Hace una cronología de cómo nace el psicoanálisis.
Nace en el siglo XX, aparece como algo nuevo en el mundo a partir de la obra “interpretación de los sueños” en 1900. El psicoanálisis nació en un terreno estrictamente delimitado. Lo relacionado con lo mental se lo atribuía a los filósofos, místicos, curanderos, etc. En consecuencia Freud decía que también padecía la terapia patológica, no tenía aun una teoría cerrada para explicar la neurosis. Surge un cambio en los años 80 y 90, un cambio en el contexto debido a la aparición del fenómeno del hipnotismo. Empieza a ser reconocido porque era autentico, no era similar a ningún otro método. A partir del hipnotismo se podían aprender dos cosas: había alteraciones somáticas que eran activadas por determinadas causas. Si la persona se sentía mal emocionalmente desarrollaba síntomas. La segunda enseñanza que dejaba el hipnotismo era que la conducta de los pacientes producía la impresión de que había causas que producían esos síntomas. La hipnosis servía para saber que lo que causaba esos síntomas. Hubo dos personas que influyeron en el surgimiento: El primero fue Charcot: hizo una suposición en unos experimentos donde decía que había parálisis que eran provocadas por un trauma. El trauma, que podría ser un accidente, alguna vivencia fuerte, ideas desconcertantes o cualquier cosa que provocara angustia, provocaría histeria. Por medio de una sugestión Charcot pone a prueba lo que planteaba con respecto a la histeria. Janet continúa con los estudios de Charcot. Sigue con la hipnosis. Janet y Charcot son los únicos 2 que van a influir con respecto al psicoanálisis. Freud sin embargo se enlazaba más con Breuer para estudiar con él el caso de Anna O, que era su paciente. Breuer abandona el caso pero Freud continua queriendo perfeccionar la técnica. Freud renuncia a la hipnosis por varios motivos. No podía hipnotizar a todos, otro motivo era porque los resultados no terminaban de satisfacerlo, y porque después de un periodo de tiempo los síntomas volvían, además los pacientes se volvían muy dependientes del médico. El abandono de la hipnosis significaba un nuevo comienzo con otra técnica. Se la sustituye por la asociación libre, que consistía en decir todas las ocurrencias, así sean involuntarias y sin sentido. Todo lo que se le ocurra al paciente sin importar que sean impertinencias o cosas desubicadas. No aportaba los elementos olvidados pero si ciertas alucinaciones para interpretar lo que quería decir el inconsciente. Así la asociación libre y la interpretación lograban el mismo resultado que con el hipnotismo. Crea la teoría de la represión, diciendo que todas esas objeciones que son límites para el análisis y para seguir con la interpretación son manifestaciones de la resistencia. Para añadir, otro motivo de resistencia es cuando se reprime un estado anímico o síntoma por uno que pueda ser aceptado socialmente o cuando algo causa una angustia extrema y uno no recuerda ese hecho, esto sucede debido a que recordarlo provocaría muchos malestares.
Una simple aproximación a Freud: Una guía para explicar de forma sencilla los descubrimientos de Sigmund Freud y los principios de la psicología profunda