Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
intimidad
11 diciembre, 2015
4
Mujer sentada tocando la espineta, h, 1675, óleo sobre lienzo, 51,5 x 45,5, National Gallery, Londres.
En las obras de Vermeer, las habitaciones son como unas cajas en las que se sitúan
sabiamente figuras, elementos arquitectónicos, muebles y accesorios “estableciendo una red de
verticales y horizontales por las que discurre la mirada del espectador, guiada en ocasiones por
la perspectiva trazada por las baldosas de dos colores, como sucede en un prodigioso tour de
force como es La lección de música, demostrativo de hasta qué punto meditaba nuestro artista
sus composiciones”, explica María Cóndor.
La lección de música, h.1660, óleo sobre lienzo, 73,5 x 64,1 cm, Londres, Palacio de Buckingham.
Hay otro elemento en las pinturas de Vermeer que es esencial, la visión desde el ángulo izquierdo, que
incluye la pared izquierda de la estancia, donde aparece una ventana que es la principal, o la
única, entrada de luz, que incluye de una manera ilusionista al espectador. En Soldado y muchacha
sonriente (h. 1660) utiliza este recurso para integrar una perspectiva acelerada, lo que ha
hecho pensar que quizá utilizó la cámara oscura.
A Vermeer no le interesa narrar historias, no hay acción, solo
contemplación o reflexión, son historias sin principio ni final, solo en algunas ocasiones un breve
gesto de una mano, una cabeza que se vuelve, pero lo habitual es que los personajes que aparecen en la
composición estén enfrascados en lo que estén haciendo, sobre todo en sus misivas o en su música, las
dos actividades más representadas en sus pinturas. En sus óleos hay pocos personajes, a lo sumo dos,
pero que con el paso del tiempo, será en su mayoría solo una figura.
Mujer tocando un virginal, h. 1672-73, óleo sobre lienzo, Londres, National Gallery.
Alegoría de la pintura, h. 1666, óleo sobre lienzo, 120 x 100 cm, Viena, Kunsthistorisches Museum.
Algunas de las obras que realizó durante este periodo fue: Mujer tocando la
guitarra (1672), El arte de la pintura (1673), Dama al virginal (1673), Mujer sentada
tocando la espineta (1675), entre otras. Luego de esta creación, su salud empezó
a empeorar cada vez más. A finales de 1675, Vermeer murió. Concretamente, el
15 de diciembre de 1675. Vermeer fue enterrado en el sepulcro familiar de la Oude
Kerk en Delft. Al quedar todas las deudas, su mujer tuvo que suplir las deudas y
sus bienes.