidad en la que Dios le concedió a Adán, antes de expulsarlo del
Paraíso, la posibilidad de defenderse y explicar por qué había comido del fruto
prohibido. En el derecho público moderno, se le ha atribuido rango constitucional
al derecho a la defensa en el artículo 49 de la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela.
El derecho a la defensa cuya acepción es muy amplia en Venezuela, dentro del
contexto del debido proceso, debe ser entendido como el derecho a recibir
asistencia jurídica de un profesional del derecho durante el juicio. Toda persona
tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un plazo
razonable, por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial,
establecido con anterioridad por la Ley, en la sustanciación de cualquier acusación
penal formulada contra ella, o para la determinación de sus derechos y
obligaciones de orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter.
IGUALDAD ENTRE LAS PARTES
En este orden de ideas, nuestro sistema acusatorio en lo que refiere al
procedimiento penal ordinario establecido en el libro Segundo del Código Orgánico
Procesal Penal, se divide en tres fases que son la fase preparatoria, la fase
intermedia y la fase del juicio oral. La fase preparatoria constituye la fase de
investigación y se encuentra a cargo de la dirección del titular de la acción penal
como lo es el Representante del Ministerio Público quedando bajo su dirección los
órganos de policía de investigación penal; fase ésta que tiene por objeto según se
establece en el artículo 280 del Código Orgánico Procesal Penal, la investigación
de la verdad y la recolección de todos los elementos de convicción necesarios
para fundar una acusación a los fines de solicitar el enjuiciamiento del imputado
incluyendo su derecho a la defensa, o por el contrario, de ser el caso, la
correspondiente solicitud de sobreseimiento.

Ahora bien, en aras de la búsqueda de la verdad como principio fundamental que


establece las finalidades del proceso, el Ministerio Público garante de la
Constitución, debe permitir a toda persona que ha sido señalada como la presunta
autora o participe de la comisión de un hecho punible y sobre quien investiga a los
fines de determinar su posible participación o no en tales hechos, el ejercicio de su
defensa y su derecho en igualdad de condiciones dentro de ese proceso de
investigación, lo que a todas luces traería el verdadero equilibrio en la
investigación, toda vez que las personas que han sido imputadas de la comisión
presuntamente de un hecho punible, puedan solicitar ante el Ministerio Público la
practica de diligencias de investigación a los fines del total esclarecimiento de los
hechos, ya que el Ministerio Público está obligado a recabar todos aquellos
elementos de convicción de cargo y descargo durante esta fase.

LA MOTIVACIÓN
La motivación de las sentencias, constituye un requisito de seguridad jurídica, que
permite establecer con exactitud y claridad a las diferentes partes que intervienen
en el proceso; cuáles han sido los motivos de hecho y Derecho, que llevaron al
juez, acorde con las reglas de la lógica, las máximas de experiencias, la sana
crítica y los conocimientos científicos, declarar el derecho a través de decisiones
debidamente fundamentadas en la medida que éstas se hacen acompañar de una
enumeración congruente, armónica y debidamente articulada de los distintos
elementos que cursan en las actuaciones y se eslabonan entre sí, los cuales, al
ser apreciados jurisdiccional y soberanamente por el Juez, convergen a un punto
o conclusión serio, cierto y seguro.
En tal orientación, la Sala de Casación Penal, en decisión N° 38 del 15 de febrero
de 2011, expresó que:
“…Como es sabido, la motivación de las resoluciones judiciales cumple una doble
función. Por una parte, permite conocer los argumentos que justifican el fallo y, por
otra, facilita el control de la correcta aplicación del derecho. De ahí que, la finalidad
o la esencia de la motivación no se reduce a una mera o simple declaración de
conocimiento sino que ha de ser la conclusión de una argumentación que ajustada
al thema decidendum, permita tanto a las partes como a los órganos judiciales
superiores y demás ciudadanos conocer las razones que condujeron al dispositivo
del fallo, de manera tal que pueda comprobarse que la solución dada al caso es
consecuencia de una interpretación racional del ordenamiento que escapa de lo
arbitrario…”.

LA INMOTIVACIÓN
Se da cuando la sentencia carece de fundamentos de hecho y de derecho. Para
que la sentencia no sea un invento o arbitrariedad del juez, sino producto de un
juicio razonable del sentenciador, debe expresar las razones de hecho y de
derecho en que se fundamenta. ... La fundamentación entre el hecho y el derecho
son elementos básicos que constituyen las premisas necesarias que dan
nacimiento al dispositivo del fallo. Es deber del juez subsumir los hechos que
aparecen probados en la causa con los que abstractamente están establecidos en
la norma penal aplicable; este juicio de valor es la verdadera fundamentación de la
sentencia, constituye la base que da razón y fuerza dispositiva. Por esta razones
cuando no se cumplen estos requisitos la sentencia resultaría viciada por
inmotivación, y acarrearía la nulidad del fallo…” (Morao R. Justo Ramón: El Nuevo
Proceso Penal y Los derechos del Ciudadano. 2002. pág 364)

LAS FORMAS DE INTERROGACIÓN


DEFINICIÓN.- INTERROGATORIO
Según, Manuel Osorio (2000). En Derecho procesal, la serie o catalogo de
preguntas que se hacen a las partes y los testigos para probar o averiguar la
verdad de los hechos. Los Códigos Procesales regulan las formulas de proceder a
los interrogatorios que varían mucho en las diversas legislaciones.

Según el Autor (2011). En la Fase Preparatoria las formas de interrogación serán


dadas por el Fiscal del Ministerio Público y los especialistas, veamos el C.O.P.P
donde establece la declaración del imputado, concatenado con el Art. 49 Num. 5
de la Carta Magna (en adelante CRBV), posteriormente el Art. 125 Num. 6
C.O.P.P. de los derechos del imputado. Y por ultimo el Art. 356 C.O.P.P del
Interrogatorio y sus formas.

Análisis: Según el Autor (2011). Dice, Indudablemente que si es flagrancia no se


presentara por su propia voluntad, pero si lo hará cuando la parte interesada
quiere aclarar la situación anormal en la que se encuentra como imputado, en este
caso el que denuncia o la victima comparece ante la fiscalía que corresponda y
darán cita para que se presente el imputado (véase el Art. 130 C.O.P.P), Aunque
halla sido denunciado y este en un proceso como imputado, es obligatorio que se
tomen en cuenta, los derechos constitucionales para el imputado y así se hace,
cita: Art. 49 CRBV Num. 2 y 5 "Ninguna persona podrá ser obligada a confesarse
culpable o declarar contra sí misma, su conyugue, concubino, concubina, o
pariente dentro de cuatro grado de consanguinidad y segundo de afinidad". Se
garantiza el derecho de inocencia Art 8 C.O.P.P. y el Art. 125 del derecho del
Imputado Num. 6 cita "presentarse directamente ante el Juez o jueza, con el fin de
prestar declaración." 2 "es inocente hasta que no se pruebe lo contrario".

Sección Segunda
De la declaración del imputado
Art. 130 C.O.P.P. Oportunidades. El imputado declarará durante la investigación
ante el funcionario del Ministerio Público encargado de ella, cuando comparezca
espontáneamente y así lo pida, o cuando sea citado por el Ministerio Público.

Si el imputado ha sido aprehendido, se notificará inmediatamente al juez de


control para que declare ante él, a más tardar en el plazo de doce horas a contar
desde su aprehensión; este plazo se prorrogará por otro tanto, cuando el imputado
lo solicite para nombrar defensor.

Análisis: Según el Autor (2011). Durante la etapa intermedia, el imputado


declarará si lo solicita y la declaración será recibida en la audiencia preliminar por
el juez.
En el juicio oral, declarará en la oportunidad y formas previstas por este Código.
El imputado tendrá derecho de abstenerse de declarar como también a declarar
cuantas veces quiera, siempre que su declaración sea pertinente y no aparezca
sólo como una medida dilatoria en el proceso.

En todo caso, la declaración del imputado será nula si no la hace en presencia de


su defensor.

Del Interrogatorio;
Según, El Autor (2011). Se abre el interrogatorio inicial, el fiscal cita a la parte
victimaria, siempre y cuando la victima quiera seguir con el proceso (victima y
victimario) posteriormente, al denotarse la posibilidad de un hecho punible, se abre
la investigación y pasa a los especialistas, estos buscaran la verdad, las pruebas,
e interrogaran a los testigos, y a las partes, (los especialistas son criminólogos,
criminalísticos, psicólogos, psiquiatras, medico forense, y demás especialidades
en los departamentos de inteligencia, según sea el caso etc.). Una vez que el
trabajo de los especialistas en la investigación como antes hemos dicho, que son
interrogatorios, y otros elementos que sirven de pruebas halla terminado, pasan a
manos del Fiscal, el fiscal dependiendo de esas pruebas pasa el caso a la fase
siguiente "Fase Intermedia" es decir; a la audiencia premilitar (véase Art. 327
C.O.P.P.). El Juez cita a las partes, testigos, especialistas, y hace el interrogatorio
que esta establecido en el Art. 356.
"Artículo 356 C.O.P.P. Interrogatorio. Después de juramentar e interrogar al
experto o testigo sobre su identidad personal y las circunstancias generales para
apreciar su informe o declaración, el juez presidente le concederá la palabra para
que indique lo que sabe acerca del hecho propuesto como objeto de prueba.

Al finalizar el relato, permitirá el interrogatorio directo. Iniciará quien lo propuso,


continuarán las otras partes, en el orden que el juez presidente considere
conveniente, y se procurará que la defensa interrogue de último.

Luego, el tribunal podrá interrogar al experto o al testigo.

El juez presidente moderará el interrogatorio y evitará que el declarante conteste


preguntas capciosas, sugestivas o impertinentes, procurará que el interrogatorio
se conduzca sin presiones indebidas y sin ofender la dignidad de las personas.
Las partes podrán solicitar la revocación de las decisiones al juez presidente
cuando limiten el interrogatorio, u objetar las preguntas que se formulen.
Los expertos y testigos expresarán la razón de sus informaciones y el origen de su
conocimiento."

Actos de instrucción
Estos actos se denominan actos procesales y están causados casi exclusivamente
por las partes y el órgano jurisdiccional.

a) Clases de actos procesales.-


Existen dos criterios diferentes de clasificación:

1º) Criterio subjetivo: atiende a la persona que produce el acto.


2º) Criterio funcional: atiende fundamentalmente a la finalidad del acto.

1º) Según el criterio subjetivo se pueden diferenciar tres grandes grupos de actos
procesales:

I) Actos de parte

1º) Actos de petición: la acción de las partes procesales es una petición que se
desarrolla en el proceso a través de peticiones. En este sentido la petición más
importante es la demande que es la que fija los límites del juicio. Además de la
demanda existen otras peticiones: interlocutorias, cuyo contenido es
eminentemente procedimental; otras contienen una petición de fondo.

2º) Actos de alegaciones: mediante estas actuaciones, las partes aportan al juicio
todos los elementos fácticos y jurídicos necesarios para que el juez dicte una
resolución.

3º) Actos de prueba: la actividad dirigida fundamentalmente a demostrar la


realidad de las alegaciones aportadas por las partes de forma que el juez llegue a
un convencimiento.

4º) Actos de conclusión: actos que resumen el desarrollo del juicio. Fijan los
hechos y corroboran las pruebas.

II) Actos procesales del juez

La actividad procesal del juez es el ejercicio de la jurisdicción y dicha actividad se


traduce en las resoluciones que se dictan a lo largo del proceso.

1º) Por la forma de las resoluciones tenemos:

a) Resoluciones gubernativas: resoluciones que dictan los tribunales cuando no


están constituidos en sala de justicia. Suelen resolver los asuntos internos del
órgano jurisdiccional. Cuando este tipo de resoluciones las dicta una sala de
gobierno o cuando la resolución de un juez o de un xxxx tiene naturaleza
gubernativa se denominan acuerdos.

b) Resoluciones jurisdiccionales:

- Providencias: aquellas que ordenan materialmente el proceso. En la providencia


se contiene lo mandado por el órgano jurisdiccional, no con fundamentación
jurídica, aunque puede ser sucintamente motivada. También debe contener el
Juez o Tribunal que ha dictado la resolución, la fecha, la firma del Juez o Tribunal
y la del Secretario Judicial. En los juicios laborales se admite la forma oral, aunque
luego debe quedar constancia por escrito.

- Autos: se utilizan cuando el órgano jurisdiccional decide un recurso contra la


providencia, cuando se resuelven cuestiones incidentales, cuando se resuelven
por falta de un presupuesto procesal, cuando se decide sobre la nulidad de un
procedimiento o cuando diga que la resolución debe tener la forma de auto. Los
autos siempre deben estar fundados y han de contener en párrafos numerados y
separados los hechos y los razonamientos jurídicos. Por último la parte dispositiva
y el fallo con la firma del juez o magistrado que dicte el auto.

- Sentencia: es la resolución que pone fin al pleito en cualquier instancia y pueden


dictarse oralmente cuando la Ley lo autorice. Son sentencias firmes aquellas
contra las que no cabe recurso alguno, excepto el de revisión o algún recurso
extraordinario. Entre tanto se considera que la sentencia es definitoria pero no
firme.

En cuanto a la forma: tras un encabezamiento se contiene en partes separadas y


numeradas los antecedentes de hecho, los hechos probados si los hubiera, los
fundamentos de derecho y, finalmente, el fallo. Debe estar firmada por el Juez o
Magistrado que dicta la sentencia.

Frente a las sentencias definitorias que pongan fin al pleito existen las
resoluciones interlocutorias que deciden un aspecto parcial del juicio o una
cuestión incidental.

Todas las sentencias y resoluciones que se dicten oralmente se documentarán en


las actas, siendo común a todas las resoluciones judiciales que en el momento de
su notificación se indique si dicha resolución es o no firme y que tipo de recurso
cabe, el plazo de que se dispone y ante que órgano jurisdiccional se puede
plantear dicho recurso.

2º) Por su finalidad:

- Decisiones: resuelven todos los problemas que se planteen en el juicio, así como
todas aquellas cuestiones susceptibles de una resolución autónoma (por ejemplo
la sentencia).

- Instrucciones: disponen de forma ordenada el curso del juicio. Dentro de este tipo
cabe diferenciar entre actos de ordenación o dirección, que disponen el curso de
la actividad procedimental, y actos de impulso, que permiten pasar de una fase
procedimental a otra.

III) Actos del secretario judicial

a) Actos de documentación: a través de ellos el secretario judicial deja constancia


de las actuaciones judiciales. El secretario judicial es el único funcionario que
puede dar fe cualquier actividad judicial y le corresponde también la facultad de
documentación, la fe pública plena y sin necesitar testigos.

Sin embargo el secretario puede habilitar a uno o más oficiales para que autoricen
los actos y para que puedan realizar las diligencias de circunstancia y
documentación, pero sólo si está el juez en esos actos para dar constancia.

Los actos de documentación y de fe pública se traducen en las actas, en las


copias certificadas y en las respuestas apud acta.

b) Actos de mediación: actos referentes a la posición de intermediario entre el


órgano jurisdiccional y las partes.

- Diligenciamiento: los secretarios judiciales ponen diligencias para hacer constar


el día y la hora de presentación de la demanda, de los escritos de iniciación del
procedimiento y de cualquier otro escrito cuya presentación esté sujeta a plazo,
debiéndose dar a la parte un recibo.
- Dación en cuenta: a través de ello el secretario pone en conocimiento del órgano
jurisdiccional los escritos que han presentado las partes, le notifica el transcurso
de los plazos procedimentales y da cuenta a la Sala, al Juez o al ponente de los
escritos y documentos presentados el mismo día o el día hábil siguiente. Es oral y
se hace por orden de presentación de los escritos, salvo que exista un escrito
urgente.

- Notificación a las partes de los proveídos judiciales.

c) Actos de conservación y custodia: corresponde a los secretarios judiciales la


llevanza de los libros y archivos así como la conservación de todas las
actuaciones.

d) Actos de instrucción: aquellos actos del secretario que sirven para ordenar e
impulsar el proceso. La ley los divide en dos:

- Diligencias de ordenación: dar a los autos el curso ordenados por la ley.

- Propuestas: corresponde al secretario proponer al Juez o al Tribunal todas las


resoluciones que deban tener la forma de providencia o de auto, excepto las
providencias que revisen las diligencias de ordenación y los autos. Tampoco
pueden (aquí va un artículo de la LOPJ; buscarlo)

b) Requisitos de los actos procesales. -

I. Lugar donde se realizan los actos: todos los actos procesales deben realizarse
en la oficina judicial y fuera de la sede general se practicarán las actuaciones que
por su naturaleza no puedan practicarse frente al juez.

II. Tiempo:

- Año judicial: desde el primer día hábil de Septiembre hasta el 31 de Julio. En


Agosto hay vacaciones. En cada sede judicial se formará una sala de vacaciones.
- Días y horas hábiles: todos los actos procesales se realizarán en días y horas
hábiles. En este sentido serán días hábiles todos los del año excepto Domingos y
festivos, los días del mes de Agosto salvo para la instrucción de procesos penales
y para las actuaciones urgentes. Son horas hábiles las que van desde las 8 de la
mañana a las 3 de la tarde pero para las causas penales son hábiles todas las
horas del día.

- Términos y plazos: para realizar un acto procesal se puede establecer bien un


lapso de tiempo durante el cual se permita realizar dicho acto, o se fijará un
momento determinado.

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