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1) En un juicio de gusto puro, Kant menciona que el placer por un objeto va asociado al mero

juicio que se establece sobre su forma, independientemente de su adecuación a algún


concepto o independiente a su utilidad, (dicha utilidad supone un conocimiento previo o
entendimiento de su objetivo; cosa que resulta innecesaria en un juicio sobre lo bello, es
decir: un juicio de gusto.)
Es por ello por lo que dicho juicio de gusto (subjetivo) no se considera un juicio de
conocimiento (objetivo).

2) Lo bello: El juicio de lo bello es un juicio universal de gusto; esto quiere decir que es de
validez para todos. Es desinteresado, subjetivo y genera placer.
El juicio de lo bello o juicio de gusto, puede ser empírico (no se puede pretender que sea
válido para todos, aquí rige el principio de que cada uno tiene un gusto propio, según
Kant) y puede ser puro (se llaman también juicios formales o juicios de gusto de la
reflexión, y son según Kant, los únicos juicios de gusto genuinos; estos si son universales).
El juicio de lo bello esta gobernado por la facultad del gusto, ya que es simplemente
contemplativo, y no está ligado a ningún concepto ni se propone a ello.

 Ejemplo: Una pintura que nos causa gran placer, sobre la cuál somos indiferentes
de la existencia del objeto de esta representación, pero que no nos genera
emoción ya que la emoción es ajena a la belleza.

Lo bueno: Son juicios que se representan mediante un concepto como objeto de placer
general; el placer no es producido directamente del objeto o por su forma, el placer surge
de la utilidad de este objeto. Los juicios sobre lo bueno son lógicos, más no estéticos. Es un
juicio interesado y objetivo. Lo gobierna la facultad del querer por aquello mismo de que
se toma interés en el objeto: como cuando se halla satisfacción por su existencia, en el
ejemplo de la pintura se podría materializar en el caso de que se encontrara placer en la
pintura si esta retratara a un familiar al que se tiene profunda estimación

 Ejemplo: Una mesa a la cual le hace falta uno de los apoyos, sería una mesa en la
cuál se nos dificultaría realizar cualquier actividad (comer, escribir, posar objetos
sobre esta). Esta mesa la juzgaríamos como mala por ser contraria a su fin, a la
utilidad o uso que se presupone que debe tener la mesa. Este juicio no tendría
nada que ver con un juicio de gusto, ya que en estos el placer provocado por un
objeto no podría basarse en la representación de su utilidad.

Lo agradable: Es un juicio particular, fundado en un sentimiento privado, es decir que no


es para todo el mundo. Proviene de un interés subjetivo; no solamente gusta el objeto,
sino también su existencia. En este rige el principio, según Kant, de que cada uno tiene su
propio gusto. Este sería un juicio de gusto empírico. De igual forma que lo bueno; lo
agradable se encuentra gobernado por la facultad del querer y la satisfacción hallada no
solo en la representación del objeto, sino en la existencia de este mismo.
 Ejemplo: Alguien podría decir “El color verde es vivo y alegre”, mientras que otra
persona puede decir “El color verde es odioso y chillón”.

3) Kant dice “Belleza, es la forma de la finalidad de un objeto cuando es percibida sin la


representación de un fin” (p.79)

Según lo anterior, un objeto gusta por su forma; Kant menciona que el juicio de lo bello tiene una
finalidad meramente formal, es aquí cuando nos habla de la finalidad sin fin.

Esto quiere decir; que el objeto tiene un fin estético por el cuál es percibido, haciendo caso omiso
de su función, utilidad u otros aspectos de este. En otras palabras, la belleza es el fin del objeto,
que en sí mismo no tiene fin; por ello, dice Kant que en las artes el dibujo es lo esencial; este
domina por ejemplo sobre el color (ya que el color provoca emociones, de las cuales la belleza es
ajena), así como en la danza la composición es sobre lo cuál se establece un juicio de lo que es
bello o no.

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