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Universidad Católica del Este

(UCADE)
Nombre & Apellido:
Deiry Carpio Zorrilla

Matricula:
2016-5281

Materia:
Derecho de la magistratura

Tema:
El Régimen Electoral y Tributario

Profesor:
Modest Bigay
EL RÉGIMEN ELECTORAL Y TRIBUTARIO
Introducción

República Dominicana, pequeña nación del Caribe, que se convirtió en 1492,


en la puerta por la cual la civilización occidental ingresó a un nuevo continente,
que luego, se llamaría, América; en 1844 se constituyó en República y desde
entonces, su historia cuenta de muchos tumbos a través de diversas formas de
dictaduras; algunas de las más largas y recias del continente - y desordenes
institucionales, hasta que en 1963 inició, con un gobierno fallido al que
siguieron gobiernos de facto, el camino hacia la democracia.

La Estructura Política se desenvuelve dentro de una cultura política


democrática. El Estado Social Democrático de Derechos está concebido para
garantizar las fórmulas que mejor satisfagan las exigencias de imparcialidad
(igualdad de oportunidades + concertación) a los fines de que los representantes
puedan llegar al gobierno.

En este trabajo a escudriñar encontraremos el desarrollo del régimen electoral y el


régimen tributario en la Republica Dominicana. Allí se muestra el desglose de ambos
y de cada uno de sus partes al igual que su contenido jurídico.
Régimen electoral

El gobierno de la República Dominicana se lleva a cabo en un marco de


una democracia representativa, mediante la cual el Presidente de la República
Dominicana es a la vez Jefe de Estado y jefe de gobierno, y de un sistema
multipartidista. El poder ejecutivo es ejercido por el gobierno. El poder
legislativo reside en las dos cámaras del Congreso Nacional, que está
conformado por dos cámaras legislativas: El Senado, que es el ente de
representación territorial, cuenta con 32 escaños, uno por cada una de las treinta
y una provincias y otro en representación del Distrito Nacional; y la Cámara de
Diputados, con 178 escaños. El Poder judicial es independiente del poder
ejecutivo y legislativo.

Las elecciones congresuales, municipales y presidenciales se celebran cada


cuatro años, aunque, de acuerdo con la disposición transitoria decimosegunda
de la Constitución del 2010, a fines de unificar las elecciones en un solo día

El Régimen electoral dominicano esta implantado bajo la Ley Orgánica de


Régimen Electoral el cual regula lo relativo al ejercicio del derecho de
ciudadanía de elegir y ser elegibles; el procedimiento y desarrollo del proceso
electoral para la conformación del Poder Ejecutivo, el Poder Legislativo y la
elección de las autoridades municipales; el funcionamiento y competencias de
la Junta Central Electoral como máximo ente responsable de la organización de
los comicios.

La organización, dirección y supervisión de los procesos electorales, en las


formas establecidas en la Ley Orgánica de Régimen Electoral estará a cargo de
los siguientes órganos:
1. La Junta Central Electoral.
2. Las Juntas Electorales.
3. Los Colegios Electorales.

La Junta Central Electoral constituye una entidad de derecho público, dotada


de personalidad jurídica, con patrimonio propio inembargable, con capacidad
para realizar todos los actos jurídicos que fueren útiles para el cumplimiento de
sus fines, en la forma y en las condiciones que la Constitución, las leyes y sus
reglamentos determinen. Es un órgano autónomo, con independencia técnica,
administrativa, presupuestaria y financiera

Las Juntas Electorales son órganos de carácter permanente, subordinadas a la


Junta Central Electoral en funciones administrativa electoral. Habrá una junta
electoral en el Distrito Nacional y una en cada municipio. Se compondrá de un
presidente y cuatro vocales. Las demás juntas electorales se compondrán de un
presidente y dos vocales. Tendrán dos suplentes cada uno. Serán designados por
la Junta Central Electoral, la cual podrá removerlos y aceptarles sus renuncias.

Los Colegios Electorales son el conjunto de ciudadanos agrupados en función


de su residencia por la Junta Central Electoral, con el propósito de ejercer el
sufragio en las Asambleas Electorales y otros mecanismos de participación
popular, debidamente convocadas de conformidad con la Constitución y las
leyes.

Dentro de este régimen nos habla sobre lo que es la Identidad de las personas
el cual es el conjunto de rasgos propios de un individuo que lo caracteriza frente
a los demás. Para los fines de la ley, se comprobará mediante la presentación de
la correspondiente cédula, cuyo uso será obligatorio, para nacionales y
extranjeros residentes legales en la República Dominicana

Tenemos también el Registro Electoral y su Revisión, el cual el registro


electoral consistirá en la inscripción personal, obligatoria y gratuita de todo
individuo y ciudadano dominicano que, de acuerdo con la Constitución y las
leyes, se encuentre en aptitud de ejercer el sufragio. La incorporación en el
Registro Electoral se extenderá a los menores que vayan a cumplir 18 años de
edad antes o en la fecha de las más próximas elecciones.

El Derecho Electoral, no es más que el conjunto de normas, pautas,


jurisprudencias y tradiciones en que se mueve y con las cuales se juzgan los
conflictos de la vida política, en los cuales sin ¿eliminar¿ la importancia de la
norma, en los asuntos trascedentes, muchas veces, se impone, el poder político
y su capacidad de controlar los órganos electorales, sean de administración y/o
jurisdiccionales, lo demás, queda en el ámbito del ideal político, no de la praxis
jurídica. Esta parte, en consecuencia, incluye la teoría política que sustenta al
Derecho Electoral de los pueblos en perspectiva comparada y las normativas,
incluidas sus carencias y falacias. La segunda parte está referida particularmente
al caso de la República Dominicana, su accidentada historia política y sus
procesos electorales, sus órganos electorales y entidades que componen su
sistema político, así, como su sistema y régimen electoral que producen
autoridades rodeadas de una profunda ilegitimidad, en competencias electorales
muy desiguales,

El conocimiento de los asuntos contenciosos electorales y los conflictos


suscitados a lo interno de los partidos o agrupaciones y movimientos políticos,
estará a cargo del Tribunal Superior Electoral, órgano responsable de la justicia
electoral de conformidad con la Constitución y las leyes.
RÉGIMEN TRIBUTARIO

El Sistema Tributario es el nombre que se le da al sistema impositivo o de recaudación


de un país y constituye la columna vertebral que hace posible financiar las políticas
económicas y sociales ejecutadas en el Presupuesto del Estado. Esto pone en clara
evidencia el nivel de responsabilidad que recae sobre las autoridades encargadas tanto
de su diseño como de su aplicación. Asimismo, resalta la importancia del
empoderamiento que debe tener la sociedad dominicana sobre este tema.

Para aportar a esa causa, el objetivo central de este artículo es resumir las principales
características del Sistema Tributario dominicano y al mismo tiempo ofrecer una
visión general sobre un tema tan trascendental. Para ello, de forma muy simple
veremos que, conociendo los siguientes 7 hechos estilizados o características
estaremos en la capacidad de comprender cómo es la estructura de los tributos en la
República Dominicana, su forma a lo largo del tiempo, y finalmente, seremos capaces
tener una perspectiva general de cómo estamos frente al resto de los países de América
Latina y los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económicos (OCDE).

Los Ingresos del Estado dominicano dependen en su mayoría de Impuestos La


principal fuente de ingresos o recursos del gobierno dominicano provienen de
Ingresos tributarios. Es decir, de impuestos que gravan el consumo como el Impuesto
sobre Transferencia de Bienes Industrializados y Servicios (ITBIS); Impuestos
Selectivos a los alcoholes, tabaco y combustibles; Impuestos sobre la Renta; e
Impuestos sobre el Patrimonio.

Mientras que, en muchos países de América Latina una parte importante de sus
ingresos no provienen de impuestos sino de la explotación de recursos minerales,
como es el caso de países como Venezuela, Chile, Ecuador, Colombia y Bolivia. Estos
países poseen grandes yacimientos de petróleo, gas natural, cobre, oro, etc. Otro
ejemplo es Panamá que obtiene ingresos provenientes del Canal. Por lo tanto, la alta
participación de los ingresos no tributarios en algunos países se debe a la propiedad
de recursos naturales por parte del Estado o a los derechos e ingresos que recibe sobre
su explotación.

Nuestro país, aunque obtiene ingresos de la minería, estos representan muy poco en
comparación con muchos países de la región. Esto se explica, entre otras cosas, porque
los yacimientos de recursos naturales son menores en comparación con otros países.
Lo anterior, trae como consecuencia que estos países, a diferencia de República
Dominicana, puedan cobrar tasas de impuestos más bajas de ITBIS e Impuesto sobre
la Renta, ya que poseen otras fuentes importantes de ingreso.

Como regla general, la fiscalidad en la República Dominicana se rige por el Código


Tributario (Ley 11-92) y sus modificaciones, por los reglamentos para su aplicación
y por las normas dictadas por la Dirección General de Impuestos Internos (DGII),
organismo autónomo encargado de su recaudación y administración. La Ley 3489 de
1953 para el Régimen de Aduanas y otras leyes conexas rigen los aranceles aduaneros,
que administra y recauda la Dirección General de Aduanas (DGA).

La política tributaria es responsabilidad del Ministerio de Hacienda (MH), institución


encargada de elaborar y proponer la legislación que establece el sistema tributario y
aduanero dominicano, de acuerdo con la Ley No. 494-06 de Organización de la
Secretaría de Estado de Hacienda.

• El fundamento jurídico del sistema tributario se encuentra principalmente en:

- Ley No. 11-92 y sus modificaciones que establece el Código Tributario


Dominicano.
- Ley No. 14-93 y sus modificaciones que establece el Código Arancelario.
- Ley No. 112-00 sobre Hidrocarburos y sus modificaciones.
• De acuerdo al Artículo 243 de la Constitución Dominicana “el régimen tributario
está basado en los principios de legalidad, justicia, igualdad y equidad (…)”.

• Existen tres instituciones que captan los recursos del Estado. Se destaca la Dirección
General de Impuestos Internos (DGII) que recauda más del 74.3% de los ingresos del
gobierno.

• El 92.7% de las recaudaciones corresponden a ingresos tributarios, es decir, ingresos


por imposiciones fiscales que deben pagar las personas físicas y jurídicas.

• Mientras el 7.3% restante corresponde a los ingresos no tributarios, siendo éstos los
que obtiene el Estado al recibir una contraprestación por un servicio

En principio, el régimen tributario dominicano es territorial. Todos los ingresos de


fuente dominicana están sujetos a tributos locales, sin importar que la persona o
entidad que los genere sea dominicana o extranjera. En cambio, los ingresos
generados en el extranjero no están sujetos a impuestos dominicanos, excepto las
rentas de inversiones y ganancias financieras de personas domiciliadas o residentes
en la República Dominicana.

Cabe precisar sobre esta última excepción, primero, que las pensiones y prestaciones
de la seguridad social recibidas del extranjero se encuentran expresamente exentas del
pago de impuestos; en segundo lugar, que los dominicanos y extranjeros que pasen a
residir en la República Dominicana solo están sujetos al pago de impuesto sobre sus
rentas financieras de fuente extranjera a partir del tercer año de establecer su
residencia en el país; y en tercer lugar, que las personas que obtengan su residencia
en calidad de jubilados, rentistas o inversionistas están exentos de pagar dicho
impuesto aun después del tercer año de su residencia,

Para fines tributarios, se considera residente en la República Dominicana toda persona


que permanezca más de 182 días en un año en el país, sea en forma continua o
discontinua.

Toda persona o entidad con vocación para pagar impuestos en la República


Dominicana debe inscribirse en el Registro Nacional de Contribuyentes (RNC).
Impuestos Principales

Los tributos dominicanos más importantes son:

• Impuesto sobre la renta (ISR).


• Impuesto sobre ganancias de capital.
• Impuesto sobre transferencias de bienes industrializados y servicios (ITBIS).
• Impuesto selectivo al consumo (ISC).
• Impuesto sobre la propiedad inmobiliaria (IPI).
• Impuesto sobre activos.

Impuesto Sobre la Renta (ISR)

ISR Para Personas Jurídicas

Las personas jurídicas (sociedades comerciales, etc.) están obligadas a pagar


anualmente una tasa única del 27 % sobre su renta neta imponible durante el ejercicio
fiscal. A diferencia de otros países, el impuesto sobre la renta a pagar es el mismo
para todos los diferentes tipos de sociedades.

Determinación de la Renta Neta Imponible Para Personas Jurídicas

El Código Tributario define la renta neta imponible como la renta bruta reducida por
las deducciones permitidas, que incluyen, de manera general, todos los gastos
necesarios efectuados para obtenerla, mantenerla y conservarla, tales como intereses
de deudas sociales, primas de seguros, depreciación de activos, amortización de
bienes intangibles, donaciones a instituciones caritativas (hasta un 5% de la renta
imponible) y gastos de investigación y experimentación no relacionados con depósitos
minerales.
Presentación Anual de la Declaración de Rentas de las Personas Jurídicas

Toda sociedad, dominicana o extranjera, que obtenga rentas de fuente dominicana


debe presentar ante la DGII, después del cierre de su ejercicio fiscal, una declaración
de la renta neta obtenida durante dicho ejercicio dentro de los 120 días posteriores a
la fecha de cierre. Para las sociedades cuyo ejercicio anual coincide con el año
calendario, la fecha límite es el 30 de abril de cada año. Las sociedades dominicanas
que no estén operando también están obligados a hacer la declaración fiscal anual.

Las presentaciones ante la DGII deben ir acompañadas de los estados financieros de


la empresa auditados por un contador público autorizado.

Pago por Adelantado del ISR

Las sociedades deben pagar mensualmente a la DGII una doceava parte del impuesto
sobre la renta pagado por el año fiscal anterior. Estos anticipos mensuales se
compensan con el impuesto sobre la renta debido por el año fiscal en curso.

ISR Para Personas Físicas (individuos)

Las personas físicas que reciban ingresos de fuente dominicana o de inversiones


financieras en el exterior pagarán impuestos sobre sus rentas de la siguiente manera:

Renta neta imponible (en pesos) Impuesto a pagar


0 a 416,220.00 0
416,220.01 a 624,329.00 15 % de las rentas sobre rd$416,220.01
624,329.01 a 867,123.00 RD$31,216.00 más el 20 % de las rentas sobre
RD $624,329.01
Más de 867,123.01 RD$78,446.00 más el 25 % de las rentas sobre
867,123.00

Esta escala es ajustada anualmente por inflación. Son muy pocas las deducciones
permitidas a la renta bruta de las personas físicas para fines del ISR.
Las personas físicas deben presentar su declaración anual a la DGII antes del 31 de
marzo. Están exentas de hacer la declaración las personas cuyos ingresos provengan
enteramente de sus trabajos como asalariados y aquellas con ingresos inferiores a
409,281.01 pesos. Los cónyuges deben presentar sus declaraciones por separado.

Impuesto Sobre Ganancia de Capital

Para determinar la ganancia de capital sujeta a impuesto, se ha de deducir del precio


o valor de enajenación de un bien el costo de adquisición o producción ajustado por
inflación. Tratándose de bienes depreciables, el costo de adquisición o producción a
considerar será el de su valor residual. La tasa de este impuesto es la misma del ISR:
27 % para personas jurídicas y de 0 a 25 % para personas físicas.

Las ganancias de capital se calculan solo en pesos dominicanos.

Impuesto Sobre Transferencias de Bienes Industrializados y Servicios (ITBIS)

El ITBIS es un impuesto sobre el valor agregado que grava la transferencia e


importación de bienes industrializados y la prestación de servicios. La tasa normal
del ITBIS es del 18 %, que se calcula, para las importaciones, sobre el costo del bien
importado más seguro, flete e impuestos aduanales; y para los servicios, sobre su valor
total. Hay bienes con tasa reducida del ITBIS del 16 % y otros bienes y servicios
exentos de este impuesto, tales como los bienes destinados a la exportación, algunos
alimentos básicos, medicinas, combustibles, fertilizantes, libros y revistas, servicios
financieros, servicios de salud, servicios de transporte, alquileres residenciales y
servicios de electricidad, agua y recogida de basura.

Impuesto sobre la propiedad inmobiliaria


A falta de impuesto sobre el Patrimonio total, existe un gravamen a los bienes
inmuebles (IPI) su tipo es 1% sobre el valor total del inmueble sin admitirse
depreciaciones por antigüedad o estado. La figura quedó establecida por las Leyes 18-
88, 288-04 y 253-12 y afecta a:
• Inmuebles destinados a vivienda cuyo valor, incluyendo el solar donde estén
edificados, supere un nivel especificado.

• Solares urbanos no edificados e inmuebles no destinados a vivienda (incluyendo los


destinados a actividades comerciales, industriales y profesionales) cuyo valor en
conjunto exceda el mismo valor que se actualiza.

Impuesto sobre los activos


El impuesto a los activos de las personas jurídicas o físicas con negocios de
propietario único quedó eliminado a partir de 2016, por la Ley 253-12 (artículos 48 y
401), siendo sustituido por un impuesto del 1% sobre su propiedad inmobiliaria de
personas jurídicas o de negocios con un dueño único. Se aplica aunque la entidad
registre pérdidas en el año.

Impuesto sobre la propiedad de vehículos


Grava los vehículos de motor a su ingreso en territorio dominicano.

El principal impuesto es el Impuesto de Registro o primera placa, que supone el 17%


sobre un valor CIF que la aduana extrae de una Tabla de Valores de Vehículos que
publica la DGII en su portal.

A este gravamen se le suma el impuesto por emisiones de dióxido de carbono (C02)


cuyos tipos son 0%, 1%, 2%, o 3% sobre el valor CIF, dependiendo de la clasificación
por emisiones de CO2 en que el vehículo recaiga.
Conclusión

Según las informaciones encontradas y analizadas se llega a la conclusión que:


Estudiar in abstracto el régimen electoral y su ordenamiento jurídico, sin
analizar el origen del sistema político que regula, es un error que no deseamos
cometer, pues en América, los arreglos políticos, constituyen la realidad. Siendo
que la tradición política, es en principio la que da origen a las normas del
régimen político, en la primera parte de este trabajo hemos querido pasar revista
a la democracia y los sistemas políticos desde el punto de vista de las ciencias
políticas, pues a fin de cuentas, el Derecho Electoral, no es más que el conjunto
de normas, pautas, jurisprudencias y tradiciones en que se mueve y con las
cuales se juzgan los conflictos de la vida política, en los cuales sin ¿eliminar¿
la importancia de la norma, en los asuntos trascedentes, muchas veces, se
impone, el poder político y su capacidad de controlar los órganos electorales,
sean de administración y/o jurisdiccionales, lo demás, queda en el ámbito del
ideal político, no de la praxis jurídica
En lo concerniente al régimen tributario: los tributos o impuestos en la
República Dominicana se encuentran regidos por el Código Tributario
(Ley #11-92) y sus modificaciones, por los Reglamentos para su Aplicación
(Decretos #139-98, 140-98 y 79-03) y sus modificaciones, y por
las normas dictadas por la Dirección General de impuestos Internos (DGII),
organismo autónomo encargado de su recaudación y administración (Art. 3 de
la Ley #227-06).)

El establecimiento de un impuesto supone una disminución de su renta


disponible de un agente, esto puede producir una variación de la conducta del
agente económico. Por otro lado, algunos impuestos al incidir sobre el precio de
los productos que gravan, es posible que los productores deseen pasar la cuenta
del pago del impuesto a los consumidores, a través de una elevación en
los precios.
Opinión personal

Después de una larga dictadura de más de treinta años, la República Dominicana


inició un largo proceso de democratización. Con la caída de la dictadura de
Trujillo, en 1961, se produjo en el país una profunda transformación del sistema
político. Surgió un sistema de partidos pluralista y se organizaron las primeras
elecciones libres.

El proceso de transición a la democracia en República Dominicana ah seguido


pasos muy lentos; sin embargo, es innegable el gran avance en la materia. Hoy
en día es complicado que se arguya un fraude electoral, pero esto no quiere decir
que el sistema electoral dominicano está exento de la posibilidad de cometer
irregularidades que pueden alterar significativamente los causes democráticos.
En la actualidad la jurisdicción electoral debe voltear la mirada hacia la
problemática desde una dimensión sustantiva

Desde 1978 hasta la actualidad, la República Dominicana ha tenido procesos de


cambio en cuanto al sistema electoral y las elecciones. Las estadísticas muestran
claramente la ruptura que se produce en el año 1994, cuando se dividieron las
elecciones congresuales y presidenciales.

Cabe destacar que el sistema electoral dominicano es sumamente


presidencialista. Esto implica que la participación de los ciudadanos es mayor
en los comicios presidenciales.

En cuanto al Régimen Tributario cabe relucir que el sistema tributario


dominicano contiene una serie de impuestos indirectos y directos que se aplican
tanto a las personas físicas como jurídicas. Existen impuestos a los ingresos, al
patrimonio, a los activos, sobre el salario, sobre bienes y servicios, a las
donaciones y sucesiones y al comercio exterior.

La informalidad tributaria y laboral en el país es muy elevada, siendo que un


importante número de personas que trabajan por su cuenta y microempresas está
en ese sector oculto de la economía. Se ha estudiado varias veces las razones de
la informalidad, que van desde razones de altos costos tributarios, elevados
requisitos de administración del contribuyente (contadores, abogados, trámites,
etc.), falta de credibilidad en el Estado, inexistencia de inventivos a la
formalidad, escasa cultura tributaria, débiles mecanismos de la agencia
tributaria para hacer cumplir la ley, baja productividad de las unidades
productivas, etc.

Para poder avanzar en la democratización de las compras públicas deberíamos


poder modificar nuestro sistema tributario hacia un régimen de monotributo,
que incluya en un solo impuesto Rentas, ITBIS, Salud y Jubilación, permitiendo
que un alto porcentaje de personas que hoy están fuera del sistema legal se
incorporen a las ventajas de la formalidad, accediendo a las compras públicas,
a la vez que pudiendo tener mejores condiciones crediticias, acceso a salud para
el grupo familiar, a la vez que a una jubilación futura. Muchos países han hecho
esas reformas en favor de los más desprotegidos, facilitando que el mismo talón
de pago sea la Declaración Jurada del Impuesto, sin requisitos de contabilidad
documentada, a la vez que se cuenta con diferentes tramos de montos a ingresar
de acuerdo con el tamaño de la actividad económica del contribuyente.

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