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ANÁLISIS DERECHOS FUNDAMENTALES VIOLADOS POR EL ESTADO

AMPARADOS EN EL ORDENAMIENTO JURÍDICO:

EL JUICIO DEL MONO

RESUMEN:

¿Es responsable el Estado y todo el engranaje público de las injusticias que comete dentro
del marco legal? Es necesario analizar qué garantía tienen aquellos que han sido vulnerados
por normativas, resoluciones o actuaciones aprobadas dentro del ordenamiento jurídica,
pero que, claramente, vulneran Derechos Fundamentales. El propio Estado violenta los
derechos que debe proteger en el marco de sus propios estatutos y los tratados
internacionales. Quien suscribe, se encuentra profundamente preocupada por la cantidad
de disposiciones que han sido declaradas inconstitucionales y contrarias al Derecho en
República Dominicana.

ABSTRACT:

Are the State and all the public machinery responsible for the injustices it commits within
the legal framework? It is necessary to analyze what guarantee are those that have been
violated by regulations, resolutions, or actions approved within the legal system, but that,
clearly, violate Fundamental Rights. The State itself violates the rights that it must protect
within the framework of its own statutes and international treaties. The undersigned is
deeply concerned about the number of provisions that have been declared unconstitutional
and contrary to the law in the Dominican Republic.

Para este artículo de opinión, nos hemos propuesto analizar el filme El Juicio del Mono, cuyo
escenario tiene lugar en Tennessee, Estados Unidos, en el año 1925 en
medio de la sociedad norteamericana post- Primera Guerra Mundial,
y aún con secuelas de la Guerra Civil de 1865. Es conocido por todos
que era una sociedad donde imperaba el odio y la división en los
temas sociales, económicos y religiosos. En este contexto de división
racial, religiosa y económica se pone en vigor el 21 de marzo una
normativa conocida como los Estatutos de Tennessee sobre la
Evolución (Tennessee Evolution Statutes), que también la podemos
encontrar con el nombre de la Ley de Butler (Butler Act).
Lisa Marie Herrera Borquez | Estudiante de Término Ciencias Jurídicas | R.D.

Básicamente, la norma prohibía la enseñanza de la teoría de la evolución en todas las


universidades y escuelas financiadas con los fondos públicos del
Estado, especialmente enseñar asuntos referentes al Darwinismo,
teoría que establece que el ser humano proviene del mono y no del
creacionismo como la Biblia expresa. Sin embargo, es válido aclarar
que esta es una ley caracterizada por ser injusta, infringiendo la
libertad de culto/religión de cada ciudadano y, además, juzgando a
un individuo inocente por el simple hecho de enseñar teorías
científicas propias de la materia, sin avalar su completa veracidad
(es por esta razón que son teorías).

Una prueba de la inconstitucionalidad de los Estatutos de Tennessee


es que viola groseramente la Primera Enmienda de la Constitución de los EE. UU. de 1791,
que reza de la siguiente manera: El Congreso no hará ley alguna por la que adopte una religión
como oficial del Estado o se prohíba practicar ninguna libremente, o que coarte la libertad de palabra
o de imprenta, o el derecho del pueblo para reunirse pacíficamente o para pedir al gobierno la
reparación de agravios. Esta enmienda fue promulgada ante el temor que algunos
Estados de la Unión (producto de la Guerra de Secesión), pudieran imponer alguna
determinada fe religiosa en las escuelas; cosa que muy evidentemente sucedió.

En el caso de la película, el imputado es un maestro de biología que está siendo acusado por
enseñar la teoría del Darwinismo en las aulas, violando la mencionada ley y los preceptos
bíblicos. Los enfrentamientos acalorados entre la fiscalía y la Defensa se caracterizaron por
contener objeciones sin sentido a la participación en el estrado de testigos filósofos,
científicos y maestros de biología propuestos por la Defensa. Y no solo esto, sino que las
mismas son admitidas sin razón alguna provocando que el juicio se torne violento y no se
haga caso de la principal necesidad del derecho: hacer una sociedad civilizada. Incluso, no
se contaba con un juez imparcial, y que según documentos con la biografía del juez John,
este era Luterano.1

Lo cierto es que el juez condenó al imputado a una multa mínima de cien dólares. Sin
embargo, la Defensa insistió en que el caso sería llevado ante los tribunales federales porque
en cuanto a normas injustas, NO DEBERÍA HABER NINGUNA PENA, y por más pequeña
que fuese la multa, sigue siendo arbitraria. No se puede administrar justicia con una ley
mala o infundada, solo se puede castigar y destruir; porque la mala ley destruye a

1
Artículo SEMBRANDO VIENTOS - EL «JUICIO DEL MONO» EN DAYTON, 1925, Alfonso López Borgoñoz.
Lisa Marie Herrera Borquez | Estudiante de Término Ciencias Jurídicas | R.D.

cualquiera que la toca, justo como dijo la propia Defensa en la película. No hay proceso
democrático.

Aunque la película en sí misma no muestra qué ocurrió luego de ese fallo porque esta llega
a su fin, lo que sucede después es lo que conecta este filme con el objetivo de este ensayo: la
Responsabilidad Patrimonial del Estado ante la declaratoria de Inconstitucionalidad de una
norma. Según lo que investigué, el imputado no pagó la multa porque se recurrió la
sentencia por un tecnicismo y el Tribunal Supremo de Tennessee la revocó, fallando, al
mismo tiempo, que la ley sobre la que se había basado era inconstitucional, con base en la
primera enmienda de la Constitución de los EE. UU.2 ¿Qué significa esto? Que, mediante el
Control Concentrado, se ha expulsado del ordenamiento jurídico esta norma por ser
contraria a la Constitución.

Es justo en este punto donde entra la responsabilidad del Estado por el hecho del
legislador. Ciertamente, el Poder Legislativo no está exento de sometimiento a la
Constitución y sus actos —leyes— quedan bajo el imperio de tal Norma Suprema. En los
casos donde la Ley vulnere la Constitución, evidentemente el Poder Legislativo habrá
conculcado su obligación de sometimiento, y la antijuridicidad que ello supone traerá
consigo la obligación de indemnizar. Por tanto, la responsabilidad del Estado-Legislador
tendría origen en la inconstitucionalidad de la Ley3. Todo esto responde al principio «due
process of law»: «nadie puede sufrir lesión o privación de sus derechos e intereses
legítimos sino en virtud de una ley constitucional». Básicamente, el Estado no tiene
escapatoria y se podría considerar como parte del derecho natural que, como perjudicador,
responda a reparar el daño causado.

En sentidos generales, la responsabilidad es, en esencia, la obligación de reparar o


satisfacer algo a alguien, por el daño causado por un hecho realizado libremente o una
omisión, dicha reparación puede ser en efectivo o mediante la ejecución de alguna
actividad o restitución material. 4
Continuando en el contexto estadounidense para luego adentrarnos al asunto local, la Ley
en materia de constitucionalidad de Estados Unidos establece que:

Las sentencias declaratorias de la inconstitucionalidad de leyes, disposiciones o actos con fuerza de


ley no permitirán revisar procesos fenecidos mediante sentencia con fuerza de cosa juzgada en los que

2
EL ENGAÑO ¿INTELIGENTE? DE VUELTA AL COLE, EL FUNDAMENTALISMO RELIGIOSO QUIERE VOLVER A LAS
AULAS, Alfonso López
3
file:///C:/Users/LEXPERTOS/Downloads/Dialnet-ResponsabilidadPatrimonialDelEstadoPorLasLeyesInco-
1996791.pdf
4
Lockward, Ángel, Derecho Administrativo, Legislación y Jurisprudencia.
Lisa Marie Herrera Borquez | Estudiante de Término Ciencias Jurídicas | R.D.

se haya hecho aplicación de las leyes, disposiciones o actos inconstitucionales, salvo en el caso de los
procesos penales o contencioso-administrativos referentes a un procedimiento sancionador en que,
como consecuencia de la nulidad de la norma aplicada, resulte una reducción de la pena o de la sanción
o una exclusión, exención o limitación de la responsabilidad.» (Art. 40, l, LOTO)

Es decir, que, aunque no exista la retroactividad respecto a todas las sentencias que han sido
dictadas, ante los casos penales y contencioso-administrativos, el Estado expresa su
responsabilidad para disminuir o eximir al/los imputados, como es el caso de la especie: el
Juicio del Mono.

En República Dominicana, lo planteado anteriormente sobre la Responsabilidad del Estado


encuentra su fundamento en la Constitución Dominicana. Este derecho de los ciudadanos
a ser indemnizado por los daños y perjuicios sufridos por acción u omisión de los
funcionarios o empleados públicos ha recibido un importante impulso con la reforma a la
Constitución de 2010. El artículo 148 introdujo el principio de responsabilidad civil del
Estado y los funcionarios, de la forma siguiente: “Las personas jurídicas de derecho público y
sus funcionarios o agentes serán responsables, conjunta y solidariamente, de conformidad con la ley,
por los daños y perjuicios ocasionados a las personas físicas o jurídicas por una actuación u omisión
administrativa antijurídica.”

Sobre esta materia, el legislador dominicano determina los efectos de la sentencia de


inconstitucionalidad en el tiempo, aplicando efectos ex nunc; es decir, producen efectos
desde la publicación de la sentencia, por regla general, sin embargo, el artículo 48 de la ley
37-11, determina que el Tribunal Constitucional "podrá reconocer y graduar excepcionalmente,
de modo retroactivo, los efectos de sus decisiones de acuerdo con las exigencias del caso". Con esto,
de una forma u otra, el Estado resarce a aquellos que han sido condenados por una norma
inconstitucional.

En chile, por otro lado, se ha establecido jurisprudencialmente en varias ocasiones el deber


del Estado de indemnizar los daños producidos por una ley declarada inconstitucional,
incluso cuando la sentencia estimativa no tenga efecto retroactivo5.

En conclusión, sea que la sentencia tenga efecto retroactivo o no, el Estado tiene la obligación
de resarcir los perjuicios causados por las leyes promovidas, aprobadas y promulgados por
el Poder Legislativo y Ejecutivo que son contrarias a la Constitución.

5
https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-52002010000100007#n30

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