Está en la página 1de 28

Del Derecho Civil en General

Introducción

Le damos la bienvenida a la unidad 1, cuyo estudio es esencial para cualquier jurista.

La tradición del derecho mexicano deriva de la familia neorromanista, cuya espina


dorsal es el derecho civil, piedra de toque de todo un sistema jurídico; de ahí que el
estudio de éste sea de toral importancia, idea en la que usted profundizará en esta
unidad y en sus cursos Derecho Romano I y II y Sistemas Jurídicos.
Esta primera unidad tiene como objetivo que estudie la importancia histórica
del derecho civil en general y que reconozca la trascendencia de éste a nivel
nacional e internacional en el siglo XXI, así como su distinción con el concepto de
derecho familiar.

Se comienza con el estudio de nociones preliminares del derecho civil, de su


concepto como rama del derecho privado que se encarga de estudiar a la persona,
sus atributos, la propiedad, la familia, sucesiones y las relaciones entre sujetos
conocidas como obligaciones que no sean de contenido mercantil, agrario o laboral.

Posteriormente, nos adentraremos en la evolución histórica de la disciplina iniciando


desde el derecho romano, con su gran obra jurídica Corpus Iuris Civilis, compendio
magno elaborado por encargo de Justiniano, que trascendió de tal forma que
conformó la tradición jurídica neorromanista, siendo ius commune en Europa hasta
el movimiento codificador, haciendo especial referencia al Código de Napoleón en
Francia, el derecho civil en Italia y Alemania, así como el tratamiento legislativo en
España y por supuesto, la historia del derecho civil mexicano, en el que encontramos
tres códigos a nivel federal: el de 1870, el de 1884 y el de 1928.
(1) Corpus Iuris Civilis

Al conocer la evolución del derecho civil, lo podremos apreciar como una creación
histórica que va de la mano de los intereses de la sociedad en la que nos regimos; el
derecho civil es una realidad latente en la vida diaria, cuando nos casamos, tenemos
hijos o hijas, compramos una casa, firmamos contratos, todo eso forma parte de él.
Es por eso que también se abordarán las distinciones que existen con el derecho de
familia en particular.

Al terminar, podrá responder ¿qué es el derecho civil?, ¿de dónde viene su


importancia?, ¿cómo es actualmente? y ¿es distinto el derecho civil del derecho de
familia?

Objetivo particular

El alumnado estudiará la importancia histórica del Derecho Civil en general y


reconocerá la trascendencia de éste a nivel nacional e internacional en el siglo XXI; y
su distinción con el concepto de Derecho Familiar.

Temario

Unidad 1. Del Derecho Civil en General


• 1.1. Nociones preliminares del derecho civil
• 1.2. Evolución histórica
o 1.2.1. Derecho romano
o 1.2.2. Derecho germánico
o 1.2.3. Derecho español
o 1.2.4. Derecho italiano
o 1.2.5. Derecho francés
o 1.2.6. Derecho mexicano
▪ 1.2.6.1. Época pre-colonial
▪ 1.2.6.2. Época colonial
▪ 1.2.6.3. Época independiente
▪ 1.2.6.4. Época contemporánea
• 1.3. Evolución del concepto de derecho civil, su distinción con el concepto
de derecho familiar

Nociones preliminares del Derecho Civil


Para el estudio de la asignatura es necesario conocer nociones preliminares
de derecho civil, tomando en cuenta su desarrollo histórico y evolución, lo que
obedece a la necesidad de identificar su campo de aplicación y estudio.
El derecho es...

Definamos...
Derecho

“…un conjunto de reglas de conducta exteriores que, consagradas o no


expresamente por la ley en su sentido genérico, aseguran efectivamente en un
medio dado y en una época dada, la realización de la armonía social, sobre el
fundamento, por una parte, de las aspiraciones colectivas o individuales y, por la
otra, de una concepción un tanto precisa de la noción del derecho” (Rojina, 2017:
14).

Por lo anterior, podemos destacar que el derecho influye en nuestras vidas, desde
la concepción e incluso después de la muerte, por lo que es determinante para la
vida del ser humano en sociedad, porque establece los límites de nuestros
derechos y la magnitud de nuestras obligaciones; incluso la regulación que la Ley
da a quienes nacen pero no gozan de plena capacidad, y en el campo jurídico se
les considera a partir del principio de que todas las personas tenemos derechos
por naturaleza humana.

La importancia de conocer de manera amplia los conceptos sobre la persona,


basados en la legislación civil, se debe a que en ésta se forjan las bases para el
resto del sistema legal mexicano; la existencia de la persona y sus atributos son
determinantes para la existencia y validez de sus actos y vida jurídica.

Con base en los contenidos del derecho civil podemos definir a nuestra materia de
estudio; sin embargo, antes de proceder, es pertinente también ubicarlo dentro del
derecho en general. El derecho se divide en tres ramas:

Si no puede visualizar la presentación, descargue el siguiente documento: Ramas


del derecho.

Como podemos observar, definir al derecho civil es muy complejo, pero en un primer
acercamiento, y tomando en cuenta el concepto, podemos decir lo siguiente:
Definamos...
Derecho civil

Es la rama del derecho privado que estudia las normas jurídicas que rigen a la
persona, sus atributos, la familia, los derechos reales, las sucesiones y aquellas
relaciones intersubjetivas, llamadas obligaciones, que no sean de contenido laboral,
mercantil o agrario.

Sin embargo, es importante saber que existen algunos autores que consideran que
el derecho civil no estudia los aspectos familiares, pues separan al derecho familiar
del civil. Esto se estudiará más adelante con mayor detenimiento.

Para saber más...


El Código Civil Federal tiene su origen en 1928, aunque entró en vigor hasta 1932.
En sus inicios fue denominado Código Civil para el Distrito y Territorios Federales en
Materia Común y para toda la República en Materia Federal, sin embargo, en 1974 los
territorios federales de Baja California Sur y Quintana Roo cambiaron su régimen
político para ser estados libres y soberanos, por lo que la denominación del Código
tuvo que cambiar para llamarse Código Civil para el Distrito Federal en materia
común y para la toda la república en materia federal.
“Una cuestión relevante es que en el año 2000 la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, facultó
a la Asamblea del Distrito Federal a legislar en materia civil y penal; y de ahí surgieron dos Códigos Civiles, el
Federal y el del Distrito Federal.

Por ello, actualmente, en nuestro país rige el Código Civil Federal y 32 Códigos Civiles locales, y básicamente las
modificaciones fundamentales se han dado a la materia familiar’’ (Castañeda, 2013: 90).

Evolución histórica

Hasta el movimiento codificador, en Europa no existían leyes nacionales, se utilizaba


como ius commune (derecho común) al derecho romano, al Corpus Iuris Civilis y a
otras codificaciones bárbaras como el Código de Eurico, entre otros, pues las leyes
estaban dispersas; el movimiento codificador deseaba leyes breves, concretas y
racionales. Como parte de la conformación de las naciones en Europa, era necesario
que cada una contara con su propio marco jurídico, lo que permitía la unión de la
nación, además de ser la llave para que el derecho entrara en la modernidad. Sin
duda, el espíritu del Corpus Iuris Civilis vive en el movimiento codificador, de esa
forma trascendió.

A continuación veremos la evolución que ha tenido el derecho civil en distintas


regiones y la transformación que ha sufrido a través del tiempo.

Derecho romano
Es muy interesante analizar la evolución histórica de nuestro derecho civil, pues no
es algo espontáneo, sino que tiene la influencia de grandes pensadores jurídicos,
desde Roma, con Justiniano y Gayo (entre otros); pasando por Francia, con Bigot
Preameneu, Portails y Malleville (redactores del Código de Napoleón); hasta llegar a
las ideas de Savigny en Alemania, que aun cuando no redactó el Código Civil Alemán,
su influencia es notoria en dicho ordenamiento jurídico.
Debemos sentirnos orgullosos de ser un crisol de las ideas jurídicas de tan
destacados juristas. Si queremos entender el espíritu de nuestras leyes, es importante
estudiar su evolución histórica. La historia comienza con el derecho romano, el cual
se divide en cinco períodos.
Como ya dijimos, el derecho civil mexicano parte de la tradición neorromanista, tiene
como espina dorsal al derecho romano, en el que se desarrolló ampliamente; de ahí
la importancia de conocer su evolución histórica. Esto nos permitirá conocer las
tendencias, fuentes y concepciones del derecho romano, así como las diversas
compilaciones que sirvieron de ejemplo. El derecho romano se divide en cinco
periodos: arcaico, preclásico, clásico, posclásico y el de Justiniano. En la presentación
Evolución histórica del derecho civil* se muestran dichos períodos de acuerdo con
las etapas del imperio romano.
*Fíjese muy bien en las fuentes del derecho romano en cada periodo, en los autores
destacados y las obras jurídicas que nacieron en éstas.

Línea del tiempo.

Derecho francés
Es innegable la influencia del derecho civil francés en el orden jurídico de occidente,
y principalmente en el nuestro, sobre todo a partir de la creación del Código Civil de
1804.

Sin embargo, antes de esta obra legislativa, Francia, al igual que Alemania, España e
Italia, sufrió la transformación del derecho civil conforme fue evolucionando como
nación; también adoptó inicialmente al derecho romano, que al fusionarse con el
derecho preexistente del lugar dio origen al derecho galo-románico. También se
adaptó a la forma consuetudinaria de los invasores bárbaros y la regulación romana,
aunque se debe destacar una distinción importante en la evolución del derecho
francés “antiguo”, y es que se decidió llevar a cabo una codificación de las
costumbres y prácticas, lo que creó el sistema de la Personalidad de la Ley, en el cual,
el galo (habitante originario de la región), el romano y el bárbaro, debían vivir cada
uno bajo la Ley que les correspondiera.

Posteriormente, el derecho civil francés también transitó por el sistema de


territorialidad de la Ley, que implicó que cada grupo se regía con las reglas del lugar
en el que habitaba, este sistema dio mucha importancia a las costumbres, con el
enfrentamiento lógico entre el derecho consuetudinario y el escrito, que así como se
vio en otras naciones, la aplicación de uno u otro variaba dependiendo de la zona
geográfica, lo que dio lugar a la creación de las Ordenanzas de 1453, que dispusieron
asentar la redacción de las costumbres, lo que sin duda fue una gran aportación, no
sólo para la aplicación del derecho, sino como un diagnóstico para los juristas y de
publicidad para el pueblo.

Al igual que las naciones europeas continentales que suceden a este apartado, el
derecho civil francés también tuvo influencia del derecho canónico, lo que se observa
en instituciones como el matrimonio, la filiación, los testamentos e incluso los
contratos.
En la época del renacimiento cultural, también se observa el renacimiento en el área
jurídica con el resurgimiento del derecho romano, debido a que la codificación
justinianea era mejor que la que en ese momento se tenía (Código de Teodosio),
sobre todo en materia de contratos y obligaciones. Parte de esa influencia se observa
en la Ordenanza Real sobre el procedimiento civil, sobre el comercio y marina (origen
del código de comercio), sobre donaciones y testamentos. Esta producción de
ordenanzas también obligó a una unificación, que más que compilación fue una
ordenación y agrupación de las materias de derecho privado (Güitrón, 2014: 34-36).

Entre la Revolución Francesa de 1789 y la elaboración del código, hay una etapa
intermedia en la que algunas materias de derecho privado fueron drásticamente
trastornadas por las leyes revolucionarias, que abolieron privilegios de clases, con
implicaciones en la organización de la familia con la institución del divorcio,
participación igualitaria en las sucesiones sin distinción de hijo primigenio o varón,
igualdad de derechos a los descendientes naturales y legítimos, secularización del
registro civil, además de creación de la adopción. En materia de bienes, los cambios
también fueron importantísimos, sobre todo en los inmuebles, se crearon créditos
hipotecarios y las enajenaciones inmobiliarias.

Estas reformas, o movimiento legislativo, tuvieron influencia en la redacción del


código civil, conocido como de Napoleón, quien lo promulgó en 1804, que comenzó
una unidad jurídica en la materia; antes de éste, en Francia regía el derecho
consuetudinario en la zona norte del territorio; el derecho romano en el sur, y en
todo el territorio, órdenes reales. Pero además de lograr la unificación legislativa,
tuvo la finalidad de plasmar en una codificación los resultados políticos de la
Revolución Francesa, lo que definitivamente es un gran logro, porque a partir de este
movimiento histórico, cambia la concepción que se tenía de las cosas y de las
personas. Este código es el reflejo de la realidad social y responde a las necesidades
que en esta materia se tenían en ese momento (Alessandri, 1998: 100-101).

(3) Código Civil de 1804

El Código de Napoleón retoma las ideas de los jurisconsultos franceses Domat y


Pottier, está inspirado en las ideas del individualismo (“la máxima libertad a los
particulares, el Estado está para servir a éstos”). Tiene un lenguaje sencillo porque se
dirigía al pueblo, y se basó en el Corpus Iuris Civilis.
Regresando al tema de la ordenación sistemática del derecho, a la que nos
referiremos en el apartado del derecho civil alemán y a la importancia del postulado
de Savigny, se debe hacer la mención de que el derecho civil francés hizo también la
propuesta de un orden sistemático. Este plan es conocido como Plan Gayo o
Romano-Francés porque fue el jurisconsulto romano Gaius quien planteó esta
ordenación y la comisión redactora del Código Civil Francés en 1804 fue la que
adoptó este sistema. Este plan fue el primero que surgió, incluso mucho antes que
la propuesta de Savigny (Domínguez, 2010: 41).

El Plan Gayo proponía tres apartados en los que se dividía el derecho civil:

I: De las personas, que incluye la regulación de la familia;


II: De las cosas, que comprende el derecho patrimonial, de los bienes y las
obligaciones;
III. De las acciones, el que debemos entenderlo desde la perspectiva romana y se
refiere a “la defensa de iniciativa privada, denominados ahora derechos subjetivos”
(Domínguez, 2010: 41).

Como mencionamos, el Código de 1804 adoptó este plan, con algunas variantes, lo
que agrega la aportación francesa al plan romano. Una de las modificaciones fue la
sustitución del apartado de las acciones por el de los modos de adquirir la propiedad,
lo que es perfectamente entendible si vemos el contexto que ya señalamos en
relación a las ideas surgidas de la Revolución Francesa.

El Código Civil Francés de 1804 se conformó por un título preliminar destinado a la


teoría de la ley y tres libros: el primero es el relativo a las personas, el segundo a los
bienes, y el tercero a los medios para adquirir la propiedad.
El Código Civil Mexicano está basado en este plan, con las variaciones respectivas.

Derecho germánico
La evolución histórica del derecho civil germánico es tan compleja como la
conformación geopolítica que ha tenido esa región, el territorio y la nación han
estado en constante transformación por las consecuencias bélicas, monárquicas y de
linajes, por lo que no había un derecho unitario.

El derecho privado alemán tiene sus orígenes en el derecho consuetudinario, el cual


se convirtió en un derecho campesino que atendió a las necesidades de organizar
una sociedad renovada, carece de una elaboración científica por no haber sido
creado por una clase especializada, pero su flexibilidad y maleabilidad permitió la
influencia del catolicismo. Por otro lado, el derecho germánico está muy vinculado
al territorio y al pueblo que lo habita, por eso sus reglas jurídicas pueden ser
consideradas como los derechos territoriales de las regiones y el origen del derecho
nacional, para posteriormente generar la imperiosa necesidad de una unificación

El derecho germánico tiene una gran influencia del derecho romano, ya que sólo con
la recepción de éste se logró la unificación jurídica que era tan necesaria. Con la
adopción del derecho romano se crearon instituciones jurídicas propias, inspiradas
en éste, como el caso de los principios fundamentales de
la personalidad, territorialidad y las servidumbres.

El derecho romano germánico se fue dirigiendo nuevamente hacia el derecho


consuetudinario a través de la jurisprudencia y la escasa legislación en materia de
derecho privado, subsistiendo los derechos particulares sobre el derecho romano.

En el siglo XIX encontramos nuevamente dividida la regulación alemana en cuatro


grandes sectores, principalmente de orden territorial, lo que genera nuevamente la
necesidad de crear una legislación para unificar el Estado alemán; y es
hasta 1814 que se crea la comisión para elaborar un plan y sugerir un método para
la creación del Código Civil Alemán. La situación que prevalecía ante la resistencia
de Prusia y Austria para renunciar a sus propios códigos y a la falta de un lenguaje
jurídico utilizable, fueron factores que dificultaron la elaboración del este Código.

Dicha comisión tenía “el encargo de investigar la oportunidad, la realidad y


congruencia intrínseca del Derecho Privado vigente en Alemania; examinar la
justificación de las divergencias, sobre todo las más grandes legislaciones, con
relación a la base romano-germánica; intentar una armonización en lo que sea
posible y de ese modo componer un proyecto coherente y a tono con las exigencias
de la ciencia moderna”* (Güitrón, 2014: 18-19).

*Nótese los principios, fines y valores que debe recoger cualquier legislación que
pretenda satisfacer las necesidades de la población en un momento determinado.

Finalmente y después de variadas discusiones, proyectos y comisiones, se sanciona


el Código Civil Alemán, en 1896 y entra en vigor en el año 1900 (Güitrón, 2014: 13-
15, 18-19, 22).
(4) Anuncio del Código Civil Alemán en la Gaceta de Leyes del Reich en 1896

Se considera que este código surge de la escuela pandectista y tiene un lenguaje


más técnico y más pulido que el Código de Napoleón. Su influencia llegó a España,
Austria y Japón. Sirvió como base al Código de China en su codificación
precomunista. Su didáctica y metodología, es decir, su técnica, son más sofisticadas.

El Código Civil Alemán adoptó el modelo conocido como Plan Savigny, propuesto
por el jurista Karl Von Savigny; también se le denomina Plan Moderno por ser
posterior al plan Gayo o romano-francés. Lo relevante y destacable de este Código,
es precisamente la aportación que realiza para ordenar y sistematizar el derecho civil.

En la siguiente unidad analizaremos con detenimiento el concepto e importancia de


la sistematización de cualquier disciplina, pero es aún más relevante y trascendente
en esta materia, ya que indica la forma de abordarlo, “la secuencia ordenada en la
exposición y un planteamiento congruente con los temas y figuras” (Domínguez,
2010: 38).

El Plan Savigny propone la siguiente ordenación, que se traduce en los cinco libros
que lo componen (Domínguez, 2010: 43):

Parte General, en la que se analizan los elementos comunes a cualquier situación


jurídica, como son los sujetos, su capacidad, el origen y extinción de las relaciones
jurídicas y las garantías.

Derecho de las Obligaciones.

Derecho de las Cosas.

Derecho de la Familia.

Derecho Sucesorio.
Derecho español
El derecho civil español es el resultado de la mezcla del romano y germánico; la
influencia del derecho romano se transformó en el principio de supremacía del bien
común y, del germánico, encontramos que el individualismo se convirtió en el
respeto a la persona. Estos principios, conjugados con la idea católica, dan vida y
unidad al derecho español.

Es indispensable destacar el Fuero Juzgo (publicado posiblemente en el año 654 de


nuestra era) en la evolución histórica del derecho civil español, porque fue el primer
gran texto legal que contiene (Güitrón, 2014: 22-23):

La subordinación del derecho creado por el hombre a la justicia divina;


La unidad orgánica de todo el derecho bajo los principios de comunidad y
personalidad;
El respeto a la personalidad humana, dándole valor primario a la honra y dignidad;
y
La organización de la familia en una estricta unidad jerárquica, sin desaparecer la
personalidad de la mujer y de los hijos, privilegiando los dictados de la moral sobre
la conveniencia del tráfico.

Posteriormente encontramos otros ordenamientos importantes en la evolución del


Derecho Civil Español, pero entre éstos destacan ampliamente las Siete Partidas,
cuya elaboración inició el Rey San Fernando y concluyó el Rey Alfonso X “El Sabio”.
Las Siete Partidas se consideran el tratado más completo de jurisprudencia que no
se había visto antes; menciona Piug (Güitrón, 2014: 24), como un “monumento de la
ciencia y literatura que se adelantó en muchas cosas a su siglo”. Efectivamente, la
importancia de la Siete Partidas la encontramos en todo el espectro jurídico y es
motivo de estudio obligado por los jurisconsultos españoles.

Las Siete Partidas tienen gran influencia del derecho romano, principalmente en lo
referente al tráfico de bienes, suprimen el formalismo en la stipulatio, reconocen el
valor moral que tenía la palabra y reducen las solemnidades del testamento, al que
independiza de la institución de la persona heredera (Güitrón, 2014: 25).

Otro ordenamiento importante de gran influencia en la formación del derecho civil


español lo encontramos en las Leyes de Toro, que de acuerdo con Castro y Bravo
(Güitrón, 2014: 25), surgen para “resolver algunas dudas sobre la interpretación de
las disposiciones vigentes” en aquél entonces. Se considera que lograron dar un
verdadero valor al derecho patrio español, independencia y unidad al derecho real,
en estas Leyes de Toro se regulan y completan las Siete Partidas, además le dan
vigencia general a instituciones españolas como la sociedad de gananciales,
mantienen el respeto a la personalidad, incluso dentro de la familia para los
descendientes y la mujer, mientras que se le da la máxima solemnidad al matrimonio
y procura asegurar la estabilidad económica a las familias, al regular los privilegios
de la mujer en los bienes familiares, explica Castro y Bravo (Güitrón, 2014: 27).

En el siglo XVI encontramos también al derecho real, en el que “toda referencia de


Derecho será al Derecho que emana de la boca del Rey”, de acuerdo con Castro y
Bravo (Güitrón, 2014: 26). Esta situación provocó la necesidad de realizar una Nueva
Recopilación, ya que estas disposiciones se suman a las que ya hicimos referencia y
a algunas otras que surgieron. Esta recopilación recoge lo más característico:
contiene actos de Cortes, disposiciones singulares y difíciles de encontrar; las Leyes
de Toro se recogen íntegramente y se reproducen algunas de las disposiciones más
importantes del Fuero Real y del Ordenamiento de Alcalá; se le da más valor al Fuero
Juzgo al recopilar algunas de sus disposiciones y se confirma la vigencia general y
supletoria de Las Partidas, como explica Castro y Bravo (Güitrón, 2014: 26). Sin duda
un documento muy importante para la aplicación del derecho en su época.

En el siglo XVIII se da la conversión del derecho real castellano en derecho común


de España, ya que Felipe V y sus sucesores desterraron al derecho romano como
fuente jurídica y lo sustituyeron por el primero, que en materia civil, se remite a la
Nueva Recopilación, según Castro y Bravo (Güitrón, 2014: 27-28).

En 1811, en las cortes de Cádiz se aprueba un primer intento codificador en materia


civil, sin embargo, debido a su tardanza se optó por establecer leyes especiales, en
lugar de asentar las ideas en el código que se estaba elaborando.

El proyecto de Código Civil de 1851 (mejor conocido como García Goyena por el
nombre de su expositor), “tomó en cuenta las codificaciones de la época, sin
descuidar sus propios antecedentes patrios, pero de modo fundamental se inspiró
directa o indirectamente también en el Código Francés” (Macedo, 1972: 21). Este
proyecto no se concretó.

El Código Civil de España se promulgó hasta 1889, el cual inició un año antes con
una serie de debates y oposiciones al texto de Manuel Alonso Martínez, quien inició
la redacción del mismo. Aunque en la actualidad sigue vigente tras muchas
modificaciones, en su momento fue considerado como un código civil tardío, por los
diversos problemas de carácter económico, político, social, religioso y geográfico
que imperaban en la península en ese momento histórico.

(5) Código Civil Español

Derecho italiano
“El Derecho Privado Italiano propiamente está integrado con el Derecho Romano, el
canónico, el germánico y ‘el Derecho Común’ en sentido estricto” (Güitrón, 2014: 28).

La influencia del derecho romano es una herencia obvia por la situación territorial,
pero la influencia del cristianismo es la que marca la separación entre el derecho
romano y el italiano propiamente. El origen de derecho civil italiano está en el Corpus
Iuris Civilis, posteriormente la intervención religiosa se aprecia en la separación del
derecho romano, en el tratamiento que se le da al respeto a la personalidad, la
relevancia a la voluntad y en el derecho de familia.

La influencia del derecho germánico se entiende por las invasiones bárbaras que se
presentaron en el territorio, que a pesar que se consideraban pueblos “bárbaros”,
contaban con sus propias normas jurídicas que imponían a los pueblos sometidos y
parte de esta influencia la encontramos en instituciones de derecho civil, como el
caso de las relaciones patrimoniales entre los cónyuges, la copropiedad y las
sucesiones.

La influencia canónica también es lógica, al ser Roma sede de la iglesia católica, en


la que convivió el Corpus Juris Civilis y el Corpus Juris Canonici. La aportación
del derecho canónico al derecho italiano y de influencia latina en general, es
innegable en varias instituciones del derecho civil y familiar, como lo es el
matrimonio, la buena fe en los contratos, la observancia de las obligaciones, entre
otras.

En la evolución del derecho encontramos que la aplicación del derecho romano,


canónico y germánico constituye el conjunto de normas que se aplicó en gran parte
de Europa, con algunas modificaciones locales. El Corpus Juris le dio al derecho civil
la verdadera importancia y jerarquía (Güitrón, 2014: 29-32).

Finalmente, debido a que la unificación política de la península se llevó a cabo


en 1861, se considera que la vida del sistema jurídico italiano es corta. De entre las
características que tuvo el sistema jurídico que se estableció en ese entonces
destacan las siguientes:

1. La Constitución de 1848 del reino de Cerdeña (Cerdeña y Piamonte) fue la que


rigió en todo el reino de Italia y en 1865 se aprobó un código civil, uno comercial y
una decena de leyes administrativas (Cassese, 2003: 406).

2. En el año 1924 se formó la comisión codificadora encargada de preparar un nuevo


código civil para reemplazar al de 1865. El Código Civil Italiano actual, además
también “tiene como modelo al Código de Napoleón, mantiene el criterio francés
del efecto real de los contratos” (Alessandri, 1998: 102-103.

3. Una característica del Código Civil Italiano es que contiene las disposiciones de
materia comercial, concentrando en este código la regulación de ambas materias
(Alessandri: 1998: 102-103).

En resumen:

Mapa
Derecho mexicano

➢ Época Pre-Colonial

Al referirnos a esta época es importante mencionar al derecho prehispánico de


culturas como la olmeca, maya y azteca.

Pulse en las áreas que se marcan como sensibles para visualizar la información.

Cultura Olmeca
Sobre esta cultura “no se encuentran reglas del Derecho Civil documentadas, pero
seguramente, prevalecieron las normas internas para dirimir controversias.
Aparentemente, contaban con una valiosa organización teocrática, de la cual
emergieron las relaciones entre los miembros de dicha cultura’’ (Castañeda, 2013:
18).

Cultura Maya
En esta cultura encontramos que “infinidad de documentos mayas precortesianos
fueron destruidos por el celo religioso” (Castañeda, 2013: 18); sin embargo, se sabe
que la prohibición de las hijas a heredar no era absoluta, ya que existían ciertas reglas
para que pudieran acceder a parte de la herencia por vía de la piedad o voluntad
(Güitrón, 2014: 50).

Cultura Azteca
Con relación a los aztecas, el derecho “se manifestó en costumbres, a menudo
íntimamente ligadas a la religión, eran conocidas por todos, y no había necesidad de
ponerlas por escrito. Sin embargo la inclinación natural de la gran masa indígena
ante el poder de los miembros de la élite (el rey, los nobles y en menor medida los
sacerdotes y comerciantes) creó incertidumbre” (Castañeda, 2013: 20).

La cultura en el Valle de Anáhuac tuvo como fuentes del derecho la costumbre y las
sentencias, tanto del rey como de los jueces; reguló varias figuras jurídicas, como las
distintas condiciones de las personas, la organización familiar, la patria potestad, el
matrimonio e incluso el divorcio, las sucesiones, diferentes tipos de propiedad, así
como los contratos y obligaciones (Galindo, 2014: 99-101).

➢ Época colonial

Como consecuencia de la conquista se produce el encuentro de dos formas de


pensamiento: una civilización con predominio azteca en su aspecto jurídico, y una
hispánica, que como se estudió en el apartado referente al derecho español, contaba
con un sistema jurídico integrador del derecho romano, germánico, canónico, así
como de reglamentación monárquica. Se utiliza de manera relativamente voluntaria
el orden jurídico español, por lo que de inicio no existieron disposiciones que fueran
específicas para la idiosincrasia mexicana (Castañeda, 2013: 20, 26-27).

Al momento del descubrimiento de América, como ya se mencionó, se aplica la


legislación española, por lo que en primer lugar encontramos las Leyes de Toro, la
Nueva y Novísima Recopilación y supletoriamente el Ordenamiento de Alcalá, las
Siete Partidas, el Fuero Real y el Fuero Juzgo (Galindo, 2014: 105).

“La mecánica por la cual se pretendió justificar la colonización, fue la evangelización


de nuestros indígenas, y poco a poco se crearon los Virreinatos a modo,
dependientes de la Corona española, y esto nos llevó a recibir además de sus
costumbres su legislación’’ (Castañeda, 2013: 32). En una primera instancia se
comienza a aplicar esta regulación y durante la conquista Cortés se ve en la
necesidad de dictar normas específicas para el territorio.

Entre la conquista y colonización las cuestiones legales se resolvían de manera


casuística, ya que la forma de vida del pueblo conquistado no siempre estaba
prevista en los ordenamientos españoles. Esto obligó al monarca a dictar nuevas
reglas específicas para el territorio, que en ocasiones no resolvían el conflicto
planteado, lo que motivó a que las autoridades residentes en “las Indias”, fueran
dictando normas de diversos géneros, lo que después de medio siglo se convirtió en
un caos, y por tanto, provocó la necesidad de recopilarlas y ponerlas en orden. Este
conjunto de normas dictadas por las autoridades españolas, metropolitanas o
funcionarios en los territorios conquistados para aplicarlos en esos espacios
geográficos reciben el nombre de derecho indiano, que al armonizarse con las
normas indígenas, da lugar a la Recopilación de Leyes de las Indias.

(6) Recopilación de Leyes de las Indias

Así encontramos que durante la Colonia tuvieron aplicación en nuestro territorio


diferentes normas:
a) Un derecho indiano peninsular y un derecho indiano criollo, en su caso,
adicionados con las costumbres internas.

b) El derecho castellano, adicionado con las costumbres que en nuestro territorio se


generaron respecto de su aplicación a casos concretos.

c) El derecho canónico positivo en su versión hispánica.

d) El derecho común (ius comune), integrado, por una parte, por la dogmática que se
generó con la literatura creada a fines del siglo XI, respecto del Corpus Iuris Civilis,
y por otra, la doctrina surgida en torno a dicha compilación. Con el derecho común
se logró la unificación en Europa.

e) Las costumbres jurídicas prehispánicas que por determinaciones monárquicas


siguieron en vigor en las comunidades indígenas (Castañeda, 2013: 40-41).

dependiendo el tipo de persona a la que aplicaba, la situación que regulaba, el lugar


o autoridad que las expedía.

Por supuesto, la evolución del derecho español continúa durante la Colonia. Así
surgen las disposiciones a que se ha hecho referencia constantemente en esta
unidad, como las recopilaciones (La Nueva Recopilación de 1567 y la Novísima
Recopilación de 1798, vigente a partir de 1805), además de la legislación dictada
específicamente para aplicarse en la Nueva España (Castañeda, 2013: 33, 36).

➢ Época independiente

“Los integrantes de la sociedad novohispana a fines de la Colonia, ahora integraban


la nación independiente. A falta de una nueva legislación, sus relaciones civiles
continuaron regidas con base en las normas aplicables a la colonia, a excepción de
las contrarias al nuevo estado de las cosas. La abolición del sistema jurídico hasta
esa época aplicable, hubiera provocado la anarquía, por ello el cambio y la
adaptación se fue dando paulatinamente” (Castañeda, 2013: 65).

➢ Época contemporánea

Una vez consumada la Independencia, la legislación civil en México da inicio con la


promulgación de los primeros códigos civiles. “La codificación significó la creación
de una igualdad formal de la sociedad, sin poder borrar una desigualdad material
existente” (Cruz, 2012: 2).
1. En materia civil, los intentos legislativos de las naciones, conforme se fueron
independizando de la Corona Española, utilizaron el modelo del Código Civil
francés, como se aprecia en el de Oaxaca de 1827-1828. Los proyectos de
código civil que se realizaron en el México independiente siguieron la suerte
de los sistemas políticos que imperaron en el país durante el siglo XIX, así
vemos que el cambio de régimen federal a central o viceversa, así como el
establecimiento del segundo imperio de Maximiliano, afectó a los proyectos
que se estaban realizando, por lo que no se logró una consolidación
legislativa sólida que diera como resultado un código civil.

El impulso legislativo en materia civil inició en 1822, sin que pudiera


prosperar; de hecho, durante la Primera República Federal, en el Distrito
Federal no se llevaron a cabo trabajos de codificación civil. Además, la idea
del federalismo que privaba en el Constituyente tuvo como consecuencia que
el Congreso General careciera de facultades para emitir códigos que valieran
en toda la República, pues dicha facultad se reservaba a los estados.

2. En el sistema federal, Oaxaca fue el primer estado en promulgar su código


civil, esto fue entre 1827 y 1829, ya que los libros se publicaron por separado
en diferentes momentos durante ese lapso de tiempo. Estuvo vigente hasta
que cambió el régimen al sistema centralista (Cruz, 2012: 2).

El Código Civil de Oaxaca es de gran importancia debido a que no sólo fue el


primero en realizarse en México, sino también en Iberoamérica, además se
basó en el Código Civil francés (Castañeda, 2013: 46).

A este esfuerzo le siguieron los proyectos de Zacatecas y Jalisco, que no


prosperaron.

3. A pesar de los intentos codificadores, durante el régimen del sistema


centralista de 1835-1846 no se pudo concretar ningún proyecto, aun cuando
se realizaron varios intentos, “La carencia de códigos nacionales motivó que
diversos juristas elaboraran compilaciones de carácter privado para facilitar la
enseñanza y aplicación del derecho. Destacó la obra de Vicente González de
Castro […], así como las Pandectas hispano-mejicanas” (Cruz, 2012: 6). La
iniciativa compiladora de los juristas demostró la necesidad de contar con un
cuerpo legislativo en la materia, lo que sirvió de apoyo a la propuesta del
ministro de justicia Don Mariano Riva Palacio, para llevar a cabo un
concurso en el que se recibieran las sugerencias, opiniones y
recomendaciones, producto del talento jurídico nacional e internacional, con
lo que no se estaría sujeto únicamente a lo que emitiera una comisión
redactora, sino que se contaría con una variedad más amplia de proyectos de
código civil, entre los que se pudiera seleccionar el más conveniente.

4. En 1847, con el retorno de la vigencia del sistema federal, se regresó a los


estados la facultad de legislar en la materia, situación que fue aprovechada
por el entonces gobernador de Oaxaca, Don Benito Juárez, quien puso
nuevamente en vigor el Código Civil de ese estado, promulgado
entre 1827 y 1828. Posteriormente el Congreso de ese estado aprobó una
propuesta de código civil, el cual no entró en vigor, porque la ascensión al
poder de Antonio López de Santa Anna, en 1853, suprimió nuevamente el
sistema federal y emitió un decreto para anular la aprobación de ese código
por parte del Congreso oaxaqueño (Cruz, 2012).

5. Si bien la convulsa situación política de la reciente nación mexicana impidió


expedir un código civil, se debe hacer mención de los acontecimientos que
sucedieron con la promulgación de la Constitución Federal de los Estados
Unidos Mexicanos de 1857, la cual retoma el sistema federal, pero el
gobierno tuvo varias dificultades internas para ejercer el poder, sin considerar
las intervenciones extranjeras. En este contexto, don Benito Juárez, como
presidente de la república, durante su estancia en Veracruz encargó al
maestro don Justo Sierra la elaboración de un proyecto de código civil.

El trabajo de Justo Sierra quedó olvidado por un tiempo, hasta que el


Ministerio de Justicia distribuyó ejemplares de ese proyecto entre tribunales
y abogados de la república para su estudio.

6. A pesar de que no se concretó el proyecto que estaba realizando Justo Sierra,


es importante destacar un evento legislativo de suma importancia para
nuestra materia en la década de los cincuenta, ya que tuvo una enorme
trascendencia, nos referimos a lo que conocemos como las Leyes de
Reforma, que fueron promulgadas entre 1859 y 1863 y entre éstas, destacan
en esta materia las referentes a la institución del matrimonio civil y del
Registro Civil (Güitrón, 2014: 121-128).

Entre tanto, en 1862 el Ministerio de Justicia integró una comisión formada


por Sebastián Lerdo de Tejada, Fernando Ramírez, José M.
Lacunza, Pedro Escudero y Echánove y Luis Méndez, para que procedieran
a revisar el proyecto de Justo Sierra, lo que se realizó entre febrero de 1862 y
mayo de 1863. Este proyecto nunca tuvo vigencia, pero fue una obra valiosa,
retomada posteriormente para dar cuerpo a nuestra legislación civil.
“Finalmente, el presidente Juárez nombró a Mariano Yáñez, José María
Lafragua, Isidro Montiel y Duarte y Rafael Dondé, para integrar la comisión
que en definitiva revisara los trabajos anteriores’’ (Castañeda, 2013: 51),
“quienes finalizaron el libro y lo redactaron aprovechando el trabajo de Justo
Sierra y el Código Civil del Imperio Mexicano. Así nació el proyecto definitivo
del Código Civil de 1870, que fue aprobado por el Congreso de la Unión el 8
de diciembre de ese año, y que inició su vigencia a partir del día 1 de marzo
de 1871 en el Distrito Federal y territorio de Baja California” (Cruz: 2012: 11).

Trece años tuvo vigencia el Código Civil de 1870, y en junio de 1882 el


presidente Manuel González encargó a una comisión compuesta por los
licenciados Eduardo Ruiz, Pedro Collantes y Miguel S. Macedo, la revisión del
Código Civil de 1870.

De esta revisión se aprobó un nuevo código civil promulgado en 1884, el cual


tuvo pocas modificaciones con relación al anterior. De este código destaca la
libertad testamentaria y la introducción del divorcio por mutuo
consentimiento, sin disolución del vínculo (Castañeda, 2013: 52).

7. Posteriormente, durante el movimiento revolucionario de 1910, que provocó


un nuevo orden constitucional, el derecho civil tuvo importantes
modificaciones. En plenas gestas revolucionarias se promulgó la Ley del
Divorcio de 1914, que autorizaba el divorcio desvinculatorio, y en abril
de 1917 la Ley de Relaciones Familiares, que sustituyó todo el libro de
derecho de familia del Código Civil de 1884. Estas importantes disposiciones,
así como las nuevas ideologías y principios de la nueva Constitución
Política de 1917 hicieron necesaria la revisión del Código Civil (Cruz, 2012).

8. Es así que en 1928 se promulgó el Código Civil para el Distrito y Territorios


Federales en Materia Común y para toda la República en Materia Federal,
mismo que entró en vigor en 1932. Esta legislación es la más importante de
la época en materia civil. La nueva versión de las normas de carácter civil
presenta grandes transformaciones en relación con sus códigos antecesores.

El Código Civil de 1928 fue elaborado por una comisión presidida por Francisco H. Ruiz, su
impresionante exposición de motivos es totalmente revolucionaria y socializante, pretendía
cambiar la visión de las anteriores legislaciones; recoge concepciones muy avanzadas, responde
a algunos problemas sociales, hasta esa época, considerados "tabú", verbigracia el concubinato,
la igualdad entre el hombre y la mujer, entre el patrón y el trabajador; en una palabra, tratar igual
a los desiguales (Castañeda, 2013: 71).
En este código, el pensamiento capital del proyecto se expresa en los siguientes
aspectos:

➢ “Armonizar los intereses individuales con los sociales, corrigiendo el exceso


de individualismo que impera en el Código Civil de 1884” (Castañeda, 2013:
81).

➢ Este Código Civil es el vigente al 2019 en materia federal, el cual cambió su


denominación en 1974 para llamarse Código Civil para el Distrito Federal
en Materia Común y para Toda la República en Materia Federal, debido al
cambio de régimen de los entonces territorios federales de Baja California
Sur y Quintana Roo, al convertirse en estados libres y soberanos.

➢ En el año 2000 la CPEUM facultó a la Asamblea del entonces Distrito Federal


a legislar en materia civil y penal, y de ahí surgieron dos códigos civiles,
el Federal y el del Distrito Federal. Por ello, actualmente en nuestro país
rigen el Código Civil Federal y 32 códigos civiles locales, y básicamente las
modificaciones que se han dado en el de la ahora Ciudad de México, han
sido en la materia familiar (Castañeda, 2013: 90).

Evolución del concepto de derecho civil, su distinción con el concepto


de derecho familiar
Para hablar de la evolución del concepto de derecho civil es necesario remontarnos
nuevamente al derecho romano, en el que existía una distinción muy marcada entre
el ius publicum y ius privatum (que a su vez se conformaba por el ius naturale, ius
gentium y ius civile). Algunos jurisconsultos se dedicaron a establecer un concepto
de derecho civil, y entendían por ius civile “las instituciones propias de los
ciudadanos romanos, de las cuales no participan los extranjeros: jus proprium civium
romanorum” (Güitrón, 2014: 2).

Agustín Bravo González (Güitrón, 2014: 2) relaciona el derecho civil con el derecho
romano en la siguiente definición:

Definamos...
Derecho civil

"[…]es el conjunto de principios de derecho que han regido la sociedad romana en


las distintas épocas de su existencia, desde su origen hasta la muerte de Justiniano".
Definamos...
Derecho civil

"[…]la rama del derecho privado que tiene


Ya en nuestra era, el
por objeto regular los atributos de las
maestro Rojina Villegas (Güitrón,
personas físicas y morales y organizar
2014: 4) opina que el derecho civil
jurídicamente a la familia y al patrimonio,
es...
determinando el orden económico entre los
particulares, que no tengan contenido
mercantil, agrario u obrero".

Definamos...
Derecho civil
Como parte de la evolución del
"Derecho privado general que tiene por
derecho civil encontramos la
objeto la regulación de la persona en su
definición que en su momento
estructura orgánica, en los derechos que le
hizo Julien Bonnecase (Güitrón,
corresponden como tal, y en las relaciones
2014: 17):
derivadas de su integración en la familia, y
de ser sujeto de un patrimonio dentro de la
comunidad".
Como podemos observar, muchas de estas definiciones consideran los aspectos
familiares como una parte del derecho civil, sin embargo, ha surgido una nueva
tendencia que separa la materia familiar de esta rama del derecho privado; un
ejemplo de ello es el criterio del maestro Julián Güitrón Fuentevilla, pues asegura
que “esto ha evolucionado y aun cuando en la actualidad [2014] muchos juristas
siguen el camino tradicional, nosotros sostenemos otra metodología para estudiar
el Derecho Civil y el Derecho Familiar, congruente con las nuevas formas de vida y,
sobre todo, siguiendo algunos lineamientos lógicos, los cuales nos permitirán sin
duda, estudiar con un sistema práctico, eficaz y mejor, las materias de derecho civil,
independizadas de las del familiar’’ (Güitrón, 2014: 17).

Es por lo anterior que, con la finalidad de lograr la distinción entre el derecho civil y
el familiar, es importante mencionar el concepto de derecho familiar considerado
por Julián Bonnecase (Rojina, 2014: 8), como el...

Definamos...
Derecho familiar

“[…] conjunto de reglas de derecho, de orden personal y patrimonial, cuyo objeto


principal, accesorio o indirecto es presidir la organización, vida y disolución de la
familia”.
Definamos...
Derecho familiar
Otra definición de derecho
familiar es proporcionada
“El conjunto de normas jurídicas que
por Julián Güitrón
regulan la vida entre los miembros de una
Fuentevilla (2018: 608), quien
familia, sus relaciones internas, así como
menciona que es...
las externas, respecto a la sociedad, otras
familias y el propio Estado".

Una vez que conocemos ambos conceptos, es necesario puntualizar en dónde


radican las diferencias, para desligar el derecho civil del familiar. Nicolás S. Otto, en
relación al derecho civil, afirma que éste regula las relaciones de carácter privado
que sostienen entre sí las personas de un determinado lugar, tomándolas en
consideración individualmente o aquellas físicas como jurídicas, y el
término lugar comprende a toda agrupación de personas que tengan un vínculo
nacional o étnico, como derecho propio; todo esto debe estar orientado a la
realización de los fines particulares de las personas, porque una de las funciones
primordiales del derecho civil es la regulación de las relaciones derivadas de los
intereses particulares que los individuos sostienen entre sí; sin embargo, el derecho
civil cuida que estos fines particulares se encuentren dentro del fin del Estado, y que
el conjunto armónico de todos ellos sea el fin de la sociedad (Güitrón, 1979).

Es decir, la principal diferencia entre el derecho civil y el derecho familiar se puede


encontrar en su objeto, pues como ya se mencionó, el primero se enfoca en los fines
particulares y relaciones privadas de las personas, mientras que el segundo se rige
por el orden público y el interés social, ya que como argumenta Güitrón
Fuentevilla (1979), “el Derecho Familiar, que no es público ni privado, es un tercer
género, delimita la organización de la familia frente al Estado y el propio individuo.
Tiene principios propios y por ello garantiza la protección de la familia frente al
Estado, impidiendo la intervención de éste en el núcleo familiar”.

Reflexión...
Observe el siguiente video que le permitirá conocer los argumentos que sostienen
la autonomía del derecho familiar, así como los que indican en qué rama del
derecho se debe ubicar.

¿Pertenece el Derecho Familiar al Civil; Privado; Social; Público o es un género


distinto?
Para saber más...
Para profundizar en los temas de esta unidad, puede revisar estos materiales de
acceso libre.

¿Qué otros caminos puedo explorar?

Para consolidar su aprendizaje respecto de los contenidos de esta unidad le


sugerimos que procure vincular lo aprendido con las temáticas de otras asignaturas,
en especial con Historia Universal y de México, de nivel medio superior.

Fuentes de consulta

Bibliografía

• Floris Margadant, Guillermo, El derecho privado romano, México, Esfinge, 2005.


• Rico Álvarez, Fausto et al., Introducción al estudio del derecho civil y personas,
México, Porrúa, 2009.
• Von Savigny, Friedrich Karl, De la vocación de nuestro siglo para la legislación
y para la ciencia del derecho, España, Granada, 2008.
• Alessandri R., Arturo y Somarriga U., Manuel et. al., Tratado de derecho civil,
partes preliminar y general, Colombia, Jurídica de Chile, 1998, t. II.
• Bonnecase, Julien, Introducción al estudio del derecho, París, 1931.
• Castañeda Rivas, María Leoba, El derecho civil en México, dos siglos de Historia.
Desde la formación de las instituciones hasta la socialización de la norma
jurídica, México, Porrúa, 2013.
• Domínguez y Martínez, Jorge Alfredo, Derecho civil, parte general, personas,
cosas, negocio jurídico e invalidez, México, Porrúa, 2010.
• Galindo Garfias, Ignacio, Derecho civil, primer curso, parte general, personas,
familia, 28.a ed., México, Porrúa, 2014.
• Güitrón Fuentevilla, Julián, “Introducción al Estudio del Derecho Familiar”,
en Enciclopedia Jurídica de la Facultad de Derecho UNAM, Derecho civil II,
Porrúa, 2018, t. VII.
• ____________, Tratado de derecho civil, diversos conceptos de derecho civil y
derecho familiar, y la nueva sistemática para su enseñanza y aprendizaje,
México, Porrúa, 2014, t. II.
• ____________, Tratado de derecho civil, Historia del derecho civil en general,
México, Porrúa, 2014, t. I.
• Rojina Villegas, Rafael, Derecho civil mexicano, derecho de familia, 102.a ed.,
México, Porrúa, 2014, t. II.
• ____________, Derecho civil mexicano, 16.a ed., México, Porrúa, 2017, t. I.

Bibliografía en proceso de elaboración, revisión e impresión

• San Vicente Parada, Aida del Carmen, Manual de acto jurídico y personas
(Derecho civil I), México.

Legislación

• Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión, Código Civil Federal,


última reforma publicada en el DOF 31/10/2017, disponible
en http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/ref/ccf.htm, consulta:
10/11/2017.

Tesis de grado

• San Vicente Parada, Aída del Carmen, La proyección filosófico-jurídica de la


autonomía en la regulación de las voluntades anticipadas en México, [tesis de
maestría en Derecho], UNAM, México, 2014, disponible en
https://bit.ly/2T3MTkW, consulta: 20/04/2015.

Documentos publicados en Internet

• Aguilar Gutiérrez, Antonio y Derbez Muro, Julio, Panorama de la Legislación


Civil en México, México, Imprenta Universitaria/UNAM-Instituto de Derecho
Comparado, 1960, Textos y estudios legislativos, núm. 2, disponible
en http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/libro.htm?l=386, consulta:
08/12/2014.
• Arellano García, Carlos, “Las grandes divisiones del derecho”, Revista de la
Facultad de Derecho, México, año LIV, núm. 242, 2004, disponible
en https://revistas-colaboracion.juridicas.unam.mx/index.php/rev-facultad-
derecho-mx/article/view/28685/25936, consulta: 21/11/2014.
• Cassese Sabino, “El sistema jurídico italiano (1945-1999)”, en Fix-Fierro,
Héctor et. al. (coords.), Culturas jurídicas latinas de Europa y América en
tiempos de globalización, México, UNAM/Instituto de Investigaciones
Jurídicas, 2003, serie Doctrina Jurídica, núm. 139, disponible
en https://bit.ly/2TUsdsM, consulta: 19/02/2019.
• Cruz Barney, Óscar, “La codificación civil en México: aspectos generales”, en
Enciso Contreras, José et. al. (coords.), Código civil para el gobierno interior del
estado de los Zacatecas, 1°. de diciembre de 1829, México, UNAM/Instituto de
Investigaciones Jurídicas, 2012, serie Doctrina Jurídica, núm. 627, disponible
en https://bit.ly/2X6XniN, consulta: 19/02/2019.
• Cruz Ponce, Lisandro, “Algunos principios generales de nuestra legislación
civil”, Revista de derecho privado, año 2, núm. 4, enero-abril 1991, disponible
en https://revistas-colaboracion.juridicas.unam.mx/index.php/rev-derecho-
privado/article/view/20003/17947, consulta: 21/11/2014.
• González A. Carrancá, Juan Luis, “Presentación”, Código Civil para el Distrito
Federal, 2.ª ed., 2002, México, TSJDF/IIJ, disponible
en http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/2/739/2.pdf, consulta: 21/11/2014.
• Güitrón Fuentevilla, Julián, “Ensayo sobre el concepto de derecho civil y
derecho familiar”, México, UNAM/Facultad de Derecho, 1979, disponible
en https://bit.ly/2SVZoiD, consulta: 19/02/2019.
• Iglesias, Román y Morineau, Martha, “La influencia del derecho romano en el
derecho civil mexicano, los códigos civiles de: 1870, 1884 y 1928”, Revista de
Derecho Privado, año 3, núm. 7, enero-abril 1992, disponible
en https://revistas-colaboracion.juridicas.unam.mx/index.php/rev-derecho-
privado/article/view/20072/18007, consulta: 21/11/214.
• Macedo, Pablo, “La evolución del derecho civil”, en Revista de Derecho
Notarial Mexicano, México, núm. 46, 1972, disponible
en https://bit.ly/2GWoSWm, consulta: 19/02/2019.
• Margadant, Guillermo Floris, “Los glosadores”, La segunda vida del derecho
romano, México, Miguel Ángel Porrúa, 1986, disponible
en http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/libro.htm?l=553, consulta:
20/11/2014.
• Montero Duhalt, Sara, “La socialización del derecho en el Código Civil de
1928”, en Sánchez-Dávila, Jorge A. (coord.), Libro del cincuentenario del
Código Civil, México, UNAM-Instituto de Investigaciones Jurídicas, 1978,
disponible en http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/libro.htm?l=1022,
consulta: 30/11/2014.H
• Pedagogía DED-UNAM Derecho, Ramas del derecho, México, UNAM/Facultad
de Derecho-División de Educación a Distancia, 2016, disponible
en http://bit.ly/2SquPgk, consulta: 25/02/2019.
• Quintana Adriano, Elvia Arcelia, “Derecho público y derecho privado” en
González Martín, Nuria (coord.), Estudios jurídicos en homenaje a Marta
Morineau. Derecho romano. Historia del derecho, México, UNAM-Instituto de
Investigaciones Jurídicas, 2006, Serie doctrina jurídica núm. 282, t. 1,
disponible en http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/libro.htm?l=1855,
consulta: 31/11/2014.
• Sosa, Rodolfo Alberto, “Concepto y contenidos del derecho social”, Anales de
la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales, La Plata, año 6, núm. 39, 2008,
disponible
en http://www.trabajosocial.unlp.edu.ar/uploads/docs/conceptos_y_contenid
os_de_la_seguridad_social.pdf, consulta: 08/12/2014.

Sitios electrónicos

• ClioMaps Atlas zur Geschicthe, http://cliomaps.de/karten-eu/1811a.


• Europe 1748-1766, http://en.wikipedia.org/wiki/File:Europe_1748-
1766_en.png.
• Europe 1812
map, http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Europe_1812_map_en.png?use
lang=es.
• Homepage for History 224. International Relations Since 1917: The End Of
European
Hegemony, http://home.wlu.edu/~patchw/His_224/pictures/1900_Europe.jp
g

Audiovisual

• Sabau García, Pedro, Los romanos, las leyes y el derecho, [Archivo de video],
24/02/2012, disponible en https://youtu.be/S0DNpTYfo30, consulta:
11/04/2016.
• Güitrón Fuentevilla, Julián- Derecho Familiar, ¿Pertenece el Derecho Familiar
al Civil; Privado; Social; Público o es un género distinto?, [Archivo de video],
25/09/2015, disponible en https://bit.ly/2Gy6vHZ, consulta: 11/04/2016.

Imágenes


• (1) Yakoo, Corpus Iuris Civilis, [fotografía], 2006, tomada
de http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Corpus_Iuris_Civilis_02.jpg,
consulta: 29/10/2014.
• (2) Paramjeet Singh, [Botana ligera], [fotografía], 2014, tomada
de https://pixabay.com/es/comer-desayuno-frutas-almendras-421388/,
consulta: 29/10/2014.
• (3) s. a., Code civil des Français (Garnery) [Código Civil de 1804], [fotografía],
s. f., disponible en , consulta: 25/02/2019.
• (4) kh80, Reichsgesetzblatt 1896 Seite 195 [Anuncio del Código Civil Alemán
en la Gaceta de Leyes del Reich en 1896], [fotografía], s. f., disponible
en http://bit.ly/2SsNVCK, consulta: 25/02/2019.
• (5) s. a., Codigo Civil España 01 [Código Civil Español], [fotografía], s. f.,
disponible en http://bit.ly/2Stl2WU, consulta: 25/02/2019.
• (6) http://catalogo.bne.es/uhtbin/cgisirsi/0/x/0/05?searchdata1=bima000009
0529, Recopilacion de Leyes de los Reynos de las Indias 1681 [Recopilación de
Leyes de las Indias], [fotografía], s. f., disponible en http://bit.ly/2SqoPV5,
consulta: 25/02/2019.

También podría gustarte