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Introducción

Para Piaget, la epistemología "es el estudio del pasaje de los estados de menor

conocimiento a los estados de un conocimiento más avanzado, preguntándose Piaget, por el

cómo conoce el sujeto (como se pasa de un nivel de conocimiento a otro); la pregunta es más por

el proceso y no por lo "qué es" el conocimiento en sí" (Cortes y Gil 1997).

La epistemología es el estudio del conocimiento científico, lo cual comprende el análisis

de sus conceptos más importantes tales como validez, objetividad, verdad, fiabilidad, método,

teoría, hipótesis, evidencia, ley, etcétera. No obstante, aquí no queda todo.

Para comprender en qué consiste el conocimiento científico, la epistemología también

debe analizar el conocimiento no-científico en sus diversas formas: doxa, saber popular,

pseudociencia, protociencia o anticiencia.

De este modo, cuando hacemos epistemología de la medicina, la biología o la sociología,

básicamente estamos examinando cómo tales disciplinas estudian sus objetos para producir

conocimiento científico. Por esta razón, en tanto estudio de la ciencia, la epistemología no solo le

sirve al filósofo, sino también al científico.

Ya que la utilidad científica de la epistemología estriba en el rol que juega en el proceso

de investigación científica, y dado que este proceso tiene muchas partes, la epistemología

muestra un correlato con, al menos, la mayoría de ellas.


Gnoseología

La gnoseología no estudia los conocimientos particulares, como pueden ser los

conocimientos de la física, de la matemática o del entorno inmediato, sino la naturaleza del

conocimiento en general. Muchas ciencias particulares tienen además su propia filosofía, como

por ejemplo la filosofía de la física, la filosofía de la matemática, la filosofía de la historia, etc.

Otras disciplinas también se ocupan del conocimiento en general, pero desde otros puntos

de vista. La psicología estudia los aspectos de la vida mental implícitos en el conocer, la lógica

estudia la corrección o incorrección de los razonamientos que pueden implicar nuevos

conocimientos, y la ontología estudia la naturaleza de los objetos que se pueden conocer.

En la gnoseología se suele distinguir entre tres tipos de conocimiento: el conocimiento

proposicional, el conocimiento práctico o performativo, y el conocimiento directo.

El primero se asocia a la expresión «saber qué», el segundo a la expresión «saber cómo»,

y el tercero, en el español, se asocia a la expresión «conocer» (en vez de «saber»). Así se dice,

por ejemplo, que en la biología se sabe que los perros son mamíferos. Este es un conocimiento

proposicional. Luego existe un saber cómo entrenar un perro, el cual es un conocimiento práctico

o performativo. Y, por último, el conocimiento por familiaridad es aquel que posee quien dice,

por ejemplo, «yo conozco a mi perro».

La mayoría del trabajo en gnoseología se centra en el primer tipo de conocimiento,

aunque ha habido esfuerzos por cambiar esta tendencia.

De acuerdo con Guillermo Briones (1996), autor de Epistemología de las ciencias

sociales, la epistemología es el “análisis del conocimiento científico”, por tanto: analiza los

supuestos filosóficos de las ciencias, su objeto de estudio, los valores implicados en la creación
del conocimiento, la estructura lógica de sus teorías, los métodos empleados en la investigación y

en la explicación o interpretación de sus resultados y la confirmabilidad y refutabilidad de sus

teorías. (p. 13)

Para Ignasi Brunet y Antoni Morell (2001), la epistemología es una reflexión sobre la

producción de las disciplinas científicas y el conocimiento científico.

La epistemología como reflexión acerca de lo que las disciplinas científicas están

produciendo, trata de evaluar la naturaleza y calidad de su conocimiento científico, la verdad o

falsedad de sus teorías o cómo proveen de explicaciones adecuadas o cuál es la estructura formal

y conceptual de sus teorías o qué relación debe darse entre la explicación y la predicción de un

fenómeno. Además de plantear el problema de la elección entre diversos métodos y, cómo no,

interrogarse acerca de la naturaleza de las regularidades y leyes científicas (p. 32)

Según el afamado físico y filósofo argentino, Mario Bunge (2002), la epistemología “es

la rama de la filosofía que estudia la investigación científica y su producto, el conocimiento

científico” (p. 21).

Finalmente, siguiendo a Pablo Cazau (2011), uno de los significados más importantes del

término epistemología es el referido al estudio de la ciencia.

Un epistemólogo estudia qué hacen los científicos para estudiar la realidad y qué los

diferencia de los no científicos, cómo y por qué construyen sus teorías sobre el mundo, qué

métodos utilizan, cómo intentan probar sus hipótesis, qué características especiales tiene el

lenguaje científico, qué razonamientos emplean y en qué medida la investigación se ve

influenciada por las cosmovisiones de cada época y por determinantes políticas, económicas, etc.

El epistemólogo estudia las herramientas del científico, sus métodos, su lógica, entre otros

aspectos (p. 111)


Ciencia

Ciencia, se denomina a un “cuerpo de doctrina, de validez universal y certeza objetiva,

metódico y sistemático, que versa sobre un sector delimitado de la realidad y constituye un ramo

particular del saber humano”.

Para la RAE, ciencia es el “conocimiento cierto de las cosas por sus principios y causas”

o el “cuerpo de doctrina metódicamente formado y ordenado que constituye un ramo particular

del humano saber”

¿Qué es una ley científica?

Es un conjunto de fenómenos que manifiestan regularidad o invariante y son recreados

por el científico. Son proposiciones universales que establecen, bajo qué circunstancias, ocurre

un determinado hecho.

¿Qué entendemos por teoría científica?

La ciencia explica la realidad mediante leyes. Las leyes y teorías se vuelven científicas

mediante la observación y comprobación experimental, con la contrastación de los hechos. Una

teoría científica es una proposición formulada por la ciencia para abarcar y explicar ciertos

fenómenos.

La racionalidad científica es un conocimiento basado en la lógica. Se basa en la

investigación a través de conceptos, juicios y razonamientos.

El conocimiento científico es contrario a las supersticiones o las creencias irracionales.

Método científico

El método científico es un método de investigación usado principalmente en la

producción de conocimiento en las ciencias. Para ser llamado científico, un método de


investigación debe basarse en lo empírico y en la medición, y estar sujeto a los principios

específicos de las pruebas de razonamiento. “El método científico ha caracterizado a la ciencia

natural desde el siglo XVII, y consiste en la observación sistemática, la medición, la

experimentación, la formulación, el análisis y la modificación de las hipótesis”.

El método científico está sustentado por dos pilares fundamentales: El primero de ellos es

la reproductibilidad, es decir, la capacidad de repetir un determinado experimento, en cualquier

lugar y por cualquier persona. Este pilar se basa, esencialmente, en la comunicación y publicidad

de los resultados obtenidos.

El segundo pilar es la refutabilidad, es decir, que toda proposición científica tiene que ser

susceptible de ser falsada o refutada. Esto implica que se podrían diseñar experimentos, que en el

caso de dar resultados distintos a los predichos, negarían la hipótesis puesta a prueba.

“Realmente, no existe un método científico. El método científico usa métodos

definitorios, métodos clasificatorios, métodos estadísticos, métodos hipotético-deductivos,

procedimientos de medición, etc. Según esto, referirse a el método científico es referirse a este

conjunto de tácticas empleadas para constituir el conocimiento, sujetas al devenir histórico, y

que eventualmente podrían ser otras en el futuro”.

Problemas conceptuales

Diferentes posturas a lo largo de la historia. Una de las preguntas clave es, ¿Añade algo

lo social a la educación?

Respuesta: unos opinan que no añade nada, para otros como Natorp toda educación es

social y otros como Rousseau opinan que la sociedad corrompe al individuo.


Uno de los principales problemas es determinar el “objeto conceptual” o constructo y la

naturaleza del concepto como, por ejemplo, los conjuntos, relaciones, funciones, hipótesis,

teoremas, etc.

Para algunas escuelas del pensamiento, los conceptos son objetos mentales que existen en

el lenguaje, en las sensaciones, las imágenes o las percepciones; para otras, son simplemente

objetos de naturaleza irreductible.

Ejemplos de constructos: proposiciones, contextos, teorías, conceptos.

Así, una de las mayores dificultades es construir teorías.

• Cremin: define la educación como “el esfuerzo deliberado, sistemático y sostenido para

trasmitir o evocar conocimientos, actitudes, valores, habilidades y sensibilidades.

• Luzuriaga (1973) “El individuo no vive solo en el mundo, sino en relación directa con los

demás. De ellos recibe ayuda y estímulos y a su vez influye sobre los demás”.

• Para Nassif (1958) “La educación es la formación del hombre por medio de una influencia

exterior consciente o inconsciente (hetereoeducación) o por un estímulo (autoeducación).

• O’Connor (1973) “la educación trata de un conjunto de actividades prácticas que

constituyen el centro de aplicación de diversas ciencias”


El Conocimiento Científico.

Mientras que la epistemología ha sido entendida tradicionalmente como una teoría del

conocimiento en general, en el siglo XX los filósofos se interesaron principalmente por construir

una teoría del conocimiento científico, suponiendo que si se lograra disponer de teoría adecuadas

que explicaran los mecanismos de un conocimiento de este tipo, podrían avanzar

considerablemente por la misma vía en la solución de problemas gnoseológicos (doctrinas

filosófica y religiosa que pretendía tener un conocimiento misterioso e instintivo de las cosas

divinas) más generales.

La elaboración de una epistemología de este tipo constituyó la tarea abordada

especialmente por los autores del Círculo de Viena, que fueron el germen de todo movimiento

del empirismo o positivismo lógico. Para éstos filósofos se trataba de conseguir un sistema

unitario de saber y conocimiento, lo que requería la unificación del lenguaje y la metodología de

las distintas ciencias. Este lenguaje debería ser insersubjetivo - lo que exigía la utilización de

formalismos y de una semántica común- y universal, es decir, cualquier proposición debía poder

traducirse a él.

Lo único que puede hacerse es formular la hipótesis de la existencia de una realidad

independiente de nuestra experiencia e indicar criterios para su contrastación en la medida en que

una afirmación de existencia implica determinados enunciados perceptivos. No hay ninguna

posibilidad de decisión respecto a una realidad o idealidad absolutas. Ello sería, en palabras de

Carnap, un seudoproblema. Todas las formas epistemológicas de la tradición filosófica

inspiradas en posiciones metafísicas - el idealismo y el realismo filosófico, el fenomelanismo, el

solipsismo, etc.- caerían, así, fuera del ámbito del conocimiento empírico, ya que buscarían

responder a una pregunta imposible.


Teoría del conocimiento

La teoría del conocimiento es una doctrina filosófica. Para precisar su ubicación en el

todo que es la filosofía, es necesario que antes aparezca una definición esencial de esta.

Una definición esencial de la filosofía se podría obtener atendiendo el significado de la

palabra. El termino filosofía deriva del griego y quiere decir amor a la sabiduría o , lo que es lo

mismo, deseo de saber, de conocer. Inmediatamente se nota que no se puede de obtener de la

filosofía una definición esencial, y, por lo tanto, obligatoriamente se debe de emplear otro

método.

Por ejemplo, la definición de filosofía que presentan Platón y Aristóteles como ciencia

pura, es respectivamente la búsqueda de la virtud o de la felicidad.

Como dice Dilthey: ¨ Lo primero que debemos intentar es descubrir un objetivo

común contenido en todos aquellos sistemas a cuya vista se constituyen todos aquellos sistemas

de la filosofía".

Estos sistemas son los de Platón y Aristóteles, Descartes y Leibnitz, Kant y Hegel ya que

en todos ellos hallaremos una inclinación en la universalidad, una orientación en la totalidad

objetiva por ejemplo: el ser, la esencia, el conocimiento.

En los principios de la edad moderna retomamos los caminos del concepto Aristotélico

(tiene como centro una ciencia universal del ser). Los sistemas de Descartes, Spinoza y Leibnitz,

presentan la misma orientación que caracteriza al Estagirita, ya que todos tienden al

conocimiento del mundo objetivo. Kant por el contrario revive el estilo Platónico (procura elevar

la vida, con todos sus conceptos a la conciencia filosófica).


Racionalismo.

Se denomina racionalismo a la doctrina epistemológica que sostiene que la causa

principal del conocimiento reside en el pensamiento, en la razón. Afirma que un conocimiento

solo es realmente tal, cuando posee necesidad lógica y validez universal. El planteamiento mas

antiguo del racionalismo aparece en Platón. El tiene la íntima convicción de que el conocimiento

verdadero debe distinguirse por la posesión de las notas de la necesidad lógica y de la validez

universal.

El empirismo.

Frente a la tesis del racionalismo, el pensamiento, la razón, es el único principio del

conocimiento, el empirismo (del griego Empereimía = experiencia ) opone la antítesis: la única

causa del conocimiento humano es la experiencia. Según el empirismo, no existe un patrimonio a

priori de la razón. La conciencia cognoscente no obtiene sus conceptos de la razón , sino

exclusivamente de la experiencia. El espíritu humano, por naturaleza, está desprovisto de todo

conocimiento.

El racionalismo es guiado por la idea determinada, por el conocimiento ideal, mientras

que el empirismo, se origina en los hechos concretos.

Los racionalistas casi siempre surgen de la matemática; los defensores del empirismo,

según lo prueba su historia, frecuentemente vienen de las ciencias naturales. Esto se entiende sin

esfuerzo. La experiencia es el factor determinante en las ciencias naturales.

En ellas, lo más importante es la comprobación exacta de los hechos por medio de una

cuidadosa observación. El investigador depende totalmente de la experiencia. Suelen distinguirse

dos clases de experiencia: una interna y otra externa. El fundamento de un conocimiento válido,

no se encuentra en la experiencia, sino en el pensamiento.


Apriorismo.

En la historia de la Filosofía existe también un segundo esfuerzo de intermediación entre

el racionalismo y el empirismo: el apriorismo. El cual también considera que la razón y la

experiencia son a causa del conocimiento. Pero se diferencia del intelectualismo porque

establece una relación entre la razón y la experiencia, en una dirección diametralmente opuesta a

la de éste. En la tendencia de apriorismo, se sostiene que nuestro conocimiento posee algunos

elementos a priori que son independientes de la experiencia. Esta afirmación también pertenece

al racionalismo. Si relacionáramos el intelectualismo y el apriorismo con los dos extremos

contrarios entre los cuales pretenden mediar, inmediatamente descubriríamos que el

intelectualismo tiene afinidad con el empirismo, mientras que el apriorismo, se acerca al

racionalismo. El intelectualismo forma sus conceptos de la experiencia; el apriorismo rechaza tal

conclusión y establece que el factor cognoscitivo procede de la razón y no de la experiencia.

El dogmatismo.

Para el, resulta comprensible el que el sujeto, la conciencia cognoscente, aprehenda su

objeto, esta actitud se fundamenta en una confianza total en la razón humana, confianza que aún

no es debilitada por la duda.

El dogmatismo supone absolutamente la posibilidad y realidad del contacto entre el

sujeto y el objeto.

Para Kant el dogmatismo es la actitud de quien estudia la metafísica sin haber

determinado con anterioridad cuál es la capacidad de la razón humana para tal estudio.
El escepticismo.

El dogmatismo frecuentemente se transforma en su opuesto, en el escepticismo. Mientras

que el dogmatismo considera que la posibilidad de un contacto entre el sujeto y el objeto es

comprensible en sí misma, el escepticismo niega tal posibilidad. El sujeto no puede aprehender al

objeto, afirma el escepticismo. Por tanto, el conocimiento, considerado como la aprehensión real

de un objeto, es imposible. Según esto, no podemos externar ningún juicio, y debemos

abstenernos totalmente de juzgar.

Mientras que el dogmatismo en cierta forma ignora al sujeto, el escepticismo desconoce

al objeto.

El escepticismo se puede hallar, principalmente, en la antigüedad. Su fundador fue Pirrón

de Elis ( 360 a 270 ) . El afirma que no puede lograrse un contacto entre el sujeto y el objeto. La

conciencia y cognoscente esta imposibilitada para aprehender su objeto.

El subjetivismo y el relativismo.

El escepticismo sostiene que no hay verdad alguna. El subjetivismo y el relativismo no

son tan radicales. Con ellos se afirma que si existe una verdad; sin embargo, tal verdad tiene una

validez limitada. El subjetivismo, como su nombre lo indica, limita la validez de la verdad al

sujeto que conoce y juzga. El relativismo afirma que no existe alguna verdad, alguna verdad

absolutamente universal.

El subjetivismo y el relativismo son análogos, en su contenido, al escepticismo. En

efecto, ambos niegan la verdad; no en forma directa como el escepticismo, pero sí en forma

indirecta al dudar de su validez universal.


El pragmatismo.

El escepticismo presenta una actitud esencialmente negativa. Formula la negación de la

posibilidad del conocimiento. El escepticismo adquiere un cariz positivo en el pragmatismo

moderno. El pragmatismo, al igual que el escepticismo, desecha el concepto de la verdad

considerado como concordancia.

El pragmatismo cambia el concepto de la verdad en cuanto que es originado por una

peculiar concepción de lo que es el ser humano. Dentro de tal concepción el hombre no es

primordialmente un ser especulativo y pensante, sino un ser práctico, un ser volitivo.

El criticismo.

Existe una tercera postura que resolvería la antitesis en una síntesis. Esta postura

intermedia entre el dogmatismo y el escepticismo recibe el nombre de criticismo. Al igual que el

dogmatismo, el criticismo admite una confianza fundamental en la razón humana. El criticismo

está convencido de que es posible el conocimiento de que existe la verdad. Pero mientras que tal

confianza conduce al dogmatismo, a la aceptación candorosa, para decirlo en alguna forma, de

todas las aseveraciones de la razón humana y al no fijar límites al poder del conocimiento

humano, el criticismo pone, junto a la confianza general en el conocimiento humano, una

desconfianza hacia cada conocimiento particular, acercándose al escepticismo por esto.

El criticismo examina todas y cada una de las aseveraciones de la razón humana y nada

acepta con indiferencia.


Ciencia moderna

La ciencia moderna está regida por principios fundamentales cuya aparición y

demostración significó una potente renovación de los campos de la química, física, astronomía,

biología y anatomía humana, bajo la idea de que todos los fenómenos de la realidad responden a

una formulación teórica comprensible.

Podría decirse que las bases de la ciencia contemporánea, con todas sus vertientes y

posibilidades, está en esta renovación científica que ocurrió en base a dos etapas: una primera de

recuperación del legado filosófico y científico de la antigüedad clásica, satanizado por los siglos

de dominio religioso sobre la mentalidad europea, y una segunda de innovación y cambios

radicales, cuyo mejor ejemplo es la sustitución del modelo geocéntrico del universo propuesto

por Aristóteles y defendido por la Iglesia, por el Heliocéntrico de Nicolás Copérnico.ç

Se considera que la Revolución Científica tiene como punto de inicio y de cierre la

publicación de dos grandes obras científicas: De revolutionibus orbium coelestium (“Sobre los

movimientos de los orbes celestes”) de Nicolás Copérnico en 1543 y Principia mathematica

philosophiae naturalis (“Principios matemáticos de filosofía natural”) de Isaac Newton en 1687.

El método científico. Postulado formalmente por René Descartes en el siglo XVII, surge

el método propio de las ciencias como una forma de investigación que separara el saber

científico de la tradición, la autoridad y la fe, permitiéndole una relación directa y propia con sus

objetos de interés, en lugar de los razonamientos históricos previos.

El empirismo. De manera semejante, la ciencia adoptó el empirismo, es decir, la

valoración de las experiencias perceptibles y reproducibles como modelo de conocimiento del

mundo real, en lugar de apegarse al razonamiento aislado como ocurría en la antigüedad.


La experimentación. El paso lógico en esta evolución científica fue el método

experimental, que proponía la reproducción en un ambiente controlado de un fenómeno

específico de la realidad para poder determinar cómo ocurre y qué fuerzas están involucradas en

él, poniendo a prueba las creencias mediante la demostración en vivo de las teorías científicas.

La matematización. La matemática es una de las ciencias más antiguas que existen, y fue

siempre empleada por los filósofos y naturalistas; pero a partir de la Revolución Científica se las

empieza a aplicar para la medición de los fenómenos existentes en la realidad, considerando la

certidumbre que brindaban como la única alcanzable por el hombre, “equivalente a la de Dios”

diría Galileo Galilei.

La institucionalización. La Ciencia moderna surgida en ese entonces da los primeros

pasos hacia su existencia como una institución del saber humano, separada de los campos

tradicionales de la filosofía, la religión y la literatura, pasando a ocupar un papel predominante

en el mundo por venir.

El problema de la verdad

El problema de afirmar que algo es "verdad" nos remite a una serie de cuestiones de las

cuales la historia de la filosofía se ha ocupado en distintos momentos. ¿Qué afirmamos cuando

decimos que algo es "verdad"? ¿Cuáles son los criterios a partir de los cuales podemos decirlos?

La forma más cercana de comprender la verdad, al menos en nuestra vida cotidiana, es la

verdad como correspondencia. Ésta hace referencia a la adecuación de una descripción con la

realidad, o con un estado de cosas. La historia de esta forma de comprender la realidad se remite

a Aristóteles. Decimos que algo es verdad, por ejemplo, cuando alguien esboza el enunciado

"llueve", y nos asomamos por la ventana, constatando que es "verdad". Este criterio predomina

entre las ciencias naturales. Pero, claro, muchas veces es mucho más complicado lograr esa
constatación. El supuesto de base, es pensar que pueden coincidir los enunciados con una

"realidad". La correspondencia se manifiesta de este modo en la relación de dos extremos: las

palabras y las cosas.

Marx en su crítica al idealismo objetivo que no conoce la actividad practica como tal,

critica la especulación filosófica no encaminada a la transformación de la realidad, y exige

concreción en los análisis y abordar la verdad desde la praxis (Leer mi artículo El concepto de

praxis en Marx).

La verdad en Marx es un proceso como resultado del devenir humano, de la actividad

ontocreador del hombre, en su interrelación intersubjetiva (Alteridad) y de esta con la naturaleza.

La verdad no es utilidad, sino que es la realizada siendo explicada por el hombre para su

trascendencia existencial, para su sobrevivencia como ser histórico. La verdad para Marx no se

demuestra en la especulación filosófica, sino en la terrenalidad de la historia.

Así cada generación construye verdades que son absolutas en cada momento histórico y

relativas al mismo tiempo, en ese sentido la verdad es lo absoluto y lo relativo al mismo tiempo.

Al hombre no solo le interesa revelar las esencias y penetrar la realidad como tal, le interesa

también para que sirve la verdad, el conocer, en ese sentido la relación de praxis, conocimiento y

valor son inseparables, gnoseología, axiología y ontología están muy unidas.

La verdad pura no existe, no existe la verdad desideologizada, el conocimiento no existe

depurado, este está inmerso en un mundo de ideológicas y categorías explicativas, el

conocimiento y la verdad existe a través del sujeto, que es el que construye otra realidad alterna a

la verdad objetiva, no quiero decir con esto que no debamos acercarnos a la realidad objetiva de

forma radical, creo que ese es el cometido radical de la filosofía, ciencia y teología y todo

pensamiento que desee buscar la verdad.


Conclusión

La epistemología es a mi criterio, ese punto de vista desde el cual me relaciono con las

cosas, con los fenómenos, con los hombres y eventualmente con lo trascendente. Esto, que se

produce en el ámbito personal y cotidiano, también ocurre en el ámbito científico, donde

proliferan distintas corrientes y sistemas de pensamiento que resultan ser, en definitiva, formas

de ver el mundo
Bibliografía

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