Está en la página 1de 4

ENSAYO SOBRE: DIMENSIONES BASICAS DE UN DESAROLLO

HUMANO INTEGRAL

Realizado por:
Valeria Bermúdez Fernández

Docente:

Luisa Fernanda Crane Zambrano

Ética
Asignatura:

Carrera:
Diseño Gráfico T.P
Semestre II

Corporación Escuela de Artes y Letras Institución Universitaria


DIMENSIONES BASICAS DE UN DESARROLLO HUMANO INTEGRAL
Hablar de desarrollo humano integral es entender que el hombre es un sistema integrado
formado por varios subsistemas, y que éste además, alcanza un desarrollo pleno cuando
logra desarrollar equilibradamente todas las dimensiones del ser humano (ética,
espiritual, cognitiva, afectiva, comunicativa, estética, corporal, y socio-política), en otras
palabras, resulta innegable la multidimensionalidad del ser humano, y su pleno desarrollo
solo se logrará cuando éstas se unen para lograr un razonable y coherente desarrollo
integral, es el trabajo de la educación plantear un proceso de formación integral para
alcanzar la plenitud del desarrollo humano.
Se puede afirmar que el desarrollo humano incluye el mejoramiento de un conjunto
interrelacionado de dimensiones, psicológicas, sociales, culturales a lo largo de toda la
vida, es un proceso integral, lo cual significa que los diferentes elementos del desarrollo
humano están interrelacionados y deben ser considerados como un todo.
El concepto sobre Desarrollo Humano, con lo cual se debería considerar diversos aspectos
que se relacionan con el desarrollo de una persona desde la fase embrionaria de la
gestación en el vientre de la madre, pasando por el nacimiento, hasta sus etapas de
crecimiento que de alguna manera las menciono Jean Piaget en su teoría del aprendizaje
Cognitivo. Dentro de las cuales, se encuentran: la etapa sensoriomotora, desde el
nacimiento hasta los dos años, la etapa preoperacional de 2 a 7 años, y la etapa de
operaciones concretas de los 7 a los 11 años, y por último la etapa de las operaciones
abstractas de los 11 años hasta llegar al adulto. Todo este proceso de crecimiento de la
persona, influye en su desarrollo como ser humano, desde luego que asume gran
importancia el núcleo familiar, social, cultural, económico y educativo en el entorno o el
lugar, en el cual interactúa en su etapa de crecimiento personal.
Todo lo anterior, hace parte de los procesos educativos del desarrollo humano, éstos
parten de la premisa elemental de la existencia humana como cuerpo, alma, y espíritu. Lo
que nos indica que, desde la concepción existencial, somos tres componentes integrados
en un ser. Nos diferencian de otros seres y nos otorga personalidad. Es finalmente lo que
nos entrega capacidad de decisión, autonomía y “libertad”, que es la base de la
trascendencia del existir, la cual al ubicarnos en el mundo adquiere razón de ser, cuando
nos relacionamos con los demás, cuando pensamos sobre las cosas, cuando
interactuamos, en fin, cundo vivimos y desarrollamos las dimensiones.
Se puede entender como desarrollo humano a lo que se denomina el proceso en que una
sociedad, a partir del desarrollo económico, mejora de manera integral las condiciones de
vida de sus miembros. El sistema educativo, y en especial la formación básica, debe dar
respuesta a un conjunto de necesidades formativas que luego serán fundamentales para
la adecuada integración y el eficaz desempeño en el ámbito laboral. Dichas dimensiones
son aspectos determinantes en el desarrollo del ser humano, en términos educativos
siempre se trata del ser y su integralidad, sin embargo, para efectos de su estudio, estas
suelen desagruparse conceptualmente, claro está sin olvidarse de la totalidad inseparable
que abarca la palabra integral.
La dimensión ética es la posibilidad del ser humano de hacer uso de su libertad, el poder
tomar decisiones, las cuales se regirán por principios que orientan su vida y que provienen
de su contexto social.
La dimensión espiritual se basa principalmente en la posibilidad de trascendencia del ser
humano, enmarcándose en creencias, conceptos, doctrinas, teorías o corrientes del
pensamiento; en búsqueda de sentido a su vida y a la existencia misma.
La dimensión cognitiva es la posibilidad que tiene el ser humano de aprender a nivel
conceptual la realidad que le rodea, analizando y formulando teorías e hipótesis sobre la
misma, de tal manera que no solo la puede comprender, sino que además interactúa con
ella pasa transformarla. Se refiere a las potencialidades del hombre como ser pensante y
capaz de buscar solución o respuestas a los diferentes aspectos de la vida. Se relaciona
directamente con la adquisición de conocimientos, el pensamiento lógico-matemático y la
producción literaria, con el fortalecimiento de las estructuras mentales que le permiten
conocer, conocerse y transformar la realidad.
La dimensión afectiva son las manifestaciones psíquicas del ser humano, que se extienden
al mundo de las emociones, sentimientos y la sexualidad, enmarca al hombre como ser
social en su formación integral, acordes a los estímulos externos e internos, culturales y
medioambientales.
La dimensión comunicativa son las potencialidades del hombre que le permiten formar su
personalidad a través de la representación de significados, su interpretación y la
interacción con otros. Es la forma de comunicación con los demás, consigo mismo y con el
medio, esta dimensión posee diversas formas para poder interactuar permitiendo al
hombre expresar y transmitir sentimientos, emociones, necesidades y pensamientos. No
menos importante que las anteriores la dimensión estética, al igual que algunas de las
anteriores es la capacidad de interacción consigo mismo y con el mundo, sin embargo,
esta lo aborda desde las sensaciones y la subjetividad que le permiten apreciar la belleza
de su interior y poder expresarla diferente, desde la base filosófica y conceptual de la
belleza.
La dimensión corporal tal y como lo enuncian algunos textos es la posibilidad del ser
humano de manifestarse a sí mismo “desde su cuerpo y con su cuerpo”, es la condición
física corporal del ser humano que le permite manifestarse con su cuerpo para construir
su proyecto de vida, ser consciente de su materialidad es fundamental para poder
desarrollarse física y motrizmente. Pudiera decirse que es la base de las demás
dimensiones, teniendo al cerebro como el órgano principal a partir del cual se configura el
desarrollo.
La Dimensión Socio-política es la capacidad desarrollada por los seres humanos al
interactuar con los otros, integrándose como ser comunitario y solidario en la búsqueda
de una mejor sociedad (justicia, equidad y responsabilidad social). El desarrollo de la
dimensión socio-política va orientado a la generación de autonomía, participación,
convivencia, asertividad, respeto compromiso ético y la democracia. Por lo tanto, en la
práctica educativa es preciso plantear cómo se está dando la relación educador-educando,
si se realiza a partir de una acción instrumental, centrada en los contenidos, desde una
mirada únicamente explicativa y objetiva de los fenómenos relacionadas con la ciencia, o
si existe un interés cognoscitivo por una comprensión recíproca, referida a la comprensión
de sí y del otro, buscando siempre un terreno común, de beneficio mutuo. En este
sentido, un pensamiento crítico y reflexivo sobre la educación en general, y en particular
sobre el proceso educativo y las prácticas que se llevan a cabo en la cotidianidad, con lo
cual se permite develar su intencionalidad.
De todo esto, se desprende un proceso educativo para el desarrollo humano, con el fin de
propiciar el diálogo con la cultura, con la multiculturalidad. Y es que, es necesario orientar
la diversidad cultural hacia una propuesta educativa global, una educación para la
ciudadanía que promueva la convivencia, la participación, la cohesión social, la inclusión,
estimulando el sentido de pertenencia como satisfactor de la necesidad de identidad. De
tal manera, que el educador sepa despertar en el estudiante la alegría de conocer y crear
de forma innovadora nuevos conocimientos. Por eso, el AMOR es la única y eterna base
sobre la cual se puede formar humanamente nuestra naturaleza.

También podría gustarte