Pesadilla1

B
lanca iba caminando por una calle obscura y sucia los charcos que se formaron con la lluvia
de dos horas antes hacían que la calle estuviera más fría que de costumbre confundida
supuso que era bastante tarde por la oscuridad empezó a escuchar pasos detrás de ella la
piel se le hizo de gallina e incapaz de voltear empezó a correr sintiendo los latidos de su
acelerado corazón giró a la derecha y entró a un callejón un gato sucio y tuerto saltó a sus
pies haciendo que Blanca soltara un grito temerosa del animal corrió desesperada por el callejón justo
cuando sentía pasos más cerca de ella vio una casita al final con una luz que se asomaba por debajo
de la puerta una luz tan brillante que no parecía formar parte de esa horrorosa escena Blanca corrió
hacia la puerta y sin pensar la abrió Adentro se encontró en un pequeño cuarto forrado con madera
estaba iluminado por velas colocadas en el piso no había muebles ni cuadros ni espejos sólo es un
cuarto vacío pensó Blanca pesar de que no había viento alguno una a una la llama de las velas
comenzó a apagarse incapaz de moverse Blanca se quedó a unos centímetros de la puerta lista para
escapar si fuera necesario una figura del tamaño de un niño apareció al centro del cuarto debido a la
repentina oscuridad Blanca no pudo ver lo que era respiró profundamente y esperó -Bienvenida- dijo
al fin el niño con voz tan chillona como si dentro tuviera al gato que antes había visto Blanca la chica
se pegó a la puerta pero al intentar buscar el picaporte no encontró nada la puerta había desaparecido
No te preocupes dijo la figura la salida está al final de cuarto mi nombre es Gor soy un enano y me
alegra que hayas decidido venir a visitarme hace tiempo que te observo y debo confesarte que no me
agradas Blanca no supo que decir la figura había dicho que no le agradaba lo cual en ese momento
la preocupó porque no sabía si la dejaría ir el enano hizo un chasquido y la luz regresó las velas
brillaban de nuevo Estos son mis trofeos dijo el enano al cual ahora Blanca podía observar claramente
El enano no medía más de 1.20 m tenía las orejas puntiagudas y una nariz ganchuda demasiado afilada
su pequeño ojo amarillo tenían un destello de maldad reflejado en su cara llena de arrugas su otro ojo
era rojo y más tenebroso que el primero y su apariencia era el de un cilindro tenebroso disculpe señor
Gor me he atrevido a entrar a su casa porque estoy perdida por favor déjeme ir dijo Blanca con un
hilo de voz desafortunadamente no puedo pequeña Blanca palideció toda mi vida he odiado a los
mortales que aprenden y saben o creen saber desprecio a aquéllos muchachos que les gusta estudiar
cada noche elijo a uno para traerlo a mi casa y hacerle una serie de pruebas si las pasan pueden irse
si no se quedan conmigo te presento a mis trofeos con su dedo puntiagudo el enano señaló al rededor
del cuarto fue cuando Blanca se dio cuenta de que estaba rodeada de cabezas enmarcadas en cuadros
grabados con texto de español matemáticas historia física cabezas de niños colgadas en las paredes;
cabezas sin ojos o con la boca cosida; Blanca comenzó temblar incontroladamente las manos le
sudaban tanto que caían gotas de sus dedos se abstuvo de gritar por temor a que el enano le cosiera la
boca dispense señor Gor ¿a usted no le gustan los muchachos que les gusta estudiar? Por supuesto
que no todos deberían estar más preocupados por su apariencia y ser populares en las redes sociales
eso sí que es importante Perdón señor Gor pero yo no soy muchacho Gor estalló en cólera cada vez
que hablaba se daba cuerda a él mismo escribe qué piensas haya contestado Gor a Blanca satisfecho
con su perorata y aún con espuma en la boca Gor balbuceó ahora te dejo para que inicies ahí
señalando y apareciendo un escritorio una silla computadora calculadora lápiz y mucho papel hay lo
necesario Gor desapareció dejando en donde se encontraba hace un instante un pergamino levitando
vaya computadora pensó Blanca bueno las de mi escuela no están mejor y empezó a leer el pergamino

1. Separa el texto con signos de puntuación y en párrafos.

2. Escribe qué crees decía el pergamino, piensa en tareas, ejercicios, problemas, actividades
para tus alumnos.

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Idea original de Meztli Citlalli García Michel (Ensema) maestra de matemáticas en servicio.