Está en la página 1de 3

Construcción o ruptura de la memoria

En el presente escrito discutiremos como el tema de la memoria colectiva,


constituye uno de los puntos en constante discusión dentro del amplio campo de las
ciencias sociales, efectuando una reflexión sobre la construcción de la memoria social, a
partir de eventualidades subjetivas, prácticas sociales, el poder y la cultura en conjunto
con el arte. Analizando los actores sociales y políticos, los cuales despliegan una lucha
política y simbólica en el espacio público, con intención de enmarcar en la memoria y,
como tal, un trasporte hacia al pasado.

Desde principios del siglo XX la sociología se vio en la obligación de dar


entendimiento a la relación que se presenta entre el arte y los diferentes movimientos
sociales, cabe resaltar que en los últimos tiempos el arte se ha vuelto más visible por su
alto valor económico y mediático, alcanzado por un sinfín de obras, pues las artes ofrecen
escenas imaginarías donde se compensan las frustraciones reales, ya sea como evasión
que lleva a resignarse o como creación de utopías que realimentan esperanzas: "una
especie de religión alternativa para ateos", según la frase de Sarah Thornton (2009:12).
( Garcia.2010:9), y como todo lenguaje es un alfabeto de símbolos creado por sus propios
artistas, cuyo ejercicio propone un pasado inmortalizado en la historia, que los receptores
comparten en su memoria social.

Por lo tanto, al hablar de memoria tenemos en cuenta un proceso social


relacionado con la historia en donde se condensa tiempo, espacio, relaciones sociales y
política, entre otras, que se lleva desde la antigüedad, se trata de un artificio social que se
constituye y se reproduce en grupos delineados en espacio-temporal, como la familia, los
grupos religiosos y las clases sociales, y advierte: “el pensamiento social es básicamente
una memoria” (Halbwachs, 2008, 4).

Debido a lo anterior, queda una pregunta en el ambiente ¿se está inmortalizando


lo que se debería inmortalizar?, sin irnos demasiado lejos dentro de la historia
colombiana, han habido diferentes actores sociales, los cuales han sido inmortalizados
mediante monumentos en espacios públicos por todo el territorio colombiano, en
contribución a la memoria nacional, no obstante, muchos de esos monumentos hacen
alusión a personas acusadas de racismo y esclavismo, como por ejemplo, la estatua de
Sebastián de Belalcazar la cual fue derribada recientemente por el pueblo indígena misak,
como acto de reivindicación para el pueblo indígena, y en contestación a los que
reprochaban dicho acto, “No van a ver en un museo con personas que sean indígenas,
hemos sido vistos como objeto de estudio, para nosotros Sebastián de Belalcazar y
nuestra memoria histórica se conecta con la tierra y nos visibilizamos, volvemos a
florecer” (2020:3), además, en consecuente, dentro de los recientes acontecimientos
mundiales  se ha promovido políticas dirigidas a la destrucción, derribo de imágenes y
monumentos, volviendo necesario replantearnos el concepto de patrimonio, pues dichos
enunciados abren puntos de vista como: la destrucción de imágenes son un atentado
directo en contra del arte generando una ruptura en la memoria, por otro lado tenemos,
pone un punto y final al inapropiado homenaje a estos esclavistas y supremacistas
blancos.

De acuerdo a Halbwachs, en contraste con la historia, la memoria es un proceso


vivo, inconcluso, polimorfo, que se distingue por su multiplicidad, de modo tal que, como
bien apunta, hay tantas memorias como grupos sociales. Por lo tanto, cada sociedad tiene
su distinción particular de como conmemorar, edificar y plasmar sus recuerdos
dependiendo de acuerdo a sus actores sociales, ya sean variables políticas culturales, y al
hacerlo implícitamente tiene una manera específica de concebir y de relacionarse con el
tiempo y, como tal, desempeña un papel crucial en la reproducción social

Lo que me permite concluir, las artes visuales, ya sean imágenes, monumentos y


efigies son elaboraciones, las cuales su significado, no solamente se centra en lo que de
esta se diga, o a quien está representando, su principal función tiene un trasfondo más
significativo en el que contribuye a la memoria histórica de una sociedad, de cierto modo,
puede parecer una ofensa a los factores, los cuales fueron oprimidos, discriminados etc.
No obstante, hacen parte de un lapso del tiempo que corresponde al pasado, el cual no se
puede censurar ni ocultar como si no tuviera importancia, no con intención de avalar los
actos cometidos, sino como fuente de información, para que actos enunciados
anteriormente por diferentes personas, no se vuelvan a cometer, y la mejor forma de
intentarlo es plasmarlo mediante las herramientas que nos brinda el arte.

Pues, el nexo entre la memoria y el arte en un espacio, constituye una ventana de


exploración teórica y visual para el pensamiento de las nuevas generaciones, pues toda
memoria es una construcción social fundada en el seno de la vida cotidiana en diversos
ámbitos de interacción, incidiendo es los propios lazos sociales.
Lo hasta aquí expuesto remite a pensar a la memoria como un proceso que cuenta
también con fisuras y que cambia a lo largo del tiempo. Siendo así, es preciso destacar
que la memoria varía en función de los actores sociales, el género y circunstancias de la
época; es decir, está condicionada por factores estructurales sin que ello implique que los
sujetos sociales no cuenten con agencia, con un margen de libertad en la constitución de
sus rememoraciones. En este contexto, tanto la memoria como la construcción de la
misma y el arte, son referentes de sentido; por ende, arte, memoria, sentido y prácticas
sociales son factores estrechamente ligados.

Bibliografía:

Pineda k. (2017) la construcción social de la memoria en el espacio. Sciencie


Direct. Consultado el 28 de octubre del 2021.

https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S1870576617300016

(06/junio/2020) ¿Destrucción o no destrucción de las imágenes en Colombia?


@esfera pública. Consultado el 28 de octubre del 2021.

https://medium.com/esferapublica/destrucci%C3%B3n-o-no-destrucci%C3%B3n-
de-las-im%C3%A1genes-en-colombia-aff7e8bd9bc4

Revista Semana. (17 de septiembre de 2020). ¿Por qué los Indígenas Misak
decidieron tumbar a Sebastián de Belalcázar?. Semana. Consultado el 28 de octubre del
2021

https://www.semana.com/nacion/articulo/por-que-los-indigenas-misak-decidieron-
tumbar-estatua-de-sebastian-de-belalcazar/202040/

García Canclini, N. (2010). La sociedad sin relato. Antropología y estética de la


inminencia. Buenos Aires, Argentina: Katz Editores.

https://www.academia.edu/15366457/LA_SOCIEDAD_SIN_RELATO_NESTOR_G
ARC%C3%8DA_CANCLINI

También podría gustarte