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la t

INAUGURACION DE LA
"ESCUELA ROSA PEÑA".
El día 13 de Noviembre de 1930, en el barrio de
la Chacarita, se llevó a cabo la inauguración oficial
de la "Escuela Rosa Peña" cuyos vecinos se habían
reunido en Comisión presidida por el comi-sario de
la quinta Sección, Señor Toribio Cabrera,y habían
gestionado ante el Consejo Nacional de Educación el
cambio de nombre de la "Escuela número 611" que
allí funcionaba.
El acto de la inauguración resultó solemne y
brillante, acudiendo a la fiesta su excelencia el
Ministro de Justicia, Culto e Instrucción Pública,
doctor Justo P. Benítez, el Director de Escuelas,
señor don Ramón J. Cardoso y todo el personal del
establecimiento educacional y numeroso público dis-
tinguido.
En el momento de la consagración, cuyos pa-
drinos fueron el Ministro de Justicia y la distinguida
dama, ex-alumna de la ilustre matrona Rosa
Peña,doña Emilia Recalde de Recalde, la banda de
música de la Policía ejecutaba el siempre
emocionante Himno Nacional.
En el acto de la apertura de la fiesta se pronun-
ciaron los siguientes discursos:

DEL DIRECTOR GENERAL DE ESCUELAS.


DON RAMON J. CARDOSO.

Señor Ministro:
Ayer V. E. tuvo oportunidad de visitar una de
nuestras principales instituciones de enseñanza: la
escuela Normal de Profesores "Presidente
Franco".V. E. ha podido, así, ver que ella funciona
en el corazón de la Capital, en una hermosa casa
cons- truida ex-profeso y que a ella acude la flor y
nata de nuestra juventud para prepararse para la
vida.
Hoy llega V. E. a esta escuelita, que funciona
en las periferias de las gentes de trabajo, de los obre-
ros que con el sudor de su frente y la fuerza de los
músculos, luchan por el engrandecimiento material
de la Nación.
Ambas instituciones, materialmente, forman
dospolos opuestos: allá la grandeza, aquí la pobreza;
allá el confort, aquí las necesidades. Sin
embargo,cuanta grandeza en esta humildad; cuanta
impor- tancia en esta modestia. La rosa que ufana
por su color y esplendor, levanta orgullosa su cetro
en unjardín no es más perfumada que una Violeta
ocultaen un rincón del mismo. Todas las escuelas
tienensu grandeza moral: ella no depende de
palacios nide mármoles. Para mí una escuelita que,
perdida en un recoveco de la ciudad o del campo,
Se ocupaen dar luz a las conciencias oscuras o en
redimir almas, es aún mucho más grande que la que
se desenvuelve en medio de las comodidades. Y la
maestra que enseña en medio de la pobreza y de
lamodestia, merece más consideración de las auto-
ridades y del pueblo.
Por eso, señor Ministro, doy suma importancia
a este acto; porque la "Escuela Rosa Peña" está
prestando incalculable servicio a la cultura nacional
y a la Humanidad. Cuando hace unos años visité este
barrio de la Chacarita, cuando vi la vida que en él
palpita cuando me enteré de que a estos hijos del
dolor se leprivaba de la luz, resolví abrir esta
institución. Y hay que conocer los efectos morales
de ella. Pareciera que el barullo de los niños reu-
nidos en torno de la maestra, el eco del alfabeto y
del Himno Nacional que, diariamente, los niños
entonan, hicieran nacer en el alma de sus vecinos
el amor a la suavidad. Los vecinos son buenos y
respetuosos con la institución; la rodeanconsu cariño
y creo que al conjuro de la maestra buena, hasta
los crímenes se alejaron.
Seguramente para algunos, el nombre de
"RosaPeña" no está bien en este lugar; creerán que
tan ilustre dama merece otra escuela, otro edificio,
otro ambiente. Y para mí está bien. Para mi es sim-
bólica la denominación. Doña Rosa Peña al
terminarla gran guerra, ante las ruinas aun
humeantes de laPatria, abandonó las delicias de
Buenos Aires paravenir con su diploma de maestra a
sembrar el alfa-beto, trabajar por la cultura de sus
hermanos. Pre-firió la miseria de Su patria
destrozada a la grandezade Buenos Aires; quiso dar
la educación a los niñosdesu país. Pues, bien, señor,
aquí está el simbolismo: su nombre tutelaráa esta
institución y al conjuro de su recuerdo de patricia
que amó a los niños, la luz penetrará en la
conciencia de los hijos de estos obreros, de estos
hombres de trabajo y salvará de la ignominia, dela
ignorancia a una gran cantidad de almas dignas de
nuestro cuidado.
Como prueba de la influencia moral de la "Es-
cuela Rosa Peña" tenemos también la
inauguraciónde la "Merienda" que los vecinos
costean y propor- cionan a los niños. Es el primer
caso que ocurre, esto en toda la República. Yo
deseo que su ejemplo sirva como modelo.
Al dejar inaugurados el nombre y la
"meriendaescolar" agradezco a V. E. la asistencia, a
las dis- tinguidas damas presentes, a los vecinos y a
la Comisión Escolar por su entusiasmo y
abnegación.

DE LA DIRECTORA DE LA "ESCUELA ROSA


PEÑA" SEÑORITA TOMASA GINES
RIQUELME

Señoras y niños:
Obedeciendo a un pedido unánime de la Co-
misión Pro-Escuela número 611 "Rosa Peña" y
delos vecinos de este barrio para recordar a la
ilustreeducacionista Rosa Peña de González en este
acto, cábeme el alto honor de presentar el retrato que
en memoria de sus obras loables se le ha dedicado
en este humilde lugar, para servir de guía a esta
escuela, que usurpa el derecho a otra categoría
más ele-

vada para Ser llamada con el nombre de "Rosa


Peña", por tanto confío en la niñez y población
deeste barrio, que sabrán responder a dicha desig-
nación, honrando con la buena conducta, la dedi-
cación a los estudios, la memoria de la más
generosaeducacionista que ha tenido el Paraguay.
En la historia de la educación nacional ocupa el
primer lugar el nombre de Rosa Peña. En su
tiempoera querida y estimadísima por sus virtudes,
su grancariño a la tierra que la vió nacer. En el
presente su nombre constituye una reliquia que
veneran sus amigas y ex-alumnas que no pueden
olvidar su gran obra de regeneración, alumbrando
inteligencias,formando caracteres y dando ejemplos
de acrisolada
virtud.
Nació en la ciudad de Asunción del Paraguay
el 30 de Agosto de 1843. Descendía de una
familiadistinguida, de doña María Rosario Guanes y
de don Manuel Pedro de la Peña, quedando
huérfanade madre desde temprana edad, se
trasladaron a Buenos Aires y siguió sus estudios en
el Colegio de Huérfanas de la Merced a Cargo de
la Sociedad de Beneficencia. En este colegio recogió
el tesoro de luces, sobresaliendo entre las primeras
alumnas.
Permitióle también el Colegio de Huérfanas
desenvolver su noble vocación al magisterio; ese
deseo generoso de dirigir todos nuestros afanes y
todos nuestros esfuerzos, hacia determinada acti-
vidad en la vida, ese amor, en una palabra, irresis-
tible hacia una obra, la obra augusta de la edu-
cación. Consagróse a los deberes del profesorado,
distinción a que se hizo acreedora, ejerciéndola con
celo y perseverancia incansable durante cinco años,
en un colegioa cargo de laSociedad de Beneficencia.
Muy pronto consiguió el título de Profesora Normal
y dirigió una de las escuelas que fundó el gran
Sarmiento, el cual tuvo siempre para ella desde
entonces, un aprecio muy grande, y no obstante
los atractivos que para ella tendría necesariamente
la gran metrópoli del Plata y el brillante porvenir
que le brindaba, ella se sintió atraída por la nece-
sidad de atender al remedio de las desdichas de su
patria, a la cual se debía y a ella se vino en los
momentos que puede decirse quedaba nuestro país
en el áspero camino de su reconstrucción.
Terminada la guerra, que dejó en ruinas
alParaguay, en esos días luctuosos, sombríos, en que
todo era destrucción, miseria y despoblación, vino
a su país natal con deseos de dar a su amado Para-
guayel pan del espíritu por medio de la escuela,
empezando con un plantel de jóvenes de las mejores
familias, que inspirándose en un alto ideal, después
serían las llamadas a difundir la instrucción por
todas partes.
La escuela de niñas que funcionó después de la
guerra, se ubicó en la Casa de la Calle Yegros y Co-
ronel Bogado, fundada y organizada por ella y
subvencionada por la Municipalidad, tuvo el carácter
de verdadera escuela normal de la cual salieron
lasprimeras preceptoras, muchas de ellas prestaron
susservicios a la instrucción pública. Las tres
primeras egresadas con diplomas de preceptoras, el
día 31 de Enero de 1879 fueron las Señoritas
Joaquina Machain, Susana Dávalos y Rafaela
Machain.
El doctor Cecílio Baez, Rector de la Universidad
en su notable"Resumen de la Historia del
Paraguay,"página 208, Cap. de la Instrucción
Pública, dice:
“ La SeñoraRosa Peña de González fundó uncolegio
“ de niñas que tuvo un gran crédito. La señora
“ de González era una excelente educacionista,
hizo“ sus estudios en Buenos Aires. durante los
últimos“ años de la dictadura de López".
El mismo doctor Baez en luminoso
artículopublicó lo siguiente: "Por lo excepcional de
la época “ que transcurrió de 1870 a 1880, notable
fué la “acciónsocial que doña Rosa Peña ejerció
en el “ país, puesallá inició la regeneración de la
familia “ paraguaya vilipendiada por el régimen
del despo-
" tismo. Matrona de relevantes dotes personales,
" no sólo supo edificar su propia casa, sino tambien
" el desmantelado hogar de la patria, educando a la
" juventud desamparada e influyendo en el ánimo
" de su esposo, Siendo este Ministro de Estado,
" para lanzar el decreto de 1883 por el cual se creaba
" veinticuatro escuelas de niñas en la campaña".
Larga Sería la enumeración de las
circunstanciasque hicieron de esta notable
educacionista una fi- gura popular y amada de sus
discípulas que veían en ella, no sólo a la maestra
competentísima, sino a la educadora cariñosa
empeñada en elevar sus espíritus con consejos
sanos y prudentes. Así, su obra, además de ser
propiamente educacional, fué altamente social,
resultando ella misma como modelo de madres y de
esposas al frente de un hogar sin tacha, como dama
llena de distinción porla afabilidad de su trato y la
elegancia de sus mane-ras, como la gran señora, en
fin, que llevaba a susjóvenes discípulas por caminos
que habían de con-ducirlas a ser honor de la culta
sociedad asunceña.
Casada con don Juan G. González, el cual ocupó
los mas altos cargos, incluso la Presidencia de la
República, se le ofrecieron infinidad de ocasionesen
que fueron puestas a prueba el valor de su inte-
ligencia y el temple de su carácter. Como muestra,
merece, recordarse que ella fué quien presidió la
Comisión de Damas que agasajó a la Delegación
Uruguaya que vino a devolver los trofeos de la
guerra el 30 de Mayo de 1885 con cuyo motivo,
en su casa hubo un gran baile que fué un aconte-
cimiento social. Fué entonces que, habiéndole entre-
gado los señores uruguayos $10.000 oro como dona-
tivo a los pobres del Paraguay, particularmente dela
Asunción, la señora de González les sugerió la idea,
por ellos aceptada y aplaudida, de destinar esa
suma a la fundación de un asilo de mendigos, y
ese es el origen del que funciona en esta
Capital.Tambiénmerece recordarse que presidió la
Comisiónde señoras, constituida para propiciar la
erección de un monumento a los próceresde la
independencia,cuya piedra fundamental fué
solemnemente colocada en la plaza Uruguaya
durante la presidencia del señor González, así como
que coadyuvó eficazmentea que se edificase el
templo de la Encarnación, decuya inauguración fué
madrina.
Merece recordarse que cuando el señor González
presidió la comisión para transportar los restos del
gran Sarmiento a Buenos Aires, la señora Peña de
González, obsequió con una bandera paraguaya para
cubrir el féretro.
En fin, esta meritoria e ilustre educacionista
paraguaya,que después desacrificiosy
perseverancia,abandonó nuevamente Su suelo natal,
se retiró a BuenosAires y murió el día 8 de
Noviembre de 1889a la edad de 56 años.
Aprovecho esta oportunidad para expresar mi
más profundo agradecimiento a todos los colabo-
radores de esta institución y confío una vez más
que desde hoy en adelante se hará más y cada
vezmejor, por la niñez, iluminada por las virtudes de
la más grande educacionista que tuvo el
Paraguay:"Rosa Peña".
DE LA MADRINA DE LA ESCUELA Y EX-
ALUMNA DE ROSA PEÑA, SEÑORA
EMILIARECALDE DE RECALDE

Señor Ministro:
Señor Director General de Escuelas:
Señoras:
Señores:
Ante todo, permítaseme agradecer la distinción
que se me ha dado nombrándome madrina de esta

escuela. Nada para mi tan grato como asistir a este


acto en que se rinde un público homenaje consagra-
torio a la memoria de una educacionista
meritoriacomo la que fué mi querida maestra Rosa
Peña deGonzález, cuyos grandes servicios a la causa
edu- cacional del Paraguay revivído, reclamaban
hace tiempo, este reconocimiento de la posteridad.
Yo tuve la dicha de escuchar las lecciones dela
maestra cuyo nombre estamos evocando, y por eso
puedo atestiguar que fué una educacionista entoda la
extensión del vocablo, una verdadera precur-sora en
el reflorecimiento del Paraguay por la ense-ñanza.
Porque Rosa Peña no se limitaba a
inculcarconocimientos,a instruir, hablando
propiamente. Ella iba más lejos, afanándose por
modelar el carácter y la moral de sus educandos,
valiéndose para esto de la palabra y el ejemplo.
Porque la vida toda de Rosa Peña fué un de-
chado de rectitud, de altruismo, de desinterés y
deabnegación, que eran como los focos que hacían
irradiar sus virtudes y sus merecimientos, como edu-
cacionista entusiasta que fué, y como gala y
adornode la cultura y de la sociabilidad paraguaya.
Al hacer votos por la prosperidad de esta escuela
que desde hoy ostenta con orgullo el nombre querido
y respetable de una indiscutida gran maestra para-
guaya, pido a Jesús que bendiga siempre a los niños
que en ella se eduquen dándoles un corazón puro
para que sean útiles a sí mismos, a la sociedad y a la
Patria.
He dicho.

Después de los discursos se sirvió un espléndido


lunch a la concurrencia y el suculento plato criollode
soóyosopy a los niños, que desde ese día aque- daba
también inaugurado para ser servido diaria- mente y
que será costeado por la Comisión Pro "Escuela
Rosa Peña" y los vecinos del barrio de laChacarita.
Además de los nombrados, concurrieron algunas
de las ex-alumnas de Rosa Peña: Rafaela Machainde
Guanes, Virginia Battilana de Gatti, Joaquina y
Asunción Machain y Clara T. de Onetto; y las
señorasSara Miltos de González Peña,María
Decoudde Legal, Amelia Peña de Battilana, Corina
Decoudde Costa, Delia Recalde de Mernes, Mary
González Miltos de Grillón, María L. de Cazatti,
Dionisia A.de González y las señoritas: la Directora
de la "Es- cuela Rosa Peña", Tomasa Ginés
Riquelme, Virginia Ofelia Gatti, Chela González
Miltos, Rosenda Ins-chaustti, Toribia Cabrera,
Laura y Delia Correa,
Asunción Vera, Valeriana Agüero, Celmira Mazó,
Evarista Giménez, Hortensia Amada, Eusebia Ser-
vin, María Onetto, Andrea Arias, Ramona
Gaona,AsunciónRodríguez, Estanislada Cuevas,
Elena Sán-chez, Carmen Melgarejo, Rosa
Melgarejo, ManuelaOnetto, Claudia Benítez,
Edelmira Ginés, Elvira Ginés Zelada, Catalina
Giménez Britos y los señores Héctor Decoud,
Toribio Cabrera, Rufino Recalde,doctor J. Martínez
Berges, Mario Aguilera, Ale- jandro Zarza, J. H.
Romero, Luis B. Peña, Blas
Céspedes,HumbertoRiveros,Francisco Oviedo, Cris-
tóbal Pérez, Francisco Suribí Peña y todos los
niños de la Escuela.

ECOS DE LA PRENSA
_______
“El Diario”. Asunción, Noviembre 11 de 1930.
BAUTIZO DE UNA ESCUELA
Significativo acto que se llevará a cabo el
Jueves en la Chacarita
Con una interesante fiesta que comprende un
selecto y atrayente programa, será celebrado,
pasadomañana, jueves a las 9 a. m., en la Escuela
N°. 611de la Chacarita, un acontecimiento de
simpática trascendencia, consistente en la
inauguración del nombre de la Escuela.
Dicho acto que tendrá el Significado de un
homenaje y una consagración de la obra de una
meritoria educacionista, la Señorita Rosa Peña, cuya
será la nueva denominación de la institución, estará

prestigiado por la asistencia del Director General


de Escuelas y altas autoridades educacionales.
El profesor Ramón I. Cardoso dará en ese acto
una conferencia, explicando el significado del home-
naje.
La banda de Policía amenizará el interesante
acto,organizado porla Comisión de Fomento
Escolardel barrio que preside el señor Toribio
Cabrera.
Losasistentes serán obsequiados con un almuerzo
criollo, en el que figurarán viandas de la cocina
tradicionalparaguaya,comosoóyosopy, coserevá,
etc.confeccionadas por las manos hacendosas de los
alumnos.

________

“El diario”, Asunción, Noviembre 13 de 1930.


UNA SIMPÁTICA FIESTA ESCOLAR
El bautizo oficial de la “Escuela Rosa Peña”

Cumpliéndose plenamente nuestros augurios, dió


lugar a un interesante acontecimiento de lucidos
contornos, la fiesta organizada para celebrar el
bautizo de la Escuela N°. 611, "Rosa Peña que se
llevó a cabo esta mañana en el local de la misma
institución, sita en la calle Sebastian Gaboto Nº. 409
y 411.
El alumnado de dicha escuela pública
estáconstituido casi íntegramente por niños pobres
delpintoresco barrio de la Chacarita, circunstancia
que contribuyó a hacer más expresivo y simpático el
acto de esta mañana.
El Director General de Escuelas, profesor Ramón
I. Cardoso, dió una interesante Conferencia que
fuémuy aplaudida por la numerosa concurrencia.
La banda de Policía amenizó el acto que se
clausuró con la visita a las distintas dependencias
de la Escuela y con un almuerzo criollo, en el quelos
comensales tuvieron ocasión de saborear los
sabrosos condumios elaborados por las niñas del
establecimiento de acuerdo a un menú exclusiva-
mente nacional, donde figuraron platos
tradicionalesde la cocina paraguaya.
Cabe felicitar por el éxito obtenido a la Direc-
tora y maestras de la “Escuela Rosa Peña” y a los
miembros de la comisión de Fomento Escolar del
Barrio.

“El Orden”, Asunción, Noviembre 14 de 1930.


“Escuela Rosa Peña”
Con una selecta concurrencia se llevó a cabo
ayer la inaguración de la “Escuela Rosa Peña”.
El señor Ministro doctor Justo P. Benítez y la
señora Emilia R. de Recalde actuaron como padrinos
de dicho instituto. El Director General de Escuelas,
don Ramón I. Cardoso pronunció un discurso en
el acto de la apertura y la señorita Tomasa Ginés,
directorade la escuela también hizo usode la palabra.
Muy bien atendido resultó el soóyosopy que fué
servido a los niños, lo mismo que el presentado a
los concurrentes. Se brindó por el éxito de la tra-
dicional escuela, esperando que muy pronto serán
una realidad las esperanzas de edificar un colegio
como merece el nombre de la educacionista men-
cionada.
El señor ministro nombró presidenta de la Co-
misiónescolar ala señora Asunción Peñade Battilana,
designación que fué calurosamente aplaudida. Dicha
comisión se encargará de atender los trabajos que
requiere el funcionamiento de la nueva edificación
para la escuela.

La banda de música de la policía amenizó el


acto,que fue una elocuentedemostraciónde homenaje
rendido a la niñez y a la educadora Rosa Peña.
________

“El Diario”, Asunción, Noviembre 15 de 1930.


“ESCUELA ROSA PEÑA"
Telegramas recibidos con motivo de la inauguración
del establecimiento
La Señora Emilia R. de Recalde, con motivode la
inauguración de la escuela "Rosa Peña", enhomenaje
a la educacionista paraguaya de estenombre, ha
recibido el siguiente telegrama de laseñora Celina
González de Calzada:
“Villa Calzada, Noviembre 15 de 1930.
Emilia R. de Recalde
Asunción.
Intimamente agradecidas por cariñoso homena-
je a nuestra querida madre, rogámosle sea intérprete

de nuestros sentimientos ante demás distinguidas


damas.
Celina González de Calzada

________
Villa Calzada, Noviembre 15 de 1930.
Ramón J. Cardoso
Director de Escuelas, y altas autoridades
Educacionales
Asunción
Intimamente agradecidas por cariñoso home-
naje tributado a nuestra querida madre.
Laura González Peña de Carvalho, Celina Gon-
zález Peña de Calzada, Juana González Peña.

ALGUNAS DE LAS DISCIPULAS


DE ROSA PEÑA, SACADAS DEL LIBRO
DE NOTAS DE SU ESCUELA
Manuela Abente, Ramona Ayala, Juana Alonso,
Andrea Acosta, Gabina Aponte, Rosalina Aguilera,
Petrona Aguilera, Furtuosa Acosta, Adela Aguilera,
Amalia Aquino, Rosario Acosta, Maria Agüero, Jo-
sefa Aponte, Sofia Aponte, Dolores Acosta, Santina
Acosta, Carmen Ayala.
Juana Bedoya, Dolores Bello, Luisa Bello,
María Bises, Malfisia Benegas, Elisa Benitez, Rosa
Benegas, Herminia Bello, Modesta Baez, Jacinta
Barbero, María Barbero, Rosenda Bóveda, Mer-
cedes Benegas, Teresa Bella, Delfina Berges, Ade-
lina Barrios, Petrona Baceti, María Barrios, Luisa
Bareiro, Juana Brizuela.
Silvia Cordal, Ramona Caballero, Petrona
Centurión Rosalina Collar, Carmen Cardoso, Ju-

lliana Cáceres, Constancia Carballo, Julia Candia,


Mercedes Coronel, Ramona Coronel, Adelaida Car-
mona, Juana Carrera, Adela Carrera. Emilia Ca-
rrera, Tomasa Coronel, Emilia Candia, Marcelina
Chaves, Revelación Centurión.
Susana Dávalos, Rosa Dåvalos, Amalia Do-meque,
Anuncia Datri, Amelia Datri, Albina Dá- lios, Irene
Degásper, Maria Decoud, Isabel Doldan.
Dolores Escobar, Filomena Encina, Petrona
Estigarraga, Julia Ensina, Eduarda Espíndola. Leo-
poldina Espíndola, Leona Elizeche.
Joaquina Falcon, Edelmira Falcon, Deidamia
Filisbert, Petrona Franco, Francisca Fernández,
Albertina Fernández, Delfina Franco, Eloisa
Franco,Angela F ernåndez, Rosa Franco, Mercedes
Fer- nández, Emerenciana Franco, Margarita
Florentin, Idalina Franco, Leona Ferreira.
Concepción Guanes, Dominga Guanes, Herme-
negilda Guanes, Angela Guanes, Petrona
González,Laura González Peña, Toribia Garay,
Amelia González, Josefina Gómez, Francisca
González, Fide-lina González, Elisa González, Juana
González, Tomasa González, Filomena González,
Damacia Gottarde, Juana Gavilán, Jacinta Gímenez,
Merce-des Gill, Petrona Garcia, Manuela Gomez.
Susana Iturburu, Celia Iturburu, Dolores Itur-
buru, Concepción Insfran, Tomasa Irigoitia,Edelmira
Iglesias.
Adelaida Jara, Carmen Jara.
Adelina Lopez, Hipólita Lescano, Elena Ligieri,
Leocadia Llanes.
Rafaela Machain, Joaquina Machaín, Asunción
Machain, Manuela Mendoza, Inocencia Muñoz,
Dolores Merlos, Ana Martinez, Maria
Martinez,Florentina Martinez, Antonieta Maidana,
Gavina Merlos, Antonia Morales, Juliana Monte,
Hersilia Mereles, Hipólita Montiel, María Mijor,
AscenciónMassi, Concilia Massi, Susana
Montepagano, Rosa Milessi, Emiliana Milleres,
Mercedes Mareque.
Leandra Nuñez, Juana Navarro, María Nifor.
Damiana Ortellado, Aurora O’ Leary, María
Oneto, Josefina Origgi, Juana Olivera, Emilia Ortiz,
Teresa Ovella.
Manuela Peña, Carmen Porta, Josefa Posa, Se-
gundina Pintos, Bernarda Porta, Francisca Portela.
Enriqueta Quiriani.
Emilia Recalde, Ema Recalde, Tomas Recalde,
Josefa Recalde,Bonifacia Ramos,Norberta Ramos,
Juana Ramos, Carolina Régis, Natividad Ramírez,
Concepción Rossi, Angela Ríos, Julia Ríos, Dolores
Roldan, Amalia Robledo, Jacinta Ramírez, Dejesús
Roa, Josefina Rivarola, Juana Rivarola, Zoila Ra-
mirez, Rosario Ramirez, Isabel Rondan, Dolores
Rondan, Eugenia Ramos, Ana Ruidias.
Dolores Sánchez, Quiteria Servin, Honoria San-
chez, Manuela Soler, Telesfora Sanchez, Sofia Sil-
guero, Hilaria Suares.
Lidia Tompson, Jorge Tompson, Gerónima
Troche, Josefa Troche.
Juana Urizar, Carmen Wasmosy.
Etelvina Velilla, Joaquina Villamayor, Victoria
Villamayor, Cantalicia Vera, Elisa Velazquez, Pabla
Valdéz, Petrona Velasco, Teodisia Villagra, Fer-
nanda Viera, Justa Vallovera.
Prudencia Zayas, Magdalena Zelada.

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