Está en la página 1de 14

UN ICEBERG LLAMADO POESÍA

Historias de joven
Uno

Aquí, a 4000 metros bajo el nivel del mar adonde


no llegan fácilmente ni han llegado ni podrán llegar presiones
o compresiones otras que las del propio mar
y nuestro propio ser
aquí donde una buena parte del problema
se reduce a esto:
¿Quién baja hasta aquí y por cuanto tiempo?
(y no me refiero a presiones literarias u otras monsergas
ni a qué tan claras u oscuras sean las aguas los lodazales
sino a un problema de audaces buzos y buceadores de las
profundidades)

aquí continúa siendo un problema el aire la luz


la resistencia – sólidos pulmones – inteligencia
un vigoroso corazón empecinado con buenos rendimientos
de los nervios ritmos acordes tonos discordantes
tonales desentonos – espaciamientos perspicacias
una vista azuzada – oídos alerta a lo mayor y a lo menor…

y un problema claro está de batiscafos


equipos especializados de las profundidades
mapas actualizados de los lechos marinos
diseños y rediseños de materiales y accesorios
parques full track o full equipo y teorías
de lo más modernas – cosas que no abundan acá
y no abundarán por mucho tiempo…

Y no sólo tantanes españoles o franceses o escandinavos


o rusos o alemanes o ingleses o italianos o centroeuropeos
antes que negros-amerindios-andinos-afroantillanos
o afrocaribes junto a galopadas pamperas o pampeanas
ni otras locuras más acerca de cómo se encontraron
ésta / esa enorme masa negra toda de hierro
con esa / ésta enorme masa blanca toda de hielo

monte Everest sierra circular cuchillo escalpelo bisturí


navaja de afeitar / me encontré en medio de tal cantidad
de problemas muchos irresolubles algunos muy pocos
en realidad solubles y tantos falsos problemas
provocados por preguntas equivocadas
rodeadas de gaseoso abstraccionismo

Los vigilantes de la ley dicen <<indaguen sólo


por sus muertos dejen en paz al resto circulen circulen
no se queden ahí parados>> – cayeron sobre nosotros mil
y una historias de los floridos magnates del universo
historias de los migrantes de todas las latitudes
delitos inconmensurables de los maleantes los delincuentes
de un mundo que no ha cesado de irse a pique
son súcubos son íncubos son pesadillas
atroces sueños de vida / muerte los propios
y los ajenos en un mundo guerrero

Un mundo tan aguerrido donde siempre avanzan fuerzas de un


lado contra fuerzas del otro v.g. la vanguardia tanática
contra la Nouveau epoque y ambas contra tradición y cambio
se estrellan colisionan casi a muerte chocan y
no se puede afirmar nada de seguro
quién colisiona más ni quién menos
o quién se queda inmovilizado estático
lleno de estupor (¿inmovilismo es una táctica probada?
¿quién se mueve hacia adelante avanza ataca provoca transgrede
es otra táctica probada?) – ¿qué cosas entonces colisionaron?
¿Qué sucedió con el Titanic? – que era a la vez un barco nuevo
(¿novísimo?) un barco moderno venero de tradiciones?
¿si no hubiera sido por ese iceberg a la vez Tradición y Cambio…
y el barco a su vez tradición y cambio
Nadie por esos años lo hubiera sabido…

– ¡debieron de llamarlo por eso el primer barco postmoderno!


Dos

Y yo me arrojé del elevado risco al agua en impecable palomita


cayendo sobre cubierta rodé y rodé escaleras abajo y no paré
hasta la sentina el fondo mismo del barco al fondo del armatoste ese
/ al bajo vientre del Oscuro
Y ahí quedé detenido o apabullado demorándome creo que apuñalado
he pasado tantos y tantos breves años herido como de muerte
por algún malhadado por debajo del estómago por debajo de la línea
de flotación así como quien rebana mantequilla los intestinos al aire
flameándolos como gallardetes
yéndoseme por ahí cada día la vida de a pocos
así como los humores van al aire o van al mar…

Hoy se cree por Ballard que fue sólo un golpe del iceberg
un raspado que aflojó las planchas del fondo
volaron los pernos los remaches por la presión del golpe
(se dice que los constructores no respetaron el espesor
o el grosor exigido de las planchas… y éstas cedieron…)

El agua comenzó a entrar como desalada


una hemorragia al revés de afuera a adentro
imagínese al Gran Océano de a pocos vertiéndose dentro de
una cápsula sólo que no era un barco tan pequeño
(por eso duró dos horas no dos minutos)

Y ese vuelo de ángel o arcángel bien pudo ser una prueba


una de las tantas pruebas entre otras figuraciones que
se nos manda cada vez que avanzamos – quizás esa fue
la mayor de mi adolescencia y/o la primera adultez entre
las fantasías y/o fantaciencias de autor subdesarrollado…
los impecables saltos ornamentales ¡esos olímpicos que se ven
en la T.V no eran para mí! Tampoco los giros y sobregiros del tiburón
/ ni los del delfín…
Confieso que los hubiera deseado como el abuelo Lautréamont
¡no se pudo! ¡no se pudo!
uno puede ser a veces un maldito animal pero… uno no puede dejar de ser
un ser demasiado latinoamericano-tropical…
2

Y hasta ahí nomás llegó mi inconsciencia del hielo


Yo perdí la inocencia en todos los órdenes no he vuelto a ser el
mismo
(naturales / sociales / culturales) Yo perdí
y gané la inconsciencia del hielo y ahí empezó el Fuego ese
y el Hielo a la vez: lo determinante / lo decisorio y lo decisivo
o lo fatal y también llegó lo indeterminado y todo lo aleatorio
conformando figuras figuraciones contrafiguras refiguraciones
configuraciones un sinnúmero de simulacros un sinfín de estados
de lo frío a lo helado lo congelado de las inmensas montañas de hielo
que nos asolan a los bosques de hielo en los polos
hasta llegar a esta conciencia de barco flotante naufragante
en las calles y sobreviviente a la vez…

Nadie va más lejos que su tiempo


desde muy temprano supe del tiempo que me había tocado en suerte…
una conciencia de barco que colisiona siempre y se sigue hundiendo
a fuer y a medida que pasa el tiempo…
(o un barco que encalla de pronto partido en dos o diezmil pedazos)

¡Abajo! fue tan grande el encontronazo


tan poco suave – sutil o considerado / al fondo
todo fue tan bestial tan sin formas tan sin buenos modales
o compresiones bajo mil compresiones tan despiadado todo
y tan rudo y tan sin sentido
por dispar por disparatado o desmesurado ¡Ay! ¡Ay! ¡Ay!

¡Arriba en cambio! todo fue tan pronto disimulado


unos codazos apenas unos coquetos mohines unos tic o temblores
sucesivos en los párpados algunas perturbaciones en el pasaje
los pasajeros se iban a discusiones airadas de
– “¡cómo ahora retrasos horarios! ¡hay compromisos antelados
en N.Y.!” “¡oh no! ¡el barco no! ¡es sólo un medio de gozo y de
prestigio! ¡Nadie puede creer al Titanic hundiéndose!”

¿¡Pero abajo qué estaba sucediendo!? – el Güernica de Picasso


de ojos saltoneando por los pasadizos como cabras locas
– ¿delicatessen? ¡Arriba! ¡Arriba codazos desaprensivos
tics sobresaltos de párpados de miradas sin mirar idas o perdidas…

– ¡pero Abajo! ¡Abajo en cambio!


los de la sentina reventando de hacinamientos
las gentes se tapaban la cara ojos enloquecidos girando
apretando las mandíbulas para que no se les volaran
los dientes del terror incontenibles el ruido era infernal
el calor insoportable…

En esas circunstancias volver al farallón furioso del Hielo


escarpado cerro resbaladizo todo de hielo enceguecedor
era algo simplemente imposible – las heladas originales
los estados previos del ser humano se habían ido para siempre
junto con el iceberg / ahora esos estados y lugares esos sitios
los ocupaban la inmensa sociedad – el fuego…
ese fuego que a su vez fabricaba el mundo del hombre y un sinfín
de señales de las industrias modernas simuladoras del frío
simuladoras del calor ¡fríos! ¡calores! ¡hielos!
¡aires! a través de los artilugios y artificios
las reingenierías en continua revolución
– a veces tan riesgosas en resoluciones de éxitos
hacían crecer los sentidos y sus combinatorias
los sentidos reconvertidos eran cada vez más ojos-ojos
más oídos – oídos más tactos gustos olfatos como si fueran nuevos…

Es la otra lectura de la Historia


– ¡Siglo Veinte! por primera vez la Luna completa…
oposiciones / contradicciones / implicancias / alternancias /
modelizaciones / remodelizaciones / correspondencias y
lecturas cruzadas lecturas sincrónicas y lecturas diacrónicas
de lo uno y lo mismo y de lo uno y diferente eran
ya no más una sola Cara de la Luna la maravillosa
/ sino también la Otra (Cara) la completamente
llena de cráteres… la fea…

Eran ahora lecturas modernas de lo adecuado y lo inadecuado /


de lo probable y lo improbable / de lo decible y lo indecible…
y lo improbable indecible etc. etc. etc.) – ¡Los milagros modernos!

¡Y esto es lo que se llama un Discurso moderno en Loor de la Poesía!


UN ICEBERG LLAMADO POESIA
Tres

el barco de luces conducido por un grumete


BRETON

Y el que habla… un pobre y triste joven de aquellos


tristes años… imposibilitado de decir verdad
o de decir mentira… de hacerse oír claramente en la oscuridad
en medio de la baraúnda el terror el vórtice el follón
que se armó – caían cuchillos como granizadas estrías finísimas
de los hielos raspados navajas de afeitar caían por miríadas
plumas de desplumadas aves ¡todo a la vez!

galvanizando el aire entero… el caos… la agonía


el pavor de los solitarios el pavor de las multitudes
de rostros descompuestos – no olvidaré jamás los gritos
provenientes de los diversos puentes y los entrepuentes
los corredores las cubiertas los pasadizos de los
que sabían que ahora iban a morir por agua
– (¡Por Agua! que no es lo mismo que morir por Fuego
por Aire por Tierra)
lo había leído tantas veces en los ojos de los hieráticos ojos de los
pescados muertos en filas interminables en los mercados
arregladitos siempre bien puestecitos unos al lado de otros
¡hasta sus precios! Y al fondo dando vueltas
seres moviéndose por ahí como hombres (siempre detrás de los precios
el Mar de los Orígenes escritos en el Mar de los Nacimientos
con apresuramientos y faltas de ortografía en los mostradores)
¡En el Mar Rojo ojos abiertos ojos como los del Mar Muerto!
En el paroxismo – literaturas paroxísticas
En el caos – literaturas caóticas
En la desesperación en el desenfreno – literaturas desenfrenadas
pero en esos meandros de los bosques y bosques en ruinas
¡esqueletos de barcos a las lindes y landas de los horizontes!

Y como no podía salvar a nadie


nadando en medio del hielo yo no sé cómo
Y nadie me pidió ayuda ni consuelo
levantar a una niña en brazos por encima del mar y de las olas
nadar con una mujer al lado sin desfallecer kilómetros de kilómetros
Yo como la proa de su amor o su quilla / Ella como la popa
moviéndonos sobre las turbulentas aguas meneándonos sin sosiego
bajo los temporales y los ciclones hacia las soluciones y las
resoluciones
no tienen por qué tener como único desenlace los arrecifes o los
hielos

Que se ven desde aquí: les veo con anteojos de mar


el mar con largavistas les veo según sean las cargas de los barcos
piratas desde lejos los cargueros los petroleros los graneleros
los barcos caboteadores – no son como los transatlánticos
¡tan hermosos de ver tan llenos de gentes coherentes / incoherentes
tan llenos de aventureros y aventureras…

Caían por doquier maderas atuendos vestidos ropas sillas de mimbre


platerías maravillosas cristales lozas de mil vajillas y joyas
increíbles amables sedas muebles puertas de vaivén y puertas
preciosas talladas rotas o descolgadas como párpados tapices
fantásticos había que salvar a los niños a mujeres a ancianos
Era un desbarajuste todo y había que salvar a como fuera lugar
a tantos desquiciados por este trágico suceso…
¡y no habían botes suficientes en este barco fantástico…
presto a devenir dentro de unos instantes en barco fantasmal…

Los botes eran mucho menos que la mitad de los necesarios


sólo 18 botes que debieron ser 50 pero se hubieran visto tan feos
sobre cubierta
todos esos paquidermos o cachalotes ahí varados ¡y no se pusieron!
/ y habían 4 plegables auxiliares de caucho amarrados a los pies de
las chimeneas
(que eran cuatro) – pero en realidad no habían botes para todos…
¡sólo se salvó el 38% del total que eran 2223 personas entre
pasajeros y tripulantes (sobrevivientes 703)!

De ahí en adelante la norma marítima iba a ser


botes para todos pero no antes del hundimiento
sino después… NO ANTES SINO DESPUÉS…
primero es el error… después de muchos errores viene el
acierto… Y no era un barco sólo para los otros…
los que hoy se los imaginan pueden ver barcos llenos de seguridad
(radares conectados a satélites informaciones de todos los rangos…
hoy los aciertos más modernos están sobre los transatlánticos
como seguridad… pero antes primero era el lujo y lo suntuario
el siglo diecinueve venciendo al siglo veinte el del confort… pero…
el cambio siempre vence a la tradición y no al revés como sucedió…
esto casi nunca se ve esto casi nunca lo ven… hasta que sucede…
UN ICEBERG LLAMADO POESIA
Cuatro

Y de pronto apareció por ahí ese maldito iceberg


llamado Poesía o Literatura o Aburrimiento o lo que fuera
con la única condición precisa de no devenir en Aburrimiento
ni por un instante…

Los viajes se podían repetir hasta el Aburrimiento


pero una vez llegados allí / a ese cape borrascoso o Cabo
de Nueva Esperanza o cabo furioso ¿vencería una vez más
el Aburrimiento / el más temible malhechor de la Antigüedad
¿el más temido de los Tiempos Modernos?

2/3 de humanidad padece de hambres crónicas – con frecuencia


el tercio restante y muchos de los 2/3 se aburren se aburren
inexorable-mente
demencial-mente-tonta-mente – se aburren se aburren se aburren
naufragando a cada momento en un mar de dementes aburridos
navegando en los bajeles rutinarios del más tonto aburrimiento
en un mar de aburridos aburrimientos…

Y había que vencer(lo) al Aburrimiento en el mismo huevo a como


fuera lugar
antes que fuera un campesino enorme musculoso aguerrido lleno de
astucias
¡Herakles antes que fuera las Columnas de Hércules!

en Gibraltar o Escila y Caribdis en el Estrecho de Messina


nos llenarían de pavor y harían del barco
miles de fragmentos aburridos flotando sobre el mar…

¡Y no aburrirse durante cinco días y medio y cinco noches!


¡y poder atravesar el Cabo de Nueva Esperanza con la promesa
de poder vencerlo! – ¡cómo no salir corriendo a comprar pasajes!
para esa travesía famosa – Parafraseando a Stevenson:
“un barco es como una isla, una porción de sólido
rodeado de Aburrimiento por todas partes”

¡Qué podía pasar entonces con este mausoleo flotante


prometido a la vida y no a la muerte!
con más de trescientos metros de eslora y unos ochenta
metros de ancho y alto como un edificio de once pisos
que parecía haber tenido a la muerte larvada en su seno
y estar lleno de adormideras rojas y blancas (opio)

Y como yo no era heredero de nada ni de nadie


– y no prometía nada a nadie porque – salvo
algunas palabras sueltas tenía unas letras apenas garrapateadas
yo sólo tenía letras por escribir a mediano y a largo plazo
aún por redactarse… Yo no podía condenar a nadie
a vivir en mi compañía a vivir entre la luz y las
tinieblas / las tinieblas y la luz y las soledades
por muchos años luz…

Y yo debía… ¡Jamás aburrirlos!...


si sucedía ya sabía a qué atenerme…
FIESTAS Y MÁS FIESTAS EN EL BARCO

II
El foyer con su inmensa cúpula de vidrio se iba llenando de gente porque preferían
un lugar caliente a permanecer afuera en la noche cada vez más fría… batas de
dormir… pieles… compones deportivos de cuello alto tipo tortuga… el escenario
ya empezaba a ser incongruente… los paneles de roble cubriendo las paredes…
las relucientes balaustradas… esas dos efigies de bronce en la escalera – el
Honor y la Gloria – coronándola en todo lo alto hacía de todo esto una escena mas
bien rara donde casi nadie parecía realmente saber bien lo que había pasado…

– Parece que hemos perdido una hélice, no importa ahora tenemos más tiempo
para el bridge
– Vamos a divertirnos recogiendo hielo para un highball ¿quien me acompaña? -
El ebbusyman Jonh Point Dextre mostraba a todos orgulloso un trozo de hielo,
diciendo que había toneladas sobre la cubierta F de Tercera, la que se había
vuelto casi una atracción turística
– Me parece que no es nada, mejor regreso a mi cama a dormir.

Tuvieron que disparar balazos de amedrentamiento – las gentes se mesaban los


cabellos se golpeaban se arrebataban los pocos sitios o lugares que había en los
botes – hombres tuvieron que ser desembarcados al ser descubiertos disfrazados
de mujeres y muchos botes partieron semillenos o semivacíos
Un racimo verde y dorado podía ser un bote de mujeres y niños
Un racimo de pasas un bote plagado de viejos

PRIMERA se salvó casi toda / SEGUNDA un poco menos o un poco más de la


mitad… pero TERCERA ay ay ay mujeres y niños muchos murieron…
Y ME ENAMORÉ DE LA MUERTE

¿Es su falda la que he visto,


O es la puerta entreabierta
Entre el árbol y la espuma
La escalera relumbrante
De pescados, que desciende
Hasta el fondo de la tierra?

EIELSON

Y como yo no podía salvar a nadie y nadie acudía a mí


para ser salvado ¿qué podría hacer yo? ¿quién podría ser yo?
– yo un desconocido por mis artes mis ciencias y mis mañas
destrezas habilidades yo un ignorante de tretas y de simulaciones
ardides estratagemas aptitudes congénitas de simulación o de
simulacros los que fueren (uno no tiene habilidades congénitas
sólo disposiciones que se cultiva y se aprenden…)
A mis oídos llegaban los estruendos de LA GRAN FIESTA
una fiesta donde se descorchaban musicalmente botellas
(que pocos años después iban a ser morteros obuses metrallas balas…)

Y LOS BARCOS NUEVOS

Los barcos cuando dejan los astilleros


casi se ríen del mundo entero son como escolares o como
universitarios estrenan nuevos zapatos / el mundo entero
les debe perdonar sus audacias sus jactancias son tan hermosos!
porque después --ojalá sea más tarde que temprano—vendrán
las reverencias las inclinaciones supinas –ojalá que no vengan
/ junto con las genuflexiones
los mares gracias al cielo son tan enormes… que ahí cabemos todos
los tontos como los audaces los atemorizados como los soberbios
los sabiondos como los estúpidos… sobran profundidades…

Y ese nombre tan ostentoso tan emblemático: el Titanic


era el de una sociedad pretendiendo ser titánica
y no por nada menudeaban las libras esterlinas
¡un tesoro de barco! ¡un tesorito! Decía una linda señora
a otra linda señora como quien hablara de un bibelot
bella pasajera en esa quinta noche bella pájara hornera
que había hecho su nido de acurrucamientos en el trasatlántico
mejor acondicionado del mundo para anidar debajo de ese semidiós
musculoso en el tajamar o en el espolón puesto allí icónicamente
se veía a la legua que estaba mostrando cosas que los demás barcos
/ no tenían
¡Un crucero del amor una performance!
¿no era esa la proa de su amor tan buscada?

El Titánic además de transportar títulos nobiliarios allí


concurrían las mejores maestranzas del Reino Unido de las
más afamadas para cosas de mar puestas de consumo para
hacer de ese barco una obra maestra y una ópera Omnia
“el lugar de lugares más paradisíaco del mundo”
un barco dandy un barco petimetre capaz de cobijar
bellezas y perversiones a la vez bajo un mismo techo
en una palabra un palacio flotante sobre un mar proceloso
un palacio con serrallos a la par que Bolsa de N. Y.
un harem afro-californiano bueno para el placer y los negocios…

Si se trazaran líneas paralelas entre los pasajeros con el pasado


el romano Petronio en su cuatrirremo soñaba con sedas de Oriente
– Guggenheim (el minero) en el transatlántico soñaba con los
últimos modelos de máquinas extractoras de minerales
así como John Jacob Astor propietario de una de las mayores cadenas
de tiendas exigía cada vez más bellas y más amables vendedoras-

Los tres iban de la mano con la tradición y el cambio


en continuas modulaciones, el asunto era dar en el bull
(siempre en el bull: ¡elegancia! ¡dinero! ¡sueños!)
y ese barco además era un titán insumergible o indestructible
casi invencible – eso decían los vendedores de
pasajes en las más grandes ciudades…

Y también lo dijo aquella noche del hundimiento un marinero


respondiendo a la hermosa pasajera que le preguntaba algo
toda azorada
– ¡Sí Señora! ¡Ni Dios podrá hundir este barco!
enfatizó a la vez que se iba a poner horas más tarde
verdeamarillo limón después del rojo frambuesa casi
morado cuando lo del Hundimiento

También podría gustarte