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UNIVERSIDAD SEÑOR DE SIPÁN - FACULTAD DE

CIENCIAS DE LA SALUD

ESCUELA ACADÉMICO PROFESIONAL DE


ESTOMATOLOGÍA

ARTÍCULO
DIABETES MELLITUS

AUTOR
CINDHY NICOL SAAVEDRA CAMPOS

DOCENTE: MC DANIEL MANAY GUADALUPE

2020 – II
I. DEFINICIÓN

Se considera Diabetes Mellitus a un grupo de alteraciones metabólicas


caracterizada por presentar hiperglucemia crónica, esto debido a un
defecto en la secreción de la insulina. Además de la mencionada
hiperglucemia, junto a ella existen otras alteraciones en el metabolismo
de las grasas y de todas las proteínas; si la hiperglucemia persiste a
través del tiempo genera daños, disfunciones o fallas de muchos órganos
y sistemas, fundamentalmente en los riñones, los ojos, el corazón, los
nervios y los vasos sanguíneos. (1)

Por lo tanto, no sólo es una enfermedad crónica sino un problema de la


salud pública, e incluso el nombre propio del vulgo, “Diabetes”, genera
temor entre los pacientes que lo padecen e incluso deja secuelas
psicológicas para quienes mantienen un tratamiento de cura.

II. CLASIFICACIÓN

La diabetes mellitus incluye muchos tipos de diabetes y además algunas


categorías de intolerancia a la glucosa. A continuación, presento una
clasificación usada dentro de la investigación, con sus respectivas siglas
científicas.

a) Diabetes Mellitus tipo 1 (DM1):

Se caracteriza principalmente por que destruye la célula autoinmune β,


que ocasiona la deficiencia absoluta de la insulina y una tendencia
considerable a la cetoacidosis. Dicha destrucción que tiene un alto
porcentaje que es mediada por el sistema inmunitario, que se evidencia
mediante los anticuerpos: Antiglutamato decarboxilasa, anti insulina y
contra la célula de los islotes, asociado a los alelos específicos DQ-A Y
DQ-B del complejo mayor de histocompatibilidad (HLA). (2)

b) Diabetes Mellitus tipo 2 (DM2):

Mayormente está asociada a la obesidad o a un aumento de grasa


visceral y es la más común de todas las diabetes que se presentan.
Raramente se produce la cetoacidosis, y como mayor defecto está la
resistencia que tiene a la insulina, que va acompañada de una
deficiencia no absoluta de la hormona, hacia un defecto creciente a su
secreción.

c) Diabetes Mellitus Gestacional (DMG):

Se encuentran sobre todo a las que son intolerantes a la glucosa que se


presenta una vez empezado el embarazo, si se presenta antes de las 24
semanas de gestación se puede llamar preexistente, aunque aún no
diagnosticada. (3)

d) Otros tipos de diabetes específicos:

Acá se agrupan los que tienen una gran variedad de características, pero
con condiciones poco frecuentes.

Defectos genéticos de la función Se asocia a defectos


de la célula beta monogenéticos en el
funcionamiento de la célula B.
Defectos genéticos en la acción de Es más inusual pues se asocia a
la insulina mutaciones en el receptor de la
insulina.
Enfermedades del páncreas Pancreatitis, traumas del
exocrino páncreas.
Endocrinopatías Acromegalia, glucagonoma
Inducida por drogas o químicos Vacor, pentamida
Infecciones Rubeóla congénita
Formas poco comunes de diabetes Síndrome del hombre rígido
mediada inmunológicamente
Otros síndromes genéticos Síndrome de Down
algunas veces asociados a
diabetes

III. EPIDEMIOLOGÍA

Los casos de pacientes con diabetes mellitus ha ido creciendo al pasar


con el tiempo. Por ejemplo, hacia 1998 existían 140 millones de
diabéticos, hacia 2005 creció el número a 300 millones, desde 1970 la
tasa de mortalidad empezó en 100 mil habitantes aproximadamente y ha
tenido una línea de crecimiento y ha estado casi por 30 años en la
octava causa de las muertes en el mundo.

Las personas con diabetes tienen entre las causas de muertes según las
últimas estadísticas a: los infartos, las bronconeumonías, la insuficiencia
renal, los trastornos metabólicos agudos y los accidentes vasculares
encefálicos. Esto hace que el 75% de pacientes que lo padecen mueran
por su causa. (4)

Las complicaciones derivadas de la diabetes influyen en la mayor


mortalidad de los países latinoamericanos y repercute demasiado en la
calidad de vida de las personas, pues durante el progreso de la
enfermedad se van manifestando incapacidades, por ejemplo, aquellas
personas que padecen de insuficiencias renales, cardiacas o coronarias,
o amputaciones, o han quedado con ceguera o incluso han tenido alguna
parálisis.
La obesidad supone un 67,4% e incluso llega al 80,4% de los diabéticos,
de esta cifra son los que tienen mayores transgresiones dietéticas y
mucha vinculación a hiperinsulinemia cuando están en ayunas. El 83,3%
de os hombres que fuman se han asociado a las amputaciones, el 52,6%
de este grupo fuma a pesar de saber que tiene manifestaciones de
diabetes, complicando el tratamiento. Y más del 59% desconoce las
enfermedades al corazón que puede estar padeciendo, adelantando el
proceso de muerte.

Por ello se puede afirmar que es un problema de salud complicado el de


la diabetes, porque con el correr de los años ha evolucionado y está en
tendencia de seguir creciendo, es necesario crear sensibilidad respecto a
la erradicación de hábitos tóxicos y modificar factores de riesgos para
mejorar los tratamientos. Ejemplo claro de eso son los japoneses que
hasta 1956 tenían una gran tasa de mortalidad, pero con la mejora de
hábitos redujeron un 80% el índice. (5)

IV. FACTORES DE RIESGO PARA DIABETES MELLITUS TIPO 2

Se puede definir la Diabetes Mellitus tipo 2 como una enfermedad


crónica, degenerativa e incurable, aunque sí controlable, a través del
metabolismo y la manera de prevenir las complicaciones que se
presenten. Es necesario entender que los factores de riesgo se ven
altamente comprometidos con el estilo de vida que lleven los pacientes e
incluso se han comprobado en pacientes hasta 3 medicamentos
hipoglucemiantes para poder llegar a niveles de glucemias correctos y
poder disminuir las reacciones adversas que se presenten.

Han aumentado las personas con diabetes de tipo 2 a nivel internacional,


pues al iniciar el presente siglo se alcanzó una cifra de 150 millones de
personas y en 10 años más se llegó a la cifra media de 225 a 230
millones y se espera que hacia el 2025 el número llegue a 438 millones,
esto llevado a los países tercer mundistas hace que los rangos de
edades sean entre los 45 a 65 años. (6)

El padecimiento de este tipo 2 se da en 1 de cada 14 adultos y se


diagnostica principalmente entre los países menos desarrollados de
África y Latinoamérica. Y al menos 4 millones de muertes al año son por
su causa.

Para evitar os factores de riesgo que perjudican o agravan el desarrollo


de esta enfermedad, se ha creado la estrategia de una educación
terapéutica continuada, que tiene como objetivo principal dar la
información y el conocimiento sobre el desarrollo y las causas de este
tipo de enfermedad, así como, la adquisición de hábitos o habilidades
que disminuyan los riesgos a fin que el paciente conozca el problema
real, esto incluye a sus familiares con una participación activa y
progresiva. (7)

La educación debe ser invariable, que identifique las deficiencias reales,


que amplíe los conocimientos y evite las conductas contraproducentes,
hasta lograr el estilo de vida sin complicaciones y claro.

Otro factor de riesgo es la mala alimentación, que tiene como contraparte


la nutrición adecuada, que sobretodo radica en normalizar los valores de
glicemia y los lípidos, a esto se le añade el ejercicio, la alimentación y las
conductas al momento de ingerir alimentos.

Sobre todo, la dieta está distribuida de la siguiente manera:

 50 a 60% de aporte de energías en forma de hidratos de carbono


 15% en forma de proteínas
 Menos del 30% en forma de grasas.
Se deben indicar por peso del paciente la cantidad de calorías que
requiere e incluso se añade la actividad física que debe mantener.
Calcular cuánto necesita de calorías en el cuerpo dependerá del estado
nutricional de la persona.

Factores de riesgo como un aumento de colesterol, ingesta de grasas


saturadas o monoinsaturadas en excesos, así como ácidos grasos trans,
podrían suponer un avance efectivo hacia la muerte del paciente. (8)

Los requerimientos calóricos que evitan riesgos en un adulto según su


estado nutricional, así como la actividad física se pueden clasificar en el
siguiente cuadro:

ESTADO Actividad Física


Ligera Moderada Intensa
NUTRICIONAL
Bajo peso 35 40 45
Mucho peso 20 25 30
Normal 30 35 40
Fuente: Pérez A y Colab.

Otro factor de riesgo que se puede combatir es la regulación de la


glucosa a través de medicamentos tales como: Sulfonilureas y de
segunda generación (glibenclamida, glicazida, etc), las biguanidas y las
tiazolidinedionas, inhibidores de las alfa glucosiladas y secuestradores
de ácidos biliares. Entre otros.

V. FISIOPATOLOGÍA DE LA RESISTENCIA A LA INSULINA

La resistencia a la insulina está asociada a factores genéticos, que han


originado esta susceptibilidad y esto lleva un condicionamiento de
alteraciones clínicas, como son la intolerancia a la glucosa, la
hipertensión arterial llevando todo esto una diabetes mellitus tipo 2, esto
se puede reflejar en una clasificación de las consecuencias:

Hipertensión
Intolerancia a la glucosa
DM II
Arterioesclerosis
HDL Colesterol Disminuido
Ácido único elevado
CONSECUENCIAS LDL Densos
DE LA Susceptibilidad TG Elevador
Factor activador del Inhibidor
RESISTENCIA A LA Genética
del Plasminógrn
INSULINA E
HIPERINSULINEMIA

La resistencia a la insulina es conocido como el síndrome metabólico,


cogiendo esta nominación desde 1988 por Reaven, para diagnosticarlo
es necesario que se tengan unos criterios fundamentales:
 Obesidad
 Presión arterial
 Glucosa con nivel mayor a 110 mg/dL
 Dislipidemia
 Nivel de colesteroal HDL menor a 40mg/dL en hombres y en
mujeres 50 mg/dL

El musculo estriado es el tejido que normalmente consume la mayor


proporción de glucosa en el organismo, ya que llega a consumir hasta un
85%. (9)

Las mitocondrias se pueden definir en esta situación como el embudo de


las células, son las generadoras de la energía de todo el cuerpo, aquí
radica la conversión de todas las sustancias: aminoácidos, glucosa,
glicerol y ácidos grasos en el ciclo de Krebs. La mitocondria genera
energía en forma de ATP, normalmente y el consumo de oxígeno está
relacionado íntimamente al consumo del ATP y a la producción de agua.

Un problema genético en la mitocondria o la recepción del oxígeno o


transformación de las sustancias, disminuye la función de ciertas
proteínas que condicionan o limitan la producción de energía;
generándose así los defectos en la retroalimentación celular y la
capacidad oxidativa de la mitocondria, generando la resistencia a la
insulina.

VI. FISIOPATOLOGÍA DE LA DIABETES MELLITUS TIPO 2: DEL


TRIUNVIRATO AL OCTETO OMINOSO – ACTUALMENTE LOS ONCE
ATROCES (EGREGIOUS ELEVEN)

La fisiopatología de la Diabetes Mellitus va desde el triunvirato hasta el


octeto ominoso, que se suele relacionar demasiado con la insuficiencia
de las células β del páncreas, el aumento en la secreción de glucagón,
mayor gluconeogénesis, incremento de la lipólisis, resistencia a la
insulina, disminución del efecto incretina, disminución de la captura de
glucosa a nivel periférico, mayor reabsorción de glucosa a nivel renal y
alteraciones de los neurotransmisores. (10)

A continuación, un esquema que grafica de manera sintética el octeto


ominoso adoptado por DeFronzo.

Fuente: Yap-Campos, Sánchez-Gálvez y Rivero-Lopez


VII. CRITERIOS DIAGNÓSTICOS

Para diagnosticar la diabetes es necesario basarse en los niveles bajos


de glucosa para poder iniciar el tratamiento lo más pronto y reducir
posibles complicaciones. Se considera que los niveles de glucemia son
normales en ayunas menores a 100 mg/dl y de 140 mg/dl después de
haber puesto glucosa tras 2 horas.

Para diagnosticar esta enfermedad no se debe confiar únicamente en el


nivel de glucosa en ayunas, porque se ha demostrado que esto
únicamente beneficia a una porción ya que más de la tercera parte no
reciben el correcto tratamiento ni se benefician, esto sucede cuando
comparan os resultados con la prueba de tolerancia. (1, 3y4)
VIII. REFERENCIAS

1. Rojas E, Molina R, Rodríguez C. Definición, clasificación y


diagnóstico de la diabetes mellitus. Revista Venezolana de
Endocrinología y Metabolismo. 2012; 10(1). Disponible en:
http://ve.scielo.org/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1690-
31102012000400003
2. González S. Diabetes mellitus. Revista Cubana de Medicina. 2010;
44(5-6). Disponible en: http://scielo.sld.cu/scielo.php?
script=sci_arttext&pid=S0034-75232005000500008
3. Reyes F, Pérez M, Figueredo E, Ramírez M, Jiménez Y.
tratamiento actual de la diabetes mellitus tipo 2. Correo Científico
Médico. 2016; 20 (1). Disponible en: http://scielo.sld.cu/scielo.php?
script=sci_arttext&pid=S1560-43812016000100009
4. Hernández J, Licea M, Castelo L. Medicamentos que favorecen la
pérdida de peso y el control metabólico en las personas obesas
con diabetes mellitus tipo 2. Revista Cubana Endocrinología.
2013; 24(2): 323-352. Disponible en:
http://scielo.sld.cu/pdf/end/v24n3/end08313.pdf
5. Lazo Y, Lores D. Las incretinas: nueva alternativa terapéutica para
el control glucometabolico de la diabetes mellitus de tipo 2.
Revista Medisan. 2015; 16(3): 445-451. Disponible en:
http://scielo.sld.cu/pdf/san/v16n3/san15312.pdf
6. Reyes F, Pérez M, Figueredo E, Ramírez M, Jiménez Y.
Tratamiento actual de la diabetes mellitus tipo 2. Correo Científico
Médico. 2016; 20(1). Disponible en: http://scielo.sld.cu/scielo.php?
script=sci_arttext&pid=S1560-43812016000100009
7. Reyes F, Pérez M, Figueredo E, Céspedes Y, Ardevol E. Las
incretinas como nueva opción terapéutica en la diabetes mellitus
tipo 2. Revista Cubana Médica, 2016; 54(2). Disponible en:
http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0034-
75232015000200006
8. Carrillo R, Carrillo J. Tratamiento quirúrgico de la diabetes mellitus
tipo 2. Cir. 2016; 80(2): 107-108. Disponible en:
http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=66223268001
9. Cipriani E, Quintanilla A. Diabetes mellitus tipo 2 y resistencia a la
insulina. Revista Médica Herediana. 2014; 21(3). Disponible en:
http://www.scielo.org.pe/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1018-
130X2010000300008
10. Yap K, Sánchez X, Rivero C. El papel de los inhibidores de la
DPP4: un enfoque actual en el manejo de la diabetes mellitus tipo
2. Universidad Nacional Autónoma de México. 2017; 24(3): 136-
139. Disponible en: https://www.medigraphic.com/pdfs/atefam/af-
2017/af173j.pdf

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