Sección de Insuficiencia Cardíaca y Trasplante

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Índice

Introducción 2

¿Cómo evoluciona la insuficiencia cardíaca? 3

¿Cuáles son sus síntomas? 3
Causas de la insuficiencia cardíaca 4

Tratamiento de la insuficiencia cardíaca:

un esfuerzo de grupo 6

Tratamiento 7
Rutina diaria 9
Signos de alarma 10
¿Cuándo concurrir al Servicio de Emergencias? 11

Medicación 12

Medicación en la insuficiencia cardíaca 13

Guía para tomar su medicación 14

Dieta 16

La alimentación con insuficiencia cardíaca 17

Pautas básicas 19
Recetas 22

Contacto para emergencias, urgencias

e información 26
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Introducción

El término médico de “insuficiencia cardíaca” puede generarle preocupación,

por ello es que hemos desarrollado este cuadernillo que lo ayudará a
comprender qué significa padecer esta enfermedad y cómo convivir con ella
para mejorar su calidad de vida.

El trabajo principal del corazón es bombear la cantidad adecuada de sangre

a todas las partes del cuerpo; entonces hablamos de insuficiencia cardíaca
cuando el corazón no es capaz de bombear suficiente sangre para abastecer
a los órganos, músculos y tejidos del organismo. Esta enfermedad se
manifiesta lenta y progresivamente, ya que cuando el corazón comienza
a fallar se activan mecanismos compensatorios, por lo que los síntomas
pueden no resultar evidentes hasta que la insuficiencia es muy avanzada
y supera los mecanismos de compensación. Un ejemplo de éstos es cuando
los riñones responden a la disminución del aporte de sangre aumentando la
retención de sodio y de agua, cuya consecuencia es la generación de edemas.

Generalmente, cuando los pacientes aprenden sobre su enfermedad logran

realizar un mejor seguimiento de su tratamiento. La insuficiencia cardíaca
es un síndrome crónico y progresivo en el cual los ajustes de la medicación,
las visitas periódicas al médico y las modificaciones del estilo de vida son
fundamentales.
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¿Cómo evoluciona la insuficiencia cardíaca?

Si usted se cuida adecuadamente la insuficiencia cardíaca

no le impedirá realizar la mayoría de sus actividades diarias.
La evolución en el tiempo dependerá del funcionamiento
de su corazón, de sus síntomas y de cómo responda y
cumpla el tratamiento.

¿Cuáles son sus síntomas?

Los síntomas pueden ser leves o severos dependiendo qué

tan débil esté su corazón; incluyen:

Falta de aire al realizar ejercicio o dificultad para respirar

en reposo o cuando se acuesta a la noche. La congestión
pulmonar también puede ocasionar tos seca que aumenta
al adoptar la posición acostada.

Edemas o retención de líquido en tobillos y piernas.

Abdomen hinchado y aumento de peso; síntomas que se
manifiestan por la retención de agua y sodio. También puede
usted notar que orina más de noche que durante el día.

Fatiga y debilidad con el ejercicio. Puede sentir mareos y

confusión mental como expresión de una menor llegada de
sangre a los músculos y otros órganos.
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Sensación de estómago pleno por la congestión del

hígado que puede ocasionarle pérdida de apetito, malestar
luego de la ingesta de alimentos y náuseas.

Palpitaciones o latidos irregulares porque el corazón late

más rápido para bombear más sangre.

Causas de la insuficiencia cardíaca

Enfermedad coronaria o aterosclerosis coronaria: la

disminución del aporte sanguíneo al músculo cardíaco
deteriora su capacidad de contraerse y, en casos más graves,
puede producir un infarto.

Presión alta (hipertensión arterial): la falta de control de

la presión arterial sobrecarga al corazón y puede llevar a la
insuficiencia cardíaca.

Enfermedad de las válvulas cardíacas: si las válvulas no

funcionan adecuadamente obstaculizan el flujo normal de
sangre.

Cardiomiopatías: daño del músculo cardíaco ocasionado

por infecciones, abuso de alcohol y consumo de drogas
tóxicas.

Enfermedades cardíacas: presentes desde el nacimiento.

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Algunos pacientes pueden tener disminución de la

función del corazón sin sufrir síntomas. En estos casos
el tratamiento médico es igualmente importante para
prevenir la progresión de la enfermedad. Si padece alguna
de las enfermedades que dañan al músculo cardíaco
consulte a su médico.
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Tratamiento de la
insuficiencia cardíaca:
un esfuerzo de grupo

El tratamiento de la insuficiencia cardíaca es un trabajo de equipo,

en el que usted es el jugador más importante. Su médico le
indicará qué medicamentos tomar y lo guiará en el control de otros
problemas médicos; otros miembros del equipo, nutricionistas,
médicos especialistas en rehabilitación física, psicólogos y
enfermeros lo ayudarán a llevar con éxito su tratamiento.

Sin embargo, es su responsabilidad tomar los medicamentos,

cumplir la dieta, modificar hábitos para llevar un estilo de vida
saludable, cumplir con el seguimiento y ser un miembro activo del
equipo tratante.
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Tratamiento

Con su médico conversará sobre las opciones para su

tratamiento; y él determinará cuáles son las mejores para
usted.

Existen una serie de mecanismos y elementos para el

tratamiento de la insuficiencia cardíaca:

1- Tomar los medicamentos. Éstos pueden ser diuréticos,

vasodilatadores, potasio, beta bloqueantes, digital y otras
medicaciones.

2- Hacer cambios en la dieta. Deberá disminuir el consumo

de sal a 2 g o menos por día, comer alimentos ricos en
fibras, limitar las calorías si debe disminuir su peso y evitar
los alimentos con azúcares refinados, grasas saturadas y
colesterol.

3- Cambiar su estilo de vida. Deberá controlar su peso

diariamente a la misma hora y anotarlo, aumentar
su actividad física según se le indique, no fumar,
evitar el alcohol, reducir el sobrepeso, descansar más
frecuentemente y planificar sus actividades.

4- Cirugías. Algunos pacientes requieren cirugías coronarias,

valvulares o trasplante cardíaco para mejorar su condición.
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5- Visitar periódicamente a su médico. La frecuencia de sus

visitas será indicada por su médico. En éstas el profesional
analizará su evolución y tendrá oportunidad de supervisar
su tratamiento. También será una oportunidad para que
converse sobre cómo se siente y las dificultades que le
acarrea su enfermedad.
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Rutina diaria

Organice su rutina en función de su situación clínica. Los cambios

pueden ser positivos e interesantes.

• Cocine sin sal y sin grasa.

• Cuide la dieta aun si come fuera de casa o se va de viaje.

• Evite el alcohol y el tabaco.

• Controle su peso diariamente.

• No deje de hacer su tratamiento.

• Haga ejercicio físico si su situación lo permite.

• Vacúnese para prevenir la gripe y el neumococo.

• Adecúe su actividad laboral a su capacidad física.

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Signos de alarma

Si tiene algunos de los siguientes síntomas es muy

importante que contacte a su médico sin esperar a
su próxima consulta. Si sus síntomas se descubren
tempranamente su médico puede realizar cambios en la
medicación para aliviarlos. Nunca cambie o deje de tomar
sus medicamentos sin contactarse primero con su médico.

Signos de alarma:

• Incremento inexplicable de peso: más de 500 g por día o

2,5 kg en una semana.

• Aumento de los edemas en tobillos, piernas o abdomen.

• Aumento de la falta de aire, especialmente al despertarse.

• Sensación de plenitud en el estómago con pérdida de

apetito o náuseas.

• Infección respiratoria o tos irritativa.

• Frecuencia de pulso mayor a 120 latidos por minuto o

pulso irregular.

• Dolor de pecho.

• Disminución marcada del ritmo de la orina.

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¿Cuándo concurrir al Servicio de Emergencias?

Algunos síntomas, por su severidad, exigen que concurra

inmediatamente al Servicio de Emergencias. Éstos son:

• Dolor de pecho de gran intensidad, de reciente comienzo y

acompañado de falta de aire, sudoración, náuseas o fatiga.

• Frecuencia de pulso mayor a 120-150 latidos por minuto

acompañada de falta de aire.

• Falta de aire que no se alivia en reposo.

• Falta de fuerza o parálisis repentina en brazos o piernas.

• Caída con pérdida de conocimiento.

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Medicación
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Medicación en la insuficiencia cardíaca

De los medicamentos utilizados en la insuficiencia

cardíaca, algunos disminuyen la progresión de la
enfermedad y prolongan el tiempo de vida mientras que
otros alivian los síntomas y mejoran la calidad de vida.

En el primer grupo se encuentran las drogas inhibidoras de

la enzima convertidora (enalapril, captopril, ramipril, etc.),
los beta bloqueantes (bisoprolol, carvedilol, nebivolol, etc.)
y los antagonistas de la aldosterona (espironolactona y
eplerenona). En el segundo grupo, la digital, los diuréticos y
otros vasodilatadores como la hidralazina, los nitritos y los
antagonistas del receptor de la angiotensina (candesartan,
losartan, etc.).

El tratamiento incluye varias de estas medicaciones

combinadas porque cada una de estas drogas actúa sobre
diferentes mecanismos responsables de la progresión de la
enfermedad.

Si tiene una balanza, pésese todos los días luego de orinar

y antes de desayunar. Comuníquese con su médico si gana
más de 500 g en un día o 2,5 kg en una semana, porque este
aumento de peso puede manifestar retención de líquido.

Los diuréticos generalmente producen pérdida de potasio.

Su médico le indicará si debe recibir aporte extra de este
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mineral en la dieta. Varias frutas y vegetales son ricos en

potasio: banana, naranja, jugo de uva, kiwi, papa, acelga,
espinaca y legumbres.

Si además de los diuréticos toma drogas ahorradoras

de potasio como la espironolactona o los inhibidores de
la enzima convertidora, debe evitar los alimentos ricos
en potasio o los sustitutos de sal que lo contengan. Un
nutricionista junto con su médico le indicarán cómo debe
manejar el consumo de sodio y potasio.

En algunos pacientes, la cirugía o la angioplastia son

opciones terapéuticas; esto sucede cuando hay lesiones
valvulares o coronarias que se pueden corregir.

Guía para tomar su medicación

El esquema de tratamiento varía para cada persona. Su

médico y enfermero trabajarán con usted para encontrar
la mejor medicación que alivie sus síntomas y mejore su
sensación de bienestar.

• Conozca el nombre de las medicaciones que usa y lleve

una lista de ellas.

• Tome sus medicamentos como se le indicó, respetando

los horarios. No deje de tomarlos ni cambie la dosis sin
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consultar. Continúe tomando la medicación aunque

se sienta bien, ya que suspender bruscamente los
medicamentos puede deteriorar su estado.

• Tenga una rutina para tomar los medicamentos. El

uso de “pastilleros” para organizar los diferentes días le
será de utilidad.

• No tome medicamentos por su cuenta. Algunos, como

antiácidos, sustitutos de la sal, antihistamínicos y
antiinflamatorios, pueden empeorar los síntomas de la
insuficiencia cardíaca.

• Si se olvida una dosis tómela tan pronto lo recuerde. Si

está próximo a la siguiente toma saltee la que se olvidó.
No duplique la dosis para reemplazar la olvidada.

• Antes de someterse a una cirugía o anestesia general

(incluida la cirugía dental) avise al profesional actuante
sobre su insuficiencia cardíaca y los medicamentos
que usa, ya que puede necesitar un antibiótico previo
a algunos procedimientos.
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Dieta

Seguir una dieta saludable para el corazón significa cambiar los

hábitos de nutrición establecidos hasta este momento. En conjunto
con un nutricionista aprenderá a seleccionar los alimentos más
saludables y a prepararlos de manera que resulten agradables
para su paladar.
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La alimentación con insuficiencia cardíaca

Sal (cloruro de sodio):

La ingesta de sodio es una cuestión crítica para pacientes con

insuficiencia cardíaca. Un elevado consumo de sodio puede
producir retención de líquidos y, por lo tanto, favorecer la
formación de edemas. La acumulación de líquidos agrega
más presión en el corazón y puede contribuir a dificultar
la respiración.

La mayoría de las personas consume mucha más sal de

lo que necesita; el organismo la necesita, pero solo en
pequeñas cantidades. Trate de mantener su ingesta de
cloruro de sodio sin superar los 2 g por día.

Alimentos con alto contenido de sodio:

• Quesos duros, de rallar

• Manteca y margarina

• Panificados comunes (pan, galletitas)

• Fiambre, embutidos y chacinados

• Enlatados
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• Congelados

• Picadillos y patés

• Sal de mesa y de cocina

Líquidos:

En casos avanzados de insuficiencia cardíaca, su médico

puede indicarle restringir la ingesta de líquidos para reducir
el estrés del corazón. Hable con su médico para ver cuánto
líquido le recomienda beber, y recuerde que las infusiones,
sopas, caldos, yogures, leche y gelatinas se incluyen dentro
de esa cantidad.

Colesterol:

El colesterol sanguíneo elevado se ha asociado a la

enfermedad coronaria, la principal causa de insuficiencia
cardíaca. Una dieta rica en grasas saturadas conduce a altos
niveles de colesterol LDL o “colesterol malo” en sangre. Si a
usted le han diagnosticado enfermedad coronaria, reduzca
la ingesta de grasas saturadas y colesterol.

Otros nutrientes:

El potasio y el magnesio son minerales importantes en la

dieta. Algunos diuréticos, utilizados para ayudar a eliminar
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el exceso de líquido, pueden disminuir estos nutrientes.

Consulte a su nutricionista si es necesario agregar
alimentos ricos en estos minerales.

Pautas básicas

• Controle el sodio de la dieta, reduciendo el consumo

a 2 g por día.

• Aprenda a leer las etiquetas de los alimentos para

seleccionar productos con bajo contenido de sodio.

• Consuma alimentos ricos en potasio.

• Incluya alimentos ricos en fibras.

• Controle la ingesta de líquidos según las indicaciones.

• Mantenga un peso saludable.

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Consuma:

Vegetales y frutas preferentemente crudos: tienen alto

contenido en vitaminas y minerales.

Seleccione los alimentos de bajo contenido graso: lácteos

descremados, quesos untables descremados, galletitas de
bajo tenor graso rotuladas sin sal.

Una porción de carne al día: ave sin piel, vacuna magra

(cuadril, paleta, peceto, nalga, bife angosto) y pescados de
mar ( merluza, brótola, abadejo, lenguado).

No coma más de 2 huevos por semana.

Elija pastas simples: semoladas sin huevo y rellenas de

ricota y/o verdura.
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Evite:

Sal fina y gruesa, sal marina, sal de ajo o apio, sales dietéticas.

Fiambres, embutidos: salchicha, chorizo, morcilla, jamón,

mortadela, salame y salamín.

Picadillos o patés.

Quesos duros y semiduros: de rallar, gruyere, roquefort, Mar

del Plata, etc.

Mantecas y margarinas.

Productos de copetín.

Aderezos: mayonesa, salsa golf, salsa de soja, mostaza, ketchup.

Productos en salmuera: aceitunas, pickles.

Amasados de pastelería: tortas, masas, facturas, bizcochos

de grasa.

Alimentos enlatados y congelados: tomate en lata, arvejas

en lata, comidas preparadas.

COCINE SIN SAL Y NO AGREGUE SAL A SUS COMIDAS

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Recetas

Sopa minestrón

Ingredientes

Cebolla 50 g
Cebolla de verdeo 50 g
Puerro 50 g
Ají 50 g
Zanahoria 50 g
Chaucha 50 g
Tomillo 2 cucharaditas
Provenzal 3 cucharaditas

Forma de preparación

• Colocar 1 litro de agua mineral permitida y 2 sobres de caldo

dietético sin sal.

• Cocinar las verduras durante media hora hasta que estén cocidas y
reponer el agua evaporada.

• Condimentar.
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Recetas

Filet de merluza al puerro

Ingredientes

Filet de merluza 800 g

Caldo de pescado 1 taza
Vino blanco seco 1/2 taza
Puerro picado 400 g
Cebolla mediana 1 unidad
Jengibre 1 cucharada
Salvia 6 hojas
Pimienta a gusto

Forma de preparación

• Sazonar los filetes con pimienta.

• Calentar el caldo del pescado junto con el vino blanco seco y la

cebolla rallada. Cuando rompe el hervor acomodar el pescado en
la sartén y cubrirlo con los puerros picados. Tapar el recipiente
y cocinar durante 5 minutos. Destapar, dar vuelta los filetes y
mezclar con las verduras.

• Volver a tapar durante 5 minutos, luego condimentar con

jengibre, pimienta y salvia. Hervir durante 10 minutos más.
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Recetas

Pechugas de pollo a la cacerola

Ingredientes

Pechugas deshuesadas sin piel 4 unidades

Cebolla 1/2 unidad
Cebolla de verdeo 1/2 unidad
Fécula de maíz 1 cucharada
Azafrán 1 cápsula
Pimienta a gusto
Caldo de verdura sin sal cantidad necesaria
Tomates perita 4 unidades

Forma de preparación

• En una cacerola colocar 2 cucharadas de caldo y rehogar las cebollas

picadas.

• Agregar el azafrán disuelto en 2 tazas de caldo y las pechugas,

cocinar 15 minutos.

• Incorporar la fécula de maíz diluida en ½ taza de caldo y agregar

la pimienta. Cocinar hasta que la salsa se espese.

• Servir las pechugas salseadas con los cubos de tomate.

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Recetas

Mousse de duraznos

Ingredientes

Pulpa de duraznos 400 g

Queso blanco descremado sin sal 200 g
Azúcar 100 g
Naranjas de jugo 2 unidades
Gelatina sin sabor 1 sobre
Claras de huevo 3 unidades

Forma de preparación

• Mezclar la pulpa de durazno con el queso blanco descremado y el

azúcar.

• Hidratar la gelatina con el jugo de naranja y calentar casi hasta el

punto de hervor. Enfriar revolviendo constantemente y luego mezclar
la preparación anterior.

• Batir las claras a punto nieve y mezclar con la preparación anterior

con movimientos envolventes.
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Contacto para emergencias,

urgencias e información
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No dude en consultar frente a cualquier problema en relación con

su enfermedad. La comunicación fluida con el equipo tratante
mejorará los resultados del tratamiento.

Consultas: 4105 7500 / 4787 7500 (int. 3816/3178)

Servicio de Emergencias: 4105 7500 / 4787 7500

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Editado en octubre 2017.
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