PROCEDIMIENTO

ADMINISTRATIVO

TOMO V
~

PROCEDIMIENTOS ADMINISTRATIVOS
EN LAS PROVINCIAS
Y EN LA CIUDAD AUTÓNOMA DE BUENOS AIRES
. LEGISLACIÓN - COMENTARIOS

HÉCTOR Pozo GOWLAND

DAVID HALPERIN - OSCARAGUILAR VALDEZ
FERNANDO JUAN LIMA - ARMANDO CANOSA
DIRECTORES

ALTAMIRA G!GENA- BOTASSI - PERNASETTI - VARELA

MIRÓ - PRATO -AUGUSTO - !RUSTA- PETRELLA- V!ALE
SOTELO DE ANDREAU - CORONEL - MARTÍNEZ- MIÑO
CABEZAS - LAMOGLIA- ROMANO CASCO - EM!Ll - BECERRA
ACOSTA- BARRES E - LEGAZ-ALONSO - NALLAR- CUADROS
GARCÍA CASTR!LLÓN - ESTRADA - BENIN! - CAR.ELLO
DAIVES - NASSJF- HUTCHINSON C.
HUTCHlNSON A. - SOBRE CASAS
COAUTORES

LA LEY
1~t
 CAPÍTULO JI

PROVINCIA DE BUENOS AIRES

Carlos A. Botassi (*)

SUMARIO: I. Normativa vigente. A. Ámbito de aplicación. B. Competencia.

C. Legitimación. D. Vista de las actuaciones. E. Plazos. F. Notificaciones.
G. Prueba. H. Impugnación de actos administrativos. I. Impugnación de
reglamentos. J. Reclamo administrativo y agotamiento de la vía adminis-
trativa. K. Suspensión de efectos del acto administrativo. L. El silencio ad-
ministrativo o denegatoria tácita. - II. El Decreto Ley7647/70 y la normativa
nacional. - III. Procedimientos administrativos especiales.

l. NORMATIVA VIGENTE
El procedimiento administrativo en la Provincía de Buenos
Aires se encuentra regulado en el decreto ley 7647, publicado en
el Boletín Oficial el 23 de noviembre de 1970 y redactado por una
comisión integrada por Máximo Osvaldo Bezzi, Mario J. Ponce de
León, Félix J. Sansón, Ricardo E. Rodríguez y Nelson F. Bozarelli,
quienes analizaron antecedentes dispersos que reglaban algunos
aspectos del trámite sin un criterio orgánico y abarcador de toda
su rica problemática (reglamentos de las provincias de Buenos Ai-
res, Córdoba, Jujuy, Santa Fe y Santiago del Estero), junto a normas
extranjeras (leyes de Austria, EE.UU. y España). La Comisión tuvo
también en cuenta los proyectos del Instituto de Derecho Adminis-
trativo de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la U.N.L.P
(que entonces dirigía Bartolprné A. Fiorini) y el elaborado para la
Municipalidad de General Pueyrredón por Agustín Gordillo (1).

(*) Profesor titular ordinario de Derecho Administrativo en la Facultad de Cs.

Jurídicas y Sociales de la Universidad Nacional de La Plata. Director de su Carrera
de Postgrado de Especialización en Derecho Administrativo y ex Decano (2004-
2007). Presidente de la Asociación Bonaerense de Derecho Administrativo (ABDA)
y Vicepresidente de la Asociación Italo Argentina de Profesores de Derecho Admi-
nistrativo (AIAPDA).
(1) BEZZI, OSVALDO M., Ley de Procedimiento Administrativo Anotada y
Comentada, p. 7, Platense, La Plata, 1971.

1~

26 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
Las características principales de la normativa bonaerenses son
las siguientes:
l. Aunque no los enumera, ha receptado los principios esen-
ciales del procedimiento administrativo (2) en varias disposiciones
que se transcriben a título de ejemplo;
Impulso de oficio y carácter instructorio. Art. 48: "El procedi-
miento se impulsará de oficio en todos sus trámites ... ~ Art. 54: "La
Administración realizará de oficio, o a petición del interesado, los
actos de instrucción adecuados para la determinación, conocimien-
to y comprobación de los hechos o datos en virtud de los cuales deba
dictarse resolución':
Celeridad, economía y eficacia. Art. 7°: "La autoridad administra-
tiva a la que corresponda la dirección de las actuaciones adoptará las
medidas necesarias para la celeridad, economía y eficacia del trámite~
Art. 50: "La autoridad administrativa que tuviere a su cargo el despa-
cho o sustanciación de los asuntos, será responsable de su tramitación
y adoptará las medidas oportunas para que no sufran retraso': Art. 71:
"Los plazos administrativos obligan por igual y sin necesidad de inti-
mación alguna a las autoridades administrativas, a los funcionarios
publicas personalmente, y a los interesados en el procedimiento'.'
Búsqueda de la verdad material. Art. 53: "El organismo adminis-
trativo que necesite datos de otros para poder sustanciar las actua-
ciones o informes, podrá solicitarlos directamente mediante oficio...
las dependencias de la Administración provincial, cualquiera sea su
situación jerárquica quedan obligadas a la colaboración permanen-
te y recíproca que impone esta ley ... ~ Ali. 58: "La prueba se apreciará
con razonable criterio de libre convicción~ Art. 60: "El desistimiento
del interesado no obliga a la administración': A su turno, el artículo
118 permite revisar y en su caso dejar sin efecto una decisión firme,
si "la parte interesada hallare o recobrare documentos decisivos ig-
norados, extraviados o detenidos por.fuerza mayor o por obra de un
tercero" (inc. "c").
(2) Entendemos por "principios del procedimiento" a determinadas pautas
o condiciones del trámite que, sumados a determinados derechos y deberes
insoslayables de los/intervinientes (interesados y autoridades), resultan
imprescindibles para que el Estado adopte sus decisiones dentro de un marco de
legalidad, garantizando la amplia defensa del ciudadano de manera eficaz y en el
menor tiempo posible.
--
CARLOS A. BOTASSI 27
Informalismo en favor del administrado (3). Art. 88: "Los recur-
sos deberán proveerse y resolverse cualquiera sea la denominación
que el interesado les dé, cuando resulte indudable su impugnación o
disconformidad con el acto administrativo~
La Suprema Corte provincial ha empleado la expresión 'Jorma-
lismo moderado" para establecer que la Administración debe inti-
mar al interesado para que corrija los vicios formales de sus presen-
taciones antes de privar de efectos a su presentación defectuosa (4).
Debido proceso: este principio, que si bien resulta fundante de
todos los restantes, encuentra en el Dec. Ley 7647 /70 numerosas
aplicaciones. Art. 11 (texto s/Ley 14.229): "La parte interesada, su
apoderado o letrado patrocinante, tendrán acceso al expediente
durante todo su trámite, pudiendo, a su cargo, copiar o fotocopiar
todas sus partes..." Art. 34: ''. .. Si el escrito recibido por correo corres-
pondiere a traslados, recursos, vistas o cualquier presentación sujeta
a plazo, se tendrá como válido el día de su despacho por la oficina
de correos, a cuyos efectos se agregará el sobre sin destruir su sello de
expedición... ~ Art. 55: "Lo hechos relevantes para la decisión de un
procedimiento podrán acreditarse por cualquier medio de prueba~
Art. 108: "Todo acto administrativo final deberá ser motivado y con-
tendrá una relación de hechos y fundamentos de derecho ..."
Corresponde también destacar que el Dec. Ley 764 7 /70 contiene
normas de Derecho Administrativo sustancial, como las referentes
a los elementos y caracteres del acto administrativo y a la prohibi-
ción de las vías de hecho, condicionando la validez de las decisiones
oficiales a la regularidad del procedimiento previo (art. 103); orga-
niza el procedimiento de impugnación al estatuir detalladamente
sobre los recursos administrativos; regula lo atinente a los actos
de alcance general, reglamentos y anteproyectos de ley (arts. 120 y
sigtes.); prevé su reglamentación por el Poder Ejecutivo (art. 134);
manda apreciar la prueba mediante el método de "libre convicción"
(art. 58); logra una razonable armonía entre las prerrogativas públi-
cas (dirección del trámite, potestad disciplinaria, perentoriedad del
(3) Este principio "rige únicamente a favor del administrado, que es quien puede
invocar para sí la elasticidad de las normas de procedimiento, mientras que el Estado
no puede eludir, válidamente, el cumplimiento de las formas que el ordenamiento
legal le haya impuesto" (SCBA, causa B-51837, Empresa Ing. Gustavo Serafín Marín,
02/06/1998.
(4) Entre otras: SCBA causa A-68.993, Gantus, 03/12/2008.
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28 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
plazo para recurrir, examen de admisibilidad de la prueba, indife-
rencia del desistimiento del particular, caducidad) y las garantías
del administrado (vista de las actuaciones, obligatoriedad de la ex-
cusación del funcionario parcial, motivación del acto, notificación
por medio fehaciente, denuncia de ilegitimidad, amplitud de recur-
sos, denegatoria tácita ante el silencio del órgano, responsabilidad
del agente por incumplimiento de los plazos, entre otras).
A. Ámbito de aplicación
El artículo 1° del Dec. Ley 764 7/70 establece que: "se regulará
por las normas de esta ley el procedimiento para obtener una deci-
sión o una prestación de la Administración Pública de Buenos Aires
y el de producción de sus actos administrativos. Será de aplicación
supletoria en las tramitaciones administrativas con regímenes espe-
ciales':
De ma11era que el procedimiento que aquí se regula se orien-
ta no sólo al dictado de actos administrativos ("decisiones") sino
también a la actividad administrativa concreta o prestacional
("prestaciones"). Aunque el artículo 1° no lo diga expresamente, la
tramitación reglada -en lo pertinente- debe ser acatada tanto por
los órganos de la administración central(5) como por las entida-
des descentralizadas (6) y empresas públicas. Las disposiciones del
Dec. Ley de 1970 también rigen el procedimiento administrativo
desarrollado por los Poderes Legislativo y Judicial, al igual que las
tramitaciones desplegadas por las personas públicas no estatales.
Cuando la disciplina o la actividad cuentan con una reglamen-
tación específica, como ocurre en materia de empleo público o de
gestión tributaria, la normativa general se aplica supletoriamente
para cubrir sus lagunas.
(5) Gobernador provincial, Jefe de Gabinete, Ministros de Gobierno, Economía,
Justicia y Seguridad, Producción, Asuntos Agrarios, Salud, Infraestructura,
Desarrollo Social. trabajo y Director General de Cultura y Educación (según Leyes
13.688, 13.757, con las modificaciones introducidas por las Leyes 13.881, 13.927,
13.929, 13.975, 14.131y14.199).
(6) Instituto de Obr;+ Médico Asistencial (IOMA), Dirección de Vialidad; Instituto
de la Vivienda; Instituto'de Previsión Social; Agencia de Recaudación de Buenos Aires
(ARBA), Instituto Provincial de Loterías y Casinos, Comisión de Investigaciones
Científicas y muchas otras.
CARLOS A. BOTASSI 29
Se suscitan dudas con respecto a la aplicación de la reglamen-
tación general a las sociedades del Estado de la ley 20.705, debido
a que su artículo 6 determina expresamente que a su respecto "no
serán de aplicación ... las leyes ... de procedimiento administrativo~
Pensamos que el indiscutible carácter estatal (y por ende público)
de estas sociedades torna insoslayable su sometimiento a las leyes
de procedimiento administrativo. Como lo señala LINARES, el De-
recho Público es el Derecho básico y predominante delEstado y
su organización, y las Sociedades del Estado forman parte de esta
última (7). Naturalmente que una menor o mayor aplicación del ré-
gimen procedimental general, estará determinada por la actividad
concreta de la sociedad, las particularidades de la dirección y con-
trol, y si se trata de procederes internos o externos.
Por otra parte, considerarnos inaplicable en el orden provincial
la exclusión impuesta por una ley nacional toda vez que se trata de
una materia propia de los gobiernos locales. Si el procedimiento
administrativo es el cauce formal por el cual se exterioriza jurídica-
mente el ejercicio de la función administrativa, más allá de la natu-
raleza del órgano o sujeto de la cual emane, habrá que atenerse a lo
dispuesto en las disposiciones del Derecho Público local (arts. 1°,
5°, 121, 122, 123 de la Constitución Nacional).
A mayor abundamiento, cabe agregar que las sociedades del Es-
tado se incluyen dentro de la noción de Administración descentra-
lizada(8), aunque sus normas de creación dispongan la aplicación
(7) LINARES, JUAN F., Las sociedades del Estado unipersonales, LL 1981-D-1146
y Derecho Administrativo, p. 303, Astrea, Bs.As. 1986.
(8) Así, se afirmó que "teniendo en cuenta el porcentaje de participación
de la Provincia de Buenos Aires en el capital accionario de Aguas Bonaerense
Sociedad Anónima (ver art. 4°, decreto 517/02, ratificado por ley 12.989),
entiende el Tribunal que corresponde considerar que se trata de una forma de
descentralización de la Administración Provincial. Siendo así, su representación
en este juicio debe ser asumida por el sefwr Fiscal de Estado (arts. 155 Const.
Pcial. y 1 del decreto-ley7543/69-según ley 12.748-)". Conf. SCBA, causa B-65.834,
del 07/05/08, "DE.U.CO. Defensa de Usuarios y consumidores Asociación Civil
e/Organismo Regulador de Aguas Bonaerense y Aguas del Gran Buenos Aires si
Amparo. Cuestión de competencia art. 6° CCA!'.
En igual sentido, Fiscalía de Estado, vista emitida en el expte. 5100-11476/02,
octubre de 2002, quien ubicó a este tipo de sociedades en el último grado de
descentralización estatal. Asimismo, invocó en apoyo de su criterio el principio
de unidad de acción, en lo que concierne al procedimiento administrativo previo
a la formación de actos y/o resoluciones administrativas, como en la dirección
1-
 .,. ,
li
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30 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
preferente del Derecho Privado en cuanto respecta a las relaciones
comerciales o industriales con los terceros. Sin embargo, en cuanto
atañe a su organización de gobierno (presidencia, directorio, sin-
dicatura, etc.), está influido por normas de Derecho Público, en es-
pecial procedimentales, derivadas de la estatalidad del ente y de su
carácter instrumental y vicarial, en todo aquello que no interfiera
con el destino industrial o comercial de su actividad (9). En ma-
yor razón, cuando se trata de una persona jurídica creada para la
satisfacción de un interés colectivo como es la prestación de una
actividad calificada como servicio públíco(lO). En cualquier caso
no existen dudas respecto de la aplicación directa de los principios
esenciales que rigen el procedimiento administrativo ( 11).
Otra situación compleja se ha presentado con respecto a lapo-
sibilidad de aplicar el Dec. Ley 7647 /70 a los municipios bonaeren-
ses. Antes del dictado en el afio 1980 de la Ordenanza General 267
de procedimiento administrativo municipal, la Suprema Corte se
pronunció en sentido negativo, interpretando que el texto del ar-
tículo 1ºque venimos comentando no permitía otorgarle semejan-
de la representación estatal. La defensa de los intereses del Estado requiere
organicidad de criterios que, estableciendo la necesaria coordinación, permita
plantear una acción homogénea y consecuente. Ver Revista LNBA N° 3/2005,
Actualidad en Fiscalía de Estado, p. 420, Sección a cargo de Lamoglia, Marcelo,
Lexis Nexis, Buenos Aires 2005.
(9) Conf. CSJN, del 12/05/1988, "Recurso de hecho deducido por la actora en la
causa La Buenos Aires Compañía de Seguros SA c/Petroquímica Bahía Blanca SA
s/Amparo", Fallos, 311:750.
(10) SCBA, causa A-69.021, del 08/07/08, "Utilducto SAc/Aguas Bonaerenses
SA s/Pretensión anulatoria".
(11) Conf. GORDILLO, AGUSTÍN, Tratado de Derecho Administrativo, cit.,
t. 4, Il-2. Con sustento en esta idea, se consideró que asistía derecho a tomar
vista de ciertas actuaciones. Se sostuvo que "la aplicación de las normas del
procedimiento, propias de la administración pública, no interfieren en el caso
con los actos de la demandada, ni ésta siquiera alegó que el anoticiamiento de
los trámites internos por la amparista, pueda traer grave daño a sus intereses
negociales. De allí, que resultan aplicables en la especie los prinCipios del debido
proceso adjetivo, en especial el derecho a ser oído, que reglamentan el principio
de mayor rango contenido en el art. 18 de la Constitución Nacional y que se
concretan en disposiciones que prescriben el acceso de la parte a las actuaciones
que no hayan sido declaradas reservadas o secretas" -el destacado nos pertenece-.
Conf. CSJN, del 12/05/1988, "Recurso de hecho deducido por la actora en la causa
La Buenos Aires Compañía de Seguros SA c/Petroquímica Bahía Blanca SA s/
Amparo", Fallos, 311:750.
CARLOS A BOTASSI 31
te alcance (12). No obstante ello, en algún supuesto y frente al vacío
normativo, el Alto Tribunal sostuvo que "si bien no rige directamen-
te en el procedimiento administrativo municipal, nada obstaba a su
aplicación analógica" (13).
En la actualidad se debate si, en función de lo previsto en el art.
123 de la Constitución Nacional, los municipios pueden legítima-
mente emitir sus propias disposiciones relativas al procedimiento
administrativo. Pensamos que los contenidos sustanciales del pro-
cedimiento deben estar incluidos en una ley provincial, donde se
contemplen las reglas básicas y fundamentales, vinculadas al ejer-
cicio del derecho de defensa (tales como la legitimación, persone-
ría, derecho de vista, plazos, notificaciones y recursos), como todo
lo vinculado a las diferentes expresiones formales y materiales de la
función administrativa (requisitos de validez y el sistema de nulida-
des, caracteres, eficacia, etc., del acto y reglamento en sus distintas
manifestaciones). Ello sin perjuicio de que las autoridades comu-
nales sancionen ordenanzas reglamentarias ajustando dichos as-
pectos a sus propias características y necesidades.
B. Competencia
El Dec. Ley 7647 /70 establece que las actuaciones deberán ser
iniciadas ante el órgano competente quién dictará el pertinen-
te acto administrativo (arts. 2° y 103). Se alude de esta manera a
las dos formas principales de la competencia: aquella referida a la
dirección del trámite y la correspondiente a la potestad decisoria
que pueden o no aparecer sumadas en una misma autoridad. Así,
(12) SCBA, causaB-47.882, del 10/06/1980, "Rabinovich, Héctor e/Municipalidad
de Vicente López s/Demanda contencioso administrativa", Ay S 1980-11-159; causa
B-48.072, del 10/06/1980, "Castelo de Vignola, Isabel e/Municipalidad de Florencia
Varela s/Demanda contencioso administrativa", Ay S 1980-11-173. Esa es también la
opinión de BEZZI, OSVALDO M., Ley de procedimiento administrativo, anotada y
comentada, cit., p. 26.
(13) SCBA, causa B-48.122, del 23/12/1980, "Compañía Burroughs de Máquinas
Limitada e/Municipalidad de Campanas/Demanda contencioso administrativa", en
Ay S 1980-III-904. Referido a la aplicación del art. 11 de!DLPABA, y la determinación
de los alcances del derecho a la vista de las actuaciones que imperaba por aquel
entonces, donde se sostenía la improcedencia del pedido de fotocopias. Criterio
actualmente incompatible con la defensa en juicio garantizada en el art. 15 de la
CPBA. Igual solución puede otorgarse, para resolver la ausencia de plazo de gracia
en el ámbito municipal, y aplicar por extensión lo previsto en el art. 69 del DLPABA.
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CARLOS A. BOTASSI 33
32 PROVINCIA DE BUENOS AIRES

tencia, elevará sin más trámite las actuaciones. al órgano adminis-

por ejemplo, en materia disciplinaria en la relación de empleo, el
trativo que corresponda resolver quien decidirá la cuestión sin otra
órgano "instructor" conduce el procedimiento y colecta la prueba
sustanciación, que dictamen de la Asesoría General de Gobierno.2. -
mientras que la eventual sanción la aplica una autoridad superior
Cuando dos ministerios o entidades autárquicas rehusaren conocer
del Poder Ejecutivo según la entidad de la pena(l4).
en el asunto, el último que lo hubiere recibido deberá elevarlo al Po-
Como es lógico, el Decreto Ley aclara que la competencia será der Ejecutivo, quien decidirá previo dictamen del Asesor General de
determinada por fa Constitución Provincial, las leyes y los regla- Gobierno".
mentos, consagrando el principio de la irrenunciabilidad (15), sal-
Se prevén entonces los dos tipos de contiendas de competencia:
vo los supuestos de delegación, sustitución o avocación previstos
positiva, cuando dos o más órganos la reclaman para sí y negativa,
por las leyes (art. 3°). La determinación constitucional, legal y re-
cuando la repudian.
glamentaria no excluye de la competencia del órgano todas aque-
llas atribuciones que puedan considerarse "implícitas" y la Supre- La intervención de la Asesoría General de Gobierno resulta tam-
ma Corte tiene decidido que ''el vetusto principio de que en Derecho bién exigida por el art. 37 inc. 5° de la Ley de Ministerios nº 13.757.
Administrativo la competencia era la excepción y la incompetencia
Cabe agregar que la normativa bonaerense contempla la excu-
la regla, y que por tanto toda competencia debía estar conferida por
sación de los funcionarios y empleados, pero veda su recusación,
norma expresa! ha sido superado por el progreso de la ciencia ju-
'~alvo cuando normas especiales así lo determinen" (art. 6° del Dec.
rídica y los requerimientos de una realidad día a día más comple-
Ley 7647 /70).
ja, que exige un mayor y más calificado despliegue de la actividad
administrativa" (16). La prohibición de la recusación ha sido explicada por la nece-
sidad de evitar la intencionada interrupción del trámite por quien
En cuanto respecta a la solución de los conflictos de compe-
alegara desconfiar de la imparcialidad y rectitud del funcionario
tencia, la normativa asigna la responsabilidad definitoria a los mi-
para favorecerse con la demora(l8). Por nuestra parte, pensamos
nistros o al Gobernador según se trate de asuntos internos de una
que la recusación debe admitirse ya que resulta preferible afrontar
cartera o de disputas entre ministerios o entre sus dependencias y
alguna demora en el procedimiento antes que arriesgarse a que la
entidades autárquicas o de estas entre sí (art. 4°)(17), reglando el
decisión oficial se adopte por razones personales del agente.
trámite en su artículo S:"En los conflictos de competencia se observa-
rán las siguientes reglas: l.- Cuando dos autoridades se encuentren
entendiendo en el mismo asunto, cualquiera de ellas de oficio o a C. Legitimación
petición de partes, se dirigirá a la otra reclamando para si el cono- El artículo 10 del Dec. Ley 7647 /70 establece: "La actuación ad-
cimiento del asunto. Si la autoridad requerida mantiene su campe- ministrativa puede iniciarse de oficio o a petición de cualquier per-
sona o entidad pública o privada, que tenga derecho o interés legiti-
mo. El que instare ante la Administración Pública un procedimiento
(14) Artículos 79 y 81 de la ley 10.430; art. 92 inc. 2° del Dec. Reglamentario
relacionado con obras o servicios públicos, o el que peticionare con
4161/96.
(15) La competencia es irrenunciable ya que de su efectivo ejercicio depende la el objeto de lograr una decisión de la Administración, comprendida
satisfacción de las necesidades públicas. La Suprema Corte de Justicia provincial ha en las facultades potestativas no será tenido por parte en el procedi-
expresado que "la competencia de los órganos administrativos es de orden público y miento; lo que se le hará saber~
su ejercicio no puede ser limitado, renunciado o menoscabado por decisión de quién
lo ejerza" (causa B-47.929, Club Atlético Sefaradí, 23/07/1980, Ay S 1980-II-474).
(16) SCBA, causa B-47.882, Rabinovich, 10/06/1980, A y S 1980-II-159.
(17) La norma se reitera en el art. 12 de la Ley de Ministerios nº 13.757: "En caso de
(18) BEZZI, OSVALDO M., Ley de Procedimiento Administrativo anotada y
dudas o cuando se plantéaren cuestiones de competencia entre dos o más ministerios,
comentada, cit. p. 33. Asesoría General de Gobierno, p. 54, Dictamen del expte.
la situación será resuelta por el Poder Ejecutivo, quien determinará el departamento 2336-2177/77, Revista "Dictámenes" nº l.
de Estado que tendrá a su cargo la consideración del asunto''.

34 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
Prescindiendo del supuesto de iniciación oficiosa por la propia
autoridad competente, la normativa en análisis legitima a los par-
ticulares que posean un derecho o un interés legítimo. Se trata de
una añeja diferenciación hoy superada y que, debido a las razones
que seguidamente se expondrán, tampoco puede mantenerse en
el procedimiento administrativo provincial. El "derecho" (al que se
le adicionan en la doctrina y en la jurisprudencia los caracteres de
"subjetivo" y "administrativo") presupone la reunión de dos ele-
mentos: una norma que impone al Fisco una conducta determina-
da y que la misma sea debida a un individuo en situación de exclu-
sividad (19). El interés legítimo, en cambio, aparece titularizado por
un grupo relativamente numeroso de personas. Estas dos formas de
emplazamiento en la relación jurídico-administrativa resultan legi-
timadas para acceder al procedimiento, no incluyéndose a quienes
invoquen un "interés simple'; también llamado "mero interés'; que
no es otra cosa que la aspiración generalizada de que las autorida-
des respeten el orden jurídico.
Hemos expresado en otro lugar(20) que la limitación conteni-
da en el artículo 10, restringiendo la legitimación a los titulares de
derechos subjetivos e intereses legítimos, ha quedado colocada en
evidente contradicción con los criterios amplios trasuntados en la
reforma constitucional de 1994. Los artículos 15, 20, 55 y 166 de la
Carta Provincial, junto a lo establecido en el artículo 13 del Código
Procesal Administrativo (21), imponen una visión amplia y gene-
rosa del asunto y han inspirado una interpretación jurisprudencia!
que permite legitimar a quienes aleguen la afectación o descono-
cimiento de derechos o intereses tutelados por el ordenamiento ju-
rídico, independientemente de si los mismos pertenecen en grado
de exclusividad a un sujeto o son compartidos con otros, lo cual
indudablemente permite también incluir en dicha expresión a los
derechos de incidencia colectiva en sus distintas variantes (22), don-
(19) SCBA causa B-47764, Fernández Arrese, 20/05/1980, A y S 1980-I-782.
(20) BOTASSI, CARLOS A. y OROZ, MIGUEL H. E., Procedimiento Administrativo
de la Provincia de Buenos Aires, cit., p. 124 y sigtes., 2" ed., 2011.
(21) CPA, art. 13: "Legitimación activa. Está legitimada para deducir las
pretensiones previstas en el presente Código, toda persona que invoque una lesión,
afectación o desconocimiento de sus derechos o intereses tutelados por el ordenamiento
jurídico". ; 9• edición, 2009.
(22) Los derechos de incidencia colectiva referidos a bienes colectivos,
diferenciados de los relativos a intereses individuales homogéneos, conforme ha
CARLOS A. BOTASSI 35
de a su vez, pueden coexistir todas las situaciones referenciadas, sin
necesidad de exclusión de unas a favor de otras (23).
De tal suerte que en los tiempos actuales debe adoptarse "una
hermenéutica amplia de las normas adjetivas que en punto a la le-
gitimación activa garantice el ejercicio del derecho de defensa de los
administrados y que como es sabido ha recibido en el ámbito del
procedimiento administrativo expresa consagración constitucional
(art. 15 de la Constitución provincial), de modo que la solución a la
que se arribe guarde armonía con los significativos avances que en
este tópico ha experimentado el acceso a la instancía jurisdiccional
(arts. 18, 43, 75 inciso 22 y ccdtes. de la Constitución Nacional; arts.
11, 15, 20 inciso 2° y ccdtes. de la Constitución de la Provincia de
Buenos Aires). .. Dada la necesaria vinculación que en la materia se
presenta entre el procedimiento y el proceso administrativo, es preci-
so compatibilizar el contenido del art. 10 del decreto-ley 7647/1970
con el de su similar del Código Procesal, a fin de posibilitar su in-
tegración y sortem; de ese modo, una virtual inconsistencia lógica
del ordenamiento jurídico. Dado que se exigiría un mayor rigor en el
cumplimiento del mentado recaudo en el procedimiento administra-
tivo que en el propio proceso contencioso. De allí que el alcance que
ha de asignarse a la legitimación para actuar en el marco del trámite
administrativo no puede prescindir de las pautas establecidas por el
aludido art. 13 de la ley 12.008-texto según ley 13.101-" (24).
En suma: el artículo 13 del Código Procesal Administrativo (Ley
12.008 y sus modificatorias) vino a abrogar el tono restrictivo del
artículo 10 de la normativa procedimental, ya que la mayoría de los
casos que llegan a la jurisdicción han transitado antes la vía admi-
nistrativa y resulta absurdo que este sendero sea más estrecho que
aquel. Hoy día cualquier persona que invoque un derecho o un in-
terés jurídicamente tutelado -incluyendo los derechos difusos o de
inocencia colectiva- debe ser legitimada para peticionar, reclamar
y recurrir en sede administrativa.
sido reconocido por la CSJN, en fecha 24/02/2009, "Halabi, Ernesto c/ PEN -ley
25.873 dto. 1563/04- s/amparo-ley 16.986", Fallos: 332:111.
(23) Algunos ejemplos presentados en la práctica, pueden verse en GORDILLO,
AGUSTÍN, Tratado de Derecho Administrativo, t. 2, p. III-15, F.D.A., Buenos Aires,
(24) SCBA, causa B-66.095, Cámara Argentina de Salas de Bingo, 07/03/2007.

36 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
D. Vista de las actuaciones
El artículo 11 dispone: "La parte interesada, su apoderado o le-
trado patrocinante, tendrán acceso al expediente durante todo su
trámite, pudiendo, a su cargo, copiar o fotocopiar todas sus partes. El
pedido de vista podrá hacerse verbalmente y se concederá sin nece-
sidad de resolución expresa al efecto, en la oficina en que se encuen-
tre el expediente, aunque no sea la mesa de entradas o receptoría.
El párrafo anterior del presente artículo será exhibido en todas las
reparticiones de la Administración centralizada, descentralizada y
entes autárquicos al público"(25).
Corresponde destacar la amplitud en la legitimación reconoci-
da para tomar vista de las actuaciones que incluye no sólo a la par-
te y a su eventual apoderado sino también al letrado patrocinante
quien, de esta manera, puede conocer por sí solo el expediente sin
necesidad de hacer asumir a su cliente el gasto del otorgamiento de
un poder. De esta manera, la norma correlaciona con lo prevenido
1
en el artículo 57 de la Ley de Ejercicio de la Abogacía nº 5177: ' Con
la sola exhibición de la credencial profesional, el abogado o procu-
rador podrá examinar y compulsar actuaciones judiciales y admi-
nistrativas, provinciales y municipales y registros notariales. Cuando
un funcionario o empleado de cualquier manera impidiera o traba-
re el ejercicio de este derecho, el Colegio Departamental pertinente, a
instancia del afectado, pondrá el hecho en conocimiento del superior
jerárquico de aquellos, a los efectos que correspondan, sin perjuicio
de otras medidas a que hubiere lugar~
A pesar de la claridad de la norma, todavía hoy -a más de 40
años de vigencia del decreto ley- frecuentemente algunas reparti-
ciones administrativas exigen que el pedido de vista se formule por
escrito y lo conceden fijando el día y la hora para su concreción.
Este mecanismo -evidentemente contrario a la letra y al espíritu del
art. 11- provoca inconvenientes, y en algunos casos, llega a frustrar
su propia razón de ser con notorio agravio al ejercicio del derecho
(25) La posibilidad de copiar o fotocopiar el expediente y la obligación de
exhibir la norma fueron incorporadas al por ia ley 14.229 (25/01/2011). La Asesoría
General de Gobierno se había pronunciado a favor de Ja misma antes de la reforma
(Expte. 2406-4638/92, dictamen del 28/02/1994, Rev. de Derecho Adminisirativo de
la ABDA, p. 221, nº O(dici~mbre 2006). El texto originario del art. 11 expresaba: '"La
parte interesada, su apoderado o letrado patrocinante, tendrán acceso al expediente
durante todo su trámite".
CARLOS A. BüTASSl 37
1
de defensa. Piénsese, por caso, en la fijación de esa suerte de ' au-
diencia11 para vista en un tiempo lejano que complique la funda-
mentación de un recurso cuyo plazo perentorio está corriendo, o
en el supuesto de que el día concedido para la vista, los interesados
se encuentre impedidos de efectivizarla y se vean obligados a soli-
citarla nuevamente con las consecuentes demoras en el avance del
trámite. De esta manera se pasa por alto la doctrina prohijada por
la Suprema Corte de Justicia provincial desde hace más de 30 años,
al asegurar al particular "la posibilidad de tener leal y adecuado co-
nocimiento de las actuaciones" (26).
Algunos sectores de la Administración provincial, que se com-
portan como si el e:A'Pediente fuera secreto, no advierten que el ac-
ceso oportuno a las actuaciones no constituye solamente un aspec-
to fundamental del ejercicio del derecho de defensa del particular
sino que también posee interés para la Administración al permitir
al interesado plantear fundadamente su pretensión y hasta desistir
de su postura si las constancias del expediente demuestran su sin-
razón. En este punto, corresponde interrogarse sobre cuáles son las
consecuencias de la imposibilidad de acceder a las actuaciones ad-
ministrativas, sobre todo cuando ello resulta imprescindible para
fundamentar un recurso. Entendemos que en este caso los plazos
del procedimiento deberán suspenderse hasta que desaparezca el
obstáculo y la vista pueda concretarse. Por ello, y por excepción a
la regla de la vista en todo tiempo y circunstancia, será convenien-
te solicitarla por escrito, conservando la pertinente copia sellada y
fechada y peticionar expresamente que, hasta que la misma se lle-
ve a cabo, se suspendan los plazos en curso. Naturalmente que el
recurso deberá presentarse de todos modos, con la mejor funda-
mentación posible, haciendo reserva de ampliarlo una vez cono-
1
cido el contenido de los obrados. Este proceder 'preventivo" viene
impuesto por la opinión de la Asesoría General de Gobierno quien
1
ha dictaminado que ' para que un pedido de vista tenga efecto sus-
pensivo del plazo de recurrir a los efectos de la fundamentación del
recurso es necesario que se hubiera interpuesto el recurso y acredita-
do que no se tuvo acceso a las actuaciones al momento de notificarse
el acto impugnado" (27). En igual sentido se pronunció la SCBA,
resolviendo que el pedido de vista no suspende el curso del plazo
(26) SCBA, B-48122, Cía. Burroughs, 22/12/1908, Ay S 1980-III-904.
(27) Expte. 2320-2637/81, Revista "Dictámenes" nº 8, p. 36.
1

38 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
para recurrir, salvo que la parte interesada lo haya requerido expre-
samente o haya demostrado "la existencia de causales que le dificul-
tasen o impidiesen la consulta personal del expediente" (28).
No compartimos este criterio. El pedido expreso de suspensión
del plazo se transforma en un ritualismo inútil a poco que se ad-
vierta que si el particular pide la vista es porque entiende necesario
compulsar las actuaciones para fundamentar su recurso. Otorgarle
ese efecto a quien lo solicitó y negarlo a quien no tuvo esa previsión,
considerando que el administrado no tiene por qué ser versado en
Derecho y el auxilio profesional no le resulta obligatorio, aparece
como un excesivo rigor formal. Al mismo tiempo, poner a cargo del
particular la prueba de la existencia de causales que le impidieron
tomar la vista, supone constreñirlo a la acreditación de un hecho
negativo que, como es clásico, será prácticamente de imposible
cumplimiento (salvo que se acuda en todos los casos ante la auto-
ridad que dirige el trámite en compañía de un notario). Lo correcto
parece ser el camino inverso: si el particular solicitó la vista y del
expediente no resulta que efectivamente la haya tomado (a través
de la nota que se asienta en cada caso) cabe presumir que se vio im-
pedido de hacerlo, otorgándole efecto suspensivo a su pedido. En
última instancia, la Administración encargada de la instrucción del
procedimiento, puede notificarle que el expediente está a su dispo-
sición y si el particular no concurre en el plazo que se le conceda se
lo interpretará desistido de su pedido y los plazos recuperarán su
curso.
Resulta criticable que las sucesivas reformas introducidas por
las leyes 14.224y14.229 no se hayan ocupado de esta cuestión re-
solviéndola de la manera que indica el artículo 15 de la Carta Pro-
vincial, esto es de la manera que mejor tutela los derechos del par-
ticular (29).
El derecho de vista no es absoluto y existen excepciones: a) Ac-
tuaciones secretas: por razones políticas o estratégicas el conteni-
do de un expediente puede declararse reservado o secreto. Al estar
(28) SCBA, causa B-47.441, del 06/03/1979, AEG-Telefunken Argentina SAIC,
06/03/1979, A y S 1979-I-329.
(29) Conf. OROZ, MIGUEL H. E., Breves reflexiones sobre la política legislativa en
el procedimiento administrativo. A propósito de las leyes 14.224y14.229, publicado
en www.abda.org.ar/opinión.html, Sección Columna de Opinión, del 25/01/2011.
CARLOS A. BOTASSI 39
en juego la garantía constitucional de la defensa, aquel carácter del
trámite debe decretarse en forma motivada y cuidando que real-
mente obedezca a razones de interés público que posterguen legí-
timamente el derecho del particular. El decreto ley 7647 /70 no con-
sagra expresamente esta excepción, limitándose a consignar en su
art. 137 que la futura reglamentación se ocupará de "la calificación
y trámite de actuaciones reservadas o secretas''. b) Actuaciones en
estado de resolver: concluida la etapa probatoria y agregados los
eventuales alegatos, o en caso de que sea necesario resolver un re-
curso administrativo, se hace legalmente procedente la interven-
ción de la Asesoría General de Gobierno y de la Fiscalía de Estado
(organismos a los que nos referiremos al comentar el art. 57), luego
el expediente queda en estado de dictarse el acto administrativo fi-
nal. Debido a que los actos de asesoramiento y control de aquellos
órganos no resultan recurribles y a que a esa altura del trámite el
art. 57 prohíbe nuevas presentaciones, la vista del expediente suele
denegarse. La Asesoría General de Gobierno ha expresado que no
corresponde otorgar vista del expediente cuando acaba de emitirse
su dictamen (30).
Finalmente, cabe señalar que el principio general de acceso al
expediente durante todo el trámite encuentra una aplicación espe-
cial en el artículo 56, que prevé expresamente la vista por un plazo
de diez días a efectos de alegar sobre el mérito de la prueba (31).
E. Plazos
Según el art. 68 "todos los plazos administrativos se cuentan por
días hábiles salvo expresa disposición legal o habilitación y se com-
putan a partir del día siguiente de la notificación". "Cuando no se
haya establecido un plazo especial para las citaciones, intimaciones
y emplazamientos, éste será de 1Odías" (art. 76).
Luego de negar reiteradamente la aplicación del plazo de gracia
de las dos horas del día siguiente al vencimiento, la Suprema Cor-
te de Justicia lo admitió en el procedimiento administrativo (32), y
(30) Expte. 4119-13.289/76, Revista Dictámenes, nº 3, p. 10.
(31) Art. 56: "Producida la prueba se dará vista por el plazo de 1Odías al interesado,
para que alegue sobre el mérito de la misma. Vencido el plazo sin que el interesado
haya hecho uso de su derecho, podrá dársele por decaído prosiguiéndose el trámite".
(32) SCBA, B-57.987, Chipolini, 14/04/2004.
40 PROVINCIA DE BUENOS AiRES
posteriormente el mismo fue consagrado por ley, hasta llegar a las
4 horas del día siguiente al vencimiento de rigor(33). Actualmente,
el segundo párrafo del art. 69 (texto según Ley 13.708) indica que "el
escrito no presentado dentro del horario administrativo del día en
que venciere el plazo, podrá ser entregado válidamente el día hábil
inmediato y dentro de las 4 primeras horas del horario de atención~
Resulta trascendente recordar que "el vencimiento de los plazos
... no hace decaer el derecho a efectuar las presentaciones del caso
con posterioridad, debiendo continuarse el trámite según su estado,
sin retrotraer sus etapas" (art. 72), exceptuándose "los plazos esta-
blecidos para interponer recursos administrativos, los que una vez
vencidos hacen perder el derecho a interponerlos" (art. 74).
De esta manera, la normativa bonaerense sienta el principio ge-
neral de no perentoriedad de los plazos, sin que ello signifique que
el particular puede incumplir definitivamente la carga que le im-
ponga el segmento del trámite (aportar datos de testigos, informar
alguna circunstancia que le fuera requerida, etc.) pues perderá la
posibilidad de hacerlo si la Administración declara el vencimiento
del término. En otras palabras; para que el acto tardío revista efica-
cia, deberá concretarse antes de que la autoridad dé por decaído
el derecho dejado de utilizar. El citado artículo 56 del decreto-ley
provee un ejemplo: vencido el plazo de vista durante diez días al
interesado, igualmente podrá presentarse el alegato, salvo que la
Administración decida dar por decaído ese derecho y proseguir el
trámite resolviendo la cuestión de fondo.
Para evitar que las decisiones administrativas se mantengan inde-
finidamente sin adquirir firmeza, el artículo 74 consagra el único caso
de plazo fatal: los términos establecidos para interponer recursos
administrativos, vencidos los cuales, el acto oficial se tiene por con-
sentido e irrevisable; sin perjuicio del tratamiento de la impugnación
tardía como "denuncia de ilegitimidad previsto en su segunda parte''.
Al mismo tiempo que no son perentorios, los plazos procedi-
mentales resultan siempre prorrogables, por efecto de lo prevenido
en el artículo 73: "Si los interesados lo solicitan antes de su vencí-
(33) Leyes 13.262 (BO 10/12/2004) y 13.708 (BO 07/08/2007). Ampliar en OROZ,
MIGUEL H. E., El plazo de gracia en el procedimiento administrativo y su consagración
legislativa, LA LEY, 2005-C, 1214 y El plazo de gracia en el procedimiento administrativo
y su extensión temporal, p. 1193, Rev. Lexis Nexis Buenos Aires nº 10 (octubre 2007).
CARLOS A. BOTASS! 41
miento, la autoridad administrativa interviniente podrá conceder
una prórroga de los plazos establecidos en esta ley o en otras dispo-
siciones administrativas, siempre que con ello no se peljudiquen de-
rechos de terceros~
El empleo de esta franquicia debe ser cauteloso, ya que la auto-
ridad competente "podrá" prorrogar el plazo pero no está obligada a
hacerlo, y en caso de negar la prórroga podrá quedar firme el acto que
se pensaba recurrir o podrá darse por decaído el derecho no ejercido.
F. Notificaciones
El capítulo X (arts. 62 a 67) constituye uno de los aciertos rele-
vantes del decreto ley 7647 /72. Se establece el contenido de las no-
tificaciones, que incluye "la pertinente motivación del acto y el texto
íntegro de su parte resolutiua" (art. 62) reservando la diligencia para
aquellas resoluciones que revistan carácter definitivo, dispongan
emplazamientos o citaciones, confieran vistas o traslados, decidan
cuestiones planteadas por el interesado o dispongan la apertura a
prueba (art. 64).
El artículo 63 establece: "Las notificaciones se realizarán perso-
nalmente en el expediente, firmando el interesado ante la autoridad
administrativa, previa justificación de identidad o mediante cédula,
telegrama colacionado o certificado, recomendado o cualquier otro
medio que permita tener constancia de la recepción, de fecha y de
identidad del acto notificado y se dirigirá al domicilio constituido
por el interesado o en su defecto, a su domicilio real~
La referencia de la norma a "cualquier otro medio" debe enten-
derse referida a cualquier otro medio fehaciente que permita el co-
nocimiento íntegro de la resolución. Aunque no aparece expresa-
mente enunciada, en la actualidad resulta de frecuente aplicación
la notificación carta documento que, como es lógico, resulta abso-
lutamente procedente y válida (34).
Si la notificación se lleva a cabo en el expediente, no basta la lec-
tura del acto por el interesado sino que debe proveérsele copia del
mismo, en caso contrario la notificación es nula (35).
(34) SCBA, B-65.966, Lloret, 01/09/2010.
(35) SCBA, B-63.468, Pérez Rochíno, 02/09/2009.
42 l'ROVlNClA DE BUENOS Al RES
En caso de notificación en el domicilio real del interesado "el
empleado designado a tal efecto llevará por duplicado una cédula
en que esté transcripta la resolución que deba notificarse. Una de
las copias la entregará a la persona a la cual deba notificar o en su
defecto, a cualquiera de la casa. En la otra copia destinada a ser
agregada al expediente, se pondrá constancia del día, hora y lugar
de la entrega requiriendo la firma de la persona que manifieste ser
de la casa, o poniendo constancia de que se negó a firmar ..." Cuan-
do la notificación se efectúe por medio de telegrama, servirá de su-
ficiente constancia de la misma el recibo de entrega de la oficina
telegráfica, que deberá agregarse al expediente" (art. 65, párrafos
l 0 y3°).
Aunque no lo dice expresamente, debido a la solución legal que
se estatuye, cabe inferir que el segundo párrafo del artículo 65 está
referido al caso en que la parte haya constituido domicilio en el ex-
pediente: "Cuando el empleado no encontrase la persona a la cual
va a notificar y ninguna de las otras personas de la casa quiera re-
cibirla, la fijará en la puerta de la misma, dejando constancia en el
ejemplar destinado a ser agregado en el expediente~
Con acertado criterio garantista, despejando cualquier duda so-
bre las consecuencias de una eventual irregularidad, el artículo 67
establece que "toda notificación que se hiciere en contravención de
las normas prescriptas será nula y el empleado notificador responde-
rá por los peljuicios que cause al interesado o a la Administración".
Y la Suprema Corte provincial ha explicado que "si la resolución
remite a varios actos preparatorios, el interesado debe haber tenido
acceso o ser notificado de los dictámenes o informes a los cuales se
remite o habrá de remitirse el acto administrativo resolutorio, previa
o juntamente con éste" (36).
Si el acto notificado defectuosamente resulta favorable al admi-
nistrado, el vicio de la diligencia no podrá invocarlo el Fisco (37), y
en caso de duda sobre la correcta implementación de la notificación
debe presumirse que no ha cumplido el objetivo de comunicar lo
decidido en tiempo y forma, y deberá practicarse nuevamente (38).
(36) SCBA, causas A-68.826, Manuel Aguirre S.A., 05/11/2008; B-65.739, Burtin,
09/12/2010.
(37) SCBA, B-47.822, Satostegui, Ol/12/19Bl, A y S 1981-III-56B.
(38) SCBA, B-57.944, Samaja, 18/07/2001.
CARLOS A. BOTASSl 43
"Si del expediente resulta en forma indudable que el interesado
ha tenido conocimiento de la providencia, la notificación o citación
surtirá desde entonces todos sus efectos" (art. 67, parte final). La Su-
prema.Corte de Justicia tiene decidido que ese conocimiento debe
resultar indudable y que cabe exigir rigidez en la apreciación de las
circunstancias que autorizan a inferirlo (39). De todos modos, pen-
samos que la regla debería operar en el solo interés del particular
que invoca en su favor la notificación "informal'; pero no cuando es
la Administración que ha incumplido su deber de notificarlo regu-
larmente y debido a ese vicio puede ver desconocidos derechos o
intereses.
G.Prueba
A diferencia de lo que ocurre con el Reglamento del Dec. Ley
19.549/72 y con otras normativas provinciales que han tomado el
modelo nacional, el decreto ley 764 7 /70 no regula, ni siquiera en
mínima medida, lo atinente a la producción de la prueba. El artícu-
lo 55 se limita a señalar que "los hechos relevantes para la decisión de
un procedimiento podrán acreditarse por cualquier medio de prue-
ba; aclarando que "cuando la Administración no tenga por ciertos
los hechos alegados por los interesados, o la naturaleza del procedi-
miento lo exija, la autoridad administrativa acordará la apertura de
un período de prueba por un plazo no superior a 30 días ni inferior a
1O, a fin de que puedan practicarse cuántas juzgue pertinentes':
A su turno, el artículo 33 del decreto ley, al establecer los recaudos
formales de los escritos por los cuales se dé inicio a un procedimiento
administrativo, incluye ''el ofrecimiento de toda la prueba de que ha
de valerse, acompañando la documentación en que funde su derecho
el peticionante o en su defecto su mención con la individualización po-
sible, expresando lo que de ella resulte y designando el archivo, oficina
pública o lugar donde se encuentren los originales" (inc. "e").
En cuanto respecta al método de valoración de la evidencia co-
lectada en el procedimiento, el artículo 58 dispone que: "la prueba
se apreciará con razonable criterio de libre convicción': Se trata de
un sistema que otorga al órgano competente una gran amplitud de
criterio a la hora de valorar las pruebas producidas; semejante a
(39) SCBA, B-48.549, Maluéndez, 16/11/1982, A y S 1982-III-381.
44 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
la "apreciación en conciencia" que rige en el proceso laboral bo-
naerense, aunque en nuestro caso el legislador ha reclamado ma-
yor cuidado, calificando la elaboración mental del intérprete con
la palabra "razonable'; a fin de excluir toda posible arbitrariedad.
Comentando el transcripto artículo 58, BEZZI lo destacó como una
conquista de la legalidad dentro de la Administración Pública, al
"fijar la razonabilidad como valladar a la arbitrariedad" (40). Esta
postura resulta unánime en la doctrina, que jamás ha consentido
que la amplitud de apreciación de la prueba por parte de la autori-
dad administrativa se convierta en un exceso de discrecionalidad.
En ningún caso podrán desconocerse arbitrariamente las pruebas
obrantes en el expediente(41).
En igual sentido se ha pronunciado la Suprema Corte de Buenos
Aires, entendiendo que si una determinada decisión de la Adminis-
tración no resulta derivación razonada de los hechos probados, el
acto padece un vicio de arbitrariedad que lo invalida(42).
Al exigir que el criterio de libre convicción del administrador
sea "razonable'; el decreto-ley recorta la amplitud del intérprete en
su laborvalorativa. Se aleja del sistema de libre convicción puro del
antiguo proceso civil y de la apreciación en conciencia del proceso
laboral, asimilándose al mecanismo de la "sana crítica" de la actual
legislación procesal civil y comercial.
En rigor, al igual que el método interpretativo de la "sana crítica"
que impera en el proceso judicial civil, la "razonable libre convic-
ción" otorga amplitud en la elección de la prueba definitoria de la
cuestión, pero coloca la razonabilidad (o proscripción de la arbitra-
riedad) como límite de la labor intelectual del órgano administrati-
vo, de tal suerte que no será ajustado a derecho decidir sobre la base
de la existencia de hechos que no han sido probados de manera
alguna, ni prescindir de prueba decisiva incorporada al expediente
por la actividad probatoria del particular o llegada a conocimiento
del administrador por cualquier medio lícito (43 ).
(40) BEZZI, OSVALDO M., Ley de procedimiento administrativo, cit., p. 26.
(41) Ver por todos GORDILLO, AGUSTÍN, Tratado de Derecho Administrativo, t. 4, p.
VII-25, F.D.A., 10" ed.,2010; del mismo autor, Valoración de la prueba en el procedimiento
administrativo, p. 149 y sigtes., Revista Jus, nº 13/14, Platense, La Plata 1969.
(42) SCBA, causa B-48689, Mendoza, 31/07/1990, A y S 1990-II-791.
(43) En última instancia se trata de aplicar los principios jurídicos elaborados
por la Corte nacional al crear pretorianamente la doctrina de la sentencia arbitraria
CARLOS A. BOTASSI 45
En cuanto respecta concretamente a los medios de prueba, de-
bido a la ausencia de regulación puntual, corresponde llenar el va-
cío normativo mediante la aplicación supletoria de las reglas del
Código Procesal Civil y Comercial de La Provincia de Buenos Ai-
res, que contempla y reglamenta en detalle los siguientes medios
de prueba e44): documental, informativa, confesional, testimonial,
pericial y reconocimiento de lugares o cosas.
1) Documental
Como antes dijimos, la prueba documental que posea el par-
ticular debe adjuntarla al escrito inicial. Como es lógico, si el ex-
pediente fuera iniciado de oficio por la Administración también
serán cabeza del mismo los instrumentos que justifiquen la potes-
tad o la conveniencia pública de ponerlo en marcha. El artículo 36
del decreto-ley prevé que se acompañe el original o un testimonio
expedido por autoridad competente, autorizando la reserva de ori-
ginales para prevenir extravíos. El artículo 37 exige la legalización
de documentos extraterritoriales de la Provincia de Buenos Aires y
la pertinente traducción de los redactados en idiomas extranjeros.
Cuando la ley de ejercicio de una profesión exija que algún tipo
particular de documentos deba ser suscripto por un profesional
matriculado, la Administración Pública exigirá que así sea (art. 38).
Para garantía del administrado, la autoridad a cargo del trámite
está obligada a sellar la copia del documento acompañado o a en-
tregar una constancia de su recepción ( art. 39 ). Si el instrumento no
se encuentra en poder de la parte privada, deberá indicar la oficina
pública en que se halla o la identidad del tercero que lo posea (art.
33 inc. e). De esta manera, la Administración dispondrá las medi-
das necesarias para su obtención y agregación al expediente.
2) Informativa
El decreto ley 764 7/70 se refiere exclusivamente a la prueba de
informes entre oficinas públicas en su artículo 53: "El organismo
y que glosara CARRIÓ bajo las denominaciones de "invocar prueba inexistente"
y "prescindir de prueba decisiva", en su clásica obra El recurso extraordinario por
sentencia arbitraria, ps. 197 y 207, Abeledo-Perrot, Bs.As. 1978.
(44) De todos modos la enumeración del CPCC no es taxativa ya que su
artículo 376 establece que "los medios de prueba no previstos se diligenciarán
aplicando por analogía las disposiciones de los que sean semejantes, o en su defecto,
en la forma que establezca el juez".
46 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
administrativo que necesitare datos de otros para poder sustanciar
las actuaciones o informes, podrá solicitarlos directamente mediante
oficio, del que se dejará copia en el expediente. A tal efecto, las de-
pendencias de la Administración Provincial, cualquiera sea su situa-
ción jerárquica, quedan obligadas a las colaboración permanente
y recíproca que impone esta ley. El expediente se remitirá cuando
corresponda dictaminar o lo requiera el procedimiento~ Respecto
del pedido de informes a particulares, corresponde aplicar supleto-
riamente el artículo 397 del Código Procesal Civil y Comercial que
obliga a responder bajo la amenaza de sanción pecuniaria y hasta
la imputación del delito de desobediencia (45).
El medio para hacerlo es el "oficio" y entendemos perfectamen-
te factible la posibilidad de que el mismo sea suscripto por el letra-
do patrocinante del administrado, con trascripción de la resolución
administrativa que lo ordena, como prevé el artículo 398 del CPCC
respecto del proceso judicial. Por otra paiie, resulta de aplicación el
artículo 57 de la ley 5177, que regula el ejercicio y reglamentación
de la profesión de abogado y procurador: "Es facultad de los aboga-
dos y procuradores, en ejercicio de su función, recabar directamente
de las oficinas públicas, bancos oficiales o particulares y empresas
privadas o mixtas, informes y antecedentes, como así también solici-
tar certificados sobre hechos concretos atinentes a las causas en que
intervengan. Estos pedidos deberán ser evacuados por las oficinas
y entidades aludidas dentro del término de quince días. En las soli-
citudes, el profesional hará constar su nombre, domicilio, carátula
del juicio, juzgado y secretaria de actuación. Las contestaciones se-
rán entregadas personalmente al profesional, o bien remitidas a su
domicilio, según lo haya solicitado; no habiendo realizado ninguna
solicitud en tal sentido, serán remitidas al Juzgado de la causa". Con
las lógicas adaptaciones, esta facultad resulta aplicable en el proce-
dimiento administrativo.
(45) El artículo 35 el Cód. Fiscal Bonaerense, ley 10.397 -t.o. Resolución del
Ministerio de Economía 39/2011- dispone: "A requerimiento de la Autoridad de
Aplicación, los terceros están obligados a suministrar a ésta todos los informes que
se refieren a hechos imponibles que, en el ejercicio de sus actividades profesionales
o comerciales, hayan contribuido a realizar o hayan debido conocer, salvo que
tal información implique la violación de un secreto profesional impuesto por
disposiciones legales". En caso de incumplimiento a esta obligación, el art. 60 prevé
la aplicación de multas que van desde$ 1.000 a$ 45.000.
CARLOS A. BOTASSI 47
3) Confesional
La circunstancia de que la prueba de confesión no revista en la
práctica administrativa la forma de una audiencia de absolución de
posiciones al estilo del proceso judicial, no excluye que en el curso
de una indagatoria sumarial disciplinaria el imputado pueda reco-
nocer hechos que lo perjudican. A su turno, el particular en sus pre-
sentaciones en el expediente, sean espontáneas o dando respuesta
a requerimientos de la autoridad a cargo del trámite, puede admitir
la existencia de hechos que conspiran contra el éxito de su preten-
sión. De igual forma, cuando un órgano de la Administración, con
competencia para pronunciarse respecto de una determinada ma-
teria, lo hace en forma conveniente al derecho o interés del parti-
cular, ese hecho o circunstancia queda probado y puede invocarse
frente al propio Estado, con el alcance de una "confesión''.
En cuanto a la posibilidad de tramitar la prueba de confesión
merced al mecanismo de la absolución de posiciones (pliego y fi-
jación de la audiencia, conforme a lo establecido en los artículos
402 y siguientes del CPCC), cabe distinguir que según semejante
pretensión se dirija a la Administración Pública o al administrado.
En el primer caso resulta de aplicación el artículo 405 del Código
Procesal Civil y Comercial en tanto estatuye que "cuando litigare la
Provincia, una municipalidad o una repartición municipal o pro-
vincial, la declaración deberá requerirse por oficio al funcionario
facultado por ley para representarla, bajo apercibimiento de tener
por cierta la versión de los hechos contenida en el pliego, si no es con-
testado dentro del plazo que el tribunal fije o no lo fuere en forma
clara y categórica afirmando o negando". El artículo 45 del Código
Procesal Administrativo (Ley 12.008 y sus modificatorias) regula la
cuestión en términos semejantes, abarcando tanto la prueba confe-
sional como la testimonial: "Declaración de funcionarios públicos.
Cuando fuere parte la Provincia, un municipio, o un ente provincial
o municipal, las preguntas a los funcionarios públicos tramitarán
por oficio dirigido a la autoridad superior del ente que en cada caso
correspondiere. Las contestaciones por escrito deberán efectuarse
dentro de los veinte (20) días posteriores a la recepción del oficio~
Resulta evidente que este mecanismo no concilia en absoluto con
la finalidad de la audiencia de posiciones, que impone la presen-
cia del funcionario que ha tenido contacto personal con los hechos
en disputa y su respuesta inmediata a las afirmaciones que le son
48 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
opuestas. La remisión del oficio con las posiciones propuestas por
el particular a la Administración implica en la práctica el giro del
mismo al servicio jurídico de la repartición, el cual proyecta las res-
puestas, y por ende, transforma a esta prueba en un simulacro de
confesión. Desde luego que este privilegio fue admitido por la doc-
trina debido a la organización piramidal de la Administración que
hace imposible que "el funcionario facultado por ley para represen-
tarla" (Gobernador, Intendente, Director de la entidad autárquica
o Presidente de la Empresa Estatal) concurra a las audiencias de
posiciones ya que transcurriría sus jornadas en los Tribunales, des-
atendiendo por ende las responsabilidades propias de su cargo. En
suma: en el procedimiento administrativo, el particular podrá po-
ner posiciones al representante del ámbito estatal en cuestión pero
éstas serán satisfechas mediante el diligenciamiento de un oficio al
que se anexará el pertinente pliego.
Cuando la prueba confesional le es opuesta al particular, con-
sideramos que resulta factible que se fijen audiencias con esa fina-
lidad. Las posiciones serán redactadas por la autoridad adminis-
trativa a cargo del trámite y versarán sobre los hechos vinculados
al derecho o interés en disputa. En cuanto a la forma de las posi-
ciones, se guarda en sobre cerrado, forma de las contestaciones y
consecuencia de la incomparecencia del absolvente, se aplicarán
-con los ajustes del caso- los artículos 407 y siguientes del CPCC.
Debido a la trascendencia y efectos que posee el desarrollo de
esta diligencia en el curso del procedimiento, y respecto de la suer-
te de los derechos en juego, somos de la opinión de que es uno de
los supuestos en los cuales debería exigirse la comparecencia del
interesado con patrocinio letrado, bajo pena de nulidad.
4) Testimonial
Se trata de una prueba de uso corriente en el procedimiento ad-
ministrativo, aunque es justo reconocer que no todas las reparticio-
nes suelen actuar con el mismo criterio, registrándose conceptos
tan extremos como los que van de permitir la presentación de inte-
rrogatorio a la parte a negarle toda injerencia, aun la de estar pre-
sente en la respectiva audiencia de recepción de las declaraciones.
El Reglamento del decreto ley nacional 19.549/72 se refiere a esta
prueba en sus artículos 49 a 53. Lo hace de una manera que consi-
CARLOS A. BOTASSI 49
deramos acertada y que bien puede servir de pauta a la Administra-
ción provincial ante la necesidad lógica de adaptar las disposiciones
del Código Procesal ideadas para el funcionamiento de órganos ju-
diciales. Allí se dispone que los testigos declararán ante el funciona-
rio competente en la audiencia que se establezca al efecto (se fijará
una audiencia supletoria para el caso de no concurrir a la primera).
La incomparecencia de los testigos a ambas audiencias hará perder
al proponente el testimonio de que se trate, pero la ausencia de la
parte interesada no obstará al interrogatorio de los testigos presen-
tes. El particular podrá presentar un interrogatorio hasta el momen-
to mismo de la audiencia, sin perjuicio de las preguntas que libre-
mente formule la autoridad administrativa. Se labrará un acta en la
que consten las preguntas y las respuestas. Los testigos domiciliados
fuera del asiento de la repartición, podrán concurrir a la misma o
declarar en alguna oficina pública ubicada en el lugar de la residen-
cia del propuesto por el agente en quien se delegue la tarea.
El régimen nacional -que bien podría tomarse como fuente en
una futura reforma de la legislación procedimental bonaerense-
coincide en la práctica con el utilizado por un sector de la Admi-
nistración bonaerense. Sin embargo, pensamos que corresponde
complementarlo con algunas previsiones del CPCC:
-No podrán ser ofrecidos como testigos, ni citados de oficio por
la Administración, quienes no posean 14 años de edad (art. 424).
-Al ofrecer la nómina de testigos, el particular indicará sus da-
tos de manera de facilitar su individualización, en especial lo ati-
nente a su domicilio, a fin de su citación formal (art. 427);
-La citación a los testigos se efectuará por medio fehaciente
(art. 431).
-Antes de la declaración, los testigos prestarán juramento
o promesa de decir verdad y serán sometidos a un interrogatorio
preliminar (preguntas generales de la ley) tendiente a establecer su
grado de objetividad e imparcialidad ( arts. 438 y 439).
-El funcionario actuante podrá disponer el careo entre testi-
gos o entre éstos y el particular o funcionarios de la Administración
(art. 446).
-Así como el particular no puede ser testigo en su propio asun-
to, tampoco deberá admitirse la declaración de los funcionarios
50 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
que deben, llegado el caso, adoptar la decisión final en el trámite,
o aquellos que de cualquier manera hayan dictaminado u opinado
en el asunto o deban hacerlo en el futuro.
En cuanto respecta a la obligación de testimoniar, cabe seña-
lar que si el convocado es un empleado público, el Estatuto san-
cionado por ley 10.430 impone la obligación de declarar en los
sumarios administrativos ordenados por autoridad competente,
como así también en las informaciones sumarias (art. 78inc. p),
excepto que el testigo propuesto "tuviere impedimento legal para
hacerlo'; como sería el caso en que su declaración pudiera originar
interpretaciones de parcialidad, según los términos del inc. "m"
del citado artículo 78, y los supuestos del exclusión del artículo
425 del CPCC.
Si bien la comentada disposición alude a los "sumarios admi-
nistrativos'; su espíritu y el deber genérico de obedecer las órdenes
del superior jerárquico, hace que sea obligatorio para todo agente
público declarar como testigo en los asuntos en que la Adminis-
tración lo convoque. En caso de incumplimiento, será pasible de
las sanciones disciplinarias contempladas en el mismo Estatuto.
Con relación a la declaración de particulares extraños a la Ad-
ministración, la cuestión resulta radicalmente distinta. Si alguna
persona citada como testigo no comparece a las audiencias, o en
forma directa manifiesta su voluntad de no declarar, la autoridad
a cargo del trámite carece de facultades para sancionarlo o para
lograr su comparecencia forzosa. El deber de todo ciudadano de
declarar como testigo se encuentra limitado al proceso judicial
por dos razones: primero porque así lo impone el artículo 424 del
Código Procesal Civil y Comercial, y en segundo término, debido
a que por la índole de la cuestión no resulta susceptible de una in-
terpretación extensiva al procedimiento administrativo, tratándose
de una cuestión vinculada con la libertad personal sólo los jueces
pueden sancionar la conducta remisa o con mayor razón, disponer
del uso de la fuerza para trasladar personas.
5) Pericial
El artículo 457 del Código Procesal Civil y Comercial establece
que "será admisible la prueba pericial cuando la apreciación de los
hechos controvertidos requiriere conocimientos especiales en alguna
ciencia, arte, industria o actividad técnica especializada~
CARLOS A. BOTASSI 51
El particular deberá especificar la profesión o idoneidad del pe-
rito que propone y los puntos sobre los que versará su trabajo técni-
co. La designación del perito la efectuará la Administración (46), pu-
diendo recaer en un profesional vinculado a la repartición, siempre
y cuando no haya opinado con anterioridad en el asunto ni corres-
ponda que lo haga en el futuro. Resulta sin embargo aconsejable,
la designación de peritos totalmente extraños a la Administración
Pública, acudiendo al sorteo de un listado que pueden proporcionar
los respectivos colegios profesionales. De esta manera se despeja
toda duda respecto de la imparcialidad del técnico llamado a dicta-
minar, sin asumir costos ya que los gastos y honorarios que deven-
gue la diligencia probatoria estarán a exclusivo cargo del particular.
En esta materia resulta aconsejable emplear el procedimiento
previsto en el Reglamento del decreto-ley nacional (arts. 54 a 57): el
particular al solicitar la designación del perito propondrá los puntos
de pericia y aquél deberá aceptar el cargo dentro de los cinco días de
nombrado. Si ese plazo venciera sin que se postule por el interesado
un reemplazante, se perderá el derecho a esta prueba. El proponen-
te deberá instar al perito para que presente su trabajo en tiempo y
forma, en caso contrario también decaerá el derecho a producirla.
La Administración debe designar peritos versados en la mate-
ria puesta a su consideración. "Si la profesión estuviese reglamen-
tada, los peritos deberán tener título habilitante en la ciencia, arte,
industria o actividad técnica especializada a que pertenezcan las
cuestiones acerca de las cuales deben expedirse" (art. 462 del CPCC).
Si los peritos no poseyeran la idoneidad necesaria para cumplir efi-
cazmente su cometido, podrán ser recusados por el administrado.
También podrá pedirse el relevamiento del perito cuando existiere
'justa causa" (art. 463 del CPCC). La amplitud de esta disposición
permite objetar al perito en los siguientes casos: 1) tener interés
personal en el resultado del trámite; 2) tener pleito pendiente con el
recusante; 3) haber sido denunciante del interesado; 4) tener ene-
mistad u odio manifiesto (4 7).
(46) Esta es la solución de los arts. 54 y 55 del Reglamento del Dec. Ley 19.549/72
en tamo refieren que el particular propondrá y/o solicitará, sin que mencione en
absoluto la posibilidad de que aquél proponga al experto.
(47) Se trata de causales de recusación de Jos jueces contempladas en el artículo
17 del CPCC, también recogidas como causales de excusación en el procedimiento
administrativo por el artículo 6 del Dec. Ley 7647/72.
52 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
En cuanto al plazo dentro del cual debe presentarse el dictamen
pericial, el artículo 77 inc. "e" del decreto ley 7647 /70 lo fija en diez
días, extendiéndose a 30 si el agente se ve obligado a trasladarse
fuera de su lugar de trabajo. Este término se refiere exclusivamente
al caso de que la pericia sea realizada por un empleado de la Admi-
nistración. Si se tratara de un perito ajeno a la misma, el plazo para
la presentación de su estudio sólo estará limitado por el establecido
para la producción de toda la prueba conforme lo dispuesto por el
artículo 55.
El artículo 474 del Código Procesal Civil y Comercial estatuye
que "la fuerza probatoria del dictamen pericial será estimada por
el juez teniendo en consideración la competencia de los peritos, la
uniformidad o disconformidad de sus opiniones, los principios ju-
rfdicos en que se funden, la concordancia de su aplicación con las
reglas de la sana crítica y demás pruebas y elementos de convicción
que la causa ofrezca~ Esta norma no puede aplicarse sin más al pro-
cedimiento administrativo toda vez que fue redactada suponiendo
la existencia de peritos de parte y eventuales dictámenes contradic-
torios, y dirigida al método de valoración de la prueba en virtud de
la "sana crítica'; pero no cabe duda de que contiene indicaciones de
elemental sentido común -sobre todo lo relativo a la coincidencia
de la pericia con otras pruebas producidas- que es prácticamente
imposible de soslayar. La Administración podrá objetar la pericia o
pedir ampliaciones y explicaciones al perito, pero en última instan-
cia, a la hora de resolver la cuestión de fondo, no podrá proceder
como si el dictamen técnico no existiera (48). La garantía de defen-
sa no sólo habilita para ofrecer y producir prueba, sino que impone
a la autoridad competente su consideración.
6) Reconocimiento de lugares o cosas
Siguiendo a PAI,ACIO, podemos definir el reconocimiento de lu-
gares o cosas como el medio probatorio en virtud del cual el órgano
administrativo a cargo del procedimiento realiza una "percepción
sensorial directa sobre cosas, lugares o personas, con el objeto de ve-
rificar sus cualidades, condiciones o características"(49).
(48) GORDILLO, AGUSTÍN, Tratado de Derecho Administrativo, t. 4, p. VI-37,
FDA, 2010, 10° ed.
(49) PALACIO, LINO E., Derecho Procesal Ciuil, t. IV, p. 473. Abeledo Perrot, 1984.
CARLOS A. BOTASSI 53
Los artículos 471y477 del CPCC autorizan que en la diligencia
de reconocimiento participen testigos y/o peritos con aquél obje-
to, aportando precisiones sobre los lugares o cosas a examinar, pu-
diendo confeccionarse planos, tomarse fotografías o reconstruirse
hechos.
A fin de incorporar al expediente documentadamente el resul-
tado del reconocimiento, corresponde levantar un acta que será
suscripta por todos los intervinientes, consignándose, con la mayor
precisión posible todo lo visto, oído y comprobado, a fin de ponde-
rarlo acabadamente en el momento de dictar el acto administrativo
definitivo.
H. Impugnación de actos administrativos
El Dec. Ley 7647 /70 aglutina en su capítulo XIII (artículos 86 a
102) el tratamiento de los recursos administrativos dirigidos contra
actos administrativos y enderezados a impugnar reglamentos.
Como regla general se dispone que las decisiones administrati-
vas (finales o interlocutorias) resultan impugnables (art. 86), y ha-
ciendo aplicación del principio de ínformalismo a favor del admi-
nistrado el artículo 88 estatuye que: "los recursos deberán proveerse
y resolverse cualquiera sea la denominación que el interesado les dé,
cuando resulta indudable su impugnación o disconformidad con el
acto administrativo':
La normativa bonaerense contiene una serie de requisitos de
admisibilidad formal de los recursos, que son examinados a su pre-
sentación por el órgano ante el cual se interponen. Según la grave-
dad de la condición incumplida, el recurrente podrá ser intimado
a subsanar el vicio o podrá rechazarse liminarmente el recurso. En
virtud del recordado principio de informalisrno, en caso de duda, el
recurso deberá admitirse en cuanto a sus formas y entrarse a ana-
lizar el fondo del asunto para resolver en definitiva aquello que en
derecho corresponda.
Las condiciones de viabilidad establecidas en el decreto-ley
son:
a) Que el recurso sea interpuesto dentro del plazo que fijan
los artículos 89, 92 y 94 (este último por remisión al anterior), de
conformidad a lo prevenido en la primera parte del artículo 79 y sin
54 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
perjuicio de que pueda ser considerado como "denuncia de ilegiti-
midad" en virtud de lo dispuesto en su segunda parte.
b) Que se interponga por escrito con las formalidades de los
artículos 29 y 33, debidamente fundados (arts. 89, 92, 94).
c) Que se ofrezca con ellos la prueba, tanto para el caso de re-
currirse actos de oficio (art. 96) o que hayan sido emitidos con la
participación del interesado.
d) Que el particular posea legitimación para interponerlo y
el órgano administrativo competencia para resolverlo (arts. 3° y
86).
e) Que vaya enderezado a la crítica de un acto administrativo,
ya que las medidas preparatorias, informes, dictámenes y vistas no
son recurribles (art. 87).
f) Que no vaya dirigido a la impugnación de un acto que causó
estado, pues contra él sólo caben acciones judiciales (50). De acuer-
do a lo establecido en la parte final del artículo 96, lo decidido por el
Gobernador (o por el intendente en el orden municipal) al resolver
un recurso de revocatoria -en la actualidad de carácter optativo-
constituye una decisión definitiva que causa estado. Por ende, no
procede en su contra recurso administrativo alguno y sólo resulta
impugnable en vía judicial.
Una cuestión de suma trascendencia es la relativa a la funda-
mentación del recurso. A diferencia de lo que ocurre en el ámbito
judicial, los recursos del procedimiento administrativo deben fun-
darse al momento de su interposición. Es decir que "en el escrito
en que se deduce el recurso administrativo debe fundarse el derecho
invocado, y si bien no se requieren términos sacramentales, se deben
plantear cuando menos claramente las objeciones que luego han de
servir para el examen judicial" (51), ya que el requisito de suficiente
fundamentación del recurso administrativo no se cumple si el recu-
rrente se limita a expresar que la resolución impugnada es injusta
(50) Esto es así porque los actos administrativos no pueden estar indefinidamente
expuestos a la posibilidad de una revisión por vía de recurso (DIEZ, MANUEL M.,
Derecho Administrativo, cit., p. 334).
(51) SCBA, causas B-48-173, Guido, 16/12/1980, en A y S 1980-III-833; B-48-
086, Tucci, 06/10/1981; etc.
CARLOS A. BOTASSl 55
y contraria a derecho, y que el recurso se interpone con el único
objeto de dejar expedita la vía judicial (52).
Al examinar si la fundamentación de un recurso resulta "sufi-
ciente" para ser considerado por la Administración y dejar expedita
la instancia judicial, se ha medido con distinta vara y efectuado dis-
tingos según fueran recursos cuya decisión causara estado por pro-
venir del órgano superior del área, o si se tratara de impugnación
de actos a resolver por funcionarios intermedios sujetos a futuros
exámenes. "Si bien el principio del formalismo moderado encuentra
limitaciones en materia de recursos administrativos, en virtud del
mayor rigor con que resultan exigibles los recaudos formales de ese
ámbito en atención a su formalidad, cuando la fundamentación del
recurso satisface las exigencias mínimas de cumplimiento, se torna
viable la dispensa formal" (53).
Partiendo de la base de que debe favorecerse el mejor ejercicio
posible del derecho de defensa, pensamos que una fundamentación
que puede catalogarse de insuficiente, y aun la propia ausencia de
fundamentación debería ser susceptible de saneamiento, pudien -
do ser subsanada dentro dei plazo legal establecido para recurrir, el
cuál en función de lo previsto en el art. 98 (54) se interrumpe con la
mera interposición del recurso aunque resulte defectuoso.
En otro orden de consideraciones corresponde destacar que el
abandono progresivo del denominado "carácter revisor" del pro-
ceso administrativo, hace que aquellas cuestiones no objetadas ni
planteadas en sede administrativa puedan más tarde ser introduci-
das y discutidas en el juicio posterior, atento el carácter de ''juicio
pleno" que le otorgan la Constitución y la ley.
l) Recurso de revocatoria
De acuerdo al artículo 89 del Dec. Ley 7647 /70, el recurso de
revocatoria (equiparable al recurso de reconsideración del ámbi-
to nacional) procederá contra todas las decisiones administrativas,
sean finales o de mero trámite. Debe interponerse dentro del plazo
(.52) SCBA, causasB-47-533, Olsen, 04/09/1979; B-47-534, Guardamagna, 04/09/1979.
(53) SCBA, causa B-52-262, Solanas, 01/10/1991, A y S 1991-III-424.
(54) Dec. Ley 7647/70, art. 98: "La interposición del recurso tiene por efecto:
1°- Interrumpir el plazo del art. 92 aunque haya sido deducido con defectos formales
o ante órgano incompetente ... ".
56 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
de 10 días ante la autoridad que dictó el acto impugnado quién, asi-
mismo, es la encargada de resolver el recurso.
Se trata de un recurso optativo en un doble sentido. En primer
lugar porque no constituye un recaudo a cumplir para acceder al
recurso jerárquico que puede ensayarse en forma directa. En se-
gundo término, porque su articulación no resulta imprescindible
para habilitar la instancia judicial, sin perjuicio de que en caso de
articularse deberá ser resuelto por la Administración y la decisión
que recaiga podrá ser revisada judicialmente, sin que pueda invo-
carse el transcurso del plazo de caducidad.
El artículo 91 establece que, tratándose de la impugnación
de actos definitivos (es decir aquellos que resuelven la cuestión
de fondo) o dictados como respuesta a peticiones concretas del
recurrente, el recurso de revocatoria lleva implícito el recurso
jerárquico en subsidio. Rechazada la revocatoria, el interesado
dispondrá de 48 horas contadas desde la recepción del expedien-
te por el superior, para mejorar o ampliar los fundamentos de su
recurso.
2) Recurso jerárquico
Aparece contemplado en el artículo 92. Procede contra los actos
administrativos finales y los que resuelven peticiones del interesa-
do (excepto las que originen providencias de mero trámite). Debe
interponerse dentro del plazo de 10 días, debidamente fundado,
excepto que antes se haya interpuesto recurso de revocatoria. Se
ingresa ante el mismo órgano que dictó el acto cuestionado, pero es
resuelto por otro órgano superior.
Conforme lo estatuido por los artículos 99 y 100, el recurso je-
rárquico es decidido por el funcionario inmediato superior al que
dictó la decisión impugnada si detenta un cargo inferior a director.
En cambio, si la decisión recurrida emana de un director o funcio-
nario superior a dicha categoría, el recurso debe resolverlo el Poder
Ejecutivo.
3) Recurso de apelación
De acuerdo al artículo 94 del Dec. Ley 7647 /70, "Contra las deci-
siones finales de los .entes autárquicos, que no dejen abierta la acción
contencioso administrativa, procederá un recurso de apelación con
CARLOS A. BOTASSI 57
las formalidades establecidas en el artículo 92. El conocimiento de
este recurso por el Poder Ejecutivo está limitado al control de la legi-
timidad del acto, el que podrá anular, pero no modificar o sustituir.
Anulado el acto, procederá la devolución de las actuaciones para
que el ente autárquico dicte nuevo acto administrativo ajustado a
derecho~ Se trata del remedio que en el ámbito nacional reside en la
denominación de recurso de alzada.
El carácter "definitivo" del acto no ofrece mayor dificultad (rei-
teramos que se trata de la decisión relativa a la cuestión de fondo),
en cambio resulta imprescindible considerar detenidamente la re-
ferencia a aquellas decisiones "que no dejen abierta la acción con-
tencioso administrativa''.
En este sentido cabe recordar que la regulación constitucional y
legal (art. 166 de la Constitución Provincial; arts. 14y15 del Código
Procesal Administrativo - ley 12.008 y sus modificatorias) relativa al
agotamiento de la vía administrativa en general, expande sus efectos
sobre esta cuestión particular. Por lo pronto, resulta innegable que
las decisiones del órgano superior del ente descentralizado (55), en
el ejercicio de una competencia propia, que resuelvan la cuestión
de fondo -o que atendiendo a un aspecto del trámite, impidan su
continuación-, dejan expedita la acción judicial, tornando innece-
sario la articulación recursiva. En este sentido consideramos que el
recurso de apelación reviste carácter optativo, ya que estamos ante
decisiones que permiten derechamente su cuestionamiento judi-
cial sin que resulte imprescindible someter la cuestión al examen
de legalidad por parte del Poder Ejecutivo como recaudo previo a
la acción judicial(56). Naturalmente que en caso de que el intere-
sado articule el recurso de apelación, el tránsito por la vía adminis-
trativa quedará agotado (habilitando la vía judicial) una vez que el
Poder Ejecutivo se expida respecto de los agravios del apelante.
Nos hallamos, entonces, ante un medio de impugnación de las
decisiones finales de las entidades descentralizadas que tiene por
finalidad demostrar su ilegalidad ante el Poder Ejecutivo, quien
de corresponder, las anulará. Este recurso, ante la falta de relación
(55) Incluyendo las provenientes de un órgano inferior con competencia
delegada.
(56) La tendencia normativa es la eliminación del recurso de alzada. Conf.
Gordillo, Agustín, Tratada de Derecho Administratiua, cit., t. 4, p. XI-2.
 1
58 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
jerárquica entre el órgano recurrido y el que resuelve la impugna-
ción, encuentra apoyo en el principio constitucional que coloca al
Gobernador como Jefe de la Administración Provincial (art. .144 de
la Constitución Provincial), último responsable de la legalidad de
las decisiones oficiales y detentador de un poder de tutela (57).
A diferencia de lo que ocurre en los recursos precedentemente
tratados (de revocatoria y jerárquico) que proceden tanto porra-
zones de ilegitimidad como de oportunidad, mérito o convenien-
cia, el recurso de apelación sólo puede intentarse cuando el acto se
aparte de la solución jurídica correspondiente a la pretensión del
particular. Esta circunstancia hace que el Poder Ejecutivo, limitado
al control de legitimidad de la decisión impugnada, pueda anularla
pero no modificarla o reemplazarla por otra de su autoría.
Por aplicación del art. 92 del decreto-ley (al que remite el art.
94), la apelación deberá fundarse en el mismo escrito en que se la
interpone (salvo que fuera precedida de un recurso de revocato-
ria), deducirse dentro del plazo de diez días y dirigirse al órgano
que dictó el acto para que eleve las actuaciones al Poder Ejecutivo.
"El recurso de apelación contra la decisión de un ente autárquico
no puede considerarse interpuesto en subsidio -como lo es, en cam-
bio, el jerárquico contra actos de la administración centralizada- de-
biendo ser expreso y concreto" (58). Sin embargo, por aplicación de
los principios de celeridad y amplitud en la recepción de recursos,
nada impide que se deduzca en subsidio de una revocatoria en for-
ma expresa.
El decreto ley de 1970 regula el recurso de apelación para ser in-
tentado contra decisiones de "entes autárquicos'; sin aclarar -·como
lo hace la normativa nacional (59)- si cabe extenderlo a las Empre-
(57) CASSAGNE, JUAN C., La extensión del concepto de tutela y el control de los
actos de las Sociedades del Estado, LA LEY, 1978-C, 717 y Derecho Administrativo,
cit., t. Il, p. 758 y sigtes.
(58) Asesoría General de Gobierno, Expte. 2918-66.380/75, Dictámenes, nº 3, p. 43.
(59) El decreto 1883/91, que modificó y ordenó el texto del Reglamento del DLPAN,
refiriéndose al recurso de alzada (equivalente a nuestra apelación) dispone en su art.
4° que "los actos administrativos definitivos o asimilables que emanaren del órgano
superior de empresas o sociedades de propiedad total o mayoritaria del Estado nacional
serán recurribles mediante el recurso de alzada previsto en el art. 94 del reglamento
aprobado por decreto 1759 de fecha 03/04/1972. Este recurso no procederá contra los
actos inherentes a la actividad privada de ia empresa o sociedad en cuestión".
CARLOS A. BOTASSJ 59
sas o Sociedades en las que tenga participación el Estado, que revis-
ten el carácter de entes descentralizados al igual que aquéllas. Pen-
samos que la respuesta debe ser afirmativa, pues tales entes dictan
actos administrativos cuya legitimidad cabe controlar y también
porque la amplitud de recepción de los medios recursivos, hace a
la mejor defensa del principio constitucional del debido proceso a
favor del administrado.
Corresponde recordar que antes de que el recurso de apelación
llegue a conocimiento del Gobernador (60) o del ministro, si lama-
teria en cuestión le hubiera sido delegada, corresponde recibir el
dictamen de la Asesoría General de Gobierno, el informe de la Con-
taduría General si correspondiere, y en su caso, la vista de la Fisca-
lía de Estado, conforme la manda del artículo 101.
I. Impugnación de reglamentos
El artículo 95 del decreto ley 7647 /70 estatuye lo siguiente: "En
caso de que, por una medida de carácter general, la autoridad ad-
ministrativa perjudicase derechos privados o de otra administración
pública, deberá acudirse individualmente a la misma autoridad que
dictó la medida general, reclamando de ella, y solicitando se deje sin
efecto la disposición en cuanto al interés al que perjudica o al dere-
cho que vulnera dentro del plazo de 30 días a partir de la última pu-
blicación en el Boletín Oficial o de su notificación~ Se regula de esta
manera un recurso contra "actos generales'; a los que la normativa
bonaerense también denomina "medida de carácter general''. En la
doctrina nacional se alude a "actos de alcance general'; terminolo-
gía que también emplea el decreto ley 19.5459/72 en su art. 24 y su
Reglamento en el art. 73, para aludir a los reglamentos administra-
tivos y a ciertas decisiones de la Administración caracterizadas por
tener múltiples o indeterminados destinatarios.
De los dos tipos de actos generales interesa profundizar aquí la
noción de reglamento administrativo (que posee contenido nor-
mativo), pues el acto de alcance general en sentido estricto es un
acto administrativo y le caben, por ende, las previsiones de los ar-
tículos 103 y siguientes del decreto ley.
(60) El Gobernador de la Provincia de Buenos Aires es el único titular del Poder
Ejecutivo según el art. 119 de la CPBA.
 l CARLOS A. BOTASSI
60 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
El análisis detenido del artículo 95 y su correlación con lo dis-
puesto en el art. 14 del Código Procesal Administrativo -ley 12.008 y
sus modificatorias- permite desglosar los elementos componentes
del sistema impugnatorio de los reglamentos ante la propia Admi-
nistración Pública. En primer término conviene resaltar que nos
hallamos ante un verdadero recurso y seguidamente que se trata
de un recurso de carácter optativo. Si bien el texto legal expresa que
"deberá acudirse individualmente a la misma autoridad que dictó
la medida general reclamando de ella...'; no cabe duda de que no
estamos frente a un tipo especial de "reclamo" sino ante un verda-
dero "recurso''. Nótese que el artículo 95 se ubica en el Capítulo XIII
de la ley, "De los recursos~y aparece precedido del título "Recurso
contra actos generales~
Como se intenta ante el mismo funcionario que dictó la medida
general, se trata de un recurso de revocatoria, aplicándose lo nor-
mado en el artículo 89 en cuanto a su fundamentación por escrito
en el acto de ser deducido. En caso de silencio, se presentará un su-
puesto de denegatoria tácita habilitante de la vía judicial conforme
se expondrá más adelante.
La impugnación recursiva puede efectuarse hasta treinta días
hábiles posteriores a la publicación del reglamento en el Boletín
Oficial o desde su notificación fehaciente a los interesados (arts. 68,
112 y 125). De todos modos, vencido el plazo de 30 días, solamen-
te cae la posibilidad del cuestionamiento directo del reglamento, y
ello en modo alguno perjudica la impugnación indirecta (adminis-
trativa o judicial) a través de la interposición de recurso adminis-
trativo o demanda judicial contra el acto particular de aplicación.
J. Reclamo administrativo y agotamiento de la vía administra-
tiva
Antes de la reforma constitucional de 1994, debido al carácter
revisor del proceso administrativo impuesto por el art. 149 de la
Carta Provincial y por el Código Procesal Administrativo proyec-
tado por Luis V. Varela (que rigió entre 1906 y 2003), no se podía
acceder a la Justicia si no se contaba con una decisión que causara
estado. Ello hizo necesario agotar la vía administrativa mediante el
reclamo previo al juicio y/ o la sustanciación de todos los recursos
administrativos disponibles.
61
El nuevo texto constitucional (art. 166) relativizó el cumplimien-
to de aquel recaudo, invirtiendo la regla del antiguo y derogado siste-
ma, consagrando en su consecuencia el principio de la demandabi-
lidad directa, encomendando al legislador establecer los supuestos
en los cuáles -con carácter excepcional- resulte obligatorio agotar
la vía administrativa. Esta idea, que fue inicialmente recogida por
la jurisprudencia(61), más tarde fue sustancialmente alterada por
la reforma introducida por la ley 13.101 al Código Procesal Admi-
nistratívo -ley 12.008, texto según ley 12.310-(62), e incluso llegó al
extremo de imponer la petición suspensiva previa en materia caute-
lar, cuando lo pretendido es la suspensión de los efectos de un acto
administrativo (arts. 14 y 25 inciso 2 del citado Código) (63).
Una situación especial se presenta con el decreto-ley 5875/63
-cuya vigencia fue ratificada por la ley 6736-, que no ha sido deroga-
do expresamente. El mismo dispone que "los jueces que conozcan en
(61) La Suprema Corte de Justicia provincial, en ia causa B-64.533, Gaineddu
del 23/04/2003, explicó que "resulta inocultable el cambio paradigmático
que introduce el nuevo texto constitucional, en cuanto persigue extender el
en¡uiciamiento de las contiendas administrativas y vigorizar el control de la
Administración, favoreciendo el acceso a los tribunales contencioso administrativos.
Se deduce, entonces, de aquella norma y de la explícita consagración de la eficaz
tutela judicial (art. 15 Const. prov.) la superación del formalismo extremo que
caracterizó, a veces como una rémora inconducente para la obtención de una
soluciónjudicial de los conflictos, a ciertos institutos correspondientes al régimen de
admisibilidad del proceso en la legislación adjetiva gestada en el anterior sistema
(. ..). En este contexto, supuesta la efectiva configuración de un caso (art. 166 in fine
Const. prov.) para cuya ocurrencia en ocasiones puede ser menester la articulación
de un pedimento ante la entidad administrativa, el tránsito por vías administrativas
-ora la reclamación ante la autoridad, ora el procedimiento recursivo en la misma
sede- ha de tener cabida, como excepción a la directa demandabilidad estatal,
en aquellas hipótesis expresamente requeridas por un enunciado normativo de
rango legal. Regulación de la cual la carga de acudir ante la Administración ha
de ser una expresa y razonable consecuencia, a fin de no contrariar el principio de
accesibilidad irrestricta a la jurisdicción (art. 15 Const. prou.)".
(62) Los reparos a dicha iniciativa legislativa, pueden verse en BOTASSI,
CARLOS A .. Contrarreforma del proceso administrativo (inconstitucionalidad
parcial de ia ley 13.10.l}, JA, 2004-lV-1271.
(63) La morigeración jurisprudencia! del instituto ha sido expuesta en
CARDOZO, MARÍA EVANGELINA y RICHERO, MARÍA JULIA, La exigencia del
pedido previo de suspensión de la ejecución del acto en sede administrativa, como
presupuesto de admisibilidad de la pretensión cauteím; p. 88 y sigtes., Revista Derecho
Administrativo, Año 1, N° O, Diciembre 2006, Asociación Bonaerense de Derecho
Administrativo (ABDA), La Plata, 2006.
 'I
62 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
las acciones civiles que se promuevan contra la Provincia, sus reparti-
ciones autárquicas o las municipalidades, no podrán darle curso sin
que se acredite haber procedido la reclamación de los derechos con-
trovertidos ante el Poder Ejecutivo, órgano administrativo competen-
te o Departamento Ejecutivo según fuere el caso, y su denegación por
parte de éste" (art. 1° ). Afortunadamente, la norma tuvo poca vida,
ya que inmediatamente fue considerada inconstitucional, en tanto
se aplicara a juicios de desalojo contra el Estado Provincial (64), y
posteriormente se extendió la tacha a todo tipo de juicio civil, inclu-
yendo a los municipios como parte, estimando que la exigencia del
reclamo administrativo previo a la demanda judicial "colocaría al
Estado en situación de preeminencia con relación a los particulares
demandados por la misma acción, lo que significaría transgredir lo
normado en el art. 16 de la Constitución Nacional" (65).
Desde entonces, el Estado demandado en causa civil (66) ha de-
jado de oponer la excepción de falta de acción ante la carencia de
reclamo previo y el art. 1° del dec.-ley 5875/63 aparece abrogado
por desuso. Sin embargo, se ha reconocido efecto interruptivo de la
prescripción al cumplimiento voluntario de dicho trámite por parte
del interesado (67).
(64) SCBA, causa Ac. 9105, del 26/04/1966, A y S, 1966-1-629, "López, Santos
Manuel y otros e/Fisco de la Provincias/Desalojo"; causa Ac. 10.553, del 20/12/1966,
"Gandini, Pedro (su sucesión) e/Ministerio de Educación de la Provincia de Buenos
Aires s/Desalojo", A y S, 1966-III-915.
(65) SCBA, causaAc. 18.592, del 22/08/72, "Ferrari, Carlos A. e/Municipalidad de
Gral. San Martín y otros s/Daños y perjuicios", A y S, 1972-Il-422; causa Ac. 35.948,
del 05/04/1988, "Muras, Juan Manuel y otro e/Municipalidad de Gral. San Martín s/
Daños y perjuicios", Ay S, 1988-I-514.
(66) Además, muchas cuestiones antiguamente comprendidas en la noción de
causa civil, quedaron comprendidas en la delimitación de la cláusula constitucional
del art. 166, y en su consecuencia lo relativo ai cumplimiento o excepción de
determinados recaudos de admisibilidad, alcanzadas por las disposiciones del
Código Procesal Administrativo. Circunstancia que adiciona un argumento más,
para inclinarse por su inaplicabilidad general.
(67) "Si bien en otros precedentes esta Corte estableció que no resulta sometido el
progreso de las demandas civiles contra el Estado provincial a la previa reclamación
administrativa, y a estos efectos declaró inaplicable el citadv decreto-ley a toda
clase de juicios que contra el mismo se siguieran, ello no obsta a que cumplida la
tramitación -tal como la vigencia de la norma exige- la misma posea virtualidad a
los fines previstos por el art. 3986 del Código Civil. No podría recibir amparo judicial
el litigante que por un ládo pretende obligar a su contrario a una instancia previa al
reclamo judicial y, paralelamente, opone la prescripción a éste cuando aquél acudió
a tal trámite, queriendo incorporar al plazo de prescripción Ja duración del mismo",
CARLOS A. BOTASSI 63
En cuanto respecta al llamado "agotamiento recursivo'; es decir,
la necesidad de interponer todos los recursos administrativos que
contemple la legislación, en aquellos casos en que el reclamo del
particular lo resuelve negativamente un funcionario de menor je-
rarquía y en los supuestos de decisiones administrativas dictadas
de oficio, en el ya citado caso Gaineddu la Suprema Corte local sos-
tuvo que "el tránsito por vías administrativas, a través del procedi-
miento recursivo ante dicha sede, ha de tener cabida como excepción
a la directa demandabilidad estatal" (68), convalidando la tesis del
carácter optativo de recurso de revocatoria cuando ya se ha expedi-
do el órgano con competencia decisoria.
K. Suspensión de efectos del acto administrativo
El artículo 98 del decreto ley 7647 /70 establece que, la interpo-
sición de un recurso administrativo tiene por efecto "facultar a la
Administración a suspender la ejecución del acto impugnado cuan-
do el interés público lo aconseje o la petición del interesado invoque
jundadamente perjuicio irreparable" (inc. 2°). La Suprema Corte
provincial ha decidido que "los recursos administrativos carecen, en
principio, de efecto suspensivo. La autoridad administrativa no está
impedida de exigir el cumplimiento del acto impugnado, ni los parti-
culares afectados pueden eludirlo amparándose en el hecho de haber
deducido un recurso de revocatoria" (69). Se parte de la base de que
la competencia es irrenunciable y constituye deber del agente ha-
cer lo necesario para que se cumpla lo resuelto. Por excepción, se
autoriza a la Administración a suspender los efectos del acto hasta
tanto se pronuncie sobre la suerte del recurso, siempre y cuando lo
aconseje la defensa del interés público y el recurrente invoque, con
algún grado de verosimilitud, que la ejecución del acto le provocará
perjuicios irreparables.
No compartimos el criterio restrictivo que informa la disposi-
ción legal, y partiendo de la base de que la ejecutoriedad no es una
SCBA, causa Ac. 62.889, del 10/11/1998, "Milanese, Ismael Ornar e/Provincia de
Buenos Aires s/Daños y perjuicios", DJBA 156:14; A y S 1998-V-671; causa Ac. 66.792,
del 19/02/02, "Pecile, Jacinto José e/Provincia de Buenos Aires s/Daños y perjuicios",
DJBA 163:124.
(68) SCBA, B 64553, Gaineddu, 23.4.2003.
(69) SCBA, causa B-47.697, del 04/08/1981, "IVA Hnos. SRL e/Municipalidad de
La Matanzas/Demanda contencioso administrativa", en A y S 1981-II-416.

64 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
condición inexorable del acto administrativo (ya que no se justifica
en todos los supuestos), pensamos que la suspensión de la ejecuto-
riedad del acto recurrido debe actuar como regla general, cediendo
sólo en aquellos casos en que la materialización de lo decidido no
admita postergación (70).
Si bien el inciso 2° del art. 98 parece limitar la potestad suspensi-
va a aquellas situaciones en que la ejecución del acto afecte el inte-
rés público o pueda causar perjuicio irreparable al recurrente, tam-
bién cabe reconocerla cuando la autoridad competente advierta la
existencia de vicios en el acto a ejecutarse. Por lógica, si se reconoce
a la Administración la facultad de anular sus resoluciones contra-
rias al orden jurídico, corresponde admitir que suspenda sus efec-
tos, pues en ambos casos se persigue amparar la legitimidad de la
función administrativa(71). Desde luego que la suspensión puede
decretarse en forma oficiosa, independientemente de la eventual
solicitud por el particular.
Como es natural, la suspensión de la ejecutoriedad de un acto
administrativo puede ser ordenada por los jueces. El Código Pro-
cesal Administrativo vigente -ley 12.008 y sus modificatorias- con-
tiene en su artículo 25 un régimen especial, que sin prescindir de
los requisitos generales (derecho verosímil, peligro en la demora,
no afectación grave del interés público) impone al juez evaluar si
la medida suspensiva tiende a evitar perjuicios irreversibles, aun
cuando pudieren ser objeto de una indemnización posterior. El ci-
tado artículo 25 también exige que el interesado previamente haya
solicitado sin éxito la suspensión a la propia Administración. Afor-
tunadamente, este último recaudo ha sido descalificado por la ju-
risprudencia al considerarlo un exceso ritual (72).
(70) Si se dispone la clausura de un establecimiento industrial que envenena la
atmósfera y enferma a sus vecinos, debe implementarse urgentemente su cierre; si
se dispone la remoción de un puesto de venta ambulante que obstruye la visión de
los automovilistas generando accidentes, cabe su inmediato traslado. En cambio,
no presentándose situaciones de evidente urgencia, la ejecución del acto debe
postergarse hasta tanto quede firme en sede administrativa, por ejemplo sanciones
disciplinarias en la relación de empleo público, eliminación de un proponente en
un procedimiento licitatorio, etc.
(71) COMADIRA, JULIO R., La anulación de oficio del acto administrativo,
p. 43, Astrea, Bs.As. 196Z.
(72) Ampliar en CARDOZO, EVANGELINA y RICHERO, MARÍA JULIA, La
exigencia del pedido previo de suspensión de la ejecución del acto en sede administrativa
CARLOS A. BOTASS! 65
La medida judicial suspensiva de los efectos del acto se puede
solicitar en cualquier momento (art. 23 del Cód. Proc. Administra-
tivo), ya sea de manera anticipada a la demanda, con la demanda
o aun después de promovido el pleito. Además, recogiendo una so-
lución admitida por la jurisprudencia federal y más tarde recogida
por la propia Suprema Corte Provincial, puede pedirse la suspen-
sión de los efectos de un acto administrativo mientras el interesado
se encuentra agotando la vía administrativa(73).
L. Silencio administrativo o denegatoria tácita
El régimen procesal revisor de decisiones administrativas, vi-
gente en la Provincia de Buenos Aires hasta 1994, dotó de gran de-
sarrollo a la doctrina del silencio administrativo como generador de
un acto "tácito'; ya que de esta manera la falta de pronunciamiento
de la Administración pudo llevarse a conocimiento de los jueces.
En esa dirección, el decreto ley de 1970 dispuso que "vencidos los
plazos previstos por el articulo 77, inciso "g~ el interesado podrá soli-
citar pronto despacho, transcurridos treinta días desde esta reclama-
ción, se presumirá la existencia de resolución denegatoria" (art. 79).
Frente al derecho de peticionar existe la obligación de respon-
der, transformando la omisión formal de la autoridad en una con -
ducta ilegítima. De igual modo, el sentido concreto que el artículo
79 otorga al silencio, presumiendo una resolución denegatoria, de-
muestra que existe obligación de pronunciarse conforme el princi-
pio general del Derecho consagrado en el artículo 919 del Código
Civil(74). La recepción jurisprudencia! (75) y posterior regulación
(73) OROZ, MIGUEL H. E., La admisión de las medidas precautelares en el
proceso administrativo bonaerense, en La Ley-2004-249, Buenos Aires.
(74) Cód. Civil, art. 919: "El silencio opuesto a actos o a una interrogación,
no es considerado como una manifestación de voluntad, conforme al acto o a la
interrogación, sino en los casos en que haya una obligación de explicarse por la ley o
por las relaciones de familia, o a causa de una relación entre el silencio actual y las
declaraciones precedentes".
(75) SCBA, causa B-64.030, del 26/06/2002, "Mayer Adolfo e/Municipalidad
de Lomas de Zamora s/Amparo". En igual sentido causa B-64.202, del 03/07/2002,
"Laluk, Sergio e/Municipalidad de La Platas/Amparo". Ver OROZ, MIGUEL H. E.,
El amparo por mora: transitando por la buena senda. Nota a fallo de la SCBA, causa
B-64.984, del 14/05/2003, "VerchickDaniel e/Municipalidad de Quilmess/Amparo",
en JA, 2003-111-247.
 l¡
66 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
legal del amparo por mora (76) permite al juez, como custodio de la
legalidad, disponer el pronto despacho judicial, y en su consecuen-
cia, ordenar al órgano reticente a que se expida en forma concreta,
reconociendo legislativamente de este modo la ilicitud del silencio.
La situación de indefensión que genera la actitud del órgano remi-
so a pronunciarse, se supera a través de la interpretación legal del
silencio, otorgándole un sentido definido: el rechazo de la postura
procedimental del administrado (77).
La previsión del art. 79 en tanto estatuye que transcurridos los
plazos de 10 o 30 días previstos en el artículo 77 inc. "g'; "el inte-
resado podrá solicitar pronto despacho, y transcurridos treinta días
desde esta reclamación, se presumirá la existencia de resolución de-
negatoria" (78), debe ser adecuada en su operatividad a lo estable-
cido por el art. 16 del Código Procesal Administrativo vigente desde
11
2003: Silencio administrativo. l. Cuando hubiere vencido el plazo
que alguno de los entes mencionados en el artículo 1° del presente
Código, tuviese para resolver un recurso, reclamo o petición plan-
teados en sede administrativa, el interesado podrá solicitar pronto
despacho. Esta solicitud deberá presentarse, a opción de aquél, ante
la dependencia donde se hallaren radicadas las actuaciones, ante el
órgano responsable del procedimiento o bien ante la autoridad je-
rárquica superior con competencia resolutoria final. Transcurridos
treinta (30) días hábiles administrativos desde la presentación del
pronto despacho, sin que se dictare el acto correspondiente, se pre-
sumirá la existencia de una resolución denegatoria o adversa para
el interesado y quedará expedita la instancia judicial. 2. También
podrá promoverse la pretensión sobre la base del silencio adminis-
trativo, cuando alguno de los entes enunciados en el artículo 1 º del
presente Código omitiere o retardare el dictado de actos de trámite o
preparatorios. En tal supuesto, el interesado podrá solicitar el pronto
como presupuesto de admisibilidad de la pretensión cautela, p. 88, Revista Derecho
Administrativo de la ABDA, Año I N° O (Diciembre 2006).
(76) Art. 76 del CPA -ley 12.008 y sus modificatorias-.
(77) Según Muñoz, esta técnica aparece por vez primera en nuestro país con la
sanción de la Constitución de la Provincia de Buenos Aires de 1889 (Silencio de la
Administración y plazos de caducidad, Astrea, p. 23).
(78) El decreto 980/3~, en sus arts. 43 y 44, establecía la posibilidad de que el
particular reclamara la demora de la Administración en la emisión de actos de mero
trámite, al que denominaba "reclamo por morosidad"; o en el dictado del acto final,
llamado "reclamo por retardación".
CARLOS A. BOTASSJ 67
despacho en los términos establecidos en el inciso anterior y transcu-
rridos treinta (30) días hábiles administrativos desde esta solicitud,
sin que se dictare el acto correspondiente, se presumirá la existencia
de una resolución denegatoria o adversa para el interesado y queda-
rá expedita la instancia judicial~
Por lo tanto, vencido el plazo previsto para la resolución de un re-
curso, reclamo o petición, o se omitiere o retardare el dictado de actos
de trámite o preparatorios, el interesado podrá solicitar pronto despa-
cho, y transcurridos treinta (30) días hábiles administrativos sin que
se dictare el correspondiente acto, se presumirá la existencia de una
resolución adversa o denegatoria. El pedido de pronto despacho pue-
de presentarse a opción del interesado: a) ante la dependencia donde
se hallaren radicadas las actuaciones; b) ante el órgano responsable
del procedimiento; c) o bien ante la autoridad jerárquica superior con
competencia resolutoria final, entendido éste como el órgano supe-
rior cuya decisión agota la vía administrativa. Sin embargo, el sistema
de la Mesa de Entradas General, lugar en el cual se obliga a la presen-
tación de la mayoría de los escritos -la praxis administrativa así lo im-
pone- relativiza el abanico de posibilidades referenciado, porque en
definitiva, el alcance termina remitiéndose a la dependencia donde
se encuentra el expediente (79). No requiere términos sacramentales,
aunque es de toda necesidad efectuarlo por escrito conservando co-
pia fechada a fin de acreditar el momento en que comienza a correr el
plazo de treinta (30) días hábiles administrativos, cuyo vencimiento
provocará la presunción de denegatoria.
En cuanto respecta a la decisión definitiva sobre la petición
efectuada o el recurso oportunamente articulado -no así para los
actos de trámite o preparatorios- cabe recordar que el atraso de la
Administración sólo puede presentarse una vez que las actuacio-
nes obren en su poder con los dictámenes y vistas correspondien-
tes. Recién entonces comienza a correr el plazo para resolver (arts.
57, 77 inc. "g" y 78 del Dec. Ley 7647 /70). De allí que no resulte apto
para provocar la denegatoria tácita, el pedido de pronto despacho
presentado cuando existe prueba pendiente de producción (80),
(79) Ampliar en HUTCHINSON, TOMÁS, El silencio administrativo en el nuevo
Código Contencioso Administrativo bonaerense, p. 443, 3a ed., en Botassi, Carlos
A. (Director), Oroz, Miguel H. E. (Coordinador), El nuevo proceso contencioso
administrativo de la Provincia de Buenos Aires, Platense, 2011.
(80) SCBA, B-47421, Pascual Sirnonetti e Hijos, 19/02/1980, A y S 1980-I-81.
 1
1
68 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
o cuando aún no se han producido los informes de la Contaduría
General, el dictamen del Asesor General de Gobierno y la vista del
Fiscal de Estado (81).
Presentado el pedido de pronto despacho y persistiendo la inac-
ción de la autoridad que debe resolver, se presume la existencia de
una resolución contraria al interés o derecho del particular. De esta
manera, queda agotada la vía administrativa y en su consecuencia,
expedita la vía judicial para demandar.
Si el pedido de pronto despacho es efectuado por quien reviste la
condición de interesado, resulta absolutamente indiferente que el
procedimiento se haya iniciado de oficio o a petición de parte (82),
en la medida que con ello se configure la existencia del caso en tér-
minos constitucionales, donde bajo la regla de la demandabilidad
directa, deben relativizarse las exigencias formales que tienden a
obstaculizar el acceso a la Justicia (arts. 15y166 de la Constitución
Provincial).
Cabe resaltar que en la Provincia de Buenos Aires el plazo de ca-
ducidad de la acción judicial administrativa, previsto en los arts. 18,
72 y 74 del Código de la materia, sólo juega respecto de actos efec-
tivos de la Administración. No alcanza al supuesto de denegatoria
tácita y el particular puede abstenerse de demandar, aguardando
la resolución concreta sobre el asunto, sin otro término que el de
prescripción de su derecho (83). Ésta es la doctrina de la Suprema
Corte, que se mantuvo invariable en más de cien años de vigencia
del Código Varela y que ha ratificado en la actualidad, bajo la vigen-
cia de la ley 12.008 y sus modificaciones (84).
(81) SCBA, causa B-48145, Cosevial SACIC, 21/08/1979, Ay S 1979-II-563.
(82) La cuestión no es pacífica en la doctrina y la jurisprudencia, lo cual
desnuda la enorme resistencia que aún perdura en aceptar los cambios
sustanciales que introdujo la reforma constitucional de 1994. La discusión está
instalada en el seno del Alto Tribunal local; ver SCBA, causa B-61267, Lunazzi,
02/07/2008.
(83) Éste es el proceder correcto ya que la existencia de denegatoria tácita
no excluye el deber de resolver que pesa sobre la autoridad administrativa, y el
interesado, en lugar de apoyarse en aquélla para accionar judicialmente, puede
insistir en que se produzca una decisión expresa.
(84) Conf. OROZ, MIGUEL H. E., La configuración del silencio y su incidencia
en relación al cómputo del plazo para accionar en el marco del Código procesal
administratiuo bonaerense, LA LEY, 2006-F, 84.
CARLOS A. BOTASSI 69
Otra cuestión a considerar es el tratamiento que cabe otorgar a
la decisión expresa que recae luego de declarada la denegatoria tá-
cita. En este supuesto el acto deberá notificarse al interesado, quien
podrá interponer los recursos administrativos que corresponda. Y
en caso de haber iniciado juicio administrativo debido al silencio
anterior al acto expreso, no será necesario ampliar la demanda con
el objeto de impugnar la decisión tardía desfavorable (85). En todo
caso, y en la medida que el estadio del proceso lo permita, nada im-
pide que la situación sea denunciada como hecho nuevo en aquel
pleito.
Finalmente corresponde señalar que si el silencio de la Admi-
nistración se produjera en relación a un recurso de revocatoria, es
decir, si hubiera transcurrido el plazo de cinco días previsto en el
inciso "f" del artículo 77, además de provocar la denegatoria tácita
mediante un pedido de pronto despacho, el interesado podrá "re-
currir directamente al órgano superior para que se avoque al cono-
cimiento y decisión del recurso" (art. 93).
II. EL DECRETO LEY 764 7 /70 Y LA NORMATIVA NACIONAL
Entre la normativa provincial y la nacional, en cuanto respecta
a las cuestiones sustanciales, son muchas las similitudes y escasas
las diferencias. Corresponde destacar, como lo hiciéramos en otra
oportunidad (86), la importancia del decreto-ley 7647 /70 como
fuente de la regulación nacional y de otros ámbitos provinciales.
Luego de su sanción en 1970, la Nación dictó el decreto ley 19.549
junto a su reglamentación en 1972, al igual que las provincias de
Chaco y Chubut. Mendoza dictó su ley en 1973, y luego le siguieron
otras regulaciones locales: Córdoba en 1977, Salta y Corrientes en
1978. "La significación jurídica de toda esa legislación no es otra que
la de haber juridizado los trámites ante la administración pública,
poniendo orden en esas gestiones, rodeando de garantías a los admi-
(85) Aunque conviene reparar en que "si luego de iniciada la demanda por
retardación, resulta que Ja misma no se hallaba configurada, al actor que se le
notificó el acto definitivo que resolvió el recurso, le corresponde indefectiblemente
ampliar la demanda impugnando tal expresa decisión". Conf. SCBA, causa
B-54.977, del 23/08/1994, "Jiménez, María del Rosario e/Municipalidad de la
Matanzas/Demanda contencioso administrativa".
(86) BOTASSI, CARLOS A. y OROZ, MIGUEL H. E., Procedimiento administrativo
de la Provincia de Buenos Aires, p. 59, Platense, La Plata, 2ª ed., 2011.

70 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
nistrados en su trato con la administración y sometiendo a reglas pre-
cisas y claras la actividad administrativa, a la vez que fijando límites
a ciertos aspectos de esa actividad" (87). De esa manera se cerraba
un ciclo que había caracterizado al procedimiento administrativo
como el producto de la consolidación de ideas doctrinarias (espe-
cialmente aportadas por M~rienhoff y Linares)(88) y comenzaba
otra etapa caracterizada por el desarrollo legislativo. La doctrina ha
enfatizado la trascendencia del procedimiento administrativo para
compatibilizar el ejercicio del poder y las libertades individuales,
otorgando a los administrados un medio formalmente sistematiza-
do para exigir el respeto de sus derechos (89), contribuyendo a que
la Administración satisfaga intereses generales dentro del cauce le-
gal (90) aportado por la positivización de principios, instituciones y
criterios más tarde profundizados por la doctrina(91).
Refiriéndose a la necesidad de seguir el ejemplo de aquellas
provincias que habían regulado el procedimiento administrativo,
Héctor Jorge Escola -uno de los autores de la normativa nacional-
destacó que contar con una ley era "una eficaz garantía de la regu-
laridad y legitimidad del accionar administrativo y un medio seguro
de defensa de los derechos subjetivos y los intereses legítimos de los
administrados" y consideró acertado que se incluyera en una regu-
lación procedimental las cuestiones atinentes a la teoría general del
(87) MARIENHOFF, MIGUEL S., La legislación sobre procedimiento administrati-
vo y su significación jurídica, p. 19, en Procedimiento administrativo, UN STA, Tucu-
mán 1982. Iguales palabras laudatorias para la legislación procedimental concretada
en la década del '70 expresa MARIENHOFF en sus artículos Reflexiones acerca de
la legislación sobre procedimiento administrativo vigente en la República Argentina,
LA LEY, 1981-A, 831, y A diez años de vigencia de la ley nacional de Procedimientos
Administrativos y de su decreto reglamentario. Valoración de los mismos, LA LEY,
1982-D, 708. En igual sentido, CASSAGNE, JUAN C.. La ley nacional de procedimientos
administrativos N° 19.549, ED, 42:835.
(88) Ampliar en CASSAGNE, JUAN CARLOS, Ley Nacional de Procedimientos
Administrativos. Comentada y anotada, ps. l y 4 y sigtes., La Ley, Buenos Aires, 2009.
(89) TAWIL, GUIDO S., El procedimiento administrativo como instrumento de
control de la Administración y garantía de los administrados, ps. 1, 3 y sigtes., en
Tawil, Guido S. (Director), Procedimiento Administrativo, Abeledo Perrot, Buenos
Aires, 2009.
(90) CANOSA, ARMANDO N., Procedimiento administrativo: Recursos y Recla-
mos, p. 65, Abeledo Perrot, Buenos Aires, 2008; BARRAZA, JAVIER I., Recursos Ad-
ministrativos, p. 6, La Ley, Buenos Aires, 2010.
(91) COMADIRA, JUÚO R. - MONTI, LAURA, Procedimientos Administrativos.
Ley Nacional de Procedimientos Administrativos, Anotada y Comentada, t. I p. IX
(Prólogo), La Ley, Buenos Aires, 2002.
CARLOS A. BOTASSI 71
acto administrativo (92). En la exposición de motivos que acom-
pañó la elevación del proyecto al Ministerio de Justicia en julio de
1971, el propio Escola, junto a los otros dos integrantes de la Comi-
sión Redactora Carlos A. Young y Adalberto E. Cozzi, explicó que
los principios básicos del procedimiento administrativo, tales como
los tratados en el título I del proyecto de ley estaban inspirados en
la doctrina de la Procuración del Tesoro, en el proyecto de los Dres.
Linares y Gordillo, en la ley española de 1958 y "en la ley 7647 de la
provincia de Buenos ilires" que se había sancionado un año antes.
La casi totalidad de las provincias argentinas siguieron uno u
otro de los modelos propuestos (sólo regulación legal o ley más re-
glamento) y volcaron sin excepción los principios básicos consa-
grados por las dos regulaciones pioneras. De esta manera, la legis-
lación bonaerense de 1970 y la normativa nacional de 1972 dieron
inicio a un movimiento codifkador que significó un esencial im-
pulso para nuestra disciplina; ya que -sin por ello afiliamos a una
concepción positivista del Derecho- resulta obvio que la regulación
legal del trámite implica una garantía para el administrado, alienta
el logro de la eficacia administrativa, reaviva el interés científico de
los especialistas y simplifica la labor de los administradores y jue-
ces (93). A su tumo, la unificación de criterios sobre los grandes
temas del procedimiento resultó de gran importancia al facilitar el
estudio de instituciones, conceptos, sistemas y regímenes similares
por juristas de todas las latitudes, otorgando relevancia a la juris-
prudencia cualquiera sea su ámbito de origen.
En cuanto a las diferencias más notables entre la legislación na-
cional y la provincial, sin pretender aportar una comparación exhaus-
tiva y detallada (que resultaría e:k'tensa y tediosa), son las siguientes:
l) Mientras la regulación local, con 138 artículos en un solo
cuerpo se limita al nivel legal, el Dec. Ley 19.549/72 en una treinte-
(92) ESCOLA, HÉCTOR J., Tratado general de procedimiento administrati110, ps.
IX (Prólogo) y 39, Depalma, Buenos Aires, 2ª ed., 1981, donde se señala que "la Na-
ción se encontraba en des11entaja, frente a distintas provincias en las cuales ya regían
normas sobre procedimiento administrati110, más o menos complejas y eficaces".
(93) Se salvó así una omisión que nos colocaba a la zaga del Derecho Procedi-
mental Administrativo, ya que, a nivel mundial, el desarrollo de la legislación sobre
el tema arranca en la década del '30 (REAL, ALBERTO A., Procedimiento administra-
tivo comparado, p. 201, en la obra colectiva, Procedimiento administrativo, UNSTA,
Tucumán 1982).
72 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
na de artículos contiene las reglas sustanciales y fue complementa-
do con un detallado reglamento en el que se vuelcan las cuestiones
del trámite.
2) La normativa nacional contiene disposiciones propias del
proceso judicial inexistentes en la legislación local, como la exigen-
cia del reclamo previo para acceder a la vía judicial y el plazo de
caducidad (94).
3) Asimismo, el decreto ley 19.549/72 ha regulado cuestiones que
se hallan ausentes en la regulación bonaerense: a) en su artículo 6,
contempla la recusación del funcionario a cargo del trámite; b) aun-
que en forma excepcional, prevé el patrocinio letrado obligatorio (art.
1°, inc. "f'; ap. "l"); c) se admite la notificación verbal (art. 45 del dec.
1759/72, to. dec. 1883/91); d) el reglamento regula con precisión los
medios de prueba y su forma de producción (arts. 46 y sigtes.).
llI. PROCEDIMIENTOS ADMINISTRATIVOS ESPECIALES
Al ocuparnos del alcance de las disposiciones del decreto ley
7647 /70, señalamos que-de acuerdo alo establecido en su artículo 1-
resulta aplicable en forma supletoria o analógica, según los casos,
a aquellos procedimientos que cuentan con un régimen especial.
En la Provincia de Buenos Aires los asuntos que cuentan con
una reglamentación específica, y que han merecido la atención de
la doctrina que en cada caso se cita, son muy numerosos, pudiendo
citarse -sin pretensión de exhibir un listado completo y a mero títu-
lo de ejemplo- los siguientes procedimientos especiales:
l. Contravenciones provinciales y municipales (95).
2. Procedimiento licitatorio y de ejecución de los contratos
de locación y concesión de obra pública(96).
(94) "Tema propio de lo contencioso-administrativo (que) tiene por objeto cubrir el
vacío legislativo resultante de la ausenta de un código nacional que contemple aquella
materia especifica" (Exposición de Motivos del 30/07/1971, cap. I).
(95) HORTEL, EDUARDO C., Régimen de Faltas, Editorial Universidad, Buenos
Aires, 1981; GUTIÉRREZ, ROBERTO H., Código de Faltas Municipales de la Provincia
de Buenos Aires, Depalma, Buenos Aires, 1993; NATIELLO, RODOLFO A., Manual de
Derecho Contravencional. Provincia de Buenos Aires, Scotti Editora, La Plata, 2000.
(96) CAROL, GUILLERMO C. y SANSONI, FÉLIX, J., Estudio de la legislación
de obras públicas de la prouincia de Buenos Aires, t. I y II, Scotti Editora, La Plata, 2"
ed., 2004.
CARLOS A. BOTASSi 73
3. Procedimiento de concesiones en el Código de Aguas.
4. Régimen disciplinario en el contrato de empleo públi-
co(97).
5. Régimen disciplinario de la Policía provincial (98).
6. Régimen disciplinario del Servicio Penitenciario.
7. Procedimiento laboral(99).
8. Sumarios vinculados a numerosas formas de ejercicio del
poder de policía.
9. Sumario de responsabilidad (Contaduría Provincial) (100).
10. Sumario de cuentas (Tribunal de Cuentas).
11. Protección del medio ambiente(IOI).
12. Protección del usuario y del consumidor
13. Faltas agrarias (102).
14. Procedimiento tributario (103).
15. Procedimiento previsional (104).
16. Procedimiento minero.
(97) CABRAL, PABLO O. y SCHEREGINGER, MARCELO J., ElRégimen de Empleo
Público en la Provincia de Buenos Aires, Abeledo Perrot, Buenos Aires, 2009.
(98) COHEN SALAMA, CLAUDIO J., Régimen disciplinario policial de Buenos
Aíres, Lex, La Plata, 2006; GÓMEZ GUSTAVO R. A. y ZORNETTA, ENZO, El nuevo
régimen disciplinario de las Policías de la Provincia de Buenos Aires. Ley 13.982,
Platense, La Plata, 2012.
(99) MADDALONI, OSVALDO A., Derecho Administrativo y Procesal del Trabajo
en la Prouincia de Buenos Aires (Cap. II, Procedimiento administrativo laboral en la
Prouincia de Buenos Aires y régimen sancionatorio), La Ley, Buenos Aires, 2008.
(100) MILEO, JULIO A., Ley de Contabilidad de la Provincia de Buenos Aires.
Comentada y anotada, Función Pública, La Plata, 1998.
(101) HUTCHINSON, TOMÁS y FALBO, ANÍBAL J., Derecho Administrativo
Ambiental en la Prouincia de Buenos Aires, Platense, La Plata, 2011.
(102) PASTORINO, LEONARDO F., Derecho Agrario Argentino, (Cap.12° -Faltas
agrarias en la Prouincia de Buenos Aires), Abeiedo Perrot, Buenos Aires, 2009.
(103) BOTASSI, CARLOS A. (Director), OROZ, MIGUEL H. E. y MAMMONI,
GUSTAVO A. (Coordinadores), Procedimiento tributario bonaerense, Platense, 2010.
(104) RIGONI, SILVIA S., Régimen previsional de loa Provincia de Buenos Aires,
La Ley, 2003.
74 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
En otro orden cabe señalar que el artículo 134 del Dec. Ley
7647 /70 delega en el Poder Ejecutivo la fijación del "procedi-
miento correspondiente a las prestaciones de servicios que por su
especialidad no estén comprendidos" en sus normas de actua-
ción.
Entendemos que la palabra "servicios" está empleada con un
sentido amplísimo, equivalente a todo tipo de gestión oficial rela-
cionada con la función administrativa del Estado, y por ello mismo,
necesitada de un cauce procedimental que regule los trámites per-
tinentes.
Aquellos regímenes especiales que no hayan sido reglados
por el Congreso mediante leyes formales· (como es el caso de los
procedimientos especiales recién enunciados) podrán ser regula -
dos mediante decretos del Poder Ejecutivo, en cuyo caso deberán
respetarse puntualmente los principios sustanciales del procedi-
miento contenidos en el decreto ley 7647 /70 privativos del nivel
legal, especialmente aquellos relacionados con el ejercicio del de-
recho de defensa consagrado en el artículo 15 de la Constitución
Provincial.
Iv. DIGESTO NORMATIVO
En definitiva, complementando las referencias brindadas en el
capítulo precedente, es posible enumerar las siguientes disposicio-
nes relacionadas con procedimientos administrativos hoy vigentes
en la Provincia de Buenos Aires:
-Procedimiento en materia de infracciones, faltas, contraven-
ciones, que no cuenten con un procedimiento especial, -decreto
3707 /98. Emitido: 06/10/1998. BO del 20/10/1998.
-Accidentes de agentes públicos provinciales. Denuncia. Obli-
gatoriedad. Trámite. Decreto 1669/91.Emitido el 06/06/1991. BO
del 25/06/1991.
-Reglamento de procedimiento ante el Tribunal Fiscal de
Apelación de la Pro,vincia de Buenos Aires. Acuerdo Extraordina-
rio Nº 203 (Tribunal Fiscal de Apelaciones). Emitido: 16/03/2000.
CARLOS A. BOTASSI 75
BO del 30/03/2000. Modificaciones: Acuerdo Extraordinario N°
23 (Tribunal Fiscal de Apelaciones). Emisión: 17 /02/2005. BO del
10/03/2005. Modifica el art. 2°; incorpora el art. 36 al Título XII Dis-
posiciones Transitorias.
-Procedimiento sancionatorio en materia medioambiental.
Resolución N° 659/03 (Ministerio de Asuntos Agrarios y Produc-
ción). Emisión: 30/07 /2003. BO del 26/09/2003.
-Ley Orgánica del Tribunal de Cuentas. Cargos deudores. Ley
10.869.
-Código de Faltas Municipales. Decreto ley 8751/77. Emisión:
21/03/1977. BO del 11/04/1977. Existe texto ordenado por decreto
8526/87.
-Aprobación de contrataciones en caso de inobservancia de
las normativas que rigen la misma. Sanciones. Decreto 1344/04.
Emisión: 22/06/2004. BO del 17 /08/2004.
-Régimen Contravencional en los Espectáculos Deportivos de
la Provincia de Buenos Aires. Ley 11.929. Sanción: 11/12/1996. Pro-
mulgación: 15/01/1997. Decreto 139/97. BO del 29/01/1997.
-Régimen Policial. Procedimiento Administrativo Disciplina-
rio a aplicar por la Auditoría General de Asuntos Internos depen-
diente del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires.
Decreto 1502/04. Emisión: 12/07 /04. BO del 30/08/2004.
-Empleo Público. Negociaciones y Convenciones Colectivas.
Normas de Procedimiento. Decreto 3087 /04. Emisión: 16/12/04.
BO del 30/12/2004.
-Acciones civiles promovidas contra la Provincia, sus entidades
autárquicas y las municipalidades. Necesidad de acreditar el recla-
mo administrativo previo ante el Poder Ejecutivo. Decreto ley 5875.
-Código Fiscal (parte pertinente). Título XII De los procedi-
mientos de determinación de oficio y el contencioso fiscal, arts. 101
hasta el 130 inclusive. Ley 10.397.
 76 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
CARLOS A. BOTASSI 77
-Conflictos individuales y colectivos en materia laboral. Ór-
gano competente: Subsecretaría del Trabajo. Atribuciones. Pro- -Policía Sanitaria. Infracciones y Sanciones. Decreto Ley
8841/77.
cedimiento administrativo. Asistencia jurídica a los trabajadores.
Ley 10.149. -Procedimiento sumarial. Servicio Penitenciario.

-Código del Usuario y Consumidor. Ley 13.133. -Procedimiento contravencional en transporte público de pa-
sajeros.
-Reglamento de Contrataciones. Decreto 3300/72.
-Procedimiento contravencional e ínfraccional en materia de
-Modos anormales de contratación. Intervención del Poder electricidad.
Ejecutivo. Decreto 1344/04.
-Reclamos de daños a artefactos y electrodomésticos, por des-
-Cláusula Anticorrupción. Reserva revocatoria del Ejecutivo cargas y desperfectos en las redes de distribución domiciliaria.
ante la presencia de vicios y/o irregularidades. Decreto 4041/96.
-Procedimiento contravencional e infraccional en materia de
-Contratación directa Sector Salud, Asistencia Social y Servi- electricidad.
cio Penitenciario Provincial en casos de urgencia. Decreto 2025/01
-Faltas agrarias y rurales.
-Obra pública. Redeterminación de precios. Decreto 2113/02.
-Código de Faltas provincial
-Obra Pública. Redeterminación de precios para el perío-
do que va desde el mes de enero hasta agosto del año 2002. De- -Código de Faltas municipal.
creto 787 /03. ·

-Mora en el pago. Liquidación de Intereses. Actuaciones su-

~·~
mariales. Decreto 784/01. Emisión: 13/03/2001. BO del 22/03/2001.

-ProcedimientoMinero,Decretol4.700/57.BOdel22/01/1958.
-Sumario administrativo de responsabilidad patrimonial. Ám-
bito de aplicación. Municipios. Resolución N° 705/07. Emisión:
15/11/2007. BO del 21/12/2007.
-Régimen previsional. Dec. Ley 9650/80.
-Agencias de Seguridad Privada. Ley 12.297.
Aspecto sancionatorio. Tiene procedimiento especial.
-Código de Aguas. Procedimiento contravencional. Resolu-
ción N° 705/08 (MNySP). Procedimiento para la declaración de
existencia, definición y demarcación de la línea de ribera y visación
de planos de mensura. Emisión: 07 /12/2007. BO: 22/01/2008.
DECRETO-LEY 7647/70
NORMAS DE PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO
I. ÁMBITO DE APLICACIÓN
Artículo l º:Se regulará por las normas de esra
ley el procedimiento para obtener una decisión
o una prestación de la Administración Pública
de Buenos Aires y el de producción de sus actos
adnlinistrativos. Será de aplicación supletoria en
las tramitaciones administrativas con regímenes
especiales.
Il. COMPETENCIA DEL ÓRGANO ADMINIS-
TRATIVO
Artículo 2°: Las actuaciones cuya resolución
corresponda a la Administración Pública, debe-
rán ser iniciadas ante el órgano administrativo
competente.
Artíc1úo 3°: La competencia de los órganos de
Ja Administración Pública se determinará por Ja
Constitución de la Provincia, las leyes orgánicas
administrativas y los reglamentos que dicten el
Poder Ejecutivo y las entidades autárquicas. La
competencia es irrenunciable y se ejercerá pre-
cisamente por los órganos administrativos que
la tengan atribuida como propia, salvo los casos
de delegación, sustitución o avocación previstos
por las leyes.
Artículo 4°: Cuando se produzca un conflic-
to interno de competencia entre autoridades u
organismos administrativos será resuelto por
el ministro de que dependan. Los conflictos de
competencia interminísteriales o entre las de-
pendencias de los ministerios y las entidades
78 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
autárquicas o de éstas entre sí serán resueltos
por el Poder Ejecutivo.
Artículo 5°: En los conflictos de competencia
se observarán las siguientes reglas:
l. Cuando dos autoridades se encuentren en-
tendiendo en el mismo asunto, cualquiera de
ellas de oficio o a petición de partes, se dirigirá
a la otra reclamando para sí el conocimiento del
asunto. Si la autoridad requerida mantiene su
competencia, elevará sin más trámite las actua-
ciones al órgano administrativo que correspon-
da resolver quien decidirá la cuestión sin otra
sustanciación, que dictamen
2. de la Asesoría General de Gobierno.
3. Cuando dos ministerios o entidades autár-
quicas rehusaren conocer en el asunto, el último
que lo hubiere recibido deberá elevarlo al Poder
Ejecutivo, quien decidirá previo dictamen del
Asesor General de Gobierno.
III. RECUSACIÓN Y EXCUSACIÓN
Artículo 6°: Ningún funcionario o empleado
es recusable, salvo cuando normas especiales así
lo determinen. Son causales de obligatoria excu-
sación para los funcionarios o empleados que
tengan facultad de decisión o que sea su misión
dictaminar o asesorar:
a) Tener parentesco con el interesado por
consanguinidad dentro del cuarto grado o por
afinidad hasta el segundo grado.
b) Tener interés en el asunto o amistad íntima
o enenlistad manifiesta con el actuante. ' Artículo 13: La persona que se presente en
El funcionario que resolviera excusarse debe-
rá eleV'dr las actuaciones al superior jerárquico,
quien consideran{ su procedencia o improce-
dencia. En el primer caso designará el funcio-
nario sustituto o resolverá por sí. En el segundo,
devolverá las actuaciones al inferior para que
continúe entendiendo. En ambos casos la deci-
sión causará ejecutoria.
IV. POTESTAD DISCIPLINARIA
Artículo 7°: La autoridad administrativa a la
que corresponda la dirección de las actuaciones,
adoptará la medidas necesarias para la celeri-
dad, economía y eficacia del trámite.
Artículo 8°: Velará también por el decoro
y buen orden de las actuaciones, pudiendo al
eíecto aplicar sanciones a los interesados inter-
vinientes por las faltas que cometieren, ya sea
obstruyendo el curso de las mismas o contra la
dignidad y respeto de la Administración, o por
falta de lealtad a probidad en la tramitación de
los asuntos.
La potestad disciplinaria re'specto de las faltas
cometidas por los agentes de la Administración
se regirá por sus leyes especiales.
Artículo 9°: Las sanciones que, según la gra-
vedad de las faltas, podran aplicarse a los intere-
sados intervinientes son:
l. Llamado de atención.
2. Apercibimiento.
3. Multa, que no excederá de veinte pesos.
Contra la sanción de multa, se podrá interpo-
ner recurso jerárquico dentro de los tres días.
V. INTERESADOS, REPRESENTANTES
Y TERCERO
Artículo 10º: La actuación administrativa
puede iniciarse de oficio o a petición de cual-
quier persona o entidad pública o privada, que
tenga derecho o interés legítimo.
El que instare ante la Administración Pública
un procedimiento relacionado con obras o ser-
vicios públicos, o el que peticionare con el obje-
to de lograr una decisión de la Administración,
comprendida en las facultades potestativas no
será tenido por parte en el procedimiento; lo que
se le hará saber.
Artículo 11: La parte interesada, su apodera-
do o letrado patrocinante, tendrán acceso al ex-
pediente durante todo su trámite.
Artículo 12: Si durante el curso de las actua-
ciones falleciese o se incapacitare el interesado
que las hubiera promovido, se suspenderá el
procedinüento.
las actuaciones administrativas por un derecho
o interés que no sea propio, aunque le competa
ejercerlo en virtud de representación legal, de-
berá acompañar con el primer escrito los docu-
mentos que acrediten la calidad invocada.
Sin embargo, los padres que comparezcan en
representación de sus hijos y el marido que lo
haga en nombre de su mujer, no tendrán obli-
gación de presentar las partidas correspondien-
tes, salvo que fundadamente les fueran reque-
ridas.
Artículo 14: Los representantes o apoderados
acreditarán su personería desde la primera in-
tervención que hagan a nombre de sus mandan-
tes, con el instrumento público correspondiente,
o con carta-poder con firma autenticada por la
Justicia de Paz, o por escribano público.
En caso de encontrarse agregado a otro expe-
diente que trámite la misma repartición bastará
la certificación correspondiente.
Artículo 15: El mandato también podrá otor-
garse por acta ante la autoridad administrativa,
la qne contendrá una simple relación de la iden-
tidad y domicilio del compareciente, designa-
ción de la persona del mandatario, mención de
CARLOS A. BOTASSI
la facultad de percibir sumas de dinero, u otro
especial que se le confiera.
Cuando se faculte a percibir sumas mayores
de quinientos (500) pesos, se requerirá poder
otorgado ante escribano público.
Artículo 16: Cesará la representación en las
actuaciones:
l. Por revocación del poder. La intervención
del interesado en el procedimiento no importa
revocación, si al tomarla no lo declara expresa-
mente.
2. Por renuncia, después de vencido el tér-
mino del emplazamiento al poderdante o de la
comparecencia del mismo en el expediente. Este
emplazamiento deberá hacerse en el domicilio
real del interesado bajo apercibimiento de conti-
nuar los trámites sin su intervención.
3. Por muerte o inhabilidad del mand&tario.
Este hecho suspende el trámite administrativo
hasta la comparecencia del mandante, a quien
se le intimará bajo apercibimiento de continuar
el trámite sin su intervención o disponerse el ar-
chivo del expediente, según corresponda.
Articulo 17: Desde el momento en que el po-
der se presenta a la autoridad administrativa y
ésta admita la personería, el representante asu-
me todas las responsabilidades que las leyes le
imponen y sus actos obligan al mandante como
si personalmente los practicare. Está obligado a
continuar la gestión mientras no haya cesado le-
galmente en su mandato, y con él se entenderán
los emplazamientos, citaciones y notificaciones,
incluso las de las decisiones de carácter definiti-
vo, salvo las actuaciones que la ley disponga se
notifique al mismo poderdante o que tengan por
objeto su comparendo personal.
Artículo 18: Cuando a criterio de la autori-
dad administrativa un mandatario entorpecie-
ra el trámite administrativo, formulare falsas
denuncias, tergiversare hechos y procediera en
el desempeño de su cometido con manifiesta
inconducta, podrá ser separado de las actuacio-
nes intimándose por cédula al mandante que in-
tervenga directamente o por nuevo apoderado,
bajo apercibimiento de continuarse el trámite
sin su intervención. Durante el emplazamiento
para que el mandante instituya nuevo apodera-
do, se suspenderá el trámite administrativo.
Artículo 19: Cuando varias personas se pre-
senten formulando un petitorio del que no
surjan intereses encontrados, la autoridad ad-
ministrativa podrá exigir la unificación de la re-
presentación, dando para ello un plazo de diez
(10) días, bajo apercibimiento de designar un
apoderado común, de entre los peticionantes.
La unificación de representación también podrá
79
pedirse por las partes en cualquier estado del
trámite. Con el representante común se enten-
derán los emplazamientos, citaciones y notifica-
ciones, incluso las de la decisión definitiva, salvo
las actuaciones que la ley disponga se notifiquen
directamente al interesado o las que tengan por
objeto su comparendo personal.
Artículo 20: Una vez hecho por los peticiona-
rios o por la autoridad administrativa el nombra-
miento del mandatario común, podrá revocarse
por acuerdo unánime de aquellos. Cualesquiera
de los interesados podrá revocar su mandato ce-
sando para él la representación común.
Artículo 21: Cuando se invoque el uso de una
firma social deberá acreditarse la existencia de
la sociedad acompañándose el contrato respec-
tivo, o copia certificada por escribano público o
autoridad adJninistrativa. Cuando se tratare de
sociedades irregulares o de hecho, la presenta-
ción deberán firmarla todos los socios a nombre
individual, indicando cuál de ellos continuará
vinculado a su trámite.
Artículo 22: Cuando se actúe en nombre de
una persona jurídica, que requiera autorización
del Estado para funcionar, se mencionará la dis-
posición que acordó el reconocimiento, decla-
rándose bajo juramento la vigencia del mandato
de las autoridades peticionantes. Podrá exigirse
la presentación de la documentación pertinente,
cuando la autoridad administrativa lo considere
necesario. Las asociaciones que fueren sujetos
de derecho de acuerdo con el artículo 46 del
Código Civil (ley 17.711), acreditarán su consti-
tución y designación de autoridades con la escri-
tura pública o instrumento privado autenticado.
Artículo 23: Cuando de la presentación del
interesado o de los antecedentes agregados al
expediente surgiera que alguna persona o enti-
dad, pudiera tener interés directo en la gestión,
se le notificará de la existencia del expediente al
solo efecto de que tome intervención en el es-
tado en que se encuentren las actuaciones, sin
retrotraer el curso del procedimiento.
VI. CONSTITUCIÓN Y DENUNCIA
DE DOMICILIOS
Artículo 24: Toda persona que comparezca
ante la autoridad administrativa, sea por sí o en
representación de terceros, constituirá en el pri-
mer escrito o acto en que intervenga un domicilio
dentro del radio urbano del asiento de aquélla.
El interesado deberá además manifestar su
domicilio real. Si no lo hiciere o no denunciare el
cambio, las resoluciones que deban notificarse
en el domicilio real se notificarán en el domicilio
 80 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
constituido. El domicilio constituido podrá ser el
mismo que el real.
Artículo 25: La constitución del domicilio se
hará en forma clara y precisa, indicando calle y
número, o piso, número o letra del escritorio o
departamento. No podrá constituirse domicilio
en las oficinas públicas.
Artículo 26: Si el domicilio no se constituyera
conforme a lo dispuesto en el artículo anterior, o
si el que se constituyera no existiera o desapare-
ciera el local o edificio elegido o la numeración
del mismo, se intimará al interesado en su do-
micilio real para que constituya nuevo domici-
lio, bajo apercibimiento de continuar el trámite
sin su intervención o disponer su archivo según
corresponda.
Artículo 27: El domicilio constituido produci-
rá todos su efectos, sin necesidad de resolución
y se reputará subsistente mientras no se designe
otro.
Artículo 28: Los apoderados y representantes
tienen la obligación de denunciar en el primer
escrito o presentación personal, el domicilio real
de sus mandantes. Si no lo hicieren se les intima-
rá para que subsanen la omisión.
VII. FORMALIDADES
DE LOS ESCRITOS
Artículo 29: Los escritos serán redactados a
máquina o manuscritos en tinta en idioma na-
cional, y en forma legible, salvándose toda tes-
tadura, enmienda o palabras interlineadas. Lle-
varán en la parte superior una suma o resumen
del petitorio.
Serán suscriptos por los interesados, repre-
sentantes o apoderados. En el encabezamiento
de todo escrito, sin más excepción que el que
iniciare una gestión, debe indicarse numeración
y año del expediente a que corresponde y en su
caso, contendrá la indicación precisa de la pre-
sentación que se ejerza. Se empleará el sellado
de ley cuando corresponda o papel tipo oficio u
otra similar, repuesto con estampillas fiscales.
Podrá emplearse el medio telegráfico para con-
testar traslados o vistas e interponer recursos.
Artículo 30: Podrá acumularse en un solo
escrito n1ás de una petición, siempre que fue-
ran asuntos conexos que se puedan tramitar y
resolver conjuntamente. Si a juicio de la autori-
dad administrativa no existe la conexión implí-
cita o explícitamente alegada por el interesado
o trajere entorpecimiento a. la tramitación de
los asuntos, lo emplazara pa~a que presente las
peticiones por separado, bajo apercibimiento de
sustanciarse solamente aquélla por la que opte
1
la Administración si fuesen separables, o en su
defecto disponerse el archivo.
Artículo 31: Cuando un escrito sea suscripto a
ruego por no poder o no saber hacerlo el intere-
sado la autoridad administrativa lo hará constar,
así como el nombre del firmante y también que
fue autorizado en su presencia o se ratificó ante
él la autorización, exigiéndose la acreditación de
la identidad personal de los que intervinieren.
Si no hubiere quien pueda firmar a ruego del
interesado, el funcionario procederá a darle lec-
tura y certificará que éste conoce el te1'"tO del es-
crito y ha estampado la impresión digital en su
presencia.
Artículo 32: En caso de duda sobre la auten-
ticidad de una firma, podrá la autoridad admi-
nistrativa llamar al interesado para que en su
presencia y previa justificación de su identidad,
ratifique la firma o el contenido del escrito.
Si el citado negare el escrito, se rehusare a
contestar o citado personalmente por segunda
vez no compareciere, se tendrá al escrito por no
presentado.
Artículo 33: Todo escrito por el cual se pro-
mueva la iniciación de una gestión ante la Admi-
nistración Pública deberá contener los siguien-
tes recaudos:
a) Nombres, apellido, indicación de identidad
y domicilio real del interesado.
b) Domicilio constituido de acuerdo con el
artículo 24.
c) Relación de los hechos, y si se considera
pertinente indicará la norma en que funde su
derecho.
d) La petición concretada en términos claros
y precisos.
e) Ofrecimiento de toda la prueba de que ha
de valerse, acompañando Ja documentación en
que funde su derecho el peticionante o en su
defecto su mención con Ja individualización po-
sible, expresando lo que de ella resulte y desig-
nando el archivo, oficina pública o lugar donde
se encnentren los originales.
f) Firma del interesado o apoderado.
Artículo 34: Todo escrito inicial deberá pre-
sentarse en Mesa de Entradas o receptorias o
podrá remitirse por correo. Los escritos poste-
riores podrán presentarse igualmente donde se
encuentre el expediente. La autoridad adminis-
trativa deberá dejar constancia en cada escrito
de la fecha en que fuere presentado o recibido,
poniendo al efecto el cargo pertinente o sello
fechador; debiendo darle el trámite que corres-
ponda en el día de la recepción.
Si el escrito recibido por correo correspondie-
re a traslados, recursos, vistas o cualquier pre-
sentación sujeta a plazo, se tendrá como válido
CARLOS A. BOTASSI
el día de su despacho por la oficina de correos, a
cuyos efectos se agregará el sobre sin destruir un
sello de expedición.
De toda actuación que se inicie en Mesa de
Entradas se dará una constancia con la numera-
ción del expediente que se origine.
Artículo 35: Podrá la autoridad administra-
tiva mandar testar las expresiones ofensivas de
cualquier índole, que se consignasen en Jos es-
critos, sin perjuicio de la aplicación de las demás
medidas disciplinarias que correspondan.
Artículo 36: Los documentos que se acompa-
ñan a los escritos o aquéllos cuya agregación se
solicite a titulo de prueba, podrán presentarse en
su original o en testimonio expedidos por oficial
público o autoridad competente.
Podrá solicitarse la reserva de cualquier docu-
mento, libro o comprobante que se presente, en
cuyo caso se procederá a su guarda bajo cons-
tancia.
Artículo 37: Los documentos expedidos por
autoridad extraña a la jurisdicción de la pro-
vincia deberán presentarse debidamente lega-
lizados. Los redactados en idioma extranjero
deberán acompañarse con su correspondiente
traducción hecha por traductor matriculado.
Artículo 38: Los documentos y planos que se
presenten, excepto los croquis, deberán ser fir-
mados por profesionales inscriptos en la matrí-
cula, cuando así lo exija la ley de reglamentación
de las profesiones correspondientes.
Artículo 39: Todo interesado que haga entre-
ga de un documento o escrito, podrá solicitar
verbalmente y en el acto, que se le entregue una
constancia de ello.
Podrá para tal fin entregar una copia de los
mismos para que al pie o al dorso de ella se cer-
tifique la entrega. La autoridad administrativa lo
hará así, estableciendo en dicha constancia que
el interesado ha hecho enn·ega en la oficina de
un documento o escrito bajo manifestación de
ser el original de la copia suscripta.
VIII. ORDENAMIENTO DE LOS EXPEDIENTES
Artículo 40: El número con que se inicia un
expediente será conservado a través de las ac-
tuaciones sucesivas, cualesquiera sean los or-
ganismos que intervengan en su trámite. Queda
prohibido el asentar en el expediente ningún
otro número o sistema de identificación que no
sea el asignado por el organismo iniciador del
expediente.
Artículo 41: Los expedientes serán compagi-
nados en cuerpos que no excedan de doscientas
81
(200) fojas salvo los casos en que tal límite obli-
gara a dividir escritos o documentos que consti-
tuyan un solo texto.
Artículo 42: Todas las actuaciones deberán
foliarse por orden correlativo, incluso cuando se
integren con más de un cuerpo de expediente.
Las copias de notas, informes o disposiciones
que se agreguen a un expediente juntamente
con su original, se foliarán por orden correlativo,
dejándose constancia en cada una de ellas el nú-
mero de copia que le corresponde.
Artículo 43: Cuando Jos expedientes vayan
acompañados de antecedentes que por su volu-
men no pueden ser incorporados, se confeccio-
narán anexos.
Artículo 44: Cuando se reciba en Mesa de En-
tradas un escrito que se refiera a un expediente
en trámite en dependencias internas, debe regis-
n.-arse como '~canee''.
Artículo 45: Toda acumulación de expediente
o alcances importa Ja incorporación a otro expe-
diente. La reglamentación fijará el procedimien-
to de foliación en estos casos. Los expedientes
que se solicitan al solo efecto informativo, debe-
rán acumularse sin incorporar.
Artículo 46: Todo desglose se hará bajo cons-
tancia.
Artículo 47: Cuando se inicien expediente y
trámites internos con fojas desgiosadas. éstas es-
tarán precedidas de una constancia con lamen-
ción de las actuaciones del cual proceden, de la
cantidad de fojas con que se inicia el nuevo y las
razones que haya habido para hacerlo.
IX. DEL IMPULSO PROCESAL
Artículo 48: El procedimiento se impulsará
de oficio en todos sus trámites, guardándose ri-
guroso orden en el despacho de los asuntos de
igual naturaleza.
Artículo 49: Se proveerán en un sólo acto to-
dos los trámites que, por su naturaleza, admitan
una ilnpulsión simultánea y no estén entre sí, su-
cesivamente, subordinados en su cumplimiento.
Artículo 50: La autoridad administrativa que
tuviere en su cargo el despacho o sustanciación
de los asuntos será responsable de su tramita-
ción y adoptará las medidas oportunas para que
no sufran retraso.
Artículo 51: La comunicación entre los órga-
nos administrativos desde nivel de dirección o
equivalente, según corresponda por la compe-
82 PROVlNCIA DE BUENOS AlRES
tencia para sustanciar el trámite, se efectuará
siempre directamente, proscribiéndose toda
providencia que sea de mera elevación fuera de
los niveles indicados.
Artículo 52: Los órganos administrativos eva-
cuarán sus informes y se pasarán unos y otros las
actuaciones de acuerdo al orden establecido en
la providencia inicial, dando aviso a la Mesa de
Entradas General.
En caso de duda, o de estimarse necesario un
procedimiento previo, devolverán el expediente
a la oficina de origen. Una vez cumplido el trá-
mite, la última dependencia informante remitirá
las actuaciones al órgano de origen.
Artículo 53: El organismo administrativo que
necesitare datos de otros para poder sustanciar
las actuaciones o informes, podrá solicitarlos
directamente mediante oficio, del que se dejará
copia en el expediente. A tal efecto las dependen-
cias de la Administración Provincial, cualquiera
sea su situación jerárquica, quedan obligadas a
las colaboración permanente y recíproca que im-
pone esta ley. El expediente se remitirá cuando
corresponda dictaminar o lo requiera el procedi-
miento.
Artículo 54: La Administración realizará de
oficio, o petición del interesado los actos de
instrucción adecuados para la determinación,
conocimiento y comprobación de los hechos o
datos, en 1~rtud de los cuales deba dictarse re-
solución.
Artículo 55: Los hechos relevantes para la de-
cisión de un procedimiento podrán acreditarse
por cualquier medio de prueba.
Cuando la Administración no tenga por ciertos
los hechos alegados por los interesados, o la natu-
raleza del procedimiento lo exija, la autoridad ad-
ministrativa, acordará la apertura de un periodo
de pmeba por un plazo no superior a treinta (30)
días ni inferior a diez (10), a fin de que puedan
practicarse cuantas juzgue pertinentes.
Artículo 56: Producida la prueba, se dará vista
por el plazo de diez (10) días al interesado, para
que alegue sobre el mérito de la misma. Venci-
do el plazo sin que el interesado haya hecho uso
de su derecho, podrá dárse!e por decaído prosi-
guiéndose el trámite.
Artículo 57: Sustanciadas las actuaciones, el
órgano o ente que deba dictar resolución final o
en su caso el ministro correspondiente, solicitará
dictamen del Asesor General de Gobierno y dará
vista al Fiscal de Estado cuando corresponda de
acuerdo con su ley Orgánica, Íuego de lo cual no
se admitirán nuevas presentaciones.
Artículo 58: La prueba se apreciará con razo-
nable criterio de libre convicción.
Artículo 59: El Poder Ejecutivo, de oficio,
podrá abocar el conocimiento y decisión de las
actuaciones administrativas que trámiten ante
los órganos de la Administración Pública cen-
tralizada.
Artículo 60: El desistimiento del interesado
no obliga a la Administración.
Artículo 61: Se practicará liquidación del
sellado pendiente de reposición y de los gastos
postales realizados y previstos, cuyo pago será
intimado en el plazo de diez (10) dias. Una vez
resuelta las actuaciones y antes de disponerse
su archivo, la Administración podrá iniciar las
acciones para el cobro de la liqtúdación apro-
bada.
X. DE LAS NOTIFICACIONES
Artículo 62: Las notificaciones ordenadas en
actuaciones administrativas deberán contener la
pertinente motivación dei acto y el texto íntegro
de su parte resolutiva, con la expresión de la ca-
rátula y numeración del expediente correspon-
diente.
Artículo 63: Las notificaciones se realizarán
personalmente en el expediente, firmando el in-
teresado ante la autoridad administrativa, previa
justificación de identidad o mediante cédula,
telegrama colacionado o certificado, recomen-
dado o cualquier otro medio que permita tener
constancia de la recepción, de fecha y de identi-
dad del acto notificado y se dirigirá al domicilio
constituido por el interesado o en su defecto, a
su domicilio real.
Artículo 64: Se notificarán solamente las re-
soluciones de carácter definitivo, los emplaza-
mientos, citaciones, apertura a pmeba y las pro-
videncias que confieran vista o traslado o deci-
dan alguna cuestión planteada por el interesado.
Artículo 65: Si la notificación se hiciere en el
domicilio del recurrente, el empleado designado
a tal efecto llevará por duplicado una cédula en
que esté transcripta la resolución que deba no-
tificarse. Una de las copias la entregará a la per-
sona a la cual deba notificar o, en su defecto, a
cualquiera de la casa. En la otra copia, destinada
a ser agregada al expediente, se pondrá constan-
cia del día, hora y lugar de la entrega requiriendo
la firma de la persona que manifieste ser de la
casa, o poniendo constancia de que se negó a
firmar.
Cuando el empleado no encontrase la perso-
na a la cual va a notificar y ninguna de las otras
CARLOS A. BOTASSI
personas de la casa quiera recibirla, la fijará en
la puerta de la misma, dejando constancia en el
ejemplar destinado a ser agregado en e! expe-
diente.
Cuando la notificación se efectúe por medio
de telegrama, servirá de suficiente constancia de
la misma el recibo de entrega de la oficina tele-
gráfica, que deberá agregarse al expediente.
Artículo 66: El emplazamiento o citación de
personas inciertas o cuyo domicilio se ignore se
hará por edictos publicados en el "Boletín Ofi-
cial" y por la radiodifusora oficial durante cinco
(5) días seguidos. El emplazamiento o citación
se tendrá por efectuado cinco (5) días después
y se proseguirá el trámite en el estado en que se
hallen las actuaciones.
La publicación del edicto y su radiodifusión se
acreditarán con los comprobantes emanados de
los organismos respectivos.
Artículo 67: Toda notificación que se hicie-
re en contravención de las normas prescriptas
será nula y el empleado notificador responderá
por los perjuicios que cause al interesado o a la
Administración. Sin embargo, si del expediente
resulta en forma indudable que el interesado ha
tenido conocimiento de la providencia, Ja noti-
ficación o citación·surtirá desde entonces todos
sus efectos.
XI. DE LOS PLAZOS
Artículo 68: Todos los plazos administrativos
se cuentan por días hábiles salvo expresa dispo-
sición legal o habilitación y se computan a partir
del día siguiente de la notificación.
Artículo 69: Para determinar si un escrito
presentado personalmente en las oficinas ad-
ministrativas lo ha sido en término, se tomará
en cuenta la fecha indicada en el cargo o sello
fechador. En caso de duda, deberá estarse a la
fecha enunciada en el escrito y si éste a su vez no
la tuviera se considerará que ha sido presentado
en término.
Artículo 70: En Jos escritos enviados por carta
el plazo se contará a partir de la fecha de emisión
que conste en el sello fechador del correo en los
casos del artículo 34, y en las restantes presenta-
ciones desde la fecha de recepción. En el caso de
los telegramas se contará a pm1ir de la fecha de
emisión que en ellos conste como tal.
Artículo 7l: Los plazos administrativos obli-
gan por igual y sin necesidad de intimación
alguna a las autoridades administrativas, a los
funcionarios públicos personalmente, y a los in-
teresados en el procedimiento.
83
Artículo 72: El vencimiento de los plazos que
en esta ley se acuerda a los administrados duran-
te el procedimiento, no hace decaer el derecho a
efectuar las presentaciones del caso con poste-
rioridad, debiendo continuarse el trámite según
su estado, sin retrotraer sus etapas.
Artículo 73: Si los interesados lo solicitan an-
tes de su vencimiento, la autoridad administra-
tiva interviniente podrá conceder una prórroga
de los plazos establecidos en esta ley o en otras
disposiciones administrativas, siempre que con
ello no se perjudiquen derechos de terceros.
Artículo 74: Exceptúase de lo dispuesto en los
artículos anteriores Jos plazos establecidos para
interponer recursos administrativos, los que una
vez vencidos hacen perder el derecho de inter-
ponerlos.
No obstante, todo recurso interpuesto fuera
de término será considerado por el órgano su-
perior y si importa una denuncia de ilegitimidad
se sustanciará, pudiendo éste revocar o anular el
acto impugnado.
Artículo 75: Los términos se interrumpen por
la interposición de recursos administrativos, in-
cluso cuando hayan sido mal calificados técni-
camente por el interesado o adolezcan de otros
defectos formales de importancia secundaria o
hayan sido presentados ante órgano incompe-
tente por error justificable. ·
Artículo 76: Cuando no se haya establecido
un plazo especial para las citaciones, intimacio-
nes y einplazamiento.s, éste será de diez días.
Artículo 77: Toda vez que para un determi-
nado trámite no exista un plazo expresamente
establecido por leyes especiales o por ésta y sus
disposiciones cmnplernentarias, deberá ser pro-
ducido dentro dei plazo máximo que a continua-
ción se detennina:
a) Registro de Resoluciones, de expedientes y
sus pases a oficinas que proveen el trámite: dos
(2) días
b) Providencias de mero trámite administrati-
vo: tres (3) días
c) Notificaciones: tres (3) días contados a par-
tir de la recepción de las actuaciones por la ofi-
cina notificadora.
d) Informes Administrativos no técnicos: cin-
co (5) días
e) Dictámenes pericias o informes técnicos:
diez (10) días. Este plazo se ampliará hasta un
máximo de treinta (30) días si la diligencia re-
quiere el traslado dei agente fuera del lugar de
sus funciones.
f) Decisiones relativa~ a peticiones del intere-
sado referidas al trámite del expediente y sobre
recursos de revocatoria: cinco (5) días.
84 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
g) Decisiones definitivas sobre la petición o
reclamación del interesado: diez (10) días para
resolver recursos jerárquicos y en los demás ca-
sos treinta (30) días contados a partir desde la
fecha, en que las actuaciones se reciban con los
dictároenes legales finales.
Artículo 78: Estos plazos se cuentan a partir
del día siguiente al de la recepción del expedien-
te por el órgano respectivo. En caso de que éste,
para poder producir el dictamen, pericia o in-
forme de que se trate, o para decidir la cuestión,
deba requerir nuevos informes o dictámenes
de otros órganos, quedarán suspendidos hasta
tanto los mismos sean contestados o venzan [os
plazos para hacerlo.
Artículo 79: Vencidos los plazos previstos por
el artículo 77, inciso g), el interesado podrá so-
licitar pronto despacho y, transcurridos treinta
(30) días desde esta reclamación, se presumirá
Ja existencia de resoluciones denegatorias.
Artículo 80: El incumplimiento injustificado
de los términos o plazos previstos para el des-
pacho de los asuntos administrativos, genera
responsabilidad, imputable a los agentes direc-
tamente a cargo del trámite o diligencia y a los
superiores jerárquicos obligados a su dirección
y fiscalización. Según el caso, la gravedad o rei-
teración de la anomalía, serán aplicables las san-
ciones previstas en los respectivos estatutos del
personal de la Administración Pública.
XII. DE LAS DENUNCIAS
Artículo 81: Toda persona que tuviere cono-
cinliento de la violación de leyes, decretos o re-
soluciones administrativas, por parte de órganos
de la Administración, podrá denunciarlo a la au-
toridad administrativa.
Artículo 82: La denuncia podrá hacerse por
escrito o verbalmente, personalmente, por re-
presentante o mandatario. La denuncia escrita
deberá ser firmada; cuando sea verbal se labra-
rá acta y en ambos casos el funcionario intervi-
niente comprobará y hará constar la identidad
del denunciante.
Artículo 83: La denuncia deberá contener de
un modo claro, cuando sea posible, la relación
del hecho, con la circunstancia del lugar, tiempo
y modo de ejecución y la indicación de sus auto-
res y partícipes, damnificados, testigos y demás
elementos que puedan conducir a su compro-
bación.
Artículo 84: El denunciant'e no es parte en las
acruaciones, salvo cuando por la denuncia se
pretenda reclamar algún derecho.
Artículo 85: Presentada una denuncia, el
funcionario que la reciba la elevará de inme-
diato a la autoridad superior de la dependen-
cia, si no hubiera sido radicada directamente
ante la misma, y ésta deberá practicar las di-
ligencias preventivas necesarias dando opor-
tuna intervención al órgano administrativo
competente.
xm. DE LOS RECURSOS
a) Decisiones recunibles
Artículo 86: Toda decisión administrativa fi-
nal, interlocutoria o de mero trámite que lesione
un derecho o interés legítimo de un administra-
do o importe una transgresión de normas lega-
les o reglamentarias o adolezca de vicios que la
invalidan, es impugnable mediante los recursos
establecidos en este capítulo.
Articulo 87: Las medidas preparatorias de
decisiones administrativas, los informes, dic-
támenes y vistas, aunque sean obligatorios y
vinculantes para el órgano administrativo. no
son recurribles.
Artículo 88: Los recursos deberán proveerse y
resolverse cualquiera sea la denominación que
el interesado les dé, cuando resulte indudable su
impugnación o disconformidad con el acto ad-
ministrativo.
b) Recurso de revocatoria y jerárquico en sub-
sidio
Artículo 89: El recurso de revocatoria proce-
derá contra todas la decisiones administrativas
que reúnan !ns requisitos establecidos en el ar-
tículo 86º. Deberá ser fundado por escrito e in-
terpuesto dentro del plazo de diez días directa-
mente ante la autoridad administrativa de la que
emane el acto impugnado.
Artículo 90: El recurso de revocatoria deberá
resolverse sin sustanciación por el órgano que
produjo el acto, salvo medidas para mejor pro-
veer.
Sólo podrá denegarse si no hubiese sido fun-
dado, o si la resolución fuere de las previstas en
el artículo 87º y, en este caso, en la duda se estará
en favor de su adrnisión.
Artículo 91: El recurso de revocatoria lleva im-
plícito el jerárquico en subsidio, únicamente en
los casos de las decisiones referidas en el artículo
92. Cuando hubiese sido rechazada la revocato-
ria, deberán elevarse las actuaciones, y dentro
de las cuarenta y ocho horas de recibido el expe-
diente por el superior, el interesado podrá mejo-
rar o ampliar los fundamentos de su recurso.
CARLOS
e) Recurso jerárquico
Artículo 92: El recurso jerárquico proce-
derá contra los actos administrativos finales y
los que resuelvan las peticiones del interesa-
do, excepto las que originen providencias de
mero trámite. Deberá ser fundado por escrito
cuando no se hubiere deducido recurso de re-
vocatoria e interponerse dentro del plazo de
diez (10) días ante la autoridad que emitió el
acto impugnado, elevándose las actuaciones
al superior.
Artículo 93: Cuando hubiere vencido el pla-
zo establecido para resolver la revocatoria y la
Administración guardare silencio, el interesa-
do podrá recurrir directamente ante el órgano
superior para que se aboque al conocimiento y
decisión del recurso.
d) Recurso de apelación
Artículo 94: Contra las decisiones finales de
los entes autárquicos, que no dejen abierta la
acción contencioso administrativa, procederá
un recurso de apelación con las formalidades
establecidas en el artículo 92. El conocimien-
to de este recurso por el Poder Ejecutivo está
limitado al control de la legitimidad del acto,
el que podrá anular, pero no modificar o sus-
tituir. Anulado el acto procederá la devolución
de las actuaciones para que el ente autárqui-
co dicte nuevo acto administrativo ajustado a
derecho.
e) Recursos contra actos generales
Artículo 95°: En caso de que, por una medida
de carácter general, la autoridad administrativa
perjudicase derechos privados o de otra admi-
nistración pública, deberá acudirse individual-
mente a la misma autoridad que dictó la medi-
da general, reclamando de ella, y solicitando se
deje sin efecto la disposición en cuanto al interés
a que perjudica o al derecho que vulnera dentro
del plazo de treinta (30) días a partir de la última
publicación en el "Boletín Oficial" o de su noti-
ficación.
f) Recursos contra actos de oficio
Artículo 96: Cuando el recurso se deduzca
contra actos dictados de oficio, comprendien-
do los que rescindan, modifiquen o interpreten
contratos administrativos, podrá ofrecerse prue-
ba de acuerdo con los artículos 55 y 56.
Si los actos referidos en los artículos 95 y el
presente emanaren del Gobernador de la Pro-
vincia, sólo procederá el recurso de revocatoria,
cuya decisión será definitiva y causará estado.
A. BOTASSl 85
g) Exclusiones
Artículo 97: Los recursos jerárquicos y de
apelación no proceden:
a) Cuando una ley haya reglado de modo ex-
preso la tramitación de las cuestiones adminis-
trativas que su aplicación origine, siempre que
dicha ley prevea un recurso de análoga natura-
leza.
b) Contra los actos administrativos definiti-
vos, dictados con audiencia o intervención del
interesado y que dejen expedita la acción con-
tencioso administrativa.
Quedan comprendidas las decisiones de los
ministros en ejercicio de competencia propia o
delegada.
c) Contra los actos de los entes autárquicos
cuando se cuestione el mérito de los mismos.
h) Efectos
Artículo 98: La interposición del recurso tiene
por efecto:
l. Interrumpir el plazo del artícuio 92 aunque
haya sido deducido con defectos formales o ante
órgano incompetente.
2. Facultar a la Administración a suspender la
ejecución del acto impugnado cuando el interés
público lo aconseje o la petición del interesado
invoque fundadamente perjuicio irreparable.
3. Impulsar el procedimiento, haciendo nacer
los plazos que los funcionarios públicos tienen
para proveerlo y tramitarlo.
i) Trámite y decisión
Artículo 99: Cuando el acto emane de un ór-
gano inferior a director o equivalente, el recurso
jerárquico será resuelto por el superior.
Artículo 100: Emanando el acto de un funcio-
nario de nivel de director o equivalente, el recur-
so jerárquico será resuelto definitivamente por
el Poder Ejecutivo.
Artículo 101: Los recursos de revocatoria
previstos por los artículos 95 y 96, jerárquico y
de apelación, se sustanciarán con dictamen del
Asesor General de Gobierno y vista del Fiscal
de Estado cuando corresponda su intervención
de acuerdo con su Ley Orgánica. La autoridad
administrativa podrá disponer de oficio y para
mejor proveer o por requerimiento de estos
funcionarios, las diligencias que estime condu-
centes al esclarecimiento de la cuestión plan-
teada.
j) Agentes públicos
Artículo 102: Los recursos reglados en este
capítulo rigen para los agentes administrativos,
 86 PROVINCIA DE BUENOS Al RES
por la relación de empleo público, supletoria-
mente de los establecidos en la legislación es-
pecífica.
XIV. DE LOS ACTOS ADMINISTRATIVOS
a) Forma
Artículo 103: Los actos administrativos se
producirán por el órgano competente mediante
el procedimiento que en su caso estuviere esta-
blecido.
El contenido de los actos se ajustará a lo dis-
puesto en el ordenamiento jurídico y será ade-
cuado a los fines de aquéllos.
Artículo 104: Los actos adnúnistrativos se pro-
ducirán o consignarán por escrito cuando su natu-
raleza o circunstancias no exijan o permitan otra
forma más adecuada de expresión y constancia.
En los casos en que los órganos administrati-
vos ejerzan su competencia en fonna verbal, y
no se trate de resoluciones, la constancia escri-
ta del acto, cuando sea necesaria, se efectuará
y firmará por el órgano inferior que la reciba
oralmente, expresando en la comunicación del
mismo la autoridad de que procede, mediante la
fórmula "Por orden de.. ::
Si se tratara de resoluciones, el titular de la
competencia deberá autorizar con su firma una
relación de las que haya dictado en forma verbal,
con expresión de su contenido.
Artículo 105: Cuando deba dictarse una serie
de actos administrativos de la misma naturaleza,
tales como nombramientos, concesiones, licen-
cias, podrán redactarse en un único documento
que especificará las personas u otras circunstan-
cias que individualicen cada uno de los actos.
Artículo 106: Los actos que emanen del Go-
bernador de la Provincia, adoptarán la forma de
decreto, cuando dispongan sobre situaciones
particulares o se trate de reglamentos, que pro-
duzcan efectos jurídicos dentro y fuera de la Ad-
ministración.
Cuando su eficacia sea para la administración
interna, podrán producirse en forma de resolu-
ciones, disposiciones circulares, instrucciones u
órdenes.
Artículo 107: Los d~ organismos de la Cons-
titución, los de la Administración centralizada
y entes autárquicos, se producirán en todos los
casos, en la forma de resolución o disposición o
la que la ley especial les haya fijado.
Artículo 108: Todo acto ;¡.dministrativo final
deberá ser motivado y coníendrá una relación
de hechos y fundamentos de derecho cuando:
a) Decida sobre derechos subjetivos.
b) Resuelva recursos.
c) Se separe del criterio seguido en actuacio-
nes precedentes o del dictamen de órganos con-
sultivos.
b) Ejecución
Artículo 109: La Administración Pública no
iniciará ninguna actuación material que limite
derechos de los particulares sin que previamen-
te haya sido adoptada la decisión que le sirva de
fundamento jurídico.
Artículo IIO: Los actos administrativos tienen
la eficacia obligatoria propia de su ejecutividad
y acuerdan la posibilidad de una acción directa
coactiva como medio de asegurar su cumpli-
miento. Producirán efectos desde la fecha en
que se dicten, salvo que en ellos se disponga otra
cosa.
La eficacia quedará demorada cuando así lo
exija el contenido del acto o esté supeditada a su
notificación, publicación o aprobación superior.
c) Retroacli\~dad
Artículo 111: Excepcionalmente podrá otor-
garse eficacia retroactiva a los actos cuando se
dicten en sustitución de actos anulados y pro-
duzcan efectos favorables al interesado, siempre
que los supuestos de hecho necesarios existie-
ran ya en la fecha a que se retrotraiga la eficacia
del acto y ésta no lesione derechos o intereses
legítimos de terceros.
d) Publicación
Artículo ll2: Los actos de la Adnúnistración
se publicarán en los casos y con las modalidades
establecidas por las normas que les sean aplica-
bles.
Los actos administrativos que tengan por des-
tinatario una pluralidad indeterminada de suje-
tos, y aquellos para los que no fuere exigible la
notificación personal, no producirán efectos res-
pecto de los mismos en tanto no sean publicados
legalmente.
La publicación se efectuará una vez termina-
do el procedimiento y será independiente de la
que se hubiere efectuado con anterioridad a los
fines de infmmación pública.
e) Revisión
Artículo 113: La autoridad administrativa
podrá anular, revocar, modificar o sustituir de
oficio sus propias resoluciones, antes de su no-
tificación a los interesados. La anulación estará
fundada en razones de legalidad, por vicios que
CARLOS A. BOTASSI
afectan el acto administrativo, y la revocación,
en circunstancias de oportunidad basadas en el
interés público.
Artículo 114: La Administración no podrá
revocar sus propias resoluciones notificadas a
los interesados y que den lugar a la acción con-
tencioso adminístrativa, cuando el acto sea for-
malmente perfecto y no adolezca de vicios que
lo hagan anulable.
Artículo 115: En cualquier momento podrán
rectificarse los errores materiales o de hecho y
los arit111éticos.
Artículo ll6: Dentro del plazo de cuarenta
y ocho horas podrá pedirse aclaratoria cuando
exista contradicción entre la motivación del acto
y sus partes dispositivas o para suplir cualquier
omisión del mismo sobre algunas de las peticio-
nes o cuestiones planteadas.
Artículo ll 7: Las facultades de anulación
y revocación no podrán ser ejercitadas cuan-
do por prescripción de acciones, por el tiempo
transcurrido u otra circunstancias, su ejercicio
resultase contrario a la equidad, al derecho de
los particulares o a las leyes.
Artículo 118: Podrá pedirse la revisión de las
decisiones definitivas firmes cuando:
1 entidades que ostenten la representación de
a) Se hubiera incurrido en manifies!O error de
hecho que resulte de las propias constancias del
expediente administrativo.
b) Se hubiera dictado el acto administrativo
como consecuencia de prevaricato, cohecho,
violencia o cualquier otra maquinación fraudu-
lenta, o graves irregularidades comprobadas ad-
n1inistrativamente.
e) La parte interesada afectada por dicho acto,
hallare o recobrare docun1entos decisivos igno-
rados, extraviados o detenidos por fuerza mayor
o por obra de un tercero.
f) Caducidad del acto
Artículo 119: Se producirá la caducidad del
acto administrativo, cuando habiendo sido im-
puestas por el mismo determinadas condiciones
que debe cumplir el beneficiario, éste no las sa-
tisface dentro del plazo fijado y previa interpela-
ción para que lo haga dentro dei plazo adicional
y perentorio de diez (10) días.
XV. DF: J,OS ACTOS DE CARACTER GENERAL
Artículo 120: La elaboración de actos de ca-
rácter general, reglamentos administrativos y de
anteproyectos de ley, se iniciarán por el ente u
órgano de la Administración que disponga el Po-
der Ejecutivo.
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Artículo 121: El órgano delegado realizará los
estudios y obtendrá los informes previos que ga-
ranticen la legalidad, acierto y oportunidad de la
iniciativa, acumulando los dictámenes y consul-
tas evacuadas, las observaciones y enmiendas
que se formuleu y cuantos datos y documentos
ofrezcan interés para conocer el proceso de ela-
boración de la norma o puedan facilitar su inter-
pretación.
Artículo 122: Toda iniciativa que modifique
o tienda a sustituir normas legales o reglamen-
tarias, deberá ser acompañada de una relación
de las disposiciones vigentes sobre la misma ma-
teria y establecerá expresamente las que han de
quedar total o parcialmente derogadas.
Cuando la reforma afecte la sistemática o
estructura del texto, éste se reordenará íntegra-
mente.
Artículo 123: Los proyectos de actos de carác-
ter general serán sometidos como trámite final al
dictamen jurídico del Asesor General de Gobier-
no y la vista del fiscal de Estado.
Artículo 124: La iniciativa podrá ser sometida
a información pública por disposición y plazo
que señale el Poder Ejecutivo.
En este caso, podrá concederse a las orga-
nizaciones profesionales y gremiales, y demás
intereses de carácter general la oportunidad de
exponer su parecer en razonado informe.
Igualmente, se podrá requerir informes a so-
ciedades o personas ajenas a la Administración.
Artículo 125: Los reglamentos administrati-
vos producirán efectos jurídicos a partir del día
siguiente al de su publicación en el "Boletín Ofi-
cial" de la provincia, si en ellos no se dispusiere
la publicación por otro medio.
Artículo 126: Exceptúanse de Jo dispuesto en
el artículo anterior, los reglamentos que se re-
fieren a la estructura orgánica de la Administra-
ción, normas o instrucciones de procedimiento
interno, que entrarán en vigencia sin necesidad
de aquella publicación.
XVI. CADUCIDAD DEL PROCEDIMIENTO
Artículo 127: Transcurridos seis meses desde
que un procedimiento promovido por un intere-
sado se paralice por causa imputable al mismo,
se producirá su caducidad procediéndose al ar-
chivo de las actuaciones; se exceptúan los expe-
dientes de Previsión Social.
Artículo 128: La caducidad se declarará de
oficio al vencimiento del plazo y podrá recurrirse
por el interesado.
88 PROVINCIA DE BUENOS AIRES
Artículo 129°: Los procedimientos caducados
no interrumpirán los plazos legales o reglamen-
tarios.
Artículo 130: Operada la caducidad, los in-
teresados podrán reiniciar las actuaciones en
nuevo expediente; no podrán valerse de las ante~
riores, sin perjuicio del desglose de documentos
que hubieren incorporado:
XVII. RECONSTRUCCIÓN DE EXPEDIENTES
Artículo 131: Comprobada la pérdida o ex-
travío de un expediente, se ordenará su recons-
trucción incorporándose las copias de escritos
y documentación que aporte el interesado, ha-
ciéndose constar el trámite registrado. Se repro-
ducirán los informes, dictámenes y vistas legales
y si hubo resolución se glosará copia auténtica
de la misma, que será notificada.
Artículo 132: Si la pérdida o extravío es impu-
table a la acción u omisión de agentes adminis-
trativos1 separadamente se instruirá el sumario
pertinente para determinar la responsabilidad
correspondiente.
XVIII. NORMAS COMPLEMENTARIAS
Y REGIMENES ESPECIALES
Artículo 133: El Poder Ejecutivo determina-
rá los órganos para la fiscalización del cumpli-
miento de esta ley y especialmente:
a) Tomar conocimiento de todas las de-
nuncias o quejas de los administrados contra
las decisiones irregulares o defectuosamente
realizadas por agentes de la Administración
Pública.
b) Tomar conocimiento de todo incumpli-
miento de la presente ley, por denuncia o por
información de funcionarios públicos sobre
irregularidades comprobadas en los expedien-
tes.
c) Tomar conocimiento de las reclamaciones
administrativas promovidas contra la Adminis-
tración Pública y sus agentes.
d) Realizar las investigaciones necesarias de
los hechos a los que se refieren los incisos prece-
dentes o las que de oficio se promuevan.
e) Realizar los estudios necesarios para la ra-
cionalización, ordenación y aceleración de las
actuaciones administrativas.
f) Recopilar las interpretaciones sobre proce·
dimientos administrativos a fin de organizar el
repertorio de decisiones de la Administración,
que deberá publicarse periódicamente.
Artículo 134: El Poder Ejecutivo reglamentará
la aplicación de la presente ley con disposicio-
nes complementarias y asimismo fijará el pro-
cedimiento correspondiente a las prestaciones
de servicios que por su especialidad no estén
comprendidos en las normas de actuación de
esta ley. Igualmente, determinará la calificación
y trámite de actuaciones reservadas o secretas y
el régimen de incineración o reducción de expe-
dientes y documentos archivados.
Artículo 135: El Poder Ejecutivo queda facul-
tado para sustituir los recursos administrativos
de otras leyes y reglamentaciones, por el de la
presente, y a ampliar fundadamente otros tipos
de actuaciones exceptuadas de la caducidad.
Articulo 13°: Deróguese el artículo 29 de la
ley 7268 y toda otra disposición que se oponga
a la libertad de representación asegurada por las
normas del Capítulo V.
Artículo 137: La presente ley comenzará a
regir a partir de los sesenta (60) dias de su pro-
mulgación.
Articulo 138: Cúmplase, comuníquese, pu-
blíquese, dese al Registro y "Boletín Oficial" y
archívese.
CAPÍTULO l 11
ASPECTOS DEL PROCEDIMIENTO
ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA
DE CATAMARCA
Laureano Pernasetti (*) - Martín N Varela (**)
SUMARIO: l. Introducción. - II. Los principios del procedimiento adminis-
trativo en el CPA. A. Debido proceso adjetivo. B. El informalismo a favor
del administrado. C. Oficialidad o impulsión de oficio: su vinculación con
la "caducidad por perención". - Ill. El instituto de la intervención adminis-
trativa a Entidades descentralizadas. A. El caso de la Caja de Prestaciones
Sociales de Catamarca (CAPRESCA). - IV. Los recursos administrativos y
el agotamiento de la instancia. A. Generalidades. Encuadre normativo. B.
Los recursos administrativos. C. El agotamiento de la vía en la jurispru-
dem:ia de la Corte de Justicia. 1) Reclamos versus recursos. 2) Denegatoria
por silencio. 3) Actos definitivos. 4) Naturaleza del plazo para demandar.
- V. La denuncia de ilegitimidad y la habilitación de instancia en un fallo
de la Corte de Justicia. - VI. Leyes especiales. A. Ley 5336 y decreto regla-
mentario 1369/11. B. Ley 5537. El Defensor del Pueblo de la Provincia de
Catamarca. - VII. Conclusiones.
I. INTRODUCCIÓN
Las leyes de procedimiento administrativo en cada una de las pro-
vincias, así como a nivel nacional, surgieron a fin de dar respuesta a la
tensión existente entre los conceptos de prerrogativa y garantía, efica-
cia y seguridad e interés público y particular, puesto que allí es donde
el ordenamiento jurídico administrativo se constituye en la norma ins-
trnmental, por excelencia destinada a equilibrar tales tensiones (1).
(*) Abogado. Especialista en Derecho de la Regulación de Servicios Públicos,
Universidad Austral; Magíster en Derecho Administrativo, Universidad Austral.
(*') Abogado. Especialista en Derecho de la Regulación de Servicios Públicos,
Universidad Austral; Magister en Derecho Administrativo, Universidad Austral.
(1) De la idea propuesta por GONZALEZ PÉREZ y GONZALEZ NAVARRO, Régi-
men Jurídico de las Administraciones Públicas y Procedimiento Administrativo Común,
p. 17, Madrid, Civitas, 1993. Citado por COMADIRA, J., Ley Nacional de Procedimientos
Administrativos, anotada y comentada, t. I, p. 5, La Ley.