Está en la página 1de 4

UNIVERSIDAD FERMÍN TORO

VICERRECTORADO ACADÉMICO
FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS Y SOCIALES
ESCUELA DE RELACIONES INDUSTRIALES –SAIA

Salario mínimo

INTEGRANTE
Rosnell Montes CI 24.145.980

https://www.youtube.com/watch?v=TUXPFQsLCUs
El salario o sueldo
Es la remuneración recibida por una persona como pago por su trabajo. De esta
forma, el empleado puede beneficiarse de su contribución en tiempo y esfuerzo a
la empresa que lo contrata. Dado que el salario es la renta que percibe cada
persona, muchos Gobiernos implementaron medidas sociales para asegurar que
se ofrece una cantidad mínima para vivir. A esta cantidad se le conoce como
salario mínimo.
Beneficios:
 Los salarios mínimos incluyen una mejor eficiencia de los trabajadores y
mayor productividad.
 En términos generales unos salarios mínimos más elevados podrían tener
una repercusión positiva en el poder adquisitivo de los trabajadores, con lo
que aumentaría su gasto y, a su vez, se estimularían la demanda agregada
y el crecimiento económico.
Desventajas:
 Los salarios mínimos demasiado elevados pueden llevar al desempleo
entre los trabajadores poco calificados.
 Aunque la legislación de salarios mínimos debería aplicarse a todos los
trabajadores es difícil de ejecutar en la economía informal.

Tipos de salario en Venezuela


Salario integral: Es todo lo que se percibe, no solo por la remuneración diaria, fija
o variable, sino todo lo que reciba el trabajador como son; las comisiones, primas,
gratificaciones, participación en los beneficios, utilidades, bono vacacional,
recargos por días feriados, sobresueldos, horas extras, trabajo nocturno,
alimentación y vivienda. Este salario (salario integral), se utiliza para el cálculo de
las prestaciones sociales (antigüedad).
Pero también tenemos el salario normal, que es el que percibe el trabajador por su
jornada laboral de forma regular y permanente (salario base).
El salario normal se utiliza para el pago de horas extras, días feriados, bono
nocturno, bono vacacional, entre otros. Para obtener el cálculo correcto del salario
integral, se debe tomar en cuenta el salario básico, las utilidades y las vacaciones.
Este salario integral se utiliza para el cálculo de las prestaciones sociales en
Venezuela.

Calculo del salario


Salario Básico: Se divide el salario básico entre 30 días.
Utilidades: Se divide el número de días de las utilidades entre 12 meses, el
resultado se divide entre 30 días y se multiplica por el salario base diario.
Vacaciones: Se toman los días pagados por bono vacacional y se dividen entre 12
meses, el resultado se divide entre 30 días y se multiplica por el salario base
diario.
Salario Integral: Se suman todos los resultados, salario base Bs. más utilidades
más vacaciones Bs. Y así se obtiene el salario integral

Evolución del salario en América latina

Durante la década de los sesenta, las empresas incrementaban los sueldos de


su personal en base al desempeño y a los méritos. Los aumentos eran cada dos
años y la inflación se mantenía en un digito. El gobierno se orientó hacia la
industrialización del país. Conforme los problemas iban creciendo, el gobierno
intervenía en la vida económica y las empresas perdieron la costumbre de
incrementar los sueldos por el desempeño dada la legislación. Al iniciar la década
de los noventa, la globalización alcanza a México y la economía tiene que volverse
competitiva. De tal suerte, nacen nuevas teorías de calidad, mejora continua y
reingeniería. Es de esperarse que los esquemas de salarios y compensación
deban cambiar también.
Los especialistas en el área de compensación y la administración de sueldos y
salarios ha cobrado una importancia tal que empresas tienen áreas especializadas
para dicha actividad. Asimismo, en la segunda mitad del siglo pasado han surgido
muchas empresas consultoras y asesoras en el tema, por lo que se puede prever
que la administración de la compensación constituirá una actividad estratégica de
la nueva gestión del talento humano.
En los años 1995 -2006. Desde su origen la OIT ha tenido entre las temáticas
principales de su agenda el tema salarial. La Comisión de Trabajo del Tratado de
Versalles mencionaba en ese entonces la necesidad de establecer “salarios
dignos”, mientras que en el preámbulo de la Constitución de la OIT se hacía
referencia a la necesidad de garantizar un “salario vital adecuado” así como a
reconocer el principio de salario igual por trabajo de igual valor. En 1928 la OIT
aprobó el Convenio 26, sobre salario mínimo, cuando este instrumento aún era
aplicado en muy pocos países. Esta norma internacional, sin lugar a dudas, fue un
impulso para la incorporación de este instrumento en las legislaciones laborales de
muchos países. En el año 1970 se produjo un nuevo avance con la adopción del
Convenio 131, relativo a la fijación de salarios mínimos con especial referencia a
los países en desarrollo, el cual indica los elementos que se deben tomar en
cuenta y los mecanismos para su fijación. En la actualidad, más del 90% de los
países cuentan con legislación sobre salarios mínimos, convirtiéndolo en uno de
los instrumentos de aplicación más extendida en la regulación de los mercados.
En lo que va de los años 2000, la OIT ha reimpulsado su interés en materia de
políticas de salarios. En lo que hace a los salarios mínimos, se destaca la
conformación de una base de datos internacional1 y la producción de una serie de
publicaciones2, lo cual vuelve a colocar a la OIT entre las instituciones con una
sólida posición técnica en el tema.

En el año 2008, a pedido de la Comisión sobre Empleo y Políticas Sociales del


Constitucional. El periodo que va desde el año 2005 hasta 2015 presenta
importantes cambios en América Latina. Desde el punto de vista del crecimiento
económico, ese periodo comenzó impulsado por lo que se denominó el súper ciclo
de los commodities, que benefició especialmente a los países de América del Sur,
mientras que América Central tuvo un crecimiento a menores tasas, aunque con
fuentes más diversificadas de crecimiento. La crisis financiera internacional de
2008-2009 puso un freno a esa tendencia, aunque por un periodo relativamente
corto. Sin embargo, la recuperación que siguió no fue duradera y fue seguida por
un proceso de desaceleración económica que en el mercado laboral produjo lo
que el Panorama Laboral 2016 denominó una “crisis en cámara lenta”. La tasa de
crecimiento regional refleja esa tendencia de desaceleración del crecimiento. Esa
tendencia se verificó principalmente en América del Sur, mientras que los países
de América Central y México tuvieron cierto impulso a partir de su mayor
diversificación productiva y la recuperación económica de los Estados Unidos.

El mercado de trabajo, por su parte, registró un importante crecimiento de la


ocupación durante la mayor parte del periodo, que no solo permitió la baja en la
tasa de desocupación de 7,8% en el año 2005 a 6,1% en el año 2014, sino que
generó empleo asalariado y contribuyó a una reducción de la informalidad en la
región. Sobre el final del periodo esa tendencia positiva en los mercados de
trabajo se revirtió, lo que se reflejó en un deterioro de varios indicadores
regionales del mercado laboral: un aumento de la tasa de desocupación (de 6,1%
en 2014 a 6,6% en 2015), un freno en la generación de empleo asalariado formal y
un aumento en el empleo por cuenta propia. El ritmo del crecimiento económico y
la dinámica de generación de empleo constituyen elementos clave para la
evolución de los salarios. En la medida que las economías crecen a tasas altas y
generan empleos de forma que reducen la tasa de desocupación en forma
sostenida, es de esperar una mejora más acentuada en los salarios, mientras que
en contextos menos dinámicos se debería esperar menores aumentos en los
salarios. Esta simplificación de las relaciones que existen entre estas variables se
vuelve más difusa cuando se consideran dos elementos adicionales.

También podría gustarte