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Sentencia Nº 117
Expediente : 272/2015-CA
CONSIDERANDO I:
Contra esta decisión, el propietario del vehículo, tipo camión, el 19 de marzo de 2015,
interpuso recurso de Alzada, que fue resuelto por la Autoridad Regional de
Impugnación Tributaria de Cochabamba, mediante Resolución de Alzada Nº
0506/2015, revocando la Resolución Administrativa Nº 008/2015, declarando prescrita
la sanción impuesta al medio de transporte, vehículo, clase camión, con placa de control
1197-KPI, contenida en la Resolución Sancionatoria.
I.1.2. Petitorio
Finalmente pide que este Tribunal, declare probada la demanda y revoque totalmente la
Resolución Jerárquica, disponiendo la nulidad de obrados, hasta la admisión del referido
recurso jerárquico, por haber sido planteado por una persona sin capacidad legal, en
virtud al poder genérico con el cual actuó a nombre de la Administración Tributaria o
caso contrario, se confirme la Resolución de Alzada, que determinó la prescripción de
ejecutar la sanción por contravención tributaria.
Decreto de admisión
Petitorio
CONSIDERANDO II:
2. De una lectura precisa del escrito de demanda, se identifican dos situaciones: a) que
el recurso jerárquico hubiera sido interpuesto por una persona que no tenía capacidad
jurídica para representar a la Administradora de Aduanas, en este acto administrativo en
concreto, toda vez que su poder era genérico y no específico y b) que el computo del
plazo, para resolver la solicitud de prescripción de ejecución de la sanción por
contravención tributaria, contenida en la Resolución Sancionatoria, debía resolverse en
virtud del art. 59 de la Ley 2492, sin modificación alguna, situación que no ocurrió en el
caso concreto, toda vez que la AGIT, aplicó para esta situación, las modificaciones
introducidas a dicho artículo, por parte de las Leyes 291 y 317 respectivamente.
2.1. Es evidente que el art. 198 del CTB, establece determinadas formalidades que el
recurrente debe cumplir a momento de interponer un recurso de impugnación
administrativa, como ser en el caso de autos un Recurso Jerárquico.
Con relación a una persona sea esta natural o colectiva, que pretenda activar su derecho
a impugnar, mediante apoderado, el parágrafo I, inciso b) del referido artículo dispone
que el recurrente debe identificar: “Nombre o razón social y domicilio del recurrente o
de su representante legal con mandato legal expreso, acompañando el poder de
representación que corresponda conforme a Ley y los documentos respaldatorios de la
personería del recurrente”.(Las negrillas son ilustrativas)
En el caso concreto, este Tribunal advierte que la Administración Aduanera del Interior
Cochabamba, adjuntó a su Recurso Jerárquico, que presentó ante la ARIT, el 7 de julio
de 2015, fotocopia legalizada del Testimonio de Poder Nº 284/2015, debidamente
protocolizado ante notaria de Fe Pública, el 19 de mayo de 2015, cursante de fs. 47 a 50
del Anexo 1, instrumento que acredita lo siguiente: a) Elizabeth Grageda Méndez de
Patiño, en su condición de Gerente Regional de la Aduana Nacional de Bolivia, otorga
Poder, Amplio, Suficiente y Bastante a favor de Diego Manuel Soria Guerrero, abogado
de la Unidad Legal de la Gerencia Regional de la Aduana Nacional de Cochabamba; b)
entre sus facultades del apoderado están: “…se apersone ante la Autoridad Regional y/o
General de Impugnación Tributaria …en todos los casos que afecten los intereses de la
Aduana Nacional con recursos de Alzada y/o recursos Jerárquicos.”
Teniendo presente que una norma jurídica contiene una descripción abstracta y genérica
de una determinada conducta o hecho, lo lógico es asumir que dicha disposición legal
únicamente se puede materializar aplicándola a un caso concreto, consiguientemente al
amparo del principio de accesibilidad y verdad material, no es coherente que una
persona colectiva, como es el caso de la Administración de Aduanas del Interior
Cochabamba, deba otorgar a sus diferentes representantes, un poder específico e
individual, mediante el cual se habilite al apoderado a interponer un recurso de
impugnación administrativa, como es en el caso concreto un Recurso Jerárquico, siendo
suficiente que el referido poder faculte al apoderado a interponer –reiteramos- en
nombre de la persona jurídica, ante la ARIT, Recurso Jerárquico, situación que la
Administración Aduanera cumplió, conforme se evidencia de la fotocopia legalizada del
Testimonio de Poder Nº 284/2015, en consecuencia no es evidente lo demandado por la
parte actora.
El art. 15.I de la Ley del Órgano Judicial, coherente con lo antes transcrito dispone: “El
Órgano Judicial sustenta sus actos y decisiones en la Constitución Política del Estado,
Leyes y Reglamentos, respetando la jerarquía normativa y distribución de competencias
establecidas en la Constitución. En materia judicial la Constitución se aplicará con
preferencia a cualquier otra disposición legal o reglamentaria.” (Las negrillas son
nuestras)
El art. 123 de la CPE refiere: “La ley sólo disponer para lo venidero y no tendrá efecto
retroactivo, excepto en materia laboral, cuando lo determine expresamente a favor de las
trabajadoras y de los trabajadores; en materia penal, cuando beneficie a la imputada o al
imputado; en materia de corrupción, para investigar, procesar y sancionar los delitos
cometidos por servidores públicos contra los intereses del Estado; y en el resto de los
casos señalados por la Constitución”.
La Ley 291, de 22 de septiembre de 2012, cuyo nomen juris es: “Ley de Modificaciones
al Presupuesto General del Estado”, la Disposición Adicional Quinta de esta Ley,
modificó el parágrafo III del art. 59 de la Ley 2492, respecto a la prescripción de la
ejecución tributaria, con el siguiente texto: “El término para ejecutar las sanciones por
contravenciones tributarias prescribe a los cinco (5) años”. Se aumentó un IV parágrafo,
que dispone: “La facultad de ejecutar la deuda tributaria determinada, es
imprescriptible”.
La Ley 291, hace otras varias modificaciones a los artículos 60, 154, 70, 162, todos del
Código Tributario Boliviano, pero la referida norma legal, no contiene una disposición
que de manera expresa haya dispuesto que la aplicación de estas modificaciones, que
hacen al Código Tributario, en especial, respecto al art. 59 de la Ley 2492, deba de
aplicarse de manera retroactiva.
Advierte este Tribunal que al igual que con la Ley 291, esta segunda Ley modificatoria
de la Ley 2492, tampoco contiene disposición expresa que haya dispuesto que dichas
modificaciones tributarias, deban aplicarse en forma retroactiva. Con relación a una
aplicación retroactiva tácita de estas disposiciones jurídicas, en mérito a lo previsto por
el art. 150 de la Ley 2492, la misma al caso concreto tampoco puede ser aplicable, en
razón a que el fundamento esencial de lo dispuesto en el referido artículo 150 del CTB
es el favorecer al contribuyente, situación que no ocurre con las modificaciones
introducidas por las leyes 291 y 317, al Código Tributario Boliviano, respecto al
régimen de la prescripción, por el contrario son más gravosas que las preexistentes.