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CATEGORIAS GRAMATICALES

CAMILO ANDRES CORONEL MANZANO


OSCAR ANDRES GRIMALDOS VELOZA

Lengua Castellana

Ana Lucia López Gómez

COLEGIO HUMBERTO GOMEZ NIGRINIS


10-01
PIEDECUESTA
2017
Introducción

Aprendemos a usar la gramática de nuestra lengua antes de iniciar una trayectoria


en la escuela. Los niños pequeños transgreden esa gramática cuando están
aprendiendo a hablar, pero a medida que conviven con los adultos y escuchan
cómo deben decir, van mejorando las estructuras gramaticales que utilizan, hasta
que se convierten en usuarios eficaces de su idioma y están en posibilidades de
ingresar a la escuela, donde comenzarán los estudios formales de su idioma.
Todos transitamos por este camino y tenemos recuerdos, gratos o no, de nuestras
clases de español.

En el bachillerato universitario necesitamos conocer y utilizar correctamente la


gramática porque esto nos permitirá producir los textos, orales o escritos, que se
requieren para mostrar nuestros logros de aprendizaje en cualquier materia.

Con este material identificarás categorías gramaticales y las usarás para dar un
sentido al texto
Tabla de contenido

El Sustantivo………………………………………………………… 1
El Adjetivo……………………………………………………………..3
El Articulo………………………………………………………………6
El Verbo………………………………………………………………..9
El Adverbio……………………………………………………………14
Las Preposiciones……………………………………………………17
Las Conjunciones…………………………………………………….19
Las Interjecciones…………………………………………………….21
El Pronombre………………………………………………………….25
El Sustantivo

El sustantivo es una categoría gramatical que sirve para nombrar a todo tipo de
sujeto u objeto. Es también conocido como el nombre, justamente porque su
función es nombrar a distintos seres.

Ejemplos de sustantivos:
persona, perro, Antonio, voluntad, bolígrafo, España, computadora.

Clasificación del sustantivo


 

Sustantivos propios: El sustantivo propio es aquella palabra que sirve para


denominar en forma concreta a algún sujeto u objeto. Es decir, con los nombres
propios nos referimos específicamente a un individuo u objeto en particular.
Ejemplos de sustantivos propios: América, José, La Cenicienta, etc.
Como se aprecia en los ejemplos, la regla para la correcta ortografía de
los nombres propios es que deben escribirse con mayúscula inicial.

Sustantivos comunes: El sustantivo común se utiliza para designar en forma


general a toda persona, animal u objeto.
Ejemplos de sustantivos comunes: niño, vaca, gato, amor, etc.
 

Subdivisión de sustantivos comunes

Los sustantivos comunes se clasifican de la siguiente manera:

Sustantivos abstractos: Los sustantivos abstractos están constituidos por ideas o


sentimientos. Son sustantivos que no pueden percibirse por los sentidos.
Ejemplos de sustantivos abstractos: odio, bondad, compasión, felicidad, alegría.

Sustantivos concretos: Los sustantivos concretos, en contraposición a los


abstractos, son aquellos que sí son perceptibles por los sentidos.
Ejemplos: heladera, carpeta, teclado, etc.

Sustantivos contables: Los sustantivos contables son aquellos que designan


cosas que son susceptibles de enumeración. Ejemplos: tres sillas, dos mesas, cinco
lápices Sustantivos no contables: Como su nombre lo indica, los sustantivos no
contables son aquellos que no pueden ser enumerados.
Un aspecto importante de este tipo de sustantivo es que, si bien no pueden
enumerarse, sí pueden medirse.
Ejemplos: agua, leche, harina.

Sustantivos individuales: Los sustantivos individuales sirven para nombrar a un


ser en particular. Ejemplo: el sustantivo abeja es un individual porque se está
nombrando a un tipo concreto de insecto.

Sustantivos colectivos: Los sustantivos colectivos son aquellos que se encargan


de nombrar a seres que engloban a otros de un mismo tipo o clase.
Continuando con el ejemplo anterior, el sustantivo para designar en forma colectiva
a las abejas, se realiza utilizando el término enjambre.

Sustantivos derivados: Son aquellos que derivan de otra palabra.


Ejemplo: "zapatería", término que deriva del sustantivo común zapato.

Sustantivos primitivos: Al contrario de los derivados, los sustantivos primitivos no


derivan de otra palabra.
Ejemplos: gato, árbol, cuadro.
El adjetivo

El término adjetivo deriva de un vocablo latino y se trata de un tipo de palabra que


califica o determina al sustantivo. Los adjetivos expresan propiedades atribuidas a
los sustantivos, especificándolas o resaltándolas. Por ejemplo: “No encuentro
ningún adjetivo para calificar cómo te has comportado”, “La prensa no ahorró
adjetivos para resaltar la buena actuación del equipo catalán”, “Me han dicho
muchos adjetivos, pero nunca linda”.

El adjetivo puede hacer referencia a una característica concreta del sustantivo. La


expresión “El pantalón es azul”incluye un adjetivo (“azul”) que expresa una
propiedad visible (el color) del sustantivo (“pantalón”). En cambio, una frase
como “Es un partido fácil” presenta un adjetivo (“fácil”) que resulta abstracto, ya
que la facilidad no puede captarse por los sentidos sino que es una cuestión
subjetiva que nace de un pensamiento.

Clasificación de los adjetivos


Según la gramática tradicional podríamos establecer tres tipos: adjetivos
calificativos, demostrativos y otros (en este último grupo se incluyen de forma
amplia todos aquellos que no se encuentran dentro de los otros dos grupos); no
obstante, la más precisa es la clasificación desarrollada por la gramática oficial de
la lengua española, que cuenta con una lista basta extendida y detallada de los
diferentes tipos de adjetivos.
Adjetivos restrictivos: dentro de este grupo se encuentran aquellas cualidades
que acompañan a los sustantivos y restringen sus características de un modo
exacto. Por ejemplo si hablamos de “el coche blanco” estamos dejando afuera a
todos aquellos vehículos que no sean de ese color.
Adjetivos no restrictivos: estos adjetivos sirven para dar más datos sobre el
sustantivo pero sin limitarlo; generalmente suelen colocarse delante de él y lo
modifican de forma variable. Por ejemplo si decimos “es un excelente amigo”,
usamos el adjetivo como modificador sin restringir el grupo de individuos que
pueden entrar en ese grupo.
Adjetivos graduales: es un grupo bastante amplio del que forman parte los
adverbios de grado y otro tipo de clasificadores. Por ejemplo, si decimos “esta
revista es poco interesante” estamos valorando el grado de interés que nos
despierta esa publicación.
Adjetivos no graduales: también es un amplio grupo formado mayoritariamente
por los adjetivos comparativos, tales como: tan, menos o igual. No se determina el
grado de cuantificación del adjetivo sino que se establece una comparación. Por
ejemplo, cuando decimos “Pedro es más listo que Juan” estamos haciendo uso de
la comparación sin explicar cuán listo es cada uno de los individuos.
Adjetivos de grado extremo: tienen una función similar a los graduales; es decir,
expresan cuantificación, pero son absolutos. En este grupo se encuentran
aquellos adjetivos formados por los sufijos -érrimo o -ísimo y por los prefijos re-,
super-, mega- o hiper-.
Adjetivos intersectivos: aquellos que pueden dar lugar a una expresión en la que
dos tipos de características se encuentran, de ahí su nombre. Por ejemplo, si
decimos “maestro enano” estamos expresando que una persona es maestra y, a
la vez, que mide poco.
Adjetivos no intersectivos: al revés que los anteriores, estos adjetivos no
vinculan dos palabras sino que más bien se tratan de características
independientes. Por ejemplo, si decimos “Es un músico destacado”. No estamos
informando acerca de la profesión de la persona sino que, hablamos de alguien
que se destacada como música.
De todas formas debemos aclarar que los grupos más sobresalientes de adjetivos
son los calificativos y los demostrativos.

*Adjetivos calificativos: son aquellos que señalan una cualidad del


sustantivo: “La casa es grande”, “Esta mesa es muy vieja”, “La pintura de la
habitación es naranja”, “Ella es hermosa”, “El vaso es frágil”.

Adjetivos demostrativos: acompañan al sustantivo y sirven para expresar la


proximidad que existe entre emisor y receptor, en función del sustantivo del que se
habla: “Estoy mirando este adorno“, “¿De qué talla es aquel vestido?“
El articulo
En primer lugar debemos decir que los artículos están divididos o clasificados en
dos grupos conocidos como: definidos (o determinantes) e indefinidos (o
indeterminantes).
 
Los artículos definidos

Los artículos definidos se utilizan cuando el sustantivo del que hablamos (o


escribimos) es conocido. No nos referimos a una cosa o persona cualquiera, sino
a una en especial. Los artículos definidos son los siguientes:
 
Observa estos ejemplos:

 El verano.
 La mamá.
 Los libros.
 Las rodillas.

 
 Género

 Los artículos determinantes o definidos nos indican el género del sustantivo.


Un sustantivo es masculino si delante de él podemos colocar el artículo masculino:
el / los.Por ejemplo:
 El árbitro; Los futbolistas
 
Un sustantivo es femenino si delante de él utilizamos el artículo femenino: la / las.
Por ejemplo:
        La princesa ; Las canciones
 
Número

En cuanto al número, si el sustantivo se relaciona con la unidad, pondremos el


artículo en su formasingular: el / la. Observa:
 
El alumno; La profesora
 
Si el sustantivo se refiere a varios, nuestroartículo plural para acompañarlo
será los/las, dependiendo del género. Por ejemplo:
 
     Los amigos; Las compañeras
 
Para tener en cuenta:
!El sustantivo y el artículo siempre concuerdan en género y número¡
 
 
 Los artículos indefinidos

Los artículos indefinidos se utilizan cuando nos referimos a un sustantivo que no


es tan específico; es decir, cuando no estamos hablando de algo o alguien en
particular, sino en general.
 
Por ejemplo, si un amigo te dice: "Ayer vi un caballo", es distinto a que diga: "Ayer
vi el caballo", porque con esto último se debería estar refiriendo a un caballo en
particular, que tú y él ya conocen. Los artículos indefinidos son los siguientes:
 
Aquí te mostramos algunos ejemplos
 

 Un gato.
 Una liebre.
 Unos sueños.
 Unas verdades.

Los artículos indeterminantes o indefinidos también concuerdan en género y


número con el sustantivo.

Son artículos indeterminantes masculinos: un yunos. Los femeninos


son: una y unas.
 
Veamos un ejemplo

 Un personaje; Unos pueblos (masculinos) 
 Una historia; Unas leyendas (femeninos)

 
En referencia al número, son singulares: un y una. Los artículos indeterminantes
plurales corresponden a: unos y unas.
 
Observa:
 

 Un incendio; Una bomba (singulares)

 Unos bomberos; Unas mangueras (plurales)
El verbo

El verbo es una palabra, con estructura bimembre, que indica acción (comer,
jugar, correr, saltar, pensar, dibujar), estado de ánimo (reír, llorar, parecer,
suspirar, soñar) o acontecimientos de la naturaleza (nevar, llover, temblar)
Ejemplos: Ella come muy rápido, Pedro juega con la pelota, El perro corrió hasta
que alcanzó a su amo

En la oración, el verbo funciona como el núcleo del predicado. En la terminación


verbal podemos identificar el tiempo en que se realiza la acción, el modo en que
se realiza, la persona que realiza y el número.

Los verbos pueden ser transitivos e intransitivos. Son transitivos cuando la acción
del verbo recae sobre otra cosa. Con los intransitivos sucede lo contrario,
recayendo la acción directamente.

Los verbos pueden tener variaciones que son denominadas accidentes del verbo.
Esas variaciones pueden ser de diferentes maneras. Pueden variar en número y
persona; o sea, un verbo puede estar en primera segunda o en tercera persona.
Pero estos también pueden estar en singular o en plural.

También pueden variar en tiempo y en concordancia. Por el tiempo el verbo puede


estar en presente, pasado y futuro. Y atendiendo al modo puede variar en tres
formas diferentes: modo indicativo, modo subjuntivo, modo imperativo, a las que
se agrega el infinitivo (en algunos casos también llamado modo infinitivo, aunque
no lo es propiamente).

El modo indicativo enuncia un hecho cierto, positivo o negativo. El modo


subjuntivo expresa duda, deseo o condición. El modo imperativo expresa
mandato; o sea, una orden que debe cumplir una segunda persona.

También los verbos pueden variar de una forma diferente que no está definida ni
por el tiempo, ni por el número, ni por el modo, ni por la persona. Son las formas
infinitivas del verbo.

Estas formas pueden ser infinivo, gerundio y participio. En un verbo estará en


infinitivo cuando termina en ar, er o ir. Estará en gerundio cuando termina en ando
o iendo, y estará en participio cuando termina en ado, ido, so, to y cho.
Conjugación de los verbos

En castellano, entonces, tenemos que todos los verbos en infinitivo (sin conjugar)
terminan en “Ar”, “Er” o “Ir”. De acuerdo a esto se clasifican en diferentes
conjugaciones.

Existen tres conjugaciones para los verbos:

1ª Conjugación: verbos terminados en AR (saltar, caminar, amar, arrastrar, etc.)

2ª Conjugación: verbos terminados en ER (correr, comer, temer, suceder, querer,


etc.)

3ª Conjugación: verbos terminados en IR (vivir, morir, sacudir ir, existir, etc.)

Existen 3 Modos: Modo Indicativo, Modo Subjuntivo, Modo Imperativo, Más las
formas Infinitivas.

Modo Indicativo: expresa la realidad tal como es. Se conjuga en diferentes


Tiempos: Presente, Pretérito, Futuro y Condicional (tiempos simples); Pretérito
Perfecto Compuesto, Pretérito Pluscuamperfecto, Pretérito Anterior, Futuro
Perfecto, Condicional Perfecto (tiempos compuestos).

Modo Imperativo: expresa una orden, un mandato o un ruego. Se conguja sólo


en Tiempo Presente

Infinitivo: corresponde a las formas no personales del verbo. Son: Infinitivo,


Gerundio, Participio.

El infinitivo es una forma no personal del verbo caracterizado por terminar siempre
ar-er o ir.
Los infinitivos son muy importantes a la hora de conocer las reglas para conjugar los
verbos.

Cada modelo de infinitivo, es decir, cada verbo terminado en ar, er o ir se conjuga


siguiendo unas reglas comunes para cada caso. Por tanto, aprenderemos cómo se
conjugan cada uno de estos tres infinitivos, también aprenderemos cómo conjugar
otros verbos, aplicando las reglas de conjugación del tipo de infinitivo de que se
trate.

Ejemplos de infinitivos terminados en ar: cantar, estar, maniobrar, evolucionar.


Ejemplos de infinitivos terminados en er: temer, satisfacer, correr, conocer
Ejemplos de infinitivos terminados en ir: partir, freír, combatir, emitir, reir

El gerundio.

El gerundio es una forma no personal del verbo caracterizado por expresar una
acción continua, en desarrollo constante.

Ejemplos de gerundios: Andrea está corriendo. José estaba ensayando para su


recital

El gerundio posee un aspecto imperfecto porque está expresando una acción no


terminada.
Otros ejemplos de gerundio: Esther está estudiando.
Mi amigo se la pasa entrenando para el maratón.
Juan se la pasa leyendo casi todo el dia.

El participio.

El participio es otra forma no personal del verbo que indica la acción tras haber
finalizado. Los participios se forman añadiendo los sufijos -ado o ido-, dependiendo
de la conjugación del verbo.
Ejemplos de participio:
Mi hermano ha concluido sus estudios universitarios.
Mi padre ha participado del concierto.
He temido por su vida

Formas no personales del verbo

  Concepto EjemplosInfinitivo

Terminaciones en ar, er, ir

No distingue persona, número ni tiempo

amar, querer, partir

Su padre va estar presente durante el concierto


Es necesario partir temprano para llegar a tiempo

Gerundio

Sus funciones son:  

- Ser utilizado como adverbio o verbo

- Expresar una acción continua, simultanea o anterior a lo que indica el verbo


principal

Juan estaba cantando

Andrés llegó corriendo al colegio

Su hermano se la pasa leyendo toda la noche

Participio

Puede llevar variaciones de género y número

Los verbos de la 1ª conjugación (-ar) se forman con -ado: cantado, despertado,


Los verbos de la 2ª y 3ª conjugación (-er, -ir) se forman con -ido: aprendido, vivido,
partido.

El prisionero había huido de la cárcel 

Su hermano siempre ha temido a la oscuridad

Verbos irregulares

Los verbos irregulares son aquellos que, al conjugarse, no siguen el modelo de


conjugación verbal de amar, temer o partir. Dichos verbos nunca modifican su raíz
en ninguno de los tiempos, modos, personas en los que puedan estar conjugados.

Es decir, un verbo es irregular porque al conjugarse en algunos de sus tiempos y


modos, el mismo sufre una modificación en su raíz.
Un ejemplo sería el verbo caber.

El mismo, al ser conjugado en el presente del modo subjuntivo, su raíz ca

queda alterada ya que se conjuga como quepa.

Otros ejemplos de verbos irregulares en español.

Hoy llegué tarde a mis clases en el conservatorio. (verbo irregular: llegar)

Es preciso que toque esa tela para poder sentir su suavidad (verbo irregular:
sentir)

Será realmente necesario que Juan venza todos los obstáculos para llegar a su
meta. (verbo irregular: vencer)

Entiendo que debo completar la tarea para entregarlo el jueves. (verbo irregular:
entender)

No conozco el camino para llegar a aquel lugar. (verbo irregular: conocer)

Tipos de verbos irregulares:


La gramática de la lengua española señala que los verbos irregulares presenten
tres tipos de irregularidades, los cuales son:

Irregularidades vocálicas: La modificación que sufre el verbo en su raíz se


caracteriza por estar formado por vocales, las cuales a su vez pueden o no ser
diptongos.

Los verbos que pertenecen a este grupo se denominan verbos vocálicos en razón
de que los mismos tienen el rasgo común de terminar en vocal.
El adverbio

Los adverbios son palabras invariables que se comportan como modificadores


circunstanciales de los verbos, aunque también de los adjetivos, de otros
adverbios o de toda la oración.

Concepto

El verbo va acompañado con frecuencia por una palabra que complementa o


modifica su significado. Las palabras que típicamente realizan esa función
son adverbios.

 Llegó tarde. Tú no conoces aquel sitio.

Características

 
Significado. Los adverbios nombran circunstancias de lugar, de tiempo, de modo o
de cantidad, o expresan afirmación, negación o duda.

 Circe cantaba dentro con hermosa voz. -> lugar


 Quizás no debimos entrar en la mansión. -> duda

Forma. Los adverbios no admiten desinencias y, por tanto, son palabras


invariables. Esto no impide que algunos admitan sufijos: tardísimo, cerquita,
prontito, etc.

Función. Los adverbios funcionan generalmente como complementos del verbo o


de la oración.

 Mario se quedó fuera. -> complementa al verbo


 Lamentablemente, los dos murieron. -> complementa a la oración

Algunos adverbios pueden funcionar como modificadores de un verbo, de un


adjetivo o de otro adverbio.

Clases de adverbios

Según su significado se distinguen adverbios de lugar, de tiempo, de modo, de


cantidad, de afirmación, de negación y de duda.
aquí, ahí, allí, cerca, lejos, arriba, abajo, delante, detrás, alrededor,
De lugar
encima, debajo, dentro, fuera

antes, ahora, luego, después, ayer, hoy, mañana, entonces, pronto,


De tiempo
tarde, ya, siempre, aún, nunca, jamás

De modo así, bien, mal, aprisa, deprisa, despacio, alto, bajo

muy, demasiado, suficiente, más, menos, mucho, poco, bastante,


De cantidad
casi, apenas

De
sí, también
afirmación

De negación no, tampoco, nunca, jamás

De duda quizá, quizás, acaso

Formación de adverbios

Hay muchos adverbios que se han formado añadiendo la terminación -mente a la


forma femenina de un adjetivo. En este caso, el adverbio conserva la misma
acentuación del adjetivo.

 esplendida -> esplendidamente imprudente -> imprudentemente

Los adverbios terminados en -mente tienen su origen en la construcción latina de


valor adverbial: adjetivo + sustantivo femenino mens, mentis, que significaba
«mente, ánimo, intención».

La mayor parte de los adverbios así formados son adverbios de modo.

Los adverbios adjetivales tienen la forma de un adjetivo en singular con el sufijo


masculino, si el adjetivo es de dos terminaciones.

 Habla alto, por favor. Elena trabaja duro. Juan ha entrado pisando fuerte.

Las locuciones adverbiales

Hay en la lengua muchos grupos estables de dos o más palabras que equivalen
por su función y por su significado a un adverbio. A estos grupos de palabras los
llamamos locuciones adverbiales. Por ejemplo:
 

De lugar de frente, por fuera, de arriba abajo, frente por frente, por encima
De modo a pies juntillas, a trancas y barrancas, entre pitos y flautas, de veras
de pronto, a menudo, de Pascuas a Ramos, en un pispás, en un
De tiempo
santiamén

De cantidada mansalva, a porrillo, a /hasta más no poder

Las locuciones adverbiales expresan las mismas circunstancias que los adverbios.

Formalmente, según el esquema sintáctico al que responden, se pueden


distinguir tres grupos de locuciones adverbiales:

 El grupo más numeroso de locuciones adverbiales es el de las que están


formadas por una preposición + un sustantivo o adjetivo: a oscuras, a lo tonto, de
inmediato,etc.
 En el segundo grupo se repite un mismo nombre: mano sobre mano, día
tras día, cara a cara, etc.
 En el tercer grupo se incluyen las que están formadas por más de una
preposición: de por sí, etc.

Preposiciones

La preposición es la clase de palabra invariable que introduce el llamado sintagma


preposicional. Las preposiciones generalmente tienen la función de
introducir adjuntos, y en ocasiones también complementos obligatorios ligando
el nombre o sintagma nominal al que preceden inmediatamente con un verbo u
otro nombre que las antecede. En algunas lenguas las preposiciones pueden no
encabezar un sintagma preposicional, como en inglés, donde incluso pueden
aparecer al final de la frase.

Preposición Ejemplo
a Visitó a la tía Antonia por su cumpleaños.
ante Dijo ante todos que era cierto.
bajo Escondió la carta bajo los libros.
Cabe El banco está cabe la farmacia.
con El café con leche ya estaba frío cuando llegaste.
contra Las olas chocan contra las rocas del espigón.
de Compró un kilo de limones.
desde Desde octubre no había vuelto a ver a su padre.
durante Durante su visita al museo, Juan se maravilló de la belleza de
las pinturas exhibidas.
en Entró en la cárcel por tráfico de drogas.
entre Dijo que el secreto debería quedar entre nosotros.
hacia Embarcó en el vuelo hacia Cochabamba.
hasta La fiesta duró hasta las ocho.
mediante Resolvió el caso mediante pistas encontradas.
para Tengo un libro para Juan.
por Tengo un libro firmado por el autor.
según Cocinó la carne según las indicaciones de su abuela.
sin Llegamos a una calle sin salida.
so Volvió a su país so pena de ser arrestado.
sobre Juan puso la manzana sobre el escritorio.
tras Lo enterró en el árbol que se encuentra tras el edificio.
versus El próximo partido es el que enfrenta al equipo de aquí versus
el de allí
vía Voló de Texas hasta Australia, vía Londres.

Conjunciones
Una conjunción es una palabra o conjunto de ellas que enlaza proposiciones,
sintagmas o ... La gramática tradicional suele distinguir
entre conjunciones coordinantes o propias y conjunciones subordinantes o
impropias

Tipos de conjunción
En manuales de gramática es frecuente emplear una serie de términos que
especifican la función de las conjunciones y, en algunos casos, los marcadores del
discurso. También se aplican a las oraciones. Entre esos términos están los
siguientes.
Las copulativas unen los elementos del discurso en concepto afirmativo, negativo
o completivo, como y, ni, que, etc.:
Octavio y Alfredo no creen ni admiten que exista Dios.
Las adversativas enlazan oraciones que enuncian generalmente conceptos
opuestos o divergentes, como pero, mas, aunque:
La Tierra es redonda, pero no perfectamente esférica
Las alternativas unen partes de la oración que enuncian pensamientos que se
excluyen o sustituyen unos a otros, como o, ora, ya, sea, etc.:
Bien hable, bien escriba
Las condicionales se anteponen constantemente a una proposición hipotética de
la cual depende otra proposición que enuncia un juicio subordinado a la
realización del enunciado por la primera, como si, con tal que, siempre que, etc.:
Si fueses laborioso, no tendrías necesidades
Serás apreciado siempre que cumplas con tus deberes
Las ampliativas juntan alguna dicción a la proposición principal a fin de dar mas
extensión al pensamiento que expresa, como además de, aún, etc.:
Julio César, además de valiente guerrero, era eminente escritor.
Las electivas enlazan partes del discurso que enuncian pensamientos distintos,
indicando la prelacion de uno sobre otro, como antes, más bien que, etc.
El hombre que ha saboreado los frutos de la libertad, antes que la
esclavitud, prefiere la muerte.
Las conclusivas se anteponen a breves dicciones con que se pone fin a una
prolija exposición, o se sintetiza lo que en ella se ha dicho, como en una palabra,
en fin, en suma, etc.:
Dios creó el cielo, la tierra, los animales, las plantas; en suma, todos los
seres existentes.
Las causales se anteponen a las oraciones que expresan la causa o motivo de lo
contenido en otras afirmaciones anexas, como porque, puesto que, etc.:
El vapor de agua se eleva en la atmósfera porque es menos pesado que el
aire.
Las continuativas se anteponen a las oraciones, o más frecuentemente se
intercalan entre ellas o sus términos, para denotar la natural sucesión y correlación
de la ideas expresadas por ellas, como pues, asi que, puesto que, etc.:
Puesto que la ignorancia es el cáncer de la sociedad, esforcémonos por
difundir la instrucción.
Las finales se anteponen a oraciones complementarias para explicar el fin u
objeto a que son aplicables los medios indicados por las oraciones principales,
como para que, a fin de que, etc.:
Para que no haya más disputas, es indispensable cierta capacidad de
comprensión.
Las comparativas enlazan las oraciones que indicando la analogía o la diferencia
existente entre los pensamientos por ellas enunciados, como del mismo modo
que, como, así como, etc.:
Las declarativas se anteponen a una oración o a cualquiera de sus partes para
aclarar con precisión los conceptos contenidos en expresiones anteriores,
como es decir, a saber, etc.:
La nueva Troya, la perla del Plata, es decir, Montevideo, tiene páginas
gloriosas en la historia.
Las ilativas se anteponen a una oración que enuncia la consecuencia que se
deduce de oraciones anteriores, como luego, así que, por consiguiente, etc.:
Todos los hombres son hermanos, luego deben amarse mutuamente.

Interjecciones
La interjección es una clase de palabras de las lenguas naturales que no
constituye una parte de la oración. Equivalen a oraciones que expresan un
sentimiento vivo (¡ay!), una llamada enérgica (¡eh!) o describen elementalmente
una acción (¡zas!, zigzag) sin ser léxica y gramaticalmente organizadas. Son
signos pregramaticales que desempeñan las tres funciones elementales del
lenguaje: expresiva, conativa o representativa. En idioma español es, en su forma
pura, invariable (solo tiene una forma acuñada), se pronuncia
con entonación exclamativa y posee acento de intensidad.
Se cree que constituyen restos de la forma más antigua, primitiva o sintética
de lenguaje. Algunas de sus funciones, fuera de la de expresar o desahogar un
sentimiento, son apelar al interlocutor, saludarlo, despedirlo, darle conformidad o
agradecimiento, etc.; por ejemplo, en español:

 ¡Alto!: se usa como llamada enérgica imperativa.


 ¡Ay!: se emplea para expresar un sentimiento vivo.
 ¡Eh!: se usa para preguntar, llamar, despreciar, reprender o advertir.
 ¡Hola!: se usa como salutación de apertura de conversación.
Por lo tanto, son semánticamente equivalentes a una oración completa, y
expresan o describen elementalmente una acción sin
estar sintácticamente organizados, por ello puede considerarse que no son una
parte de la oración (aunque algunos gramáticos las incluyen en el inventario de
clases de palabras), sino que son signos lingüísticos pregramaticales que
desempeñan las tres funciones del lenguaje según Karl Bühler: expresiva,
conativa y representativa. Generalmente se escriben con signos de admiración en
aquellos sistemas de escritura que los tienen, aunque existen algunas
interjecciones de sentido interrogativo o confirmativo de lo antes expresado que
ocasionalmente se intercalan en una oración y se escriben si es posible con
signos de interrogación.
Las interjecciones presentan algunas peculiaridades en su empleo idiomático; por
ejemplo, su fonética y fonología son más abiertas y menos sistematizadas que las
de otro tipo de palabras del mismo idioma
(¡psé!, ¡brrr!, ¡shhh!, ¡uau!, ¡uf!, ¡aaj!, ¡puaj!).
Generalmente se emplean en forma aislada, como una expresión
de entonación independiente, pero cuando se incorporan en una oración lo común
es que aparezcan localizadas al principio: «¡Ay!», «¡Qué dolor!» y si se insertan en
una oración quedan estrictamente fuera de su secuencia, como si fueran
oraciones parentéticas o incisos: «Lloró la niña, ¡ay!, ¡cómo sufría!». Otras veces
constituyen grupos interjectivos incluso bastante amplios en los cuales van
seguidas de elementos como:

1. Grupos nominales (¡Vaya, qué sorpresa!)


2. Grupos preposicionales (¡Adiós a las vacaciones!, ¡Lástima de comida
desperdiciada! ¡Caray con la mosquita muerta! ¡Ay del que se anime a
contrariarlo! ¡Guay con los que se le acerquen!)
3. Oraciones (¡Ojalá (que) gane el partido! ¡Así se muera! ¡Mira que eres
bobo!).
A veces se unen, en virtud de la función fática del lenguaje, a nombres propios
que actúan como vocativos o expresiones que se emplean para llamar o atraer la
atención: «¡Eh, Ernesto!» y algunas asumen la forma de expresiones no
idiomáticas u onomatopéyicas al imitar sonidos: «¡chit!», «¡plash!», «¡paf!», «¡pif!»
«¡muu!».123

Clasificación de interjecciones en español

Clasificación gramatical
Desde un punto de vista gramatical las interjecciones se clasifican en propias e
impropias.
Interjecciones propia
Las interjecciones propias, o propiamente dichas se emplean únicamente como
interjecciones y constituyen una sola palabra, comprendida
entre signos de admiración o de interrogación:

 ¡ah!: sirve para expresar asombro, comprensión de lo oído, sorpresa,


placer.
 ¡arre!: para azuzar a un caballo, indicando que se desea avanzar, en
el español mexicano del Norte para afirmar, y también se usa en el español
rioplatense para representar algo irónico
«¡Arre, caballo!» (para azuzar un caballo) «Arre, dijiste eso y te pasó»
(ironía) «Arre, vamos a la plaza.»

 ¡ay!: sirve para expresar dolor. Es una interjección que puede ser seguida
de una expresión confirmatoria, por lo que cabe integrarla en una oración;
pero como las interjecciones forman una unidad en su entonación oral, se
separa con una coma: «¡Ay, cómo me duele!».
 ¡bah!: sirve para expresar desprecio, desinterés.
 ¡buau!:sirve para expresar asombro incredulidad o sorpresa.
 ¡buah!: sirve para expresar asombro, incredulidad o sorpresa.
 ¡buah...! (imitando el llanto): sirve para expresar tristeza.
 ¡Che!: utilizado en Español rioplatense para expresar llamado de atención,
saludo o queja.
 ¡chitón! o ¡sh!: para pedir silencio.
 ¡ea!4
 ¡eh!: sirve para expresar rechazo, desaprobación de lo excesivo, sorpresa.
 ¿eh?: siendo una forma interrogativa, expresa duda de haber comprendido
lo oído, o una solicitud de que se repita algo que no fue atentamente
escuchado; también se emplea en el contexto de un discurso, como una
suerte de consulta acerca de si se ha comprendido lo expresado, o si se
está de acuerdo con ello. Es una de las pocas interjecciones que
eventualmente pueden intercalarse en una oración, con ese sentido:
―Camina con cuidado para no caerte.
―¿Eh?

 ¡epa!: expresión usada en América Latina como advertencia o para


llamar la atención. En Venezuela es común usarla como saludo informal
(especialmente entre los hombres).
 ¡guau!: sirve para expresar asombro o admiración (principalmente en
España). En realidad proviene del
inglés wow! pronunciándose uau o guao (en América Latina). También
se toma como la onomatopeya del ladrido del perro.
 ¡guay!: sirve para expresar advertencia, amenaza o admiración, según
el geolecto:
«¡Guay, que se nos vienen encima!» (advertencia), «¡guay de los que
pequen!» (amenaza) o «¡guay, nos vamos de excursión!» (admiración).

 ¡hala!: sirve para expresar prisa. Por ejemplo: «¡Hala, hala, no os


detengáis que se nos hace tarde!». Se utiliza en España.
 ¡Hey!: sirve para expresar llamado de atención, saludo o queja. El
uso la ha españolizado como «¡ey!» (tal como existe «¡ay!» y
«¡eh!»), aunque la Fundéu recomienda utilizar «¡eh!» 5
 ¡hola!: sirve para expresar bienvenida, saludo, satisfacción por el
encuentro con la persona a quien es dirigido.
 ¡huy!: sirve para expresar asombro, sorpresa por algo insólito.
Según la RAE se puede escribir con hache o sin ella. 6
 ¡oe!4
 ¡oh!: sirve para expresar asombro, admiración.
 ¡olé!4
 ¡ojalá!: sirve para expresar un deseo de que algo se realice. Sería
una palabra de origen árabe, proveniente de los tiempos históricos
en que el sur de la península ibérica estaba ocupada por los moros,
siendo contracción de inch Alá (‘quiera Dios’). Es una palabra que
frecuentemente no es empleada como interjección, incorporándose
a una oración: «Ojalá que no llueva».
―Quizá mañana no llueva.
―¡Ojalá!

 ¡puaj!: sirve para expresar asco o desagrado.


 ¡puf!:4 sirve para expresar fastidio.
 ¡sh! o ¡chitón!: para pedir silencio.
 ¡sale!: también sirve para mandar a un animal a marcharse. Un
ejemplo es: «¡sale perro!"
 ¡uda!: generalmente despectivo, sirve para llamar la atención de
un animal. Por ejemplo: «¡Uda de aquí!" para ordenarle que se
marche.
 ¡uf!4 sirve para denotar cansancio, fastidio o sofocación.
 ¡uy!: sirve para expresar asombro, sorpresa por algo insólito.
Según la RAE se puede escribir con hache o sin ella. 6
 ¡vamos!: se usa para animar, meter prisa o llamar la atención,
mayormente en América Latina y en España en menor medida.
 ¡zas!: es una onomatopeya utilizada imitar el sonido que hace un
golpe, o el golpe mismo. En este mismo sentido también se
usan expresiones como ¡pum! o ¡cataplún!
 ¡zona!: expresión idiomática de la costa atlántica colombiana.
Sirve para expresar asombro, se precede en ocasiones de la
interjección "¡uy!", y se puede escribir con 's' al final. Ejemplos:
« ¡Zona! ¡Qué caro!» o «¡Uy zona! ¡Se tumbaron mi moto!».
Interjecciones impropias[editar]
Las interjecciones impropias son formas creadas a partir de
sustantivos o sintagmas nominales (¡cielos!, ¡hombre!, ¡Virgen
santa!), verbos (¡arrea! ¡venga!), adverbios (¡adelante! ¡fuera!) o
adjetivos (¡bravo!), de forma que no son interjecciones
idiomáticamente puras. Se emplean como interjecciones por su
significación usual: «¡Socorro!», «¡caracoles!», «¡diablos!», «¡rayos
y centellas!» Algunas expresiones de este tipo son consideradas
palabras de lenguaje soez.
Locuciones interjectivas[editar]
Son aquellas locuciones equivalentes a una interjección que
constan de dos o más elementos y forman habitualmente
sintagmas: «¡Mi madre!», «Madre mía», «¡Dios santo!».
Sintagmas interjectivos[editar]
Son aquellos cuyo núcleo es una interjección propia o impropia y
sus complementos, pero no pueden sustituirse por una interjección:
«¡Ay de mí!»; «¡Ay de los vencidos!» «¡Cuidado con el perro!»
El pronombre
Los pronombres son palabras que usan para señalar o hacer referencia a otros
términos que ya han sido nombrados en la oración o ya comprendidos por el
hablante o el oyente. Proviene del latin pronōmen, significa literalmente “en lugar del
nombre” o “por el nombre”.
El Diccionario de la Real Academia lo define como la clase de palabras que hace
las veces del sustantivo.

La definición dada por el diccionario oficial coincide con la que se encuentra en el


antiguo manual de Gramática de la lengua española(1558), el cual sostiene
que, pronombre es una parte de la oración que se pone algunas veces en ella en
lugar del nombre para evitar su repetición.
Los pronombres toman el género y el numero del nombre al cual sustituyen. No
tiene un significado en sí mismo, ya que toman la definición y el uso
del sustantivo al cual reemplazan.

Ejemplos de pronombres

Juan regresó tarde. Por ende, él no cumplió con su palabra.


Este trabaja mucho todos los días.
Aquel ha llegado temprano a la oficina.
Unos cuantos iremos de vacaciones en el verano.
Alguien irá a la casa de Raúl.
Tú eres muy responsable con las tareas de la escuela.

Muchos llegaron esa noche para el evento


Alguien había llamado por teléfono

Características de los pronombres

- Sustituyente de los sustantivos.


- Facilitan la expresión lingüística al evitar repetir los nombres.

- Concuerdan en género y número con el sustantivo al cual reemplazan.


Ejemplos: Juan llegó a casa. Él es siempre llega temprano
La función del pronombre

La función principal del pronombre es la de sustituir al nombre o de hacer referencia


a él. De esta forma,  ayuda a no repetir varias veces un sustantivo dentro del
enunciado utilizando otros otros términos tales como él, ese, aquel, los cuales
designan al nombre de diferentes maneras.

De esta forma el uso de los diferentes pronombres contribuye a evitar la repetición


innecesaria de los sustantivos, ayudando también a que la lectura del enunciado
sea más fluida.

Tipos de pronombres

Los pronombres se clasifican en diversos tipos atendiendo a la forma en que


reemplazan o se refieren al nombre. Por ejemplo, un pronombre personal, como el
término lo indica, sustituye a nombres de personas (yo, tú, nosotros, etc), mientras
que otros, como los pronombres indefinidos, pueden aludir a cosas o también a
personas. (alguien, alguno, nadie)
Los tipos de pronombres son:
Pronombres personales.Son aquellos que se utilizan para sustituir a un sujeto que
ha sido omitido en la oración.
Pronombres personales átonos. Son aquellos que tienen la función de
complemento directo o complemento indirecto. (me, te, lo, la)
Pronombres personales tónicos. Los pronombres personales tónicos son
aquellos que pueden funcionar como sujeto (Él corre), como atributo (Los
responsables son ellos) o como término de preposición (Mi padre vendrá con
nosotros
Pronombres demostrativos: Se utilizan para indicar dónde se encuentra algo o
alguien en relación a quien habla.
Pronombres indefinidos: Estos pronombres tiene aluden a personas o cosas o
expresa alguna noción cuantificativa. (¿Cuánto dinero tienes?  Tengo poco)

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