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Aforismos del

Novum Organum
Julio Iván Salazar González
I
El hombre es servidor e intérprete de la naturaleza y no al revés. Se pueden
comprender las leyes de la naturaleza.

Ejemplo: La famosa frase atribuida a Newton antes de su muerte: “Fui sólo un


niño que, jugando en la playa, halló una piedra más fina o una concha más linda
de lo normal mientras el gran océano de la verdad [la naturaleza] se extendía
inexplorado ante mí”
III
Como seres humanos, debemos obedecer a la naturaleza para poder
comprenderla, y esta es la regla práctica fundamental.
VII y IX
Solamente exaltamos el espíritu humano, cuya sutilidad (expresada, en parte, en
la industria manual y la inteligencia) es insuficiente para llegar a principios
generales, y por esto fracasamos en ciencia.

Podemos ver a la tecnociencia (o la ciencia al servicio de los intereses


económicos capitalistas) como un ejemplo contemporáneo de esto.
XV

Bacon considera a los términos, nociones y términos generales de su tiempo


como “inexactos” y “deficientes”. Así como definiciones malas y poca atención
a los fenómenos observables. Podemos considerar esto como un llamado a que
estos principios cambien y mejoren.

Ejemplos: física aristotélica, modelos geocéntricos y geometría euclidiana.


XIX
Aquí Bacon expone los métodos para llegar al conocimiento: la deducción y la
inducción. Critica a la deducción poniendo en tela de juicio sus principios
generales y la forma en la que se llega a ellos mediante la deducción. Defiende
a la inducción y su práctica, porque a partir de ella se llega, cuidadosamente, de
estancias particulares a principios generales.
XX y XXI
La inteligencia y el entendimiento no deben ser abandonadas, porque o
terminan siendo simplemente retórica o dialéctica, o no tienen éxito en
encontrar la verdad.

Ejemplo: Los modelos actuales de Machine Learning, que programan a las


máquinas para que se ayuden a sí mismas a pensar, resolver problemas y
aprender:
XXXIX
Empieza Bacon con su crítica a los ídolos; distingue cuatro ídolos de la mente y
el entendimiento humano: La tribu, la caverna, el foro y el teatro.
XLI
Ídolo de la tribu: Proviene de la naturaleza misma del hombre: “El sentido
humano es la medida de todas las cosas”, pero este sentido es, para Bacon,
engañoso e infiel a la naturaleza.

Podemos ver en este aforismo, por un lado, una crítica clara al dictum
protagórico según el cual el hombre es la medida de todas las cosas y, por otro,
un antecedente claro al principio de incertidumbre, según el cual perturbamos
de entrada a la naturaleza con el solo hecho de observarla.
XLII

Ídolo de la caverna: Es como el ídolo de la tribu, pero instanciado


individualmente, es decir, proviene de la naturaleza individual que cada uno
lleva dentro. Todos llevamos una caverna individual e interna en la que la luz
de la naturaleza se quiebra y se corrompe, pues el espíritu humano es en
extremo variable y sólo busca en la ciencia las cosas particulares, mas nunca las
universales.
XLIII
Ídolo del foro: La inteligencia es corrompida por el lenguaje y por el uso social
que damos de él (aquí podemos ver un claro antecedente a las ideas de los
positivistas lógicos del siglo XX, quienes pensaban que el lenguaje natural
quitaba de exactitud y precisión a las ciencias): “Las palabras hacen violencia al
espíritu y lo turban todo… Los hombres se ven lanzados por las palabras a
controversias e imaginaciones innumerables y vanas”.
XLIV
Ídolo del teatro: Este es introducido por los diversos sistemas de los filósofos y
malos métodos de demostración. Las filosofías están repletas de mundos
teatrales e imaginarios; las ciencias de principios y axiomas dudosos e
inconsistentes, que se han mantenido como autoridad por la tradición, la fe
ciega y la irreflexión.
Ejemplos: La geomtría euclidiana, física aristotélica y modelo geocéntrico.

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