Está en la página 1de 36

Instituto Tecnológico de Tlalnepantla

LISTA DE COTEJO PARA ENSAYOS

DATOS GENERALES DEL PROCESO DE EVALUACIÓN


Nombre (s) del alumno (a): No. Control

Aguirre Gutiérrez Kevin Ismael (Representante) 18251701


Arellano Esquivel Misael 18250530
Esquivel Ramírez Francisco de Jesús 18251713
García de Alva Héctor Alejandro 18251714
Nicolas Justo Brandon 18251732

Fecha: 17/04/2021
Tema: Conducción unidimensional estado estable.
Semestre:6to
Materia: Transferencia de calor
Firma Docente:
Docente: Ing. Andos Alcocer Ortiz
INSTRUCCIONES
Revisar las actividades que se solicitan y marque en los apartados “SI” cuando la evaluación se cumple; en caso contrario
“NO”. En la columna de observaciones se puede ayudar indicando al alumno a saber cuáles son las condiciones no
cumplidas, si fuese necesario.
Cumple
Ponderación Características a Cumplir Observaciones
SI NO
Portada: Logo ITTLA, nombre de la materia,
nombre del alumno, numero de control,
nombre del profesor, tema, calificación, fecha
de entrega, grupo.
Introducción: Revisión documental que
sustenta el marco teórico de la actividad.
Desarrollo: Presenta con claridad los temas
solicitados y demuestra profundidad en la
investigación.
Conclusión: Resume los principales puntos y
resultados de la actividad práctica.
Bibliografía: Son las fuentes de consulta
primarias y secundarias útiles para el propósito
de estudio de la investigación, en las cuales se
extrae información relevante.
Anexos: Son agregados que podemos incluir al
final del documento. No son obligatorios, solo
se agregan cuando se cree que puedan aportar
algo extra o hacen mención en el trabajo.
Entrega a tiempo en la fecha solicitada.
El reporte esta ordenado, limpio y sin faltas de
ortografía.
Calificación:
Instituto Tecnológico de Tlalnepantla

Transferencia de Calor

1M6

Alumnos:
Aguirre Gutiérrez Kevin Ismael (Representante) # de control: 18251701
Arellano Esquivel Misael # de control: 18250530
Esquivel Ramírez Francisco de Jesús # de control:18251713
García de Alva Héctor Alejandro # de control: 18251714
Nicolas Justo Brandon # de control: 18251732

Profesor: Ing. Andos Alcocer Ortiz

Conducción unidimensional en estado estable.

Fecha de entrega: 17/04/2021

Calificación: ________
Introducción:
Para esta segunda unidad contemplaremos los temas de Conducción unidimensional e es ad estable,
Placa, Cilindro hueco, Radio crítico, Esfera, Placa con generación uniforme de calor, Cilindro con
generación uniforme de calor, Superficies extendidas, Superficies extendidas de sección transversal
constante , Aletas circulares, Aletas rectangulares de perfil triangular, Eficiencia de las aletas,
abarcando así los temas de interés de esta unidad, aprendiendo así los diferentes tipos propiedades
y condiciones de los ejercicios expuestos para cada tema en específico.
La conducción unidimensional en estado estable encuentra múltiples aplicaciones en sistemas de
interés para el ingeniero: paredes de hornos, aislamiento de ductos para transportar vapor, aislamiento
de conductores eléctricos, aletas de enfriamiento, etcétera. En ciertas aplicaciones, los efectos de la
transferencia de calor en más de una dirección son tan pequeños que pueden despreciarse sin
sacrificar la exactitud de los resultados.
En este capítulo se describen algunas de esas aplicaciones; por supuesto, no se pretende cubrir de
manera exhaustiva todas las aplicaciones de la conducción unidimensional en estado estable. Nuestro
propósito sólo consiste en ilustrar el método o la técnica de análisis para resolver los diferentes
problemas que se le presentan al ingeniero.
2. Conducción unidimensional en estado estable.
2.1. Placa:
Considérese una placa plana de espesor L cuya conductividad térmica k es constante. Supóngase que
sus dos superficies se mantienen a temperaturas T I y T2, respectivamente, como se muestra en la
figura 2.1. Si se analiza un volumen de control de espesor Δx dentro del material, la primera ley de la
termodinámica establece que el calor que entra en el sistema por conducción es igual al que sale de
él. Analíticamente,

Al notar que el área A perpendicular al flujo de calor es constante en la placa, la expresión anterior
puede dividirse entre A Δx, esto es,

En el límite, cuando Δx→0 se obtiene, por el


teorema del valor medio,

Al integrar esta expresión con respecto a x


se obtiene

donde C1 es una constante de integración.


Esta expresión ratifica analíticamente que el
flujo de calor por unidad de área en la placa
es constante. Sustituyendo la ley de Fourier
en la ecuación 2.4 se tiene:

Si se supone que la conductividad térmica del material es constante, una integración de la ecuación
anterior da como resultado:

por lo que se concluye que el perfil de temperatura a través de la placa es lineal. Lo anterior es cierto
siempre que --como se supuso con anterioridad- la conductividad térmica del material sea constante.
Las constantes de integración Cl y C2 pueden evaluarse mediante dos condiciones de frontera que
correspondan a la situación física del problema y que pueden determinarse recurriendo a las
temperaturas en ambas superficies de la placa, es decir,

Sustituyendo estas condiciones de frontera en la distribución de temperatura (ecuación 2.6) se obtiene:

Por consiguiente:

El esquema de la figura 2.2 muestra la variación de la temperatura en la placa como función de la


distancia. Cabe observar de nuevo que esta distribución es lineal sólo cuando la conductividad térmica
del material es constante.

A menudo conviene normalizar o adimensionar los resultados de la transferencia de calor para que
sean generales e independientes de las dimensiones físicas del sistema. La normalización reduce el
número de parámetros, por lo que la gráfica e interpretación de éstos es aún más sencilla. En ciertas
circunstancias, una mera normalización podrá sugerir las aproximaciones necesarias para simplificar
un problema concreto. La ecuación 2.7 puede normalizarse definiendo una temperatura y una distancia
adimensionales como:
Al introducir estas variables adimensionales en la distribución de temperatura de la ecuación 2,7 se
tiene:

obteniéndose así una línea única cuya pendiente es de 135° para todas las placas. Una vez que se
calcula la distribución de temperatura en la placa, el flujo de calor que se transfiere a través de ella
puede evaluarse con facilidad, una vez más, mediante la ley de Fourier. Ya que ésta es constante,

Esta ecuación indica que el flujo de calor es proporcional al área, a la conductividad térmica del material
y a la diferencia de temperaturas. Por otra parte, el flujo de calor es inversamente proporcional al
espesor de la placa J. La forma de la ecuación 2.9 sugiere una analogía eléctrica con la ley de Ohm
de circuitos eléctricos: si el flujo de calor se visualiza como una corriente y la diferencia de temperaturas
como una diferencia de potenciales eléctricos, el equivalente de la resistencia eléctrica es una
resistencia térmica definida como:

El uso de esta ecuación permite evaluar sin mayor problema el flujo de calor en paredes de distintos
materiales en contacto íntimo, como se ilustra en la figura 2.3 con sólo dos. En estas condiciones,

La expresión 2.11 indica que el


flujo de calor a través de la
pared compuesta por dos
materiales es igual a la
diferencia total de temperaturas
entre la suma de las dos
resistencias térmicas en serie.
La analogía eléctrica antes
descrita también puede
emplearse con eficacia para
resolver problemas más
complejos relacionados con
resistencias en serie y en
paralelo. En la figura 2.4 se muestra un problema típico y su correspondiente circuito térmico. Cabe
notar, sin embargo, que las conductividades térmicas de los materiales en paralelo no deben ser
sustancialmente distintas, de lo contrario habría una transferencia de calor bidimensional. Hasta ahora
se ha supuesto que se conocen las temperaturas en las superficies exteriores de la pared. No obstante,
por lo general se encuentran en medios líquidos o gaseosos a diferentes temperaturas, y la
transferencia de calor con los fluidos se lleva a cabo por convección. El uso de la resistencia térmica
puede extenderse también a la ley de Newton de
enfriamiento. Al analizar esta ley se deduce que la
resistencia térmica para convección, o resistencia de
película, está dada por la expresión

Si se considera ahora la misma pared construida con dos


materiales, pero en contacto con dos fluidos como se
muestra en el esquema de la figura 2.5, la transferencia de
calor puede evaluarse con la expresión 2.13.

En esta expresión se observan las diferentes resistencias térmicas implicadas. En caso de que uno de
los fluidos sea, digamos, agua y el otro aire, la resistencia de película más grande se encuentra en el
lado del aire. En estas circunstancias, la transferencia de calor puede incrementarse o la resistencia
disminuirse mediante aletas de enfriamiento o superficies extendidas en el lado del aire a fin de
aumentar el área.
Otro caso que puede interesar a los ingenieros es cuando la pared que se analizó está constituida por
un material aislante. Entonces se define el valor R del aislante como la resistencia térmica del
material por unidad de área, es decir, R = L/k, donde L es el espesor y k la conductividad térmica.
Obsérvese que al duplicar el espesor L también se duplica el valor R del aislante. En Estados Unidos
de América los valores de R se expresan sin unidades; por ejemplo, R-20, R-30. Estos valores se
obtienen dividiendo el espesor del material dado en pies entre su conductividad térmica en BTU/h pie
°F, de tal forma que las unidades de R están en h pie2°F/ BTU. Así, 6 pulgadas de aislante de fibra de
vidrio (k = 0.025 BTU/h pie°F) tienen un valor igual a R-20, esto es, R = 0.5/0.026 = 20 h pie2°F/BTU
(en el SI 1 m2°C/W = 5.678 h pie2°F/BTU).
Este concepto de resistencia por unidad de área R también se emplea cuando la pared se compone
de materiales heterogéneos, como los bloques de concreto. De este modo se dice que un bloque de
concreto con dos cavidades tiene una resistencia térmica por unidad de área R igual a 0.37 m2°C/W.
La resistencia R = 1/h a la convección para una pared expuesta a un viento de 24 km/h es igual a 0.03
m2°C/W. Algunos valores de la resistencia térmica R se indican en J 997 ASHRAE Fundamentals
Handbook (American Society of Heating, Refrigerating and Air Conditioning Engineers, Inc., 1977).
2.2. Cilindro hueco:
Imaginemos ahora un cilindro hueco de radio exterior R2, radio interior R¡ y un material cuya
conductividad termitica k es constante, como se muestra en la figura 2.6. Supóngase que la superficie
interior se mantiene a una temperatura T¡, mientras que la exterior se mantiene a una temperatura T 2
y que el flujo de calor es conducido en la dirección radial solamente, esto es, L> > R ¡ o R 2 . Mediante
un balance de energía en el volumen de control mostrado se obtiene:
Integrando de nuevo esta expresión:

Las constantes de integración C1 y C2


pueden determinarse mediante
condiciones de frontera apropiadas. En
este caso:

Sustituyendo estas condiciones de frontera en la ecuación 2,18 se obtienen las constantes de


integración C1 y C2 esto es:
y

En la figura 2.7 se muestra de manera esquemática la distribución de la temperatura en el material del


cilindro. Obsérvese que, en contraste con el perfil lineal de una placa, el de la temperatura en un
cilindro es logarítmico aun cuando la conductividad térmica es constante en ambos casos. Ahora puede
calcularse el flujo de calor mediante la ley de Fourier. Debido a que el flujo es constante en cualquier
sección del cilindro,

Nótese que la ecuación 2.20 también tiene la forma de la ley de Ohm. Por consiguiente, en este caso
la resistencia térmica a la conducción puede expresar como:
El análisis de cilindros construidos con distintos materiales en contacto Íntimo y cilindros con
condiciones de frontera convectivas, o ambos casos, puede hacerse con facilidad mediante un circuito
térmico. Para ilustrarlo, imagine un tubo cubierto con un aislante y con convección, tanto por el interior
como por el exterior. En la figura 2.8 se muestra un esquema de esta situación. El flujo de calor en
tales circunstancias queda determinado mediante la relación.
2.3. Radio crítico
En apariencia, agregar material aislante a un cilindro o tubo siempre reduce las pérdidas de calor que
experimenta. Sin embargo, al analizar de manera detallada la ecuación 2.22 se observa que el efecto
del material aislante sobre la transferencia de calor en el cilindro es doble. Dicho de otro modo, añadir
material aislante de baja conductividad térmica a un cilindro incrementa la resistencia a la conducción,
pero también el área convectiva de transferencia de calor, con lo cual se reduce la resistencia exterior
de la película. Con este doble efecto en mente, a continuación, se analizan las consecuencias sobre
la transferencia de calor al variar el radio exterior del aislante. Si se supone que la temperatura en la
superficie exterior del cilindro desnudo es en esencia igual a la temperatura del fluido en el interior, o
que h1 y k1 tienen valores relativamente altos,

donde Rcrítico se denomina radio crítico de aislamiento. La expresión anterior indica que en Ra =
Rcritico el flujo de calor es máximo o la resistencia térmica al flujo de calor es mínima.
La diferencia Rcrítico - R2 recibe el nombre de espesor crítico de aislamiento, ya que el flujo de calor
se incrementa al añadir material aislante cuando R2 es menor que Rcrítico' En la figura 2.9 se muestra
en forma esquemática la variación de las resistencias de conducción y convección en un cilindro.
Para un aislante típico (k ≈ 0.03 W/m°C) en condiciones de convección natural (h ≈ 10W /m2°C) se
obtiene que Rcrítico ≈ 0.003 m = 3 mm. A primera vista este resultado podría indicar que el radio crítico
de aislamiento no tiene relevancia en las aplicaciones ingenieriles por su valor tan pequeño -para los
valores aquí asignados de ka y h3. Sin embargo, este resultado es muy importante en el análisis y
diseño de conductores eléctricos, pues la disipación de calor aumenta al añadir un aislante a un
alambre que transporta cierta corriente eléctrica. Por otra parte, si el radio crítico de aislamiento,
Rcrítico, es de menor magnitud que R2, cualquier cantidad de aislante disminuirá las pérdidas de calor.
Este hecho es de suma relevancia en tuberías que transportan agua caliente o helada y donde se
desea disminuir la transferencia de calor desde o hacia la tubería en un cilindro.
2.4. Esfera:
El análisis de esferas es de gran trascendencia por las aplicaciones que éstas tienen en distintos
procesos, como el caso de recipientes esféricos para almacenar fluidos a bajas temperaturas.
Considérese una esfera hueca de radio interior R 1, radio exterior R2 y cuya conductividad térmica es
constante. Supóngase que las temperaturas en sus superficies interior y exterior son T I y T2,
respectivamente. Después de seleccionar un cascarón esférico de espesor Δr dentro del material y
hacer un balance de energía se obtiene:
Al dividir entre 4𝜋Δr y hacer que Δr tienda a cero se obtiene, por el teorema del valor medio:

Integrando esta expresión con respecto al radio se tiene que:

o
donde C1 es una constante de integración. Si introducimos la ley de Fourier de conducción de calor.

Al integrar de nuevo con respecto al radio tenemos.

Las constantes de integración C1 y C2 pueden obtenerse a través de las condiciones de frontera sig.:
y
Si sustituimos estas condiciones en la ecuación 2.28,

Por lo tanto:

El flujo de calor transferido a través del cascaron puede calcularse con la ley de Fourier. Como es
constante.

Si comparamos esta ecuación con la ley de Ohm vemos que la resistencia térmica a la conducción
esta dada por la expresión:

Obsérvese que el en el límite, cuando R, tiende a infinito, la ecuación 2.30 se transforma en:
Con esta expresión puede calcularse el calor por conducción que disipa o absorbe una pequeña
partícula esférica o gota de líquido dentro de un fluido estático. Así, si comparamos esta expresión con
la ley de Newton de enfriamiento.

se obtiene que, para estas condiciones en particular,

donde D= 2R1
El análisis de una esfera construida con distintos materiales en contacto directo y con resistencias de
película puede hacerse con facilidad mediante un circuito técnico. En la figura 2.10 se muestra un
esquema que ilustra el caso de una esfera cubierta con material aislante y dos resistencias de
convección. En tales circunstancias.

A semejanza del radio crítico que se calculó para el cilindro, el radio crítico en una esfera resulta ser
el doble, es decir,
De la expresión para la temperatura en la superficie exterior se observa que ésta puede disminuirse
incrementando el coeficiente de transferencia de calor h.

2.5. Placa con generación uniforme de calor:


Hay una gran variedad de problemas en los que existe generación de calor: calentadores de
resistencia, conductores eléctricos, ánodos, cátodos, elementos combustibles en reactores nucleares,
etcétera. Imagine ahora una placa de espesor 2L en la que ocurre una generación uniforme y constante
de calor por unidad de volumen q''', W/m3, como se muestra en la figura 2.11. Supóngase que la placa
se halla expuesta por ambos lados a un fluido cuya temperatura es T∞ y el coeficiente de transferencia
de calor por ambos lados es h. Para determinar la distribución de la temperatura en la placa,
considérese un volumen de control de dimensiones Δx Δy Δz dentro del material. Un mero balance de
energía indica que:

Al dividir esta expresión entre ΔxΔyΔz y hacer que Δx tienda a cero se obtiene, por el teorema de valor
medio.

Integrando esta expresión con respecto a la distancia x.

Donde C1 es una constante de integración. Si introducimos la ley de Fourier de conducción de calor,

Al integrar de nuevo, y suponiendo que la conductividad técnica del


material es constante,

Las constantes de integración C1 y C2 pueden evaluarse con dos


condiciones de frontera. Dada la simetría del problema, el flujo de calor es
igual a cero en el plano central de la placa, esto es,

De manera análoga, el calor transferido por conducción es igual al de


convección en la interfase sólido-fluido, esto es,
Con estas 2 condiciones de frontera se obtiene:
En consecuencia:

La expresión anterior permite calcular la temperatura en cualquier posición x de la placa. Por tanto, la
temperatura en las superficies de ésta puede calcularse con facilidad al sustituir x = L en la expresión
anterior. Así,

Obsérvese que la ecuación indica que todo el calor generado se disipa por convección hacia el fluido.
Como la temperatura máxima ocurre en el centro de la placa, puede calcularse sustituyendo x = 0 en
la ecuación 2.38, es decir,

La distribución de la temperatura dada por la ecuación 2.38 puede normalizarse si se define una
temperatura y una distancia adimensionales como:
y

Con estas variables el perfil de temperatura queda expresado como:


2.6. Cilindro con generación uniforme de calor:
Considérese ahora un cilindro sólido de radio R, con una generación uniforme de calor q/", como se
muestra en la figura 2.12. Supóngase que la conductividad térmica del material es constante y que la
longitud del cilindro es muy grande con respecto a su radio, de manera que la transferencia de calor
se lleva a cabo sólo en la dirección radial.
Un balance de energía en un volumen de control en forma de arandela de espesor Δr y altura Δz indica
que:

Al dividir la ecuación entre 2𝜋ΔrΔz y hacer que Δr tienda a cero se obtiene:


Integrando esta expresión con respecto al radio:

donde C1 es una constante de integración. Puesto que el flujo de calor debe ser una cantidad finita en
todo el cilindro, incluido r = 0, de la ecuación 2.44 se desprende que C1 debe ser igual a cero. Así,

Si sustituimos la ley de Fourier en la expresión anterior se obtiene:

Con esta expresión se obtiene:

Por tanto:

Del mismo modo:

donde Tsup es la temperatura en la superficie del cilindro. Esta distribución de la temperatura puede
normalizarse al definir las variables:
y

así, la ecuación 2.47ª se transforma en:


Nótese que la expresión anterior es en esencia igual a la distribución adimensional de temperatura
para una placa con generación de calor, excepto por el coeficiente (1/2) en la ecuación 2.48. En la
figura 2.13 se muestra un esquema de la distribución adimensional de la temperatura en una placa
plana y en un cilindro con generación uniforme de calor.
2.7. Superficies extendidas:
El uso de superficies extendidas es de especial importancia en aplicaciones donde se desea
incrementar el flujo de calor y no se di pone del área suficiente, o porque el coeficiente de transferencia
de calor es relativamente bajo. Para ilustrar esto, considérese la superficie vertical de un dispositivo
electrónico que mide 0.1 m por 0.1 m, el cual se encuentra a 50 °C y se localiza en aire ambiente a 25
°C. Supóngase que el coeficiente de transferencia de calor es igual a 10 W/m 2°C. La mera aplicación
de la ley de Newton del enfriamiento indica que esta superficie puede disipar por convección.
q = hAΔT= (10)(0.1 X 0.1)(50 - 25) = 2.5 W
¿ Qué podría hacerse para incrementar la transferencia de calor por un factor de 10, es decir, a 25 W?
Hay varias posibilidades para incrementar el flujo de calor disipado por convección: aumentar la
diferencia de temperaturas entre la superficie y el fluido; incrementar el coeficiente de transferencia de
calor, o aumentar el área. Quizá ninguna de estas tres opciones sea factible. Esto es, la temperatura
de la superficie no puede incrementarse por las condiciones de operación del dispositivo electrónico;
el coeficiente de transferencia de calor tal vez podría incrementarse mediante un abanico, pero no es
práctico, y la superficie no puede cambiarse de tamaño (0.1 x 0.1 m) por condiciones de diseño. Sin
embargo, utilizar superficies extendidas o aletas de enfriamiento como la que se muestra en la figura
2.14 puede hacer que el área de transferencia de calor y, en consecuencia, el calor disipado se
incremente de manera significativa. Estas superficies pueden ser parte integral del material de la base
o pueden adherirse a ella. En la figura 2.14 se muestra el esquema de una superficie extendida de
sección transversal rectangular constante, la cual está adherida a otra superficie cuya temperatura es
T0. En esta aleta de enfriamiento horizontal el aire debe circular por las superficies superior e inferior.
Por otra parte, si la aplicación disipa calor por convección natural, el aire debe también circular por las
dos superficies de área L por W, por lo que la superficie extendida que se ilustra en la figura 2.14 debe
girarse 90 grados.

Las superficies extendidas tienen varias aplicaciones. Cabe mencionar su uso en los radiadores de
automóvil, en el enfriamiento de equipo eléctrico o electrónico, en motores de combustión interna
enfriados por aire, en intercambiadores de calor líquido a gas, etcétera. Antes de discutir cualquier
geometría concreta, se desarrollará una ecuación general que permita establecer la distribución de la
temperatura en una superficie extendida.

2.7.1. Ecuación general para una superficie extendida:


Se tiene una superficie extendida cuya sección transversal es variable, como se muestra en la figura
2.15. Supóngase que el espesor de la aleta es muy pequeño, de manera que el gradiente de
temperatura en la dirección transversal no es significativo, así que la conducción sólo es relevante en
la dirección x. Digamos además que la conductividad térmica del material y el coeficiente de
transferencia de calor son constantes. Mediante un balance de energía en el sistema de la figura 2.15
tenemos que:

donde A(x) es el área transversal al flujo de calor por conducción y P(x) el perímetro de la superficie
extendida por donde se disipa calor por convección. Dividiendo la expresión anterior entre Δx y por el
teorema del valor medio, cuando tu tiende a cero, se obtiene
;

Si introducimos la ley de Fourier de conducción de calor y suponemos que la conductividad térmica es


constante,

La ecuación anterior es una expresión general para determinar la distribución de la temperatura en


una superficie extendida en la que no hay generación interna de calor ni radiación. En esta expresión
tanto el área A como el perímetro P suelen ser funciones de la variable independiente x. Las
condiciones de frontera necesarias para evaluar de una manera única el perfil de temperatura
dependen de las condiciones físicas del problema. Normalmente deben especificarse los valores de
las condiciones de frontera en dos puntos, a menos que se conozcan la temperatura y su gradiente.

2.7.2. Superficies extendidas de sección transversal constante.


Imagine una superficie extendida como la de la figura 2.14. En estas circunstancias y definiendo la
diferencia de temperaturas θ = T - T∞, la ecuación 2.51 se simplifica a:

La solución general de la ecuación diferencial anterior es de la forma:

donde por conveniencia:

En el caso de una superficie extendida de sección transversal rectangular de dimensiones W por t


como la que se muestra en la figura 2.14 y t « W, el parámetro m2 adquiere un valor aproximado de
2h/kt. De forma similar, cuando la sección transversal sea circular de radio R, el parámetro m 2 adquiere
un valor de 2h/kR. Puesto que la temperatura en la base de la superficie extendida es igual a la
temperatura T0 de la superficie a la que está adherida -suponiendo desde luego que la resistencia de
contacto es igual a cero- , una de las condiciones de frontera puede escribirse como:

La otra condición de frontera puede establecerse suponiendo que las pérdidas de calor por la superficie
libre de la aleta o superficie extendida son despreciables, o que el extremo libre se encuentra aislado,
esto es,

Al sustituir las condiciones de frontera 2.54 y 2.55 en la solución general 2.53 tenemos:

En consecuencia,
Reacomodando la expresión,

Si recurrimos a las variables originales,

En la figura 2.16 se muestra la variación de la temperatura adimensional (T - T∞ )/(To - T∞) a través


de la superficie extendida como función de la distancia adimensional x/L para diferentes valores del
parámetro mL.
Obsérvese que la temperatura en el extremo libre de la superficie extendida difiere de la temperatura
ambiente y se aproxima a ella para valores muy grandes de mL, esto es, cuando h o L son
relativamente grandes o cuando k o t (o R) son relativamente pequeños. Nótese que la ecuación 2.57
también es válida para una superficie extendida de longitud 2L, empotrada entre dos superficies cuyas
temperaturas son iguales a T0. El flujo de calor disipado a través de la superficie extendida puede
calcularse después que se ha determinado la distribución de la temperatura. Como el calor entra en la
base de la aleta por conducción para luego disiparse por convección,
Si utilizamos la ecuación 2.58 y reordenamos,

En ciertas circunstancias el calor que disipa el extremo libre de la aleta o superficie extendida no es
insignificante y, en consecuencia, no todo el calor conducido a través de la base se disipa por la
superficie convectiva comprendida entre x = 0 Y x = L. En esas circunstancias la ecuación 2.59 puede
modificarse ligeramente para que tome en cuenta las posibles pérdidas de calor por el extremo libre,
agregando a la longitud física L un incremento de longitud ΔL = t/2. Es decir, con una longitud corregida
Le = L + t/2 en la ecuación 2.59. Por tanto,

Sin embargo, cabe señalar que la desviación en el flujo de calor calculado con la ecuación 2.60 en vez
de la 2.59 es menor de 7.6%, siempre que el parámetro ht/k adquiera un valor menor a 0.5. Por otra
parte, dada un área de perfil Ap = Lt en una aleta de sección transversal rectangular, la dimensión
óptima del espesor t puede determinarse como se muestra a continuación. En términos del área de
perfil Ap, el calor disipado puede establecerse mediante la ecuación 2.59 como:

Derivando esta expresión con respecto al espesor t e igualando a cero se obtiene:


Por consiguiente, el espesor óptimo t de la superficie extendida de área de perfil A p es:
2.7.3. Aletas circulares:
Considérese ahora una aleta circular como la que se muestra en la
figura 2.17, donde el espesor t de la aleta es relativamente pequeño,
de manera que la transferencia de calor por conducción se produce
sólo en la dirección radial. Mediante la ecuación 2.51 y definiendo la
diferencia de temperaturas e = T - T∞ se obtiene:

Donde:
Sustituyendo estas expresiones para el área A( r) y el perímetro P(
r) en la ecuación 2.63,

o
donde:

La ecuación diferencial 2.64 necesita dos condiciones de frontera


para determinar de manera única el perfil de temperatura en la
aleta. Como se mostró con anterioridad,

De manera similar,

La solución general de la ecuación de Bessel modificada


(ecuación 2.64) es de la forma

donde l0 se conoce como función de Bessel modificada de


primera clase y de orden cero, y K0 como la función de Bessel
modificada de segunda clase y de orden cero. La forma de estas funciones se ilustra en la figura
2.18; en la tabla 2.1 se muestran algunos valores.
Las constantes Cl y C2 pueden determinarse mediante las condiciones de frontera 2.65 y 2.66. Con la
primera de ellas,

Para aplicar la condición de frontera 2.66 debe diferenciarse primero la ecuación 2.67. Puesto que:
;
que se obtiene:

En consecuencia:

Las ecuaciones 2.68 y 2.69 deben resolverse ahora en forma simultánea para determinar las
constantes Cl y C2. Ambas pueden solucionarse con facilidad reescribiéndolas como:

Al resolver las expresiones 2.70 y 2.71 se obtiene:

Sustituyendo estas constantes en la ecuación 2.68 se obtiene el perfil de temperatura como:

El calor que disipa la aleta puede determinarse mediante la ley de Fourier de conducción de calor y la
ecuación 2.72 para el perfil de temperatura; es decir,

2.7.4. Aletas rectangulares de perfil triangular:


Como segundo ejemplo de superficies extendidas con sección transversal variable, considérese ahora
una aleta de perfil triangular cuyas dimensiones se muestran en la figura 2.19. Este tipo de aleta disipa
más calor por unidad de peso que la de sección transversal constante. En este caso, como se observa
en la figura, es más conveniente colocar el origen de la coordenada x en el extremo libre de la aleta.
La distribución de temperatura puede obtenerse utilizando de nuevo la expresión general de la
ecuación 2.51 definiendo e = T - T∞ Esto es:
Si analizamos la geometría de la aleta, vemos que el área A(x)
de conducción de calor está dada por la expresión:

De manera semejante, si se supone que el espesor es muy


pequeño en comparación con el ancho de la aleta:
Al sustituir estas relaciones en la ecuación diferencial 2.74 se obtiene:

Puede demostrarse que la solución general de esta ecuación diferencial es de la forma:

Se deja al lector esta demostración. Puesto que la función de Bessel modificada de . segunda clase y
de orden cero K0 tiende a infinito cuando su argumento tiende a cero, la constante C2 debe ser
idénticamente igual a cero, ya que la temperatura debe ser finita en toda la aleta, incluido x = 0. Por
tanto,

Debido a que en la base de la aleta (x = L) la temperatura es igual a T0,

El calor que se disipa puede evaluarse una vez que se ha determinado el perfil de temperatura.
Mediante la ley de Fourier y la ecuación 2.77,

Las geometrías que se han explicado hasta ahora son sólo algunos ejemplos de la variedad de formas
que pueden tener las superficies extendidas. La selección de una forma particular por parte del
ingeniero no sólo requiere un análisis detallado de la transferencia de calor, sino también la evaluación
del costo, espacio disponible, factibilidad de manufactura, materiales, etcétera.
2.7.5. Eficiencia de las aletas:
Cabe recordar que la resistencia térmica a la convección en una superficie de área A disipando calor
hacia un fluido es igual a l/hA. Sin embargo, al agregar una superficie extendida no sólo se incrementa
la superficie de transferencia de calor, sino que también introduce una resistencia a su conducción
mediante el material que se aumentó. Para evaluar el comportamiento de una superficie extendida es
necesario tener en cuenta la caída inherente de temperatura a lo largo de la aleta, puesto que no toda
la superficie se encuentra a la temperatura de la base y, por consiguiente, no toda tiene la misma
capacidad de transferencia de calor por convección. Para realizar esta evaluación se define la
eficiencia de una aleta como el cociente del calor disipado en realidad, sobre el calor que la misma
aleta podría disipar si toda su superficie estuviera a la temperatura de la base; esto es,

En el caso particular de una aleta de sección transversal constante como la de la figura 2.14, donde
las pérdidas de calor por el extremo libre son despreciables,

Sustituyendo las ecuaciones 2.59 y 2.80 en la 2.79 se tiene que:

Debe observarse que la eficiencia de la


aleta alcanza su valor máximo en el
caso trivial en que su longitud es igual
a cero, es decir, cuando no existe; o,
en general, cuando mL es igual a cero.
En las figuras 2.20 y 2.21 se muestra
la variación de la eficiencia de una
aleta para varias geometrías. Con
estas gráficas puede calcularse
fácilmente el calor que se disipa una
vez que se conoce la configuración
geométrica. Otras gráficas para
determinar la eficiencia de aletas con
geometrías distintas se muestran con
detalle en Ozisik (1993).
Conclusión
Esta unidad comprendimos el concepto de resistencia térmica y sus limitaciones, y desarrollar redes
de resistencias térmicas para problemas prácticos de conducción del calor;
Se vieron ejemplos de conducción de calor en estado estacionario en los que intervienen
configuraciones geométricas rectangulares, cilíndricas o esféricas de capas múltiples;
Se logro comprensión intuitiva de la resistencia térmica por contacto y de las circunstancias en las que
puede ser significativa. Así mismo se logró Identificar las aplicaciones en las que realmente el material
aislante puede incrementar la transferencia de calor
Se logro saber cómo analizarlas superficies con aletas y evaluar con cuánta eficiencia y efectividad las
aletas mejoran la transferencia de calor.
Bibliografías:
Manrique Transferencia de Calor 2ed.pdf 37-91 pp.pdf
Anexos:

También podría gustarte